Voces y Opiniones
DE LA CASA
¿ Importa la equidad de género? La
Ese problema
semana pasada la CADE puso a la
anticorrupción y a la integridad en el
horario estelar, pero dejó a la equidad
ajeno llamado
de género en la “agenda paralela”, jun-
to a otros temas de ‘poca relevancia’,
equidad
como la economía circular y el empren-
dimiento. No hubo manels (paneles sólo
de hombres), pero siguió siendo sinto-
mática la asistencia al evento, donde
sólo uno de cuatro cadeístas fue mujer
La integridad que le demandó —según la app oficial—, un reflejo de
CADE al empresariado es imposible la alta dirección en el Perú.
si no reconocemos que existen Si a usted, ejecutivo peruano, esto no
desigualdades de género en nuestras le importa —si cree que es resultado de
organizaciones y tomamos acción una innata flojera femenina—, lea la
siguiente línea: puede que esté perdien-
do plata (además de la oportunidad de
contribuir, desde su posición privilegia-
da, a una sociedad mejor).
David La inclusión y la diversidad son un
Reyes Zamora buen negocio, dijo hace poco Miguel
Uccelli, CEO de Scotiabank Perú. Citaba
Director de contenidos de al proyecto Diversity matters de McKin-
SEMANAeconómica sey, que, en el 2015 —sobre la base del
estudio de 366 empresas en el Reino
Unido, Canadá,
Estados Unidos y
¿Se puede ser íntegro Latinoamérica—,
y decidir ignorar mostró que el 25%
un problema que de las empresas con
afecta a la mitad mayor diversidad
de la población en étnica tiene 15%
beneficio de la otra? más probabilidades
de obtener mejores
resultados financie-
ros y el 25% con una mayor diversidad
de género, 35% más probabilidades.
La CADE le planteó al empresariado
ser íntegro. La RAE —como siem-
pre— es clara. Íntegro, gra: referido a
la persona, “recta, proba, intachable”.
Pero…, ¿se puede ser “íntegro, gra” y
decidir ignorar un problema que afecta
a la mitad de la población en beneficio
COLUMNISTAS
Se turnan para escribir esta columna Felipe Ortiz de Zevallos, de la otra? ¿Exagero? Elena Conterno,
fundador; Gonzalo Zegarra Mulanovich, past director; David presidenta de la Sociedad Nacional de
Reyes Zamora, director de contenidos; Rodrigo Salazar
Pesquería, ha dicho: “Los sesgos existen.
Zimmermann, editor general; Bárbara Salas y Álvaro Ledgard,
subeditores de SEMANAeconómica. Otros miembros de (...) Se siente que no te escuchan: una
esta redacción son ocasionalmente invitados a opinar sobre mujer dice algo y no pasó nada; luego
temas de su especialidad.
un hombre lo dice y es la idea del año”.
Más claro ni el agua.
Pero los líderes empresariales del
Ilustraciones: Augusto Mestanza
12 Opinión
Perú insisten en que aquí… no pasa nada.
Ante la pregunta de si hay igualdad
entre hombres y mujeres en sus empre-
sas, el 90% de los CEO locales contestó
que hay “mucha” o “bastante” en la I
Encuesta de Equidad de Género de SE-
MANAeconómica y la Cámara Española,
realizada por Ipsos Perú en agosto. Más
abajo, en la tercera y cuarta línea de
mando, la cifra se redujo a 58%. ¿Por
qué? Porque ahí sí se siente más el pro-
blema. “La miopía de la alta dirección”,
llamó esta revista al fenómeno.
La realidad es incluso más cruda. La
carga familiar es el principal obstáculo
de las mujeres para acceder a cargos
gerenciales, según los encuestados de
ambos sexos (15% en cada caso). Sin
embargo, las mujeres consideran que
existen otros dos grandes obstáculos:
los estereotipos de género en ciertos
rubros (19%) y el prejuicio de la alta
dirección (13%).
Como el diablo está en los detalles,
ante la misma pregunta, los CEO asegu-
raron que las razones, en verdad, son
otras: la escasez de mujeres calificadas
(18%) y la escasez de mujeres con dis-
posición a asumir el cargo (17%). O sea
que o no hay o no quieren.
La integridad no obliga al empresaria-
do a enarbolar la bandera de la equidad
de género, pero sí a no ignorarla. ¿Cómo
puede ser eso posible si uno de cada tres
CEO está de acuerdo con la afirmación
de que “no existe un problema de discri-
minación o inequidad contra la mujer”?
Al más alto nivel, sólo el 10% de los
directores en el Perú es mujer (113 de
1130), según el Primer Estudio sobre
Mujeres Miembros de Directorios de
las Empresas en el Mercado de Valores
Peruano 2018, de PwC, Centrum y
WomenCEO Perú. E incluso ahí se
sienten las diferencias: “Ella tiene que
pensar cuándo y cuánto va a hablar.
Si no, dirán que habla mucho”, dice
María Elena Hernández Pastor, direc-
tora de Cosapi.
Esta no es una columna: es un lla-
mado a la acción. Mire a su alrededor,
reconozca el problema y ayude a solu-
cionarlo. Créame, ganamos todos. ■
2 DE DICIEMBRE DEL 2018 / SEMANA ECONÓMICA