Del Libro: MENIN, Ovide & TEMPORETTI, Félix (2005) Reflexioe! "#er#" de l" e!

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Ro!"rio, 'oo "*ie! Edi#ioe!+

Escritura y divulgación del texto científico

Félix Temporetti
(I)
Escritura y comunicación científicas
En la mayoría de los países occidentales la educación superior al nivel de postgrado ha crecido
de manera significativa y se alienta para que continúe haciéndolo. La cantidad de octorados y
!aestrías es cada ve" mayor y la figura del docente # investigador se impone en la $niversidad
de la llamada %ostmodernidad. &e acrecienta tam'ién la competencia fero" por ocupar puestos
docentes y científicos. En consecuencia con ello la evaluación de la producción académica se
ha transformado en una prctica ha'itual fomentada y alentada desde nuevos aparatos de control
gestados en la década de los *+s. La discusión acerca de los criterios e indicadores utili"ados
por los evaluadores ha comen"ado a tomar impulso sa'iendo que evaluar y medir la cantidad de
las contri'uciones científicas es mucho ms simple y via'le que ocuparse del contenido de las
mismas. En este conte,to la necesidad de escri'ir y pu'licar a toda costa para so'revivir en este
nuevo mundo académico da lugar a un e,ceso de producciones muchas veces de contenido
reiterativo. %ero- como 'ien se sa'e- lo que importa es la cantidad y no tanto una calidad casi
imposi'le de apreciar. Este es un dato importante a la hora de dar cuenta del conte,to dentro del
cual se pretende escri'ir.La e,periencia indica que la escritura de un te,to científico ya se trate
del clsico informe- del relato de e,periencia o de un ensayo# es una tarea que requiere el
tiempo necesario para permitir la ela'oración de versiones sucesivas. / medida que se pasa de
una versión a otra el te,to va tomando la forma deseada acorde a la información con la cual se
tra'a0a- al tipo de argumentación empleada así como a las intenciones comunicativas del autor.
En la actualidad el acceso a Internet y los procesadores de te,to facilitan la interactividad- la
interte,tualidad y la modificación rpida del te,to que se escri'e. %ero la escritura no solo
constituye un medio para la e,presión del pensamiento sino tam'ién es un instrumento
privilegiado para aclarar nuestras propias ideas y puntos de vista. En ese sentido pensamos
con las pala'ras de nuestra lengua. /l escri'ir- leer y re#escri'ir podemos descu'rir de'ilidades o
pro'lemas en los datos- argumentos- o conclusiones. %odemos perci'ir la necesidad de
me0ores prue'as y de e,perimentos adicionales- controlar determinadas varia'les y tener en
cuenta aspectos claramente necesarios para que la argumentación sea convincente./dems de
que la escritura sea una necesidad del pensamiento constituye una condición 'sica para la
divulgación del nuevo sa'er aportado por la investigación. $na investigación no puede
considerarse completa hasta que no ha sido divulgada y dada a conocer. La producción
científica constituye un empe1o