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TEMA V.

- La modernización constitucionaíista

a) El proyecto modernizador
b) Consolidación del Estado y liquidación de los movimientos revolucionarios.

Valadés, José C. Historia general de la Revolución mexicana, México, Cultura/SEP, 1985,


Tomo 6, pp. 130-183.

c) Calles. Avance capitalista y concentración del poder.

Benítez, Fernando, "El caudillismo”, en Femando, Benítez, Lázaro Cárdenas y la Revolución


mexicana, México, FCE/CREA, 1977. Tomo II, pp. 158-196.

Aguiiar Camín, Héctor, “Antes del reino 1916-1920. Epílogo”, en Héctor, Aguilar Camín, La
frontera nómada: Sonora y la revolución mexicana, México, Siglo XXI eds, 1981, pp. 411-446.

d) La modernización conservadora

Blanco, Mónica, “Toribio Esquivel Obregón. Un liberal conservador en el exilio (1913-1924)”,


mi meo, pp. 1-76.

6
V.» up.

JOSE C. VALADES HISTORIA GENERAL DE LA REVOLUCION MEXICANA


4
'imSímotI]
como se acercaba, el final de su período presidencial. Sin poder de la venganza, tan común en los finales dé las 1
embargo, habituado al mando y gobierno de la nación, y siem­ intestinas. Las terceras, que sumaban la minoría, eran cé¡
pre bajo la gracia de las rigurosas ideas de autoridad y ley de cuencia de la falta de acomodo y trabajo, explicables dent
¡«Sj
Benito Juárez, Carranza debió alimentar la creencia de que si no las condiciones que reinaban en la república. Había, sin emS
él personalmente, sí su sucesor, alcanzaría a sembrar el país con go, unos grupos armados de asaltantes profesionales dedicadqsj|
la paz y la Constitución. asolar aldeas, rancherías y haciendas. .y»™,

\E xistia con todos esos acontecimientos que producíárp^..


lesiones y zozobras un nacimiento societario; pues aquell'cjp l l
bandoleros, gavilleros o hazañeros, caracterizaban dolores
4. Guerra de guerrillas esperanzas de un pueblo rural agobiado por sus penas. De aq,úp|j|
la protección que los rancheros, jornaleros y pueblerinos dabári:
a los alzados, haciendo así muy difícil el exterminio de las i-
Exterminada la División del Norte y deshecho el núcleo partidas de armados.
principal del ejército Libertador del general Emiliano Zapata, las
partidas armadas que no se extinguieron por sí mismas o se Para poner punto final a esas actividades subversivas que
rindieron al carrancismo, que ahora (1917) no sólo era el dañaban grandemente al país, puesto que los campos labrantías
“ Gobierno constituido” , sino el Gobierno constitucional, eran continuaban en el ab"ndono, y las comunicaciones estaban
partidas que, careciendo de “ ley y amo” , como se dijeron en amenazadas y el comercia seguía desconfiado, el ejército
Michoacán, estaban entregadas a una guerra de desesperación, Constitucionalista era impotente. Y esto, no por ineptitud de
durante la cual, no escasearon las violencias y los atentados al los jefes ni por la falta de armamentos, sino por los incesantes
orden social. movimientos de las guerrillas, que generalmente buscaban los
lugares montaños- . para sus operaciones y escondrijos, así
Aparentemente tales partidas o gavillas tenían las exteriori- como por el incentivo que era andar con las armas en la mano
zaciones del bandolerismo. Sin embargo, no llegaban hasí tal denuo de regiones c-ie la guerra había devastado, y que por lo
frontera sus atropellos. Algunas guerrillas eran el producto de la mismo carecían de los medios para la vida honrada y ordenada
mente insurrecional, formada al través de siete años de guerra del vecindario.
civil, puesto que estaba perdido, principalmente en el ambiente
rural, el espíritu de obediencia a la autoridad; a otras, las A dar auge a aquella guerra de guerrillas contribuyeron las
mandaban individuos temerosos de que sobre ellos se ejerciera el reapariciones, hacia la primavera de 1917, de partidas villistas,
zapatistas y contrarrevolucionarias, con lo cual recibió mucho

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estímulo la gente gavillera. Grande estímulo también tuvieron


los grupos alzados, con la venta clandestina de armas de fuego y
municiones, porque decretado por el gobierno de Estados
Unidos, el embargo de armas para los enemigos del gobierno de
México, los ex soldados de todos los bandos se dedicaron a la
venta de carabinas y “ parque” , que se hizo uno de los negocios
más lucrativos durante los días que examinamos.

De esta suerte, los depósitos de material de guerra hechos


por las diferentes facciones, principalmente en el norte del país,
no sólo sirvieron para el tráfico ilegal de armamentos, sino de
nuevos transtomos que sufrió México cuando todo hacía creer
que la paz era una realidad.

Las bandas armadas andaban en correrías por los estados de


Veracruz, Tabasco, Michoacán y Chiapas, ahora que las más
amenazantes estaban en Durango y Chihuahua; pues sus jefes
aseguraban estar operando por instrucciones del general Villa, y
por tanto hacían temer que éste volviese a merodeos más
amenazantes para la tranquilidad general que la guerra misma.
Así, tanto para perseguir a las bandas armadas, como para evitar
una reaparición formal del villismo, el.Gobierno envió refuerzos
militares a Chihuahua, en donde el total de la tropa acantonada
ascendió (1917) a diez mil quinientos hombres.

Villa, en efecto, tenía resuelto reanudar sus actividades


bélicas, y al caso instruyó a sus lugartenientes Nicolás Fernán­
dez, Gudelio Uribe y Agustín García, para que organizaran una
compañía de mil hombres seleccionados y bien armados y espe­
raran órdenes conducentes.

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Al disponerse a abrir el nuevo capítulo de sus actividades el abstuviera de atacar la plaza, en la que sufrió un serio descala­
general Villa no se rehacía totalmente de la herida sufrida en el bro, acrecentado con la retirada en desorden de su tropa, al
ataque a Ciudad Guerrero. Así y todo, y como estaba imposi­ grado que huyendo hacia su vieja guarida de Río Florido sólo le
bilitado para montar a caballo, mandó que le llevasen en pudieron seguir ciento y tantos individuos.
carricoche a Río Florido, lugar al cual había citado a sus
lugartenientes, pues pretendía organizar una “ nueva división del Todos los males e impulsos que se originan en el despecho y
la venganza seguían agitando el pecho de Villa; y como a tales
Norte” , a pesar de que ésta estaría reducida a mil soldados.
males e impulsos asociaba su férrea voluntad que sólo le hacía
En Río Florido le esperaban dos centenares de hombres; y pensar en la victoria, fácilmente se ofuscaba, al grado de hacer
V aguardando mejorar físicamente, se preparó para reiniciar sus imposiole el dominio su rustiquez irresponsable. A esos días,

i actividades; y, en efecto, ya en aptitud de ser nuevamente


jinete, se puso al frente de sus doscientos guerrilleros; atacó
el general ViL- estaba convertido en el símbolo más admirable
de lo que puede ser capaz un hombre del pueblo elevado
intempestivamente Corrales; derrotó al general Ignacio Ramos, súbitamente a 1; ñda ambiciosa.
quien murió en la refriega; entró a saco al comercio y sin
pérdida de tiempo marchó, y asaltó y tomó la plaza de Jiménez, Incomprendid^ y despreciado por quienes eran mayores que
él en inteligencia, disciplina, moral y principios políticos, pero
y como a esa hora llegó a la población un tren procedente de
no ’uperiores en lo que respecta a audacia, valor, intuición y
Torreón, mandó que los pasajeros entregasen sus valores.
amor a la patria, el general Villa, entregado a las violentas y
Además, viajan en el propio tren numeroso villistas que se
habían amnistiado, exhortó a éstos para que volviesen a la atropelladas malquerencias, no fue capaz de poner límite a sus
guerra, y así lo hicieron, de manera que un día después de tales intenciones. Aquel caudillo, que con su personalidad optimista
acontecimientos, las fuerzas del general Villa ascendieron a mil había hecho guerra y guerrero, y reunido en torno a él hombres
hombres. / valiosos como los Madero, Aguirre Benavides, Angeles, Bonilla,
Maytorena, estaba roído por los más grandes defectos humanos.
El inesperado suceso ilusionó a Villa. Su alma indómita y , Tan mayúscula era su desesperación que cada uno de sus actos
aguerrida le hizo idealizar un nuevo y grande ejército; y entu­ se asemejaba al del agonizante que, sin aceptar la realidad de la
siasmado por la idea, sin el comedimiento y enseñanzas que dan muerte, se entrega a la muerte misma.
los cálculos, puso a su gente en camino a Parral, que tenía una
guarnición de cerca de mil quinientos soldados bien organizados En medio de esas alteraciones de ánimo, Villa anunció una
y fogueados. Mas esto no fue obstáculo para que Villa, sobresti- guerra sin cuartel; y ello a pesar de su carecimiento de soldados,
mando el valor de sus acompañantes y el suyo propio, se municiones y dinero, y de que sus lugartenientes ya no eran los
inhumanos fusiladores Rodolfo Fierros y Tomás Urbina; aunque

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todavía le acompañaba como segundo el cruel Uribe, a quien


llamaban Corta orejas, porque éste, en vez de mandar al paredón
a sus prisioneros ordenaba que les desorejaran. En Jiménez,
después del triunfo sobre las fuerzas carrancistas, Uribe reunió
treintiocho prisioneros e hizo que en su presencia fuesen víc­
timas de su infame capricho. Uribe mandaba un escuadrón que m m
sólo tenía por objeto perseguir a los vencidos, castigar a éstos
con tan macabro invento y entrar a saco a las poblaciones.

Retirado a Río Florido, como queda dicho, el general Villa


«1$
urdió nuevos planes. En ésta vez, no reúne gente. En cambio
adiestra espías y manda que éstos se sitúen en los puntos débiles
al ataque, y le tengan al tanto de los movimientos y condiciones .y
del enemigo. Ahora, pues, el general se cree bien informado de
lo que ocurre en Chihuahua, que es a donde sus agentes vigilan
las actividades de los soldados del gobierno. Su mira es la capital
¡tea*
del estado. Considera que todavía le es posible recuperar la
ciudad principal y sentar en ella su cuartel general como en los
años de la bonanza guerrera. i M M i i i

Los informes que le comunican sus agentes le hacen saber


que en la plaza, el general Jacinto B. Treviño vive confiado, y '
como le han dicho que Treviño carece de fuste, aunque es .
i v a s » *;
colérico y capaz de actos violentos, cree factible realizar un
.
asalto sorpresivo al jefe carrancista más amante del brillo que de .
la realidad, y manda que una vez más, las partidas villistas se
W m i.
concentren sigilosamente. En esta ocasión, es Fresno el punto
de reunión. ■■i
$Éɮɣ>S
Las fuerzas del Gobierno tenían perdidos de vista a los
villistas. Estos, que anteriormente surgían cerca de las vías

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JOSE C. VALADES HISTORIA GENERAL DE LA REVOLUCION MEXICANA

férreas, estaban desaparecidos, lo cual hizo que el general la oportunidad estaba a la mano. Su único jefe superior era
Treviflo no cuidara las puertas de Chihuahua. Así, la junta de las Venustiano Carranza por quien sentía incambiable admiración y
partidas de Villa se llevó a cabo sin tropiezos, y a la madrugada ¡|espeto.
del 16 de septiembre, burlando las defensas y vigilancias de
Chihuahua, Villa entró a la ciudad, puso en libertad a los presos Así, para empezar la campaba contra las partidas villistas, -
de la penitenciaría del estado, atacó el palacio de gobierno y los Murgía pidió soldados veteranos, y Carranza le mandó las mejo-
cuarteles, y sembró el desorden entre la gente de Treviño. J re s fuerzas de Guanajuato, Zacatecas, San Luis Potosí y
Luego, convencido de su incapacidad guerrera y de los efectos que ' Coahuila. En seguida, exigió .amas, y Carranza le remitió cinco
podía tener su audacia, se retiró en perfecto orden, dejando en §;fmil carabinas nuevas y dos millones de cartuchos; también vein-
8¡[£í&:.
ridículo a los carrancistas. ifícinco c ñones.
Con todo esto, organizó una columna en Torreón; y el 11 de
La osadía de Villa conmovió al país, que empezaba a
octubre, en la llanura que circunda a la estación ferrocarrilera de
acariciar formalmente los bienes de la paz, y Carranza se dispuso
Santa Clara, al norte de la Laguna, el general revistó seis mil
reparar tan grande descalabro. Al efecto, empezó ordenando
hombres de caballería. Otros tantos le esperaban, por órdenes
que el general Treviño entregara la comandancia militar al gene-
jal Francisco Murguía. de Carranza dentro del estado de Chihuahua.
Este aparato de verdadera fuerza armada, se puso en marcha
Murgía, era sin dudas, uno de los generales más aguerridos
hacia la plaza de Chihuahua. Ahora, Murguía podría disponer
de la Revolución. Además, poseía relevantes méritos personales
planes efectivos de persecución a las bandas villistas, Además,
y sobre todo aptitudes de mando; ahora que mucho le perju­ como entre su gente se hallaban veteranos de la guerra civil, le
dicaba no tener voluntad para dominar su vanidad, siempre sería fácil emprender con efectividad una guerra de guerrillas,
excesiva.
para la cual tenía más aptitudes que en el mando de batallas
En esta ocasión, sin embargo, el general Murgía no fio campales. El propio Murguía, era muy aficionado al golpe gene­
solamente en su valimiento personal. Comprendió de antemano ralmente audaz y teatral de la guerrilla, en el cual más que el
que no ■fácilmente vencería a las guerrillas de Villa, en un saber imperaban la destreza y la intuición. Murguía no tenía la
terreno que éstas conocían y dominaban, y dentro del cual eran fama del guerrillero, pero había en él, por naturaleza, un gran
numerosos sus partidarios y admiradores. Murgía, en efecto, no guerrillero.
se engañó en sus apreciaciones. Además, por cuidar su hoja de Villa, al tener conocimiento de la presencia de Murguía no
servicios, no quiso caminar en tanteos y sondeos inconducentes. se mostró tan seguro de sus triunfos como cuando estaba el
Siempre aspiró a dirigir una campaña militar por sí solo; y ahora general Treviño al frente de la comandancia de Chihuahua. No

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JOSE C. VALADES
«
ignoraba Villa el carácter osado, vigilante y ágil de Murguía. No
desconocía que éste era capaz de acaudillar una partida de
hombres y de buscarle personalmente ál través de las sierras
chihuahuenses; y por todo eso, mandó que su gente, abandonan­
do la táctica de las guerrillas se reuniera en una sola columna,
con el objeto de salir al paso de Murguía, seguro de que éste no
estaría capacitado para dirigir una batalla formal.

Sin poder tener noticias precisas sobre la situación de Villa


ni acerca de los movimientos de las guerrillas villistas, el general
Murguía, dejando a un lado su acostumbrada intrepidez, en esta
ocasión caminó lentamente a lo largo de la vía férrea del Central
con dirección a la ciudad de Chihuahua; y conforme avanzaba
iba acrecentando su columna, pues se le unían otras corpora­
ciones enviadas por Carranza; y esto, al tiempo de recibir más
abastecimientos bélicos.

Así, a los últimos días de noviembre apenas había acampado


Murguía en las cercanías de Horcasitas, cuando de sus avanzadas
le comunicaron que la fuerza enemiga se acercaba intempesti­
vamente procedente del norte. Y, en efecto, el general Villa,
burlando los destacamentos del gobierno se puso a la vista de
Horcasitas con dos mil jinetes e igual número de hombres de
infantería. La rápida y sigilosa reunión de aquella gente, así
como su presencia frente a Murguía, tuvo los visos de un mila-
’ gro guerrero.

Villa, conocedor del terreno en el cual se hallaban acampadas


las fuerzas de Murguía, no quiso perder la oportunidad de dar
batalla en aquel punto, que ofrecía, topográficamente, muchos
inconvenientes para los movimientos de su enemigo.

Los ¡ejes revoluc ionarios tabasqueños Grecne, Sosa y Colorado.


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JOSE C. VALADES ¿HISTORIA GENERAL DE LA REVOLUCION MEXICANA

En efecto, el campo en el cual apareció Villa dispuesto a más había convocado a sus lugartenientes, ordenándoles que se
combatir, imposibilitaba las maniobras de la caballería que era ■presentaran llevando, entre todos, no menos de dos mil
la mayoría de las fuerzas del gobierno; pero habiendo advertido ffiombres.
ágil y militarmente los peligros de aquel terreno, Murguía man­ A este número, el general Villa aumentó trescientos más que
dó con mucha prontitud y decisión que sus seis mil jinetes |e acompañaban, y al fren-te de la columna se puso en marcha en
echaran pie a tierra y avanzaran sobre la gente de Villa; y hecho ¿dirección a la Laguna, caminando con extremado sigilo, y
esto rabado el combate con el ímpetu de la columna de W vH'-
^precaución, paira no ser sentido en sus pasos por las fuerzas
Murguía, poco a poco los villistas empezaron a retirarse hacia Jcarrancistas. De esta suerte, y sin desmentir sus virtudes
Chihuahua, lo cual alentó a los carrancistas, de manera que con terreras, a la noche del 22 de diciembre se situó a dieciséis
más bríos emprendieron la persecución del enemigo que en ■kilómetros de Torreón, y al siguiente día penetró a la ciudad,
menos de veinticuatro horas, casi en desbandada, huyó hacia la |||a c a n d o los cuarteles, el palacio municipal y las oficinas del
sierra de San Andrés. comandante de la plaza, general Talamante, sembrando el
Murguía entró a la ciudad de Chihuahua el 4 de diciembre. fpánico y el desorden entre los soldados del gobierno, de manera
El triunfo de Horcasitas le dio gran prestigio, y como era ¿ que en menos de dos horas quedó dueño de la situación.
hombre de iniciativa, sin detenerse empezó a dar órdenes con la
Tan grande fue el desastre de la guarnición gobiernista, que
idea de exterminar a Villa, haciendo omisión de los accidentes
¡ f l general Talamante, revolucionario sonorense de mucho
del terreno y del conocimiento que los villistas tenían de la
pundonc., se suicidó, mientras que su gente se rendía o lograba
región. H u ir en todas direcciones.
■b,
Bajo las órdenes de Murguía estaban dieciséis mil soldados, :v Dueño de Torreón, el general Villa se abasteció de armas,
bien armados y municionados. De reserva, Murguía poseía cinco |fnuniciones y dinero, y habiéndosele incorporado muchos
millones de cartuchos y dos millones de pesos fuertes. Además, hombres que una vez más idealizaron a aquel guerrero conmo­
estaba investido de facultades extraordinarias, de manera que vedor, creyó que era llegada la hora de la reivindicación política
p o d ía m ovilizarse sin aguardar instrucciones- superiores. y militar; y en un manifiesto notoriamente improvisado por el
También podía instalar o cambiar autoridades civiles. optimismo entusiasta e incalculado, Villa proclamó que Torreón
Sin embargo, Villa no era el guerrero que se dejaba someter, había sido siempre para él, el punto de partida a sus grandes
ni temía a fuerzas superiores, ni creía en jefes más hábiles que victorias —de las victorias de la División del Norte—, y que por
él. Así, en seguida de la derrota en Horcasitas se retiró, como lo mismo, con aquel triunfo, el villismo presentaba un nuevo
queda dicho, hacia la Sierra de San Andrés, pero pasadas dos frente a Carranza y al carrancismo.
semanas, llegó a un punto cercano a Mapimí a donde una vez

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JOSE C. VALADES

Al caso, y creyendo que realmente estaba en poder de la


clave de su buena suerte, Villa organizó una columna de cuatro
mil quinientos hombres y teniendo noticias de que el general
Murguía, al saber lo sucedido, avanzaba a su encuentro por la
vía férrea del central, resolvió salirle al paso, y con señalada
dicisión marchó al norte, llegando con su gente a estación
Reforma, a donde se dilataban llanuras y lomeríos propios para
dar batalla.

Por su parte, el general Murgira, conociendo las mañas y


empresas de Villa, se movió con todo género de precauciones y
provisto de los informes necesarios para evitar que el enemigo le
cogiese de sorpresa, llevaba muy calculada la hora a la cual se
encontrarían frente a frente las dos fuerzas militares. Adelan­
tóse, pues, Murguía hacia Reforma con todo su aparato de
guerra dispuesto al fuego, llegando tranquilamente (3 de enero,
1917) a los puestos avanzados de Villa, con seguridad en sus
pasos y triunfo. Con ello fácil le fue derrotar al enemigo, que ya
más en son de aventura que de guerra, abandonó el campo en
desorden, dejando el cadáver del general Martín López, tan
celebrado por sus hazañas guerreras y su lealtad a Villa.

Un soldado de tanta responsabilidad y agresividad como


Murguía, no iba a detenerse con aquel triunfo, así es que, sin
levantar el campo, mandó que una columna de tres mil soldados
saliese tras las huellas villistas.

El propio Murguía se puso en marcha tras los derrotados;


ahora que como las órdenes para la persecución fueron dictadas
en medio de prisas y entusiasmos, la gente de Murguía olvidan­
do las astucias que los villistas empleaban, se adelantó tanto en

General Alfredo Elizondo, de las Fuerzas de Pablo González.


JOSE C. VALADES

la tarea persecutoria, que una de las columnas volantes cayó en la paz, mandó que las fuerzas veteranas de Sinaloa y Sonora que
una emboscada (12 de enero) en el Cañón de los Halcones, •habían dado la victoria al carrancismo en el centro y norte del
perdiendo cerca de cincuenta hombres. tpaís, se trasladaran violentamente al estado de Chihuahua; y, al
|efécto, los viejos batallones de soldados sinaloenses y sono-
Así y todo, creyendo poder “ cortar la cabeza” a Villa, el
• renses, al mando de los generales José Gonzalo Escobar,
general Murguía siguió con una tenacidad admirable todas las
Eugenio Martínez y Francisco Sobarzo, con un total de cinco
huellas que dejaban los derrotados; mas como Villa advirtiera
mil hombres, pasaron a suelo chihuahuense.
que quien lo buscaba iba más c tregado a la confianza que
guiado por la prudencia, se propuso ocasionarle un castigo, y al Conocido por Villa ese movimiento de su enemigo, mandó
efecto, le esperó (9 de marzo) en El Rosario; y sin que Murguía ^fraccionar las dos columnas que había logrado reorganizar, y
sospechara la presencia del enemigo, casi se entregó en manos de 4 una vez más, las partidas armadas entraron al juego de guerrillas.
éste, que le causó una seria y amarga derrota, desluciendo, por
En seguida, fue tanta la celeridad de la acción villista
el momento, aquella campaña de la cual parecía que Murguía
i^ntre el 4 de mayo al 27 de junio (1917) que las guerrillas,
saldría invicto.
jicada día más optimistas y combatientes, atacaron Parral, La
Alentado por tal acontecimiento el general Villa, sin impor­ jBonilla, Jiménez, y catorce poblaciones más, produciendo
tarle la inútil pérdida de sangre mexicana, y como si la guerra jgrandes daños entre los soldados del gobierno y causando la
representase para él una mera diversión, se movilizó violenta­ frnuerte del general Sobarzo, jefe respetable, valiente y querido
mente hacia la ciudad de Chihuahua, que atacó (30 de marzo) 'por sus soldados. Sobarzo correspondía al grupo original de los
sin son ni ton, puesto que no llevaba la menor posibilidad de revolucionarios idealistas, honorables y apasionados por las
vencer; ya que sólo le acompañaban dos mil hombres fatigados, doctrinas democráticas. Nada brillaba, aparentemente, en la
escasos de municiones, andrajosos y sin brújula política ni ¡personalidad de Sobarzo; mas esto se debía a su modestia
guerrera, puesto que la concurrencia a aquella guerra de personal, casi inefable.
tj
guerrillas sólo significaba una vulgar aventura. Y tan ilógico fue
Pero, volviendo a Villa, diremos que éste, después de aquella
el asalto villista a Chihuahua, que los atacantes fácilmente
fueron rechazados, teniendo que salir de la plaza en desbandada, racha de asaltos, albazos, emboscadas y escaramuzas, desapa­
reció misteriosamente de la escena guerrera. Tres largos meses
y sin llevar provecho alguno.
pasaron sin que se tuviera la menor noticia del guerrero; y es
Estas audacias del general Villa preocuparon profundamente que Villa en un rincón de la sierra de Durango estaba aturdido
al presidente de la república, quien temeroso de que el villismo después de leer una carta suscrita por media docena de sus viejos
presentara por enésima vez un grave obstáculo a la condición de partidarios —de los partidarios en quienes mucho confiaba, pues

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íK{ :« - kM* ,.’.
les tenía como “revolucionarios puros” , y a quienes si nunca
había escuchado en sus consejos, no por ello desmerecían en su
crédito. La carta, en efecto, firmada por Manuel Bonilla, José
María Maytorena, Miguel Díaz Lombardo, Enrique C. Llórente,
pedía a Villa la suspensión de hostilidades. El país estaba can­
sado de la guerra, y de seguirla, el p.opio Villa sería entregado a
la muerte por la gente de paz. Y no era todo: los firmantes le
pedían que mantuviera incólume el ideal humano y político de
la Revolución, tan contrarío a los caudillos profesionales.

Ni una sola palabra contestó Villa a sus antiguos partidarios;


pero pareciendo comprender el fondo de la misiva se dirigió a la
hacienda de Canutillo, y allí deshizo a la columna que le
acompañaba. Quedóse con una escolta de trescientos- hombres;
habló de paz y dijo haber hallado un retiro a su larga e ímproba
carrera de aventuras.
■ • 1
Allí estaba Villa, gozando de la tregua que él mismo se
-. . •- ■
había dado, cuando el 19 de octubre (1917), le sorprendieron
: S
I'
las fuerzas del gobierno; pero poniéndose nuevamente al frente
de sus hombres, derrotó al enemigo; le hizo ochenta prisioneros; - V- - ' ' ■' : ■ . fe-
se apoderó de un tren de abastecimientos y como creyó que
estaba condenado a seguir peleando, pues el gobierno no dejaba de
perseguirle, mandó que los prisioneros fuesen fusilados; y en
seguida, entregado una vez más al espíritu de la venganza feroz,
ordenó a sus lugartenientes Silvestre Quevedo, Chico Cano, José I® í{ - - V vi V
Jaurrieta y Nicolás Cano, que “hicieran leva” de todos los
jóvenes que hallasen a su paso y de esta manera improvisó una
columna de tres mil hombres y marchó sobre Ojinaga, con la v
■ ti ■. -
idea de hacerse dueño de un puerto fronterizo, abrir cauce a la

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JOSE C. VALADES HISTORIA GENERAL DE LA REVOLÚCION MEXICANA
v u
fuente de abastecimientos que imaginaba tener nuevamente en el aislamiento social y bajo el castigo de la autoridad local y ^
Estados Unidos y reiniciar las actividades “ en grande” ; aunque nacional.
no faltó quien intentara disuadirle del incalculado plan.
También en Morelos continuaba la guerra de guerrillas; que
El asalto a Ojinaga (14 de noviembre) fue infructuoso. La se acrecentó a partir del día de la toma de Torreón (23 de
plaza permaneció impávida ante la improvisada agresión villista. diciembre, 1916); pues habiendo ordenado Carranza al general
Pablo González, comandante en jefe de las fuerzas carrancistas
Esa guerra de guerrillas; tai audacia guerrera asociada al
en operaciones contra Zapata, que retirara seis mil hombres del
ejercicio vengativo de grupos o facciones rurales, no estaba
estado de Morelos para que marchasen violentamente al norte
únicamente en’el norte del país. No era Villa, ciertamente, el
del país, tal hecho fue considerado por los zapatistas como una
único jefe de guerrillas. Estas teñían carta de naturalización en
debilidad del gobierno; y por lo mismo, reanimado con la
casi toda la república. Y ello a la hora en que el Congreso
espere.iza de derrotar a los cinco mil soldados de González que
Constituyente acababa de expedir el nuevo Código Nacional.
w
T1- quedaban en Morelos, Zapata ordenó una ofensiva. No estu­
Dentro de Michoacán, los generales Luis Vizcaíno Gutiérrez, vieron fuera de punto los cálculos de Zapata; pues comprendien­
Jesús Cíntora y José Luis Chávez García, los tres originarios del do el general González que le sería imposible sostener sus
Y villismo, peleaban por cuenta propia; fraccionados a veces en posiciones en Morelos con la salida de la mayor parte de sus
guerrillas; unidos más de una ocasión en columnas amenazantes tropas, levantó su cuartel general de Cuernavaca, poniendo de
no tanto por su número, cuanto por sus ímpetus; también por hecho 1 plaza en manos del zapatismo, que resportdió al
sus violencias irresponsables y sus atropellos inconducentes. acontecimiento no sólo ocupando la ciudad, sino imprimiendo
Acaudillaban, en efecto, una guerra de desesperación, sin un manifiesto firmado por Zapata, en el cual, asegurando éste
bandera ni cuartel; aunque en el fondo de sus propósitos, no tener el dominio militar en ocho estados de la república,
abandonaban las ideas políticas de 1910, pues si eran hombres anunció su decisión de avanzar violentamente sobre la ciudad de
sin miramientos, asimismo correspondían a un preciado desin­ México, para “dar garantías a sus habitantes,” defender a los
terés. No dejaban, sin embargo, de cometer estupros y robos, comerciantes metropolitanos “ atropellados” por Carranza,
venganzas y abusos. Así y todo, seguían caracterizando lo establecer un gobierno “ responsable y sereno” y realizar “ la
primitivo del cuerpo rural mexicano entregado a la Revolución. unión y concordia de todos los mexicanos” .
Pero al mismo tiempo advertían la existencia de problemas que
Zapata, al efecto, se preparó para dirigir personalmente el
no eran políticos, sino que correspondían al deseo de un
bienestar no alcanzado por la población rusticana, que vivía en avance hacia el distrito Federal, pero como a esas horas tuvo
informes de que entre sus lugartenientes se conspiraba en favor

150 151
v-5;
.iv \8;
/V
•,\ó
JOSE C. VALADES
av
de la paz y de que algunos de esos lugartenientes se entendían
con el gobierno de Carranza, determinó hacer un alto en sus
movimientos guerreros, y mandó abrir una averiguación y como
hallase pruebas de que el general Otilio Montaño, el profesor de
pueblo, autor del plan de Ayala, y el más sincero defensor de los
labriegos y peones, se entendía, aunque sin compromiso con
políticos carrancistas, ordenó que se le aprehendiera y con­
signara a un consejo de guerra, mismo que considerándole
culpable del delito de traición, le condenó a muerte, acto que se
cumplió el 18 de mayo (1917).

Fué un infortunio la trágica caída de Montaño; pues si éste


carecía de cultura tenía en cambio las virtudes del individuo de
pensamiento ágil, deseoso de saber. Era sin duda, una-caracte­
rización de la sensibilidad rural mexicana, gracias a lo cual
percibía fácil y efectivamente las congojas y contentos del
pueblo. Gracias a esa cualidad, Montaño comprendió cuán inútil
era para el zapatismo, siendo facción independiente y meramen­
te zapatista, alcanzar la victória; y como la Constitución de
1917, no distaba mucho de la esencia del plan de Ayala,
queriendo servir si no a la causa personal de Zapata, sí a la del
partido agrario que tenía a Zapata como caudillo, encendió
cerca de los civiles que acompañaban al general Pablo González
una luz de pacifismo, sin el menor asomo de traicionar a Zapata
ni al zapatismo, toda vez que el jefe del ejército Libertador
siempre le había otorgado su confianza y dado facultades para
el trato de los asuntos públicos del propio ejército.

Las manifestaciones pacíficas de Montaño, no parecieron


dignas a Zapata, quien atribuyendo a su lugarteniente un acto

152
JOSE C. VALADES Í h ISTORIA GENERAL DE LA REVOLUCION MEXICANA

de deslealtad, mandó enjuiciarle con los resultados trágicos de I el general Díaz estaba a punto de derrocar a Carranza y de
que se ha hablado arriba.
Ü restaurar un “régimen de orden” .
Perdió el zapatismo, con el fusilamiento de Montaño, un | Figuraban entre los líderes más emprendedores de la Con-
instrumento purísimo y noble de la guerra agraria en Morelos; | trarrevolución movida desde Estados Unidos, el general
perdió asimismo un buen número de jefes que, al saber el fin de I Aureliano Blanquet y los licenciados José Castellot, Guillermo
Montaño, se retiraroh de las guerrillas o se rindieron al gobierno, I Castillo Nájera, Nemesio García Naranjo, Enrique Gorostieta y
minorando con todo eso el valor del zapatismo. I Querido Moheno.
,r f-
V
Minorando también estaba el prestigio guerrero de los Mas todo ese aparato de propaganda, no era obstáculo para
\,i caudillos contrarrevolucionarios, que desde el fracaso de la |¿que el Gobierno constitucional continuara fortaleciéndose,
expedición del general Félix Díaz a Chiapas, andaban a salto de ||dejando a segundo término la guerra de guerrillas, máxime que
m a ta , expidiendo proclamas, decretos, nombramientos y lepara mediados de 1917, el ejército.nacional sumaba cien mil
promesas, con lo cual creían congraciarse con la masa popular ijhombres, mejor armados y municionados que durante la lucha |
del campo, principalmente en el estado de Veracruz a donde B|ntestina de 1915. Los nuevos gobernantes empezaban a ser
ahora habían trasladado el centro de sus operaciones. Respetables y el Estado tenía todos los visos de un tronco que
Ifémbarnecía, para dar seguridad a México.
Hallábanse al efecto, en suelo veracruzano y al lado de Díaz,
los generales Pedro Gabay, Higinio Aguilar, Roberto F. Cejudo,
Cástulo Pérez y Luis Medina Barrón; y aunque tales acompañan­ ■
tes de Díaz tenían fama de buenos soldados porfiristas, no
5. Rentas del Estado
hacían daños a las fuerzas del Gobierno, aunque sí lesionaban los
deseos pacíficos del país.
m
Transladadas las hazañas contrarrevolucionarias a la realidad H Si en todo el orden político, el tránsito del período de
guerrera, no tenían otra estampa que la de una aventura noveles­ g u e rra llamado por Carranza preconstitucional al período
ca; pues sus grupos iban de un lado a otro lado, huyendo y Inconstitucional fue grave y arriesgado, puesto que existían
ocultándose, pero respetando siempre al vecindario pacífico. ¡¡muchas inmadureces e imprevisiones, el paso de la independen- v
Tales movimientos, sin embargo, servían para que los líderes de Écia económica de los caudillos guerreros al orden administrativo,
la Contrarrevolución, que operaban en Nueva York, continuaran llse presentó, como ya se ha dicho, entre muchos azogamientos y ’m
reuniendo fondos, expidiendo noticias alegres y asegurando que I
w
155 m
m.

154
t

JOSE C. VALADES

teniendo que caminar sobre un campo cubierto con grandes


obstáculos. i l i i l
Durante los días de guerra, las exacciones, las exportaciones
ilícitas e ilimitadas, y sobre todo las inmedidas emisiones de
bilimbiques, fueron causa de que la población civil viviese en
zozobras y apuros. No ocurrió lo mismo a las facciones. Estas
gozaron de cuantos privilegios vinieron al capricho o necesi­
dades de caudillos y cabecillas. La gente de paz nunca fue
consultada ni considerada, puesto que sobre todas las situa­
ciones sobresalía el derecho de armas.

Tal disposición de vida, sobre todo de vida económica, no


podía prolongarse al volver la república al sistemg constitu­
cional. Ahora, el gobierno de Carranza iba a “ sentir considera­
blemente” la penuria que no había conocido durante el
“ régimen del papel” . Comenzaba la nueva situación por el
reconocimiento a un sistema monetario que estaba en vigor, no
tanto por los deseos o necesidades del gobierno, cuanto debido
a las exigencias populares. La moneda, pues, ya no dependería
de circunstancias guerreras, sino de obligaciones pacíficas.

En efecto, el proyecto del presidente Carranza —siempre


originado en la idea de que el país estaba obligado a seguir
tolerando los decretos oficiales de la guerra— conforme al cual
una enésima emisión de bilimbiques sustituiría a las anteriores,
de manera que la abundancia de papel no dejara de favorecer los
intereses del carrancismo, había caído definitivamente por
tierra; pues vuelta la república al orden constitucional, no era
posible seguir colocando la fuerza de las armas sobre la cimenta­
ción y dilatación de las leyes económicas y monetarias.

156
JOSE C. VALADES ^HISTORIA GENERAL DE LA REVOLUCION MEXICANA

Así la caída, casi desastrosa, del papel llamado Infalsificabie secretaría de Hacienda ordenó que los sueldos de los empleados
produjo en Carranza hondas preocupaciones, y lo que había públicos fuesen reducidos a un cincuenta por ciento; que todas
sido esperanza y optimismo, se convirtió en quiebra y azoro. La fias deudas administrativas quedasen bajo una moratoria y que,
* derrota del Infalsificabie tuvo los alcances de una derrota 'dejando en estudio los gastos oficiales, sólo estuviesen al
a*y política del Gobierno, que no fácilmente se podía enderezar. El corriente aquellos destinados a atenciones de carácter militar,
1,/ púnico remedio que se presentó a la vista y que correspondió a la ^conservándose por tanto el pago íntegro de haberes a los miem­
itv demanda pública fue el regreso a la moneda metálica. Y esto bros del ejército. Así, los soldados continuaron recibiendo
tuvo que hacerse efectivo a partir del lo. de diciembre (1916). cincuenta centavos diarios; un peso setenta y cinco centavos, los

El acontecimiento, que en la apariencia representó la salvación tenientes; seis pesos, los generales.
del país y sobre todo el alivio pronto y definitivo de las clases f Tales disposiciones, sin embargo, sólo tuvieron el alcance de
pobres, produjo una serie de anomalías, puesto que sacudió un alivio. El mal de la pobreza oficial siguió perforando el
intensamente los intereses de toda la población nacional. En organismo administrativo y presupuestal de la república; y esto,
poder del público y sin posibilidad de ser redimidos, quedaron 1 recisamente a la hora en que era restaurado el régimen cons-
cuatrocientos millones de pesos en papel Infalsificabie, amén de pitucional, y en la cual, el Presidente estaba obligado a poner a
otros quinientos millones correspondientes a emisiones auto­ consideración del Congreso los proyectos para presuponer los
rizadas o no, hechas por jefes de guerrilla o gobernadores o jesos e ingresos federales durante el año fiscal 1917-1918. Así,
comandantes de estado. autoridad de Carranza en el ramo de hacienda, estaba ahora
Estas últimas sumas significaban la contribución obligada de sujeta al poder de los diputados, quienes en su mayoría, no
Js
^correspondían a los pareceres y necesidades del Ejecutivo.
la gente pobre a los gastos de guerra; correspondían, pues, a una
contabilidad popular sin cuenta de reintegro.
P Por otra parte, en la realidad, el Gobierno no tenía —tal era
Estas pérdidas, a pesar de ser cuantiosas, no tenían compa­ . ja condición económica en la que se encontraba el país y de
ración con las pérdidas y embarazos en los ramos presupuéstales paso el mundo oficial— sobre qué basarse para presuponer sus
y hacendarios del Gobierno; porque si ciertamente, la tesorería erogaciones y entradas. El primer trimestre de 1917, había sido
de la Nación pudo atender la demanda de la moneda contante y solventado, por lo que respecta a las cuentas militares, gracias a
sonante acudiendo, como ya se ha dicho, a los depósitos de los los impuestos y préstamos de las empresas petroleras norame-
bancos particulares, el hecho no sirvió substartcialmente al ricanas e inglesas. El promedio mensual de ingresos recibidos
futuro administrativo del país. por el Gobierno a cuenta de explotaciones del petróleo en
Veracruz y Tamaulipas, fue de dos millones de pesos contantes
Por de pronto, y dada la escasez de moneda metálica, la

158 159
JOSE C VALADES

y sonantes. No se incluyó en tal ingreso, el monto de los


préstamos o “ adelantos” que las mismas compañías hicieron al
Gobierno en ese trimestre. Estas cifras no se dieron a conocer,
no por falta de probidad administrativa, sino debido a que en
los meses siguientes, las cantidades “entregadas como adelan­
■ ■■
tos” fueron descontadas de los ingresos mensuales normales, de
• '• 'i
manera que la nación quedó trimestralmente limpia de deudas,
sobre todo con las empresas petroleras. '4
Después del primer trimestre, normalizándose más y más las
condiciones del Estado, se acrecentaron los compromisos
oficiales, y como los pagos de impuestos de las empresas ■•¿i ’v 'i':-'-*?**'’;r<?'*■¿•
petroleras estaban en un nivel inferior a las necesidades del
Gobierno, éste echó mano del ingreso de los ferrocarriles
Nacional, Central e Interoceánico, que estaban incautados; .
ahora que no por ello dejó el Estado de contraer una deuda,
que al lo. de julio de 1917, ascendió a setenta y un millones de P ii
pesos. ¡sm

w m
Así, en medio de una y muchas escaseces del erario público,
fue la inauguración del período constitucional presidido por
Carranza; y aunque éste, en su informe al Congreso (15 de
; - :■ ■
abril) consignó con mucha desenvoltura las dificultades hacen­
darías del Gobierno, se abstuvo de exponer con franqueza, para
evitar así la desconfianza pública y la desunidad del mundo
oficial, la verdadera condición de las rentas del Estado. "'jk ik k . L*. M É ifó i
De todas maneras, el presidente de la república no dejó de
m m
insinuar la necesidad de emprender importantes reformas admi­ lf , ’$?•
m lc
nistrativas y fiscales; y al objeto, el 2 de mayo (1917), envió al
Congreso un proyecto de decreto, conforme al cual se daban

Eduardo Hay.
160
JOSE C. VALADES HISTORIA GENERAL DE LA REVOLUCION MEXICANA

Para corresponder, pues, a las exigencias públicas, el Estado


facultades extraordinarias al Ejecutivo en el ramo de hacienda.
necesitaba acrecentar su reserva metálica, haciendo que la
Con singular valor, pues, el presidente Carranza, no obstante Acuñación fuese mayor, toda vez que los antiguos pesos fuertes
la amenazante oposición que se le presentaba en el Congreso, |'s í como la moneda de oro habían desaparecido de la
puso de manifiesto la crisis hacendaría; y ésta, ciertamente, era ircular :ón desde los días anteriores al 1915. Y no se hallaba a
deplorable: estaban suspendidos los. pagQS.de.Ja..d^uda exterior: a vista medio alguno para satisfacer la demanda nacional y
se acrecentaba la interior; los impuestos del timbre vivían semi- ficial; porque habiendo alcanzado la plata, como consecuencia
paralíticos; los bienes intervenidos no producían beneficio é la Guerra Europea, un alto precio, toda la producción mexi-
alguno; la acuñación de moneda metálica no bastaba a las nece­ na era vendida al extranjero, lo cual no podía evitar el
sidades públicas. Para el inicio, en diciembre (1916), de la
Gobierno. Y esto, primero, debido a los ingresos que le propor-
circulación del oro, la plata y el cobre, el Gobierno sólo pudo
"ónaba tal exportación y que, aparte de los que proporcionaba
acuñar doscientos sesenta mil pesos mensuales; y este promedio
petróleo, constituía uno de los beneficios más seguros y
continuó hasta terminar el primer trimestre de 1917.
ÍXovechosos para la tesorería; después, por resultarle incosteable
Tan tristes eran los antecedentes como negras las perspec­ "1 acrecentamiento de la acuñación. De esta suerte, existiendo
tivas hacendarías, que los diputados, haciendo un alto en sus lata en abundancia y faltando moneda contante y sonante, el
tareas anticarranciastas, resolvieron otorgar a .Carranza las iobiemo no estaba en aptitud de tomar el camino cierto y
facultades extraordinarias pedidas; ahora que el Presidente, jficaz para resolver tamaño problema.
haciendo justa gala de su probidad y patriotismo, renunció, por
Vivía, pues, el Estado, por lo que respecta al orden moneta­
sí solo al exceso de tales facultades y las limitó (8 de mayo) a
rio, entregado a las exigencias y modalidades del mercado
las concernientes a presupuestos, impuestos, administración de
mundial de metales preciosos, sin contar el hecho de que, si de
rentas, empréstitos locales y bienes nacionales y confiscados.
.una parte, el gobierno de Estados Unidos tenía el monopolio de
La desinteresada empresa de Carranza, auxiliada por el tía plata; de otro lado, Inglaterra requería fuertes cantidades de
talento del secretario de Hacienda Rafael Nieto, no bastarían en ,r ^sta, para atender sus obligaciones monetarias en India, hacia
tales días para vencer los tantos males que aquejaban al erario y donde era llevada la mayor parte de la producción mexicana, al
a la nación; pues solamente los gastos de guerra requirieron, en través de empresas mineras y financieras noramericanas.
noventa días a partir del 15 de julio, treinta y cuatro millones
de pesos oro; y eso que la tesorería federal, sólo tenía en exis­ Uniendo los desequilibrios presupuéstales a las deficien-
tencia el lo. del propio mes de julio, siete millones ochocientos ciencias administrativas, a las críticas condiciones de la
mil pesos. trasguerra y a las escaseces monetarias, el gobierno de Carranza

162 163
confesó tener un déficit promedio mensual de cinco millones de
pesos oro, sin hallar otra explicación al caso, que repetir el
recuerdo histórico, de que tal suma había sido precisamente la
que por varios años correspondió al déficit del régimen porfiris-
ta.

La única esperanza que se presentaba en el horizonte oficial


era la de que se produjera en el país un aumento en la produc­
ción de oro, puesto que hacia el comienzo de 1917, las minas de
Durango, Guanajuato e Hidalgo tuvieron un acrecentamento
en sus explotaciones. La Casa de Moneda, por su parte, informó
que hasta el 31 de agosto (1917) había acuñado catorce millo­
nes de pesos en monedas de oro y siete millones, setecientos mil
pesos, de plata. Además, en los bancos que habían reanudado
sus operaciones, durante el segundo trimestre de 1917, los
depositantes tenían entregados trece millones en pesos fuertes y
poco más de dos millones en oro nacional. Todo esto indicaba
que la confianza pública podía servir al mejoramiento de las
condiciones económicas del país.

Carranza, atolondrado por los males de la hacienda pública


y olvidando sus preocupaciones nacionalistas, siguió el camino
del porfirismo: poner los problemas mexicanos a la conside­
ración de los extranjeros y optó por llamar a la consulta del
gobierno mexicano a los economistas noramericanos Kemmerer
y Chandler; aquél, de la universidad de Princeton; éste, de la
Columbia.

Kemmerer y Chandler, al efecto, iniciaron (octubre, 1917),


una revisión de los sistemas administrativos y contables de la
secretaría de Hacienda; también de los regímenes fiscal y mone-

1¿4
JOSE C. VALADES HISTORIA GENERAL DE LA REVOLUCION MEXICANA

tario, y concluyeron sus estudios recomendando nuevas y mayo­ cionalidad nacional. Mas si el hecho preocupaba a los mexicanos
res acuñaciones de oro y plata, lo que empezó a poner en y al gobierno, tal preocupación no sobresalía a la del manteni­
práctica el gobierno a las últimas semanas de 1917. miento de una paz nacional. La gente se dolía en sus penas
materiales, pero estaba dispuesta a excluir de sus necesidades los
Mas, conforme aumentaba la acuñación se acrecentaban las
instrumentos y objetos capaces de promover la subversión. Esto
demandas de gastos. El ejército, solamente el ejército, en el
segundo semestre de 1917 requirió noventa millones de pesos, confirmaba que la Revolución no había sido producida por
mientras que los depósitos de bilimbiques cambiados por certifi­ insatisfacciones de carácter económico, sino por agentes de la
cados de oro negociables, ascedieron a cincuenta millones de inspiración creadora.
pesos de manera que el Estado se vio en grandes apremios y se Tampoco advertía tal situación una incapacidad pública de
hizo indispensable acudir a nuevos empréstitos interiores. Carranza ni una ineptitud del pueblo de México para darse
gobierno y administración. Advertía, eso sí, que no era posible
No era fácil tarea obtener tales préstamos; y como el caso
era urgente, el gobierno se vio precisado a presentar nuevas reconstruir mágicamente los desperfectos y males causado por la
demandas de dinero a los bancos y ferrocarriles. De unos y guerra. Después de una catástrofe, la república tenía que erigir
mayores y mejores edificios; pero para esto, sería indispensable
otros, obtuvo por enésima vez doce millones seiscientos mil
pesos. no solamente hacer trazas, sino también apilar material de
construcción, levantar andamiajes y preparar peones y oficiales.
Muy heroico debió ser, sin embargo, el presidente Carranza
para enderezar aquella situación que parecía poner en peligro lo La tarea, por otro lado, no podría ser la de un solo hombre.
ganado en los campos de batalla; porque ahora, substanciadas Requeriríase toda una clase selecta debidamente organizada;
las deudas interiores, se presentaba la exigencia imperiosa de los también la evolución de las épocas, porque aquella que represen­
acreedores extranjeros. Estos, en efecto, pedían que México taba el Constitucionalismo, y que se caracterizó como la época
procediera a reanudar_los~oagos de su deuda exterior que de la voluntad popular, no sería capaz para contemplar y
llegaba a la cifra de trescientos treinta y tres millones despegos dominar medio siglo o un siglo adelante de la misma. Pronto, la
oro, sin incluir los débitos de los ferrocarriles. De la suma dicha, República tendría que abandonar la época del proyectismo para
cuarenta y seis millones correspondían a créditos vencidos al 30 dar comienzo a la época de la necesidades, que biológicamente
de junio de 1917. señala la marcha de hombres y pueblos.

De esta suerte, nada halagüeño para el país ni para el Estado


era el panorama fiscal al terminar el primer año de constitu-

166 167
JOSE C. VALADES

6. El derecho de Propiedad

Mientras en la guerra y la politica.de los años mexicanos


comprendidos de 1910 al 1916, las armas, ambiciones y rivali­
dades produjeron sus efectos entre los jefes revolucionarios y las
masas combatientes, en el seno de la población inerme de la
república, se presentaron y realizaron importantes fenómenos.
Uno de estos, fue el crecimiento demográfico dentro de los
t casos de aquellas poblaciones que a los finales del porfirismo
^empezaban a tener las características de ciudades.

$ El campo mexicano vio mermado el número de sus habitan-


líes desde los principios de 1911, como consecuencia, ya de las
bajas que las guerras causan en la población, ya por la emigra­
ción encaminada hacia Estados Unidos, ya por la concentración
de los no combatientes en las urbes o preurbes nacionales.

A propósito de esta transformación que se operó en el seno


de la población rural hay, pocas noticias confirmables. Las
estadísticas, reanudadas en los comienzos de la constituciona-
lidad, corresponden más al optimismo y al capricho que a la
realidad. Esto no obstante, señalan en trece millones el número
de habitantes de la república, incluyendo —advierten tales
noticias—a los mexicanos emigrados a Estados Unidos.

La suma no podrá ser verificada; ahora que sí existen


probaciones de que durante el período de la guerra, la población
JOSE C. VALADES HISTORIA GENERAL DE LA REVOLUCION MEXICANA

laumentó en las ciudades de Veracruz, Guadalajara, Puebla, Otras empresas, aparte de las guerreras, algunas de ellas
León, Monterrey, Toluca, Orizaba, Tampico y capital de la fortuitas y engañosas, o estables y prósperas se hincaron en el
república. país, gracias a lo cual, hacia el final de 1917, fue posible prever
Acrecentáronse igualmente los pueblos rurales, en los una fu t'-a vida económica; también la formación de un espíritu
estados de Jalisco, Michoacán, Guerrero, Oaxaca y Veracruz, de propiedad, como difícilmente lo había sentido y practicado
regiones que sin haber quedado al margen de las luchas intesti­ g£: el mexicano en días anteriores.
nas, puesto que fueron las abastecedoras de soldados para filas
La necesidad nacional, en efecto, empezó a empujar a los
de todos los ejércitos, no sufrieron las pestes y hambres
hombres hacia la conquista, en ocasiones con malas artes, en
padecidas por otros estados.
ocasiones dentro del derecho mercantil, del mundo de los
Ahora bien: el aumento de población en ciudades; el ir y negocios económicos.
venir de soldados y paisanos; las alteraciones sufridas por los
bilimbiques; el cierre de centros semiindustriales y mercantiles; Una nueva clase de comerciantes —nueva por ser exclusi­
la quiebra o clausura de bancos; las pérdidas sufridas-por los vamente mexicana e independiente de la clase colonialista que
ahorradores; la suspensión de créditos; los requerimientos de la prevalecía desde la Reforma— surgió en México. Empezó,
£
guerra, en fin, todo aquello que sirvió para cambiar la rutina de durante los días aciagos de 1913, con la llamada fayuca, que
la vida mexicana —rutina que prevaleció durante largos añ o s- sustituyó la categoría vendedora del varillero. Nació la fayuca
despertó en los hombres el ser ambicioso e inició una edad de en la especulación de artículos del vestido y alimenticios. Era
lenta, pero manifiesta inventiva. propiamente un mercado negro nacional, aunque nunca tuvo tal
De esto último se originó el alma de nuevas empresas; y nombre en México. Creció con el contrabando proveniente de
como la que estaba a la mano de todos era la guerrera, en el Estados Unidos y en torno a los abastecimientos de los ejércitos
curso de una década, fue ésta la más favorecida, sin que ello combatientes; y se hizo más importante con los negocios que
significase atraso, ignorancia, impotencia o inmoralidad del efectuaban los paisanos aprovechándose de la amistad o
pueblo mexicano. Por el contrario, la dilatación de aquel parentesco con los capitanes guerreros, para obtener privilegios
período de lucha armada señaló, de manera incontrovertible, la en los transportes, o las confiscaciones, o los canjes de emisiones
vitalidad de México y de la nacionalidad mexicana. No en vano de bilimbiques.
un país es guerrero y dicta probaciones guerreras. Lo que Al calor de tal situación, se organizó también, como clase
parecía, pues, una vergüenza de México, constituía la fuerza de superior a la fayuquera, una minoría, a la que concurrían
México; ahora que no a todas las naciones les es dable tal fuerza súbditos españoles, que se enriqueció gracias a sus audacias en las
ni es la única manera de representarla. compraventas de pánico, así como en las hipotecas o remates de

i n'f\
171
JOSE C. VALADES

propiedad urbana, cuyo precio en la ciudad de México decreció


hasta en un sesenta y dos por ciento durante los turbulentos
días del 1915.
,<?. , n p f
•V '*■ V v VW

desarrollóse igualmente una pequeña e incipiente clase in-


■^ dustrial, originada en las escaseces producidas por la guerra, y
que, aprovechándose de las experiencias y conocimientos del
artesanado, empezó a producir artículos domésticos, ya de
medio lujo, ya de utilidad práctica, para los servicios familiares.
El taller se hizo domiciliario; el consumo se llevó a cabo por
zonas; el crédito fue familiar. Numerosos fracasos hubo en tales
empresas, pero también no pocos triunfos. El pie veterano de
una industria mexicana se debió a esos días de aparente
oscuridad y retroceso nacionales. Los ensayos, seguidos de la
organización de cortos capitales, sirvieron a una manufactura en
la cual^no intervino .Jtiás..la JitiversióiLAle 1 exterior. Aunque no
pudo escapar al poder del capitalismo español establecido colo­
nialmente en el país, y cuya trascendencia merece un estudio
específico.

Así, el viejo régimen de conservación de riquezas personales


, | » Y o asociados, que parecía inconmovible, entró en una edad de
' níí-, agotamiento. Unas fortunas se extinguían; otras surgían, aun-
W r que sin velocidad ni capacidad momentáneas, para sustituir
automática y eficazmente a las primeras.
ift*'
V5 ,
ce* El estado de Morelos estaba exhausto de riqueza azucarera
»V' que había constituido su poder. Los viejos ingenios habían sido
arrasados, pero los especuladores de azúcares, peninsulares en su
mayoría, empezaba a formar una poderosa casta mercantil. El
ramo de curtir pieles reemplazó las importaciones de estos

172
JOSE C. VALADES HISTORIA GENERAL DE LA REVOLUCION MEXICANA

productos procedentes de Alemania y Estados Unidos. Peque­ el de una casa habitación familiar de modestos recursos, d e ’
ños e improvisados molinos de trigo, nacidos como exigencias manera que los grandes solares fueron divididos y se estableció
de la guerra, en tom o a las ciudades, fueron la cuna de una un promedio de ocho metros de frente para las nuevas construc­
industria harinera. Las casas de cambio y los coyotes, sustitu- ciones particulares.
endo a los bancos en días que estos quedaron clausurados,
Pero un acontecimiento, que ya no correspondía al desa­
suspendidos o confiscados, se convirtieron en prósperos nego­
rrollo de las urbes, sino de la vida rural, surgió a la vista del país
cios de los cuales salieron numerosos propietarios de inmuebles
al amparo de los primeros síntomas formales de paz. Tal suceso,
del distrito Federal. Del nuevo comerciante al menudeo se
como queda dicho, se manifestó en los campos agrícolas, a
originó un cambio en la vida del mercado público. Las antiguas
donde los peones y labriegos iniciaron la ocupación de tierras
casas de empeño, señaladas por los revolucionarios como cuna y
pertenecientes a las haciendas. Lo que no había ocurrido duran­
causa del empobrecimiento en México, se convirtieron en mue­
te la guerra, se presentaba al comenzar la era civil y constitu­
blerías y joyerías, aumentándose con tal hecho los recursos
cional de México.
mercantiles del país. Los capitales muertos que no pudieron
emigrar tuvieron que hacerse activos en busca de recuperación. En efecto, la población rural, empobrecida en los salarios y
fV
, La venta de granos anteriormente monopolizada por un grupo cultivos como consecuencia de las luchas armadas, buscando un
y»■
t<r * de extranjeros, fue negocio común y corriente al alcance de desahogo a sus precarias condiciones económicas; pero prin- J
1 v4 y» A
i
todos, pero principalmente de la gente rural concentrada en las cipalmente a su desempleo inició, sin ley ni dirección, la inva- vt^
ciudades y que mucha experiencia tenía en el conocimiento y sión d al ie n a s^ — >'
trato de semillas alimenticias. Los restoranes y fondas se
Lleváronse a cabo las primeras ocupaciones sin violencias;
hicieron accesibles a todas las clases sociales, pues los jefes
aunque en algunos lugares, los invasores se posesionaron de
revolucionarios, vestidos a la usanza de la campaña militar, los
tierra y cultivos, sin dar explicación alguna y sin que las autori­
invadieron, popularizándoles y restándoles el continente de
dades militares o civiles interviniesen. Los hacendados, ajenos al
. gente rica que poseían.
/ — alcance que podían tener tales actos, puesto que todo aquello se
Despertóse, por último, la idea de poseer una vivienda consideró como apéndice de la guerra, no tomaron providencia
propia; y hacia el final de 1919, los barrios al sur de la ciudad de alguna, con lo cual, los ánimos de labriegos y peones se sintieron
México, que habían estado destinados hasta la pre—Revolución estimulados. Además, los mayordomos de las fincas agrícolas
para inmuebles, ya dé gente rica, ya de viviendas departamen­ vieron el acontecimiento como favorable a sus intereses, su­
tales, empezaron a contemplar un nuevo tipo de construcción: poniendo que de esa manera tendrían mayor afluencia y com­
petencia de jornaleros.

174 175
JOSE C. VALADES

Pronto, sin embargo, observaron su error; porque lo que se


presentó esporádicamente como si se tratara de pequeñas
bandas de asilados, en seguida tuvo las características de un
movimiento que, no obstante carecer de bandera, se dilataba
por las mejores zonas agrícolas.

) f) v La primera parte de este movimiento se llevó a cabo en los


estados de Puebla, Tlaxcala y México; pero sobre todo en el
primero; y aunque, como se ha dicho, no tenía jefes, no demoró
mucho la aparición de los caudillos. Estos se inspiraron en la
petición del lema agrario del zapatismo; en la tenacidad y since­
ridad de los generales zapatistas Domingo y Cirilo Arenas, quie­
nes desde 1913, entraban a pueblos y haciendas al grito de
“ ¡ Viva Tierra y Liertad! ” ; ahora que tal exclamación, más que
pretender los repartimientos de tierra o reformar el derecho de
propiedad, tenía por objeto ganar voluntarios para la guerra;
porque muy reacios se motraban los peones y jornaleros de
Puebla y del estado de México a tomar las armas en los comien­
zos de las luchas intestinas nacionales. Era una realidad que,
originalmente, el pueblo rural de tales regiones no quería cam­
biar su vida por la posesión de las tierras; pues prefería disfrutar
la paz y caminar bajo la tutela de los hacendados, quienes daban
a la vida interna de sus fincas un régimen patriarcal ajeno a cual­
quiera innovación. De tal rutina se originó un profundo miso­
neísmo que sólo el zapatismo, pero en primer lugar los
hermanos Arenas, lograron quebrantar.

No se opusieron los trabajadores de haciendas a los revo­


lucionarios; pues no sólo sirvieron éstos de informantes, sino
que se,rehusaron a corresponder a la organización de guardias

176
JOSE C. VALADES HISTORIA GENERAL DE LA REVOLUCION MEXICANA

armadas de los amos y numerosos fueron los forzados a formar ciones ejidales deberían llevarse a cabo únicamente dentro de
en las filas del huertismo. No se opusieron a los revolucionarios, preceptos establecidos por la propia Ley. Así ni una sola
pero sin ser gente armada no escaparon al influjo de la Revo­ disposición de Carranza como Primer Jefe contradijo el espíritu
lución. , __ A, $ M o.s<\Va.f A ¿3 y función de las restituciones y repartos ejidales.

rXsí, las ocupaciones de tierras no constituyeron la práctica Carranza, por otra parte, anticipándose a la madurez de las
de una doctrina agraria ni la consecuencia de una prédica cosas, mandó que las cuestiones agrarias no se hiciesen motivo
política. Fueron resultado de la necesidad; de una necesidad de trasteos políticos ni de alteraciones del orden públigo; pues
determinada en gran parte por los tantos cambios operados en el mucho temió que lo primero y lo segundo sólo sirviesen a man­
país como consecuencia de la guerra —uno de esos cambios, el tener dislocada tanto la economía como la política nacionales.
concerniente a los sistemas de trabajo y salario; pues desde 191,5 Cualquier acto de amenza al orden y progreso de la patria, le
se hizo general el régimen del asalariado ruraL.que sustituyó al tenía Carranza como acción monstruosa. De aquí el odio que
viejo sistema de tienda de raya y del„.p.g.Qnaje acasillado. | tomó al villismo; de aquí también su antipatía hacia el gobierno
noramericano de Wilson a quien consideraba como protector de
Tampoco provino tal movimiento de ocupación agraria, de
uña subversión mexicana permanente.
insinuaciones o táctica del mundo oficial; pues Carranza, tan
pronto como tuvo noticias y quejas sobre los actos de posesio- Tanto quiso Carranza que el plan de restituciones y repartos
namiento, mandó que fuerzas del ejército procedieran a pro­ ejidales se llevara a cabo como acto jurídico y administrativo,
teger haciendas y pueblos, desalojando a quienes aparecieran o que excluyó, como ya se ha señalado, a los gobiernos locales de
fuesen invasores. concurrir a los repartos y restituciones provisionales, ampliando,
en cambio, la autoridad de los comisionados agrarios regionales,
Sin embargo, esas órdenes del Gobierno no podían achacar­
para que éstos estuviesen más expeditos y facultados en el
se a una política antiagraria de Carranza. Eran consecuencia de
cumplimiento de la ley. Por otra parte, temió que la interven­
una preocupación constante y profunda que mantuvo Carranza
ción de los gobiernos locales en las modificaciones aplicables al
al través de la guerra Civil acerca del estricto cumplimiento del
derecho de propiedad rural, sirviese para que los asuntos concer­
principio de autoridad; y sobre todo, de una autoridad nacional.
nientes a terrenos, como había acontecido durante el porfirismo
/ El criterio de Carranza respecto a cuestiones de tierras fue con los baldíos, se convirtiese en negocio político o bien en
invariable desde que, como Primer Jefe, expidió la Ley de 1915. simulaciones de propiedad.
Mas entendió Carranza —y así puede, advertirse eñ el contexto
Con mucho comedimiento, y casi al compás de las primeras
de tal Ley— que tanto los repartimientos como las reconstruc­
ocupaciones realizadas en Puebla y México, y tratando de evitar

178 179
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JOSE C. VALADES
'JÍrT 9 ^ }^V\vCXvcijl/VO
que la aplicación de la Ley de 1915 lesionara violenta y brusca­
mente el espíritu original del derecho de propiedad privada, el
"Y
Gobierno decretó (25 de marzo) el respeto a los terrenos
G O BIERN O DEL t'HTADO
particulares comprendidos dentro de las zonas de repartimientos
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y restituciones. — ----- -------- -- NUEVO LEON. „

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[ [Nada, por aquellos días, pudo detener las ocupaciones de
"terrenos. En unos cuantos meses de 1917, la cuestión de tierras
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se hizo un problema trascendental del país. En octubre de tal
/ c i j b 'W ^ A v -«■ /L Q ^ y \ /CK./j ^ n r ^ ó - kj * JLC'S -A s'sy ■
Xaño, el Gobierno tenía en tramitación cuatro mil cuatrocientas aav

veintiuna solicitudes de tierras, y ochocientos setenta y seis düú'


pueblos se habían acogido a la Ley; y los actos de posesión On» Lo .> ,YMI V o. . <1 ^ 0<o^

violenta, al margen de las reglas legales, pasaban de dos mil. * J


Solamente en las regiones de San Martín Texmelucan y Huejot-
zingo, estaban invadidas tierras de sesenta y tres haciendas; y sus íW O , po A M . . W Í c M ^ U , ; JL -
ocupantes sumaban, entre hombres y mujeres, cuatro mil. J

Una nueva guerra, ya no de pólvora, sino de necesidades, se W w U . a- aJí X ^ c r v ^ o _


presentaba en el horizonte. Sin alarma, pero con firmeza, el " T* r^ X U u
Presidente quiso evitarla; y al objeto envió órdenes a las autori­
dades militares, para que procedieran a dar garantías de paz y
antidespojo a los hacendados, aunque esto, no para negar el
derecho agrario al pueblo rural, sino a fin de evitar los alborotos AA/VYxO ic L ^ L o -J ([v v o v tf' ’^Ja o JA lo

y atropellos que desarrollaban en Puebla, Tlaxcala, Hidalgo, cksL , Q^v u z a a o o A/vo|-c»_/Yr\_R_j> OJ e JL a « J ! c.-*'JW>_«3

México y Michoacán; pues las peticiones y ocupaciones de cLÓ 4 <O


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tierras seguían cundiendo e internándose en otros estados.
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Estableció así el Gobierno que todo lo concerniente al
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problema agrario se desenvolviera conforme a un plan organi­
zado de autoridad, trabajo y producción, puesto que las resti­
tx rw C^vcr^A^a. ^ ^ ^
tuciones y repartimientos no tenían como único objeto dividir las

Manuscrito del general Antonio I. Villarreal


180
JOSE C. VALADES HISTORIA GENERAL DE LA REVOLUCION MEXICANA

tierras, sino proporcionar una mejoría de vida a la clase rural. Al moral que Carranza ejercía sobre los gobernadores y líderes
efecto, y funcionando ya la Comisión Nacional Agraria, con un políticos; y gracias a esa política, que aparentemente demoraba
programa definido (27 de abril, 1917), mandó Carranza que los el ejercicio de la Ley de 1915, se logró que el país reiniciara su
pueblos dotados ya de ejidos, o a los que se habían entregado economía rural. Si en aquellos días de trasguerra Carranza
tierras con carácter provisional, procedieran a elegir, por flaquea en aras de los apetitos electorales que empezaban a
mayoría de votos, los Comités Particulares Ejecutivos, que mover individuos y parcialidades, la república se habría entre-
deberían encargarse de dictar las medidas para lograr “ el mayor gado a las desesperanzas ocurridas durante la guerra.
cultivo de las tierras” .
Así y todo, el excepcional fenómeno por medio del cual la
Con excepcional prudencia, pues, quería el Presidente tratar propiedad de México tuvo un reajuste, surgiendo nuevas moda­
tan delicado asunto como el que se presentaba a la vista de la lidades y estableciendo otras relaciones entre el principio de
A—
república, con nuevas modalidades para el agro. Sin embargo, de propiedad privada y el Estado, empezó, incuestionablemente,
poco servían aquellas cuidadosas, meditadas y autoritarias ?n el regreso del país a la constitucionalidad. La paz, el orden
disposiciones de Carranza. La política estaba ya colada en el ¿sobre todo la doctrina de la voluntad popular, eje del gobierno
seno agrario, de manera que mientras los comandantes de zona, e Carranza, asociados a la inspiración creadora de la Revolu-
de acuerdo con las instruciones del Presidente, daban garantías a íi, iban a producir en México novedosos filamentos rurales
los hacendados, no para perpetuarles sus posesiones, antes a fin üe más adelante influirían en el desarrollo de las urbes.
de dar oportunidad al cumplimiento de las disposiciones legales, I ‘Entre tales filamentos, la organización de millares de comu- /
puesto que sólo dentro del orden era realizable un plan que iidades, que serían causa de una vida política y administrativa
atañía a la vida y quehaceres de un sesenta y cinco por ciento de complicada, y por lo mismo contraria a un desenvolvi-
la población mexicana; de manera, se dice, que en tanto las íbiento provechoso para el labriego pobre.
autoridades militares trataban de legalizar una situación, algunos
gobernadores estimulaban y animaban a peones, jornaleros y -SÉÍ | | El fenómeno, pues, sin dejar de ser decretado como progra-
m Jjffi..y previsión, no dejó de tener mucho de circunstancial; ahora
rancheros para que se apoderaran de terrenos y cultivos, al
tiempo que quienes se posesionaban de tierras acusaban a las |||B p de una u otra forma, no únicamente llenó una temporada
autoridades militares de proteger a los hacendados y de atentar llfffiexicana,- sino que hizo creer que la Revolución no había
contra los derechos campesinos, ‘J- tenido más fin que el de modificar el derecho de propiedad,
ando lo cierto es que sólo lo dilató bajo la dirección y organi-
Con este agrarismo político se inauguró un sistema de dema­ fmmJ p ó n que le dio el Estado.
gogia agraria, que si no hizo progresos se debió a la autoridad

182 183
n i 1 1 5 11 \\ \l 1
EL ASUNTO INFERNAL DEL PETRÓLEO 159

Calles, como Obregón, decidió asestar el primer golpe de


CALLES: AVANCES CAPITALISTAS su nueva política nacionalista contra el sector petrolero, el
mejor defendido, dejando a un lado la minería que estaba
Y RETROCESOS DICTATORIALES casi enteramente en manos de los yanquis.
Ya en junio de 1925 se traslució que el Congreso estu­
L a po l ít ic a de Calles entre 1924 y 192Z_consistió en subor­ diaba un proyecto de ley reglamentaria del Art. 27 y como
dinar el capital extranjero a los intereses nacionales tanto es natural la serie de negociaciones emprendidas, las luchas
como fuera posible, en propiciar el desarrollo capitalista me­ legales, las maniobras y las presiones que tan minuciosamen­
diante la creación de nuevos organismos oficiales, en ampliar te describe Lorenzo Meyer, fueron ascendiendo hasta alcan­
la infraestructura y en aplastar la rebeldía del clero hasta zar la línea roja del peligro.
que se lograra su total sometimiento a las leyes aplicadas con Sheffield veía —una parte de las metáforas empleadas por
la máxima rigidez. los embajadores están relacionadas a la meteorología— “nu­
En los Estados Unidos gobernaba el presidente Calvin barrones amenazadores en el horizonte” y no se trataba esta
Coolidge, un reaccionario mediocre protector de los intereses vez de un símil literario, porque los nubarrones fueron con­
capitalistas que él ligaba a los intereses supremos de Norte­ densándose y el 31 de diciembre la tempestad se anunció
américa y cuya decisión de que se respetaran en todo el mun­ cuando la Cámara aprobó la primera ley reglamentaria del
do no excluía el uso de la fuerza. Coolidge no estaba dis­ obsesivo y omnipresente artículo 27.
puesto a que sufriera la menor alteración el status logrado en Las llevadas y traídas “concesiones confirmatorias” se li­
las Conferencias de Bucareli, y su embajador, el rico abo­ mitaron a 50 años contados desde el inicio de la explotación,
gado James R. Sheffield, era no sólo el embajador de los se restringió el llamado “acto positivo” —sólo se confirma­
Estados Unidos sino el defensor intransigente de los inver­ rían los derechos “de quienes hubieran iniciado trabajos
sionistas. antes de mayo de 1917”—, volvió a imponerse la cláusula
Si el presidente Coolidge veneraba la memoria de Porfirio Calvo —el no invocar la protección de los gobiernos extran­
Díaz como el símbolo del orden y del respeto a la propiedad, jeros so pena de perder sus bienes— y no se darían nuevas
Sheffield, a semejanza de su antecesor Henry Lañe Wilson, concesiones en las zonas prohibidas, es decir en una faja
odiaba al Presidente, a quien llamaba “asesino, ladrón y costera de 100 kilómetros dentro de la cual se hallaban los
violador de su palabra de honor”, aconsejó siempre a las más ricos depósitos.
compañías petroleras que mantuvieran una actitud agresiva Calles trató de suavizar los términos de la ley aduciendo
y fue partidario de la intervención armada. Por desgracia que medio siglo significaba un tiempo suficiente para agotar
para él y su política de amenazas, Calles no tenía la debili­ los mantos o que la Suprema Corte, al resolver los juicios de
dad de Madero ni el Embajador podía apoyarse en una opo­ amparo presentados por las empresas, sería la que resolvería
sición organizada, ni en condiciones favorables que hicieran finalmente “si la ley del petróleo era o no constitucional”.
triunfar sus maquinaciones. Con todo, Kellog reaccionó violentamente. Al principio
Para terminar de ensombrecer el cuadro, figuraba en el se pensó en interrumpir las relaciones diplomáticas que Obre­
Departamento de Estado Frank B. Kellog que debería sentar gón obtuvo con el cebo de los Tratados de Bucareli y en
a México en el banquillo de los acusados, y en la Secretaría levantar el embargo de armas, lo que podría significar el
del Tesoro reinaba el monarca petrolero Andrew W . Mellon. fortalecimiento de los militares descontentos, pero finalmen-
158
160 CALLES: AVANCES CAPITALISTAS EL ASUNTO INFERNAL DEL PETROLEO 161

te se desechó la idea en gran parte debido a la oposición del obreras y cristianas se sumaron a los opositores de Coolidge.
Senado encabezada por Borah, presidente del Comité de Todo el año de 1926 estuvo lleno de alegatos jurídicos,
Relaciones Exteriores. Borah y otros senadores sostenían la de cargos, de pequeñas concesiones, de disputas senatoriales
opinión de que los Estados Unidos no debían respaldar ser­ y de amenazas del Departamento de Estado. Se discutió
vilmente las pretensiones de los petroleros, de la United de un modo enconado lo que debía entenderse por “acto po­
Fruit y de los Caballeros de Colón, lo que provocaba ten­ sitivo” o por retroactividad; Pañi, partidario de no aplicar
siones y conflictos nada favorables a la política de los Esta­ las leyes, perdió la batalla ante un Morones inflexible y
dos Unidos en América Latina, exigían la publicación de debió renunciar a la Secretaría de Hacienda; en su turno,
la correspondencia diplomática, recomendaban el arbitraje Morones fue acusado de bolchevique; los sindicatos petro­
y objetaban el empleo de la fuerza sin el consentimiento del leros, enemigos de la c r o m , tomaron el partido de las compa­
Senado, aunque el mismo Borah “insistió ante Calles en la ñías; se buscó inútilmente el apoyo de los banqueros reanu­
conveniencia de que los tribunales mexicanos apresuraran dando el pago de la deuda; los católicos norteamericanos
un fallo de las compañías pues ésta era la única forma de acusaron a Calles de desatar una persecución religiosa y soli­
evitar un serio conflicto con los Estados Unidos”. citaron la ayuda de Coolidge.
La prensa norteamericana y principalmente el W all Street Ya en aquel momento había surgido Venezuela, la pro­
Journal también acusó a Calles de ladrón y asesino, de bol­ ducción falta de [perforaciones bajó sensiblemente lo que
chevique que deseaba implantar en Nicaragua un régimen daba la impresión de un agotamiento de los mantos aceití-
comunista y de cederles Baja California a los japoneses “ri­ feros y las compañías seguían luchando por una confirmación
dicula patraña manejada con variantes durante más de 40 irrestricta de sus antiguos derechos temerosas de sentar un
años”, [22] de enemigo de Dios y de los Estados Unidos precedente que afectara las cuantiosas inversiones de los Es­
—que eran entonces una misma cosa—, de socializante em­ tados Unidos en América Latina.
peñado en destruir la propiedad y las únicas riquezas de un El 27 de noviembre de 1926 las compañías decidieron no
país atrasado y miserable. solicitar ninguna concesión y seguir trabajando, lo que era
México tuvo de su lado a los escritores liberales, a los tanto como declararse en estado de guerra. Pretendían sin
obreros y a los políticos que veían con simpatía las corrien­ duda saber hasta qué extremo podía llegar el gobierno me­
tes nacionalistas de América Latina, y su lucha por obtener xicano ante su reto y el gobierno de los Estados Unidos
mayores ventajas de sus riquezas naturales. en caso de un conflicto. Calles, temoroso de una invasión,_
El peso de estos elementos renovadores era todavía muy se concretó a ordenar la consignación de las empresas rebeldes
desproporcionado en relación al de los conservadores que ante el Procurador General de la República. A pesar de que
determinaban la política estatal, pero su fuerza no era des­ se hicieron ciertas concesiones, la a p p m acordó revocar su
deñable y con el tiempo fue creciendo hasta que la gran de­ idea de suspender sus actividades, “continuar la producción
presión pudo configurar el Nerv Deal de Roosevelt. y no detener los nuevos trabajos pese a no contar en varios
Calles no dejó de buscar el apoyo de los banqueros, otra casos con permisos de perforaciones”. El gobierno decretó
vez sin ningún resultado práctico. Algo lograron hacer sus multas y cerró las válvulas de los pozos, a lo que respondieron
enviados en los sectores progresistas y aun en los reacciona­ las empresas destruyendo los sellos y continuando el trabajo.
rios, ya que el Ku Klux Klan, enemigo de los Caballeros de La intervención del ejército proporcionó a las compañías
Colón, algunas asociaciones judías, pacifistas, campesinas, el “caso concreto” de violación a sus derechos a que Sáenz, el
162 C A L L E S : A V A N C E S C A P IT A L IS T A S F IN D E U N P E R IO D O 163

Secretario de Relaciones, había hecho referencia en sus notas documentos fueron sacados de la Embajada. Lo más plausible
como necesario para configurar un “caso de confiscación”. El es que uno de los agentes de Morones, empleado en la misión
New York Times habló de un rompimiento. Calles decidió diplomática, los haya sustraído —Portes Gil habla de “cartas
recurrir al arbitraje de La Haya y Coolidge “negó toda posi­ reveladoras de la más alta perfidia cruzadas entre Kellog y
bilidad de arbitrar los derechos de propiedad de sus conciu­ Sheffield”— lo cual no excluye, desde luego, otras versio­
dadanos”. nes novelescas a que fue y sigue siendo tan aficionado el
Como era usual desde la época de Díaz, al gobierno se le pueblo de México, pues se habla de la mujer de un funcio­
abrumaba con una multitud de cargos malévolos e infunda­ nario seducida por un mexicano —el latín lover que sabía
dos. México atentaba contra el sagrado derecho de propiedad alternar el arte de amar con el espionaje— o del puritano
de norteamericanos e ingleses; México había organizado una diplomático sublevado ante la posibilidad de una injusta ma­
cacería de católicos; México seguía una política de expansión tanza, ya que tratándose del petróleo ningún disparate debe
bolchevique; México le robaba sus tierras a los hacendados ser descartado.
yanquis sin pagarles indemnización... México, reo de tantos Cuando la invasión era “cuestión de horas”, Calles tele­
delitos, estaba sentado ante el mundo en el banquillo de los grafió a Coolidge diciéndole que le enviaba con una persona
acusados y todo indicaba que “fue en marzo y abril cuando de absoluta confianza, “documentos originales importantí­
la posibilidad de un conflicto armado se convirtió en una simos que deseaba conociera antes de que se cometiera el
posibilidad muy real”, escribe Lorenzo Meyer. crimen de invadir el territorio nacional; en la inteligencia de
que, si después de leer tales documentos, el gobierno de los
Fin de un periodo Estados Unidos seguía en su actitud de agresión contra Mé­
xico, él les daría publicidad para que el mundo juzgara
En el país, los agentes de la Embajada robaban documentos del atropello inaudito que iba a cometerse con un país débil,
oficiales lo que le permitía al Departamento de Estado obje­ que sólo trataba de defender su soberanía”. [23]
tar leyes mucho antes de que fueran promulgadas por el Con­ Los documentos nunca han sido localizados, pero la versión
greso; agentes de las empresas cohechaban a los periódicos de Portes Gil la confirma Lorenzo Meyer al transcribir una
nacionales y extranjeros, presionaban con dádivas en los juz­ declaración del Senador de Dakota del Norte, Lynn }. Frazier,
gados y hacían circular toda clase de rumores amenazantes. quien afirmó el 3 de mayo en San Francisco que los documen­
Por su parte Calles mantenía un rígido control de las ins­ tos que tenía Calles en su poder eran auténticos y constituían
talaciones petroleras a través del general Cárdenas, nombrado una prueba irrefutable de la hostilidad del Secretario Kellog
comandante militar de las Huastecas y no descuidaba ejercer hacia México.
servicios de vigilancia y espionaje. El mes de abril, Sheffield, Decidido Calles a terminar con esa pesadilla, ordenó al
al ordenar Morones la suspensión de las perforaciones, reco­ general Cárdenas incendiar las instalaciones petroleras tan
mendó a W ashington el empleo de una acción directa —tenía pronto desembarcaran los primeros marinos —Portes dice ha­
la certidumbre de que Calles llegaría tan lejos como se lo ber recibido las mismas órdenes— y el gobierno se dispuso
permitieran los Estados Unidos— y posiblemente obraban en a soportar una nueva agresión. Lejos de ello, se retiró Shef­
su poder documentos y planes de una invasión armada que field y el presidente Coolidge nombró embajador al promi­
lograron llegar a manos del Presidente. nente abogado Dwight Morrow, banquero de la casa Morgan
Hasta la fecha, constituye un misterio la forma como esos y compañero suyo en la Universidad de Amherst. Washington
164 C A L L E S : A V A N C E S C A P IT A L IS T A S U N E S T A D O F U E R T E , P R O M O T O R D E R IQ U E Z A 165

pensaba que una política de negociaciones daría mejores re­ Pañi nulificó el ruinoso convenio De la Huerta-Lamont,
sultados que la línea dura seguida hasta entonces. Por lo alegando su incumplimiento por parte de los banqueros ex­
demás, la situación de México también había cambiado. El tranjeros y “los fondos que en 1924 pudieron haberse usado
periodo de Calles se acercaba a su fin y se debía pensar en para el pago de la deuda —escribe Dulles— se utilizaron
los eternos problemas que suscitaban las elecciones presi­ para licenciar tropas, pago de empleados, construcción de pre­
denciales complicadas con la guerra religiosa librada desde sas y carreteras”.
1927. La enmienda que Pañi negoció posteriormente redujo casi
a la mitad la deuda exterior de México, y entre otras venta­
jas tuvo la de restablecer el crédito externo inexistente al
Un Estado fuerte, promotor de riqueza
ocupar Calles la presidencia. Pañi no dejó de provocar un
Los primeros años del gobierno de Obregón, y aun en cierto pequeño escándalo durante su estancia en Nueva York. Acu­
modo los de Carranza, se habrían de caracterizar por una sado de violar la Ley Mann —prohibición de trasladar mu­
serie de avances que se juzgaban notables a causa de la ruina jeres de un Estado a otro con fines inmorales—, ante la
y la postración del país. Calles no fue una excepción. “Todos protesta de las cámaras, se sintió obligado a presentar su
los esfuerzos de la nueva administración —declaró en 1925— renuncia. Calles preguntó a los diputados si les sería agra­
serán dirigidos más que a ninguna otra cosa a equilibrar el dable tener un gabinete presidencial de eunucos y ante esta
presupuesto. Es imperativo que la nación se acostumbre a consagración oficial del machismo, el vituperio se transformó
vivir de sus propios recursos sin recurrir a la ayuda del ex­ en alabanza.
terior.” ' liiqjilj El mediocre general y antiguo maestro de escuela, al mo­
Señalaba un objetivo preciso de gran importancia ya que verse en otros campos que le eran ajenos, demostró una ca­
con harta frecuencia se había vivido de los préstamos exte­ pacidad desconocida para sus antecesores. Fundó ese mismo
riores, única forma de cubrir un déficit siempre-creciente. año de 1925 la Comisión Federal de Caminos y la Comi­
Al hacerse cargo del gobierno, el déficit alcanzaba los 60 sión Federal de Irrigación, dos organismos básicos en un país
millones. Calles lo redujo a 40 y cuando terminó su gestión mal comunicado, de ríos torrentosos y áridas tierras necesi­
lo había eliminado enteramente reduciendo los gastos y me­ tadas de agua. Se ayudó mucho a las nuevas haciendas y
jorando radicalmente el sistema de impuestos. ranchos de los generales, en quienes se había despertado una
El 31 de agoste de 1925, Calles inauguró el Banco de incontenible pasión agrícola, y al mismo tiempo repartió
México, el único banco de emisión autorizado, donde el go­ 2 millones 600 mil hectáreas, levantó ocho escuelas de agri­
bierno retenía la mayor parte de las acciones y en 1926 se cultura para hijos de ejidatarios y si Vasconcelos trató de
creó la Comisión Nacional Bancaria. Estas dos medidas ter­ establecer mil escuelas rurales, Calles, en 1928, dejó 3 mil
minaron con el caos financiero dándole al gobierno una pre­ trescientas.
ponderancia como promotor de la economía nacional. Mas- Sobre estos logros descansa la reputación de estadista con
careñas, el director del Banco, dijo en su inauguración que que Plutarco Elias Calles pasaría a la historia. Al estimular
debería llamarse Banco Amaro gracias a los ahorros logrados la economía, sanear las finanzas, restablecer el crédito e ini­
por el Secretario de Guerra en los gastos del ejército. Ese ciar seriamente las obras indispensables de infraestructura,
mismo año la aceleración del reparto agrario demandó la for­ el general sonorense diseñó un modelo de país moderno con
mación del Banco de Crédito Ejidal. la activa participación del Estado. Fue el suyo un gobierno
T T T T F in n r

166 CALLES: AVANCES CAPITALISTAS EL CONFLICTO RELIGIOSO 167

destinado a promover el desarrollo capitalista de México sin los artículos 39, 59, 27 y 130 de la Constitución vigente. Este
desdeñar el problema campesino. criterio no podemos, por ningún motivo, variarlo sin hacer
En un país privado de capitales, Calles le otorgaba al Es­ traición a nuestra fe y a nuestra religión.”
tado el papel de principal promotor de la riqueza, y por lo En realidad, el conflicto que venía gestándose desde 1917,
tanto, debía ser un Estado fuerte capaz de mantener el con­ con las imprudentes afirmaciones de Mora y del Río esta­
trol de la política, de la economía, de los obreros, de las na­ lló con violencia.
cientes organizaciones campesinas y de un ejército cada vez Carranza, según hemos visto, ante el peligro de una güe­
más profesional. ña religiosa prefirió mantener el modus vivendi imperante y
el mismo Obregón no aplicó rigurosamente las leyes, si bien
El conflicto religioso de ambas partes hubo provocaciones y motines. En 21, los ra­
dicales plantaron la bandera rojinegra en lo alto de la Ca­
El 7 de enero de 1926 el prestigiado diario El Universal pu­ tedral —un símbolo tan sagrado del poder eclesiástico como
blicó una noticia donde el anciano arzobispo de México, Mora lo era el Palacio del poder político—, hicieron estallar una
y del Río, declaraba que el episcopado emprendería una cam­ bomba frente a la casa del Arzobispo y otra en el mismo
paña contra cualquier intento de aplicar los artículos lesivos altar mayor de la Basílica que causó graves daños, sin tocar
de la Constitución. Calles, en respuesta al desafío, le orde­ la imagen de la Virgen de Guadalupe. Este hecho aumentó
nó a Pañi aplicarlos al pie de la letra sin hacer caso a la el número de sus milagros ya de por sí infinito y la irrita­
sugerencia de su Secretario de Hacienda “de que fuese pri­ ción de los católicos.
mero verificada la autenticidad de las declaraciones del Ar­ En 23, los católicos organizaron una gran concentración
zobispo”. [24] de fieles en el cerro del Cubilete, para colocar la primera
Estas declaraciones las había formulado Mora y del Río piedra del monumento a Cristo, proclamado Rey de México,
nueve años antes, al proclamarse la Constitución de 1917, y a la que asistió el nuncio apostólico Ernesto Filippi. El go­
el periodista las exhumó de manera irresponsable. Al esta­ bierno lo expulsó del país y ordenó la suspensión de la obra,
llar el escándalo, el periodista, temeroso de perder su traba­ lo que no evitó que al año siguiente se celebrara un solem­
jo, se entrevistó con el Arzobispo y le preguntó: “¿Lo que ne congreso eucarístico en el cual se hicieron patentes el fer­
dijo Su Ilustrísima en 1917 no es verdad en 1926?” El Ar­ vor religioso del pueblo mexicano y el poco aprecio del clero
zobispo ante la gran sorpresa del reportero, contestó rotun­ a los mandatos constitucionales. En 25 también, el fanático
damente: “La doctrina de la Iglesia es invariable, porque es gobernador de Tabasco, Garrido Canabal, ordenó que sólo los
la verdad divinamente revelada. La protesta que los prelados sacerdotes casados podían oficiar en las iglesias; Calles, por
mexicanos formulamos contra la Constitución de 1917 en los su parte, fomentó el cisma de un pobre diablo llamado el
artículos que se oponen a la libertad y dogma religiosos, se Patriarca Pérez, y le cedió la céntrica iglesia de Corpus Christi.
mantiene firme. No ha sido modificada, sino robustecida, Semejante cúmulo de alardes y de infamias hicieron per­
porque deriva de la doctrina de la Iglesia. La información der la paciencia del Arzobispo. Mora y del Río no compren­
que publicó E l Universal de fecha 7 de enero, en el sentido día el carácter de Calles —se sentía el cruzado del anticato­
de que emprendería una campaña contra las leyes injustas licismo— ni la relación de fuerzas existentes. Por lo demás
y contrarias al Derecho Natural, es perfectamente cierta. El el reto se produjo cuando el gobierno enfrentaba en el inte­
episcopado, clero y católicos, no reconocemos y combatiremos rior los eternos problemas de las elecciones y en el exterior
i—

168 C A L L E S : A V A N C E S C A P IT A L IS T A S ESCENAS EJEMPLARES DE LA GUERRA 169

la ofensa combinada de W ashington y de las compañías pe­ lo cual originó que unos campesinos, vestidos de soldados,
troleras. combatieran a otros campesinos reaccionarios y tenaces oca­
El clero no podía soportar un cisma, por insignificante que sionando nuevas muertes y nuevas destrucciones.
se le supusiera, ni mucho menos la aplicación rigurosa del No había nada semejante a las batallas de Torreón o de
registro obligado de los clérigos, el cierre de sus escuelas, la Zacatecas. Se trataba de pequeños encuentros donde preva­
expulsión en masa de los sacerdotes extranjeros, la restric­ lecía un lenguaje y se sucedían algunos horrores que serían
ción arbitraria del número de oficiantes en toda la Repúbli­ cómicos si no fueran la consecuencia de una mentalidad for­
ca y el Comité Episcopal, en respuesta a las medidas callis­ mada a lo largo de los siglos.
tas, se opuso al registro y ordenó la suspensión de todos los
servicios religiosos. Por primera vez en la historia de Méxi­
Escenas ejemplares de la guerra
co las iglesias aparecieron cerradas. La vida, carente de su
centro espiritual, se vaciaba de sentido para un pueblo mi­ El 8 de octubre, el general Jesús Degollado Guízar, al dispo­
serable al que no sólo se le arrebataban los consuelos de su ner la toma de un pueblecillo de Jalisco, les hablaba a sus
religión, sino que lo ponían en peligro de perder su alma. tropas empleando este lenguaje: “El 19 de septiembre de­
Tenía la conciencia de que se estaba cometiendo una injus­ dicamos la batalla de Juchitlán al Señor San José; el 29 del
ticia atroz y se lanzó a tomar las armas. mismo mes la dedicaremos al Señor San Miguel; la batalla
Al menos los zapatistas fueron campesinos que conservando que emprenderemos dentro de unas horas la dedicaremos a
su profunda fe religiosa defendieron su derecho a la tierra la Inmaculada Concepción, Madre de Dios; si los otros con­
y a la dignidad humana en contra de los rapaces hacendados siguieron que Dios nos diera el triunfo, con más razón la
de Morelos y esta defensa constituyó —sin ser conscientes de Santísima Virgen que después de Dios no hay nadie como
ello— una renovación espiritual, ya que no puede concebirse Ella. Si cumplimos como buenos, yo les ofrezco en nombre
el cristianismo amputado de la dignidad del hombre y de de la Inmaculada, que la plaza Unión de Tula, con todo
sus derechos esenciales a la vida. y que esté afortinada, caerá en nuestras m anos. . . y ahora
Los campesinos de Jalisco, Michoacán, Colima, Guanajua­ todos a sus puestos a cumplir con su deber.”
to, carentes de un ideal agrario, estaban aliados a los hacen­ Los dioses tribales habían sido sustituidos por los santos
dados y al clero rural —parte de las viejas estructuras— y patrones de sus pueblos y Cristo y la Virgen eran sus guías
no tenían otra cosa que oponer al fanatismo de Calles que y sus protectores supremos. El antiguo sentimiento religioso
su elemental fanatismo. nunca extinguido en ellos se alimentaba de su miseria y de
Roma no era partidaria de la guerra sino de la transacción las represiones gubernamentales, lo cual explica que la Cris-
y esta política llegó a imponérsele a los obispos más comba­ tiada no pudiera ser vencida. Guerrilleros dotados de una
tivos y responsables de la matanza. La clase media ayuda­ fe sobrenatural, sus pequeñas victorias y aun sus derrotas, las
ba enviando armas pero nunca se atrevió a sublevarse, de veían como signos evidentes del favor divino. El 28 de oc­
modo que los “cristeros” debieron combatir solos por la salva­ tubre, Degollado Guízar quedó atrapado en el pueblo de Eju-
ción de sus propias almas. tla y bajo el fuego de las ametralladoras, sus cruzados, a pe­
Calles, a su vez, nunca entendió que una revolución inca­ sar de que los jefes, pistola en mano, trataban de contener
paz de darle las tierras y los créditos necesarios a los campe­ la desbandada, gritaban remontándose a los cerros: “Éste es
sinos debía respetar su religión y se mantuvo intransigente, el Día del Juicio.”
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En efecto, había llegado el día del Juicio. La batalla, si­ escapan de la amarga realidad por la puerta de lo sagrado y
guiendo los rituales, principió con un sermón y una misa ofi­ de la embriaguez.
ciada por el sacerdote Rodrigo Aguilar donde los guerrilleros De cualquier modo los campesinos debían seguir igual des­
comulgaron, lo que suponía extenderles un pasaporte celes­ pués de su derrota y la única beneficiaría de aquella matan­
tial a cambio de sus heroicas muertes. En el momento del za fue la Iglesia mexicana. El exilio, la persecución, el des­
evangelio o la elevación, banderas y estandartes, se abatían pojo de sus amados bienes le ganó una cierta respetabilidad
barriendo el suelo, ante la presencia de lo sagrado, lo que al permitirle salir de su mediocridad egoísta, a pesar de su
no impidió su derrota ni que el intérprete de los dioses fue­ claudicación. Al no aspirar más al poder material y espiritual
ra llevado a la plaza y ahorcado de un mango. Tres veces hegemónico, debió resignarse al niodus vivendi establecido
lo izaron y tres lo bajaron preguntándole los soldados a cada desde el porfirismo. De tarde en tarde las instituciones re­
descendimiento: “¿Quién vive?” La última vez, el sacerdote quieren nuevos mártires, nuevos sacrificios y nuevas lecciones
moribundo pudo decir con voz estrangulada: “Viva Cristo para sobrevivir. Con todo, la Iglesia, mientras Calles ocupara
el poder, no dejaría de luchar como la única forma de no
Rey y Santa María de Guadalupe.”
quedar enteramente subordinada al Estado.
Estas escenas, multiplicadas, caracterizan el espíritu con Calles, retraído, adusto, impenetrable, era el polo opuesto
que se llevó la guerra. Uno de los sobrevivientes que entre­ de Obregón. Había crecido a la sombra del Caudillo y pri­
vistó Jean Meyer, el panegirista de la Cristiada, habló sobre vado de su encanto personal y de su flexibilidad, nunca lo­
“la manera ejemplar con que se desarrollaron estos aconteci­ gró inspirar simpatías en el pueblo. No gozaba tampoco de
mientos y cómo cada uno de ellos constituye un milagro buena salud a despecho de su sólida armazón, pues antes
misterioso, a fin de que quede patente que es la mano de de cumplir los 50 años estaba lleno de achaques y le decían
Dios la que aplasta a las potencias del error que creen en “El Viejo”. Se le creía un radical intransigente, un persegui­
Belial y se alejan de la verdad”. dor de los católicos, un satélite privado de luz propia que
Para desventura de estos cruzados de la fe triunfó Belial y reflejaba la gloria del invencible general y tal vez a conse­
la mano de Dios no aplastó las potencias del error. La vo­ cuencia de estos obvios contrastes los dos hombres se com­
ladura de trenes, el desorejamiento de maestros, el asesinato, plementaban.
no constituyen hechos ejemplares ni milagros misteriosos. El Obregón confiaba instintivamente en la lealtad de Calles
lenguaje de los campesinos es el lenguaje del llamado ge­ a pesar de que nunca llegó al fondo de su misterioso carác­
neral Jesús Degollado Guízar que mandaba a la muerte en ter; en cambio, Calles sí logró entenderlo y en cierta medi­
nombre del Señor San José, del Señor San Miguel o de la da manejarlo. Obregón, además, fue el hombre de la suerte.
Inmaculada Concepción. Por primera vez un pueblo adora­ Su talento militar, su astucia, su humorismo —una cualidad
dor de Cristos muertos —no puede estar vivo un Cristo que siempre muy apreciada en México por su rareza—, lo hicie­
presencia tanta infamia cometida contra sus hijos— grita ron triunfar desde muy joven. Para Calles, la vida fue amar­
“Viva Cristo Rey”, pero este grito no representa su resurrec­ ga y difícil. Nunca brilló en la guerra y fue elevándose con
ción sino la muerte y la ruina. Corresponde a un México grandes esfuerzos, terco e inconmovible, siempre de algún
de procesiones, de cohetes, de repiques de campanas, de imá­ modo subordinado a la gran figura del momento, fuera Ca­
genes erguidas sobre sus andas, de beatas malignas, curas bu­ rranza, De la Huerta o el general Obregón.
rocráticos, hacendados lujuriosos y peones humillados que se Obregón le permitió gobernar sin perderlo de vista y sin
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quitarle de encima su única mano. Gran parte de su tiem­ emprendieron la peregrinación obligada a Cajeme. Serrano
po lo pasaba en Cajeme, dedicado a construir un enorme im­ era hechura de Obregón que lo veía como a un hijo. No se
perio agrícola, lo cual le permitía que la gente lo siguiera había distinguido en la guerra ni a causa de sus ideas sino
viendo como el prototipo del hacendado progresista, aunque por sus derroches inauditos, su simpatía humana y su clara
por supuesto, nunca pensó dedicarse íntegramente a la agri­ inteligencia.
cultura. Una mayoría absoluta de diputados y gobernadores Se ignora lo que hablaron el grande y el pequeño gene­
le fue adicta. Era el jefe del ejército y a semejanza del dic­ ral. Quizá Obregón toleró su entrada en la campaña para
tador Santa Anna cuando se retiraba a su finca de Manga tener un opositor y demostrar que un amigo suyo podía
del Clavo, generales y políticos lo visitaban en su hacienda aspirar a la presidencia, el caso es que al regresar Serrano
de Sonora o él venía a México y se entregaba de lleno a la publicó un manifiesto conciliador. No conocía a su Jefe, ni
política. Casi no hay dudas de que Obregón impuso a Ca­ supo entender que el antiguo afecto se había trocado en un
lles con el propósito de que modificara la Constitución y él sentimiento de rencor y desprecio.
pudiera ocupar nuevamente la presidencia. Sin embargo, re­ Gómez era cruel, sobrio y metódico, arrogante y necio.
elegirse significaba destruir uno de los postulados básicos de Sus grandes bigotes alzados y retorcidos le daban la aparien­
la Revolución que aún se mantenía de pie, provocar la cóle­ cia de un alacrán y naturalmente no impresionaron al Cau­
ra de los ortodoxos y despertar las ambiciones diferidas de dillo. Lo trató fríamente y Gómez emprendió su campaña
los generales. Para la gente la reelección no suponía un cam­ adoptando como himno Las cuatro milpas, una canción de
bio o una apertura porque en su imaginación los dos sono- moda que describía entre ayes de dolor la ruina del campo
renses eran la misma cosa y sólo resultaba una cuestión de y pronunciando discursos contra los prevaricadores de la Re­
matices saber quién era más duro o menos blando, quién volución para quienes solicitaba “tres metros de tierra”, sin
más rígido o menos flexible. Así pues, al binomio Obregón- reflexionar que de cumplirse su deseo los cementerios ocu­
Calles se enfrentaban los defensores del antirreeleccionismo, parían una parte considerable del país.
algunos generales y los católicos, quienes por un error de A finales de septiembre se fue precisando el rumor de que
perspectiva veían en Obregón al verdadero instigador de la Serrano y Gómez proyectaban rebelarse. El cuartelazo, que
lucha religiosa. significaba extremar su oposición al obregonismo, era un
La elección no debería dirimirse fuera del gobierno, sino acto de locura suicida, explicable teniendo en cuenta la am­
dentro, y principalmente entre los generales del ejército, los bición de los generales, su indiferencia a los sufrimientos
únicos candidatos posibles, teniendo en cuenta la relación de del pueblo y aquella propensión de jugarse la vida a una
fuerzas existente. Los núcleos obreros y los campesinos or­ carta creyendo en el milagro.
ganizados estaban sujetos al control del Estado y sólo una El día 2 de octubre lo que venía gestándose estalló de
pequeñísima fracción de políticos independientes había logra­ pronto. Varias guarniciones estacionadas en Balbuena al man­
do constituir el Partido Antirreeleccionista que habría de apo­ do del general Héctor Almada se sublevaron abandonando
yar no a un civil sino al general Amulfo Gómez, antiguo la ciudad y con ellos desaparecieron Gómez y Serrano. Éste
amigo y colaborador del general Calles. El otro opositor de­ no fue muy lejos. Ese mismo día esperaba tranquilo en
finido era el general Francisco Serrano ex secretario y amigo el Hotel Principal, de Cuernavaca, acompañado de trece ami­
íntimo de Obregón. gos suyos, las noticias sobre el “éxito de su golpe”. El hecho
Los dos generales, antes de embarcarse en aquella aventura, de que se exhibiera despreocupadamente con sus compañe­
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ros de rebelión y en vez de encabezar a las tropas sublevadas a Díaz escribió en el margen; “Ejecute a los prisioneros y
se entregara a su pasatiempo favorito de apurar innumera­ conduzca los cuerpos a ésta.”
bles copas de coñac, demuestra su total irresponsabilidad, El propio Amaro salió fuera con él y lo llevó hasta su auto­
su inocencia o al menos su mínima participación en el cuar­ móvil, un Lincoln azul, rodeado de oficiales que habrían
telazo. de acompañarlo, recomendándole el cumplimiento exacto de
Allí fue aprehendido sin ofrecer resistencia por el Goberna­ las órdenes recibidas.
En la Piedad aguardaban 50 artilleros y 18 “fotingos” que
dor de Morelos y no por el jefe de las Operaciones Militares,
el oronel Medina había alquilado o requisado. La comitiva
posiblemente su cómplice, y llevado a la cárcel mientras se for­
se puso en marcha. Los autos, destartalados, subían trabajosa­
maba un Consejo Extraordinario de Guerra que debería enca­
mente las empinadas cuestas de la cordillera y se detenían
bezar el general Gavira, Presidente del Tribunal Superior
con frecuencia porque se les reventaban las llantas o se les
Militar.
calentaba exageradamente el motor.
Al saberse la sublevación, el general Obregón abandonó su Cerca del pueblo de Huitzilac, Fox encontró la caravana
casa de la avenida Jalisco y se reunió con el presidente Calles que conducía a los 14 conjurados. Venían en tres autos y dos
en el Castillo de Chapultepec. No durmieron planeando la coches postales escoltados por 100 soldados que marchaban
contraofensiva de la sublevación que se extendía imprecisa por a pie. Fox le mostró la copia del telegrama a Díaz y éste le
Torreón, Zacatecas o Pachuca. exigió un recibo por la entrega de los presos, a lo que se negó
El general Claudio Fox, Jefe de las Operaciones de Gue­ Fox diciendo que bastaba con la orden del Presidente.
rrero, hallándose casualmente en la ciudad de México, se pre­ Bajaron llevando las manos atadas a la espalda con alam­
sentó en el Castillo a las 5 y media de la mañana del día 3 bres, menos obviamente Augusto Peña, a quien le faltaba
para “recibir órdenes’’ y encontró al Presidente, a su yerno un brazo por lo que le decían el “Manquito Peña”. Serrano
Fernando Torreblanca, al general Obregón, al general Amaro, “sonriente y fatalista” le preguntó a Fox sobre el levantamien­
Secretario de Guerra, y al general José Álvarez, Jefe del Estado to de las tropas y las órdenes que traía.
Mayor, tomando café en una sala baja del Castillo. —El levantamiento no tuvo importancia —respondió
Calles le ordenó que esperara. A esa hora, llegaban los Se­ Fox—. Tengo órdenes de conducirlos a la ciudad de México.
cretarios de Estado y la frescura del amanecer, el canto de Le faltó valor para decir la verdad. Fox no era un soldado
los pájaros y el ramaje iluminado de los ahuehuetes surgiendo vulgar. Plabía estudiado en la Universidad de Tucson y en
de las nieblas formaba un contraste impresionante con aquel Pennsylvania mecánica y electricidad, carrera que interrumpió
grupo de hombres desvelados que bebían café y fumaban el cuartelazo de Huerta. Siendo originario de Sonora, entró
tomando decisiones. muy joven a la Revolución y había ido ascendiendo paso a
Un poco después, el Presidente llamó a Fox y le dio ins­ paso hasta lograr los laureles del generalato sin matar a nadie
trucciones. Se había ordenado al general Enrique Díaz, por “con su propia mano”. “Comprendía —confesó más tarde—
medio de un telegrama, que trajera a los presos de Cuerna- la terrible responsabilidad que pesaba sobre mí en aquellos
vaca, y los entregara a Fox en alguna parte del camino. Lo momentos horribles. Me sentía agobiado. No quería cumplir
acompañarían 50 artilleros que ya lo estaban esperando al la orden fatídica. Sentía repugnancia pero no podía eludir su
mando del coronel Nazario Medina en el vecino cuartel de cumplimiento y ni siquiera discutir el mandato recibido di­
la Piedad. Antes de entregar la copia del telegrama enviado rectamente del jefe del gobierno constituido... Reflexioné
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sobre la triste condición de un soldado que tiene que cumplir Volvió a reinar el silencio y de pronto, sonó otra ráfaga
una amarga tarea. Vacilé. En mi pecho se desarrollaba una aislada de disparos. Fox perdió el resto de su cordura. Le
intensa pugna interior; se me presentó con diáfana claridad pidió a Medina averiguar “de qué se trataba”, pero no pudo
el conflicto de poderes.” contenerse y lo siguió.
Los sentenciados esperaban, reposados y sonrientes, sabien­ Serrano yacía en el suelo, muerto ya, despojado de uno de
do la suerte que les aguardaba. Uno de ellos, el licenciado sus zapatos. Fox, delirante, amenazó con fusilar a los oficia­
Martínez de Escobar, llamado por su elocuencia “Lengua les y soldados culpables del recién iniciado saqueo. De la
de Plata”, se dirigió a Fox: sombra saltó el zapato faltante cayendo a los pies del general.
—Señor general, permítame usted que dirija la palabra a Medina informó sobre la causa de los últimos disparos.
los soldados para arengarlos. Al subir los cadáveres a los autos, un oficial advirtió que su­
—A los soldados sólo podemos hablarles sus jefes. maban 13 y preguntó en voz alta por el preso que faltaba.
—Yo soy ciudadano y tengo derecho de hablar —argüyó De la oscuridad del monte surgió una afirmación arrogante:
exaltado “Lengua de Plata”. —El preso que falta soy yo.
—Usted será lo que quiera, pero usted no puede hablar. Las ametralladoras Thompson se volvieron hacia el sobre­
Insistió Martínez, pidiendo la intervención de Serrano. viviente —un licenciado Villa Arce—, que murió al instan­
—No se puede. Ya ves lo que te contestó Fox —conclu­ te. Pudo haber escapado a través del bosque y prefirió reunir­
yó el general. se con los suyos en un gesto de orgulloso desprecio, tan in­
“La rueda dentada que giraba en el cerebro enloquecido” necesario y desmesurado como el saqueo interrumpido y la
de Fox, seguía marchando. Caía la noche y era necesario de­ lucha interior de Fox. La rueda dentada que giraba adentro
cidirse. El general ordenó entonces que un oficial, acompa­ de su cerebro era sólo una parte de la maquinaria de muerte
ñado de tres artilleros “fusilara” a cada prisionero al lado que transformaba a los soldados y a los oficiales en meros au­
de un auto, respetándoles la cara, sin “hacer carnicerías, ni tómatas de una matanza que les era incomprensible.
saquearlos”, es decir sin ensañarse en los agonizantes y en El Lincoln de Amaro, ocupado por Fox y Medina, enca­
los muertos, como era la costumbre, mientras la tropa se des­ bezaba el desfile de regreso. En cada auto iba sentado un
plegaba al borde de la carretera. muerto acompañado de los soldados y del oficial que había
No quiso contemplar la ejecución. Se alejó más de un ordenado su aniquilamiento. No sabemos lo que irían pen­
kilómetro arrastrando consigo al coronel Medina y aguardó. sando los victimarios, en el largo trayecto. Martín Luis Guz-
En eso, llegó un auto con los faros encendidos. Fox le cerró mán cierra su libro con el episodio novelesco de un general
el paso. Eran agentes de la policía secreta que iban a Cuer- que al día siguiente de la matanza se presentó en la mejor
navaca al mando de su jefe. joyería de México, compró brillantes por un valor de 20
En el silencio de la alta montaña se desató una tempestad mil pesos y pagó con un fajo de billetes manchado de sangre.
de disparos. El jefe de la policía, ignorante de lo que ocu­ En aquella otra noche mexicana todo era posible. Fox se
rría, comentó: ampara en la obediencia del soldado a sabiendas que se tra­
—Serán cohetes de un pueblo de indios que celebran al­ ta de un crimen, decreta el ametrallamiento sin carnicerías
gún santo. y los hace pedazos, prohibe el despojo y un minuto después
Fox, ausente, se limitó a contestar: ya le han robado un zapato a Serrano. Los homicidas de­
—Probablem ente... ben ir al lado de los que ellos han masacrado, manchados
B

178 C A L L E S : A V A N C E S C A P IT A L IS T A S E L M IT O 179

con su sangre y nadie es capaz de entender por qué han dis­ los fusilamientos y sus entierros llenaban los periódicos. Se
parado contra aquellos hombres indefensos y ahora van dan­ pensó que la guadaña respetaría a Serrano, pero en Obregón,
do tumbos a la luz de las estrellas, por los oscuros caminos a partir del levantamiento de Adolfo de la Huerta, se extin­
de la serranía. guió todo sentimiento de misericordia. Había engordado, sus
A la una de la mañana, la caravana cruzó la ciudad dor­ ojos verdes perdieron su antiguo destello malicioso, lo in­
mida y se detuvo finalmente al pie de la colina de Chapul- vadió el pesimismo y confusamente se creía un emplazado
tepec. Fox entró al Castillo. Allí estaban como siempre Obre­ a muerte. Paradójicamente Obregón era el máximo represen­
gón y Calles. El general informó: tante del ejército, su más brillante caudillo y al mismo tiem­
—Señor Presidente, sus órdenes se han cumplido. Abajo, po, su ángel exterminador.
en el bosque, aguardan los cadáveres de los 14 prisioneros. Al liquidarse el ejército federal surgió un nuevo ejército
Calles tomó la copia del telegrama que le entregaba Fox mucho menos cruel y estúpido aunque no logró sobreponer­
donde había escrito la sentencia y la rompió lentamente. Des­ se a las tentaciones de una sociedad a medias feudal, a me­
pués ordenó al general Enríquez Osornio que llevara los muer­ dias capitalista, y se fue corrompiendo de un modo inevitable.
tos al Hospital Militar para hacerles la autopsia. Obregón A Serrano, según dijo Obregón, le había ordenado viajar
permanecía inmóvil y silencioso. por Europa con el propósito de “regenerarlo” y volvió más
tahúr, más borracho y más mujeriego de lo que ya era. No
El mito podía entregarle el gobierno a un hombre que lo convirtiera
en una incesante juerga ni tampoco evitar que figurara en
Los rituales secretos que celebraban los sacerdotes supremos las elecciones, pero su ridículo alzamiento lo enfureció y con
trascienden de algún modo y el pueblo se apresura a rein­ la complicidad de Calles decretó su extinción.
ventarlos creando su propia mitología. Se recordó de un modo A Gómez lo consideraba simplemente un imbécil. Hom­
inconsciente el célebre episodio donde Benito Juárez se pre­ bre de Calles, había ocupado elevados puestos y fue uno de
sentó una noche a la iglesia en que yacía la momia ennegre­ los causantes del acoso a De la Huerta, de su fuga y de la
cida de Maximiliano y después de contemplarla exclamó: gran matanza de 1923. Responsable esta vez de un nuevo
“Era más bien pequeño”. Con este elemento, imaginó un cuartelazo dirigido contra sus viejos amigos sólo era un trai­
primer mito: Obregón, a la mañana siguiente, apareció en dor que no podía esperar de ellos ninguna generosidad.
la morgue del hospital, miró también un momento el cadá­
ver de Serrano y al dirigirse a la puerta volvió bruscamente
y sacudiendo el pelo alborotado de su compañero, como si A nuevas rebeliones, nuevas claudicaciones
fuera el de un querido muchacho rebelde, abandonó el es­ Antes que cayera Gómez y cuando las llamas del conflicto
cenario. Otro segundo mito enteramente popular hace de­ religioso se avivaban, el 23 de octubre, en un país agitado
cir al maestro de las burlas frente al hijo aniquilado: “Ésta por las revueltas, llegó a la estación de Colonia el nuevo
es tu cuelga”, porque precisamente ese día se celebraba el embajador de los Estados Unidos, Mr. Dwight W . Morrow
santo de Francisco Serrano. a bordo del Marco Polo, un palacio blindado, de acuerdo con
La espada de Obregón, transformada en una guadaña —se­ las crónicas, que sólo sufrió una detención, no a causa de los
gún las metáforas acuñadas entonces—, segaba cabezas de ge­ alzados, sino de la fuga del terrier Doffin, propiedad de la pe­
nerales y oficiales por toda la República y los avisos de queña hija del embajador.
----- — bmhmhbbbbBBBB

180 CALLES: AVANCES CAPITALISTAS NUEVAS REBELIONES, NUEVAS CLAUDICACIONES ' 181

Se especuló mucho sobre la personalidad de Morrow y lo en 1921 que parte del artículo 27 no era retroactivo si se
cierto es que entre los augurios, los análisis y los presenti­ hubiera realizado un “acto positivo”. Calles preguntó enton­
mientos entonces vertidos, el único acertado partió del humo­ ces si un fallo favorable en ese sentido facilitaría el arreglo
rista W ill Rogers, cuya visita a México estaba anunciada, y de los puntos fundamentales y como el embajador afirma­
apareció publicado en el New York Times. “La diplomacia ra que salvaría los mayores obstáculos, el Presidente prometió
de Mr. Morrow —escribe Rogers— empezó desde luego, real­ que el fallo sugerido podría dictarse en poco tiempo.
mente desde el momento que se le puso dentro del carro Entre la llegada de Morrow y el fallo favorable de la Su­
blindado en la frontera. Estos chicos ex Morgan, general­ prema Corte hecho púbico el 17 de noviembre, ocurrió tal
mente pueden y saben cuidarse ellos mismos. Si el tren en cúmulo de fusilamientos, atentados, conspiraciones y revuel­
que viaja el embajador fuera detenido por algunos bandidos, tas, infamias y sucesos grotescos que por sí solos describen
apuesto cualquier cosa a que éstos saldrían perdiendo si en­ la atmósfera dentro de la cual se produjo el cambio aparen­
tablaban alguna transacción financiera con su víctima. Si temente inexplicable de Calles acerca del problema petrolero.
las cosas llegaran a lo peor, Morrow les contrataría un em­ En Pachuca, se fusiló al general Arturo Lazo de la Vega,
préstito y les tomaría las carabinas y los caballos como ga­ “poeta y maderista”; en Zacatecas, a los generales Rodríguez
rantías prendarias y colaterales. Éstas son horas angustiosísi­ y Olvera; cerca de Torreón cayó el general Lastra y se dio
mas para la vieja Universidad Amherst; pero en todo caso, muerte a Vidal, gobernador provisional de Chiapas y al dipu­
Calvin Coolidge sabrá sostener a sus condiscípulos. Y es tado Alfonso Paniagua; el 6 de octubre, en Sonora, fueron
lástima que no haya guerra a la cual pueda mandarlos. Si borrados del mapa tres nuevos generales y en la Prisión de
Dwight Morrow se sale con la suya en México, de buena Santiago Tlatelolco fusilaron a un ex general, al coronel Ba­
manera, lo propongo como primer embajador en Rusia.” rrios Gómez y al general Alfredo Rueda Quijano por órde­
El 29 de octubre, Morrow presentó credenciales al Presi­ nes de un Consejo de Guerra. El licenciado Véjar Vázquez,
dente entre mutuas y esperanzadas afirmaciones de solucionar agente del Ministerio Público, cuando solicitó para ellos la
los asuntos pendientes sobre “bases de indeclinable dignidad pena capital declaró ante los periodistas que el gobierno “no
y respeto”, y el 3 de noviembre, Calles le envió su auto­ ha pensado proceder con mano de hierro ni ha querido aga­
móvil al embajador y tuvo con él una conversación de cua­ rrotar las conciencias ni las gargantas, ni , en estos momentos
tro horas en su hacienda de Santa Bárbara. Allí, según se trágicos suprimir una vida sin juzgar”. Rueda, antes de mo­
traslució, Calles adelantándose a una nueva entrevista que de­ rir valerosamente, bromeó con un fotógrafo y le envió a su
bía celebrarse el día 8, solicitó una sugestión que pudiera mujer un recado diciéndole: “Cuida a mi chamaquito.”
terminar la larga disputa diplomática. Muertos Serrano y sus seguidores quedaban los generales
—¿Diplomática? —preguntó Morrow—. Es que yo soy abo­ Gómez, Almada, Lucero y otros jefes al mando de una co­
gado, no diplomático, señor presidente. Para mí el caso es lumna perseguida por el general Gonzalo Escobar. Mucho
legal y no diplomático o político. más peligrosos que estos rebeldes eran los cristeros que se­
—Me interesa conocer sus puntos de vista —respondió Ca­ guían su cruzada religiosa. La lucha, con sus horrores y he­
lles, receloso, mientras hacía girar un anillo de plata que roísmos, su santoral de mártires y su historia de criminales,
tenía una gruesa turquesa engastada. sólo podía extinguirse mediante una política revolucionaria
Morrow aludió a la jurisprudencia establecida en el caso y de mutua tolerancia. En ese momento ni los campesinos
de la Texas Company, donde la Suprema Corte sentenció burlados, ni el gobierno estaban dispuestos a ceder y por
182 C A L L E S : A V A N C E S C A P IT A L IS T A S E L EM PLA ZA D O G E N E R A L O B R E G O N 183

añadidura las propias contradicciones del Estado, partidario palabra. Recibió 7 balazos y lo remataron con el tiro de gra­
de impulsar el incipiente capitalismo, evadiendo los proble­ cia. Después fusilaron a sus acompañantes.
mas de la tierra, la lucha de los caudillos militares y la im­ El cadáver de Amulfo Gómez se veló en la casa de Vito
posición de Obregón contra un sentimiento muy arraigado Alessio Robles, presidente del Partido Antirreeleccionista y el
partidario de la no reelección crearon también una situación día 7 una multitud lo condujo al Panteón Francés. Don
demasiado explosiva para que Calles tratara de seguir im­ Vito tuvo a su cargo la oración fúnebre, que concluyó con
poniendo la ley petrolera de 1925; pieza clave de su estrate­ estas palabras: “A nombre de los que sucumbieron en aras
gia contra los abusos del capital extranjero. de ese ideal, por los que luchamos todavía con fe y por él,
por los que aún tienen un rasgo de vergüenza y asoman ru­
bores en el rostro en presencia del mal; a nombre de todos
Otros horrores los que esperan de México una patria mejor, yo te saludo.
El 4 de noviembre, el general Escobar dio un salto y aun­ ¡Que sea tu memoria un nuevo escudo en nuestras luchas
que resbalara en el lodo de la vereda montañosa siguió apun­ reivindicadoras, y la tumba en que reposas un nuevo altar en
tando con su pistola al general Arnulfo Gómez, con quien que vengamos a decir la oración de la libertad y del sacrifi­
cio por el bien de todos!”
según se rumoraba, estuvo comprometido a rebelarse. Gó­
El mismo día en el panteón viejo de Jalapa, a corta dis­
mez quiso sacar su arma y desistió. Ya era una sombra de
tancia de Coatepec, cayó también el general Fernando Reyes,
sí mismo. Una úlcera y las fatigas de la persecución lo
antiguo jefe de un cuerpo de caballería de la División del
habían dejado en los huesos y sus levantados bigotes caían Norte. Esta vez se le concedió al general la gracia de orde­
inertes a los lados de la boca aumentando el espanto de su nar su propio fusilamiento.
figura. No podía siquiera mantenerse en pie y tuvo que arras­
trarse cogido al cinturón de su antiguo amigo hasta el pue­
blo de Teocelo. Allí Escobar telegrafió al Presidente: “Siento El emplazado general Obregón
gusto de haber cumplido mi promesa. Espero en el apara­ En esta atmósfera de venganzas, de ceremonias fúnebres y de­
to sus apreciables órdenes.” Las órdenes no tardaron mu­ claraciones altisonantes, llegaron a la ciudad, en visita oficial,
cho y eran las que esperaba Escobar. Gómez se sintió un los marinos japoneses mandados por el contralmirante Osami
condenado a muerte y escribió a su hijo en el reverso del Nagano y se celebró la segunda entrevista del presidente Ca­
pasaporte: “Muero asesinado por un gobierno despótico y ti­ lles con el embajador Morrow.
rano, en aras de la libertad y del antirreeleccionismo. No llo­ No pareció afectar a Calles la muerte de su colaborador,
res mi muerte, pórtate como digno hijo mío.” el general Arnulfo Gómez, pero la muerte de Serrano sí al­
El 5 de noviembre, Gómez fi e llevado en un tren a Coa- teró el carácter de Obregón como habría de confirmarse los
tepec con su sobrino Gómez Vizcarra y el coronel Salvador meses siguientes. Su vitalidad parecía disminuida. A veces
Castaño, los restos finales del abortado cuartelazo. El ge­ no veía de frente, sus ojos daban una impresión de vacío y
neral no desdeñó los minuciosos ritos de los grandes fusila­ en su rostro se advertían señales de fatiga.
mientos. Regaló al jefe del pelotón su reloj, un pañuelo de Los católicos, vencidos en todos los frentes, se rehacían
seda que llevaba atado al cuello, un centenario de oro y rogó siempre y seguían combatiendo, pero tenían la convicción de
que diera la orden de disparar con su sombrero, sin decir una que la guerrilla no lograría imponerse a las tropas federales
a 1 1 a i a

184 CALLES: AVANCES CAPITALISTAS EL MARTIROLOGIO LOCAL

y entonces decidieron recurrir al terrorismo. Su objetivo prin­ se preparó el atentado al que oficialmente se le dio la pro­
cipal lo centraron no en Calles, demasiado bien protegido, porción de un regicidio.
sino en su doble, el general Obregón, considerado como un Los autores materiales del atentado deseaban suprimir a
anticristo y como el instigador de la persecución religiosa. Obregón por razones meramente religiosas y de una manera
El domingo 13, Obregón, antes de asistir a la corrida de inconsciente estuvieron más cerca de impedir la violación de
toros, decidió dar un paseo en su automóvil por el bosque de uno de los principios revolucionarios que los mismos gene­
Chapultepec donde muy poco tiempo atrás habían aguarda­ rales sublevados o los militantes del antirreeleccionismo.
do los muertos de Huitzilac, sentados en sus desvencijados
fotingos. El martirologio local y su conciencia de clases
Obregón desconocía las tácticas terroristas. Esta vez lo se­
guía un auto con gente armada y nadie pudo evitar que des­ El 17, sin concluirse las investigaciones policiacas sobre el
de un Essex, manejado a gran velocidad, le arrojaran dos bom­ atentado, la Suprema Corte de Justicia amparó a la Mexican
bas y le dispararan varios tiros. El coche presidencial quedó Petroleum Company of California levantando la revocación
convertido en un montón de chatarra. Obregón sólo recibió de sus permisos de perforación y dejando bien claro que las
cortaduras minúsculas, lo cual puede atribuirse no a un mi­ leyes petroleras no eran retroactivas. El Herald Tribune y
la Prensa Asociada atribuyeron el fallo a la sagacidad de
lagro sino a uno de esos contramilagros que realizan en pro­
Morrow y el influyente Evening W orld publicó un edito­
vecho de sus favorecedores las potencias infernales.
rial en que se decía: “Hay todavía otra cosa significativa en i'J
El Essex emprendió la fuga seguido por el segundo auto­
la decisión. Indica la completa independencia del Poder ^
móvil a lo largo del Paseo de la Reforma bajo una andanada Judicial de México, el cual se encuentra libre de presión
de tiros. En Insurgentes, un balazo traspasó la cabeza y le e influencia política, pues la decisión de la Corte Suprema ■i|
salió por un ojo a uno de los terroristas. El que’guiaba el no puede ser enteramente satisfactoria para el gobierno de r
automóvil —después habría de saberse que se trataba de un Calles.’'
joven ingeniero llamado Luis Segura Vilchis—, viéndose per­ El 23, en el interior de la Inspección General de Policía li
dido, lo hizo chocar contra un Ford y en la confusión Vil- fueron fusilados sin formación de causa, el ingeniero Segu­
chis y otro conjurado desaparecieron dejando a sus dos com­ ra Vilchis, Juan Tirado, uno de los terroristas que escapa­
pañeros heridos. ron, el Padre Pro y su hermano Humberto. Cayeron todos
Obregón no perdió su sangre fría. Curado de sus rasguños serenamente mientras el general Roberto Cruz, Jefe de la
y contusiones persistió en ir a los toros y entre las exclama­ Policía, presenciaba la ejecución fumándose un puro.
ciones de sus admiradores se le hizo presente el ingeniero Vil- El martirologio local donde prevalecía una acentuada con­
chis. Pudo haberlo matado y prefirió utilizar su estancia en ciencia de clases, se apresuró a recoger piadosamente los nom­
la plaza como una posible coartada en caso de ser descubier­ bres de Segura Vilchis y del Padre Pro. En el hermoso jo­
to. Su misma víctima podía convertirse en testigo de descargo. ven de cabellos castaños que murió serenamente rodeado de
La policía, valiéndose de las declaraciones de uno de los polizontes, bajo el sol de medio día, se trató de ver el sím­
presos moribundos, siguió el hilo de la trama y pronto des­ bolo de la juventud católica bárbaramente sacrificada y en
cubrió el origen de la conspiración. No había duda de que la modesta figura de Pro, una especie de santo que merecía
había sido en el seno de la Liga de Defensa Religiosa donde ser elevado a los altares. Después de más de 40 años, su
186 C A L L E S : A V A N C E S C A P IT A L IS T A S LA M U E R T E D E L C A U D IL L O 187

retrato, ornado de azucenas y laureles se vende todavía como La verdad era otra. Un joven, llamado José de León To­
una estampa bendita en los atrios y en los puestos de las ral, hijo de un pequeño minero, casado y padre de dos hi­
festividades pueblerinas. De su hermano Humberto Pro, de jos, había sido amigo de Humberto Pro y su muerte lo ha­
Juan Tirado y sobre todo de Nahum Lamberto Ruiz que bía llenado de confusión. Al principio, Toral veía con horror
murió ciego después de una larga y dolorosa agonía, nadie la violencia. “¿Cómo es posible, se decía, que uno que mata
se ocupó y sus nombres no tardaron en hundirse en el olvido. sea mártir?” Luego reconsideró: “Humberto, en los trabajos
A las tres horas de ocurridos los fusilamientos, el general que desempeñaba, no exponía su vida de una manera di­
Obregón, comentando las declaraciones de Segura Vilchis en recta. Segura sí la expuso deliberademente y en defensa de
el sentido de que no tenía ningún motivo personal contra él la Iglesia, de manera que ¿por qué se va a descartar a él?;
y que su conducta sólo había sido inspirada en la creencia ¿por qué no se le va a considerar como mártir y aun posi­
de que seguiría, al llegar al poder, la política del general Ca­ blemente con mayor mérito que otros?”
lles, declaró a los periodistas en el estilo que le era peculiar: “Una naturaleza joven —escribe Vasconcelos— difícilmen­
“Si ése es mi delito, acepto toda la responsabilidad de te se resigna a la idea de la muerte”, y esto es cierto. La
él y bendigo la hora en que me enseñaron a rendir culto a misma idea de que lo fusilaran hacía temblar a Toral y le
la verdad. Por eso, mis labios no han podido modular una pidió a Dios que le quitara ese miedo. Quería también sa­
sola frase que pudiera halagar a los enemigos de la Revolu­ lir de su oscuridad, de su vida insignificante y de un modo
ción; porque para ello habría tenido que quebrantar mi con­ instintivo tomó como ejemplo a Segura.
ciencia y haber mentido, ofreciéndoles que, al llegar al poder, Al mismo tiempo que se ejercitó en el manejo de la pis­
quebrantaría nuestra legislación y los ayudaría a controlar tola fue creyéndose el ejecutor de una sentencia divina y
la conciencia nacional para poner a nuestro pueblo al servi­ el elegido para aniquilar al enemigo de su Dios a quien se
cio de los grandes intereses de Roma.” dirigía implorando: “Si te hace falta alguno para esta mi­
La declaración de guerra contra los “intereses de Roma”, sión, yo estoy dispuesto, nada más ayúdame.”
precisó los vagos cargos formulados por los católicos y lo Las circunstancias alentaban su propósito. Toral visitaba
convirtió en un emplazado. El mismo general se llenó de un convento clandestino regido por una monja enérgica y
presentimientos sombríos y llegó a decir que su vida depen­ persuasiva donde se reunían otros conspiradores y ahí oía
día de que otro hombre estuviera dispuesto a dar la suya misa y comulgaba en un ambiente saturado de odio y de
en cambio. pasión religiosa. Un día sacó su pistola y poniéndola sobre
una mesa de mármol se arrodilló con los otros fieles para
La muerte del Caudillo recibir la bendición de un sacerdote. De esa manera el arma
quedó consagrada y sólo restaba esperar el momento oportuno.
En una ciudad carente de canales de expresión, los rumores Toral espiaba la casa de Obregón y leía los periódicos
sustituyen a la opinión pública. Presentíase que el general para enterarse de los sitios a que debía asistir el presidente
Obregón sería muerto antes de llegar a la presidencia tal electo abrumado con solicitaciones de ceremonias y banque­
vez porque el pueblo creía en algún mecanismo sobrenatu­ tes organizados en su honor. La mañana del 17 de junio
ral de culpas y castigos, pero también se decía insistente­ salió de su casa acompañado de su mujer y sus hijos. Se
mente que los callistas deseosos de no abandonar el poder despidió con la mayor naturalidad, anduvo unos pasos y vol­
“tramaban el asesinato”. vió la cara mirándolos por última vez. Luego compró un
188 C A L L E S , A V A N C E S C A P IT A L IS T A S C A L L E S IN C U L P A D O D E L C R IM E N 189

cuaderno y unos lápices —practicaba el dibujo— y se dirigió diputados y gobernadores parecían dispuestos a respaldar la
al restaurante La Bombilla, situado a las orillas de la ciu­ violencia y sólo faltó en aquellos momentos un líder para
dad, en medio de jardines donde se le daba una comida a que no estallara una nueva revuelta de proporciones nacio­
Obregón. nales.
No llamó la atención de nadie. Se le confundió con un El obregonismo decapitado se debatía aún tratando de pro­
periodista o con uno de esos artistas miserables que acuden longar su agonía y la gente se reunía en mítines callejeros
a las fiestas haciendo retratos y caricaturas para ganar al­ culpando a Calles o se complacía en la desaparición del ti­
gún dinero. Su decisión era tan firme que pudo dibujar con rano. Según Vasconcelos “se abría un capítulo digno de la
mano segura el esbozo de Obregón y acercándosele por la tragedia antigua. Un hombre, un ciudadano, consumó la ab­
espalda, le mostró con la izquierda el boceto y con la de­ soluta inmolación de su persona para satisfacer la justicia
recha sacó la pistola bendecida y le vació la carga a quema­ en beneficio común. En cada corazón libre hubo un latido
rropa mientras la orquesta tocaba El limoncito. El cuerpo como de orgullo, que ponía a salvo la honra de todo un pue­
del Caudillo se deslizó fulminado debajo de la mesa, produ­ blo”. Expresaba el sentimiento de los católicos, de la ma­
ciéndose una espantosa confusión. Todos aquellos hombres yoría de un pueblo que reaccionaba ante una prolongada
que formaban la corte de Obregón y pensaban ocupar un imposición y este sentimiento coincidía extrañamente con
alto puesto en la próxima dictadura ciegos de rabia se lan­ el de las fuerzas políticas que habían hecho posible esa
zaron sobre Toral cubriéndolo de golpes y de injurias hasta imposición.
que una voz se dejó oír, acallando el tumulto: “No lo ma­ Para Calles había llegado el momento decisivo de su vida.
ten. No lo maten, es preciso que declare.” Ignoramos lo que sucedía en aquella alma impenetrable, pero
todos ios testimonios indican que la desaparición de su do­
Calles inculpado del crimen ble político, lo sumió en un doloroso abatimiento. Por pri­
mera vez disponía del poder y en ese momento el poder
El asesinato de Álvaro Obregón alteró radicalmente el cur­ conquistado manifestaba su debilidad ante la cólera de sus
so de la política. Había desaparecido la figura principal del aliados de la víspera y de un pueblo que expresaba su re­
triunvirato sonorense y por primera vez Calles estaba sólo y sentimiento culpándolo del crimen cometido por uno de los
retenía la presidencia en condiciones extremadamente difíci­ suyos. Permanecía desencajado, no encontrando una solu­
les. Ya políticos y funcionarios lo acusaban sin recatarse de ción capaz de superar la crisis sin que su autoridad sufriera
haberle dado muerte y algunos jefes militares hablaban de vol­ menoscabo.
ver a sus cuarteles para levantarse en armas. La solución la dio Emilio Portes Gil, el joven Goberna­
El obregonismo no había muerto con su jefe. Morones, dor de Tamaulipas, cuando logró convencer a varios políti­
con su imprudencia habitual, el 30 de abril, en Orizaba, ata­ cos que debían entrevistarse con el Presidente y con toda
có violentamente a Obregón y al general Miguel Pifia Sub­ entereza precisarle cuáles eran los sentimientos de los obrego-
secretario de Guerra y Marina lo insultó abiertamente sin nistas y lo que debía hacerse para evitar una posible rebelión.
que el Presidente hiciera algo para refrenarlo, quizá con el Cuando Calles los hizo pasar, habló Portes Gil:
propósito de señalar que su gabinete no era totalmente adic­ —Señor Presidente, el motivo que nos trae ante usted es
to a la imposición del Caudillo. La pueril maniobra se vol­ el deseo de cambiar impresiones sobre los lamentables su­
vía contra Calles fatalmente. La mayoría de los senadores, cesos políticos de las últimas horas. La muerte del general
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Obregón ha planteado para el país una grave crisis que urge a alguien que sea una garantía para los intereses del obre-
prevenir para llevar a todos los espíritus la necesaria tran­ gonismo.
quilidad y la cordura que exige el patriotismo. No sé si us­ —Proponga usted —se limitó a decir Calles.
ted esté enterado de que, desde hace algunos meses, se ve­ —Me parece que el general Ríos Zertuche, que es un
nía rumorando en todas partes que se preparaba el asesinato jefe militar de antecedentes insospechables, amigo del gene­
que hoy se ha consumado. Tales rumores que formaban ya ral Obregón y actualmente Jefe de Operaciones Militares en
un clamor general, se acentuaron desde que el señor Mo­ Sinaloa, es el indicado para asumir el puesto.
rones, Secretario de Industria, pronunció un discurso en Ori­ Calles comprendió en el acto que la propuesta de Portes
zaba en el que francamente manifestó su oposición a la can­ Gil era la única salida razonable y le ordenó a su yerno y
didatura del general Obregón y aun amenazó con que se secretario Femando Torreblanca se aceptara la inexistente
levantarían barricadas para evitar que el Héroe de Celaya lle­ “renuncia” del general Cruz y se nombrara en su lugar al
gara a la presidencia. Yo personalmente no creo que el se­ general Zertuche.
ñor Morones y su grupo sean responsables del crimen; pero La designación de Zertuche alivió la tensión sin disiparla.
la opinión pública los señala como instigadores del hecho Los obregonistas, dueños en buena medida del aparato es­
y tomando en consideración que el gobierno que usted pre­ tatal, no se resignaban a la pérdida de su influencia y se­
side debe garantizar plenamente a la nación que las inves­ guían amenazantes conspirando o pronunciando vehementes
tigaciones —que están llevando a cabo las autoridades poli­ discursos contra el Presidente y los líderes laboristas en la
ciacas— se apegarán en todo a la verdad y se obrará con Cámara de Diputados.
Mientras pasaban los días Calles iba recobrando su firme­
toda justificación para que el propio gobierno quede por en­
za. Lo apoyaban los miembros de su gabinete, una parte
cima de toda suposición malévola, hemos creído de nuestro
del ejército, de los senadores y de los gobernadores y tam­
deber expresar a usted que no tenemos confianza alguna en bién controlaba a los obreros lo cual no bastaba a disipar
los jefes de la Inspección General de Policía que se han abo­ las posibilidades nada remotas de un golpe de Estado.
cado al conocimiento de los hechos. El día 27, Portes Gil, acompañado de Luis León y de
Calles, reprimiendo su enojo, contestó en tono de reproche: Marte Gómez, juzgó oportuno tener con el Presidente una
—¿Qué motivos tiene usted para creer que el Inspector nueva entrevista. Calles lo recibió en su cama, enfenno de
General de Policía no obra con toda rectitud? gripa, según dijo.
—El Inspector General de Policía, general Roberto Cruz, Porte Gil le expuso la situación y terminó diciéndole “que
no fue amigo del señor general Obregón en los últimos me­ la crisis tan grave que se había planteado, comenzaría a te­
ses y se había venido significando como un adversario en la ner una solución satisfactoria si el Presidente resolvía modi­
lucha presidencial; el propio general Obregón nos lo había ficar la estructura de su gabinete”.
manifestado. Calles contestó airado:
—¿A quién quiere usted que se nombre Inspector Gene­ —No puedo arrojar a mis colaboradores de sus puestos
ral de Policía? para que sirvan de pasto a la opinión pública. Yo sé de
—Individualmente, ninguno de los miembros de esta co­ sobra lo que debo hacer.
misión tiene interés en que se nombre a determinada perso­ Portes Gil presentó hábilmente sus excusas:
na; pero sí creemos que debe ponerse al frente de esa oficina —Señor Presidente, si a usted le causa desagrado lo que
192 C A L L E S : A V A N C E S C A P IT A L IS T A S LA V E R D A D E R A M U E R T E D E O B R E G Ó N 193

venimos a manifestarle con toda conciencia de nuestra res­ Fingía enojos, hablaba con dureza, y terminaba cediendo
ponsabilidad y como verdaderos amigos de usted, le ruego ante algunos razonamientos que posiblemente eran los mis­
nos excuse; pero deseamos que usted conozca la verdadera mos que ya se había hecho. En realidad principiaba la eta­
situación de la República y el sentir de la calle, ya que sus pa de sus sutiles maquinaciones para retener el poder y ha­
íntimos colaboradores o no quieren o por falta de valor no cer creer a los suyos que ellos tenían la iniciativa, cuando
pueden decírselo. Usted sabe que yo me he quedado en en realidad los estaba manejando como unas marionetas.
México prorrogando la licencia que la legislatura de mi es­ Al concluir el mes de julio los rumores de que Calles pen­
tado me concedió sólo porque usted me lo ha pedido; pero saba reelegirse alcanzaron su máxima intensidad. La oposi­
desde este momento, en que ya no le soy útil, le manifiesto ción venía principalmente de Sonora. El general Fausto To­
que mañana mismo me voy a mi estado, en donde me ten­ pete gobernador electo, y el general Francisco R. Manzo,
drá a sus órdenes, por si en algo puedo servir en bien del país. Jefe de Operaciones Militares con otros políticos exaltados
El Presidente cambió de tono y respondió: estaban en México y se disponían a plantearle al general Ca­
—No, si no es que me sienta molesto por lo que me es­ lles un ultimátum: o prometía retirarse de la política o se
tán diciendo; al contrario, les agradezco que me hablen de levantarían en armas.
esta manera, pero es natural que yo defienda a mis amigos De nuevo Portes Gil intervino diciéndoles que su temor
y colaboradores de un cargo tan injusto como se les hace. era infundado pues el mismo general Calles le aseguró su
Aceptarles la renuncia en estos momentos, sería tanto como deseo de no intentar cometer "tal desacato a la Constitu­
hacerme solidario de tales acusaciones sin darles oportuni­ ción”. Los violentos generales se apaciguaron y en la entre­
dad a que se defiendan. vista que les concedió Calles ninguno se atrevió a reprochar­
—Yo creo que la lealtad para los amigos tiene un límite le nada ni mucho menos a plantearle cualquier forma de
y ese límite debe ser el instante en que se abusa de la amis­ ultimátum.
tad . . . No han correspondido a la confianza depositada en Calles descubrió así que Portes Gil no sólo era su aliado
ellos. Su comportamiento ha sido incorrecto e inmoral. En sino el instrumento conciliador que él necesitaba en aquella
los puestos que desempeñan han abusado del poder que us­ emergencia y el 18 de agosto lo nombró su Secretario de
ted les ha dado para cometer los actos más reprobables por Gobernación. En el puesto, el joven político confirmó las
lo cual la opinión pública los repudia. esperanzas de Calles. Portes Gil era un hábil abogado, un
El general Calles contestó que desde hacía algunos días negociador que podía apaciguar a los militares sin provocar
tenía en su poder las renuncias de Morones, de Gasea, de rivalidades y por lo tanto desde entonces se vislumbró la
López Cortés y no había creído oportuno aceptarlas. posibilidad de que él llenara el interinato dejado por la muer­
—Creo, General, que hoy mismo debe usted aceptar las re­ te de Obregón mientras se convocaba a nuevas elecciones.
nuncias, pues de lo contrario cada día que pasa es tiempo
perdido y su gobierno comienza a precipitarse en el abismo. La verdadera muerte del general Obregón
Calles llamó entonces a su secretario particular y le orde­
nó que escribiera la aceptación de las renuncias. El 1? de septiembre de (193J) Calles rindió ante el Congreso
Desde aquel momento la figura del Jefe Máximo princi­ su ultimo informe de gobierno y como era de esperarse el
pió a delinearse. Aparecía enfermo, en su cama, o en pan­ tema político relegó a la sombra la tediosa enumeración,
tuflas y cubierto con una bata, siempre achacoso y retraído. acostumbrada de sus avances financieros y administrativos.
TTTTTTTTTTTTTTTTTr
!
194 CALLES: AVANCES CAPITALISTAS LA VERDADERA MUERTE DE OBREGÚN 195

Calles apareció en esta ocasión solemne y enfático. Lamen­ ligros y darán oportunidad para el exacto cumplimiento de
tó la pérdida irreparable del presidente electo que dejaba los deberes de revolucionario.”^
al país en una situación particularmente difícil por la total Calles no engañaba a nadie. La resolución de “nunca más
carencia no de hombres capaces y bien preparados (que afor­ ocupar la presidencia en el futuro”, era terminante e irre­
tunadamente los hay) pero sí de personalidades de indiscu­ vocable, pero se dejó la puerta entreabierta al afirmar tam­
tible relieve con el suficiente arraigo en la opinión pública bién que no se retiraría de la lucha revolucionaria fuera en
y con la fuerza personal y política bastante para merecer el ejército, en la política o en la administración, un matiz
con su sólo nombre y su prestigio la confianza general. de importancia que pasó inadvertido en aquellos momentos.
CjEn tales circunstancias se hacía indispensable pasar de un No hacía responsable de todos los males a los caudillos.
“gobierno de caudillos” más o menos velado a un más fran­ Los azares de la vida nacional, la condición inerte de las ma-
co “régimen de instituciones”. Todas las circunstancias, en / sas rurales (ahora despertadas por la Revolución) y una do-
mayor medida que nunca, habían colocado al Jefe del Po­ lorosa condición de pasividad ciudadana casi atávica en las
der Ejecutivo para que volviera a existir en nuestro país el clases medias y submedias (también ahora, por fortuna des­
continuismo a base de un solo hombre. Calles había reci­ piertas ya) los convirtió en caudillos identificándolos por con­
bido sugestiones, ofertas y presiones a fin de que continuara vicción, por lisonja o por cobardía con la patria misma, como
en la presidencia, lo que lo obligaba a declarar solemnemente hombres “necesarios y únicos”. “Los hombres —insistió—
y con tal claridad que “mis palabras no se presten a suspi­ deben ser meros incidentes sin importancia real al lado de ^
cacias o interpretaciones, que no sólo no buscaré la prolon­ la serenidad perpetua y augusta de las instituciones y las leyes.
gación de mi mandato aceptando una prórroga a una de­ “¿Cómo podía cambiar un pueblo y un gobierno de caudi- \
signación como presidente provisional, sino que ni en el líos, en la más alta y más respetada y más productiva y más 3
periodo que siga al interinato ni en ninguna otra ocasión as­ pacífica y más civilizada condición de pueblo, de institucio-
piraré a la presidencia de mi país”; añadiendo, aun a riesgo nes y de leyes? Cuando en las cámaras estén representadas ¿
de hacer inútilmente enfática esta declaración solemne, que todas las tendencias y todos los intereses legítimos del país; !/
“no se limitará mi conducta a aspiración o deseo sincero de cuando logremos por el respeto al voto, que reales, indiscu­
mi parte, sino que se trasmitirá en un hecho positivo e in­ tibles representativos del trabajador del campo y de la ciu­
mutable; en que nunca y por ninguna consideración y en dad, de las clases medias y submedias e intelectuales de
ninguna circunstancia volverá el actual Presidente de la Re­ buena fe y hombres de todos los credos y matices políticos
pública Mexicana a ocupar esa posición; sin que eso signifi­ de México ocupen lugares en la representación nacional en
que la más remota intención o el más lejano propósito de proporción a la fuerza que cada organización o cada grupo
abandono de deberes ciudadanos, ni retiro de la vida de lu­ social haya logrado conquistar en la voluntad y en la con­
chas y responsabilidades que corresponden a cualquier sol­ ciencia pública; cuando el choqug, de las ideas sustituya al
dado, a todo hombre nacido de la Revolución, ya que abun­ clamor de la hazaña bélica; cuando, en fin, los gobiernos
dan las situaciones militares o administrativas o políticas o revolucionarios, si siguen siendo gobiernos porque representen
cívicas que por modestas o insignificantes que puedan ser en y cristalicen con hechos el ansia de redención de las mayo­
comparación con la jefatura antes ocupada significarán de rías, tengan el respaldo moral y legal de resoluciones legis­
mi parte aceptación completa de responsabilidades y de pe- lativas derivadas e interpretativas o reglamentarias de la Cons-
T T T T T T T T T T

196 CALLES: AVANCES CAPITALISTAS

titución en que hayan tenido parte representantes de grupos


antagónicos.”
ÍF.1 Presidente, con su sacrificio personal, con su suicidio EL MAXIMATO, UN INTENTO DE
político, con su renuncia a seguir siendo el “hombre necesa­ GOBERNAR A TRASMANO
rio” no sólo desarmaba a la oposición sino que cerraba la
etapa iniciada por Díaz interrumpida en el breve gobierno L a m a n o de Calles tomó a su Secretario de Gobernación,
de Madero y abría la etapa de las instituciones legales y de­ el hábil y conciliador licenciado Emilio Portes Gil, y lo co­
mocráticas. En cierto modo y tal vez sin proponérselo, Ca­ ronó Presidente Interino de la República el 30 de noviem­
lles levantaba la bandera de Madero y creía en la posibilidad bre de 1928 mediante una limpia maniobra que debía inau­
de una transformación mágica, sin modificar las estructuras gurar el largo periodo del Maximato.
del poder y sin precisar con exactitud en qué debería con­ Ya a principios de ese mes, en una junta convocada por
sistir la acción revolucionaria del gobierno^ Galles en la casa del ingeniero Luis León, se había conve­
Desde luego comprendía que el ejército representaba la nido que los miembros del Gabinete, los generales con man­
fuerza y la debilidad del futuro gobierno y a él se dirigió pi­ do de fuerzas armadas y los gobernadores deberían continuar
diéndole conservar incólume su dignidad y su prestigio (con­ en sus puestos hasta el 21 de noviembre con el objeto de
quistados tan merecidamente) y terminó constituyéndose en incapacitarlos legalmente para ser candidatos presidenciales
el fiador de su conducta “noble y desinteresada”. en los comicios de 1929. Esta determinación inusitada, que
El discurso causó tanta sensación como la muerte del Cau­ trataba —según se dijo— de evitar las divisiones sangrientas
dillo a quien su doble sepultaba esta vez definitivamente originadas en cada elección, eliminaba a todos los posibles as­
de un modo dramático. México entraba a la paz y a la de­ pirantes de relieve —excepción hecha de los diplomáticos— y
mocracia. La patria era la ley y no el caudillo. Sin embargo, al parecer despejaba el camino de Aarón Sáenz, heredero del
el patetismo de estas solemnes e inesperadas promesas radi­ obregonismo, pariente político y amigo del Jefe Máximo.
ca en que Calles, según lo habían de probar los seis años La maniobra callista era de mucho mayor alcance y no
venideros seguía sintiéndose el hombre necesario, el irrempla- pretendía afianzar la candidatura de Sáenz pues el mismo 21
zable al recobrar su mitad perdida que había encarnado el de noviembre, nuestro embajador en Brasil, Pascual Ortiz
general difunto. Ya no ocuparía la presidencia una perso­ Rubio, recibió un telegrama de la Secretaría de Relaciones
nalidad como la de Obregón, sino por el contrario un hom­ donde se le ordenaba venir a México con urgencia. Ortiz
bre flexible, capaz de plegarse a las nuevas reglas. Calles Rubio llegó el 26 de diciembre y después de hablar con el
no se hizo el harakirí. Como nadie, sabía que el tiempo no presidente Portes Gil —se pensaba que ocuparía la vacante
estaba para reelecciones o dictaduras descaradas y principió Secretaría de Gobernación— emprendió, siguiendo instruc­
a usar su control sobre las Cámaras, los gobernadores y los ciones precisas, la obligada peregrinación a la casa de Calles
obreros con el propósito de que fuera nombrado presidente en Cuernavaca, considerada como la Meca política del país.
interino Emilio Portes Gil, acentuando desde entonces la am­ Ante la confusión del recién venido, el Jefe le propuso
bigüedad radical entre las palabras y los hechos, entre la ley —como habría de confiarle Ortiz Rubio a su amigo el in­
y la realidad, entre las instituciones y el hombre necesario. geniero Francisco Díaz Babio— “el ejercicio de un gobierno
en el que yo comparta el poder con el p n r que lanzará mi
candidatura y a cuyos postulados me acogeré en todas sus par-
197
. hM
que ocupan, tan luego como las fuerzas constitucionalistas las releven’^Jw- | ANTES DEL REINO (1916-1920). EPÍLOGO
Había que precisar ante los calzonudos del sur, desde el principí^y--^.
quién había ganado.27 Eso es justamente lo que no había q u e d ^ 4 s^ |
claro on los extensos campamentos norteños de la División del Norte
ni parecía importarles mucho a los campesinos zapatistas. Las tropas ■
fieles a la primera jefatura reunidas en Teoloyucan parecían un
cuerpo extraño y desafiante cercado por dos rencores; podían ocupar \ El año de 1916 empezó con malas memorias y no buenos augurios
ese espacio merced a dos endebles cordones umbilicales: el que sp para los sonorenses. Las últimas oleadas de la guerra civil llegaron al
distendía
distendía porpor el el occidente sobre la costa del Pacífico; y el que venía estado y lo sacudieron con una violencia que las ordenadas batallas
de Tampico
de Tampico y y Veracruz, en el Golfo. Pero la línea del Pacífico se contra Huerta no conocieron. El país mismo, ese país que era en lo
esfumaba en los terrenos recobrados por Maytorena para su revancha.-. fundamental el territorio unido por el ferrocarril, parecía en los albores
en ciernes. »*k .. del nuevo año un inmenso esqueleto descoyuntado, roto aquí y allá por
Acorralados en dos puntos fronterizos muertos, los carrancistas carrancista? el paso victorioso o desmoralizado de los ejércitos revolucionarios:
sonorenses contaban i~- U m . Para lac
las horas. las duras jornadas por venir, tod^'í tod,<>';. pí metralla, insalubridad, malas cosechas, saqueos, medidas de emergencia.
iiuiuíim
u u u i u » - ------------------
___ _ . - , „u . ff -------- J>>• era
— .. r * o n o r t n n r o n v u l e o
Una
una nación convulsa,,,.,
convulsa,,,,, t¿: "Bajo “J" la amorta
euforia ae
de la
la unidad
unidad revolucionaria
revolucionaria queque pareció
pareció celebrar
celebrar kla
tendría que venir de afuera y ^ atu
armada, dividida, que los sonorenses habían empezado apenas a conp;empezado apenas a coqoi ' f ft
e entrada triunfante de P^rron-,-.
Carranza y
........
sus *—
tropas a la ciudad de México,
cer y ................. 1
transitar. La transitarían por años ^ hasta1
hasta dejar en ella h uel¿||^ u e l^ j^-p q u ed ó latente el hecho de que aquellos festivos ocupantes eran ya una
imborrables. Después de siglos de aislamiento, anos opresión geográfica, fracción. Entraban los primeros a la capital sólo por el boicot abierto
colonización cruenta y solitaria, Sonora entraba de lleno en esos días'!* f, contra las huestes villistas (paradas en Zacatecas por falta de carbón)
a la historia global del país. Salía, querido lector, de la muy regionaLijpp «t-y por el trato duro acordado a las vanguardias zapatistas, para las
verdadera que aquí casi terminas. í! cuales el triunfo constitucionalista fue algo muy parecido al simple
cambio de los soldados y las ametralladoras que les apuntaban en las
; afueras de la capital.
El intento .e someter esos ri cores adquiridos a un arbitraje es la
i histori de un fracaso- la Convención de Aguascalientes.1 Sus conse-
’■cuencias duraderas: una guerra civil cruenta y vertiginosa, la alianza
l de zapatistas y villistas bajo los trazos dominantes del Plan de Ayala, el
’j repliegue de los carrancistas al exiguo dominio de unos cuantos lugares
(iíseguros: Veracruz, Tampico, una parte de Jalisco, otra de Yucatán
:y un nido en la frontera norte: Agua Prieta. Desde estos vulnerables
¡reductos, durante 1915, las fuerzas carrancistas mandadas por Obregón,
avanzaron sobre los puntos estratégicos del país has .a dominarlo, en
' parte debido a la inconsistencia militar y política de sus oponentes.
Ni villistas ni zapatistas concibieron sus luchas (y en esto fueron siem­
pre ejércitos fundamentalmente campesinos) como un desafío por la
hegemonía nacional. Para Villa el país terminaba donde empezara
a peligrar su larguísima linea de abastecimientos conectada a la fron­
tera; para Zapata, donde la organización popular de su ejército
careciera ya del peculiar arraigo agrario y militar que lo caracterizaba.
El país de Zapata incluía los estados de Morelos, Guerrero y partes de
27 Sobre el ambiente antinortcamericano en Sonora, r o s , rollo 40, dop. ¿Puebla, Hidalgo o Tlaxcala; el de Villa estaba dibujado por las líneas
812.00/12832. Sobre la parálisis minera y la inmovilidad financiera de Naco h:-
v Agua Prieta, a r e m l e - 797, legajo 8, f. 45. Las actas de rendición de Teolo-
yucan y demás documentos relativos en Obregón, O c h o m il k iló m e tr o s . , „ 0 1 Véase Roben Quirk, M e x i c a n r e v o lu tio n , 1 9 1 4 - 1 9 1 5 . T h e c o n v e n tio n o f
-A g u a s c a lie n te s . Bloomington, Indiana University Press, 1960.
pp. 157-60. ; '$ m m
fe [ 411]
413

del ferrocarril y la gran placenta financiera y militar que representaba é í política y militar del constitucionalismo encontraría obstáculos insal­
vables y expidió la ley del 6 de enero de 1915-^jesumía eLartít.'i*U>»fy>.
la frontera con Estados Unidos. . k del Plan~3ei Ayala, serían devueltas las tierras a todos los pueblos que
—. totalidad conceptual y administrativa
Para Carranza, el país era una totanuau — , — exhibieran debidamente sus títulos. Obregón tuvo ÚCVftOO
de la que él era el único representante legítimo, sin que importara de
momento cuánto de ese territorio dominaba. Desde Veracruz, y antes ' ] nizar SU ejercito y tomó Puebla a principios de enero porque los zapa-
de ocuparlo, Carranza negociaba su desalojo con Estados Unidos como üstas armaron una defensa tan mala que fue casi como regalar
gobernante indisputado de México. Su general invicto, Álvaro Obregón, la plaza; a fines de enero entró a la ciudad de México: sus ocupantes la
tenía una ¡dea suficientemente flexible y global de sus tareas como para evacuaron sin combatir. En la capital, Obregón impuso medidas de /
planear, en la inminencia del desastre militar a fines de 1914, el em­ emergencia para rescatar de la hambruna a los sectores populares,
barque de sus tropas en Salina Cruz, un incierto viaje costanero por incautó la Compañía Telefónica y Telegráfica Mexicana y la puso en
el Pacífico y su desembarco en el occidente de México, para unirse manos de los dirigentes del Sindicato Mexicano de Electricistas; a través
achico y su ucat-mum■ — — de la
la C
Casa del Obrero Mundial estableció una cadena de abasto de
con las tropas de Diéguez y reiniciar desde * ahí una campana en terrenos í.Ia de
""*• or>
bien. Para los zapatistas la guerra de guerrilla era no sólo., ¿&j|, comida y ropa. A mediados de febrero, la casa firmaba con Carranza
que conocía bien d' ’ón militar natural. A la sugerencia!; ip l|t un pacto de colaboración que incorporó 3 000 combatientes urbanos al
(el origen, sino además 1I (1 d LUllUlOívw
CU -------- . _______ ' 11 /-■n it r o e i c f í n T ~ 1 .. 1 .1 ™
(hecha por Carranza) de fragmentar su ejército en guerrillas y resistir T constitución 1'
— momento difícil de la em paña, Obregón y creó el p r e c ^ e M e 'a u e 'h h Patrocinio
c regiroficial al movimiento
-matices obrero
mas o menos—
así a los villistas en un momemu umu> ------- ,
pondió: “No salí de Sonora como bandolero para andar a salto •dp.,;' J v ¿odas las alianzas del É d
mata. Soy el comandante del ejército constitucionalista, y así moriré si es '-¿M renta años. S e stado y cl sindicalismo por los siguientes cua-
mata.
necesario.” 22 La La petulancia
petulancia de Obregón dejó la capital el 10 de marzo de 1915, aseguró su línea
necesario.” ae esta
Cbia actitud
av^uhuw_ en una situación objetivaí;¿S|l .
V, de abastos desde Veracruz y a principios de abril estaba en el Bajío dis-
tan precaria militar y políticamente es acaso el extremo psicológico
:.puesto al primer gran encuent con Villa. Cuatro grandes batallas,
individual de una fracción revolucionaria que se planteaba corree
mente su situación histórica: no había otro grupo con la noción>d( i ganad...» por los ejércitos carrancistas, definieron en esos campos el
representar un gobierno nacional y la decisión de erigirlo. Los atisbofeí'jj j. predominio militar de la revolución; las dos de Celaya en abril, la de
que hubo de este propósito en el seno del gobierno convencionista^V ?’posiciones en Trinidad que duró todo cl mes de mayo, y la de Aguas-
fueron desechos por el espíritu más autárquico, ajeno a los secretos de!' ¡j¡ calientes, a principios de julio, en la que una situación desesperada
la legitimidad y la institucionalidad de los jefes villistas y zapatistas.T ; ¡jpor escasez de comida obligó a Obregón a una ofensiva súbita que
Carranza y Obregón podian ser derrotados, su proyecto social e his­ .<sorprendió a las líneas villistas. Después de la batalla de Aguascalicntes,
mediados de 1915, la retirada villista hacia el norte fue el depresivo
tórico, el destino hegemónico de esa visión de las cosas, no. ,.
| - espectáculo de una caravana abigarrada, dispersa, sin moral, que iba
En Xochimilco, 4 de diciembre de 1914. V4-á¡i
v il l a : Yo muy bien comprendo que la guerra la hacemos nosotros g .perdiendo en forma sucesiva, sin pelear, lo que un año antes obtuviera
los hombres ignorantes y la tienen que aprovechar los gabinetes: pero ” 1 de modo fulgurante. Lentos ferrocarriles exhibían los carros suntuo­
sos que debían ocupar los jefes; ahora venían vacíos, tenían los vidrios
que ya no nos den quehacer. . :
z a p a t a : Los hombres que han trabajado más son los menos quej" rotos y costurones de balazos en los lados. La desmoralización era la
tienen que disfrutar de aquellas banquetas. No más puras banquetas, nota dominante; los jefes reñían por vitualla, los soldados por cualquier
digo por mí: de que ando en una banqueta, hasta me quiero tontería. Las deserciones se multiplicaban, las rendiciones de jefes con
Yo lo tropa eran abundantes. El 16 de julio Obrcgón tomó San Luis Potosí,
caer. 1 s replegados ejércitos de Carranza;.J un ¿¡a después ocupó Zacatecas. El frente zapatista también fue echado'
Los zapatistas no atacaron a ^ emprender una campaña cclu^"; r| atrás, Pablo González se apoderó de la ciudad de México el 2 de
los villistas no insistieron ema^ia^ ajguna medida agraria, la accióp;",|; agosto. En el norte, Pánfilo Natcra, se rindió a Obregón y ocupó, con
valente.. Carranza entendió que c; ¿parte de sus tropas, la ciudad de Durango. El 4 de septiembre los consti-
., de la lógica social que <5 : _— —-— —
.. ■, _*-— « w» .,...v, ...
* Una dCSior'su^triunfo parecía
C----- inevitable desde el punto de vista Piedras Negras. El 27 cayó sin combatir San Pedro de las Co-
villistas cuando su tnunto p « ......... u México, Ediciones El C a b a t i u o ^ j ^ . _____t_.
p o lu c ió n i n t e r r u m p i d a , México, ---------
__ V ___-_z_ .. ™ ___ n . t,, .
en Adolfo Gilly, L a r e . _____ :a me fue contada por don Ernestó¡||f ; en los días siguientnes, Torreón y Gómez Palacio. El 17 de octu­
1972. La respuesta de Obregón a Carranza amigome íntimo de Obregón. bre, los Estados Unidos reconocieron como gobierno de jacto al carran-
Almada, hijo del general Carlos Almada, ' Iü
t:
iWpi’íil 415

cismo. A principios del mismo mes, los restos del ejército vi | ’dades, las tropas de Maytorena sostuvieron por 14 días un sitio, enco­
concentraban en Casas Grandes, al pie de la sierra de ChihuaJ^ysj#^ nado del puerto fronterizo. Ahí las fuerzas maytorenistas conocieron el
para invadir Sonora. En los áridos campos de Hermosillo y frente allásií'"* fracaso, la desmoralización y la indisciplina; las de Hill y Calles supie­
trincheras de Agua Prieta, el villismo habría de perder sus últinaas¡ -1 ron que peleando en condiciones favorables, su inferioridad nutnÓÚQ3.
batallas formales. La derrota lo regresaría a su sitio y su condición ’ ’fho era decisiva; supieron también que no estaban solos: aunque lejos
í —ma f : —~ — i . r i <> ■ •
originales: el estado de Chihuahua, la guerrilla. La pacificación efec- ^geográficam ente, los fondos llegaban regularmente de Veracruz y, con
tiva de aquellas regiones no sería posible sino hasta 1920, lo cual exhibe |§ 'e!IoSl ^i™611103. armas y ropa para el frío del invierno; aprendieron
una vez más el origen y el arraigo profundamente popular y regional defender una plaza bien fortificada contra un enemigo’ tres o cuatro
del villismo, rasgos que su larga aventura y su vastedad numérica g veces mayor sin que las tocara el fantasma del aislamiento o la sospecha
durante 1914 no alcanzaron a disipar. . :: rji.de la inutilidad de su gesta. Maytorena, en cambio, se extravió en .el
¿alud popular,,pero desorganizado que había hecho emerger. Ya en
•í agosto de / 1914j el cónsul norteamericano en Hermosillo había resentido
En Sonora, como en el resto del país, la escisión de los triunfadores —y atribuido a Maytorenaj— la aparición de una atmósfera política
después de la Convención de Aguascalientes, en 1914, sólo prolongó pelara y agresivamente antinorteamericana. En los meses que siguieron
y acendró las fracturas previas. Con las tropas yaquis que sitiaban ¿¿Maytorena adquirió también, por el apoyo de los yaquis que estaban
Guaymas nuevamente a su disposición desde el mes de julio, y su PTOf | r f [ ent(; * Guaymas> un estilo acendradamente populista. A principios
- casi todo el estado, Maytorena inició a p r í n e i ^ W & k octubre un representante del gobierno en el no Mayo confiscaba las
tigio reconstituido en
de agosto la reconquista de sus bonos y de su territorio. Arrinconado’.Óa^ Atierras de los grandes hacendados parientes o amigos de Obregón y
el nororiente del estado, el carrancismo sonorense con Calles a;-Jam lias entregaba a los yaquis. El ascenso de la lucha popular en esos meses
cabeza, se encontró en una situación política y militar tan endeble* -turbulentos del encuentro de Maytorena con los estilos radicales de la
como lo estaría poco después el carrancismo en todo el país.’:Béfif|$j ¡Revolución, fue también, como cabe esperar, una época de indisciplina
jamín Hill volvió a Sonora el 25 de septiembre de 1914 para tom a^ftl |y. desbordamiento, de saqueos y desmanes de los soldados. Los préstamos
a su cargo la bola de fuego que Calles le heredaba. La herénciaM ffi’ 'forzosos y los altos impuestos fueron hechos continuos; el comercio
dominio precario sobre Cananea, Naco, Agua Prieta, Nacozari ’y^Ürt^ ' j¡se retrajo: sacar por la frontera un saco de garbanzo costaba tres pesos y
listón del distrito de Sahuaripa; odio y hostilidad civiles; preponía :|hde dos a diez dólares una cabeza de ganado. Los jefes militares actuaron
derancia militar, política y financiera del maytorenismo. Tenía HUI.: í'por su cuenta y riesgo, requisaron ganado, depusieron autoridades,
1 800 hombres, la mitad veteranos, en su mayoría armados de carabi^ :f,tomaron "in pagar lo que su tropa necesitó.* Maytorena perdió el
ñas 30-30, con alcance de mil metros y que se calentaban fácilmente:-, gpontrol. Era un gobernador y un hacendado, no un líder popular capaz
hasta imposibilitar su manejo. Maytorena tenía 5 000 hombres, bieri'^: sfíde cohesionar esas fuerzas. Además, Naco tenía las espaldas protegidas
equipados y con experiencia, sus principales plazas estaban bien guar-«; |;.por la línea internacional.
necidas, una gruesa columna en el sur impedía la llegada de posibles v En la primera semana de enero, mientras Obregón ocupaba Pue­
refuerzos de Sinaloa. La población civil, decía Hill, apoyaba “violenta b la , las autoridades norteamericanas obligaron a los combatientes sono-
y decididamente a Maytorena” quien hacía fuertes exportaciones*>deV‘i¡||fenses a firmar un armisticio que declaraba a Naco terreno neutral.
ganado para pertrechar sus tropas. Pronto, la doble presión civil f:. i¡Los carrancistas (ahora bajo el mando de Calles, pues Hill se incorporó
v, a . , „ , ___ __ m,,., »• "¿'ala campaña en el centro) se refugiaron en Agua Prieta: fortificaron la
y militar obligó a Hill a reo uirse, con to as sus ^ , .plaza y esperaron, prácticamente sin ver acción, hasta julio de 1915.
A principios de octubre, mientras en e ccn r?, c a ~ntfJ.Í._i historia caminó en esos meses por los campos del Bajío. A principios
daban los primeros pasos para a rir a onvencion e f n -Irría fjde abril, antes de las batallas de Celaya, el cónsul norteamericano
Maytorena lanzó a sus hom res contra as ríñete „vrf. •, . . áSimpich hacía un balance de la situación en el estado: Maytorena
carrancista del pueblo de Naco. partir eenonc.es, hnstili' t'había perdido, decía el cónsul “mucha de su anterior influencia y
unos veinte días en que la Convención ordeno suspender las h o sjü m W 1 1
; J.¡. . 4 Véanse los despachos de los cónsules Louis Hostteter en Hermosillo a
8 Informe de Benjamín Hill sobre el sitio de Naco, 29 de marzo de íS'jyjtójE ^Departamento de Estado, 5 de octubre de 1914 y Simpich en Nogales a Depar-
ahdn , Fracción Soledad. Expediente de combate contra los rebeldes yaquis,!-.»,, jfejámento de Estado, 14 de diciembre de 1914, en rds , 812.00/13478 y 14060,
í"rollos 41 y 43 respectivamente.
1917-1919.

I
1:
ár
autoridad; ahora es culpado abiertamente por muchos de sus subordiv '^' | gobierno de Maytorena [ . . . ] contemplan, como única solución para
nados por las condiciones de desarreglo que hay en el estado”^™ ;; sus males, que los carrancistas tomen el estado”.7
generales maytorenistas Trujillo y Acosta, actuaban sin consultarla}/ La situación moral y material de las tropas maytorenistas que
gobernador, las minas y el comercio habían cerrado o resentían graves j|- cercaban a Calles en Agua Prieta, se deterioró en esos meses con igual o
crisis; la hacienda pública carecía de fondos, recaudaba menos del peor intensidad que la economía y los prestigios políticos de ia causa
25% de sus impuestos normales. Los soldados-exigían su paga e incu­ que defendían. Antes de entrar en ningún combate serio por la posesión
rrían con frecuencia en insubordinación o deserciones. El cierre de las de Agua Prieta, la mala administración militar, el retraso en el pago de
minas había creado un ejército de desempleados; la desconfianza de haberes, la inactividad, la inclemencia del medio físico para un ejército
la GGCG hacia Maytorena había llegado al extremo de mantener sus tiros mal vestido — y hasta harapiento— habían causado estragos irrepa­
cerrados a pesar de que —decía el cónsul Simpich— “con el cobre a rables. Decía Galles que los “numerosos desertores” que pasaban al
16 centavos la libra y una escala dé salarios en dinero depreciado (en bando constitucionalista, “no traían calzado y sus vestidos estaban
billetes maytorenistas de circulación forzosa) podía operar, desde luego, ¡| hechos jirones”. La disciplina no era mejor:
con ganancias”. Al sur de Hermosillo el panorama era de hambre y
pobreza. La caída de las cosechas de cereales era enorme, habían recen las chusmas enemigas —escribió el mismo Calles— exigían sus haberes atra-
sados o cuando menos alimentos suficientes, y como no los conseguían
vgido 90% menos trigo que el año anterior y 80% menos maíz. May­
amenazaban y ponían condiciones a sus jefes.
torena había perdido también el control de los yaquis, los cuales saquea}
• ban tiendas de chinos o entraban a ciudades como Guaymas o Ures
a tomar las prendas de vestir, los alimentos y la bebida que necesi- De las condiciones materiales de su propio ejército, Calles podía
taran.\Los yaquis broncos, en número de 3 000, seguían sin ser some­ ser muy explícito en el sentido contrario:
tidos ar ejército estatal y los mansos militarizados respetaban sólo a
Francisco Urbalejo, pero estaban a disgusto en el norte, fuera de su zona
natural de acción, el sur del estado. Con todo, el populismo de Mayto­
, Jamás sentí-en mi encierro de Agua Prieta los efectos morales y mate-
| ríales de una carencia de recursos pecuniarios, pues el gobierno de Veracruz
1
: atendió siempre mis necesidades lo mejor posible.
rena era más bien una pose política y una incapacidad real de controlar
a sus partidarios, porque para el mes de abril de 1915 la propiedad I'
norteamericana no había sido tocada en lo más mínimo y el goberna­ i Todavía sin pelear, por una inversión simple de las preferencias if
dor había bloqueado los trabajos de un ingeniero enviado por Villa a %políticas reforzadas por las derrotas del villismo en el centro, las cosas
fraccionar y repartir la tierra.5 iban viento en popa para el carrancismo sonorense. La brigada de i
Para el momento en que los ejércitos de Obregón y Villa iniciaban Calles que era originalmente de 1 200 hombres, tenía 3 300 al empezar
sus choques decisivos en Celaya, el maytorenismo en Sonora seguía í el mes de julio, aumento logrado, decía Calles, tanto “con el elemento
controlando casi todo el territorio pero había perdido su empuje y daba, civil que acudía a enrolarse, cuanto con los soldados maytorenistas
muestras de una rápida descomposición. Dos meses después, a prin­ que, reconociendo los errores del pasado aprovechaban la primera opor­
cipios de junio, con las derrotas del villismo en el centro, la causa tunidad para correr a las filas del constitucionalismo”. En cambio,
maytorenista había perdido ya todo el vigor. Un informante civil lo * para la primera semana de julio, de los 1 600 maytorenistas apostados.
explicaba con claridad al oficial mayor del mismo Maytorena: en Cabullona, frente a Agua Prieta, sólo quedaban 800 y de los
2 400 en Anivácachi, sólo 1 500, o sea, que había desertado casi la
Ya es muy notable la cantidad de Carranzas y Calles en todos los pueblos del mitad de las tropas.8
estado y verdaderamente se nota un descontento general [ . . . ] no sería El 15 de julio de 1915 Calles salió de su agujero e inició su ofen­
remoto que de un momento a otro se sucediese un levantamiento general.6 siva contra los derrengados ejércitos maytorenistas. Sus primeros triun-
Un mes más tarde, el cónsul norteamericano en Hermosillo ratifi­
caba las quejas de los mexicanos por “las condiciones creadas por ej 7 Hosttetcr, Hermosillo, a Departamento de Estado, 17 de julio de 1915.
r.D5, 912.00/15542, rollo 46.
5 Cónsul Simpich, Nogales, a Departamento de Estado, 6 de abril de 1915. 8 Las citas de Calles sobre las condiciones de su ejército y el maytorenista
provienen del libro P a r te s o fic ia le s d e la c a m p a ñ a e n S o n o r a r e n d id o s p o r el
rds, 812.00714963, rollo 44. :.;4¿ g e n e r a l P lu ta r c o E lia s C a lle s a l C . g e n e r a l Á lv a r o O b r e g ó n . Hermosilb, Im­
8 Carta de E. V. Derain a Alberto Hughes, oficial mayor de gobierno, Her­ prenta del Estado, 1916.
mosillo, 10 de junio de 1915.

_____ _
ios abrieron una alternativa al descontento y obligaron a Maytorian ^ ; ^ ^ Ksu muerte si no en las manos de los Dorados, en las de la temperatura
doblar sus esfuerzos pgra allegarse recursos. A principios d¿jááÉ¡^ | ^ ^ | | ' g lacial de la sierra. Carros cargados con parque, muías arrastrando
el cónsul norteamericano en Hermosillo, Hostteter, afirmaba soldados ateridos y exangües, caían a los precipicios insonda-
situación era peor que nunca, la mayoría de las provisiones estáli^^;'«Rbles de la cordillera.” 10 Una vez remontada, la. SÍfcTO. \a \tn\S.C.\6n ¿6
fuera del alcance del pueblo pobre. El gobierno maytorenista m a ta B ^ í|* V illa subió a los cielos al enterarse del reconocimiento norteameri-
siete cabezas de ganado al día en Hermosillo para repartirlo entre las 1. | cano a Carranza como gobierno de jacto. Destemplado, maltrató a
clases populares, pero el ganado era obtenido por confiscación, sin pago, * los residentes “gringos” que encontró en su camino; impuso préstamos
Lo mismo hacía el gobierno para obtener y repartir cereales. Había ;’ | forzosos a las compañías mineras de El Tigre y Nacozari, y les embargó
suficiente trigo, frijol y maíz para dar de comer a las clases necesitadas i ;,, un cargamento de . plata.
. A la cccc le arrancó 25 000 dólares. Advirtió
en una situación de emergencia, pero como el gobierno no pagaba por 1que la furia del pueblo no se detendría; si era necesario lucharía tam­
esos cereales, los productores los escondían para evitar que les fuesen; il bien, hasta vencer, contra el boicot y la traición del presidente Wilson.
confiscados. En Ures los productores se habían rebelado contradi''' 1 Villa lanzó dos ataques nocturnos sobre Agua Prieta los días 1 y 2 de
gobierno por sus prácticas confiscatorias. La sabiduría administrativa i , ¡noviembre de 1915; lo hizo sin mayor empuje, comprometiendo sólo
del constitucionalismo rindió dividendos políticos en esta etapa. Decía ‘ i parte de su ejército. Fue repelido y bajó con sus huestes prácticamente
Hostteter: '•#*■,1 intactas al centro del estado. Obregón llegó a Agua Prieta, proce­
dente de Piedras Negras, el 6 de noviembre; ese mismo día las avanza­
Esta gente que un año antes gritaba por Maytorena, toda quiere a CalfesáfiN; das de Diéguez, al mando de Ángel Flores ocupaban Hermosillo,
ahora, ya que Calles nunca los despojó sino que pagó por todo lo' que"'T' * entrando por la vía del ferrocarril Sudpacífico y con el refuerzo
tomaba, mientras que ahora es rara la ocasión en que alguien paga por ", •i¡j
cualquier cosa que necesita el gobierno.® * venido a Guaymas el 27 de octubre, de la División Expedicionaria del 1t
Noroeste, encabezada por el general Gavira. Estas fuerzas resistieron :¡>;i
A fines de septiembre los callistas habían aislado Nogales, ocu,p^y'alj> l empuje villista en la última gran batalla de la revoluciónela soste­
|e
ban todo el nororiente y sus avanzadas llegaban a Imuris, sobre la lípe^NlJ nida en un punto próximo a Hermosillo llamado El Alamito, donde
del ferrocarril Sudpacífico que daba a Hermosillo. Pero las noticias ^.^5 ¿el ejército de diez mil hombres de Villa fue diezmado. Villa regresó a I ■
que Villa concentraba los restos de su ejército en Casas Grandes para .';' ' Chihuahua a campo traviesa. Fue de El Alamito a La Colorada el 25 de
invadir Sonora, obligaron a Calles a volver con todas sus tropas a] •--- ^noviembre, siguió por Tecoripa y Mazatán a San Pedro de la Cueva
seguro bastión de Agua Prieta Si Villa venía por la sierra, Agua Hdonde fusiló a 75 vecinos pacíficos; luego por Bacadehuachi, a Nátora,
Prieta sería el eslabón lógico de su marcha. Calles no habia sido ej " a Dolores, a La Trinidad y a Ciudad Guerrero, en Chihuahua. Mien-
único ni el primero en prever el viraje estratégico de Villa. Desde ijtp tras, Trujillo, Méndez y Romero, generales maytorenistas, se rendían
¡|
agosto Obregón imaginó que Sonora sería el blanco militar obligá4$||f ji á Diéguez con 1 200 hombres que tenían bajo su mando. Desde me-
de Villa para rehacer en gran escala sus ejércitos; y dispuso la moviliza- ; 1diados de noviembre, Obregón había empezado a movilizar sus fuerzas
ción, por barco, de la 2a. División de Infantería del Noroeste, al mando ;; y en la frontera; el 15 de ese mes ocuparon Naco, y luego se extendieron
del general Diéguez, de Guadalajara a Guaymas. Ángel Flores, afcM, .■¡..sobre la vía férrea hasta que el 26, la caballería mandada por Lázaro
frente de la columna expedicionaria de Sinaloa, había avanzado Cárdenas ocupó Nogales. Lo demás fue restablecer comunicaciones,
por el sur hasta tomar posesión firme de Navojoa. Diéguez llegó con «a p la ca r partidas dispersas Sólo hubo una batalla más la que sostu-
j . . _ . (¡ V
vieron
IP m n las fuerzas
las Til p rc a s ndep lCalles y Ángel
.a U P S V Ancrpl Flores
h lr\rpc fen
*r\ San
S an Joaquín
Trvarmin contra
sus tropas a Sonora el 12 de octubre, ocupó Guaymas y Empalme ; ¡!
el 13 sin que el general Ramón V. Sosa, aquel controvertido prefecto de ,;;j. I la columna villista, más o menos intacta, del general Rodríguez que
Altar, le opusiera resistencia. Ángel Flores se unió a él en Empal; no había podido incorporarse a tiempo a El Alamito y participar en
me. Mientras tanto, guiadas por Fructuoso Méndez, las tropas villistas ;■ aquella lucha. Flores y Calles que hablan sostenido los únicos dos bas-
hacían su terrible jornada por los acantilados desnudos de Paso del .i; í¡ ñones carrancistas en Sonora, en Agua Prieta y Navojoa, pusieron así
Púlpito. “Los hombres atenazados por el hambre —escribiría cornpa- fin al villismo en los mismos terrenos donde Obregón, años antes,
sivamente Calles— quedaban abandonados en el camino para encontrar :• diera el golpe de gracia al orozquismo.11
1
9 Hostteter, Hermosillo, a Departamento de Estado, 9 de agosto de 191,5..*. 10 Calles, P a r te s o fic ia le s d e la c a m p a ñ a . . . , pp. 78-79.
k d s , 312.00/15822, rollo 47.
í’cfSi*'' 11 Francisco Almada, L a r e v o lu c ió n e n S o n o r a , pp. 209-10.
productor de la creación y la circulación de la riqueza. Sería una
U N A N G E L R E P U B L IC A N O
república de pequeños productores, antimonopólica y hostil a la gran
. acumulación y al privilegio. Una república ilustrada, rebosante de
escuelas, de libre concurrencia política y elecciones abiertas, con prensa
Meses antes de que las balas terminaran con el villismo en Sonora
de oposición fomentada oficialmente y propiedad privada equita­
en agosto de 1915, Plutarco Elias Calles fue designado gobernador y
tiva. O, como lo decía el lema final del programa: “Tierra y libros
comandante militar del estado. La fiebre republicana y legislativa
para todos.” Vale decir: medios de producción y luces cívicas para
el dominio purificador de la reconstrucción, se apoderó entonces de
todos.12
sus acciones. La república que Calles soñó para los sonorenses en Ja
No era quizá la aspiración compartida de todo el pueblo de Sonora,
inminencia del triunfo constitucionalista fue descrita por él mismo en
pero algún oscuro presidente municipal —Diego L. Ortega, de Ca-
un programa de gobierno expedido el 4 de agosto de aquel mismo
borca— podía expresar a su modo, resumido, el mismo sueño.
año. José María Luis Mora no habría rechazado este sueño -que
Caborca necesitaba, decía Ortega,
ochenta años después un fracasado maestro de escuela erigía como
estandarte en la frontera norte del país, tan ajena siempre a los libe­ maestros que nos eduquen a esta juventud en principios más morales, que
rales decimonónicos mexicanos, excepto como refugio político o vecin­ se acomoden mejor a la altura que como mexicanos nos corresponde ocupar;
dad precaria con la pujante nación norteamericana que admiraban.' necesitamos mecánicos que eduquen a esta juventud en la perfección del
Los cimientos de aquel sueño —dijo Calles en su programa—- serían jos trabajo, necesitamos aquí hombres de empresa, hombres de iniciativa que
“mártires de la idea” que seguían cayendo aún “frente al enemigo” ; desarrollen negocios, ya que este suelo nos brinda sus riquezas por medio de
su inspiración: el “anhelo de reformas sociales que cada soldado la agricultura, la minería, la cría y tantos otros ramos que pudieran desarro­
siente en su corazón y consuma con su fusil” ; en el frontis llevaría ‘l i l i llarse... siempre que tuviéramos aquí maestros competentes, que gra­
grabada la invocación eterna de las garantías individuales y la cóns-; baran en nuestra juventud, que grabaran en nuestro pueblo, la idea fija del
titución de 1857. progreso.13
En aquella república la educación sería la “base más firme de la
democracia” y se implantarían, contra las instituciones reaccionarias^ Principios morales: sintomático y trágico que el posterior artífice
“aquellas que el progreso y la civilización de un pueblo exigen”. La de uno de los sistemas políticos más corruptos de América Latina,
haya iniciado su carrera de gobernante asumiendo con toda la intran­
venalidad de los funcionarios judiciales sería erradicada y ninguna
autoridad civil o militar coartaría el libre voto de los ciudadanos. sigencia de un ángel exterminador la consigna de moralizar a los
ciudadanos; librarlos de sus vicios, acercarlos a las luces de la civili­
La libre manifestación de las ideas sería inalienable, habría un apoyo,
zación por medio de escuelas que desataran el “yugo de la igno­
decidido a la “prensa de oposición honrada en principios y ajena a
rancia, causa primordial — como el mismo Calles decía— de que
todo personalismo”. El gobierno favorecería a “las agrupaciones políti­
cas de carácter permanente que defiendan ideales y principios bajo la nuestro pueblo sea víctima de la explotación de los burgueses adi­
nerados”. Antes de que pudiera gobernar efectivamente sobre el
forma de un programa” : los principios lo serían todo, los hombres
nada. La agricultura en aquella república dejaría de emplear “pro? estado, entre septiembre y diciembre de 1915, Calles expidió cerca
cedimientos antiguos y rutinarios, mala herramienta y peor o ninguna de veinte decretos fijando estas nuevas normas de convivencia: no se
maquinaria”. Se dictarían leyes para repartir la tierra buscando la podría beber ni producir alcohol, no se podría jugar con apuesta, sería
“mayor subdivisión de la propiedad”, a fin de hacer de la agricul-: obligatoria la fundación de una escuela primaria en todo lugar donde
tura la base de la riqueza nacional: una colmena de pequeños propie­ hubiera más de veinte niños, las empresas mineras e industriales
tarios capaces de innovar, sembrar modernamente, usar los servicios deberían poner escuelas nocturnas para los trabajadores; habría un
de un banco agrícola oficial que el gobierno crearía. No habría mo­ programa de bibliotecas y escuelas de adultos; se fundarían un hospicio
nopolios y en cambio se cuidaría y estimularía el bienestar del pequeño
12 Programa de gobierno del gobernador interino y comandante militar del
comerciante y el pequeño productor. La carga hacendaría dejaría de estado de Sonora, general Plutarco Elias Calles, 4 de agosto de 1915, expedido
gravitar sobre el pequeño capital y exigiría más del grande. La noción en Agua Prieta, B o le tí n O fi c i a l núm. 1, tomo i, 13 de septiembre de 1915.
decisiva de esta república era, quizá, que el Estado, el gobierno, sería 13 Informe rendido al gobernador del estado por Diego L. Ortega, presidente
el estimulador, el protector, el vigilante, pero también el regulador y el municipal interino de Caborca, 14 de junio de 1916. a c e s , tomo 3072, primera
parte, legajo 2.
y una escuela de artes y oficios para los huérfanos de la revoluciórr r? A mí no me importan las personalidades, me interesan y tengo que defen­
una escuela normal en Hermosillo. Moralizar fue también combatir lá ‘-i der los principios [ ...] . Jamás me prestaré para una farsa. En épocas muy
usura y el despojo prohibiendo el inveterado pacto de retroventa —cspc- | difíciles de [la revolución], mi conducta y mi labor revolucionaria fue siem­
cié de hipoteca con intereses altísimos cuya consecuencia por lo genera) pre sincera, siempre franca, jamás escondí nada para mis correligionarios y
era la pérdida del bien dado en garantía. Y suprimir las “planchas” compañeros. En la época actual esta conducta se ha acentuado más y yo no
o separas de torturas, en la penitenciaría del estado, lugar de suplicios he tenido secreto para ninguno de los compañeros del gobierno [ ...] . El
atroces que constituían un “atentado a la civilización y a los ideales de camino recto, llano, sincero es el único que acepto, jamás seguiré un camino
la revolución constitucionalista”. Moralizar fue buscar la indepen­ tortuoso. Yo no soy un hombre político en el sentido en que comúnmente
dencia efectiva del poder judicial “elemento sine qua non de todo se toma esta palabra, y por este motivo no puedo permanecer dentro de un
gobierno republicano” y acabar con la corrupción municipal prohi­ círculo en el que se hace política.15
biendo la reelección de alcaldes y comisarios.1,4
Moral, ideales, civilización, gobierno republicano: antes de en­ La historia es cruel con los sueños e implacable con la moral. De
frentar las difíciles tareas de gobernar un territorio sacudido, desarre­ todo el impulso primero de aquel Calles en torno a la nueva fundación
g l o económicamente; todavía con el ánimo heroico de ver alzarse al de la vida sonorense, lo que quedó — la tendencia perdurable que las
propio ejercito con el triunfo, Calles tuvo el impulso de creer que exigencias prácticas obligaron a consolidar en los años siguientes—
de sus confianzas en la ilustración, su odio a la oligarquía, su fallida fue lo menos luminoso: la reconstrucción hacendaría, administrativa
prosa épica, nacerían la regeneración y la felicidad del pueblo sono- y política del gobierno estatal, la habilitación de ese aparato para
rense. Hay que imaginar a este militar mediocre, antiguo náufrago resolver carencias estratégicas de una sociedad en situación de emer­
de todos los oficios, borracho consuetudinario, emergiendo triunfal y í gencia, una política agraria fundada en la propiedad privada y la
como iluminado de la lucha; como si su vida anterior no fuese más agricultura empresarial, una política obrera eficaz a fuerza de alianzas,
que estopa quemada en la hoguera de la revolución. Hay que imagU i f medíatización y reformas, y la muy porfiriana ferocidad civilizadora:
narlo saliendo purificado de ese oprobio, asumiendo la misión de la campaña yaqui de 1916 a 1919. Como jefe militar del estado o como
curar al pueblo de sus vicios, de su tontería, de su indisciplina, gobernador del mismo, Calles es la figura constante de los años de la
de su relajamiento, de todas las cosas que había visto en él mismo, historia dé Sonora que van de la derrota del villismo a la rebelión
que habían sido su pasado. Clausuraba el pasado de Sonora como si de Agua Prieta en abril de 1920. Fue gobernador interino hasta
clausurara el suyo propio y se viera nacer, renovado, junto a un pueblo - 4 mayo de 1916, en que llegó De la Huerta a suplirlo, dejándole el mando
también nuevo. Hay que imaginarlo firmando los decretos contra el militar. De la Huerta ocupó el interinato hasta que las elecciones
alcohol, contra el juego, contra la corrupción municipal, como si cre­ constitucionales por lo que faltaba del período de gobierno normal,
yera fundar otra vez la historia, como si el mundo recomenzara. Éste • encumbraron nuevamente a Calles en junio de 1917. Recién electo
es el Calles que la obligatoria realidad iría limando y destruyendo % en 1917, Calles pidió licencia para ocuparse de asuntos militares y fue
hasta volverlo el paradigma de la autoridad, la manipulación y la falta designado gobernador interino Cesáreo Soriano, quien duró en el cargo
de escrúpulos de la familia revolucionaria mexicana; éste el que hasta julio de 1918 en que fue removido por conceder una licencia
creyó en agosto de 1915 que < i materia de militarismo México había '* de juego en Navojoa. Las elecciones de 1919, trajeron otra vez a De la
roto “con la tradición de .los pueblos latinoamericanos”, el que curó Huerta al gobierno constitucional de Sonora.
del vicio del robo a la ciudad de Cananea fusilando a los infractores de La obra política y legislativa de Calles y De la Huerta entre 1916
la ley; el que volteó su furia en 1918 contra el gobernador interino y 1920, fue siendo cada vez más la respuesta a problemas específicos y
Cesáreo Soriano y lo depuso por haber concedido a trasmano una cada vez menos el eslabonamiento drástico de un proyecto global de
licencia de juego en Navojoa; el que meses antes, irritado por las cambio revolucionario. En la cura de estos problemas reales, hallaron
maniobras del congreso local para evitar que el mismo Soriano fuese ambos formas intermedias que anticiparon muchos de los rasgos del
designado gobernador escribió a los intrigantes:14 Estado mexicano de los veintes. Lo que sigue es, en parte, la descrip­
ción de esos hallazgos.
14 Tanto los decretos de Calles como los de Adolfo de la Huerta que se
citarán en adelante fueron apareciendo publicados en el B o le tín O fic ia l del
gobierno sonorense del cual hay una colección completa en el archivo general 15 El caso de Soriano en c e s , tomo 217, carpetas 2 y 3. La carta de Calles
del gobierno del estado de Sonora, en Hermosillo. .V^li a la diputación permanente en o e s , tomo 211, núm. 20, 13 de noviembre
de 1917.
LA C R IS IS E C O N Ó M IC A Y H A C E N D A R IA
El estado está en bancarrota —explicaba el congreso local—- detid& TOb»
mentó que las contribuciones no son pagadas puntualmente, ya sea que algu­
A principios de 1916, Sonora era un territorio como no había sido nos alegan ser muy altos sus avalúos y otros que dicen que no tienen con qué
desde las épocas de Gándara, setenta u ochenta años antes: pueblos pagar. En fin, no hay ingresos en las arcas del gobierno, que tiene que cum­
plir sus presupuestos.10
enteros habían emigrado o estaban en ruinas, .los capitales habían
huido, los valles antes fértiles vivían en la zozobra y el abandono, la
El año de 1918, sin embargo, registró dos casos significativos, y
escasez de cereales era crónica, el comercio especulaba ayudado por
contrarios entre sí: el primero afectó los intereses de varios causantes
la misma escasez y por el desastre de la moneda constitucionalista de
mayores, entre ellos dos poderosas compañías norteamericanas; el
curso forzoso cuya depreciación se multiplicaba en los estados fron­
segundo exhibió el tipo de intereses que la reorganización del Estado
terizos por la proximidad del dólar. Muchas negociaciones habían
respetaría accediendo a transacciones: el de la liga de garbanceros del
detenido sus actividades. La guerra reciente había-saqueado haciendas
sur de Sonora representada por Álvaro Obregón.
antes ricas, la ganadería era una ruina. El paso de los ejércitos había
Como una medida táctica, a partir del mes de febrero de 1918,
dejado cicatrices, odios y vestigios humeantes en pueblos aislados y
la dirección de Hacienda del esitado empezó a celebrar convenios
pacíficos. Los yaquis empezarían a vivir uno de los clímax de su acción
bélica. con los causantes morosos: la intransigencia de años anteriores había
servido, al parecer, sólo para acumular más las deudas. El tono con­
El signo favorable en este panorama crítico, si no desolador, era
ciliatorio de Hacienda era una forma de entrar a las vías de hecho.
que el estado contaba por primera vez desde el triunfo maderista de
Poco tiempo después se iniciaron embargos a contribuyentes que se
Maytorena, con un mando político único, prestigiado. Las últimas
habían mostrado rebeldes aun a los convenios. Eran en lo fundamental
épocas del maytorenismo, su desbordamiento y su anarquía, habían
particulares, la mayoría miembros de la antigua oligarquía porfiriana:
abonado el terreno en forma óptima. No sólo por mitomanía Calles
Manuel Bringas Sucs. de Ures, Fermín Camou de Hermosillo. Pero
se veía a sí mismo, en el norte, durante las últimas batallas contra el
el pleito era menos simple con otros deudores: la Richardson Cons-
villismo, como el redentor de su pueblo; su triunfo era ansiado, de­
truction Company cuya deuda rondaba los 300 000 pesos y la Wheler
seado; quienes habían sufrido los excesos del maytorenismo (es decir: Land Company, de,Moctezuma, que debía la mitad de esa cifra.
casi todo el estado) veían en Galles y en el constitucionalismo si no la
El intento de embargo ocasionó la protesta por vía diplomática
salvación, al menos la promesa de un orden. Pero la crisis económica
de las compañías. En su informe de gobierno de septiembre de 1918
daría a estos gobernantes indisputados un margen muy escaso de
Calles dio una respuesta colérica e intransigente a los quejosos. La
acción. colonización del Valle del Yaqui, dijo Calles, se había visto detenida
La hacienda estatal estaba exhausta, como simple consecuencia en parte debido a los yaquis pero sobre todo por “la labor obstruc­
de que la economía tradicional estuviera prácticamente paralizada. cionista, consciente y constante que ha venido desarrollando la Cons­
Sólo hacia 1920, la hacienda estatal pareció recobrar su normalidad. tructora Richardson, perjudicial en grado extremo para los agricul­
La precariedad de la situación obligó a los gobernantes a erigir contra tores de aquellos campos pues muy a menudo les niega el agua
toda consideración, las necesidades de recaudación oficiales. La regu- haciéndoles perder las cosechas en gran porcentaje”. La Richardson,
larización del sistema hacendario no se dio sin que, para lograrla, el dijo Calles, se amparaba en una concesión porfiriana “escandalosa­
gobierno local impusiera sus razones y sus necesidades a causantes mente favorable” ; tenía ya en monopolio 260 000 hectáreas y se dedi­
antes intocables, particularmente a la vieja oligarquía y a ciertas fir­ caba en los últimos años a “la compra de terrenos y no a los trabajos
mas extranjeras como la poderosa Compañía Constructora Richard- de irrigación que tiene completamente abandonados” y eran el requi­
son, colonizadora porfiriana del Valle del Yaqui. Las urgencias hacen­ sito de la concesión de que gozaba. Por su parte, la Wheler Land
darías fueron origen directo de una de las experiencias dominantes Company se había hecho de 404 000 hectáreas en Moctezuma y
de estos años en los gobernantes sonorenses: imponer las necesidades de
la reconstrucción estatal a todo interés privado. M 10 Congreso local a Demetrio Murillo, Ures, 3 de diciembre de 1917. ces ,
Durante esos años difíciles, sistemáticamente, el congreso local y tomo 212, carpeta 2, núm, 67.
. íiN

Sahuaripa. Con esas tierras sólo pretendía “explotar a nuestros nació, !? añadiremos algunos rasgos. Baste decir ahora que sus empresas sono-
nales, por medio d e ruinosos arrendamientos”. Ambas empresas, decía : renses reunieron en una unidad sólida varias ventajas: su influencia
Calles, buscaban el acaparamiento de la tierra no para trabajarla, '"-‘fp-JS' política como guía y solicitador de inversiones públicas, la vastedad
sino para e s p e c u l a r con ella. Si las compañías referidas querían seguir organizativa —humana y técnica— de sus proyectos agrícolas y <¿<J
operando en México, lo harían respetando en todo momento las leyes comercialización, SU autoridad local, nacida de estas condiciones y
del país. Y para que no quedara duda de a qué se refería, Calles citó de la evidente mejora de las ganancias en sus asociados, muchas veces
en su argumentación un párrafo de la recientemente promulgada sólo pequeños productores. Si a esto se añade el eslabón de su nacio­
constitución: “La nación tendrá en todo tiempo derecho de imponer nalismo, particularmente en sus gestiones para diluir en Sonora el poder
a la propiedad privada, las modalidades que dicte el interés público.” de la Compañía Richardson —cuyos últimos funcionarios se habían
Por último, agregaba algo que, en este caso, estaba lejos de ser una negado a vender tierras a mexicanos—- se obtiene el prototipo de algo
simple bravata: que habría que llamar un “capitalismo nacionalista revolucionario”.
Entre los primeros pasos sólidos hacia la formación de esta gran em­
N
i Fue práctica acostumbrada que las grandes compañías extranjeras impu­
sieran en Sonora su voluntad, pisoteando así nuestros derechos y convir­
presa personal, política y técnica cuyos monumentos históricos son el
hecho vivo llamado Ciudad Obregón y la agricultura capitalista
tiéndose casi en nuestros tutores; con lo anterior quedará plenamente demos- V del noroeste, hay que citar la recuperación de las siembras garban­
p
trado que el actual gobierno no permite, ni permitirá la intromisión de ceras en el sur de Sonora hacia 1917. A principios del año siguiente, la
ü compañías ni de gobiernos extranjeros en nuestros asuntos interiores.17 hambrienta hacienda estatal descubrió en este producto una fuente
generosa de ingresos y gravó la exportación de la leguminosa con un
El problema diplomático no fue sencillo, pero la tenacidad admi­ impuesto por saco que pareció excesivo a los productores. La protesta
nistrativa y judicial del gobierno dio frutos al año siguiente. A prin- no se hizo esperar; fue violenta e irresistible, porque el descontento era
cipios de 1920 se habían ejecutado los embargos por impuestos atrasa- '< encabezado por Álvaro Obregón, desde el año anterior avecindado en
dos contra la Compañía de Terrenos de Sonora ($173 000), la ' Cajeme y organizador de los agricultores garbanceros del sur. La fuerza
Wheler Land Company ($162 000) y estaba a punto de emprenderse política de Obregón inclinó la balanza (por única vez en la historia
el de la Compañía Richardson ($352 000). El pleito ganado a las hacendaría de esos años) a favor de los causantes. La solución al
compañías extranjeras debilitó su posición y su prestigio frente al , pleito estuvo lejos de ser desfavorable para el gobierno y desde luego
gobierno local, especialmente si se comparan estas derrotas con las nota- fue lucrativa para los querellantes. Obregón asumió ante el gobierno
bles ventajas de que habían gozado hasta entonces. En 1922, sin del estado la responsabilidad por toda la producción y compraventa de
embargo, la Compañía Richardson volvió a traer técnicos y a invertir la cosecha de la Liga Garbancera. En dos partidas, sin más trámites,
en la mejora de sus instalaciones, revisó sus proyectos, reacondicionó pagó al gobierno 100 000 pesos fuertes de plata por concepto de im­
viejas obras e instaló nuevas, pero una tremenda avenida del río puestos globales. Es seguro que la cantidad as! pagada fue menor de la
en 1923 destruyó mucho de lo hecho, arruinó la maquinaria, inutilizó que habría rendido la aplicación del impuesto derogado, pero es tam­
materiales de construcción y puso a la compañía contra la pared en el bién cierto que el pago efectivo en dos partidas suponía para un
aspecto financiero. Aprovechando esta semiquiebra, dos años después erario siempre en problemas un alivio inmediato y hasta una solución
(por intermedio del mayor empresario del Valle para esas fechas, favorable. Pelear con Obregón hubiera sido políticamente ruinoso,
Álvaro Obregón) el gobierno federal compró a la Yaqui Land and H no sólo por su influencia política dentro y fuera del estado, sino por los
Water Company la totalidad de las acciones que poseía sobre los muy concretos intereses que representaba en la economía en reaco­
negocios de la Richardson (es decir, el 66%) y la administración modo de Sonora. La Liga Garbancera suponía más del 70% de la
de aquellas tierras fue asignada al sistema del Banco Nacional de producción total del estado para esos momentos; de los productores
Crédito Agrícola y Ganadero, S. A.18 no afiliados y de las haciendas que mantenía bajo su administración, el
La historia del Obregón empresario está por hacerse, y adelante erario estatal había podido obtener apenas, en el mismo año de 1918,
unos 26 000 pesos.19 Golpear a las compañías extranjeras y facilitar
17 Véanse los informes de gobierno de Cesáreo Soriano, 31 de mayo de 1918, las cosas a Obregón, aunque hechos contrarios desde el punto de
y Plutarco Elias Calles, 16 de septiembre de 1918, en c e s , tomo 218, carpeta 2,
núm. 164. 19 Calles, informe de gobierno del 16 de septiembre de 1918.
18 Claudio Dabdoub, H i s to r ia d e l V a lle d e l Y a q u i , p. 326.
futuras del estado mexicano) nada fue más decisivo en su acción que
vista de la política hacendaría, eran confluentes desde el punto de vista la ofensiva contra los propietarios “enemigos de la causa”. Muchas
histórico y social: abría las compuertas al nacimiento de la nueva ' decisiones del gobierno significaron en esto una alteración drástica
oligarquía sonorense (pues la revolución había acabado o al menos de la nómina de propietarios sonorenses y el traslado de muchos
postergado a la porfiriana) y refrendaba para esta nueva e incipiente
bi-CIteS a la adntiriNtrac'lbTi gubernamental. P ara este traslado exis­
burguesía los privilegios que su índole nacionalista pudiera arrebatar tía el jugoso antecedente de la intervención de “bienes de ausentes”
a los enclaves capitalistas extranjeros.
practicada desde los inicios del alzamiento contra Huerta por el
gobierno de Pesqueira. Aquella práctica se había regido entonces, como
habría de regirse en los años siguientes, por un criterio fundamental­
mente político: se afectaba a los enemigos de la causa, no a los repre­
E M B R IO N E S D E U N ES T A D O ACTIV O
sentantes de una clase. Pero los “enemigos de la causa” tendieron
por lo general a coincidir con los grandes hacendados y comer­
ciantes porfirianos de Sonora. Al abrir el año de 1916, la intervención
Las alteraciones del régimen de propiedad y el juego “libre” de la de bienes de ausentes había golpeado prácticamente a toda la oligar­
economía sonorense, no incluyeron el traslado de los bienes o de las quía porfiriana —no extranjera— y a los amigos del maytorenismo,
fábricas a los agricultores sin tierra o a los trabajadores. Ningún es decir, a una parte mayoritaria de lo que Calles llamaba “los bur­
decreto de Calles o De la Huerta afectó el principio de la propiedad gueses adinerados”. En febrero Carranza ordenó que la administración
privada; los más radicales sólo definieron temporalmente como de de aquellos bienes pasara a jurisdicción federal. El inventario que
utilidad pública, la explotación de tierras o empresas abandonadas por acompañó la entrega formal de los expedientes a la federación, exhibía
sus dueños legalés. En cambio, varias medidas otorgaron a la acción como intervenidos los bancos, haciendas, testamentarías, casas habita­
gubernamental un papel estratégico en la regulación de la economía ción, etc. de los más poderosos empresarios, comerciantes y políticos
para resolver situaciones de emergencia. Por ejemplo, la decisión de de la época torrista y la hegemonía maytorenista: los hacendados
crear a principios de 1916 una comisión reguladora de comercio, orga­ Salido, José Tiburcio Otero, Jesús Morales y Ángel García Peña,
nismo del gobierno destinado a controlar el alza inmoderada de Lorenzo Torres, Maytorena, Eduardo Camou, Arturo Morales, Arturo
precios, la especulación y la carestía. Los comerciantes fueron obliga­ y León Serna, Francisco F. Aguilar. Sólo en el mes de noviembre
dos a exhibir públicamente la lista de precios de bienes básicos (café, de 1915, cuando los ejércitos constitucionalistas empezaron a dominar
frijol, maíz, manteca de res y cerdo, petróleo, velas, trigo, etc.) y el sur del estado, fueron intervenidos 91 propietarios enemigos del
quedaron sujetos a la inspección oficial en sus transacciones. No sólo constitucionalismo.21*
eso: a mediados de 1916 De la Huerta creó una red estatal de comercio A fines de enero de 1916, mediante el decreto núm. 32, Calles dio
abriendo expendios municipales en las poblaciones más importantes. el último paso en esta escalada expropiatoria que alteraría tan fun­
Los expendios eran, a juicio de su impulsor, “la manera más práctica damentalmente la continuidad de la oligarquía sonorense. El criterio
y efectiva de beneficiar al pueblo y nulificar la acción de los amigos político no varió: la expropiación fue lanzada contra los enemigos,
en el terreno económico-político”.20 Los “precios justos” no evitaron no contra los propietarios. Calles señaló que la magnanimidad con
que los expendios municipales rindieran pronto utilidades: 54 mil pesos los “eternos enemigos de la libertad y el progreso de México”, no
ganaron el mes de agosto de 1916 en Hermosillo y más de 100 mil en hacía sino envalentonarlos e inducirlos a “redoblar su infatigable acti­
todo el estado; para septiembre, casi doblaron sus ganancias en Her­ vidad”. Por ello, dejar en sus manos recursos económicos de impor­
mosillo: 94 mil pesos. tancia era volverse cómplice de la reacción. Declaró, pues, el paso a
Como se verá más adelante, el gobierno estatal tuvo también dominio del gobierno estatal de “todos los bienes que hasta la fecha
papeles estratégicos en la reorganización de la agricultura y en la hayan sido propiedad de las personas que, moral o materialmente, han
adecuación de la estructura de salarios y las condiciones del trabajo. prestado apoyo o ayuda alguna al partido reaccionario”.
Pero acaso (por sus efectos y por lo que anticipa de las funciones Como es imaginable, un criterio clasificatorio tan vago —especial-

20 De la Huerta a Carranza, informe de actividades del gobierno durante 21 Véase a g e s , tomo 3119, la. parte, legajo “Bienes Intervenidos”, expe­
el mes de agosto, 5 de septiembre de 1916. a c e s , tomo 3071, primera parte, diente general núm. 4.
legajo núm. 16.
píiSI I’Íl A

mente por expresiones como “apoyo o ayuda alguna” o lo que pudiera ' siendo identificados con los enemigos de la autoridad y del control
entenderse por “partido reaccionario”— no tenía en la práctica sino vertical desde el poder ejecutivo: igual los petroleros que los obreros
una. consecuencia: alguien debia decir quién quedaba de un lado y de la Casa Mundial, igual los zapatistas que ciertas compañías mi­
quién de otro. El decreto reservaba este juicio divino al ejecutivo del neras, igual Villa que, más tarde —para desgracia de Carranza—
estado, que tendría facultad para ventilar casos particulares. Pocas los mismos sonorenses.
cosas podían fortalecer tanto al gobernante de un estado en crisis La hebra que une la trayectoria carrancista y la experiencia sono-
económica como este poder discrecional para afectar prestigios y rense de la revolución, más que un proyecto de sociedad o de cam­
haciendas. En buena praxis política, el decreto quería decir que los bio revolucionario, es la búsqueda de la consolidación del estado
únicos aliados del gobierno serían sus aliados irrestrictos, sin que, político como árbitro supremo y gestor directo de las fuerzas sociales
en los casos particulares, contara su origen o sus intereses: con el surgidas de la revolución.
gobierno todo, contra el gobierno nada.
En mayo de 1916, Calles enfiló de nuevo el fantasma y la espada
í* de la administración estatal contra los empresarios privados. No pre­
tendió expulsarlos de su actividad, pero fijó como de utilidad pública U N A G R A R ISM O AGRICO LA

la explotación de las negociaciones mineras e industriales paralizadas;


los dueños, nacionales o extranjeros, recibieron un mes de plazo para
II ponerlas a funcionar. De no hacerlo, advirtió Calles, el gobierno En los albores de 1916 llegaron a Sonora varios jóvenes egresados de
tomaría “a su cargo, temporalmente, la administración de los negocios la Escuela Nacional de Agricultura. Entre ellos: Juan de Dios Bojór-
que juzgue conveniente” ; lo tni-ano sucedería con las empresas que quez y Luis E. León. Venían a integrar la Comisión Local Agraria que
¡ SI' pararan sus actividades por más de ocho días sin razones justificadas. desahogaría en el estado los problemas técnicos a que diera lugar la
i
Un año después, en julio de 1917, como consecuencia de un conflicto -':•{*« Je aplicación de la ley agraria carrancista del 6 de enero de 1915. Las
obrero que llevó a grandes compañias mineras a parar sus trabajos, instrucciones para aquellos jóvenes deslindadores eran terminantes y
el gobierno estatal asumió por 26 días la administración de El Tigre limitativas: sus trabajos debían abordar exclusivamente la restitución
Mining Company y advirtió que de persistir la situación', las empresas de los ejidos o la dotación de ellos a los pueblos, de ningún modo el
serían confiscadas. No que al gobierno le interesara defender a los fraccionamiento de tierras que no formaran parte de los ejidos. Esto
obreros en sus demandas (pues en las negociaciones con las compañías último (decían sus instrucciones) era una faceta del poblerna agrario
Calles cedió prácticamente a todas las peticiones de éstas) sino que, sobre el que la nación no legislaba aún. Los trabajos de la Comisión
como el mismo Calles dijo a Carranza, su gobierno no estaba “dis­ Local Agraria consistirían sólo en la determinación de los perímetros
puesto a dejarse burlar por empresas extranjeras que proceden de generales de los terrenos que habría que reivindicar para los pueblos, se
una manera tan arbitraria y tan inicua y tan falta de consideración abstendrían de resolver en cuestión de aguas y bosques y tendrían
para el país que explotan”.22 La forma en que fue erigida esta prio­ un carácter meramente técnico pues la resolución final, el dictamen
ridad del dominio y el control estatales sobre todos los sectores de la ejecutivo sobre los casos investigados, sería emitido por la Comi­
sociedad, aun a riesgo del conflicto diplomático o el debilitamiento sión Nacional Agraria desde la ciudad de México.23 La regularización
de las bases sociales del mismo gobierno, fue una experiencia ge- de las tierras de los pueblos en Sonora tenía, desde luego, una conno­
nuina de la época preconstitucional y hasta 1920 en Sonora. Con H tación política, social e histórica poco semejante, digamos, a la que
distintos matices, cada uno en su estilo, tanto Calles como De la Huerta pudiera tener en Morelos. Más que de devolver sus medios directos
se abocaron a esa tarea como la fundamental en sus actuaciones de de subsistencia a un campesinado numeroso, con siglos de arraigo en
gobernantes. La situación de crisis así lo exigió, aunque no lo hubieran sus tierras y una poderosa tradición de vida comunal, en el norte
deseado. Pero también las órdenes y, en esta materia, la intransi­ se trataba de regularizar las condiciones jurisdiccionales de pueblos y
gencia de Carranza: los enemigos del constitucionalismo terminaron ciudades que habian ido creciendo muchas veces como simple excre­
cencia de negocios privados: restablecer las zonas de dominio mu-
23 W. D. King, superintendente de la Compañía Minera de Nacozari de
Agua Prieta a Plutarco Elias Calles, 8 de julio de 1917; P. Elias Calles a presi­
dente de la República, V. Carranza y a secretario de Hacienda, 3 de julio 23 “Instrucciones para la aplicación de la ley agraria a las comisiones
de 1917. a g e s , tomo 3153, legajo 1: Minería. agrarias locales”, p h s - a r m , tomo 99, f f . 308-09.
lii'H H3
nicipal sobre terrenos que seguían perteneciendo a empresas mineras ■í sideraciones de su acuerdo para reintegrar aquellos terrenos, De la
o a haciendas colindantes. Los muy pocos casos de despojo abierto ;de Huerta consignaba como la “aspiración más intensa” del constitucio­
terrenos comunales, en el sentido que estas cosas tenían en el centro nalismo, “el aseguramiento de la paz orgánica, [del] orden y la libertad
(la violación de derechos seculares y el atentado directo a la supervi-T por medio de la justicia estricta”. Para eso, decía, era indispensable
vencia de las comunidades campesinas) no fueron nunca la línea de restituir a los pueblos despojados, pues éstos, con la subsistencia ase­
conflicto agrario dominante en Sonora. Y como casos aislados, las reso­ gurada, “tendrían fe absoluta en la justicia y confianza en el
luciones de Calles y De la Huerta en torno a ellos, fueron siempre gobierno.25
favorables y perentorios, casi con independencia de la legislación fede­ Era muy distinta la situación —aunque nunca exenta de despojos
ral respectiva (desde luego sin consultar a la Comisión Local Agraria). y arbitrariedades— de ciudades como Nacozari, Agua Prieta, Santa
Dos casos: en enero de 1916 las quinientas personas miembros Ana o Cananea, surgidas de la nada en terrenos que pertenecían de
de las comunidades de San Clemente de Térapa y Pívipa explicaron a antemano a particulares o compañías mineras. A la regularización
Calles en un ocurso que aunque los títulos de posesión de sus terrenos de esos predios de dominio público se dedicó de modo preferente la
databan del año de 1707, en 1882, habían sido violentamente despo­ Comisión Local Agraria hasta 1919; fue un trabajo burocrático y téc­
jados de ellos por varios hacendados con apoyo de la fuerza pública. nico. La política agraria dominante dentro del estado marchó en
El hecho había conducido al asesinato del apoderado de las comu­ realidad por otros caminos y tuvo su momento más radical precisa­
nidades, Guadalupe Velarde, y a la única insurrección de la época mente en sus inicios, a mediados de enero de 1916, cuando Calles
porfiriana en Sonora — excepción hecha de los yaquis— por un pro­ □ i expidió su decreto núm. 27 declarando como de utilidad pública el
blema de reivindicación de tierras comunales. Perseguidos encarniza­ cultivo inmediato de todos los campos. La crisis económica y la carestía
damente — pues en la insurrección fue muerto el prefecto del- dis­ agrícola, fueron también aquí el resorte de la iniciativa. Muchos
trito, José María Torres, hermano del entonces poderosísimo Lorenzo | I terrenos de primera, informaba Calles en su decreto, permanecían
Torres— los miembros de las comunidades se dispersaron, algunos f$X' incultos y abandonados por sus dueños mientras que, paralelamente,
salieron del estado, pero nunca dejaron de pelear j.úrídicamente sus había en Sonora muchos trabajadores sin tierras ansiosos de encontrar
derechos. En la época maderista un juez federal les otorgó una sen­ trabajo. No era posible repartir las tierras sin una legislación perti­
tencia favorable y ordenó la restitución de sus terrenos. La orden no sé nente, pero tampoco era posible mantenerlas paralizadas. Por eso Calles
ejecutó. En 1914, acudieron a presentar su caso a Benjamín Hill, advirtió a los dueños que si no cultivaban sus terrenos éstos serían
en Naco. Hill reconoció la validez de sus peticiones y prohibió que se considerados como abandonados y podrían ser ocupados para su siem­
sacara ganado de los terrenos de esas comunidades; los beneficiados bra por cualquier trabajador, con el solo requisito de que el deman­
respondieron aportando 300 combatientes para las fuerza constitucio­ dante obtuviera el visto bueno de la autoridad local. El gobierno
nalistas durante el sitio de Naco. Enterado de la situación, Galles garantizaría al ocupante el usufructo del terreno durante el ciclo de la
ordenó el 2 de febrero que los terrenos les fueran reintegrados a su ~;j; cosecha, después de lo cual el propietario original podría reasumir
entera conformidad.21*De la Huerta, por su parte, restituyó al pueblo sus derechos. El ocupante sería responsable de los daños que el terreno
de Alamos, en septiembre de 1916, los terrenos de El Ranchito y pudiera recibir y renunciaba a pago o compensación por las mejoras
Tacubaya, que “habían sido donados en 1838 por el entonces gober­ que para sembrarlo introdujera en él. Seis meses después de implan­
nador Manuel María Gándara a la clase proletaria para que extrajera tado este decreto, De la Huerta reconocía que sus disposiciones “enér­
de ellos los productos naturales necesarios para su subsistencia”. Des- fC gicas y prácticas” habían hecho entrar a la agricultura en un período
pués de varias peripecias y litigios por aquellos terrenos, en 1890 el de franca actividad. Por medio de los ayuntamientos, el gobierno
gobierno federal recomendó a los gobernadores que “procedieran proporcionaba autorización para ocupar las tierras, fondos y semillas
a reducir a propiedad particular los terrenos comunales por preve­ a los agricultores ocupantes. Para agosto de 1916, decía De la Huerta,
nirlo así el artículo 27 de la constitución general”. En 1899 el gobierno se había logrado que “un número de peones mucho mayor de qui­
estatal autorizó el fraccionamiento de aquellos terrenos y su venta a nientos haya pasado a la categoría de agricultores autónomos con la
los particulares, los cuales seguían poseyéndolos en 1916. En las con­ ayuda efectiva del gobierno”.20
25 B o le tí n O fic ia l, núm. 12, tomo ni, 16 de septiembre de 1916.
21 D. P. Márquez, de Cananca, a gobernador del estado, 3 de agosto de 1916. 20 De la Huerta a Carranza, informe de actividades durante el mes de
a g e s , tomo 3089: Moctezuma, expediente núm. 1. agosto, 5 de septiembre de 1916. a g e s , tomo 3071, primera parte, legajo 16.
v * Üjst
La concepción agraria del constitucionalismo reparó por una nece­ :'ÍÉj tica y social de los agricultores pobres que desde tiempo inmemorial han
sidad táctica y política en la conveniencia de restituir a las comu­ guardado la condición de peones.28
nidades sus tierras; pero su aspiración confesada fue siempre la de los
viejos liberales mexicanos: una agricultura de pequeños propietarios En una tradición agrícola como la sonorense donde la irrigación,
capaces, modernos, autosuficientes. No otra cosa fue la aspiración de la exportación, la maquinaria, no eran hechos aislados sino obliga­
los gobiernos sonorenses entre 1916 y 1920. El decreto núm. 27 de Calles torios por la escasez de mano de obra y agua, donde el hacendado
respetaba la propiedad, pero abría el paso a un tipo de “agricultor autó­ moderno era un ejemplo claro a seguir, un paradigma regional más
nomo”, como lo llamó De la Huerta, capaz de sembrar por sí solo (sin que un foco de odio, nada podía cuajar con más suavidad y de modo
patrones) y de comercializar su producto por la libre. Para servir a este más natural que una política agraria impulsora de la empresa agrícola
tipo de agricultor fue diseñada la política agraria de Sonora en esos tecnificada y redituable. El gerente ideal que De la Huerta soñó para
años. En 1918, el gobierno estatal puso en marcha dentro de las propie­ sus cooperativas lo fue, sintomáticamente y en la región agrícola más
dades confiscadas a “enemigos de la causa” un programa de fraccio­ importante del estado, Álvaro Obregón. En él se cifraron los atributos
namiento y reparto de tierras cuyo objetivo era “crear y proteger la del organizador de productores, del representante de una agricultura
pequeña propiedad”. La medida puso a disposición de agricultores moderna, del negociador y conseguidor de inversiones federales y faci­
pobres y no propietarios lotes de siete hectáreas en las haciendas t lidades locales, del empresario en gran escala, del verdadero consuma­
expropiadas de Orrantía y Rosales de los antiguos hacendados Salido; dor de la colonización y el boom posrevolucionario de los valles del
de 6 hectáreas en San Pedro, el Citavaro y Las Moyas, de siete hec­ Mayo y del Yaqui. El triunfo constitucionalista le ahorró el trabajo
táreas en Santa Ana, en el noroeste del estado, etc.27 Pero quizá de derrotar comercialmente a los que habrían sido sus difíciles adver­
ninguna iniciativa de los gobiernos sonorenses de esos años es tan vi ;¿i. sarios económicos: la generación porfiriana de hacendados innova­
reveladora del tipo de explotación de la tierra que deseaban implantar, dores y eficaces como los Salido. Su posición dentro del triunfo lo puso
como la que De la Huerta echó a andar orgullosam,ente en septiem­ en la posibilidad de apartar por la suave, con apoyo del gobierno
bre de 1916: la promoción de cooperativas agrícolas.'Consistía en un federal, a los enemigos estratégicos de aquellos hacendados, enemigos
acuerdo del gobierno con “agricultores conocidos” (o sea, eficaces) favorecidos siempre por las decisiones federales y que al amparo de
según el cual, el gobierno daría tierras buenas si éstas eran explotadas ellos colonizaban las mejores tierras del Yaqui: la Compañía Richard-
en forma de cooperativas por “todos los agricultores pobres que deseen son. Su largo aprendizaje como pequeño propietario en la región,
colaborar en los trabajos que sean necesarios”. No todos los antiguos u le dio las ambiciones de los grandes proyectos y la claridad para
peones podían volverse por sí solos eficientes empresarios agrícolas; calcular realistamente las necesidades de inversión. Su prestigio adqui­
por ello, el gobierno acudía al acuerdo con los que sí lo eran. Estos agri­ rido lo volvió el líder obligado, indiscutible, de esa nueva generación
cultores capaces fungirían como gerentes de las cooperativas y pagarían de agricultores que, como él, crecieron a partir de los veintes sobre los
a los integrantes de las mismas un salario legal. El gobierno refaccio­ restos de sus antecesores porfirianos.
naría a las sociedades con semillas, fondos y toda la ayuda legal Las oligarquías, como los gatos, tienen muchas vidas y varios de
requerida, inversiones y servicios que serían pagados por las coopera­ aquellos propietarios porfirianos desplazados resurgirían después me­
tivas en forma prioritaria con sus utilidades. De las ganancias, el diante alianzas productivas con los nuevos empresarios sonorenses.
gerente obtendría el 40% líquido, otro 40% se repartiría equitativa­ Pero lo cierto es que la intervención de sus bienes, su condición de
mente entre los miembros de la cooperativa, un 10% sería para el X
enemigos del constitucionalismo, los arrojó de la historia del estado,
gobierno (que se reservaba el derecho de “inspeccionar la contabilidad dejó el campo listo y las excelentes tierras del sur disponibles, para
de la cooperativa” ) y el 10% restante se destinaría a la habilita­ una renovación generacional. En 1928, el cónsul norteamerican® en
ción del nuevo ciclo de siembra. Guaymas resumió los logros del líder de esa renovación.

La aplicación de esta clase de sociedades a la agricultura —dijo De la El notable desarrollo económico de los valles del Yaqui y del Mayo en la
Huerta— hará de ésta, al mismo tiempo que una fuente inagotable de última década, pero especialmente en los últimos dos años, es atribuible en
riqueza nacional, el medio más apropiado para llegar a la emancipación poli- gran medida a la gran energía, espíritu empresarial e ideas progresistas del

28 De la Huerta a Carranza. Informe de actividades durante el mes de


27 Calles, informe de gobierno del 16 de septiembre de 1918. agosto, lo e . c it.
difunto general Obregón, pero también a su prestigio que fue acrecentado hecho en un movimiento que paralizaría los servicios públicos: teléfonos,
ampliamente por su influencia política. Esa influencia hizo posible un apoyo agua, luz, trasportes. Carranza reaccionó con extraordinaria violencia,
especial del gobierno federal (que de otro modo no se hubiera producido) en decretó la pena de muerte no sólo para los huelguistas sino, en una deta­
medidas como las de diferir los embargos anuales por exportación de gar­ llada gradación, hasta para aquel que no se retirara de una reunión al
banzo hasta que no se dispusiera de las utilidades de la venta, invertir enterarse de que en ella Se hablaba M movimiento huelguístico. Los
aproximadamente cinco millones de pesos en obras portuarias en Yavaros y lideres fueron arrestados. La Casa descubrió que, sin el apoyo del
mejorar las obras de irrigación y las tierras en los valles Yaqui y Mayo.29 gobierno, su fuerza era una quimera. La historia del ascenso y caida
de la Casa, perseguiría como una pesadilla al movimiento obrero
mexicano desde entonces: las alianzas con el gobierno facilitarían su
auge; las rupturas con el gobierno, su desastre. Dentro del carrancismo,
U N PR O LE TA R IA D O C O N PA D R IN O sólo uno de los caudillos mayores no abdicó en sus simpatías por la
organización obrera a partir de la huelga general de 1916: Álvaro
Obregón. Por su mediación, la Casa del Obrero Mundial había acce­
El 27 de febrero de 1915 la Casa del Obrero Mundial —refugio sin­ dido al pacto con Carranza en 1915, y por él no fueron aplicadas a los
dical de los artesanos, sastres, zapateros y algunos obreros industriales líderes las inauditas penas del decreto de 1916. Un funcionario menor
que componían la avanzada del naciente proletariado mexicano—• del constitucionalismo, Adolfo de la Huerta inició ese mismo año en el
celebraron un pacto con las fuerzas constitucionalistas que iniciaban gobierno de Sonora una política obrera que recogía las peligrosas
entonces su ofensiva rumbo al Bajío. Darían su apoyo abierto y activo enseñanzas de las huelgas de la Casa y su desenlace. Las claves de esa
al carrancismo, militarizándose incluso, a cambio de concesiones y política fueron exhibidas en el decreto 71, del 10 de octubre de 1916,
estímulo sorganizativos para la Casa en los territorios que los ejércitos mediante el cual De la Iluerta instituyó en el estado de Sonora una
constitucionalistas fueran dominando. Un año después, la Casa era la cámara obrera.
primera central obrera nacional de la historia de México. Admirablemente, en los considerandos del decreto, De la Lluerta •
Marjorie C. Clark describe el procedimiento: trazo uno de los velos ideológicos de mayor persistencia futura en la
argumentación a favor de la adscripción del movimiento obrero a los
Enviaban representantes a los lugares conquistados por el constitucionalismo intereses del régimen en turno. El constitucionalismo, decía De la
y utilizando cualquier organización obrera local incipiente, establecían en el Huerta, reconocía el derecho de huelga (“medio penoso a que los tra­
lugar una rama de la Casa. Logrado esto, convocaban a una o varias huelgas
bajadores han ocurrido para defender sus intereses” ) cuando se ejercía
cuyas demandas eran por lo general aumento de salarios, reconocimiento
del sindicato o sindicatos huelguistas y jornada de trabajo de ocho horas.
contra “la tendencia conservadora de los gobiernos”. Pero uno de los
Si los huelguistas ganaban —y era difícil perder si se contaba con el res­ ideales del constitucionalismo habla sido siempre la “redención de
paldo del jefe militar carrancista de la plaza— la rama de la Casa recién las clases trabajadoras” y por ello, al triunfar, el constitucionalismo
creada se volvía de inmediato el centro de los obreros organizados.30 había “conseguido llevar al proletariado al dominio del Estado”. Ésta
era la razón por la que, en el actual orden de cosas, el obrero no debía
El año de 1916 fue de grave crisis económica y monetaria. La “recurrir al sistema de las huelgas” pues tenía en el constitucionalismo,
inflación, la carestía, la especulación, la ruina de los billetes carran- dueño del Estado, al genuino representante de los trabajadores y al
cistas, trajeron, entre otras cosas, una oleada de huelgas en las ciu­ mejor sostenedor de sus demandas. Así se llegaba a la irrebatible
dades: de maestros en la capital, de electricistas en Guadalajara, de tautología siguiente: el constitucionalismo reconocía el derecho de
mineros en El Oro (Edo. de México) ; de ferrocarrileros. La protesta huelga pero sólo si se ejercía contra gobiernos reaccionarios; esta posi­
recurrente: pérdida del poder adquisitivo de los salarios. El 31 de bilidad quedaba descartada dentro del constitucionalismo pues con el
julio de 1916 los sindicatos afiliados a la Casa decretaron una huelga triunfo de éste, el proletariado había tomado el dominio del Estado.
general en la ciudad de México; por primera vez llegaban a las vías de Las huelgas podían seguir siendo posibles o hasta necesarias, pero
en el actual orden de cosas, el proletariado, que era la entraña del
Citada por Barry Carr en “Las peculiaridades del norte mexicano, , constitucionalismo, debía prohibirse ese medio. Pese a este notable
IGC0-1927: ensayo de interpretación”, en H i s t o r i a M e x i c a n a , vol. x x i i : 3, intento de diluir en un juego de palabras la muy seria agresividad
cncro-r.iarzo de 1973, p. 344. constitucionalista contra la clase obrera, De la Huerta reconocía que
Marjorie C. Clark, O r g a n iz e d L a b o r in M é x i c o , p. 33.
U(

—aunque el Estado era dominado por los obreros— el procedimiento. . %


electoral (base de la renovación y estructuración de ese Estado) no '■ de trabajo y sobre todo de conciliar, más que dirigir, a los obreros en
bastaba para garantizar que la voz del proletariado se escuchara, pues » sus luchas contra los patrones, hay que insistir en esto: fue un orga­
“los intereses políticos en juego pueden defraudar las aspiraciones /: nismo burocrático-político más que un instrumento de lucha facilitado
de los obreros”. La cámara legislativa local estaba obligada a “resolver por el gobierno a los trabajadores. Comisionaba a sus miembros para
problemas de orden político y de interés público general”, asi que no mediar en conflictos de las empresas con sus empleados, para inspec­
podía “ocuparse de manera especial de los trascendentales problemas cionar las instalaciones de las primeras, para certificar la veracidad
obreros”. Lógicamente, De la Huerta no necesitaba preguntarse cómo de una queja o de una violación a las fracciones sobre trabajo inclui­
era posible que el poder legislativo de un gobierno predominante­ das en los decretos gubernamentales. Fue, sin duda, mejor que nada,
mente obrero, al tratar los asuntos de “orden público e interés general”, porque varios obreros obtuvieron indemnización por gestiones de la
no tratara predominantemente los asuntos de los obreros. Lo cierto es cámara y más de una empresa se vio descubierta en sus procedimientos
que la cámara obrera que derivó de este galimatías teórico tuvo atentatorios y fue obligada a introducir cambios. Pero la cámara obrera
en cambio un propósito práctico lúcido, a medias confesado en la fue también un dique a la organización independiente de los traba­
exposición del decreto: crear una salida tangencial al movimiento jadores y a los enfrentamientos directos con los patrones. Y un instru­
obrero para suavizar los enfrentamiento^ y someter esa lucha al arbi­ mento de control político directo, pues tuvo jurisdicción de vigilancia
trio burocrático. Las enseñanzas de la Casa terminaban así, en Sonora, 1 sobre las elecciones de las mesas directivas o gremios obreros del
estado.31
en una fórmula sencilla: ni la represión carrancista ni el sindicalis­
mo libre: incorporación del proletariado al programa ideológico y Paralelamente al hallazgo de este medio práctico para traer la
lucha obrera al seno conciliador y al arbitrio supremo del gobierno
político del Estado.
La cámara obrera abrió sus puertas a un representante por •Mj estatal, Calles y De la Huerta dieron salida, desde muy temprano, a
cada 1 000 trabajadores o fracciones mayores de 500 (con suplente). una legislación reformista notablemente avanzada en materia laboral:
La acreditación era tramitada por las mesas directivas de las asocia­ impusieron salarios mínimos y reglamentaron la indemnización por
ciones obreras y “visadas” por la autoridad política local. Los repre­ accidentes, normaron los sistemas de trabajo en el interior de las fábri­
sentantes duraban un año en el cargo, ganaban el sueldo equivalente cas y las formas de pago a los obreros, fijaron jornadas máximas de
a un diputado y su cámara tenía, como el congreso local, períodos ocho horas y, en la mayoría de los casos, obligaron a las empresas
ordinarios de sesiones y comisión permanente. Las atribuciones de este a respetar esas disposiciones. A mediados de 1917, cuando varios de
curioso engendro de parlamentarismo obrero fueron reglamentar su los grandes minerales del norte cerraron sus puertas y dejaron sin em­
propia acción como cuerpo colegiado, estudiar formas de mejorar pleo a casi cinco mil trabajadores, el gobierno estatal asumió las tareas
la organización obrera estatal, emitir juicios periciales sobre indemni­ de proveer a los desempleados de alimentos y pasajes para otros
zaciones por accidentes de trabajo, discutir y sugerir soluciones a con­ puntos del estado o de la República, penalizó a los enganchadores de
flictos obrero-patronales, proponer candidatos para los puestos de emigrantes para las granjas californianas y resituó a varios trabajadores
inspectores de higiene y seguridad en las fábricas, promover leyes per­ en nuevas colonias agrícolas. Pero, paralelamente, el gobierno local
tinentes en su ramo y dar audiencias a los representantes patronales. fue drástico, especialmente Calles, en que el movimiento obrero no
Adscrita al aparato burocrático estatal, la cámara obrera fue una escapara a su control directo. En medio del conflicto con las mismas
dependencia más, un parachoques de conflictos y un cuerpo consul­ compañías mineras en julio de 1917, Calles se dio tiempo para ordenar
tivo de investigación y dictamen, sin ninguna facultad ejecutiva. a las autoridades municipales de Nacozari y Pilares: “Tengo informes
de que agitadores de la iw w (International Workers of the World) de
En ella estuvieron representados fundamentalmente los trabajadores de
Estados Unidos se encuentran en ese mineral haciendo propaganda
los grandes minerales sonorenses: El Tigre, Cananea, Nacozari, Moc­
de huelga. Si es cierto esto sírvase aprehender a esos individuos y
tezuma; de las ciudades más importantes: Hermosillo, Guaymas, Ures;
mandarlos al otro lado de la línea.” Lázaro Gutiérrez de Lara, agitador
y de ciertas fábricas aisladas, como la de Los Ángeles, industria
magonista de la época de la huelga de Cananea, y para esas fechas
textil, y el ferrocarril Sudpacífico.
Según se desprende de sus expedientes, la cámara obrera tuvo las 31 Para la cámara obrera véase a g e s , tomo 3063, que contiene una parte
funciones de una agencia encargada de conocer las quejas y las viola­ de sus expedientes y el tomo 3127 que contiene el inventario del archivo de la
ciones de las leyes, de levantar expedientes de conflictos o accidentes extinta cámara obrera, formado por el ayuntamiento de Hermosillo en marzo
de 1918.

i
vicepresidente de la Federation of Labor de Arizona, recibió un trata- ¡ j l aún donde la civilización lo había ya implantado.” 84 Antes de empezar
miento más duro: fue fusilado en Sáric a principios de 1918.32 el año de 1916, la campaña formal contra los yaquis estaba en-marcha.
A la luz de este juego del control obrero, las concesiones refor- m Volvieron a oírse, como ecos de lo sucedido quince, veinte o treinta
mistas y la hegemonía del gobierno en la alianza, no es sorprendente (¡i años atrás, los alegatos de siempre, las razones- de siempre} la
que fuera Calles, más tarde como ministro de Industria y Comercio bilidad de siempre de someter a ios yaquis.
de Carranza, quien cuajara la alianza de los sonorenses con Moro­ El 10 de enero de 1916, Calles ordenó a los hacendados e indus­
nes. El olfato de Obregón frente a la Casa del Obrero Mundial y el triales que presentaran un informe mensual con “número y nombre”
de De la Huerta ante la cuestión obrera sonorense, derivan a fin de de sus peones, y un registro de cuáles desaparecían, cuáles eran nuevos
cuentas de una experiencia histórica común: los estragos que hizo y cuáles hacían “causa común con los alzados”. Calles explicaba a
en el régimen torrista la huelga de Cananea, las notables ventajas Carranza lo que sus antecesores se habían cansado de decir a los equi­
militares y políticas que tuvo, durante el levantamiento contra Huerta, valentes jefazos porfiristas y maderistas: “Algunos hacendados e indus­
el control obrero como forma de mantener activas las grandes com­ triales de la región del Yaqui han protegido a los rebeldes con el
pañías mineras pagadoras de altos aranceles, la certeza de que sin objeto de utilizarlos en trabajos y ocultarlos contra la acción del go­
algunas reformas y la ampliación social de ese control, los obreros bierno, a sabiendas de que hacen armas contra las instituciones esta­
mexicanos serian en el país una materia tan inflamable como lo habían blecidas.” 35 Unos días después Calles solicitaba y obtenía de Carranza
sido los mineros en Sonora. la autorización para declarar fuera de la ley a todos los indios yaquis
descubiertos en los caminos sin salvoconductos firmados por sus patro­
nes. Los yaquis, decía Calles, habían entrado en actividad “cometiendo
una serie de robos y asesinatos en las poblaciones indefensas”. A prin­
cipios de marzo había en la campaña del Yaqui once mil soldados
L A S L E Y E S D E LA C IV IL IZ A C IO N
regulares repartidos en tres columnas bajo la comandancia directa de
Francisco Serrano y los generales de brigada Francisco R. Manzo,
Eugenio Martínez y Enrique Estrada —más las guarniciones nume­
El Boletín Militar de las fuerzas de Diéguez en Hermosillo publicó
rosas de Álamos (al mando de José J. Obregón), Cócorit, Empalme
después de la batalla de El Alamito una gacetilla: “Todos los prisio­
y Guaymas.30 Para junio, los yaquis habían sido expulsados de sus
neros yaquis cogidos con las armas en la mano fueron fusilados inme­
madrigueras principales en la sierra y habían empezado a correr
diatamente, comprobando que el mejor yaqui es el yaqui muerto.” 33*
hacia el norte y el oriente, por Ures y la parte menos comunicada
El maytorenismo había atraído a los yaquis y al desvanecerse los dejó
de Álamos. Calles apretó el cerco: reglamentó el tránsito en los
sueltos y armados. Por lo demás nunca había podido ganar la lealtad
caminos para los yaquis, así como la entrada a los pueblos. Fingién­
de los yaquis broncos que Mori, Espinosa y Matus seguían man­
dose pacíficos, decía Calles, muchos alzados usaban la libertad de
dando en la sierra. Al terminar el pleito con Villa a fines de 1915,
circular y entrar a los pueblos para abastecerse de víveres y noticias.
quedó para los constitucionalistas de Sonora el pleito de siempre:
A partir de junio ningún yaqui pudo andar por veredas, todos debían
la civilización o los yaquis.
circular por “caminos reales”. No podían salir de su lugar de resi­
Obregón intentó una negociación con los indios, le pidieron lo de
dencia sin un pasaporte de la comandancia militar o de sus patrones;
siempre: absoluto dominio del río y expulsión de todos los blancos.
tampoco ir armados o abandonar sus rancherías después de puesto
Obregón tuvo la reacción de siempre: “Acceder [ . . . ] hubiera signi­
el sol. Al yaqui que infringiera estas disposiciones se le consideraría
ficado una retrógrada complacencia [ . . . ] . A título de una justa repa­
rebelde, es decir: fusilable. El encarnizamiento de la campaña no
ración debida a las tribus del Yaqui, se sancionaba en aquella forma
desanimó (nunca lo había hecho) a los alzados. A mediados de 1916,
la perpetuación de la barbarie entre ellas y se le extendía dominio
34 Álvaro Obregón, O c h o m i l k iló m e tr o s e n c a m p a ñ a , p. 471.
33 Calles, en Magdalena a presidente municipal de Nacozari y comisario 33 Decreto 23 del 10 de enero de 1916, y Calles a Carranza, 17 de enero
de policía de Pilares de Nacozari, 11 de julio de 1917. aoes, tomo 3153, legajo 1: de 1916. Ambos en aoes , tomo 3071, 2a, parte, legajo 5.
Minería; y aces , tomo 3221, legajo 1: Informes rendidos a los consulados, 30 Calles a Carranza y viceversa, 1 y 5 de febrero de 1916. ages , tomo 3063,
.segundo expediente. legajo sin numerar: Guaymas, y p h s -arm , tomo 100, ff. 26-34, campaña del
33 Francisco Almada, L a r e v o lu c ió n e n S o n o r a , p. 218. Yaqui, marzo de 1916.
además de las escaramuzas de rigor, los asaltos y muertes aisladas J|, mascullar su insatisfacción por las posiciones otorgadas a los indios
achacables a los yaquis, la situación de varios pueblos había llegado a | | —-y a enviar sus rencorosas quejas al gobierno del estado.. Una de ellas,
un clímax y los vecinos querían abandonarlos, emigrar: Buenavista, | | típica, fue la que cursó el presidente municipal de Pótam. Se refería
a la militarización de los yaquis como soldados del estado y decía:
Suaqui Grande, Horcasitas, Querobabi.37
Ni los once mil hombres ni la reglamentación física dieron resul- > “Nunca en estos individuos ha desaparecido SU CMttW « no
tado. En agosto Calles cerró todavía más el puño en torno a los yaquis ostensiblemente sí en una constante propensión que llevan a la práctica
mansos para aislar de ellos a los rebeldes. Creó una oficina central de tan luego como se les presenta la oportunidad, y si a esto se añade el
registro de yaquis que daba cédulas a los mansos que así fueran regis­ carácter altanero y de desacato a la ley que en la gente vulgar pro­
trados por sus patrones, hacendados, jefes de minas, comisarios, pre­ ducen los empleos militares, fácilmente se comprenderá la actitud
sidentes municipales. El yaqui registrado debería cargar siempre su que guardan hoy los mencionados indios, los cuales constituyen un
credencial con él, si cambiaba de domicilio debía notificarse a la auto­ positivo y peligroso amago para la tranquilidad de esta región.” Ignacio
ridad o patrón del domicilio nuevo para controlar su llegada; para Matus, el jefe de aquellos indios —decía el munícipe— era indolente
andar fuera de su sitio de trabajo debía llevar explicación escrita de su y poco enérgico con sus hombres, bloqueaba o desoía las órdenes de la
misión, firmada por el patrón o la autoridad respectiva. autoridad municipal: “todas las cosas, decía el presidente, se dirimen
La medida excluía a las mujeres pero abarcaba a todos los yaquis personalmente como en los tiempos de barbarie y si en el momento
mayores de doce años. Uno cree escuchar la voz de Izábal o Lorenzo poseemos vida y algunos pequeños intereses, no lo debemos al amparo
Torres cuando escucha la de Calles justificando esta medida “contra y protección de la ley, sino a una positiva deferencia de los indios,
los yaquis rebeldes que por tantos años han vivido del pillaje come­ que puede dejar de ser en cualquier momento” .30
tiendo crímenes sin nombre, deteniendo el progreso del .estado”. Con Como otras veces había sucedido en la guerra del Yaqui, en 1917
el nuevo reglamento, decía Calles, se pondría fin a una de las “princi­ este ambiente de tensión, agresividad y desconfianza se rompió por
pales causas” que hacían ineficaz o restringido el éxito de la campaña: un “incidente” y dio nuevamente lugar a la guerra. El “incidente”
“el refugio que encuentran los indios rebeldes entre los mansos que fue una matanza de yaquis indefensos a manos de las tropas del
viven en las haciendas y poblados, donde vienen a confundirse con ellos general Fausto Topete. A Vícam había mandado Topete un destaca­
cuando nuestras tropas los ponen en condiciones difíciles y próximos mento de caballería en acción de rutina y la remonta fue hecha pastar,
al aniquilamiento” .38* sin autorización, en los sembradíos del general yaqui Luis Matus.
A fines de 1916, el fracaso militar de siempre obligó a los gober­
nantes a buscar la salida alternativa que habían encontrado siempre: Los soldados de éste —nos dice Claudio Dabdoub— hicieron fuego sobre los
oficiales matando a uno o dos de ellos. La tarde de ese mismo día, los indí­
negociar, conceder, gastar en provisiones y dar toda clase de garantías
genas habían pedido autorización para organizar una pascóla. Esa noche,
a la tribu. El negociador esta vez fue Adolfo de la Huerta, el único cuando la fiesta estaba en todo su apogeo y los matachines bailaban al son
político sonorense de importancia que creyó en ese medio —y no en del arpa y del violín, el general Topete ordenó a un grupo de soldados que
las balas— como respuesta práctica al problema yaqui. De la Huerta hiciera fuego sobre la inerme multitud, matando a cerca de 60 personas
se comprometió a nombre del gobierno federal a satisfacer una de­ entre hombres, mujeres y niños.
manda yaqui central: retirar las tropas del río y entregar a la tribu
tierras buenas en los pueblos de las márgenes. Tropas y población Los sobrevivientes fueron hechos presos y remitidos a México como
empezaron a ser evacuados de Pótam y Vícam. El jefe Luis Espinosa rebeldes atrapados en combate.40 Para mediados de octubre de 1917,
escribió el 3 de enero una proclama diciendo que esperaba la salida Calles recapitulaba las bondades, complacencias y gastos que el go­
de los destacamentos de los demás pueblos. La paz (muy costosa en bierno había tenido con los yaquis sin lograr verdaderamente inte­
cesión de tierras, pago a los soldados de los jefes yaquis, regalo de pro­ grarlos. Se confesaba decidido a iniciar una campaña “armada, firme
visiones) no excluyó el recelo y muy pronto los blancos empezaron a y segura, radical y decisiva.. . una campaña enérgica, definitiva y si es
preciso terrible”, contra ese “grupo relativamente insignificante de
37 Disposición dada en Hermosillo por el comandante militar P. Elias Calles,
junio de 1916, y mensajes de los presidentes municipales sobre la cuestión del
30 Presidente municipal de Pótam, Rosario Verduzco a gobernador, 20 de
yaqui, en aces , tomo 3063. agosto de 1917. ages , tomo 3139, legajo: Quejas contra militares.
38 Aviso de la comandancia militar dictado en Empalme por el jefe de las 10 Dabdoub, H i s t o r i a . . . , p. 201.
operaciones, P. Elias Calles, 30 de agosto de 1916. ages , tomo 3063.
w 44

individuos refractarios a todas influencia civilizadora”. Los diputados la pacificación. Tenía en su favor haber cumplido los convenios de
locales extendieron también su drástica modernidad contra los yaquis. paz de 1916 y haber estado fuera cuando se inició otra vez la campaña
militar. Los alzados Mori, Matus y Espinosa accedieron poco a poco
El remedio “pronto y eficaz” para acabar con ese grupo que pretendía
crear un estado dentro de otro, dijeron los diputados, no podía ser a sus proposiciones: les darían tierras, soltarían a los prisioneros, regre­
sino “el total exterminio de la tribu, por más que éste sea doloroso, sarían a los deportados, les dañan provisiones, sueldos del ejército
pues estamos ante el terrible dilema de ser o no ser, someterse (a los para los soldados de los jefes.
Desde enero de 1920 los jefes yaquis empezaron a escurrir de la
yaquis) o perecer” .'11*
Por los siguientes dos años la guerra del yaqui pareció una copia sierra y a asentarse donde habían acordado con el gobierno en es [jera
subrayada y magnificada de sus buenos tiempos porfirianos. Los polí­ de provisiones y pláticas definitivas. En abril se negociaba con el
ticos, los militares, los periodistas invocaron ampulosamente las altísi­ gobierno federal la concesión de dos de los aspectos fundamentales
mas razones del progreso y se avergonzaron y se rasgaron la lengua y de los arreglos: la entrega de tierras y la paga de los soldados yaquis
se quejaron de que los yaquis existieran y pusieran la nota de salva­ pacificados. Pero para ese momento las relaciones de Carranza con
jismo y barbarie en el medio entusiasta y pujante de Sonora. Los los sonorenses y con el gobierno estatal se habían enconado. El
militares peinaron la sierra exterminando, quemando, masacrando y litigio por la jurisdicción de las aguas del río de Sonora vigente desde'
obtuvieron jugosas partidas federales. Los pueblos respondieron sin agosto de 1919, había desencadenado el franco repudio de los poderes
mayor convicción a las medidas de autodefensa y a la formación locales hacia las decisiones del centro. Los gobernantes sonorenses no
de guardias nacionales. Los hacendados y empresarios siguieron prote­ requerían lentes de aumento para leer en los acontecimientos recientes
giendo a los alzados e irritando a los militares y a los gobernantes. el ajedrez de un cerco carrancista: las aduanas habían recibido órde­
Para que nada faltara, se puso en práctica una política intensa de nes de trasladar sus fondos a Estados Unidos; de un pedido de
170 000 pesos hecho por las oficinas locales del timbre, habían sido
deportación de yaquis.
Con todo, pese a la campaña de dos años, la amplísima represión, enviados sólo 17 0 0 0 ; la federación había violado su promesa de pagar
los grandes contingentes militares y la eficacia autoproclamada de los la organización estatal de nuevos cuerpos rurales para servicios de
jefes en las operaciones, a mediados de 1919 seguían escuchándose vigilancia en pueblos y caminos; había permitido días atrás la expor­
en el valle, “los mismos clamores de sangrientas hostilidades, próxima tación de toda clase de ganado (pese a que la política firme de los
ruina y eterna desolación que se oyeron en los antiguos”, tal como lo últimos años había sido restringir ese intercambio) decisión que en poco
había dicho siglo y medio antes el virrey Conde de Gálvez en su infor­ tiempo dejaría al estado sin recursos de subsistencia propia en el
me sobre los presidios de las provincias de occidente. Un informante comercio fronterizo. Por último, Carranza había ordenado la movili­
del sur hablaba en junio de 1919 del dominio completo que impu­ zación del general Diéguez y sus tropas a Sonora y la reanudación
nemente ejercían los yaquis sobre la extensa zona de los municipios de de la campaña del yaqui. Ninguna de estas medidas se agotaba en sí
Quiriego, Rosario, Nuri y Movas: eran continuos los asaltos y homi­ misma, la razón última era de una sencillez brutal: quitarle a la can­
cidios en los caminos, las siembras se perdían o eran saqueadas, las didatura presidencial de Álvaro Obregón, lanzada en junio de 1919,
comunicaciones con el exterior o con los pueblos cercanos se interrum­ el apoyo de su estado natal.
pían a menudo por los merodeos de los indios y no había seguridad Mientras tendía su cerco sobre Sonora, Carranza hacía comparecer
de la vida ni de los propios bienes: “La ruina y la amenaza, termi­ a Obregón en la ciudad de México ante un jurado militar, acusado de
naba el informante, están obligando a los pobladores a abandonar complicidad rebelde con un general Cejudo. Luego de comparecer,
Obregón se fugó de la ciudad de México y reapareció en Guerrero
la región.” 42
El péndulo osciló nuevamente: la inutilidad de las balas condujo protegido por su antiguo subordinado en Celaya, Fortunato Maycotte.
a elegir las bondades de la negociación. Llegado nuevamente a la De la Huerta y Calles congregaron a las autoridades militares y políticas
gubernatura del estado en septiembre de 1919, De la Huerta reinició del estado y el 23 de abril firmaron en Agua Prieta un plan descono­
ciendo al gobierno del centro. Como en 1913, adujeron la defensa
11 Manifiesto de Cesáreo Soriano y P. Elias Calles al pueblo de Sonora. de la soberanía del estado. Sólo un mes después, con el apoyo de
Hermosillo, octubre de 1917, y congreso del estado de Sonora a sus comitentes, todo el ejército y de los grupos más importantes de rebeldes al carran-
24 de octubre de 1917. ages , tomo 3137, la. Manifiestos. cismo, como los zapatistas, los pronunciados de Agua Prieta entraban
42 El primer regidor en funciones de presidente municipal de Rosario a a la capital. Días antes, Venustiano Carranza había sido acribillado
gobernador interino, 3 de junio de 1919. ages , tomo 3327, legajo 3.

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1-1 I oo
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, _ _ _ ,;* g %. FUENTES BIBLIOGRAFICAS Y ARCHIVOS CONSULTADOS
en Tlaxcalantongo. El 24 de junio Carranza fue enterrado en el
panteón de Dolores en una tumba de tercera clase como, al decir de sus _
hijas, había sido siempre su deseo. Por la tarde, el Congreso designó -y'!
a Adolfo de la Huerta presidente provisional de México. La pacifi-
cación yaqui guiada desde palacio nacional llegó a buen término a
mediados de 1920. Pero no por mucho tiempo; en 1923 los yaquis A R C H IV O S

se alzaron de nuevo y repitieron en 1926. No tuvieron las tierras que


buscaban sino hasta la década de los treintas, con Lázaro Cárdenas, ages Archivo del Gobierno del Estado t(e Sonora, Hcrmosillo, Son.
ahijado impío de la estirpe sonorense. Las balas, los años, la muerte, phs Patronato de Historia de Sonora, ciudad de México.
iíd s Records of the Department of State Relating to Internal Affairs ol
el cerco menos violento pero acaso más terrible tendido sobre los México, Series 812.ÜU de los National Archives of Washington.
yaquis por el auge de las ciudades, la tecnificación de la agricultura, 5 akem Archivo de Relaciones Exteriores de México, ciudad de México.
la mejora de los caminos, el vértigo social y humano de la moderni­ a h d n Archivo Histórico de la Defensa Nacional, ciudad de México.
dad, los había convertido para entonces en una minoría estricta, vapu-
leable, asida al eco cada día más remoto de una historia heroica y ,
huracanada escrita por los ancestros, por los abuelos, por los ancianos:
FUENTES UIDUOGRÁFICAS
Cajeme, Tetabiate, Ignacio Morí.
Si como quiere Elias Canetti vivimos sobre un montón de hombres ■’
y animales muertos, y nuestra identidad se alimenta de todos aquellos a Aguirre, Amado, M i s m e m o r ia s d e c a m p a ñ a . A p u n t e s p a r a la h is to r ia . E s t a m ­
quienes hemos sobrevivido, podría decirse que el subsuelo del poder pas de la R e v o l u c i ó n m e x i c a n a , p o r e l g e n e r a l e i n g e n i e r o .. ., s.p.i.
sonorense está lleno de tumbas —de ahí su solidez—~y~que su resis- fí j (1^53) (4), 430 pp.
tenté'identidad se nutre de haber sobrevFvídó'árílña de las más extensas ái Alessio Robles, Miguel, Í d o l o s c a ld o s , México, Imprenta de Manuel Sán­
nóminas de enemigos que alguien haya vencido, internamente, en la chez, S. A., 1929, 309 pp.
Almada, Francisco R., D ic c io n a r io d e h is to r ia , g e o g r a fía y b io g r a fía s o n o r e n s e s ,
historia de México. Pero ninguna arcilla más antigua y dura, ninguna ; Chihuahua, Impresora Ruiz Sandoval, 1952, 857 pp.
sobrevivencia más concreta, que la obtenida por ese poder de las ' --------- L a r e v o lu c ió n e n e l e s ta d o d e S o n o r a , México, Talleres Gráficos de la
muertes y el sometimiento de los yaquis. A ellos los sonorenses les arre- ( Nación, 1971. (Biblioteca del Instituto Nacional de Estudios Históricos
bataron el espacio vital, las tierras decisivas; en ellos cifraron por largos de la Revolución Mexicana, 52.)
años —antes y después de la guerra civil— la efigie del “enemigo” ; Almada, Pedro J., M i s m e m o r ia s d e r e v o lu c io n a r io , México, 1928, 63 pp.
en ellos vencieron la resistencia menos soluble a los líquidos de la -------- C o n m i c o b ija a l h o m b r o . ( A u t o b i o g r a f í a ) , México, Alrededor de
América, S. A., 388 pp.
“civilización” que querían construir; en ellos descubrieron con una Alvarado, Salvador, L a r e c o n s tr u c c ió n d e M é x i c o . U n m e n s a je a lo s p u e b lo s
precisión instintiva y esencial lo que no eran, lo que no querían ser, d e A m é r i c a , México, J. Ballescá y Cia. Sucs., 1919, 3 vols.
lo que debían exterminar para darse a sí mismos la existencia que Baca Calderón, Esteban, J u i c i o s o b r e la g u e r r a d e l Y a q u i y g é n e s is d e la h u e l g a
deseaban. d e C a n a n e a . l o . d e j u n i o d e 1 9 0 6 , México, Ediciones del Sindicato Mexi­
Muchos años después, el historiador se descubre pisando de algún cano de Electricistas, 1956, 60 pp.
Bassols Batalla, Narciso, P e n s a m ie n to p o lític o d e A lv a r o O b r e g ó n , México,
modo el subsuelo heredado de ese exterminio, rastreando sus vestigios Ed. Nuestro Tiempo, 1967, 191 pp.
desde la otra orilla. Bórquez, Djed (Seud. Juan de Dios Bojórquez), C a lle s , México, D. F., Talleres
de A. Botas e Hijo, 1925, 2a. edición, 101 pp.
Es imposible apartarse de la vida, cuya valor y esperanza nos colma, pero es -------- O b r e g ó n . A p u n t e s b io g r á fic o s , México, Ediciones Patria Nueva, 1929,
también imposible no vivir de la muerte de otras creaturas, cuyo valor 64 pp.
y esperanza no son menos valiosas que las nuestras.43 -------- M o n z ó n . S e m b l a n z a d e u n r e v o lu c io n a r io , México, Talleres A. Artis
Impresores, 1942, 43 pp.
Breceda, Alfredo, M é x i c o r e v o lu c io n a r io , 2 vols. México, Ediciones Botas, 1941.
Calvo Berber, Laureano, N o c io n e s d e h is to r ia d e S o n o r a , México, Librería
Manuel Porrúa, S. A., 1958, 377 pp.
Casasola, Gustavo, H i s t o r i a g r á fic a d e la R e v o l u c i ó n m e x ic a n a , 1 9 0 0 - 1 9 7 0 ,
43 Elias Canetti, “Toda esta admiración dilapidada”, en L a C u ltu r a en 1- México, Editorial Trillas, 1973 (2a. edición), tomo i: 367 pp.
suplemento de S i e m p r e ! núm. 681, 26 de febrero de 1975.
M é x ic o , j
[447]
madre, R afaela Obregón y M artin del Campo, e stab a emparentada con ric o s

TORIBIO ESQUIVEL OBREGÓN. U N LIBERAL mineros y hacendados de la reg ió n . La p o l ít i c a estuvo p re sen te en la

CONSERVADOR EN EL EXILIO (1913-1924) vida de Esquivel desde joven, en e sp e c ia l a tra v é s de su t i o Manuel Muñoz
Mónica Blanco
Ledo, quien fue gobernador de Guanajuato de 1880-18842. E studió derecho
en la Escuela Nacional de Ju risp ru d en cia en México, ciudad en la que
E s q u iv e l O b r e g ó n , una b i o g r a f í a
re s id ió poco tiempo, pues los últim os tramos de su c a rre ra lo s re a liz ó
Al s e n t ir que su vida e stac a en p e lig ro , en noviembre de 1913 T oribio
desde su t i e r r a n a ta l. En 1888 obtuvo e l t i t u l o de abogado y en 1891,
Esquivel Obregón, un abogado de 49 años o rig in a rio de León, Guanajuato,
luego de un largo noviazgo, se casó con Laura T o rre s.3
s a lió de México huyendo d el régimen h u e r tis ta . A p esar de que su in ten ció n
Admirador de la obra de Manuel González como gobernador de Guanajuato <1884—
e ra re g re sa r en e l menor tiempo p o sib le ,
1893), la re la c ió n de E squivel Obregón con su sucesor, Joaquín Obregón
su alejam iento s ig n ific ó e l in ic io de un e x ilio p o lític o en la ciudad
González, fue c o n f lic tiv a . A si, en 1894, a lo s 30 años, E squivel c r i t i c ó la
de Nueva York que d u ra rla c a s i once años. El p a is se encontraba inmerso
exclusión de la sociedad leonesa en e l nombramiento d el je fe p o lític o y de
en la guerra c i v i l . Una profunda zozobra acompañó a E squivel en e l
los candidatos a m unicipes. En 1901, siendo E squivel Regidor del
momento de su p a r tid a . S in tió "...com o s i México ya no e x is tie r a y fuera
Ayuntamiento de León, logró que é ste se opusiera a que e l Congreso del
aquello sólo un recuerdo de una pobre nación a n iq u ilad a por sus propios
Estado oto rg ara a l gobernador e l t i t u l o de Benemérito de la Am éricas.4 En
h ijo s " 1
1903, en una c a rta a Filomeno Mata, d ire c to r del D iario de Hogar, Esquivel
Hasta su nombramiento como S e c re ta rio de Hacienda en fe b re ro de 1913,
acusó a l gobernador y a los fu ncionarios públicos de Guanajuato de se r
Esquivel fue un provinciano, un hombre de León, Guanajuato, una
"acreditados c le r ic a le s " y de te n e r abandonada la in stru c c ió n p ú b lic a .5 En
poderosa, pero poco atendida ciudad del centro de México. A lli nació en
1905 encabezó a un buen número de abogados para p r o te s ta r por la pésima
1804 . Hijo postumo de un médico ja lic ie n s e , T oribio fue un niño enfermizo
adm inistración de j u s t ic i a
y muy cercano a su madre. Si bien por su mover económico la fa m ilia
Esquivel Obregón e ra de c la se media, su

ES Q U IV E L , 1996, p. 171. 2 BLANCO, 2 0 0 0 . p . 26 1 y ESQUIVEL, 1992, p p . 6 8 -7 1 , 7 4 - 7 6 , 12 5 y 1 2 6 .


3 ESOUIVEL. 1 9 9 2 . o o . 1 2 . 3 7 . 4 1 . 4 3 . 68 7 1 v 3 1 9 .
4 HERNANDEZ, 1 9 8 8 , p p . 1 4 9 - 1 5 1 y 1 6 3 . E l d i s c u r s o f u e u n e s c á n d a l o .
E s q u i v e l c o m p a ro a l g o b e r n a d o r O b r e g ó n G o n z á l e z c o n e l d i c t a d o r S a n t a
5 C a r t a d e T o r i b i o E s q u i v e l O b r e g ó n a F il o m e n o M a t a , L e ó n , G u a n a j u a t o , 21 d e
s e p t i e m b r e d e 1 9 2 3 . C i t a d a e n BOLETIN, 1 9 8 5 , p p . 1 1 .
2
que s u fría G uanajuato.6 En e s te campo su tra b a jo fue permanente. En aprobación de todos los mexicanos, exceptuando sólo aquellos que
d iv ersas ocasiones defendió personas agredidas por los je fe s p o lític o s quieren continuar indefinidam ente en e l p o d e r ..." . Pero a continuación
y funcionarios acusados injustam ente por e l gobierno e s t a t a l . 7 expresa una advertencia, " . . . no sé s i los dos p rin c ip io s de " Sufragio
En 1892, como Primer S e c retario d el Comité Municipal de León del Comité E fectivo" y "No Reelección" son b a stan tes para asegurarnos una mutua y
C entral P o r f i r i s t a , 8 Esquivel j u s t if i c ó la te rc e ra re elec c ió n de P o rfirio duradera in te lig e n c ia , y s i , a la hora de lle g a r a proposiciones más
Díaz; sin embargo, luego planteó d ife re n c ia s con el régimen al p o sitiv a s no re s u lta rá desacuerdo e n tre nosotros que nos haga comprender
c o n v e rtirse en un im portante c r it i c o de la p o l ít i c a económica9 del la necesidad que en un p rin c ip io habla de formar un programa más
S e c retario de Hacienda José Ives Limantour, en temas como e l c ré d ito y e x p líc ito " .11 Los desacuerdos e n tre Madero y Esquivel no tard aro n en
los f e r r o c a r r i l e s .10 s u rg ir. Siendo Esquivel un hombre con un c a p ita l p o lític o propio y
Cansado de bregar desde la trib u n a p ública por cambios a la s p o lític a s miembro de un estado donde e l p re s tig io de Madero era poco menos que
gubernamentales y convencido de la in v ia b ilid a d d el "sistem a d el General in e x is te n te , la riv a lid a d e n tre ambos no tard ó en p re se n ta rse . A sí, a
Díaz, cuyas f a ta le s consecuencias todos p re sen c iam o s..." Esquivel se pesar de que Esquivel te n ía condiciones para hacer un buen papel como
colocó en e l campo de la oposición y en mayo de 1909 aceptó, no sin candidato a la gubernatura de Guanajuato en la s
re serv a s, una de la s dos v ice p resid e n c ia s d el Centro A n tirre e le c c io n is ta elecciones de ju li o de 1909, Madero no apoyó su p o stu la c ió n .12 A
de México. Se sumó a l p a rtid o de Madero porque, según dice en e l documento su vez, aquel no re a liz ó la s ta re a s de a g ita ció n y propaganda del
de aceptación, "Los p rin c ip io s que ustedes persiguen tie n e n la P artido A n tirre e le c io n is ta en Guanajuato a la s que se había
comprometido, lo que generó un amargo reproche d el propio Madero en su
correspondencia.
Sin embargo, la separación de Esquivel del partido, al año
6 HERNANDEZ, 1 9 8 8 , p . 2 2 4 .
7 L os c a s o s s o n n u m e ro s o s , a m a n e ra de e je m p lo v é a s e c a r t a d e E u s e b io O r te g a p a r a siguiente, respondió a un problema de principios.13 Los motivos de dicha
T o r i b i o E s q u i v e l O b r e g ó n , 20 d e s e p t i e m b r e d e 1 8 9 6 , e n ATEO, c a j a 9 , e x p . 2 4 , f o j a
280; c a r t a d e T o r ib io E s q u iv e l O b reg ó n p a r a P o r f i r i o D ía z , 5 d e ju n io d e 1902, en decisión le fueron planteados a Madero durarte su gira 11 Diario del
ATEO, s e c c i ó n d o c u m e n t a l , c a j a 1 4 , e x p . 1 , f o j a s . 1 0 7 - 1 0 9 ; C a r t a d e P o r f i r i o D ia z
p a r a T o r i b i o E s q u i v e l O b r e g ó n . 11 d e j u n i o d e 1 9 0 2 , e n ATEO, s e c c i ó n d o c u m e n t a l , Hogar, 22 de junio de 1909.
c a j a 1 4 , e x p . 1, f o j a 1 1 0 .
12 E l p r o c e s o e l e c t o r a l p a r a l a e l e c c i ó n d e g o b e r n a d o r d e G u a n a j u a t o tu v o lu g a r
0 T o r io b io E s q u iv e l O b re g ó n , " D is c u r s o p r o n u n c ia d o l a n o c h e de i n s t a l a c i ó n d e l e n j u l i o d e 1909. E s q u i v e l o b t u v o v o t o s e n t o d o G u a n a j u a t o ; m a y o r í a e n L eón,
C o m ité M u n i c i p a l " , e n L a u n i ó n , L e ó n , G u a n a j u a t o , 2 d e a b r i l d e 1 8 9 2 , c i t a d o e n u n a n i m i d a d e n a l g u n o s r a n c h o s y h a c i e n d a s y u n n ú m e ro r e g u l a r d e d a t o s e n l a s dem á s
HERNANDEZ, 1 9 8 8 , p . 1 0 5 . 9 ESQUIVEL, 1 9 9 2 , p p . 3 2 3 - 2 2 1 . p o b l a c i o n e s . P r ó l o g o d e J a v i e r G a r c i a d i e g o , e n E SQ U IV EL, 1997, p . 14. 13 ESQ U IV EL,
10 E s q u i v e l O b r e g ó n T o r i b i o , U na v i s i ó n s o b r e . . . . " E s q u i v e l O b r e g ó n , Una 1993, p p . 39-52.
v i s i ó n . . . . 1 9 9 , p p . 9 7 -9 8

3 4
votos ob ten id o s. Su candidatura a v ice p resid e n te obtuvo 82 votos y e l
proselitista en León. Alli Esquivel manifestó su discrepancia con las
ganador, Emilio Vázquez Gómez, 113.17
posturas políticas de Emilio Vázquez Gómez, quien había publicado meses
Su distanciam iento con Madero se hizo aún más c la ro cuando,
antes, en la prensanacional, una serie de
inv itad o por Óscar 3 ra n iff, actuó como mediador e n tre e l gobierno y los
a rtíc u lo s en los que se m anifestaba p ro c liv e a la aceptación de una
rebeldes en. Ciudad Juárez. La situ a c ió n fue problem ática para E squivel,
fórmula p re sid e n c ia l con Díaz a la cabeza, que p e rm itie ra a la oposición
pues fue acusado de in s tig a r a Orozco contra Madero; algunas de sus
c o n quistar algunos puestos, ta n to de elecció n popular como en la rama
afirm aciones en D em ocracia y P e r so n a lism o , un lib ro que e sc rib ió
a d m in istra tiv a . T oribio Esquivel hizo p ública su desaprobación, en la
para a c la ra r la situ a c ió n , fueron
que hacia n o tar e l absurdo de que e l
prem onitorias. El te x to habla del c a rá c te r de Esquivel, quien, en e l
p re sid en te del Centro A n tirre e le c c io n is ta se m ostrara p a rtid a rio de la
momento de mayor popularidad de Madero, ju sto en la coyuntura de la
re e le c c ió n .14 Según Roque E strada, quien p a rtic ip ó en la e n tre v is ta ,
calda del porfirism o después de lo s acuerdos de Ciudad Juárez, con toda
"Madero defendió con c alo r y a c ritu d la conveniencia de una tran sacció n
v a le n tía y c la rid a d a d v ie rte que un régimen cuyo poder emana de la coca
que, a su ju ic io , era la única solución p o sib le" , 1S
del fu s il no podrá c o n s tru ir la democracia. Durante el gobierno
A p esar de su separación d el P artido A n tirre e le c c io n is ta , e l
m aderista, Esquivel se dedicó fundamentalmente a su despacho de abogado,
liderazgo lo c a l de Esquivel hizo que fu e ra propuesto como
viendo "...cóm o se desmoronaba aquel gobierno nacido en medio de grandes
candidato a P residente primero y a V icepresidente de la República
entusiasm os"18 La fa m ilia B ra n iff, uno de los grupos em presariales más
después, durante la Convención de dicho p a rtid o en a b r il de 1910. La
fu e rte s del p o r f ir ia to , fue c lie n te im portante de dicho e stu d io 19; con
p ostulación de Esquivel fue hecha por p o lític o s guanajuatenses
Oscar B ran iff, quien lo recomendó ante F élix Díaz para ocupar e l puesto
encabezados por A lfredo Robles Domínguez y congregados en e l P artido
N a cio n alista Democrático.16 El p re s tig io de Esquivel e n tre lo s o positores
a l p o r f ir ia to se r e f le jó en e l im portante número de
11 A c ta d e l a C o n v e n c i ó n . N a c i o n a l I n d e p e n d i e n t e d e l o s P a r t i d o s A l i a d o s N a c i o n a l
A n t i - R e e l e c c i o n i s t a y N a c i o n a l i s t a D e m o c r á t i c o " e n ESTRADA, 1 9 1 2 , p p . 2 0 0 y
14 MORENO, 1 9 7 7 , p . 5 6 . 201.
15 A p e s a r d e l a l t e r c a d o , d u r a n t e l a v i s i t a d e M a d e ro a L e ó n s e fo r m ó u n c l u b p o l í t i c o
y E s q u i v e l O b r e g ó n f u e n o m b ra d o s u p r e s i d e n t e . A d e m á s , h u b o u n m i t i n q u e c o n v o c ó a 15 ESQUIVE1, 1 9 9 3 , p . 6 9 .
c e r c a d e 1000 p e r s o n a s y d u r a n te e l c u a l l o s a s i s t e n t e s fu e r o n h o s t i l i z a d o s p o r l a 19 L a s a c t i v i d a d e s e c o n ó m ic a s d e l o s B r a n i f f i n i c i a r o n a p r o x im a d a m e n t e e n 1 8 6 5
p o l i c í a . ESTRADA, 1 9 1 2 , p p . 1 8 3 - 1 8 4 . c u a n d o O s c a r Thom as B r a n i f f , n a c i d o e n N u e v a Y o r k , l l e g ó a M é x ic o p a r a p a r t i c i p a r
16 L o s g u a n a j u a t e n s e s m e n c io n a d o s e r a n , a d e m á s d e R o b le s D o m ín g u e z , B o r d e s M a n g e l y e n l a c o n s t r u c c i ó n d e l f e r r o c a r r i l M é x ic o - V e r a c r u z . Su v i s i ó n e m p r e s a r i a l l e
C á n d i d o N a v a r r o . BLANCO, 1 9 9 5 , p . 2 8 . p e r m i t i ó h a c e r s e de u n a g r a n f o r t u n a . A s u m u e rte e n 1905 l e s u c e d ie r o n s u s h i j o s
J o r g e , Ó s c a r , T o m as, A r t u r o , L o r e n z a , I s a b e l y A l b e r t o . COLLADO, 1 9 8 7 , p p . 7 9 - 1 5 5 .
5

6
Poco antes de p a r t i r Esquivel Obregón fue nombrado re p re se n tan te de los
de S e c retario de Hacienda en e l gobierno de V ictoriano Huerta, mantuvo
negocios de Luis B erm ejillo y M artínez-N egrete un empresario de origen
unarelación p o l ít i c a cercana, tan to en México como
español nacido en México, casado con Lorenza B ra n iff. Esquivel se ocupó
durante los años de e x i l i o . 20 Esquivel estaba emparentado con
de la adm inistración de los negocios de B erm ejillo durante todos sus
Guadalupe Cánovas, esposa de Óscar. Además de e s te parentesco
años de e x ilio ; en e sp e cial de la hacienda azucarera de Pedernales, en
Óscar B ra n iff lo nombró su a lb a c e a .21
Michoacán, y la gran hacienda c e re a le ra de San Nicolás de los Agustinos,
T oribio Esquivel tuvo negocios también con o tro s miembros de la fa m ilia
en S a lv a tie rra , Guanajuato.23 También por esas fechas Esquivel Obregón
B ra n iff; en 1912 é l y Arturo B ran iff celebraron un co n trato con la
era liq u id ad o r gerente de la Casa B erm ejillo y Cía. y abogado c onsultor
S e c re ta ría de Fomento para comprar la hacienda de Chapingo a f in de
de la Compañía San R a fae l.24
fra c c io n a ria en pequeños lo te s , mediante un c ré d ito otorgado por la Caja
Además de la s re la cio n e s de negocios con la fa m ilia B ra n iff, T oribio
de Préstam os. El proyecto planteaba la construcción de obras que
Esquivel te n ía ideas en común con Oscar B ra n iff, sobre la s reformas que
g a ran tiz a ran e l rieg o de la s p a rce la s y la cesión de p a rte de la s t ie r r a s
debía r e a liz a r e l gobierno para a fro n ta r la cuestión a g ra ria . Ambos
de la hacienda a l Estado para la construcción de una escuela a g ríc o la .
El monto d el préstamo s e ría rein teg rad o con lo s ingresos producto de la planteaban la necesidad del fraccionam iento de la gran propiedad y la
venta de p a rce la s mediante un sistem a de c ré d ito que perm ita la creación
venta de los te rre n o s. A pesar de que la s condiciones del co n trato fueron
de la pequeña propiedad. E stas ideas eran comunes a un grupo económico
revisadas en mayo de 1913 y e l préstamo concedido en ju lio del mismo
año, e l negocio no se concretó antes de la sa lid a de Esquivel hacia e l de León, una región sumamente próspera en la cual se conjuntaba e l
in te ré s de los hacendados por obtener c a p ita l para la modernización de
e x ilio a fin e s de ese año.22
sus empresas mediante la venta de fraccio n es de t i e r r a , con la p resencia
de un amplio número de rancheros in teresad o s en acceder a la pequeña
20 Ó s c a r B r a n i f f n a c i ó e n 1 8 7 6 e n M é x i c o . E s t u d i o e n G e o r g e t o w n , W a s h in g t o n y m ás
t a r d e e n I n g l a t e r r a , a u n q u e no a lc a n z o n in g ú n t i t u l o u n i v e r s i t a r i o . Su p a r t i c i p a c i ó n propiedad.25 Algunos de e sto s hacendados fraccionaron
en lo s n e g o c io s d e s u p a d re m u e s tra n lo s i n i c i o s d e s u v i s i ó n e m p r e s a r i a l. A s i,
fo r m o p a r t e d e l c o n s e j o d e l a F a b r i c a d e p a p e l S a n R a f a e l y d e G .4 O. B r a n i f f . En
1900 s e c a s o c o n G u a d a lu p e C á n o v a s , l o c u a l l e p e r m i t i ó c o n v e r t i r s e e n t e r r a t e n i e n t e ,
p u e s c o m p a r tió co n s u e s p o s a l a H a c ie n d a d e J a l p a d e C a n o v a s, e n e l e s t a d o de
G u a n a j u a t o . A l a m u e r t e d e s u p a d r e , Ó s c a r f u e p r e s i d e n t e d e l a c o m p a ñ ía C o n s o l i d a d a
d e C o n s t r u c c i o n e s M e t á l i c a s , S . A . d e l a c o m p a ñ ía c e S e g u r o s L a L a t i n o a m e r i c a n a y 23 A TIZO , s e c c i ó n d o c u m e n t a l , c a j a 2 7 , e x p . 1 , f o j a 1 .
t a m b i é n f i g u r ó com o c o n s e j e r o d e l B a n c o M e x ic a n o d e C o m e r c io e I n d u s t r i a . COLLADO, 24 D ic h a C o m p a ñ ía e r a p r o p i e t a r i a d e l a H a c i e n d a E l C a l v a r i o ( M i c h o a c á n ) , d e l a
1987, p p . 7 9 -1 5 5 . h a c i e n d a y m in a L a G l o r i a ( D u r a n g o ) , d e g r a n n ú m e ro d e a c c i o n e s d e l a e m p r e s a m i n e r a
21 ATEO, s e c c i ó n d o c u m e n t a l , c a j a 6 9 , e x p . 3 2 , f o j a 8 5 , c i t a d o e n HERNANDEZ, 1 9 8 8 , P e ñ o l e s , d e a c c i o n e s d e l a c o m p a ñ ía E n c i n o , d e l a c o m p a ñ ía m i n e r a a n ó n im a "L a
p . 225. C a n d e la ria y a n e x a s" (Z a c a te c a s ) , e n t r e o t r a s .
22 ACP, 22 y 27 d e e n e r o d e 1 9 1 6 , e x p e d i e n t e C h a p i n g o . 25 A f i n d e c o n o c e r m ás s o b r e l a s c a r a c t e r í s t i c a s d e e s t e g r u p o e c o n ó m ic o p u e d e

7
8
y vendieron parte de sus tierras durante el porfiriato.26 En Esquivel

Obregón y Oscar Braniff está presente, además, la idea de la necesidad


V ictoriano Huerta y F élix Díaz, sobrino de P o rfirio Díaz; que competían
de la modernización del campo. En sus "Observaciones sobre el fomento por d e fin ir quién quedaría como e l dueño dé la situ a c ió n . A f in de dar
agrícola considerado como base para la ampliación del crédito agrícola cauce a la co n tro v e rsia se celebró un pacto llamado de "La Ciudadela",
en México" Braniff sugería colocar bajo cultivo intensivo todas las en e l cual p a rtic ip ó e l embajador de los Estados Unidos, Henry Lañe
tierras arables, utilizar para el trabajo rural maquinaria e implementos Wilson. En é l los dos je fe s rebeldes convinieron d e s t i t u i r a Madero y

modernos, y racionalizar la tenencia de la tierra (eliminando los s u s ti t u ir l o por Huerta como p re sid en te p ro v isio n a l, con e l compromiso de

trámites excesivos) a fin de lograr la rápida compreventa de las é s te últim o de nombrar un gabinete integrado por personas designadas por

propiedades."27 Esta coincidencia de ideas fue lo que llevo a Oscar


F élix Díaz, e n tre quienes se contaba como m in istro de Hacienda a Toribio
Esquivel Obregón.
Braniff a recomendar a Toribio Esquivel ante Félix Díaz para ser nombrado
Además de T oribio Esquivel Obregón en Hacienda, e l gabinete f e l i c i s t a
Secretario de Hacienda en el primer gabinete de Victoriano Huerta.
estuvo integrado por algunos d istin g u id o s u n iv e rs ita rio s como el
licen ciad o Francisco León de la Barra en Relaciones E x te rio re s, Rodolfo
EL CAMINO DEL DESTIERRO
Reyes en J u s tic ia y Jorge Vera E stañol en In stru c ció n Pública. Lo
Toribio Esquivel Obregón fue nombrado Secretario de Hacienda del primer
integraban también e l general Manuel Mondragón en e l m in iste rio de
gabinete de Victoriano Huerta en febrero de 1913 ¿Por qué un hombre con
Guerra; e l ingeniero A lberto Robles Gil en Fomento; e l ingeniero A lberto
una sólida trayectoria y una situación económica promisoria cometió lo
García Granados en Gobernación, e l ingeniero David de la Fuente en
que fue el gran error de su vida política al quedar comprometido con un
Comunicaciones y e l licen ciad o Manuel Garza Aldape en A g ric u ltu ra. En
régimen golpista? ¿Cómo llegó Esquivel al gabinete y porqué tuvo que
general, e l primer gabinete del gobierno h u e r tis ta gozó de gran p re s tig io
huir de su país tan sólo unos pocos meses después? ¿Cuáles fueron los
y fue c a rta de presentación para que los gobiernos de In g la te rra y
motivos de su salida? Alemania otorgaran e l reconocim iento d iplom ático.28Según e l mismo Toribio
Esquivel nos n a rra , fue convocado a p a r tic ip a r en e l gabinete sin conocer
El cuartelazo contra Madero contó con dos cabezas, los generales personalm ente a lo s je fe s de

c o n s u lta rs e BLANCO, 1998, pp. 2 6 -3 8 y BLANCO y CARO, 1996, pp. 1 4 2 -1 4 4 .

GARCIADIEGO, 1996, p. 197.


10
26 BRADING, 1 9 8 8 , p .
27 O b s e r v a c i o n e s . . . 1 9 1 0 , e n S IL V A HERZOG, 1981, p .4 6 .

9
fanfarrón".31
la re v u e lta .29 Apostó a que e l mayor p re s tig io de Félix-D íaz garantizaba La h is to r ia de los meses sig u ie n te s es la h is t o r ia de la pérdida de poder
la p o sib ilid a d de que Huerta fu e ra un s u s titu to tem poral, h a sta que la s
de Félix Diaz y su grupo y la consolidación de Huerta como p re sid en te
elecciones pactadas en La Ciudadela lle v a ra n a Diaz a la p re sid en c ia de
de fa c to . La p resen cia de un gabinete que no habia sido nombrado por
la República. Huerta, sino justam ente para c o n tro la rlo , fue motivo de permanente
Aunado a e llo , e x is tia un in te ré s p a r tic u la r de Esquivel en la c a rte ra fric c ió n y lle v ó a l p re sid en te a ela b o rar una e s tra te g ia para p reparar
de hacienda, ya que desde hacia tiempo habla d e sa rro llad o un programa e l recambio de los p rin c ip a le s m in istro s. Con t a l o b jetiv o celebró un
que ambicionaba poner en marcha, derivado de una s e rie de propuestas que
acuerdo p o lític o con los diputados miembros d el C u a d rilá te ro , Francisco
habla ido forjando en sus c r it i c a s a Limantour y a la p o lític a económica O laguibel, José Maria Lozano, Querido Moheno y Nemesio García Naranjo,
del gobierno de P o rfirio Diaz. Uno de los temas que obsesionaba a quienes ten ía n una fu e rte p resencia en la XXVI le g is la tu r a heredada del
Esquivel y a l que volverá en numerosas ocasiones a lo largo de su vida,
gobierno m aderista. El c u a d rilá te ro a rtic u ló e l programa h u e r tis ta en e l
fue e l fraccionam iento de la gran propiedad y la venta de p a rce la s
Congreso h asta que fueron elevados a posiciones en e l g a b in e te .32 Otro de
mediante un sistem a de c ré d ito que p erm itiese la creación de la pequeña los motivos de fric c ió n e n tre e l gabinete y Huerta fue e l hecho de que,
propiedad, ideas que como vimos compartía con Oscar B ra n iff y otros a p a r t i r de su ta re a de gobierno, se fue generando e n tre lo s m in istro s
em presarios a g ríc o la s de León. La fe en la capacidad de su proyecto para
y algunos funcionarios un programa de reformas que Huerta no estaba
que México superase la c r i s i s generada por la Revolución en e l terre n o
interesad o en implementar. Integraba e l
a g rario es, en p a rte , la explicación de su aceptación d el cargo de
S e c retario de Hacienda en e l gobierno del usurpador V ictoriano H uerta.30*
31 ESQUIVEL, 1 9 9 3 , p . 7 1 . E s q u i v e l e s c r i b i ó e n 1 9 2 0 , " . . . c u a n d o c o m e n z ó e l g o b i e r n o
Podemos ver en Esquivel c ie r ta soberbia y f a l t a de realism o en la d e H u e r t a f u e o p i n i ó n g e n e r a l q u e e l g a b i n e t e e s t a b a c o m p u e s t o d e l o m as s e l e c t o ,
q u e e r a m uy s u p e r i o r a l p r e s i d e n t e y q u e e r a q u i e n r e a l m e n t e d a b a l a s g a r a n t í a s q u e
creen cia de que la ju ste z a y calid ad de su pensamiento le daban e l p a í s r e c la m a b a ." C a r ta de T o r ib io E s q u iv e l O b reg ó n p a r a J o r g e V e ra E s t a ñ o l , 3 de
s e p t i e m b r e d e 1 9 2 0 , e n ATEO, s e c c i ó n d o c u m e n t a l , c a j a 5 4 , e x p . 1 2 , f o j a 1 . K a tz e n
su p erio rid ad fre n te a Huerta a quien d e sc a lific a b a por se r un hombre c a m b io c a l i f i c a a H u e r t a com o u n p o l í t i c o a s t u t o y h á b i l . KATZ, 1 9 8 3 , p . 1 4 4 .
31 En e f e c t o d u r a n t e e l g o b i e r n e d e H u e r t a l o s m ie m b ro s d e l c u a d r i l á t e r o f o r m a r o n
" ... i n c u l t o , presuntuoso y p a r t a d e l g a b i n e t e e n r e p e t i d a s o c a s i o n e s . Q u e r i d o M oheno o c u p o l a S e c r e t a r í a d e
R e l a c i o n e s E x t e r i o r a s d a o c t u b r e d a 1 9 1 3 a f e b r e r o d e 1 9 1 4 y l a d e F o m e n to d e
f e b r e r o a j u l i o d e 1 9 1 4 . J o s é M a r ía L o za n o l a d e I n s t r u c c i ó n P ú b li c a y B e l l a s A r te s
d e a g e s to a s e p tie m b r e d e 1 9 1 3 , y l a d e C o m u n ic a c io n e s y t r a n s p o r t e s d e s e p tie m b r e
29 ESQUIVEL, 1 9 9 3 , p p . 7 6 y 7 7 . d e 1913 a j u l i o d e 1 9 1 4 . N e m e s io G a r c í a N a r a n j o o c u p o l a d e I n s t r u c c i ó n P ú b l i c a y
30 S e g ú n a f i r m a E s q u i v e l e n s u s m e m o r i a s : " . . . q u e r í a p o n e r e n p l a n t a a l g u n a s i d e a s B e l l a s A r t e s d e o c t u b r e d e 1913 a j u l i o d e 1 9 1 4 . MEYER, 1 9 8 3 , p p . 2 6 3 .
q u e c r e í a e n t o n c e s y s i g o c r e y e n d o a h o r a , q u e h a b r í a n h e c h o m u ch o b i e n . " ESQUIVEL,
1993, p . 77.

11 12
a la c a rte ra de Gobernación seguido por De la B arra. Mondragón renunció
equipo de los reformadores e l licen ciad o Manuel Malo y Juvera, un hombre
a p rin c ip io s de ju n io , F élix Díaz aceptó una embajada e sp e cial en Japón
también o rig in a rio de León, v ie jo amigo y compañero de Esquivel en su
y Vera E stañol también fue d e s titu id o . Según Knight, para fin e s de junio
bufete de abogado. Malo, diputado en la XXVI le g is la tu r a , d e sa rro llo
de 1913 e l Pacto de la Ciudadela estaba oficialm ente r o to .36
desde a l l í un tra b a jo coincidente con la s ideas de Esquivel y en apoyo
A pesar de la pérdida de poder de lo s f e l i c i s t a s , h asta ju lio en que
a la gestió n m in is te ria l de e s te últim o. Al respecto cabe d e stac ar una
renunció a su cargo, T oribio Esquivel logró p re se n ta r ante e l Congreso
i n ic ia tiv a de ley para favorecer e l fraccionam iento de la propiedad
im portantes in ic ia tiv a s de le y . Sabedor de que su p resen cia a l fre n te de
r u r a l . 33 Además de Malo podemos colocar en e l grupo de los reformadores
la S e c re ta ria de Hacienda in te resab a a Huerta, por se r Esquivel una
a Jorge Vera E stañol, S e c retario de Educación y con quien Esquivel
v a lio sa c a rta de p resentación para e l gobierno ante lo s banqueros
mantuvo una re la c ió n cercana poco después, durante los años del e x ilio .
in te rn ac io n ale s para la c o n tra ta c ió n de un em p ré stito , 31 Esquivel
El proyecto educativo de Vera E stañol ponía e l acento en la educación
aprovechó el tiempo. Además de su i n ic ia tiv a de ley sobre el
b á sica . Así en su presupuesto la s escuelas rudim entarias y prim arias
fraccionam iento de los la tifu n d io s , que no fue considerada por e l
re c ib ir ía n más recursos que la s u n i v e r s it a r i a s .34 El é x ito de la
Congreso, Esquivel logró la aprobación d el proyecto de construcción de
e s tr a te g ia de elim inar a l gabinete f e l i c i s t a estuvo indisolublem ente
una lín e a f e rr o c a r rile r a te n d ie n te a favorecer la comunicación e n tre e l
ligado a la rev ersió n del acuerdo de r e a liz a r e leccio n es. Para su
centro de México y la s extremidades noroeste y su ro este d el p a is ,38 y de
p o l ít i c a de d ila c ió n de los prometidos comicios, Huerta contó además con
un proyecto de ley que c o n s is tía en un derecho del 10% sobre la
e l apoyo de antiguos m aderista nucleados en la c o rrie n te Renovadora.
exportación del
A sí, cuando los fe lic is ta s demandaron en el Congreso elecciones
inm ediatas, renovadores y h u e rtis ta s se unieron para que no progresara
la in ic i a t i v a . En a b r il Huerta logró p o ste rg ar la s elecciones para 36 KNIGHT, 1 9 9 6 , p . 6 1 7 .
31 Un e m p r é s t i t o e x t r a n j e r o e r a v i t a l p a r a e l g o b i e r n o h u e r t i s t a p a r a o b t e n e r d i n e r o
octubre y F é lix Díaz renuncio a su candidatura a p re s id e n te .35 La calda f r e s c o . A dem ás d e l a n e c e s i d a d d e c u b r i r e l d é f i c i t d e l a T e s o r e r í a F e d e r a l y l o s
v e n c i m i e n t o s d e l o s d o s e m p r é s t i t o s c o n t r a t a d o s p o r e l g o b i e r n o d e M a d e ro c o n l a
d el felicism o fue evidente. En a b r il A lberto García Granados renunció C a sa d e S p y e r d e N ueva Y o rk .
38 E l p r o y e c t o d e E s q u i v e l e s t a b l e c í a q u e e l f e r r o c a r r i l s e d e b í a c o n s t r u i r
por la ru ta que el g o b ie rn o d e s ig n a ra , el g o b ie rn o te n d ría una
33 D i a r i o d e l o s d e b a t e s . . . P A L A V IC IN I,1 9 1 5 , p p . 2 5 7 - 2 6 1 . p a r tic ip a c ió n e n l a d i r e c t i v a d e l a e m p r e s a y e l 50% d e l a s u t i l i d a d e s ,
34 GARCIADIEGO, 1 9 9 6 , p . 2 3 5 . p a s a d o s c i n c u e n t a a ñ o s , t o d a s l a s p r o p i e d a d e s d e l a e m p re sa p a s a r í a n a l p o d e r
35 KNIGHT, 1 9 9 6 , p . 6 1 7 . d e l a N a c ió n y e l g o b ie r n o no d a r í a s u b v e n c ió n p o r k i l ó m e t r o s , s i n o q u e s o l o
g a r a n t i z a r l a u n i n t e r é s d e l 6% a n u a l s o b r e i o s b o n o s q u e s e e m i t i e r a n p a r a l a
c o n s t r u c c i ó n d e l a l í n e a . E s q u i v e l l o g r ó h a c e r u n c o n t r a t ó c o n l a C o m p a ñ ía d e l o s
F e r r o c a r r i l e s S e c u n d a r i a s d e B é l g i c a . ESQUIVEL, 1 9 9 3 , p . 1 1 0 .

13 14
oro, quedando lib r e de dicho impuesto la Comisión de Cambios y Moneda.39
Esquivel n o tific ó a l p re sid en te y le p id ió que convocara un consejo de
Finalmente, después de acaloradas discusiones e n tre e l diputado Moheno
m in istro s a fin de acordar lo que debiera hacerse; ante esto Huerta le
y e l s e c re ta rio de Hacienda, quien se p resentó ante los le g isla d o re s a
p id ió su re n u n cia.40 a s i, Esquivel Obregón terminó sus labores como
defender su proyecto, la Cámara aprobó la c o n tra ta c ió n de un em préstito
M inistro de Hacienda e l 29 de ju li o de 1913. Podemos re la c io n a r la sa lid a
con e l Banco de P arís y de los Países Bajos por 20 m illones de lib r a s
de Esquivel del gabinete y su marcha a l e x ilio con e l d e te rio ro del
e s te r lin a s con un in te ré s nominal d el 6 por c ie n to . La m odificación más
felicism o como grupo de oposición p o l ít i c a y la consecuente consolidación
im portante que incorporó la Cámara de Diputados fue que e l em préstito
del c a rá c te r d ic t a to r i a l d el gobierno de Huerta. En e fe c to , para
fuera contratado en moneda e x tra n je ra .
septiem bre e l gabinete f e l i c i s t a habla sido completamente s u s titu id o .
Poco después de r e c i b ir la prim era p a rte del em préstito, Huerta le p id ió
Los nuevos m in istro s fueron hombres a quienes e l p re sid en te consideraba
la renuncia a T oribio E squivel. Los hechos que motivaron dicha renuncia
h u e rtis ta s l e a l e s . 41 Conjuntamente, aumentó e l clima de v io le n c ia con la
guardan re la c ió n con e l in te ré s de lo s f e l i c i s t a s en la re a liz a c ió n de
elim inación de p o lític o s , funcionarios, p e rio d is ta s y o fic ia le s
e le cc io n es. Óscar B ra n iff, quien se encontraba en Estados Unidos como
d isid e n te s. El senador por Chiapas, B e lisa rio Domínguez, fue asesinado
enviado para hacer gestiones ante e l gobierno de dicho p a is para lo g rar
por sus ataques contra e l régimen. El 8 de octubre algunos diputados
el reconocim iento diplom ático, envió a Esquivel un telegram a
f e l i c i s t a s p id ie ro n una in v estig a ció n . Dos d ías después Huerta d iso lv ió
comunicándole la determ inación d el p re sid en te Woodrow Wilson de mandar
e l congreso y efectuó "elecciones" e l 26 de octubre y, a pesar de sus
a John Lind como enviado para s o l i c i t a r a Huerta que convocara a
promesas, se hizo nombrar p re sid e n te . La mayoría de lo s miembros del
elecciones en la s que é l no fuera candidato a la p re sid en c ia de la
gabinete f e l i c i s t a huyeron del p a ís a l ig u al que T oribio Esquivel, quien
República, ofrecién d o le, en caso de a ce p ta r, amplia ayuda p e cu n iaria .
re c ib ió e l consejo de un personaje cercano a l gobierno de que debía
a le ja rs e pues su vida estaba en p e lig ro .

39 D e b id o a l a s c o n d i c i o n e s q u e e s t a b a v i v i e n d o e l p a i s . L a C o m i s i ó n d e C a m b io s y
M oneda h a b l a a g o t a d o s u f o n d o r e g u l a d o r y com o e l G o b i e r n o c o n s t a n t e m e n t e t e n i a q u e
s i t u a r d in e r o e n L o n d re s c a r a e l s e r v i c i o d e l a s d e u d a s , p o r f a l t a d e fo n d o r e g u la d o r
t e n i a n q u e r e c u r r i r a l m e r c a d o . Como e l o r o q u e p r o d u c í a n u e s t r o p a i s e s t a b a a c a p a r a d o
p o r d o s e m p r e s a s p r i v a d a s , p r á c t i c a m e n t e é s t a s im p o n ía n e l t i p o d e c a m b io . C on s u
p r e p u e s ta E s q u iv e l p r e te n d í a que l o s a c a p a r a d o r e s y a no e x p o r ta r a n e l o ro p o r su 40 ESQUIVEL, 1 9 9 3 , p . 1 3 6 ; A n t e c e d e n t e s p o l í t i c o s de O scar B ra n iff, s /f, e n ATEO,
c u e n t a , s i n o a t r a v é s d e l a C o m i s i ó n d e C am b io y M o n e d a . D i a r i o d e l o s d e b a t e s , . . . , s e c c i ó n d o c u m e n ta l, c a j a 2 9 , e x p . 9 , f o j a 3 0 .
11 d e a b r i l d e 1 9 1 3 .
41MEYER, 1 9 6 3 , p . 156.

15 16
WILSON, ESTADOS UNIDOS Y MÉXICO

T oribio Esquivel Obregón lle g ó a Nueva York e l 5 de diciembre de 1913.


En re a lid a d , e l tra s la d o a Brooklyn no s a tis f iz o a Toribio
Tenia la idea de que su e x ilio no se p ro lo n g arla más a ll á de un par de
Esquivel, pues consideraba e ste lugar como la " ...p o b la c ió n más
meses, según expresó de manera re ite ra d a en su correspondencia. A su
grande y más fea de los Estados Unidos". Lo que especialm ente no
antiguo s e c re ta rio p a r tic u la r , Rafael L eb rija, quien lo in v itó a v ia ja r
to le ra b a era e l e s t i l o de vida de su población. A su antiguo
a España, Esquivel e sc rib ió que le encantaba la idea, sobre todo e l poder
s e c re ta rio , Rafael L ebrija le e sc rib ió d iciéndole que en Nueva
tr a b a ja r en e l Archivo de Indias en una re in te rp re ta c ió n de la H isto ria
York la s personas perdían su in d iv id u a lid a d y se comportaban como
de México, sin embargo,
e l "...átom o ce un cuerpo del cual sigue los movimientos". Este
. . . por ahora me es im posible, los acontecim ientos que se fenómeno estaba simbolizado en la s viviendas " ...to d a s e lla s
d e sa rro lla n en México me obligan a e s ta r aquí y a no perder ni
un d e ta lle d el complicadísimo drama que se e s tá desempeñando fastidiosam ente ig u ale s, apenas d is tin g u ib le s por la numeración."
a l l í n i un momento oportuno que t a l vez pueda p re sen ta rse para
p re s ta r un s e r v ic io .42 Además, p e rc ib ía que la mayoría de la s personas vivían sin hacerle
caso a nadie y terminaban sin tién d o se solos y perdiendo e l
A su hermano Enrique (quien le da la mala n o tic ia de que le ha sido
sentim iento de so lid a rid a d . En medio de e s te ambiente, T oribio
impuesto un préstamo fo rzoso), le contó sobre lo paradójico de su e x ilio
Esquivel se n tía que su personalidad le e ra arreb atad a, sobre todo
porque estaba acostumbrado a v iv ir en un medio de mayor
c o rd ia lid a d .44 En resumen, como le e sc rib ió a su esposa, en

A mi llegada a é sta me in s ta lé en e l h o te l A stor que e stá en e l Brooklyn no habla nada que se a ju s ta ra a su manera de se r, por lo
punto más concurrido de Nueva York; pero la verdad es que a poco
me cansé de ta n to ruido y d ecid í venirme a Brooklin en donde que llevaba una vida enteram ente en contra de su c a rá c te r y sus
tomé un departamento amueblado, en donde puedo e s ta r cómodamente
y enteram ente tra n q u ilo en lo f ís ic o , como lo e s t a r í a también en g u sto s. 45
lo moral a no se r por la separación de la fa m ilia y por los
negros pensamientos que me persiguen como a todo buen mexicano. Una vez que terminó de v i s i t a r algunos s i t i o s de in te ré s de la
De su e rte que aquí me tie n e s por un capricho verdaderamente
extravagante del d e stin o , viviendo en Brooklyn, a m il leguas de ciudad, se dedicó a l estu d io d el idioma in g lé s, a la le c tu ra sobre
mis gentes y sin saber por cuánto tiempo puede esto prolongarse.
¡La verdad es que nunca me lo habría imaginado!43 diversos asuntos re la tiv o s a Estados Unidos y, sobre todo, de
42 C a r t a d e T o r i b i o E s q u i v e l p a r a R a f a e l L e b r i j a , 23 d e f e b r e r o d e 1 9 1 4 , e n a rtíc u lo s y n o tic ia s de lo que acontecía en su p a ís . Según Toribio
ATEO, s e c c i ó n d o c u m e n t a l , c a j a 2 7 , e x p . 2 2 , f o j a 1 3 .
43 C a r t a d e T o r i b i o E s q u i v e l O b r e g ó n p a r a E n r i q u e E s q u i v e l O b r e g ó n , 24 d e f e b r e r o
44 C a r t a d e T o r i b i o E s q u iv e l O b reg ó n p a r a R a f a e l L e b r ija ,
d e 1 9 1 4 , e n ATEO, s e c c i ó n d o c u m e n t a l , c a j a 2 8 , e x p . 6 , f o j a 2 .
12 d e e n e r o d e 1 9 1 4 ,
17
e n ATEO, s e c c i ó n d o c u m e n t a l , c a j a 2 7 , e x p . 2 2 , f o j a 5 .
45 ESQUIVEL, 1 9 9 6 , p p . 1 9 0 - 1 9 2 y 2 0 4 .
18
Esquivel, el ritmo de actividad que mantuvo era similar al que un discurso demagógico en contra de ios grandes capitalistas. En este

realizaba en México en los dias de más trabajo; incluso habla marco, abordaba el caso mexicano para ganar partidarios, intentando

ocasiones en que no alcanzaba a terminar de estudiar todo lo que habla aparecer como "...el redentor de un pueblo".50* Con este fin, utilizaba la

dispuesto.46* También se propuso establecer relaciones personales para la prensa, el cinematógrafo y el libro para difundir la idea de que los

mejor realización de su labor profesional y política, cuando esto fuera constitucionalistas eran hombres del pueblo que habian sidodespojados de

posible.41 sus tierras por Díaz para

Toribio Esquivel atribula a la política seguida por Wilson, gran parte dárselas a los capitalistas americanos. En el mismo sentido iba la

de la responsabilidad sobre lo que ocurría en México. estrategia de hacer de Villa una figura legendaria y romántica.

Consideraba que el presidente norteamericano era una persona terca a

quien le interesaban poco los principios morales, a pesar de que muchos UNA PROPUESTA DE PACIFICACIÓN: ELECCIONES Y LEY AGRARIA

pensaban lo contrario.48 Opinaba que la participación de Wilson en el La ejecución por parte de fuerzas villistas del terrateniente inglés

conflicto no habla contribuido a calmar los ánimos William Benton, a finales de febrero, ocasionó un escándalo internacional.

sino a exacerbarlos, pues mientras a Huerta lo fortalecía dándole el La prensa y en el Parlamento británico condenaron el hecho y exigieron

arma de la defensa de la soberanía de la nación con la ocupación de una enérgica reacción. Esquivel, quien comentó este tema con

Veracruz, a Carranza lo apoyaba con armamento.49 Toribio Esquivel Obregón el gerente de la Compañía Papelera San

explicaba además la actitud del presidente de Estados Unidos hacia México Rafael, el empresario español José de la Macorra, con quien mantenía una

como parte de una política para fortalecerse dentro de su país. Ante el abundante correspondencia y compartía la responsabilidad de la

crecimiento de grupos de oposición socialista en Estados Unidos, Wilson administración de los bienes de Luis

planeaba atraer a las masas y especialmente a dichos grupos con Bermejillo, temía que las consecuencias inmediatas del conflicto podían

ser la intervención estadunidense en México o la declaración de


46 ESQUIVEL, 1 9 9 6 , p . 1 8 9 .
47 C a r t a d e T o r i b i o E s q u i v e l O b r e g ó n c a r a E d u a r d o A r o c h i , 16 d e m a rz o d e 1 9 1 4 , e n independencia de los estados fronterizos por parte de los villistas. Su
ATEO, s e c c i ó n d o c u m e n t a l , c a j a 2 8 , e x p . 7 , f o j a 2 .
45 C a r 6 a d e T o r i b i o E s q u i v e l O b r e g ó n p a r a J o s é C a s t e l l o t J r . , 2 d e a b r i l d e mayor temor era que se decidiera declararar la independencia de los
1 9 1 4 , e n ATEO, s e c c i ó n d o c u m e n t a l , c a j a 2 8 , e x p . 3 , f o j a 9 ; C a r t a d e T o r i b i o E s q u i v e l
O b r e g ó n p a r a Ó s c a r B r a n i f f , 7 d e a b r i l d e 1 9 1 4 , e n ATEO, s e c c i ó n d o c u m e n t a l , c a j a estados fronterizos, ante lo costosa en dinero y sangre que podía resultar
29, ex p . 9, f o ja s 9 -1 2 .
49 C a r t a d e T o r i b i o E s q u i v e l O b r e g ó n p a r a R a o u l M i l l e , 8 d e a b r i l d e 1 9 1 4 , e n ATEO, la intervención norteamericana.
s e c c i ó n d o c u m e n ta l, c a j a 2 8 , e x p . 1 3 , f o j a 1 . 50 C a r t a d e T o r i b i o E s q u i v e l O b r e g ó n p a r a M a n u e l M a lo y J u v e r a , 18 d e m ayo d e
19 1 9 1 4 , e n ATEO, s e c c i ó n d o c u m e n t a l , c a j a 2 8 , e x p . 1 2 , f o j a 9 .
20
En su razonamiento cuenta e l hecho de que la s n o tic ia s publicadas en la
prensa le hacían pensar que los rev o lu cio n ario s de Chihuahua estaban En opinión de T oribio Esquivel, e l p e lig ro de la intervención o e l
dando los primeros pasos encaminados a lo g ra r t a l independencia, " . . . l o desmembramiento del t e r r i t o r i o debían se r motivos su fic ie n te s para que
cual le s p e rm itirá s a tis f a c e r sus ambiciones p o lític a s más pronto y de lo s revolucionarios y e l gobierno d ieran f in a la s h o s tilid a d e s .53
una manera más segura." Además, según E squivel, im portantes personajes Considera que hay una "m agnífica oportunidad" pues e l in cid e n te de Bentan
d el mundo p o lític o norteam ericano estaban in te re sa d o s. El p re sid en te de " ... nos proporciona a los n e u tra le s una oportunidad para e n tra r en
la comisión de negocios e x tra n je ro s en e l congreso p a rtic ip a b a de e ste acción y obtener una poderosa ayuda de la opinión pública aquí y en e l
modo de pensar, a s í como también en senador F a ll, quien estaba dispuesto mismo México"54
a p e d ir en e l senado que e l caso de México re cib a amplia discusión en Así, T oribio Esquivel envió una c a rta a Roberto Pesqueira, re p re se n tan te
e l Congreso. En e l razonamiento erróneo de Esquivel pesa mucho, además, de los c o n s titu c io n a lis ta s en Washington, donde le expuso su propuesta
la ex periencia negativa su frid a por México a mediados d el sig lo XIX, p a c ific a d o ra . Envió también dicha c a rta a l p re sid en te Huerta y logró que
pues afirm a que una vez lanzada la d eclaración de independencia por los e l 15 de marzo ap are cie ra publicada en The New York World.55 Su propuesta
Estados Unidos, ésto s se a p resu ra rían a d e c la ra r casus b e l l i cualquiera de p a c ific a c ió n abordaba dos cuestiones fundamentales, e l re p arto de
demostración de p a rte de nuestro gobierno para recuperar la soberanía t i e r r a s y e l proceso e le c to r a l. Proponía e l impulso de una ley cuyo
en ese t e r r i t o r i o , "como sucedió en e l caso de T e ja s ." 51 objeto fuera la subdivisión de la propiedad a trav é s de empresas
Y luego agrega en c a rta a Rafael L ebrija fraccionadoras y e l establecim iento del pequeño c ré d ito r u r a l. Esta idea
estaba in sp irad a en e l proyecto de ley que había entregado a l Congreso
Usted comprenderá e l estado de ang u stia que t a l situ ac ió n
de cosas me produce, la ansiedad con que espero la s n o tic ia s y siendo M inistro de Hacienda y que no había sido tomado en cuenta
la desesperación de ver cómo los e rro re s y la más crim inal
ambición ha o rilla d o a México a su ru in a.
Ambos p a rtid o s p re fie re n ver para siempre m utilada a la nación
que p re s c in d ir de sus p re te n sio n es. Le aseguro a u sted que no
sé dónde m eter la cara de vergüenza.52 53 C a r t a d e T o r i b i o E s q u i v e l O b r e g ó n p a r a J o s é d e l a M a c o r r a , 21 d e f e b r e r o d e 1 9 1 4 ,
51 C a r t a d e T o r i b i o E s q u i v e l O b r e g ó n p a r a J o s é d e l a M a c o r r a , 21 d e f e b r e r o de e n ATEO, s e c c i ó n d o c u m e n t a l , c a j a 2 8 , e x p . 2 8 , f o j a s 48 y 4 9 ; C a r t a d e T o r i b i o
1 9 1 4 , e n ATEO, s e c c i ó n d o c u m e n t a l , c a j a 2 7 , e x p . 2 8 . E s q u i v e l O b r e g ó n , p a r a R a f a e l L e b r i j a , 23 d e f e b r e r o d e 1 9 1 4 , e n ATEO, s e c c i ó n
d o c u m e n ta l, c a j a 2 7 , e x p . 2 2 , f o j a 1 3 ; C a r t a d e T o r i b i o E s q u iv e l O b re g ó n p a r a J o s é
52 C a r t a d e T o r i b i o E s q u i v e l O b r e g ó n p a r a R a f a e l L e b r i j a , 23 d e f e b r e r o d e 1 9 1 4 , C a s t e l l o t J r . , 23 d e f e b r e r o d e 1 9 1 4 , e n ATEO, s e c c i ó n
e n ATEO, s e c c i ó n d o c u m e n t a l , c a j a 2 7 , e x p . 22 f o j a s 13 y 1 4 . d o c u m e n ta l, c a j a , e x p . 3 , f o j a 6 .
21 54 C a r t a d e T o r i b i o E s q u iv e l O b re g ó n , p a r a J o s é d e l a M a c o rra , 4 d e m arz o d e 1 9 1 4 , e n
ATEO, s e c c i ó n d o c u m e n t a l , c a j a 2 7 , e x p . 2 8 , f o j a 5 7 .
55 S e g ú n T o r i b i o E s q u i v e l , u n p e r i ó d i c o s o b r i o y r e s p e t a b l e l i g a d o a W i l s o n . C a r t a
d e T o r i b i o E s q u i v e l O b r e g ó n p a r a E d u a r d o A r o c h i , 16 d e m a rz o d e 1 9 1 4 , e n ATEO,
s e c c i ó n d o c u m e n ta l, c a j a 2 8 , e x p . 7 , f o j a 2 .
22
en aquel momento. En cuanto a la s elecciones de p re sid en te y Vice­ a la fu erza. No hay consideraciones n i de p a trio tism o n i de
ninguna o tra índole que puedan c o n tra rre s ta r la ambición
p re sid en te de México, proponía adoptar e l p rin c ip io de la lim ita c ió n del personal de p erpetuarse en e l p o d er.57
voto para funcionarios fe d era le s a lo s ciudadanos que supieran le e r y
Con dureza, Macorra c a l i f i c a la propuesta de Esquivel como un " . . .lirism o
e s c r ib ir y señalaba la necesidad de la creación de una ju n ta "n e u tra l"
de fracaso irrem ed iab le."
que g a ra n tiz a ra la c la rid a d en la s próximas e le c c io n e s .56
¿A qué se deben los e rro re s de ap reciación de Esquivel? En prim er lu g ar,
Decía a l re p re se n tan te de los c o n s titu c io n a lis ta s
e l dolor d el desarraigo forzoso es fuente de confusión. Más aún en e l
Se comprende que la Revolución no e sté d isp u esta a dar caso de Esquivel, pues se t r a t ó de un desarraigo v io le n to que lle v ó a
validez a esas e leccio n es, m ientras la p a rte más poblada del
p a ís e sté bajo e l co n tro l d el Gobierno; y la verdad es que, con un hombre que pasó la mayor p a rte de su vida en una sociedad provinciana,
e l a c tu a l sistem a e le c to r a l, n i ha habido n i habrá jamás
elecciones en México; é sta s serán siempre una gran m entira. En a v iv ir en una gran urbe como Nueva York. A la le ja n ía y
o tra ocasión propuse la idea de que se lim ita ra e l derecho de
v o tar a los ciudadanos que supieran le e r y e s c r ib ir : un e l dolor del d e s tie rro s e unen la
p eriódico d el Gobierno me atacó, y en re a lid a d se comprende e l
ataque, porque con e l su frag io u n iv ersal en Gobierno puede preponderancia de fuentes de información poco c o n fia b le s, como eran la
a rro ja r en la s ánforas la inmensa masa de los analfabetos (que
en México son e l ochenta y cinco por ciento) y a p la s ta r toda prensa mexicana y la norteam ericana en ese entonces y la fu e rte presencia
obra de propaganda p o l ít i c a ra c io n a l. El su frag io u n iv e rsa l ha
hecho en México im posible toda obra de transform ación p a c ífic a , de n o tic ia s , en muchos casos rumores infundados, que provenían d el mundo
que perm ita lle v a r nuevas ideas a l gobierno, y dar s a tis fa c c ió n
a la s necesidades populares. p o lític o norteamericano y de ios c o rre lig io n a rio s . Es común encontrar
que ios d esterrad o s re a liz a n a n á lis is erróneos que los lle v a n a ela b o rar
Con realism o José de la Macorra dice a Esquivel que no cree que den
e s tra te g ia s p o lític a s equivocadas. En e s ta situ a c ió n
ningún re su lta d o sus loab les esfuerzos para conseguir una solución podemos en co n trarp arte de la
p a c íf ic a ." , y más ad elante agrega respecto de la p o sib ilid a d de que
explicación d el fracaso de la mayoría de la s a lte rn a tiv a s p o lític a s para
Huerta aceptara la p ro p u e s ta .. .
México elaboradas por los exilados en esa época.

. . . l a condición de que haya una Junta n e u tra l que d i r i j a y Como era de e sp erarse, la lab o r p o lític a de Esquivel no tuvo eco
g a ran tic e la sin c erid ad de la s eleccio n es, no creo que haya
quien se la haga acep tar de buena fe . Él y su grupo tie n e hoy con los rev o lu cio n ario s quienes n i siq u ie ra le co n testaro n . Dentro del
la sa rté n por e l mango, y no la so lta rá n más que
gabinete h u e r tis ta , López P o r tillo , S e c retario de Relaciones E x te rio re s,
agradeció e l ofrecim iento, pero d ijo que no era aceptable en ese momento.
Eduardo Tamariz, m in istro de
56 C a r t a d e T o r i b i o E s q u i v e l O b r e g ó n p a r a R o b e r t o P e s q u e i r a , 9 d e m a rz o d e 1 9 1 4 , en 57 C a r ta d e J o s é d e l a M ac o rra p a r a T o r ib io E s q u iv e l O b reg ó n , 17 d e m a r z o d e 1 9 1 4 ,
ATEO, s e c c i ó n d o c u m e n t a l , c a j a 2 8 , e x p . 8 , f o j a s 7 - 1 6 . e n ATEO, s e c c i ó n d o c u m e n t a l , c a j a 2 7 , e x p . , 2 8 , f o j a 7 0 .
24
23
Agricultura, se mostró interesado y aseguró que activaría en el Congreso respuestas fueron contundentes.61 Miguel Díaz Lombardo dijo que era

la aprobación de la iniciativa de ley agraria que Esquivel Obregón había necesaria la venganza y la destrucción de los vencidos. Por su parte,
presentado cuando era Ministro de Hacienda. Para fines de marzo la Sánchez Azcona afirmó que al triunfar el constitucionalismo votaría por
campaña británica sobre el asesinato de Benton había terminado.5
59 Con
8 la pena de muerte de los amigos de Malo, en referencia a Toribio
esto se apagaba la crisis que había dado pauta a Toribio Esquivel para Esquivel.62
su labor pacificadora. En carta a José de la Macarra, Esquivel previo la intransigencia

de los constitucionalistas. Tal como fue una constante en el


UN EXILIO MÁS PROLONGADO
pensamiento de Esquivel durante los años de exilio, su

razonamiento tiene como un punto importante de referencia la


Interesado en su situación personal y tal vez con la esperanza de poder
política norteamericana hacia México, así comienza diciendo que
negociar su regreso, Toribio Esquivel trataba de enterarse de cómo
tratarían los "rebeldes" a quienes no comulgaban con su causa. Juan
tuvo una conversación con un representante del World que acaba de
Sánchez Azcona, agente confidencial del carrancismo en Europa, hizo
declaraciones muy radicales; dijo en París que "la revolución no dejará
venir de Washington y trae de allá las noticias " más alarmantes
en su lugar cabezas ni propiedades"; Esquivel temía por "lo que estos
bárbaros se proponen hacer en México".60 Para sondear sobre los
para México." El gobierno americano ha llegado a comulgar
"sentimientos" hacia él, Toribio Esquivel recurrió a Manuel Malo y
Juvera. Este se encontraba exilado en París y tenía contacto con algunos
enteramente con una opinión sostenida aquí por Luis Cabrera en un
revolucionarios a quienes consultó sobre sus opiniones sobre Toribio
Esquivel y las folleto que se titula The M ex ic a n S i t u a t i o n fr o m a M e x ic a n P o i n t

o f v le w . Según Cabrera, el motivo por el cual México nunca ha

tenido una paz bien cimentada es porque por desgracia los

partidarios de la causa popular han transigido con los del partido

conservador. Con un dejo de ironía Esquivel afirma que, en apoyo a

esa doctrina, Cabrera cita los hechos históricos que se le

ocurren, por más que nada tengan que ver con el caso y que más
61 En s u c o r r e s p o n d e n c i a c o n L u i s E l g u e r o s o b r e l a s c o n f e r e n c i a s d e N i a g a r a F a l l ,
58 C a r t a d e E d u a r d o T a m a r i z p a r a T o r i b i o E s q u i v e l O b r e g ó n , 16 d e a b r i l d e 1 9 1 4 , e n
E s q u iv e l p ro p u so a M alo J u v e r a com o u n p o s i b l e c a n d i d a t o a la p re s id e n c ia
ATEO, s e c c i ó n d o c u m e n t a l , c a j a 2 8 , e x p . 9 .
p r o v i s i o n a l d e M é x ic o , p o r c o n s i d e r a r l o u n h o m b re a c e p t a b l e t a n t o p ara lo s
55 De a c u e r d o c o n K a t z , a l g u n o s g r u p o s e n I n g l a t e r r a a p r o v e c h a r o n e l i n c i d e n t e d e
r e v o l u c i o n a r i o s com o p a r a e l g o b i e r n o h u e r t i s t a . C a r t a d e T o r i b i o E s q u i v e l p a r a
B e n to n p a r a p r e s i o n a r a E s ta d o s U n id o s a q u e r e v i s a r a l a s t a r i f a s d e l C a n a l de
M alo J u v e r a , 19 d e j u n i o d e 1 9 1 4 , e n ATEO, s e c c i ó n d o c u m e n t a l , c a j a 2 8 , e x p . 1 2 ,
P a n a m á . U na v e z s a t i s f e c h a s s u s d e m a n d a s c o n l a a p r o b a c i ó n d e u n a n u e v a l e y e l 31
f o j a s 10 y 1 1 .
d e m a r z o , c e s ó l a c a m p a ñ a s o b r e e l c a s o B e n t o n . KATZ, 1 9 8 3 , p . 2 2 1 .
62 C a r t a d e M a n u e l M alo y J u v e r a p a r a T o r i b i o E s q u i v e l O b r e g ó n , 28 d e j u n i o d e 1 9 1 4 ,
60 C a r t a d e T o r i b i o E s q u i v e l O b r e g ó n p a r a Ó s c a r B r a n i f f , 8 d e a b r i l d e 1 9 1 4 , e n ATEO,
e n ATEO, s e c c i ó n d o c u m e n t a l , c a j a 2 8 , e x p . 1 2 , f o j a s 1 4 - 1 8 .
s e c c i ó n d o c u m e n ta l, c a j a 2 9 , e x p . 9 , f o j a 1 3 .
26
25
bien servirán para probar lo contrario;

pero como e l l i b r e t o e sta b a hecho p a ra p ro d u c ir e fe c to


en e l m ajadero de Bryan y en su a so c ia d o , e l é x ito fue completo in te n tó e n ta b la r negociaciones con los c o n s titu c io n a lis ta s para lo cual
y ahora W ashington e s tá creyendo o fin g ie n d o c r e e r , porque es
lo que más l e conviene p a ra sus f i n e s , que e fe c tiv a m e n te debe propuso que e l antiguo XXVI Congreso se re u n ie ra y designara un
e l p a r tid o p o p u la r m a n ife s ta rs e i n tr a n s i g e n te , que C arranza a l
l l e g a r a México, cosa que se c o n sid e ra e v id e n te , va a m atar a p re sid en te p ro v isio n a l, que hubiera a rm istic io y am nistía general, que
todos lo s d e l p a r tid o c onservador y a d e s t e r r a r a lo s
e sp a ñ o le s, ya que a é s to s no lo s puede m ata r. Que e l gobierno los re sto s del e jé r c ito fe d era l sig u iera n en funciones y que se
am ericano nada te n d rá que o b j e t a r , que sim plem ente se lim i ta r á
a s o s te n e r a C arranza suceda lo que suceda, porque lo que e l re sp eta ran los rangos e x is te n te s .
gobierno q u ie re es que haya paz en M éxico.63
Entusiasmado con la p o sib ilid a d de que la p o l ít i c a de Carbajal

Por lo que T o rib io E sq u iv el Obregón s a b ia del ánimo de lo s f r u c t i f ic a r a , T oribio Esquivel Obregón tuvo la fa n ta s ía de dar f in a su
e x ilio y e sc rib ió a José de la Macorra que t a l vez podría volver la
r e v o lu c io n a rio s , tem ia que lo s a ta q u es c o n tra é l se r e a l iz a r a n a tr a v é s
próxima semana.65 Consideraba que la p o l ít i c a de C arbajal e ra adecuada,
de l a c o n fis c a c ió n de sus b ie n e s . Prueba de e s to e ra que ya le habia
sobre todo porque podía impedir un mayor derramamiento de
sid o im puesto un préstam o fo rz o s o . Además, se h a b ia e n te ra d o de l a
sa n g re.66 Su deseo devolver se vio alimentado
c o n fis c a c ió n de l a s p ro p ied a d es de algunos a q u ien es se c o n sid era b a
por e l hecho de que de lado de los rev o lu cio n ario s re c ib ió n o tic ia s
c o n tr a r io s a l a causa re v o lu c io n a ria y E sq u iv el Obregón suponía que
menos pesim istas que la s que habían predominado hasta
e s t a r l a in c lu id o e n tr e lo s a fe c ta d o s . A si, con e l f i n de p ro te g e rs e ,
entonces. Rafael L ebrija le e sc rib ió d iciéndole que en los primeros días
d e c id ió form ar una so c ied a d b a jo l a s le y e s de Nueva York p a ra t r a s m i t i r l e
de agosto se reunió con A lfredo Robles Domínguez,
sus p ro p ied a d es u b ica d as en G u a n aju a to .64 re p re se n tan te de lo s c o n s titu c io n a lis ta s en la Ciudad de México,
El 15 de j u l i o de 1914 H uerta p re s e n tó su re n u n c ia y 5 d ia s después quien d ijo e s ta r dispuesto a ayudar a T oribio E sq u iv el.6”7 Sin embargo,
s a l i ó de C oatzacoalcos rumbo a l e x i l i o . F ra n c isco S. C a rb a ja l, q u ien , para ese momento en e l ambiente p o lític o ya se hablaba de un asunto que
poco a n te s h a b ia sid o nombrado M in istro de R e la cio n e s E x te rio re s , asumió tra e ría se rio s problemas a T oribio Esquivel: la búsqueda de los
l a p re s id e n c ia i n t e r i n a . C a rb a ja l responsables por e l a se sin ato de Francisco I . Madero y José María Pino
S uárez.68
65 C a r t a d e T o r i b i o E s q u i v e l O b r e g ó n p a r a J o s é d e l a M a c o r r a , 23 d e j u l i o d e
1 9 1 4 , e n ATEO, s e c c i ó n d o c u m e n t a l , c a j a 2 7 , e x p . 2 8 , f o j a 1 1 8 .
66 C a r t a d e T o r i b i o E s q u i v e l O b r e g ó n p a r a L u i s E l g u e r o , 20 d e j u l i o d e 1 9 1 4 , e n
ATEO, s e c c i ó n d o c u m e n t a l , c a j a 2 8 , e x p . 1 1 , f o j a s 18 y 1 9 .
C a rta de R a fa e l L e b r ija p a r a T o r ib io E s q u iv e l O b reg ó n , 7 de a g o s to de 1 9 1 4 , en
63 Carta de Toribio Esquivel Obregón para José de la Macorra, 9 de a b ril ATEO, s e c c i ó n d o c u m e n t a l , c a j a 2 7 , e x p . 2 2 , f o j a 2 6 .
de 1914, en ATEO, sección, documental, caja 27, exp. 28, fo ja 82. 68 C a r t a d e T o r i b i o E s q u i v e l O b r e g ó n p a r a R a f a e l L e b r i j a , 25 d e j u l i o d e 1 9 1 4 , e n
64 Carta de Toribio Esquivel Obregón para José de la Macorra, 27 de junio de ATEO, s e c c i ó n d o c u m e n t a l , c a j a 2 7 , e x p . 2 2 , f o j a 2 4 .
1914, en ATEO, sección documental, caja 27, exp. 28, fojas 112 y 113.
28
27
Debido a l a lto grado de ex altac ió n que predominaba/ Toribio Esquivel T oribio Esquivel Obregón consideró que la s acusaciones hechas a trav é s
suponía que e l asunto de lo s a se sin ato s de Madero y Pino Suárez podría de los lib ro s de Prida y B ell, a s í como lo publicado en la prensa, eran
se r usado en su co n tra . E sta suposición era fundada, pues desde la sa lid a p a rte de una e s tra te g ia de V ictoriano Huerta para lim p iar su nombre y
de Huerta de la Ciudad de México, e l tema de los a se sin ato s comenzó a aparecer como víctim a de su g a b in e te .72 Pero, sobre todo, c re ía que la
se r abordado a trav é s de d ife re n te s v ia s . El antiguo congreso elegido e s tr a te g ia h u e r tis ta podría se r aprovechada por los c o n s titu c io n a lis ta s
durante e l gobierno de Madero se reunió y acordó a b r ir una averiguación en su intención de a ta c a r a los ex m in istro s y de e s ta forma a le ja rlo s
para a c la ra r e l crim en.69 La prensa también se ocupó d el asunto. En El del campo p o lític o . En re a lid a d "Lo que pasa es que n e ce sita n
R a d ic a l, p eriódico c a rra n c is ta de re c ie n te a p arició n , se publicó un ahuyentarnos, n ecesitan que le s dejemos e l campo p o lític o para disponer
a r tíc u lo donde se acusaba a F élix Díaz y a l prim er gabinete de Huerta de la nación, según la idea genuina d el maderismo, como herencia
de haber decidido lo s a se sin a to s. Según e l a r tíc u lo sólo se habla opuesto p ro p ia ." 73 Además de los motivos expuestos por Esquivel Obregón para
A lberto Robles G il, ex m in istro de Fomento.70 En El País también se entender la ap arició n de la acusaciónal prim er gabinete
publicaron a rtíc u lo s en e l mismo se n tid o . Además, aparecieron dos lib ro s h u e r tis ta en e l
en los que igualmente se resp o n sab ilizab a a l prim er gabinete h u e rtis ta momento del triu n fo del carrancism o, debe de te n e rse en cuenta en e l
de los a se sin a to s: From D e sp o tism t o A narch y, de Ramón Prida y The a n á lis is que dicha acusación implicó tender una sombra de d e sp re stig io
P o l i t i c a l Shame o f M éxico de Eduardo I . B e ll.71 sobre e l E jé rc ito Federal, que fue d isu e lto por los
revolucionarios en ese momento, pues im portantes p ersonajes ligados a
dicha in s titu c ió n como F élix Díaz, Rodolfo Reyes y Mondragón quedaban

69 C a r t a d e T o r i b i o E s q u i v e l O b r e g ó n p a r a R a f a e l L e b r i j a , 25 d e j u l i o de 1914, en . involucrados en la acusación.

ATEO, s e c c i ó n d o c u m e n t a l , c a ja 27, exp. 22, f o ja 24. T oribio Esquivel e sc rib ió un documento de autodefensa y p id ió a
70 C a r t a d e T o r i b i o E s q u i v e l O b r e g ó n p a r a J o r g e V e r a E s t a ñ o l , 13 d e a g o s t o d e C a r t a d e T o r i b i o E s q u i v e l O b r e g ó n p a r a J o r g e V e r a E s t a ñ o l , 19 d e a g o s t o d e 1 9 1 4 , e n
1 9 1 4 , e n ATEO, s e c c i ó n d o c u m e n t a l , c a j a 2 9 , e x p . 1 4 , f o j a 1 . ATEO, s e c c i ó n d o c u m e n t a l , c a j a 2 9 , e x p . 1 4 , f o j a s 2 y 3 .
71 P r i d a a f i r m a b a q u e e l C o n s e j o d e M i n i s t r o s d e c i d i ó l a m u e r t e d e M a d e ro y P in o 12 C a r t a d e T o r i b i o E s q u i v e l O b r e g ó n p a r a R a f a e l L e b r i j a , 13 d e a g o s t o d e 1 9 1 4 , e n
S uárez a n t e l a ú n i c a o p o s i c i ó n d e R o b le s G i l , q u i e n c o n s i d e r a b a q u e n o e r a u n m om ento ATEO, s e c c i ó n d o c u m e n t a l , c a j a 2 7 , e x p . 2 2 , f o j a 2 7 ; C a r t a d e T o r i b i o E s q u i v e l
o p o r t u n o . S e g ú n e s t a v e r s i ó n , l a r e s o l u c i ó n s e to m ó e n a u s e n c i a d e H u e r t a , q u i e n O b reg ó n p a r a J o r g e V e ra E s t a ñ o l , 19 d e a g o s t o de 1914, e n ATEO,
a l c o n o c e r l a n o t u v o m ás q u e a c e p t a r l a p o r l e a l t a d a s u g a b i n e t e , a u n q u e n o e s t a b a s e c c i ó n d o c u m e n ta l, c a j a 2 9 , e x p . 1 4 , f o j a s 2 y 3 ; C a r t a d e T o r i b i o E s q u iv e l O b reg ó n
d e a c u e r d o . P r id a d e c ia que T o r ib io E s q u iv e l no e x p r e s ó n in g u n a o p in ió n , p e r o cu an d o p a r a M a n u e l M o n d ra g ó n , 24 d e s e p t i e m b r e d e 1 9 1 4 , e n ATEO, s e c c i ó n d o c u m e n t a l , c a j a
su p o de lo s a s e s in a t o s p r e s e n tó s u r e n u n c ia a H u e rta q u ie n l a re c h a z ó d i c ié n d o le 29, ex p . 3, f o ja s 5 -1 0 .
q u e n o p o d í a e v a d i r s u r e s p o n s a b i l i d a d e n l o s h e c h o s . En e l l i b r o d e B e l l , s e 73 C a r t a d e T o r i b i o E s q u i v e l O b r e g ó n p a r a M a n u e l M a lo J u v e r a , 14 d e s e p t i e m b r e d e
p l a n t e a b a q u e l a s m u e r t e s d e M a d e ro , P i n o S u á r e z , B a s ó y G u s t a v o M a d e ro f u e r o n 1 9 1 4 , e n ATEO, s e c c i ó n d o c u m e n t a l , c a j a 2 8 , e x p . 1 2 , f o j a s 3 1 - 3 4 ; C a r t a d e T o r i b i o
e x ig id a s p o r F é l i x D ía z , p e s e a l a r e s i s t e n c i a d e H u e rta y q u e p o s te r io r m e n te e l E s q u i v e l O b r e g ó n p a r a J o r g e V e r a E s t a ñ o l , 13 d e a g o s t o d e 1 9 1 4 , e n ATEO, s e c c i ó n
g a b i n e te c u m p lió co n l o a l l í a c o r d a d o . C a r t a d e T o r i b i o E s q u iv e l O b reg ó n p a r a M anuel d o c u m e n ta l, t a j a 2 9 , e x p . 1 4 , f o j a 1 .
M o n d ra g ó n , 24 d e s e p t i e m b r e d e 1 9 1 4 , e n ATEO, s e c c i ó n d o c u m e n t a l , c a j a 2 9 , e x p . 3 ,
29 30
Malo Juvera, quien pasó por Nueva York en v ia je de regreso de su e x ilio Aureliano U rru tia, ex m in istro de Gobernación de Huerta, aseguró que por
europeo a México, que a su llegada a e s te p a is se lo en treg ara a Macorra orden de é ste había pagado con su propio dinero d ie c is ie te m il pesos a
a f in de que fuera publicado en la prensa, o b jetiv o que no se logró pues Joaquín Maass, para a rre g la r e l asunto del a se sin a to . Si lograban probar
Malo Juvera fue apresado. Además, entabló comunicación con algunos de lo a n te rio r quedaría demostrado que Huerta no
sus antiguos compañeros d el gabinete acusado, a quienes le s propuse te n ía a su disp o sició n la T esorería y por lo ta n to no había un pian del
organizar una defensa c o n ju n ta ."74 A si, durante lo s meses de agosto de gabinete para a se sin a r a Madero.76 Manuel Mondragón estuvo p resente
1914 a enero de 1915, T oribio Esquivel Obregón mantuvo correspondencia cuando U rru tia hizo la confesión e in te n tó conseguir la d eclaración de
a l respecto con Jorge Vera E stañol, Rodolfo Reyes, Manuel Mondragón y los funcionarios del Consulado. Sin embargo, ésto s se m ostraron
Francisco León de la Barra, quienes se encontraban exilados en Europa. r e ti c e n t e s .77
El objeto de su comunicación e ra la d e fin ic ió n de una e s tr a te g ia para T oribio Esquivel Obregón y sus ex compañeros de gabinete coincidían en
hacer fre n te a la s acusaciones y para intercam biar información sobre lo que debían probar su inocencia mediante los mecanismos leg a le s
que recordaban de los hechos ocurridos antes de la muerte de Madero y p e rtin e n te s . No obstante, la guerra europea que d if ic u ltó la s
Pino Suárez. También expresaban sus opiniones sobre la s d ife re n te s comunicaciones y la in tra n sig e n c ia de los revolucionarios los h icie ro n
publicaciones que lo s culpaban y hacían sugerencias para desm entirlas. d e s i s t i r de su intención de r e c u r r ir a lo s trib u n a le s para obtener un
Tal es e l caso de la opinión de T oribio Esquivel sobre la necesidad de ju ic io ju s to . Todos daban por hecho que m ientras en México no se calmaran
obtener una d eclaración firmada por Robles G il, donde confirm ara o los ánimos, su defensa no s e ría atendida.
re fu ta ra la s publicaciones de Ramón Prida y de El R a d ic al.75 Esquivel Ante la lleg ad a de los c a rra n c is ta s a la ciudad de México Esquivel se
también so ste n ía que e ra muy im portante obtener la declaració n de algunos preocupó por la situ a c ió n de su fa m ilia que se encontraba en dicha
funcionarios del Consulado de México en P a rís, donde e l Dr. ciudad, pues temía que se desencadenara e l desorden y la
74 C a r t a d e T o r i b i o E s q u i v e l O b r e g ó n p a r a J o r g e V e r a E s t a ñ o l , 19 d e a g o s t o d e 16 C a r t a d e T o r i b i o E s q u i v e l O b r e g ó n p a r a J o r g e V e r a E s t a ñ o l , 13 d e a g o s t o d e
1 9 1 4 , e n ATEO, s e c c i ó n d o c u m e n t a l , c a j a 2 9 , e x p . 1 4 , f o j a s 2 y 3 . 1 9 1 4 , e n ATEO, s e c c i ó n d o c u m e n t a l , c a j a 2 9 , e x p . 1 4 , f o j a 1 ; C a r t a d e T o r i b i o
75 C a r t a d e T o r i b i o E s q u i v e l O b r e g ó n p a r a R a f a e l L e b r i j a , 13 d e a g o s t o d e 1 9 1 4 , E s q u i v e l O b r e g ó n p a r a M a n u e l M a lo y J u v e r a , 22 d e a g o s t o d e 1 9 1 4 , e n ATEO, s e c c i ó n
e n ATEO, s e c c i ó n d o c u m e n t a l , c a j a 2 7 , e x p . 2 2 , f o j a 2 7 ; C a r t a d e T o r i b i o E s q u i v e l d o c u m e n t a l , c a j a 2 0 , e x p . 1 2 , f o j a s 24 y 2 5 ; C a r t a d e T o r i b i o E s q u i v e l O b r e g ó n p a r a
O b r e g ó n p a r a J o r g e V e r a E s t a ñ o l , 19 d e a g o s t o d e 1 9 1 4 , e n ATEO, s e c c i ó n d o c u m e n t a l , M a n u e l M o n d ra g ó n , 24 d e s e p t i e m b r e d e 1 9 1 4 , e n ATEO, s e c c i ó n d o c u m e n t a l , c a j a 2 9 ,
c a ja 29, exp. 14, fo ja s 2 y 3. ex p . 3 , f o j a s 5 -1 0 .
77 C a r t a d e M a n u e l M o n d ra g ó n p a r a T o r i b i o E s q u i v e l O b r e g ó n , 26 d e a g o s t o d e 1 9 1 4 ,
e n ATEO, s e c c i ó n d o c u m e n t a l , c a j a 2 9 , e x p . 3 , f o j a s 1 - 4 ; C a r t a d e M a n u e l M o n d ra g ó n
p a r a T o r i b i o E s q u i v e l O b r e g ó n , 19 d e o c t u b r e d e 1 9 1 4 , e n ATEO, s e c c i ó n d o c u m e n t a l ,
c a j a 2 9 , e x p . 3 , f o j a s 17 y 1 8 .

31 32
v io le n c ia . Hacia e l mes de septiem bre pensaba en la p o sib ilid a d de que LA ASAMBLEA PACIFICADORA

su esposa e h ijo s se tra s la d a ra n a Veracruz, lugar que por e l momento A p rin c ip io s de noviembre de 1914, T oribio Esquivel Obregón

se rv ía de refu g io a muchos mexicanos. Sin embargo, te n ía conocimiento de e sc rib e a l ex general y miembro del prim er gabinete h u e r tis ta ,

que la vida a l l í era muy cara y además era probable que de un momento a Manuel Mondragón que, ante los a tro p e llo s de los rev o lu cio n ario s,

otro sa lie ra n la s tro p as estadunidenses que ocupaban e l puerto y temía hay personas que piensan en una contrarrev o lu ció n , pero que aún no

que e sto últim o d e sa ta ra algunas a g re sio n e s.78 También consideraba la ten ía n un plan determinado. Por un lado, estaba F élix Díaz y sus

opción de que su fa m ilia v ia ja ra a Brooklyn, pero según sus cálculos seguidores y por e l otro un grupo impulsado por Luis Medina

te n d ría que hacer gastos de a l menos dos m il pesos mensuales, lo que le Barrón, Teodoro Dehesa y C arlos Cosío.Según Esquivel é s te últim o

re su lta b a muy oneroso.79 grupo te n ía mayores p o sib ilid a d e s de c o n s titu irs e en un movimiento

Sin embargo, ante la prolongación de la lucha armada en México debida a l ex ito so , porque a d ife re n c ia del felicism o , la direcció n no re c a ía

enfrentam iento e n tre v i l l i s t a s y c a rra n c ista s y la inquina de los en una so la persona. Esquivel pensaba que

re volucionarios contra é l, Esquivel se resignó a prolongar su e x ilio y . . . l o que conviene a l general Díaz y a la nación es que
no se dé a l movimiento e l c a rá c te r de F e lic is ta , que se
tr a s la d a r a su fa m ilia a Nueva York. A sí, su esposa, Laura T orres, y sus organice una ju n ta compuesta de tr e s personas que
ofrezcan ante todo no acep tar ningún cargo de elección
h ijo s lle g a ro n a dicha ciudad en octubre de 1914.80 Con e s ta d ecisión popular, que por sus antecedentes sean una g a ra n tía de
honradez no sólo en e l sentido de un manejo de fondos por
darían f in a la an g u stia que le s producía e l v iv ir separados desde hacía encima de toda sospecha, sino en e l que cumplirán con ese
ofrecim iento y en todo verán por e l bien de la nación;
c asi un año. que e s ta ju n ta asuma los poderes eje cu tiv o y le g is la tiv o ,
m ientras pueda re u n irse un congreso, pero sin derogarse
la c o n stitu c ió n , sino claram ente suspendiéndose la s
g a ran tía s e stric tam en te n e cesarias para la guerra y e l
afianzam iento del orden, con un plan de gobierno de
conformidad con los que la experiencia de e sto s tiempos
nos ha enseñado; que in sta la d a la ju n ta y reconocida por
e l General Díaz, ponga los elementos que é s te cuenta a
d isp o sició n de la misma y quede en a p titu d de lan z ar su
candidatura a la p re sid en c ia de la re p ú b lica , candidatura
que prosperara después de acto de desprendim iento
73 C a r t a d e T o r i b i o E s q u i v e l O b r e g ó n p a r a M a n u e l M a lo y J u v e r a , 14 d e
p a tr ió tic o , s i cuenta desde antes con que la ju n ta de
s e p t i e m b r e d e 1 9 1 4 , e n ATEO, s e c c i ó n d o c u m e n t a l , c a j a 2 8 , e x p . 1 2 , f o j a
gobierno no i r a a hacer p o lític a por su propia cuenta ni
31.
a favorecer lo s in te re s e s de nadie con fraude de la ley .
79 C a r t a d e T o r i b i o E s q u i v e l O b r e g ó n p a r a L a u r a T o r r e s , 30 d e s e p t i e m b r e d e y más adelante agrega
1 9 1 4 , e n ESQUIVEL, 1 9 9 6 , p . 2 1 4 .
80 C a r t a d e T o r i b i o E s q u i v e l O b r e g ó n p a r a E n r i q u e E s q u i v e l O b r e g ó n , 27 d e Yo estoy seguro de que, adoptando e s ta lin e a de conducta,
n o v i e m b r e d e 1 9 1 4 , e n ATEO, s e c c i ó n d o c u m e n t a l , c a j a 2 8 , e x p . 6 , f o j a 4 ; C a r t a se lo g ra ría u n ific a r los dos grupos mencionados, en
d e T o r i b i o E s q u i v e l O b r e g ó n p a r a R o d o l f o R e y e s , 6 d e e n e r o d e 1 9 1 5 , e n ATEO,
s e c c i ó n d o c u m e n ta l, c a j a 2 9 , e x p . 1 5 , f o j a 1 5 .
33 34
e s t a r í a muy a te n to de lo que a l l í se a c o rd a ra , por lo que e ra v i t a l que
ta n to que, s i e l movimiento tie n e c a rá c te r f e l i c i s t a , la
d iv is ió n es in d e fe c tib le y con e ll a e l fra c a s o .81
a cu d ie ra n mexicanos de p re s tig io p o lític o , económico, m ilita r e
T oribio Esquivel publicó algunos a rtíc u lo s en E l P r e s e n te ,
i n t e l e c t u a l . 84
p eriódico que Medina Barrón, general del antiguo E jé rc ito Federal,
Óscar B ra n iff, siem pre cercano a E sq u iv el en a su n to s p o l í t i c o s y
habla fundado en San Antonio, Texas. Después, e ste p id ió la ayuda
de Esquivel para solucionar la c r i s i s fin a n c ie ra por la que económ icos, tam bién e sta b a muy a te n to a l t r a b a jo de lo s d i s t i n t o s grupos
atravesaba dicho p e rió d ico . Esquivel consideró que era una gran de e x ilia d o s y l a c e le b ra c ió n de l a convención en San
oportunidad para hacer de El Presente e l medio a tra v é s d el cual
A ntonio le p a re c ió una buena o p o rtu n id a d p a ra d a r im pulso a un movimiento
los e x iliad o s pudieran d ifu n d ir sus opiniones. Creía que debía
b ie n in te g ra d o . Según B ra n iff, quien m antenía r e la c ió n con a lt o s
e s ta r a b ie rto a la s ideas de todos lo s grupos p o lític o s para
fu n c io n a rio s e s ta d u n id e n s e s , al in te rio r de dicho gobierno h a b ía
fomentar e l debate respetuoso e n tre e llo s . Además, mediante una
o p in io n e s fa v o ra b le s a un movimiento encabezado p o r l a "g en te d ecen te"
sección e s c r i t a en in g lé s, El Presente s e r ía e l instrum ento para
y algunos r e v o lu c io n a rio s . Sin embargo, no lo s a p o y arían s i e l o b je tiv o
que en Estados Unidos hubiera una v isió n más amplia de los
fu e ra t r a t a r de r e s t a u r a r lo s métodos y a l a s p e rso n as de p re p o n d era n cia
problemas de México y a s í e v ita r la p ro life ra c ió n de ideas
en e l gobierno de P o r f i r i o D íaz. Por e s to , c r e í a queen SanAntonio se
erróneas, sobre todo en la s e sfe ra s del gobierno. T oribio Esquivel
se dio a la ta re a de conseguir recursos para im pulsar a l periódico d e b ía a rtic u la r un

acudiendo a personas como Manuel Mondragón y Leopoldo Ruíz y movimiento p r o g r e s is ta y re fo rm is ta que a d o p ta ra p rin c ip io s

F lo res, arzobispo de Michoacán. fundam entales como l a r e s t i t u c i ó n d e l orden c o n s titu c io n a l, l a d iv is ió n

Los e x ilia d o s in te resad o s en organizar un movimiento p o lític o desde de l a t i e r r a y l a re o rg a n iz a c ió n de l a s fin a n z a s n a c io n a le s . De ninguna


Estados Unidos convocaron a una convención a p rin c ip io s de febrero en manera s e r í a b e n é fic o que s ig u ie ra n una
la ciudad de San A ntonio.83 Luis Medina Barrón in v itó a T oribio E squivel; o r ie n ta c ió n " r e a c c io n a r ia , ni c le ric a l, ni c ie n tífic a " . B ra n iff
en opinión de aquél e l gobierno estadunidense c o n sid era b a que l a p re s e n c ia de T o rib io E sq u iv el en San A ntonio e ra
81 C a r t a d e T o r i b i o E s q u i v e l O b r e g ó n p a r a M a n u e l M o n d ra g ó n , 9 d e n o v ie m b re de
fundam ental p a ra e v ita r que se a d o p ta ran ese t ip o de
1914, en ATEO, s e c c i ó n d o c u m e n t a l , c a j a 2 9 , e x p . 3 , f o j a s 19 y 2 0 .
82 C a r t a d e T o r i b i o E s q u i v e l O b r e g ó n p a r a M a n u e l M o n d ra g ó n , 20 d e e n e r o d e
p o sic io n e s en l a A sam blea.85
1915, en ATEO, s e c c i ó n d o c u m e n t a l , c a j a 2 9 , e x p . 3 , f o j a 2 4 ; C a r t a d e T o r i b i o
E s q u iv e l O b r e g ó n p a r a L e o p o l d o R u iz y F l o r e s , 3 d e f e b r e r o d e 1 9 1 5 , e n ATEO, S e c c i ó n 84 I n c l u s o , B arró n le a se g u ró a E s q u i v e l q u e E s t a d o s U n id o s r e c o n o c e r í a al g o b ie rn o
documental, caja 29, exp. 16, fojas 1-3. q u e e m a n ara de l a c o n v e n c ió n . C a rta de L u is M e d in a B a r r ó n p a r a T o rib io E squ
83 C a r t a d e L u i s M e d in a B a r r ó n p a r a T o r i b i o E s q u i v e l O b r e g ó n , 2 1 d e e n e r o d e O b re g ó n , 27 de en e ro de 1915, e n ATEO , s e c c i ó n d o c u m e n ta l,c a j a 2 9 ,e x p . 7, fo ja
1 9 1 5 , e n ATEO, s e c c i ó n d o c u m e n t a l , c a j a 2 9 , e x p . 7 , f o j a 1 8 . 22 .
35 85 C a r t a d e Ó s c a r B r a n i f f p a r a T o r ib io E s q u iv e l O b reg ó n , 5 d e f e b r e r o de 1 9 1 5 , en
ATEO , s e c c i ó n d o c u m e n t a l , c a j a 29, ex p . 9, f o ja 47; C a rta de Ó sc ar B ra n iff
36
El dia 6 de febrero de 1915 inició la reunión que dio origen a la Asamblea a t r a e r a l grupo c a tó lic o que encabezaba F ra n c is C. K e lle y , p re s id e n te de
Mexicana Pacificadora, que constituye la primera acción colectiva de los The C a th o lic E x ten sió n S o c ie ty .89
exiliados en Estados Unidos.86 El objetivo declarado de la Asamblea era La unión de lo s d iv e rs o s grupos a l a Asamblea fue un o b je tiv o que no se
restablecer el orden y la paz en México, asi como evitar la intervención pudo c o n c re ta r, p a rtic u la rm e n te de lo s encabezados por Eduardo I tu r b id e
militar de Estados Unidos mediante la búsqueda de acuerdos con las y F é lix D íaz. La r e la c ió n con I tu r b id e fue e sp e cialm en te com pleja, pues
facciones revolucionarias.87 De acuerdo con los estatutos de esta a p e s a r de haber sid o e le c to p a ra i n te g r a r l a d i r e c t i v a de l a Asamblea
organización se eligió una Comité Directivo que quedó integrado por P a c ific a d o ra s ig u ió tra b a ja n d o en su p ro p io p ro y e c to . T o rib io E sq u iv el
Federico Gamboa, Eduardo Iturbide y Toribio Esquivel Obregón. En opinión opinó ento n ces que e l a cercam iento de I tu r b id e h a c ia l a Asamblea h ab la
de Esquivel Obregón su labor alli fue muy difícil, pues no había unión sid o con e l único fin de o b te n e r in fo rm ació n . Según E m ilio Rabasa,
entre los asistentes y cada uno veia por sus propios intereses. Desde un p a r ti d a r i o i t u r b i d i s t a , l a Asamblea e s ta b a d e s c a lif ic a d a p a ra r e a l i z a r
principio sintió que sería complicado entenderse con Gamboa y por otro c u a lq u ie r a cc ió n p o l í t i c a porque su programa h a b la sid o e la b o rad o fu e ra
lado pensaba que Iturbide tenía aspiraciones presidenciales y que de México. En su o p in ió n , é s ta d eb ía l im i ta r s e a re c a b a r d in e ro y
trabajaba en su propio proyecto. Toribio Esquivel dirigió su labor e n tre g á rs e lo a algún re v o lu c io n a rio , en a lu s ió n a I tu r b id e , según pensó
política a lograr la unificación de los exiliados dentro de la Asamblea. T o rib io E s q u iv e l.90
Además, consideraba que el factor determinante para fortalecer la Por o tro lad o , E sq u iv el supo que F é lix Díaz h a b la logrado re c a b a r
posición de la Asamblea frente a los distintos grupos de exiliados era re c u rso s s u f i c ie n t e s p a ra i n i c i a r su m ovim iento, por lo que comprendió
conseguir recursos económicos. Por esto estimó que era fundamental que e ra i n ú t i l p ro p o n e rle s su in te g ra c ió n a l a A sam blea.91 No o b s ta n te ,

Ism ael Zúñiga l e comunicó a T o rib io E sq u iv e l, que E nrique Fernández

o f r e c ió l a a lia n z a de l a Asamblea

p ara A r tu r e B r a n i f f , 6 d e f e b r e r o d e 1 9 1 5 , e n A TEO , s e c c i ó n d o c u m e n t a l , c a j a 2 9 ,
exp. 9, f o ja s 5 0 -5 3 ; C a r ta d e Ó sc a r B r a n i f f p a r a T o r ib io E s q u iv e l O b reg ó n , 8 de
f e b r e r o d e 1 9 1 5 , e n ATEO , s e c c i ó n d o c u m e n ta l, c a ja 29, exp. 9, fo ja 55. 89 C a r ta d e T o r ib io E s q u iv e l O b reg ó n p a r a Ó s c a r B r a n i f f , 20 d e f e b r e r o d e 1 9 1 5 , en
85 GARCIAD IEGO, s / f , p . 1 1 . ATEO , s e c c i ó n d o c u m e n t a l , c a j a 2 9 , e x p . 9 , f o j a s 68 y 6 9 . K e l l e y f u e u n i m p o r t a n t e
87 S i b i e n l a A s a m b l e a P a c i f i c a d o r a d e c l a r a b a p ú b lic a m e n te que s u o b j e t i v o e r a el a lia d o de la Ig le s ia m e x ic a n a p ara d efen d er sus in te re s e s fre n te a lo s
l o g r o d e l a p a z e n M é x ic o , p u l u l a b a n e n s u s e n o c o r r i e n t e s m ás p r o c l i v e s a la r e v o lu c io n a r io s . Es asi que d e n u n c ió lo s abusos c o m e tid o s por lo s
r e b e lió n arm a d a. c o n s t i t u c i o n a l i s t a s y a t a c ó l a p o l í t i c a d e l p r e s i d e n t e d e E s ta d o s U n id o s e n r e l a c i ó n
88 C a r t a d e T o r i b i o E s q u i v e l O b r e g ó n p a r a Ó s c a r B r a n i f f , 17 d e f e b r e r o d e 1 9 1 5 , e n a M é x i c o . O ’ DOGHERTY, s / f , p . 9 - 1 1 .
A TEO , s e c c i ó n d o c u m e n t a l , c a j a 2 9 , e x p . 9 , f o j a 6 6 ; C a r t a d e T o r i b i o E s q u i v e l O r e g ó n 90 C a r ta d e T o r i b i o E s q u iv e l O b re g ó n p a r a I s m a e l Z ú ñ ig a , 8 d e m a rz o d e 1 9 1 5 , en
p a r a Ó s c a r B r a n i f f , 2 0 d e f e b r e r o d e 1 9 1 5 , e n A TEO , s e c c i ó n d o c u m e n t a l , c a j a 2 9 , ATEO , s e c c i ó n d o c u m e n t a l , t a j a 2 9 , e x p . 1 6 , f o j a s 4 y 5 . 91 I b í d .
e x p . 9 , f o j a s 68 y 6 9 .

38
37
y e l f e lic is m o , p ero b a jo un esquema en e l que Diaz s e r i a e l j e f e supremo. e l gobierno de E stados Unidos comenzó a o b s t r u i r su la b o r, a l grado de

Fernández propuso que, s i l a Asamblea acep tab a l a j e f a t u r a de Diaz, é s te e x p u ls a r a su p rin c ip a l d i r ig e n t e , F ederico Gamboa. A si pues, la

a d o p ta ria su programa p o l i t i c o . F inalm ente, no hubo a r re g lo e n tr e e l p a r tic ip a c ió n de la m ayoría decayó y l a Asamblea term inó por d i s o l v e r s e . 96

fe lic is m o y l a Asamblea. T o rib io E sq u iv el Obregón re n u n ció a l Comité D ire c tiv o de l a Asamblea

Hacia e l mes de marzo T o rib io E sq u iv el pensaba que su la b o r p o l í t i c a a P a c ific a d o ra a f in e s de mayo de 1915. El problem a que d io p ie p a ra que

f i n de d a r im pulso de un p ro y e cto c o n ju n to de lo s e x ilia d o s h a b la sid o tom ara e s t a d e c is ió n fue una d if e r e n c ia con F ederico Gamboa, quien t e n i a

i n ú t i l . 92 Para e n to n c es ya comenzaba a h a b la rs e de l a p o s ib ilid a d de l a f a c u lta d p a ra d e sig n a r a l s u s t i t u t o de I tu r b id e d e n tro d e l Comité.

d is o lv e r l a A sam blea,93 aunque h a b la p e rso n as como L uis Medina B arrón que Cada uno de e l l o s te n i a a un can d id ato d i s t i n t o , E sq u iv el apoyaba a

aún c o n fia b an en que p u d iera n c o n se g u ir algún re s p a ld o . Barrón le d i jo M artínez C a r r il l o y Gamboa a Zúñiga. Al no l l e g a r a ningún acuerdo,

a T o rib io E sq u iv el que te n ía n s im p a tiz a n te s en M onterrey y e sp ecialm en te E sq u iv el Obregón re n u n ció . En su o p in ió n , b a jo e l c o n tr o l de Gamboa l a

en Yucatán, lo c u al l e s p e r m i t ir l a c o n se g u ir l a ayuda de grandes empresas Asamblea a d q u ir i r l a un p e rfil claram en te c le ric a l, lo cu al

h en eq u e n era s. 94 o b s t a c u l i z a r la aún más l a unión de lo s e x i l i a d o s . 97

Las d if e r e n c ia s a l i n t e r i o r de l a Asamblea Mexicana P a c ific a d o ra se


NUEVOS TRABAJOS EN NUEVA YORK
agrav aro n cuando a n te l a lle g a d a de H uerta de Europa y l a o rg a n iz a c ió n
H acia a b ril de 1915 la s itu a c ió n económica de E sq u iv el se h a b la
de un i n te n to de r e b e lió n armada p o r p a r te de é s t e , muchos miembros de
com plicado; no h a b la podido e n c o n tra r t r a b a jo y l a casa P ro b s t, donde
l a Asamblea se pa sa ro n a sus f i l a s . 95 Además,
t e n i a a h o rro s en una cu en ta c o r r ie n te h a b la quebrado; a s i que dependía

de lo s re c u rso s que l e lle g a ra n de México. Sin embargo, a l l i tam bién


91 C a rc a de L e o p o ld o R u iz p ara T o rib io E s q u iv e l O b reg ó n , 1 de m a rz o de 1915, en
h ablan aumentado la s d if ic u lta d e s . Sus c asas y rancho h ab lan sid o
A TEO , s e c c ió n d o c u m e n ta l, c a ja 29, exp. 18, fo ja s 4 y 5; C a rta de T o rib io E s q u iv e l
c o n fis c a d o s .98 La fá b ric a de San R a fa e l, de
O b reg ó n p a r a J o rg e V e ra E s ta ñ o l, 25 d e m a rz o d e 1 9 1 5 , e n A TEO , s e c c ió n d o c u m e n ta l,

c a ja 29, exp. 14, fo ja s 27 y 2 8 .

96 GARCIADIEGO, s /f, p. 11.


97 C a r t a d e T o rib io E s q u iv e l O b r e g ó n p a r a Ó s c a r B r a n i f f , 2 3 d e m ayo d e 1 9 1 5 , e n
ATEO , s e c c i ó n d o c u m e n ta l, c a j a 2 9 , e x p . 9 , f o j a 5 4 ; T o r ib io E s q u iv e l O b reg ó n p a r a
J o s é E l g u e r o , 3 d e j u n i o d e 1 9 1 5 , e n ATEO , s e c c i ó n d o c u m e n ta l, c a ja 29, exp. 7,
93 I s m a e l Z ú ñ i g a l e d i j o a T o r i b i o E s q u i v e l q u e F e d e r i c o G a m b o a t e n i a
fo ja 37.
i n t e n c i o n e s d e d i s o l v e r l a A s a m b le a . C a r t a d e Is m a e l Z ú ñ ig a p a r a T o r i b i o E s q u iv e l
90 L o s b i e n e s a f e c t a d o s f u e r o n u n a c a s a u b i c a d a e n l a C o l o n i a R om a e n l a c iu d a d
O b reg ó n , 11 d e m arz o de 1915, e n A TEO , s e c c ió n d o c u m e n ta l, c a ja 29, exp. 7, fo ja
39 40
donde l e enviaban una c a n tid a d , e s ta b a en poder de Z apata y entonces h izo más e s t a b l e . Su a c tiv id a d académ ica se am plió de manera im p o rta n te

só lo r e c i b ía e l pago por l a a d m in is tra c ió n de lo s b ie n e s de B e rm e jillo . a l s e r aceptado como p ro fe s o r en l a s u n iv e rs id a d e s de Columbia y de Nueva

En su c o rre sp o n d e n c ia a Manuel Madrazo Arcocha, quien se ocupaba de l a York. A sí, en septiem bre de 1915, T o rib io E sq u iv el comenzó a im p a r tir l a

a d m in istra c ió n de sus b ie n e s en México, E sq u iv el d ic e que vive con su c á te d ra t i t u l a d a "Derecho Com ercial

fa m ilia en l a mayor economía g astando 150 d ó la re s m ensuales. Dada l a y P r á c tic a s de Negocios en H ispanoam érica"102. Según l e d i jo a Rodolfo

s itu a c ió n d e c id ió b u sc a r nuevas a c tiv id a d e s en Nueva York en la s que Reyes, su d e sig n a c ió n como c a te d r á tic o l e in d ic a b a lo poco que se tomaba

p u d ie ra p e r c i b i r algún in g re s o . Con e s te f i n , o f r e c ió sus s e r v ic io s p a ra en cuenta en E stados Unidos l a s a cu sac io n e s de que e ra n o b je to en México

d a r le c c io n e s de lengua esp a ñ o la y p a ra r e a l i z a r tra d u c c io n e s d e l in g lé s como miembros d e l prim er g a b in e te de V ic to ria n o H u e rta .103


E sq u iv el d e c id ió comenzar l a prim era p a r te d e l cu rso abordando la
a l e s p a ñ o l." h i s t o r i a de L atin o am érica, p a ra a s i comprender l a s c a r a c t e r í s t i c a s de
sus i n s t it u c io n e s y le g i s l a c i ó n en m a te ria c o m e rc ia l. C onsideraba que
E sq u iv el Obregón tuvo é x ito en su búsqueda, pues poco después se e s to e ra p rim o rd ia l, pues e l é x ito de lo s n e g o c ia n te s d e p en d e ría d e l
conocim iento de l a s le y e s en r e la c ió n con e l c a r á c t e r de lo s
e n co n trab a abrumado de t r a b a jo por l a im p a rtic ió n de le c c io n e s de español hispanoam ericanos. P o ste rio rm e n te d e s a rr o lló temas más p r á c tic o s como la
c o n s titu c ió n de l a s c o rp o ra c io n e s, in stru m e n to s c o m e rc ia le s, p a te n te s ,
en e l "Young Men's C h r is tia n A s s o c ia tio n " 100. Además, se l e p re se n tó la c o n tr a to s , le y e s b a n c a ria s , im puestos y a d m in istra c ió n de j u s t i c i a . 104 En
d iciem bre de 1915, e l Comité C o n su ltiv o de l a U n iv e rsid ad de Nueva York
o p o rtu n id a d de d a r una c o n fe re n c ia en l a U n iv e rsid ad de Columbia sobre aprobó l a p ro lo n g ac ió n d e l cu rso im p a rtid o por E squivel
a su n to s económicos de México101.

Aunque siem pre v iv ía con l a e x p e c ta tiv a de que se p ro d u je ra n nuevos

a co n tec im ie n to s que l e p e rm itie ra n r e g re s a r , su e s ta n c ia se

d e M é x ic o , v a r i a s c a s a s y u n a c o c h e r a u b i c a d a s e n l a c i u d a d d e L eó n y e l r a n c h o d e
A lb a r r a c o n e s , co n u n a f r a c c i ó n a n e x a lla m a d a S an J o s é , s i tu a d o e n l a j u r i s d i c c i ó n
de L eón.
99 C a r t a de T o rib io E s q u iv e l O b reg ó n p ara M anuel M ad razo , 9 de m a rz o de 1915, en
A TEO , s e c c i ó n d o c u m e n t a l , c a j a 2 9 , e x p . 6 , f o j a s 3 1 y 3 2 ; C a r t a d e F r e d F e i g l p a r a
B e r l i t z , a b r i l d e 1 9 1 5 , e n A TEO , s e c c i ó n d o c u m e n t a l , c a j a 3 0 , e x p . 9 , f o j a 4 ; C a r t a
d e T o r i b i o E s q u i v e l O b r e g ó n p a r a P r a h l , 11 d e a b r i l d e 1 9 1 5 , e n A TEO , s e c c i ó n
102 C a r t a d e G e o r g e C . S p r a g u e p a r a T o r i b i o E s q u i v e l O b r e g ó n , 9 d e a g o s t o de 1915,
d o c u m e n t a l , c a j a 3 0 , e x p . 9 , f o j a 2 3 ; C a r t a d e T o r i b i o E s q u i v e l O b r e g ó n p a r a R .G
e n ATEO , s e c c i ó n d o c u m e n t a l , c a j a 3 0 , e x p . 1 4 , f o j a 4 ; C a r t a d e T o r i b i o E s q u iv e l
D un a n d C o . , 1 6 d e a b r i l d e 1 9 1 5 , e n ATEO , s e c c i ó n d o c u m e n t a l , c a j a 3 0 , e x p . 9 ,
O b reg ó n p a r a M .E . L o o m is , 16 d e a g o s to de 1915, e n A TEO , s e c c ió n d o c u m e n ta l, c a ja
fo ja 29. 30, exp. 14, fo ja 6.
100 C a r t a d e T o r i b i o E s q u i v e l O b r e g ó n p a r a J o s é E l g u e r o , 2 5 d e j u n i o d e 1 9 1 5 , e n
103 C a r t a d e T o r i b i o E s q u i v e l O b r e g ó n p a r a R o d o l f o R e y e s , 1 1 d e n o v i e m b r e d e 1 9 1 5 ,
A TEO , s e c c i ó n d o c u m e n t a l , c a j a 2 9 , e x p . 7 , f o j a s 4 0 y 4 1 ; C a r t a d e T o r i b i o E s q u i v e l
e n A TEO , s e c c i ó n d o c u m e n t a l , c a j a 2 9 , e x p . 1 5 , f o j a 2 1 .
O b r e g ó n p a r a B u r t B . F a r n s w o r t h , 5 d e j u l i o d e 1 9 1 5 , e n A TEO , s e c c i ó n d o c u m e n t a l ,
C a r ta d e T o r ib io E s q u iv e l O b reg ó n p a r a P h i l l i p B . K en ed y , 29 d e o c tu b r e d e 1 9 1 5 ,
c a j a 30, exp. 6, f o j a 7 .
e n ATEO , s e c c i ó n d o c u m e n t a l , c a j a 3 0 , e x p . 1 4 , f o j a 2 0 ; P r o g r a m a d e l a c á t e d r a d e
101 C a r t a d e T o r i b i o E s q u i v e l O b r e g ó n p a r a F ra n c is c o Q u ija n o , 15 d e a g o s t o de 1915,
D e re c h o C o m e rc ia l L a tin o a m e r ic a n o i m p a r t i d a c o r T o r i b i o E s q u i v e l O b re g c n , 1 9 1 5 -
e n A TEO , s e c c ió n d o c u m e n ta l, c a ja 29, exp. 12, fo ja 4.
1 9 1 6 , e n ATEO , s e c c i ó n l i b r o s , c a j a 3 9 , e x p . 7 0 8 .

41 42
d u ra n te un segundo p e r io d o .105*En 1916, a r a iz de lo s e s tu d io s que r e a liz ó
Asimismo, T o rib io E sq u iv el o f r e c ió sus s e r v ic io s a d iv e rs a s compañías
con m otivo d e l c u rso , T o rib io E sq u iv el e s c r i b i ó un l i b r o sobre la s
n o rte a m e ric a n a s, por ejem plo M acintosh, como abogado c o n s u lto r
re la c io n e s m e rc a n tile s en lo s p a ís e s de h isp a n o am éric a. Además, su id ea
e s p e c ia lis ta en le y e s h isp an o am erican as. Para 1920 h a b ía obten id o
g e n e ra l de p ro fu n d iz a r e s t a s re la c io n e s l a lle v ó a l a p r á c t ic a en e s te
im p o rta n te é x ito en e s te campo. En dicho año l a A s to ria Mahogany Company
año a l e s ta b le c e r un despacho de abogado en Nueva York.
c o n c re ta a E sq u iv el corno a s e s o r p a ra lo s t r a b a jo s de in tro d u c c ió n de
En e fe c to , p a ra la e la b o ra c ió n de l a C á te d ra, E sq u iv el r e q u ir i ó de
d ich a compañía en México y N icaragua. También en dicho año E sq u iv el
Códigos de Comercio y o tro s documentos cuyo envío s o l i c i t ó a c o le g as
a se so ró a l a c o rp o ra c ió n G. Amsinck and Co. en lo s pagos de im puestos
la tin o a m e ric a n o s . A p a r t i r de e s to s c o n ta c to s i n i c i ó una r e la c ió n de
r e f e r id o s a negocios d e l ramo d e l tab aco y d e l l i c o r que deben h a c e r a l
negocios y un in te rca m b io de s e r v ic io s p r o fe s io n a le s con d iv e rs o s
Departamento d e l V a lle en C a li, Colombia.
abogados como Eduardo R odríguez P iñ e re s , de Colombia, Diómedes A ria s
R especto a l a American M etal Company, T o rib io E sq u iv el Obregón formó
S c h re ib e r de Perú, C e le s tin o F a rre ra de V enezuela, G uillerm o W ilson de
p a r te d e l equipo de abogados que a se so ra ro n a e s t a compañía en un proceso
Uruguay, José Duran de Guatemala, J u l i o P h ilip p i de C hile y S an tiag o
le g a l por la d is p u ta de algunos fundos m ineros, que e x p lo ta b a en
O 'F a r e ll de A rg e n tin a . La tó n ic a de l a p ro p u e sta es común a todos e ll o s
Chihuahua l a Compañía Minera de N aica, en c o n tra de lo s h e re d e ro s de lo s
y podemos o b s e rv a rla de manera c la r a en l a c a r ta que envió a C e le stin o
so c io s fundadores de d ic h a compañía. La American M etal contaba con
F a rre ra a C aracas, Venezuela
c u a re n ta a cc io n e s en Naica y algunos de lo s so c io s , que e ran e x tr a n je r o s ,
Yo vine a este país huyendo de la catástrofe terrible que d e c id ie ro n in te rp o n e r reclam aciones d ip lo m á tic a s a l gobierno de México,
ha aniquilado al mío, y por fortuna he encontrado la más
cordial acogida, encontrándome bien relacionado para los fines luego de que l a Suprema C orte f a l l ó en su c o n tra . Algunos abogados como
indicados pues, por una parte cuento con antiguas amistades
hechas en México, con personas que tienen sus negocios en los Roque E stra d a d e fe n d ie ro n l a re s o lu c ió n de l a C o rte, in te rp re ta n d o e l
Estados Unidos y por otra, como profesor de las universidades
de Columbia y Nueva York en esta ciudad, así como en Nacional litig io como una e x p re sió n de l a d e fe n sa de l a so b e ra n ía n a c io n a l en
City Bank, que es la institución de crédito más rica en el
país, he adquirido muy valiosas amistades que pueden servir c o n tra de l a s compañías e x tr a n je r a s . Por su p a r te , T o rib io E sq u iv el
para empresas de todo género.
recomendó a la American M etal no r e c u r r i r a l a a cc ió n d ip lo m á tic a , sin o

form ar una nueva compañía b a jo l a s le y e s

105 C a r t a d e M i l t o n E . L o u i s p a r a T o r i b i o E s q u i v e l O b r e g ó n , 2 8 d e d ic ie m b re de
1 9 1 5 , e n A TEO , s e c c i ó n : d o c u m e n t a l , c a j a 3 0 , e x p . 1 4 , f o j a 2 4 .

44
m exicanas, p a ra d em o strar l a le g itim a p ro p ied a d de lo s fondos m ineros, American, con l a que h abían s u s c r i t o c o n tra to s p a ra l a e x p lo ta c ió n de

por lo que se c o n s titu y ó la Compañía M inera de C onchos.106 T o rib io pozos p e tr o l e r o s . P a rtic u la rm e n te , T o rib io E sq u iv el in te n tó que e s ta

E sq u iv el p a r ti c i p ó ju n to con Manuel C alero como a s e s o r le g a l de la empresa o to rg a ra un c r é d ito a l a Cosmos, pues su s itu a c ió n f in a n c ie r a

Mexican G ulf O il Company, en un litig io e n ta b lad o no e ra buena debido a l a p re s e n c ia de agua sa la d a en

c o n tra l a compañía T ra n s c o n tin e n ta l P etroleum . El o b je tiv o e ra lo s pozos p e tr o le r o s y a l a in ce rtid u m b re generada a n te l a inm inente

lo g r a r que l a T ra n s c o n tin e n ta l indem nizara a la Mexican Gulf por apro b ació n de l a le y re g la m e n ta ria d e l a r t í c u l o 27 C o n s titu c io n a l.108

h ab er e x tra íd o p e tró le o de un y acim iento sobre e l que d ic h a empresa a s í , después de su re n u n cia a l a Asamblea P a c ific a d o ra , T o rib io E squivel

t e n í a derechos de e x p lo ta c ió n . T o rib io E sq u iv el recomendó que se b u scara se a le j ó de l a a c tiv id a d p o l í t i c a en lo s grupos o rg an izad o s por e x ila d o s .

que l a sanción a l a T ra n s c o n tin e n ta l se b a sa ra en l a s d is p o s ic io n e s d e l Las g e s tio n e s p a ra lo g r a r l a p u b lic a c ió n de su prim er l i b r o e s c r i t o en

código c i v i l y no d e l p e n a l, pues de e s te modo se l o g r a r l a e l pago de e l e x ilio , sus c u rso s sobre derecho comparado en l a s U n iv ersid ad es de

l a s gan an cias n e ta s por l a e x tra c c ió n de p e tr ó le o , pero además te n d ría n Columbia y Nueva York, l a e la b o ra c ió n de un segundo l i b r o , un e s tu d io

derecho a e x ig i r e l pago de r é d it o s . A p a r t i r de e s ta e s t r a t e g i a , la comparado de lo s códigos de com ercio de América L a tin a y, sobre todo,

Mexican G ulf dem ostró que t e n í a derechos sobre e l mencionado yacim ien to , l a s t a r e a s p ro fe s io n a le s re la c io n a d a s con su e s tu d io de abogado ocuparon

de manera que en a b r i l del922 gran p a r te de su tiem po.

ganó en prim era in s t a n c i a , re s o lu c ió n que


p o ste rio rm e n te fue r a t i f i c a d a en segunda i n s t a n c i a . 107 En r e la c ió n con la POLEMICA EN EL UNIVERSAL

Cosmos, Compañía Mexicana de P e tró le o , d i r ig i d a por el in g e n ie ro Sin embargo, s i b ie n E sq u iv el d e jó de p a r t i c i p a r activ am en te en lo s

G uillerm o A. Alonso y con sede en Tampico, T o rib io E sq u iv el p re s tó sus grupos o rg an izad o s por lo s e x ila d o s p o l í t i c o s , en 1917 e l a su n to de la

s e r v ic io s de c o n s u lto r ía le g a l p a ra l a e la b o ra c ió n de c o n tra to s y d io a cu sac ió n hecha a l prim er g a b in e te h u e r t i s t a d e l a s e s in a to de Madero

recom endaciones sobre e l p roceso de c e n tr a liz a c ió n que emprendió e l v o lv ió a re a v iv a rs e y e s to lo condujo nuevamente a l a p o l í t i c a . La c h isp a

in g e n ie ro Alonso en sus negocios a fue una e n tr e v is t a re a liz a d a por S alvador P a le n c ia a Jo rg e Vera E sta ñ o l

p a rtir de 1923. En e s p e c ia l, E sq u iv el Obregón se encargó de e l 26 de septiem bre de

r e p re s e n ta r lo s in te r e s e s de l a Cosmos f r e n t e a l a compañía Cuban

ío 6 a t e o , s e c c ió n do d o c u m e n ta l, c a ja 41, exp. 8 -1 1 . 108 ATEO, sección documental, caja 37, exp. 6; ATEO, sección d o c u m e n ta l, caja
42, exp. 10.

45 46
una d e c is ió n de lo s ex m in is tro s d e l prim er g a b in e te de H uerta, de d a r
1917, p u b lic a d a por el H eraldo de México e d ita d o en Los A ngeles,
f i n a l s ile n c io que h abían m antenido sobre l a a cu sac ió n p o r l a m uerte de
C a lif o r n ia , donde Vera afirm ó que l a a cu sac ió n c o n tra e l prim er g a b in e te
Madero y Pino S uárez. E sq u iv el i n s i s t í a , t a l como lo h a b ía hecho años
de H uerta por e l a s e s in a to de F ra n c isc o I . Madero y José M aría Pino
a n te s , que no podían e s p e ra r gran é x ito m ie n tra s l a o p in ió n o f i c i a l
Suárez e ra una calum nia d ifu n d id a en e l l i b r o de Ramón P rid a t i t u l a d o
e s tu v ie r a en su c o n tr a .112 No o b s ta n te , c o n sid era b a que e ra n e c e s a rio
From D e s n o tis m t o A n a r c h y .
emprender una d efen sa p a ra lim p ia r su nombre y e l de sus fa m ilia s ; por
Las d e c la ra c io n e s de Vera E sta ñ o l d ie ro n lu g a r a que e l a su n to de la
e llo p a r ti c i p ó en la c o n tro v e rs ia en un a r t í c u l o p u b lic a d o en E l
re s p o n s a b ilid a d d e l prim er g a b in e te h u e r t i s t a en e l a s e s in a to de Madero
U n iv e r s a l e l 17 de d iciem bre de 1917. Uno de lo s reclam os fundam entales
y Pino Suárez se v e n t i l a r a en l a p r e n s a .109 Fernando I g l e s ia s C alderón110
de I g l e s ia s C alderón se r e f e r í a a i hecho de que
se e r ig i ó como la voz acusadora por medio de una s e r i e de a r t i c u l o s que
luego de conocidos lo s
p u b lic ó en El U n iv e rs a l. E ste p e rió d ic o , cuyo e d ito r e ra F é lix
a s e s in a to s , lo s m in is tro s no h abían p re se n ta d o su re n u n c ia . Al re sp e c to
P a la v ic in i, e ra a lia d o de C a rra n z a .111
E sq u iv ele x p re sa un argumento que r e s u lta poco
T o rib io E sq u iv el i n te r p r e t ó l a s d e c la ra c io n e s de Vera E sta ñ o l como
109 S e g ú n V e r a E s t a ñ o l , é l n o h a b l a i m p u l s a d o l a d i s c u s i ó n s i n o q u e h a b l a n s i d o l o s c o n v in c en te . En e fe c to , se p re g u n ta 11¿Cuál e ra e l deb er de lo s m in is tro s
r e s t o s d e l o s c o n v e n c i o n a l e s e n E s ta d o s U n id o s y F e rn a n d o I g l e s i a s C a ld e r ó n e n
M é x ic o . C a r t a d e J o r g e V e ra E s t a ñ o l p a r a T o r i b i o E s q u i v e l O b re g ó n , 6 d e n o v ie m b re que habíamos sid o nombrados no por H uerta sin o p a ra c o n tra p e s a r l a a cció n
d e 1 9 1 7 , e n A TEO , s e c c i ó n d o c u m e n t a l , c a j a 2 9 , e x p . 1 4 , f o j a s 5 0 y 5 1 . S i n e m b a r g o
a n te l a o p in ió n p u b lic a d a e n E l U n iv e r s a l e n e l s e n t i d o d e q u e V e ra E s ta ñ o l se de H uerta, que se p r e s e n tía d is o lv e n te ? " 113 y más a d e la n te responde " . . .
a r r e p e n t i r í a d e h a b e r "exhum ado e s p o n tá n e a m e n te e l r e c u e r d o d e a q u e llo s c r ím e n e s " .
V e ra re s p o n d ió q u e l o s h a b ia exhum ado " c o n p le n a c o n v ic c ió n " . C a r ta d e J o r g e V e ra s i habíamos aceptado n u e stro p u e sto p a ra c o n tra p e s a r en lo s p o s ib le l a
E s t a ñ o l p a r a M a n u e l A n d r a d e ( D i r e c t o r d e E l U n i v e r s a l ) , 2B d e n o v i e m b r e d e 1 9 1 7 , e n
A TEO , s e c c i ó n d o c u m e n t a l , c a j a 2 9 , e x p . 1 4 , f o j a s 5 9 - 8 1 . a cc ió n de H uerta, a q u e llo in d icab aq u e e ra n u e s tro deberquedarnos y
ii° F e r n a n d o I g l e s i a s C a l d e r ó n e r a u n p e r i o d i s t a y p o l í t i c o , d i r i g e n t e d e l P a r t i d o
L i b e r a l M e x ic a n o . E r a h i j o d e J o s é M a r ia I g l e s i a s , a n t i g u o j u e z d e l a S u p rem a C o r t e , a fro n ta r la s
q u ie n f u e r i v a l d e P o r f i r i o D ia z y d e L e rd o e n l a s e l e c c i o n e s p r e s i d e n c i a l e s d e
1 8 7 6 . F u e s e g u i d o r d e l a c a u s a m a d e r i s ta y e n 1912 o b tu v o l a s e n a d u r í a p o r e l D .F ., c o n s e c u e n c ia s ." 114 y a c o n tin u a c ió n d e s ta c a que cumplió su t a r e a y hace
c a rg o q u e d ese m p e ñ ó h a s t a 1 9 1 3 . D u ra n te l a p r e s id e n c i a d e V ic to r ia n o H u e rta p u b lic ó
u n a r t i c u l o a c u s á n d o lo p o r l o s a s e s i n a t o s d e M a d e ro y P in o S u á r e z , l o q u e c o n t r i b u y ó un re c u e n to de su la b o r a l f r e n t e de la s e c re ta r ía de
a que fu e ra hecho p ris io n e ro en S an Juan de U lú a . D esp u és de que lo s
c o n s titu c io n a lis ta s o c u p a ro n l a c i u d a d d e M é x ic o e n a g o s t o d e 1 9 1 4 , F e rn a n d o H acienda, poniendo é n f a s is en que d u ra n te su g e s tió n se e la b o ró e l único
I g l e s i a s C a ld e r ó n f u e p r o p u e s to p o r l o s v i l l i s t a s p a r a s u s t i t u i r a V e n u s tia n o
C a rr a n z a e n l a p r e s id e n c i a d e l a R e p ú b lic a , p r o p u e s ta q u e re c h a z ó C a rr a n z a . En e s t e p ro y e cto de n iv e l m i n i s t e r i a l p a ra so lu c io n a r e l problem a a g r a r io y
m is m o a ñ o , C a r r a n z a l e o f r e c i ó e l c a r g o d e M i n i s t r o d e R e l a c i o n e s , p e r o I g l e s i a s
C a l d e r ó n d e c l i n ó e l o f r e c i m i e n t o . KATZ, 1 9 9 9 , p . 4 2 5 y D IC C IO N A R IO , 1 9 9 5 , p . 1 7 7 4 . tam bién en su p ré d ic a c o n sta n te a n te H uerta p a ra o b te n e r
111 KNIGHT, 1 9 9 6 , p . 1 0 0 6 .

112 C a r t a d e T o r i b i o E s q u i v e l O b r e g ó n p a r a J o r g e V e r a E s t a ñ o l , 2 9 d e o c t u b r e d e 1 9 1 7 ,
e n ATEO , s e c c i ó n , d o c u m e n t a l , c a j a 2 9 , e x p . 1 4 , f o j a s 4 4 - 4 9 113 E l u n iv e r s a l, 17 d e
d ic ie m b re de 1 9 1 7 114 El u n iv e r s a l, 17 d e d i c i e m b r e de 1917.

47 48
elecciones libres. EL LIBERALISMO CONSERVADOR

Con e l deseo de c o n ta r con más inform ación p a ra e n f re n ta r e l ataq u e de En 1918 T o rib io E sq u iv el Obregón r e a l iz ó un v i a j e a España con m otivo de
I g l e s ia s C alderón, Jorge Vera l e s p id ió a T o rib io E sq u iv el Obregón, l a p u b lic a c ió n en ese p a is de su l i b r o I n f l u e n c i a d e E spañ a y l o s E s ta d o s
Rodolfo Reyes y F ra n c isco León de l a B a rra, que l e e n v ia ra n sus v e rsio n e s U n id o s so b re M é x ic o , e d ita d o p o r l a e d i t o r i a l C a lle ja g ra c ia s a lo s
sobre lo s a co n te c im ie n to s en to rn o a lo s a s e s in a to s de Madero y Pino o f i c i o s de su amigo Rodolfo Reyes. El te x to , e s c r i t o en 1914 d u ra n te e l
S u á re z .115 Todos re sp o n d iero n p o sitiv a m e n te a l a p e tic ió n de Vera E stañ o l prim er año d e l e x i l i o , pero re v is a d o a n te s de su p u b lic a c ió n , m uestra e l
y e n v ia ro n sus re s p e c tiv o s e s c r i t o s , cuyo conten id o no v a rió re s p e c to a im pacto que tuvo p a ra E sq u iv el e l v i v i r en una so cied ad con un a l t o n iv e l
lo s que hab lan e la b o rad o en 1914. de d e s a rr o llo económico y p o l í t i c o como l a n o rte a m e ric a n a . F re n te a e s ta
Rodolfo Reyes lam entó la polém ica d e sa ta d a en El U n iv e rsa l, pues s itu a c ió n , e l a u to r r e fle x io n a sobre lo s problem as de México y de cómo
c o n sid era b a que dicho medio c a r e c ía de a u to rid a d m oral, que I g l e s ia s puede e n c o n tra rs e un camino de s a l id a p a ra l a c r i s i s que v iv e su p a is .
C alderón no e ra un ju zg a d o r im p a rc ia l sin o vocero de sus enemigos Ante e l c a r iz a u t o r i t a r i o y e x clu y en te que ib an tomando lo s go b iern o s de
p o l í t i c o s y que l a polém ica se r e a liz a b a en una so cied ad p re sa de un México, e l te x to p uedeser in te r p r e ta d o como una
régim en de v io le n c ia . Reyes d e c id ió no p a r t i c i p a r d ire c ta m e n te , pero búsqueda de nuevos d e rro te ro s en la s concepciones d em o cráticas y
como c o n sid era b a que l a la b o r de Vera E sta ñ o l e ra encom iable, respondió
lib e r a le s que lo lle v a ro n a i n te g r a r s e a l A n tirre e ie c c io n is m o . E ste
enviando su v e rs ió n sobre lo s crím enes de fe b re ro de 1913. E staba de
ensayo es un te x to v a lio s o porque p ro p o rcio n a nuevas id e a s p a ra e l
acuerdo en que convenia comenzar a h a b la r d e l a su n to , pero s o s te n ía que
pensam iento co nservador en México y s i g n i f i c a un h i to en e l camino d e l
no s e r ia n escuchados se ren a m en te .116
cambio de la s id e a s de E sq u iv e l, que lo conducen a s e r miembro fundador

del P a rtid o Acción N acional v e in tic in c o años después, en 1939.


Pensam iento c onservador que se g e stó en una s itu a c ió n de o p o sic ió n

p o l i t i c a a lo s g obiernos de l a R evolución, años d u ra n te lo s c u a le s la

p o s ib ilid a d de l a p a r tic ip a c ió n e stu v o p ro h ib id a p a ra g ran p a r te

de lo s o p o s ito r e s . 0 sea que el


115 C a r t a d e J o r g e V e r a E s t a ñ o l p a r a T o r i b i o E s q u i v e l O b r e g ó n , 3 de d ic ie m b re de pensam iento de Obregón en e s te a sp e c to se g e stó en e l marco de una
1 9 1 7 , e n A TEO , s e c c i ó n d o c u m e n t a l , c a j a 2 9 , e x p . 1 4 , f o j a 8 4 .
116 C a r t a d e R o d o l f o R e y e s p a r a T o r i b i o E s q u i v e l O b r e g ó n , 11 d e e n e r o d e 1 9 1 8 , e n p ro s c rip c ió n . E sto re a firm o lo s p r in c ip io s lib e r a le s y
ATEO , s e c c i ó n d o c u m e n t a l , c a j a 2 9 , e x p . 1 5 , f o j a 2 9 ; C a r t a d e R o d o l f o R e y e s p a r a
T o r i b i o E s q u i v e l O b r e g ó n , 1 d e f e b r e r o d e 1 9 1 8 , e n A TEO , s e c c i ó n d o c u m e n t a l , c a j a
29, ex p . 15, fo ja 53.

49 50
Inmerso en l a vida c o m u n itaria que p o s i b i l i t a d e s a r r o l l a r e l m u n icip io ,
dem ocráticos de dicho pensam iento.
e l in d io pudo h ab erse in te g ra d o a l a v id a re p u b lic a n a . C onsideró, además,
El te x to a n a liz a l a conform ación y fu n c io n e s de lo s poderes e je c u tiv o ,
que e l m u nicipio e ra l a unidad p o l í t i c a s u s ta n c ia l de l a s i n s t it u c io n e s
l e g i s l a t i v o y j u d i c i a l en E stados U nidos, de acuerdo con sus p re c e p to s
e stad o u n id en ses y donde ra d ic a l a fu e rz a más im p o rta n te de e se p a ís .
c o n s titu c io n a le s . E n fa tiz a l a s d e f ic ie n c ia s de d ich o s p re c e p to s y se ñ a la
E x p lica lo s o ríg e n e s y p r in c ip a le s a sp e c to s de l a v id a m un icip al de
que, s in embargo, e s to no ha o b sta c u liz a d o l a p ro s p e rid a d de aq u el p a is .
E stados Unidos y d e sta c a su v a lo r por s e r e l ám bito en e l que lo s
El o b je tiv o de T o rib io E sq u iv el e ra de m o stra r que lo s e fe c to s p e rn ic io s o s
ciudadanos aprenden l a s p r á c t ic a s de m o c rática s y donde se a p re c ia de
de la c o n s titu c ió n de E stados Unidos se n u lif ic a b a n debido a la s
manera c o n c re ta lo s b e n e fic io s de l a c o n c ilia c ió n y la to le r a n c i a .
c o n d ic io n es s o c ia le s d e l p ueblo, e sp e cialm en te p o r su e s p í r i t u p r á c tic o ,
Asegura que la lib e rta d m u n ic ip al s e ria uno de lo s cambios
c o n c ilia d o r y t o le r a n t e ; a tr i b u t o s que p e rm itie ro n que su v id a p o l í t i c a
in s titu c io n a le s más tr a s c e n d e n ta le s p a ra lo g r a r el d e s a rr o llo de
t u v ie r a consonancia con cada d e t a l l e de su r e a lid a d , a p e s a r de l a s
M éxico.117 En e l re s c a te de l a h e re n c ia h is p á n ic a y la d e fen sa d e l
in s u f i c i e n c i a s de la C o n s titu c ió n . Por eso , la im ita c ió n de la
m un icip io , E sq u iv el a d e la n ta dos id e a s que van a s e r fundam entales en
C o n stitu c ió n n o rtea m e rica n a en p a ís e s como México, cuyas c o n d icio n es
e l cuerpo de pensam iento d e l p rim er panism o.
s o c ia le s e ran d i s t i n t a s , tuvo con secu en cias d e s a s tr o s a s .
La adm iración de lo s l i b e r a l e s por lo e x tra ñ o ha tr a í d o e l d e sp re c io por
A si, p a ra E sq u iv el lo s l i b e r a l e s d e l s i g l o XIX, q u ien es e la b o ra ro n la
lo p ro p io . De ese d e sp re c io han su rg id o " lo s métodos q u irú rg ic o s y
c o n s titu c ió n prom ulgada en 1857, fu ero n re sp o n sa b le s de haber im portado
s a n g rie n to s empleados como l a gran panacea por la m ayoría de lo s
un modelo p o l í t i c o que no se a ju s ta b a a l a r e a lid a d m exicana. Señala
p r o g r e s is ta s " quienes en lu g a r de p ro c u ra r m o d ific a r y p e rfe c c io n a r,
que, a f i n de c o n s t r u ir i n s t it u c io n e s s ó lid a s en México, e ra n e c e s a ria
pro cu ran d e s t r u i r . E sto se tra d u c e en una " rig id e z " d e l siste m a p o l í t i c o
l a re v a lo r iz a c ió n de l a h e re n c ia h is p á n ic a , que ha sid o " ...d e n o s ta d a
que se re v e la en lo s que p o d ría lla m a rs e una le y h i s t ó r i c a , que en México
por lo s l i b e r a l e s y tib ia m e n te d e fen d id a por lo s co n se rv a d o re s, " de
jamás ha te n id o excepción: l a de que nunca un p a r tid o lo g ra l l e g a r a l
manera que se ha p ropalado una imagen n e g a tiv a y f a ls a d e l pasado
poder sin o por medio de una re v o lu c ió n armada, " . .. c u a l q u i e r p e rtu rb a d o r
c o lo n ia l. Afirm a que e l gob iern o e sp añ o l heredó a México l a id ea de la
puede c r e a r l a a n arq u ía y l a d is o lu c ió n en México, o en c u a lq u ie r
independencia y so b e ra n ía m u n ic ip al, misma que se fue perd ien d o a lo
la rg o d e l s ig lo XIX.

117 ESQUIVEL, 1 9 1 8 , p p . 1 9 3 - 2 2 6 .

52
51
o tro p a is de p o b lac ió n in d íg e n a ig n o ra n te , con só lo p ro p o rc io n a r a m a s idónea p a ra el frac c io n a m ie n to de la tie rra . A si, luego de la

a lo s d e sc o n te n to s , que no f a lta n en ninguna p a r te " 118 A si T o rib io prom ulgación de l a s Leyes de Reforma, lo s t e r r a t e n i e n t e s c o n ce n tra ro n

E sq u iv el c r i t i c a a lo s l i b e r a l e s y t r a z a una l in e a i n t e r p r e t a t i v a de l a p ro p ied a d , no m ediante e l robo sin o a tr a v é s de l a s c o n d ic io n es que

la rg a d u ra ció n en l a que re la c io n a lo s problem as su rg id o s d u ra n te la impuso l a p ro p ia le y . E sto c o n trib u y ó a l a d e s a p a ric ió n da l a pequeña

independencia con l a R evolución m exicana. "La g u e rra de independencia p ro p ied a d , de manera que en c o n tra de lo s f in e s que buscaban lo s

de México no fue más que e l p r in c ip io de una lu ch a que aún no a c a b a . .. . refo rm ad o res, el número de p ro p ied a d es rú s tic a s dism inuyó. Una vez

E ste e s p í r i t u de d e s tru c c ió n de todo lo n u e stro ha culm inado en e l r e s ta b le c id a l a paz, d u ra n te lo s prim eros años d e l gob iern o de P o r f i r i o

movimiento a n á rq u ic o , que con e sc án d a lo d e l mundo e n te ro p re s e n ta en Diaz, se observa una te n d e n c ia a l a su b d iv is ió n de l a p ro p ied a d . E x p lica

e s to s momentos l a n ación m exicana." que m ie n tra s lo s in d io s p e rd ía n la tie rra a causa de su f a l t a de

Pero l a c a l i f i c a c i ó n d e l a c c io n a r de lo s l i b e r a l e s no se l im i ta a l hecho p re p a ra c ió n , h a b ía o tro s mexicanos que e sta b a n tra b a ja n d o activ am en te

de que c o n stru y ero n un modelo p o l í t i c o ajen o a l a r e a lid a d de México. por l a tran sfo rm a c ió n a g r íc o la . Sin embargo, lo s problem as en e l sistem a

Más grave aún, E sq u iv el c o n sid e ra que fu ero n l a s Leyes de Reforma la s b a n c a rio im p id iero n que c o n tin u a ra e l ritm o de l a su b d iv is ió n de l a

que p ro p ic ia ro n que l a s comunidades de in d io s p e rd ie ra n sus t i e r r a s , ya p ro p ied ad y l a s m ejoras a g r íc o la s . T o rib io E sq u iv el r e s a l t a sus ya

que se le s d io l i b e r t a d p a ra d isp o n e r de e l l a s s in p ro p o rc io n a rle s medios conocidas id e a s sobre l a s u b d iv is ió n de l a s t i e r r a s y de una p o l í t i c a

m a te ria le s y c u lt u r a l e s p a ra que tu v ie ra n capacidad de c o n s e rv a rla s en de c o lo n iz a c ió n p a ra e l d e s a r r o llo d e l campo m exicano. Además, p r e c is a

p ro p ied ad in d iv id u a l. De manera l a p i d a r i a y en c o n tra d ic c ió n con sus que d ebían c re a rs e c o n d ic io n es p a ra e l acceso a l c r é d ito r u r a l y a l a

id e a s de ju v en tu d E sq u iv el afirm ó : "Eran l a s id e a s ja c o b in a s , de que con educación p a ra que lo s p r o p ie ta r io s sean capaces de c o n se rv a r su

una le y se tran sfo rm a una so cied ad y se cambia l a n a tu ra le z a hum ana."119 t i e r r a . 120

En su a n á l i s i s d e l d e rro te ro que toma l a p ro p ied a d a g r íc o la en México, El te x to p re s e n ta un a n á l i s i s de l a forma cómo se ha promovido e l

E sq u iv el r e i t e r a su pensam iento fo rja d o en l a re g ió n ra n ch e ra d e l c e n tro m ejoram iento m a te ria l y e l e j e r c i c i o de derechos p o l í t i c o s p o r p a r te de

de México. En t a l se n tid o hace una d e fen sa de l a p ro p ied ad p riv a d a y de lo s grupos s o c ia le s in te g ra d o s por in d io s y negros en E stados Unidos.

l a pequeña p ro p ied a d como l a v ia más La id e a fundam ental que e x tra e de l a e x p e rie n c ia e sta d o u n id e n se , y que

propone p a ra e l caso de lo s in d io s de

110 E S Q U IV E L , 1918, 54 y 1 0 4 .
119 ESQUIVEL 1918, p. 219. ESQUIVEL, 1 9 1 8 , p p . 290-335.

53 54
México, es e l im pulso de una obra c i v i l i z a t o r i a i n t e g r a l , que fomente su o f i c i a l e s " que c o n sid era n que hay un abuso de poder d e l l e g i s l a t i v o y

p ro g reso económico, in te le c tu a l y m o ral. Además, afirm a que su p re d ic a n l a n e ce sid ad de una "mano de h ie r r o " en México. T o rib io E sq u iv el

p a r tic ip a c ió n p o l í t i c a debe c o n d ic io n a rse a que a d q u ie ran un c ie r t o n iv e l c o n sid e ra que e s ta te o ría no es nueva, sin o que casi to d o s lo s

e d u c a tiv o , a f i n de que puedan d e fen d e rse de s e r m anipulados por lo s p r e s id e n te s l a han aceptado como norma de c onducta. "Jamás ha habido

p o l í t i c o s o l a i g l e s i a . 121 d o c trin a más p e rn ic io s a " e l l a es re sp o n sa b le de l a t i r a n í a y r ig id e z d e l

Sin embargo, a p e s a r de que c r i t i c a la forma en que lo s lib e r a le s e je c u tiv o , es asimismo re sp o n sa b le de que h a s ta ahora se haya p re sc in d id o

e n fre n ta ro n e l problem a d e l in d io , T o rib io E sq u iv el com parte con muchos de in v e s ti g a r l a s c u a lid a d e s i n t e l e c t u a l e s y m orales de lo s g o b e rn an tes,

de e ll o s una concepción n e g a tiv a d e l mismo de t i n t e s r a c i s t a s . É ste es " . . . a lo s c u a le s lo único que se l e s p id e es e n e rg ía p a ra a c a l l a r a lo s

tam bién un rasg o de su pensam iento que t ie n e un común con algunos hombres d e sc o n te n to s y le n id a d p a ra d e ja r a lo s p a r ti d a r i o s

que pro v ien en de l a so cied ad m estiz a d e l c e n tro d e l p a ís . P iensa que, a in c o n d ic io n a le s gozar de un e sta d o de cosas que lo s f a v o re c e .1,123 C ataloga

p e s a r de lo s e sfu e rz o s d e l gobierno e sp añ o l por p ro te g e r a lo s in d io s , de "mano de h ie rro " lo s g obiernos de P o r f i r i o D íaz, de F ra n c isc o Madero

é s te no pudo e v i t a r " . . . e l orden n a tu r a l que p ropendía a h a c e r que se y de V ic to ria n o H u e rta. Diaz no obedeció a lo s d ic ta d o s de l a "o p in ió n

s o b re p u sie ra l a ra z a más f u e r t e ." y ento n ces hubo "una deg en eració n de p ú b lic a " y p ro curó en todo momento que su v o lu n ta d fu e ra ú n ic a . E sto lo

l a ra z a p r im itiv a " . Habla de "su c a r á c t e r a p á tic o , de su im p re v isió n lle v ó a e l e g i r fu n c io n a rio s o b secu en tes con e l poder.

e x a s p e ra n te , d e l d e sp re c io por lo s re fin a m ie n to s de l a c u ltu r a y de la A p e sa r de que muchos p ien san lo c o n tr a r io , Madero tam bién empleó la

g e n e ra l y f a t a l in c lin a c ió n a l uso de l a s b ebidas mano de h i e r r o . Con mano de h ie r r o d ic tó a de l a B arra l a l i s t a de


miembros d e l g a b in e te , e n tr e lo s que se en co n trab an v a rio s miembros de
e m b ria g a n te s ." 122 su f a m ilia . En e s te mismo se n tid o se o b s tin ó en nombrar a José M aria
Además de l a c ritic a a lo s lib e ra le s y d e l r e s c a te de l a h e re n c ia Piño Suárez como v ic e p re s id e n te de l a R ep ú b lica. Con mano de h ie r r o
h is p á n ic a , o tr a de l a s con secu en cias n e g a tiv a s de l a adopción d e l modelo impuso a lo s gobernadores de lo s e sta d o s y a v a rio s de lo s c an d id a to s
c o n s titu c io n a l no rteam erican o es e l p re s id e n c ia lis m o . "Todos lo s m ales de su p a r tid o como d ip u ta d o s de l a XXVI l e g i s l a t u r a , pasando por encima
de la tir a n ía han venido d e l e je c u tiv o en M éxico." y propone como d e l voto de lo s
a lt e r n a t i v a l a c o n stru c c ió n de un siste m a p o l í t i c o donde e l peso d e l

parlam ento sea mayor. E n ju ic ia a lo s " p o l í ti c o s

123 ESQUIVEL, 1918, pp. 61 y 62.


121 ESQ U IV E L , 1 9 1 B , p p . 2 2 7 - 2 8 9 .
122 ES Q U IV E L , 1 9 1 8 , p p . 2 1 4 y 2 8 6 . 56
55
ciu d a d an o s. E sq u iv el p re d ic a la n e ce sid ad de e x is te n c ia de un v erdadero régim en de
H uerta tam bién empleó l a mano de h i e r r o . Para d e m o s tra rlo , E sq u iv el p a r tid o s p o l í t i c o s en México. Muy a l a manera de J u s to S ie r r a , cuando
re fie re al a s e s in a to de Madero y a l a d e s a p a ric ió n de d ip u ta d o s y r e f i e r e a l cuidado por c o n se rv a r l a s t r a d ic io n e s que formaban l a e se n c ia
sen ad o res de l a o p o sic ió n , asi como a su d e c is ió n de q u i ta r a lo s misma de l a n a c io n a lid a d , E sq u iv el propone l a n e ce sid a d de l a e x is te n c ia
gobernadores c i v i l e s de lo s e sta d o s p a ra poner a é s to s b a jo la a u to rid a d de un p a r tid o c o n se rv a d o r128
m i l i t a r y e l r e s t r i n g i r l a l i b e r t a d de im p re n ta. Los t r e s gobernantes
La marcha normal de una n ación es siem pre e l e q u il i b r io
cayeron p o r hab er hecho uso de l a mano de h ie r r o . E sto generó gran de la s fu e rz a s co n serv ad o ras con l a s fu e rz a s re fo rm a d o ra s ...
P re te n d e r que en una n ación no haya fu e rz a s refo rm ad o ras, es
im popularidad h a c ia eso s g o b ie rn o s. 0 sea que lo s golpes m i l i t a r e s se lo mismo que p re te n d e r que un buque marche s in vapor n i v ie n to
que lo im pela; p ero p re te n d e r que una n ación p re sc in d a de sus
deben a l uso de l a mano de h i e r r o , a l a f a l t a de re s p e to a l a le y y a fu e rz a s co n se rv a d o ra s, e q u iv a le a p re te n d e r que un buque
a tr a v ie s e e l océano s in l a s t r e . " 129
la v o lu n ta d c iu d a d a n a .124 A p e s a r de su c ritic a a lo s lib e ra le s
decim onónicos, E sq u iv el a firm a : "He sid o y sig o sien d o un l i b e r a l ; es
d e c ir , de a q u e llo s que ven en l a l i b e r t a d un id e a l a l que deben a c e rc a rs e CARTA ABIERTA A VENUSTIANO CARRANZA
En mayo de 1919, T o rib io E sq u iv el Obregón p u b lic ó en lo s p e rió d ic o s una
cada vez más lo s h o m b re s ..." 125 ¿Qué s i g n i f i c a p a ra E sq u iv el s e r un c a r ta a V enustiano C arran za. Al i n i c i o de l a misma j u s t i f i c ó e l e s c r i t o
por " . . . e l p e lig r o inm inente que en e s to s momentos más que nunca c o rre
l i b e r a l ? A lo la rg o de su te x to a p are ce l a re s p u e s ta , cuando e l a u to r l a independencia n a c io n a l." 130 E sq u iv el se r e f i r i ó a l a gravedad d e l
problem a económico que e n fre n ta b a México. E ste , "a causa de sus
r e s c a ta como id e a s b á s ic a s algunos de lo s p rin c ip io s d e l lib e ra lis m o re v o lu c io n e s ," desde 1914 no ha pagado su deuda e x te rn a ; en con secu en cia,
se ha c o n v e rtid o en un p a is in s o lv e n te y ha p e rd id o l a p o s ib ilid a d de
p o litic o : la p ro te c c ió n de la s lib e r t a d e s c iv ile s , la c re a c ió n de r e c i b i r c r é d i to s . Además, l a n ación t e n i a una deuda con n a c io n a le s y

in s t it u c io n e s r e p r e s e n ta tiv a s , l a se p a ra c ió n de p o d e res, l a autonom ía


m u n ic ip al y l a p re s e n c ia de un régim en de uniform idad a n te l a l e y . 126
O tras id e a s d e l lib e ra lis m o muy p re s e n te s en e l l ib r o de E sq u iv el son
e l p ro g reso s o c i a l y e l d e s a rr o llo económico; en e s te s e n tid o , e l i n te r é s
in d iv id u a l se basaba en l a p ro p ied ad p r iv a d a .127

128 " P a r a n o s o t r o s - m a n i f e s t a b a S i e r r a - e l c o n s e r v a d u r i s m o s i g n i f i c a b a c o n s e r v a r e l
o r d e n s o c i a l , ú n i c o m e d io p a r a a c l i m a t a r l a l i b e r t a d , p l a n t a e x ó t i c a e n n u e s t r a
124
h i s t o r i a . " J u s t o S i e r r a , Obras completas, M é x i c o , UNAM, 1 9 4 8 - 1 9 4 9 , to m o 4 , p . 1 4 5 ,
ESQ U IV E L , 1 9 1 8 , p p . 6 6 -6 9
125
c ita d o e n HALE, 1 9 9 1 , p . 6 6 .
ESQ U IV E L , 1918, p . 263.
129 ES Q U IV E L , 1 9 1 8 , p p . 2 4 7 y 2 4 8 .
126HALE, 1 9 9 1 , p . 16.
127 HALE, 1 9 9 1
130 .Revista mexicana, 3 d e m a y o d e 1 9 1 9 , n o . 1 9 4 .
, p .1 7 .
57
58
e x tr a n je r o s debido a lo s daños causados por fu e rz a s r e v o lu c io n a r ia s . La Q u e réta ro , punto fundam ental de desacuerdo e n tr e l a s fu e rz a s p o l í t i c a s
in c a u ta c ió n por e l gobierno de lo s bancos que e x is tí a n en México, la en México. C onsidera que l a C o n stitu c ió n de 1857 n e c e s ita s e r reform ada
mayor p a r te de cuyos a c c io n is ta s e ran e x tr a n je r o s , no solam ente ha y l a C o n stitu c ió n de 1917 t ie n e algunos p r in c ip io s que deben c o n se rv a rse

aumentado l a deuda n a c io n a l, sin o que ha d e s tru id o e l c r é d ito , " . . . s i n por c o n te n e r una fórm ula a c e rta d a p a ra s a t i s f a c e r n e ce sid ad e s s o c ia le s .

e l c u a l e l v a lo r m oral in d iv id u a l no puede a p ro v ec h arse, n i l a riq u e z a Afirm a que l a C o n stitu c ió n de Q u e réta ro , p o r c ir c u n s ta n c ia s p a r ti c u l a r e s

c i r c u l a r con l a ra p id e z que ex ig e e l com ercio moderno y que re q u ie re la de lo s momentos en que fue form ada, no es l a e x p re sió n de l a v o lu n ta d

p ro n ta re p a ra c ió n de l a s fu e rz a s económ icas d e l p a i s ." A l a p é rd id a d e l d e l pueblo mexicano, sin o só lo l a de un grupo determ inado tomado de e n tre

c r é d ito e x te rn o e in te r n o , se sumaba e l hecho de l a in ca p ac id ad d e l e l p a r tid o p o l í t i c o dom inante de e n to n c e s. E sta C arta Magna ha producido

gobierno p a ra re a liz a r la re ca u d ac ió n im p o s itiv a que l e p e r m i t ir l a d i f ic u l ta d e s en la s re la c io n e s de México con o tr o s p ueblos y

n i v e l a r e l p re su p u e s to , "debido a l a in q u ie tu d que p re v a le c e ." le v a n tam ie n to s en e l i n t e r i o r a c a u d illa d o s por hombres que d e fie n d en y

A co nsecuencia de l a i r r e g u l a r s itu a c ió n de México, I n g l a t e r r a se negó proclam an l a C o n stitu c ió n de 1857. Por lo ta n to l a C o n stitu c ió n de 1857

a r e c i b i r a l pleno p le n ip o te n c ia r io mexicano a c re d ita d o a n te su gobierno debe re c o b ra r todo su poder, pero se debe e la b o ra r un a c ta de reform as

y tam bién F ra n c ia se negó a a c e p ta r a l enviado m exicano. En N orteam érica donde se in clu y a n lo s p re c e p to s de la nueva C o n stitu c ió n que son

se formó una a s o c ia c ió n de c a r á c t e r in te r n a c io n a l cuyo o b je to e ra la "in c u e stio n a b le m e n te " una m ejora, por ejem plo, la forma en que se

p ro te c c ió n de lo s in te r e s e s e x tr a n je r o s en México y se om itió e l nombre reconoce el p rin c ip io de l a lib e r ta d de p re n sa , la g a r a n tía de la

de ese p a is en l a l i s t a de pueblos in d e p e n d ie n te s p a ra form ar p a r te de a u d ie n c ia ju d ic ia l, el p re c e p to del banco único de em isión, lo s

l a Liga de l a s N aciones. r e q u is it o s p a ra s e r e le c to p re s id e n te de l a R ep ú b lica, e l r e q u is it o de

Dada l a gravedad de l a s itu a c ió n , E sq u iv el propone un acuerdo e n tr e la s l a m ayoría de l a s dos te r c e r a s p a r te s d e l número de v o to s en e l Congreso

fu e rz a s p o l í t i c a s in te r n a s de México. "En l a cooperación de l a s fu e rz a s p a ra a d o p ta r una le y c o n tra l a c u a l e l p re s id e n te ha hecho v a le r e l v e to ,

n a c io n a le s e s t á e l s e c re to de l a marcha arm ónica d e l p a i s ." Afirma que e l p rin c ip io de in am o v ilid a d de lo s ju e c e s y a q u e lla s r e g la s r e l a t i v a s

es un e r r o r b u sc a r l a s o lu c ió n p a ra México en e l reco n o cim ien to de a l a le g i s l a c i ó n d e l t r a b a jo que l a e x p e rie n c ia haya dem ostrado que son

W ashington y de o tr o s g o b iern o s. p r a c t ic a b le s en l a s co n d ic io n es de México.

E sq u iv el c e n tra su p ro p u e sta de n e g o ciac ió n en l a c o n s titu c ió n de

59 60
¿Por qué e s c r i b i ó E sq u iv el d ich a c a r ta p ú b lic a ? ¿Cuál fue l a e v alu ac ió n
que h izo d e l momento p o l í t i c o que v iv ia México?
El fe lic is m o i n i c i ó su r e b e lió n armada c o n tra C arranza en fe b re ro de
Sin duda, e l carrancism o se h a b la c o n so lid a d o como fra c c ió n tr iu n f a n t e
1916. Según H enderson, después de 1918 lo s f e l i c i s t a s e sp e ra ro n c o n ta r
de l a re v o lu c ió n y C arranza e ra p re s id e n te
con e l apoyo no rteam erican o p a ra ganar su re b e lió n . E sto Los condujo a
c o n s titu c io n a l desde mayo de 1917. Sin embargo, su c o n so lid a c ió n e ra
d a r un so p o rte "ciego" a l a p o l í t i c a e x t e r i o r n o rtea m e rica n a d u ra n te la
r e l a t i v a , pues t e n i a que s e g u ir luchando c o n tra v illis ta s ,
Prim era Guerra M u n d ial.133 En su re s p u e s ta p u b lic a d a en la R evista
z a p a ti s t a s y muchos o tro s grupos o p o s ito r e s , de lo s c u a le s el que
M e x ic a n a , Nemesio G arcía N aranjo c o n sid e ra que m ie n tra s e l d ia g n ó s tic o
s ig n if ic a b a una amenaza mayor e ra e l encabezado por F é lix D iaz. Además,
de E sq u iv el es a tin a d ís im o , e l tr a ta m ie n to que a co n seja es i l u s o r i o por
en e l momento en que E sq u iv el p u b lic a su c a r t a a C arranza, e ra ya c la ro
s e r l a p ro p u e sta hecha en l a c a r t a p ú b lic a " i d e a l i s t a e i r r e a l i z a b l e " ,
el su rg im ie n to de una o p o sic ió n in te r n a fre n te a la s e le c c io n e s
dado que C arranza ha dem ostrado un e s p í r i t u de i n to l e r a n c ia y
p r e s id e n c ia le s que te n d ría n lu g a r aproximadamente un año después,
t a i t a de re s p e to por l a le y , por lo c u al no es de e s p e ra rs e que cambie
encabezada por uno de lo s m i l i t a r e s más e x ito s o s de l a g u e rra c i v i l en
de conducta y se re su e lv a a in a u g u ra r una p o l í t i c a de c o n c ilia c ió n ,
México, Á lvaro Obregón. É steanunció su
i n v it a a E sq u iv el a apoyar a l fe lic is m o , a l que c a l i f i c a n como " la
c a n d id a tu ra a l a p re s id e n c ia de l a R epública e l ld e ju n io de
Revolución" con m ayúscula. "Fundámonos todos en e lla , lle v é m o sle
1919.131 O tro de lo s sig n o s de d e b ilid a d d e l g o bierno de México, a l cu al
n u e s tro s e s fu e rz o s , n u e s tra s o b se rv a c io n e s, n u e s tro s e s tu d io s , a f i n de
apuntaba l a c a r t a de E sq u iv el Obregón, e ra su in c a p a c id a d de r e a c ti v a r
que su t r iu n f o sea un t r iu n f o n a c io n a l. Pongámonos en
l a econom ía. E sq u iv el i n te r p r e t ó que e s ta r e l a t i v a d e b ilid a d d e l régim en
c o n ta c to no con C arranza, sin o con lo s
c reab a la s c o n d ic io n es p a ra una n e g o c ia c ió n . Pero ¿Cuál e ra la
g e n e ra le s F é lix D íaz, R oberto Cejudo, L uis Medina B arrón, M arcelo
c o n tra p a rte ? ¿Con qué fu e rz a s in te r n a s p r e te n d ía E sq u iv el la
Caraveo, Juan Andreu Almazán, Pedro Gabay, C á stu lo P érez, C arlos
n e g o ciac ió n ? Además de C arranza, l a c a r t a tuvo como d e s t in a t a r i o s a lo s
A re lla n o y demás p a t r i o t a s que luchan por c r e a r un gobierno
grupos de e x ila d o s m exicanos. Fue p u b lic a d a en La P a t r i a , de El Paso,
d ig n if i c a d o .1,134
Texas, y La P r e n s a y l a R e v i s t a M ex ic a n a de San A ntonio, Texas y tuvo En su re s p u e s ta a G arcía N aranjo en l a R e v i s t a M e x ic a n a , E sq u iv el

e s p e c ia l im pacto en e s t a ú ltim a , órgano d e l f e li c i s m o ,132 d i r ig i d a por


Nemesio G arcía N aranjo.
133 HENDERSON, 1981, p . 135.
134.Revista M exicana, S an A n to n io T e x a s , 25 d e m ayo d e 1 9 1 9 , A ño V , V o l. V I I I , num . 1 9 4 ,
131 CUMBERLAND, 1 9 7 5 , p . 363. pp. 1 y 2.
132 HENDERSON, 1 9 8 1 , p . 133.
61
62
e s t á de acuerdo en que es p o s ib le que C arranza no a c e p te , s in embargo,
c ree que e l p o s ib le t r iu n f o del P a rtid o R epublicano en l a s próxim as
i n s i s t e en que su p ro p u e sta es l a ú n ica s o lu c ió n p o s ib le . "E l gobernante
e le c c io n e s s ig n if iq u e un cambio de l a a c t i t u d in te r v e n c io n is ta de lo s
p a trio ta e i lu s tr a d o .... te n d rá que c o n c i l ia r y c o o rd in a r l a s fu e rz a s
s o c ia le s m exicanas. . . ',135 y s i mañana t r i u n f a r a l a v e rd ad era re v o lu c ió n , E stados Unidos h a c ia México o que " ...é s to s d e ja r ía n a México que

a l régim en que en to n ces s u r j a l e d a r la como c o n trib u c ió n e l mismo consejo r e s o l v ie r a sus q u e r e lla s como p u d ie ra o q u izá a y u d a ría n , aunque no cuera

que a C arranza, que busque d e n tro de México e l apoyo a su gob iern o , que sin o con su sim p a tía y a cc ió n m oral a l a re v o lu c ió n a n t i c a r r a n c i s t a . " Más

coo rd in e y c o n c ilie l a s fu e rz a s n a c io n a le s . aun, E sq u iv el c o n sid e ra que a p o s ta r a l a ayuda n o rtea m e rica n a es un camino

La p o s ic ió n de E sq u iv el queda más c la r a en una c a r t a p e rso n a l a G arcía equivocado, pues s i lo s E stados Unidos p r e s ta r a n su apoyo a l a a c tu a l

N aranjo y en c a r t a a F é lix D íaz. A G arcía N aranjo se d i r ig e con c a riñ o re v o lu c ió n , en to n ces México d e ja r ía de s e r una n ació n in d e p e n d ie n te .

de c o r re l ig i o n a r io ; d ic e v e r en e l tono de l a c r í t i c a p ú b lic a y en su I n s i s t e que l a ú n ica s a lid a a l problem a es que lo s m exicanos pro cu ren

c a r t a p e rs o n a l, un fondo de sim p a tía por sus id e a s y e l l o le b a s ta p a ra l l e g a r a un acuerdo.

d e p o s ita r en é l l a c o n fid e n c ia de su c a r t a . 135136 Con un d e jo de amargura En su c a r t a a F é lix D íaz, E sq u iv el p la n te a con más c la r id a d su tem or de

E sq u iv el afirm a que su a b so lu to r e tr a im ie n to de l a p o l í t i c a mexicana no una in v a s ió n n o rtea m e rica n a a M éxico.138 P ien sa que en E stados Unidos no

se debe a l a in d if e r e n c ia , sin o a l a más profunda decepción por lo s medios hay más que dos c o r r i e n te s de o p in ió n . Una s o s te n id a por e l p re s id e n te

empleados y reconoce que su e sc e p tic ism o es p ro d u cto además " . . .de n u e s tra W ilson y sus ín tim o s, q u ien es apoyan a C arranza "a to d a c o s ta ." La o tr a

im potencia p a ra s a lv a r a México" 137 pues no h ab ía sid o p o s ib le que lo s que puede p e r c i b ir s e a tr a v é s de l a p re n sa , de l a tr ib u n a p a rla m e n ta ria

mexicanos u n ie ra n sus fu e rz a s . y tam bién en l a s re u n io n e s s o c ia le s de todo género, es que lo s E stados


Unidos deben de i n te r v e n i r m ilita rm e n te , que lo s m exicanos somos in ca p ac e s
Señala que desde 1913 ha sid o f e l i c i s t a y lo sig u e sien d o , pero m uestra
con c la r id a d sus d if e r e n c ia s re s p e c to a l a p o l í t i c a que dicho movimiento de gobernarnos por n o so tro s mismos y que l a s o b lig a c io n e s de e s te p a ís
ha lle v a d o a d e la n te . E sq u iv el argum enta que no
p a ra con lo s o tro s y su p ro p ia conven ien cia m e rc a n til l e exigen poner f i n

cuanto a n te s a l e sta d o de co sas que p re v a le c e en México.


En su o p in ió n sobre e l re p o rte d e l Comité F a ll re a liz a d o c a s i un

135.Revista mexicana, 2 d e ju n io d e 1919


C a rta de T o r i b i o E s q u i v e l O b r e g ó n , p a r a N e m e s io G a r c i a N a r a n j o , 3 d e ju n io de
1919, en ATEO , s e c c i ó n d o c u m e n ta l, c a j a 4 4 , e x p . 1 1 .
C a rta de T o r i b i o E s q u i v e l O b r e g ó n p a r a N e m e s io G a r c í a N a r a n j o , 3 d e ju n io de
1919, en ATEO , s e c c i ó n d o c u m e n ta l, c a j a 44 e x p . 1 1 , f o j a s . 2 8 3 - 2 8 4 . 130 C a r t a d e T o r i b i o E s q u i v e l O b r e g ó n p a r a F é l i x D í a z , 1 de ju lio de 1919, en
ATEO, s e c c i ó n d o c u m e n to 3 2 , c a j a 44 e x p . 1 1 , f o j a 2 7 7 .

63 64
año después de su c a r t a p ú b lic a a C arranza, e s c r i t o e l 2 de ju n io de
R epublicano gane l a s e le c c io n e s e sta d o u n id e n s e s , se p re te n d e que lo s
1920, pocos d ia s después d e l a s e s in a to de C arranza y l a i n s t a l a c i ó n de
am ericanos sean indem nizados por eso s mismos m exicanos que fueron
un gobierno p r o v is io n a l en México p r e s id id o por A dolfo de l a H uerta,
d esp o seíd o s p or p e rso n as p u e s ta s en e l poder por e l gobierno de e s te
E sq u iv el r e i t e r a su dura c r i t i c a a l a p o l í t i c a n o rtea m e rica n a h a c ia p a is .
México. R especto de l a p ro p u e sta d e l Comité de que e l reconocim iento a i C onsidera l a p ro p u e sta de re p o rte F a ll de o to rg a r un préstam o s i e l
g o b iern e de México debe s e r suspendido h a s ta que se haya m odificado la gobierno de México c o n sie n te en l a s demandas, p ro p o sic ió n que a trib u y e
nueva c o n s titu c ió n , E sq u iv el opina que s i b ie n a c e p ta que, " ....la a l Senados F a ll, como "muy in fo rtu n a d a " . Para te rm in a r, d ic e que s i é l
c o n s titu c ió n de t u v ie r a alguna in f lu e n c ia sobre e l gobierno de México l e a c o n s e ja rla que
1917 fue ile g a lm e n te prom ulgada y es su b v e rsiv a de lo s derechos no h i c i e r a demandas de reconocim iento a l gobierno de W ashington. A cambio
fundam entales de lo s mexicanos a s i como de lo s e x tr a n je r o s " lo que l e propone que busque e l reconocim iento "de l a s p e rso n as m exicanas, a
r e s u lta in a c e p ta b le es que sien d o México un p a is in d e p e n d ie n te , su tr a v é s de l a j u s t i c i a y l a c o n c ilia c ió n le g itim a " y lo e x h o rta a b u sc a r
c o n s titu c ió n deba s e r hecha p a ra s a t i s f a c e r l a s demandas de un poder su p ro p ia re c o n s tru c c ió n in te r n a , m oral. Al gobierno de lo s E stados
e x tr a n je r o . Y en e s t e mismo s e n tid o a g re g a ," lo que e l Comité propone Unidos le recom ienda no m ezclarse en lo s a su n to s in te r n o s de México y
es d e ja r a México una independencia f a l s a , una mera f a rs a in d ig n a de suspender e l reconocim iento d e l gobierno p re s e n te h a s ta que é s te haya
México y a cc ió n in d ig n a de lo s E stados U nidos." R especto de l a adopción sid o reconocido por l a s p e rso n as m exicanas y h a s ta que é l haya dem ostrado
de p r in c ip io s so c ia lis ta s en México que preocupan al Comité F a ll, que e n tie n d e sus o b lig a c io n e s m orales con lo s mexicanos y e x tr a n je r o s " .
E sq u iv el afirm a que no debe de o lv id a rs e que lo s gobern an tes que
ado p taro n d ich o s p r in c ip io s fu e ro n p u e sto s en México " ...p o r la LA PERMANENCIA EN EL EXILIO

i n f lu e n c ia y fu e rz a de lo s E stados U n i d o s ..." . R e sp o n sa b iliz a ai La c a ld a de C arranza y sobre todo l a a c t i t u d de a p e rtu ra d e l nuevo

gobierno d e l p re s id e n te W ilson p o r apoyar a l de C arranza y d e sta c a e l gobierno p r o v is io n a l p r e s id id o por A dolfo de l a H uerta h a c ia l a s fu e rz a s

absurdo de que " e l ta n llam ado so c ia lism o sop o rtad o por e l p re s id e n te o p o s ito ra s , a b rió nuevas e x p e c ta tiv a s a T o rib io E sq u iv el Obregón de poner

W ilson" s irv ió p a ra que mexicanos y fin a su e x ilio . La c a r ta de p re s e n ta c ió n de E sq u iv el y o tro s

e x tr a n je r o s , p rin c ip a lm e n te m exicanos, fu e ra n c o r r e l ig i o n a r io s fue l a p u b lic a c ió n d e l l ib r o

d e sp o se íd o s y ahora a n te l a p o s ib ilid a d de que e l p a r tid o

139 O p i n i ó n s o b r e e l r e p o r t e del C o m ité F a ll, e n ATEO , s e c c ió n d o c u m e n ta l, c a ja 33


exp. 11, fo ja s 2 y 3.
t it u l a d o E n s a y o s o b r e l a r e c o n s t r u c c i ó n d e M é x i c o 1*0. En e s te d is p o s ic io n e s d e l a r t i c u l o 27 r e f e r i d a s a l predom inio a b so lu to d e l E stado
te x to , e s c r i t o a f in e s d e l gobierno de C arranza y que v io l a lu z p ú b lic a sobre lo s re c u rso s n a tu r a le s , pues opinaban que e ra un a tr o p e ll o al
d u ra n te lo s prim eros meses del gobierno de Obregón, lo s a u to re s derecho in d iv id u a l y e sto rb a b a l a a cc ió n de l a i n i c i a t i v a p riv a d a . En
examinaban una s e r i e de problem as que c o n sid era b an fundam entales para el caso p a rtic u la r del p e tró le o afirm aban que la p o lític a de
l a re c o n s tru c c ió n d e l p a ís y p re se n ta b a n sus p ro p u e sta s de so lu c ió n con n a c io n a liz a c ió n e ra en r e a lid a d un despojo que c reab a c o n f lic to s con
e l f i n de que fu e ra n u t i l i z a d a s p o r quienes se encontraban en e l gobierno o tro s p a ís e s , pues desco n o cía lo s d erechos d e fin id o s p o r l a s le y e s , en
como un "p la n de sa lv a c ió n n a c io n a l" . El documento es muy c r i t i c o v i r tu d de l a s c u a le s e l p e tr ó le o p e rte n e c ía a l dueño d e l s u e lo . En cuanto
re s p e c to de l a s p r in c ip a le s a cc io n e s d e l c a rra n c is n o y denota a l problem a a g ra rio rechazaban l a im p la n ta ció n de l a p ro p ied a d comunal
una f a l t a de y e l o torgam iento de e jid o s , ya que s o s te n ía n que e s te siste m a elim in ab a
cap acid ad de sus a u to re s p a ra e n te n d e r lo s cambios habidos en México e l e s p í r i t u de p ro g reso in d iv id u a l y som etía a lo s cam pesinos a l a t u t e l a
pro d u cto de l a R evolución.
perenne del E s ta d o .142 C ritic a b a n al gobierno c a rra n c ista por haber
La c o n d ició n b á s ic a p a ra l a e je c u c ió n d e l p la n e ra el
suprim ido a l M in is te rio de In s tru c c ió n P ú b lic a , pues en su concepto e l
re s ta b le c im ie n to de l a C o n stitu c ió n de 1857; su reform a d e b ía r e a l iz a r s e
gobierno quedó im pedido p a ra i n te r v e n i r en l a educación e le m e n ta l, además
m ediante lo s p ro c ed im ie n to s le g a le s c o rre sp o n d ie n te s y no a tr a v é s de
de que se oponían a l a s lim ita c io n e s p a ra l a l i b e r t a d de enseñanza.
l a im posición de un grupo, como afirm aban que o c u rrió en e l caso de la
E n tre l a s p r in c ip a le s p ro p u e sta s d e l ensayo en e l a sp e c to p o l í t i c o ,
C o n stitu c ió n de 1917. C onsideraban que d ich a C o n stitu c ió n c o n tra v e n ia
s o b re s a le su pronunciam iento en fa v o r d e l v oto só lo p a ra l a p o b lac ió n
lo s p r in c ip io s e s e n c ia le s de un régim en de l i b e r t a d dem ocrática e in c lu s o
a lf a b e ta en e l caso de l a s e le c c io n e s fe d e r a le s y de lo s p r o p ie ta r io s
lle g a b a a s e r t i r á n i c a . 141
de b ie n e s r a le e s o a q u e llo s dedicados a p ro fe s io n e s in d u s tria le s o
En su c r i t i c a a l a C o n stitu c ió n de 1917 rechazaban l a suprem acía d e l
c o m e rcia le s, en e l caso de l a s e le c c io n e s m u n ic ip a le s. En m a te ria de
p re s id e n te so bre e l Congreso, debido a l a f a l t a de mecanismos
j u s t i c i a proponían e l p r i n c i p i o de l a in am o v ilid a d de lo s ju e c e s con e l
p a ra r e a l i z a r j u i c i o s de re s p o n s a b ilid a d a lp rim e ro y por la s
fin de que gozaran de mayor in d ependencia en sus a c to s y que lo s
fu n c io n e s l e g i s l a t i v a s con que fue in v e s tid o . Condenaban la s
m ag istra d o s

L o s o t r o s a u to re s f u e r o n M a n u e l C a l e r o , F r a n c i s c o S . C a r v a j a l , J u a n B . C a s t e l a z o ,
J e s ú s F l o r e s M ag ó n , T om ás M ac m a n u s, R a f a e l M a r t í n e z C a r r i l l o , M ig u e l R u e l a s y J o r g e
V e ra E s ta ñ o l.
141 CALERO e t al., s / f , p p . 7 - 9 . 139 CALERO e t . a l., s /f, p p .1 7 , 28, 29, 3 7 -4 1 , 6 1 -6 5 , 7 5 -8 0 y 1 0 5 -1 1 3 .

67 68
bancos de c ir c u la c ió n , m ie n tra s que l a em isión quedara b a jo l a d ire c c ió n
de l a Suprema C orte fu e ra n designados p o r e l Senado a p ro p u e sta de una
e x c lu s iv a d e l g o b iern o . A consejaban l a fundación de un banco ún ico de
te r n a o fre c id a por e l p r e s id e n te . Para l a re o rg a n iz a c ió n d e l E jé r c ito
em isión que a c t u a r í a como banco em isor y de d e p ó s ito , con l a f a c u lta d
se ñ a la b an que d e b ia i n te g r a r s e con elem entos del a n tig u o E jé r c ito
p a ra d i s t r i b u i r lo s fondos d e l g o bierno y como banco de re d esc u e n to p a ra
F e d e ra l, de l a s fu e rz a s c a rra n c is ta s , c o n v e n c io n ista s, z a p a ti s t a s y
d is trib u ir el c r é d ito a tr a v é s de o tra s i n s t it u c io n e s b a n c a ria s .
demás fa c c io n e s . Además, proponian su p r o f e s io n a liz a c ió n m ediante la
F inalm ente, re s p e c to a l problem a a g r a r io p roponían e l frac c io n a m ie n to
im p la n ta ció n del s e r v ic io m ilita r u n iv e rs a l y o b lig a to r io y la
de l a pro p ied ad p a ra aum entar e l número de p r o p i e t a r i o s , fom entar la
re o rg a n iz a c ió n de El C olegio M i l it a r y l a E scuela N aval. Reconociendo e l
pequeña p ro p ied a d a g r íc o la y una p o lític a p a ra a tra e r colonos
a l t o ín d ic e de m o rta lid a d y d iv e rs a s d e f ic ie n c ia s s a n i t a r i a s , estim aban
e x tr a n je r o s . Además, c o n sid era b an que p a ra e l d e s a r r o llo a g r íc o la e ra
que l a a cc ió n d e l gobierno e ra fundam ental y d e b ía r e a l i z a r s e creando
n e c e s a rio c a n a liz a r c a p i t a l e s c o n s id e ra b le s , p o r lo que l a l e g i s l a c i ó n
una S e c r e ta r ia de Sanidad y B e n e fic e n c ia , a f i n de poder im plem entar una
d eb ía dar la s f a c ilid a d e s p e r t i n e n t e s . 143
p o l í t i c a de s a lu b rid a d p ú b lic a .
F inalm ente, e x p lic ita b a n a lgunas c o in c id e n c ia s con lo s p re c e p to s de l a
En lo s a sp e c to s económ icos, en m a te ria p e tr o l e r a proponian una p o l í t i c a
C o n stitu c ió n de 1917, por lo que su g e ría n su in c o rp o ra c ió n a l a de 1857.
te n d e n te a s a t i s f a c e r l a s n e ce sid ad e s i n te r n a s d e l p a ís s in d e ja r de
Tal es e l caso de l a su p re sió n de l a v ic e p re s id e n c ia de l a R epública,
cum plir con l a demanda m undial. E sto d eb ía lo g r a r s e b a jo un esquema que
e l derecho de veto d e l p re s id e n te sobre una le y aprobada por e l Congreso
e v it a r a l a d ila p id a c ió n d e l co m b u stib le, como afirm aban que su c e d ía con
que c o n sid e re que es c o n tr a r ia a l i n t e r é s p ú b lic o , l a d e c is ió n de que
e l régim en de concesiones que implemento e l carrancism o y que ocasionó
lo s ju e c e s no provengan de una e le c c ió n p o p u la r, e l p r i n c i p i o de que la
una e x tra c c ió n inm oderada d e l p e tr ó le o . Es a s í que e l E stado d e b ía te n e r
base de l a d iv is ió n t e r r i t o r i a l sea e l M unicipio L ib re y lo s p re c e p to s
la cap acid ad p a ra re s trin g ir la e x p lo ta c ió n de a q u e lla s riq u e z a s
r e fe r id o s a l a g a r a n tía de l a l i b e r t a d d e l t r a b a jo 144, l a jo rn a d a la b o r a l
n a tu r a le s no re n o v a b le s . Asimismo, afirm aban que e ran im p o rta n te la
de ocho horas y l a e lim in a c ió n de l a s tie n d a s de raya y e l pago de
a p lic a c ió n de im puestos e s p e c ia le s a l a i n d u s t r ia m inera y p e tr o l e r a ,

pero v ig ila n d o que no fu e ra n o p re siv o s ni c o n f is c a to r io s , p a ra no


a h u y en tar a lo s c a p i t a l e s . E xplicaban l a im p o rta n cia de l a re o rg a n iz a c ió n
d e l siste m a b a n c a rio m ediante e l e s ta b le c im ie n to de

143 CALERO e t . a l., s /f, pp. 1 5 , 2 3 -2 5 , 46, 47, 52, 53, 58, 59, 7 1 -7 3 , 7 5 -3 0 , 9 9 - 103
y 1 1 3 -1 1 8 .
144 A e x c e p c i ó n d e l a p a r t e en que se p riv a de la lib e rta d de r e n u n c i a r p o r tie m p o
lim ita d o a una p ro f e s ió n .

69 70
j o r n a le s en e s p e c i e .145 f i n a l e s de j u l i o E squivel Obregón s o l i c i t ó a tr a v é s de un g e s to r en la
El re g re so de E sq u iv el Obregón no se c o n c re tó h a s ta 1924. Hubo v a rio s O fic in a de B ienes In te rv e n id o s l a devo lu ció n de l a c asa ubicada en la
problem as a l re s p e c to . Uno de lo s temas c o n f li c t i v o s fue l a d evolución Ciudad de México147. La re s p u e s ta a d ic h a p e tic ió n fue n e g a tiv a ,
de sus b ie n e s y l a s con secu en cias p o l í t i c a s que o c asio n a ro n l a s g e stio n e s argumentando que no s e r ía n d e v u e lta s l a s p ro p ied a d es "en v ir tu d de que
p a ra d ich a d e v o lu c ió n . T o rib io E sq u iv el Obregón fue M in istro en l a época de H u e r t a . " 148
El 11 de ju n io de 1520 l a S e c r e ta r ia de Hacienda e m itió una c i r c u l a r en Jorge Vera E s ta ñ o l, a quien tam bién l e h ablan negado l a devo lu ció n de
l a que se n o tif ic a b a l a orden d e l p re s id e n te s u s t i t u t o , A dolfo de l a sus b ie n e s , i n te r p r e t ó e s t a a c t i t u d d e l gobierno como una p e r s i s t e n c ia
H uerta, p a ra que fu e ra n d e v u e lto s to d o s lo s b ie n e s que se encontraban d e l e s p í r i t u de i n to l e r a n c ia . Vera E sta ñ o l afirm ó que de manera p a r a l e l a
in c a u ta d o s. Para s o l i c i t a r l a d e v o lu c ió n e ra n e c e s a rio a c r e d i t a r la a l a C irc u la r de l a S e c r e ta r ia de Hacienda se in te g r ó una l i s t a de
le g itim a p ro p ied a d de lo s b ie n e s y re n u n c ia r a la r e a liz a c ió n de p e rso n as cuyos b ie n e s perm anecerían in c a u ta d o s .149 Según T o rib io
c u a lq u ie r reclam o por lo s daños y p e r ju i c i o s causados d u ra n te e l tiem po E sq u iv el, de l a H uerta d e c la ró que q u e d arían c o n fisc a d o s lo s b ie n e s de
de la in te rv e n c ió n . De acuerdo con l a c i r c u l a r , quedaron exceptuados de " lo s a u to re s cóm plices y e n cu b rid o res de lo s n e fa s to s crím enes
e s te b e n e fic io V ic to ria n o H uerta, E m ilia Á guila de H uerta, Jorge H uerta, p e rp e tra d o s en lo s m andatarios de l a n ación en fe b re ro de 1913." E sta
E lena H uerta, B e rta Sada de H uerta, F é lix D iaz, F ra n c isco V i l la , J.M a c t i tu d le p a re c ió un gran abuso de p a r te d e l E je c u tiv o c o n tra l a s
M aytorena y Eugenio P a re d es. También l a h acienda de Chapingo, prop ied ad fa c u lta d e s d e l poder j u d i c i a l . 150
de Fernando González y la Compañía Xico de íñ ig o N oriega quedaron El hecho de que se n egara l a d e v o lu ció n de lo s b ie n e s de E sq u iv el fue

e x c lu id a s .146 un sig n o de h o s t i li d a d d e l gobierno de l a H uerta y puso en e v id e n c ia que

A ntes de que fu e ra e m itid o e l documento p o r l a S e c r e ta r ia de Hacienda, l a a cu sac ió n de haber sid o p a r t i c i p e en l a re s p o n s a b ilid a d d e l a s e s in a to

T o rib io E sq u iv el Obregón ya h a b la emprendido a lgunas g e s tio n e s para de Madero e ra un tema aún candente

re c u p e ra r sus p ro p ie d a d e s. Al conocer e l c o n ten id o de l a c i r c u l a r tuvo

más c o n fia n z a de o b te n e r un re s u lta d o a su fa v o r, pues e s ta no le


147 C a r t a de Ig n a c io P e lá e z d irig id a a la O f ic in a d e B ie n e s In te rv e n id o s , 22 d e j u l i o
d e 1 9 2 0 , e n ATEO , s e c c i ó n d o c u m e n t a l , c a j a 6 8 , e x p . 2 8 , f o j a 1 .
se ñ a la b a ninguna r e s t r i c c i ó n . A sí, a
148 C a r t a d e l O f i c i a l M a y o r d e l D e p a r t a m e n t o d e B i e n e s N a c i o n a l e s , s e c c i ó n s e g u n d a ,
p a r a I g n a c i o P e l á e z , 1 9 d e a g o s t o d e 1 9 2 0 , e n A TEO , s e c c i ó n d o c u m e n t a l , c a j a 6 8 , e x p .
28, fo ja
149 C a r t a d e J o r g e V e r a E s t a ñ o l p a r a R o d o l f o R ey es, con c o p ia p a r a T o rib io E s q u iv e l
O b reg ó n y F r a n c is c o L eón d e l a B a r r a , 27 de a g o s to d e 1 9 2 0 , e n ATEO , s e c c i ó n
CALERO e t . a l . , s / f , p p . 1 9 , 2 0 , 3 3 , 4 4 , 62 y 6 4 .
d o c u m e n ta l, c a j a 5 4 , e x p . 1 2 .
C i r c u l a r d e l a S e c r e t a r i a d e H a c ie n d a , 11 d e j u n i o de 1920, e n ATEO , s e c c ió n
150 C a r t a d e R o d o l f o R e y e s p a r a J o r g e V e r a E s ta ñ o l, 6 de o c tu b re de 1920, e n ATEO,
d o c u m e n ta l, c a j a 6 8 , e x p . 2 3 , f o j a 8 .
s e c c i ó n , d o c u m e n ta l, c a j a 5 4 , e x p . 1 2 .

71 72
que im pedia e l re g re so de E sq u iv el a México. te n í a que re v e la r y que no p id ió g a r a n tía s p a ra v o lv e r. También d i r i g i ó

En o c tu b re de 1920 T o rib io E sq u iv el creyó e n c o n tra r una o p o rtu n id a d de una nueva c a r t a a l p re s id e n te de l a H u e rta. Ante l a p ro p u e sta de é s t e de

a c l a r a r su s itu a c ió n cuando, a tr a v é s de l a p re n sa , re c ib ió inform ación v in d ic a rs e a tr a v é s de l a p re n sa , E sq u iv el afirm ó que lo que p e d ía e ra

que afirm aba que F é lix D iaz, quien h a b ia sid o hecho p r is io n e r o en México, ser juzgado a f i n de que c esa ra n " ...lo s e fe c to s de una calum nia,

rehusaba e x p a tr ia r s e y p e d ia s e r juzgado. En una a c t i t u d a p re su ra d a , que in v en ta d a y so s te n id a como arma p o l ín i c a , que envenena l a atm ó sfera

m uestra e l profundo c o n f li c t o de E sq u iv el re s p e c to de e s te tema, dos s o c ia l y p riv a a muchos de l a p o s ib ilid a d de v o lv e r a México y d e l goce

d ia s después é s te envió un teleg ram a a l p re s id e n te de l a H uerta en e l de b ie n e s honrada y leg ítim am en te a d q u irid o s ."

que afirm aba "S i u s te d accede a catando l a le y i r é tam bién a s e r o íd o ." 151 El 4 de noviembre e l gobierno comunicó a E sq u iv el que lo s t r ib u n a l e s

En re s p u e s ta E sq u iv el r e c ib ió un teleg ram a o f i c i a l , donde se l e inform aba e sta b a n a b ie r to s p a ra é l y p a ra todos lo s que d e se ara n v in d ic a rs e de lo s

que F é lix Díaz ha sid o expulsado a Cuba y que s i q u e ría v in d ic a rs e te n ía t e r r i b l e s cargos que pesaban sobre lo s a u to re s de lo s a co n tec im ie n to s

l a p re n sa n a c io n a l y e x tr a n je r a p a ra h a c e rlo . El gobierno aprovechó e l de fe b re ro de 1913. Se afirm aba que se l e im p a r t ir í a am plia j u s t i c i a y

asu n to p a ra r e a l i z a r , además, una campaña de d e s p r e s tig io , que d enota que s i deseaba que lo s t r ib u n a l e s de México lo escu ch aran p odía v o lv e r.

su o p o sic ió n a l re g re so de E sq u iv e l. La p re n sa de Nueva York p u b lic ó un Poco después F é lix Díaz e s c r ib ió a E sq u iv el a c la rá n d o le cómo fu ero n en

cablegram a de l a ciudad de México, en e l que se afirm aba que, s i se le r e a lid a d lo s hechos. Según F é lix Díaz é l no o f r e c ió s e r juzgado, sin o

daban g a r a n tía s , E sq u iv el e sta b a d is p u e s to a v o lv e r a México a h a ce r que e l gob iern o , viendo que é s te no c e d ía a sus demandas, creyó que,

s e n s a c io n a le s re v e la c io n e s sobre l a s m uertes de Madero y Pino S uárez. amenazándolo con un j u ic i o , por tem or, la s a c e p ta r í a . Entonces Díaz

Ante e s t a s itu a c ió n E sq u iv el envió una a c la ra c ió n p a ra s e r p u b lic a d a a l a cep tó e l j u ic i o y e l gobierno lo e xpulsó d e l p a ís . Dice a E sq u iv el que

d i a r i o E x c é l s l o r de México, en donde a firm a que nada comprende que su a c t i t u d n a ció de l a inform ación ú n ica que se te n ía
sobre e l a su n to , p ro c ed e n te d e l g o b iern o .
F inalm ente, e l 1 de d iciem bre de 1920 se p u b lic ó en Omega una carta

151 E s im p o rta n te t e n e r en c u e n ta que l a c a r t a de E s q u iv e l a de l a H u e rta fu e


p ú b lic a de E sq u iv el a l p re s id e n te de l a H u erta. A l l í E sq u iv el afirm aba
e s c r i t a d e s p u é s d e u n n u e v o f r a c a s o d e l o s i n t e n t o s d e l o s m ie m b ro s d e l e x g a b i n e t e
h u e r tis ta s o b re lo s que p e s a b a l a a c u s a c ió n p o l í t i c a de s e r re s p o n s a b le s d e l
que a l n e g a rle l a p o s ib ilid a d de s e r e n ju ic ia d o a F é lix
a s e s i n a t o d e M a d e ro p o r r e a l i z a r u n a d e f e n s a com ún E n e f e c t o , e n a g o s t o d e 1 9 2 0 ,
de l a B a rr a p ro p u s o q u e V e ra E s ta ñ o l e s c r i b a un f o l l e t o e n d o n d e s e h a g a u n a g e s t i ó n
c o l e c t i v a com o m i e m b r o s d e l p r i m e r g a b i n e t e d e H u e r t a " q u e n o s p e r m i t a v i n d i c a r n o s
d e l a s c a l u m n i o s a s a c u s a c i o n e s q u e n o s h a n h e c h o c o n m o t iv o d e l a m u e r t e d e M a d e ro
y P in o S u á r e z ." P o r e l d e l i c a d o e s t a d o d e s u v i s t a V e ra E s t a ñ o l n o p u d o r e a l i z a r
el e n c a rg o .

73 74
m ie n tra s l a a d m in istró e l g o b iern o . Por su p a r te , é s te se h a r ía cargo
Díaz se p e rd ió l a o p o rtu n id a d de h a c e r j u s t i c i a , pues é s te e sta b a en
d e l pago de l a s c o n trib u c io n e s c o rre sp o n d ie n te s a l mismo p e rio d o . Lo
c o n d ic io n es de r e v e l a r lo s nombres de lo s c u lp a b le s de lo s sucesos de
mismo sucedió con l a s c asas de León, a cuyos in q u ilin o s se l e s informó
fe b re ro de 1913. A c o n tin u a c ió n , afirm ó que es f a ls o que e l camino de la
que en a d e la n te te n d ría n que h a c e r e l pago de sus r e n ta s a T o rib io
j u s t i c i a e s t é a b ie r to "p ara n o so tro s" y a c o n tin u a c ió n se p re g u n ta "
E sq u iv e l. Sobre e l rancho de A lb arrad o n es se n o t if i c ó l a e n tre g a de
¿Cómo puede d e c ir s e que io s tr ib u n a le s n a c io n a le s e s té n e x p e d ito s p a ra
m aquinaria a g r íc o la , l a m ayoría en mal e s ta d o . Además, se acordó que e l
a d m in is tra r j u s t i c i a cuando s in h a c e r un j u i c i o , s in más base que rumores
gobierno t e n d r ía derecho de c o b ra r l a re n ta h a s ta e l 30 de a b r i l , fecha
c a l l e j e r o s , se nos ha te n id o d e s te rra d o s p o r más de s e i s años?"
en que c o n c lu ía e l c o n tra to de arren d am ien to que se c e le b ró m ie n tra s e l
Poco después le fu e ro n d e v u e lto s a E sq u iv el sus b ie n e s en c o n d ic io n es de
rancho estu v o in te r v e n id o .154
mucho d e t e r i o r o . 152 El S e c re ta rio de Hacienda d e l g o bierno d e l p re s id e n te
En lo s a co n tec im ie n to s n a rra d o s queda c la r o que a p e s a r de que le fueron
Á lvaro Obregón, A dolfo de l a H uerta, e m itió un acuerdo en marzo de 1921
re g re sa d o s a E sq u iv el sus b ie n e s, la a cu sac ió n sobre su su p u esta
en e l que ordenó l a devo lu ció n de lo s b ie n e s de T o rib io E sq u iv el Obregón:
re s p o n s a b ilid a d en e l a s e s in a to de Madero no pudo s e r a c la ra d a . Su
A si, se n o t if i c ó l a d e s in te rv e n c ió n de l a casa ubicada en l a C olonia in te n c ió n de s e r juzgado, es d e c ir su s o l i c i t u d de que e l gobierno
Roma y de sus c asas y rancho de L eón.153 De acuerdo con lo e s tip u la d o por h i c i e r a una a cu sac ió n form al a p a r t i r de l a c u al é l p u d ie ra d e fe n d e rse ,
e l g o b iern o , T o rib io E sq u iv el ren u n ció a su derecho p a ra h a ce r c u a lq u ie r l e fue negada. O tro elem ento a te n e r en cu en ta p a ra e n te n d e r l a d e c is ió n
reclam ación por daños y p e r ju i c i o s causados d u ra n te e l tiem po que duró de E sq u iv el de perm anecer en Nueva York fue l a im p o rta n cia a d q u irid a su
l a in te rv e n c ió n . R especto a l a c asa de l a C olonia Roma, E sq u iv el se e s tu d io de abogado y l a s d i f ic u l ta d e s p a ra t r a s l a d a r e s t e a México. En
comprometió a re n u n c ia r a l a s r e n ta s que generó c o n secu en cia, E sq u iv el c o n sid e ró que l a s c o n d ic io n es d e l re g re so no
e sta b a n dadas y perm aneció en E stados Unidos h a s ta e l f i n d e l gobierno
de Obregón.
152 P a r a a rg u m e n ta r su p e tic ió n E s q u iv e l expuso que ya h a b la n s id o d e v u e lto s lo s

b ie n e s de M anuel G a rz a A ld a p e , Jo rg e V e ra E s ta ñ o l y D a v id de la F u e n te , q u ie n e s

ta m b ié n h a b ía n p e r te n e c id o a l g a b in e te d e V i c to r ia n o H u e r ta . C a r ta d e I g n a c io P e lá e z

p ara el S e c r e ta r io de E s ta d o y del D esp ach o de H a c ie n d a y C ré d ito P ú b lic o , 21 de

e n e ro de 1921, e n A TEO , s e c c ió n d o c u m e n ta l, c a ja 68, exp. 28, fo ja 5.

154 I b í d .
76
75

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