de su aportacién al pensamiento sociolégico, Montesquieu y Rousseau, han sido
considerados con toda justicia como precursores de la sociologia moderna. De
igual forma, aunque no se les ha reconocido la categoria de precursores de la
sociologia, no se puede ignorar la aportacién conceptual de filésofos sociales
conservadores y romantics franceses como Louis de Bonald y Joseph de Maistre
En su argumentacién contra los filésofos iluministas, desarrollaron un conjunto
de ideas y conceptos que serin importantes en Ia sociologfa del siglo XIX y XX.
EI desarrollo de las ciencias naturales fue también vital a la hora del nacimiento de
a sociologfa. De ellas tomé la sociologia el modelo para convertirse en una ciencia.
En este sentido puede decirse que la sociologia nacié a imagen y semejanza de
Jas ciencias naturales. Fue, en sus orfgenes, una ciencia natural de la sociedad. Por
ello, no debe ser visto como una casualidad, que el conde Henry de Saint-Simén
haya bautizado su ciencia de la sociedad con el nombre de "fisiologia social" y que
Augusto Comte la haya bautizado inicialmente con el nombre de "fisica social”
Ello revela, como es obvio, la enorme influencia que ejercieron Ia biologia y la
fisica a la hora del nacimiento de la sociologfa como ciencia en Saint-Simén y en
Comte, a quienes nos referiremos a continuacién
1.3.2. Padres fundadores de la sociologfa
La paternidad de la sociologia ha sido un asunto de activa controversia. En muchos
textos de sociologia, la paternidad de la sociologia le ha sido atribuida a Auguste
Comte. Sin embargo, hay toda una corriente critica que ha intentado adjudicar la
paternidad de la sociologia al Conde Henry de Saint-Simon.
Las siguientes anotaciones del notable socidlogo norteamericano, Alvin Gouldner,
pueden ayudarnos a colocar en perspectiva este debate:
pesar de los ingentes esfuerzos de Durkheim para combatir la creencia de
que Comte fue el ‘padre de la sociologta’, esta creencia todavia persiste, aun entre
los socidlogos, como un' mito indestructible. Los sociélogos contemporaneos,
claro esti, ya no dan crédito a febriles fantasias como Ia de Chugerman, quien
sostenia que ‘se encerré en su habitacién durante un dfa y una noche (Comte)
y elaboré la concepcién general de la ciencia social y el proyecto de la filosofia
positiva... (S. Chugerman, Lester F, Ward, 1939, p. 174). Sin embargo, todavia
encontramos afirmaciones fundamentalmente erréneas sobre la significacién de
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