CAPACIDAD INSTALADA

La capacidad instalada es un concepto muy utilizado cuando de programar procesos productivos

se requiere y hace referencia a la disponibilidad de los medios de producción necesarios para
poder operar o prestar un servicio sin contratiempos y con los mayores niveles posibles para
obtener la máxima ganancia. Casi siempre está asociada a la infraestructura requerida y la
dotación de equipos inmersa en dicha estructura. De tal forma que una mayor infraestructura
implica una mayor capacidad instalada pero a su vez un mayor costo también, por lo que calcular
o definir muy bien la capacidad instalada es clave para empezar un nuevo negocio con unos
niveles eficientes de producción y altamente competitivos. Pensemos por ejemplo en una idea de
negocio concerniente a una “Guardería para mascotas”, en este caso es importante delimitar
cuantas mascotas estaremos en capacidad de atender en nuestro negocio, para ello decidimos
que tendremos una finca con piscina, una zona para alimentación, aseo, juegos y recreación, etc.
Si en dicho terreno estamos en capacidad de recibir 100 mascotas en excelentes condiciones (sin
ningún tipo de hacinamiento) que puedan obtener un muy buen servicio todas al tiempo sin
ningún inconveniente y que nosotros podamos realizar nuestras operaciones sin contingencias
que afecten la calidad de nuestra atención pues podemos decir que ésta es nuestra capacidad
instalada.
CAPACIDAD INSTALADA

En los proyectos de emprendimiento y cuando se están surtiendo las etapas de planeación de un

nuevo negocio es una tendencia bastante frecuente sobreestimar la capacidad instalada,
normalmente esto sucede por el optimismo característico de los emprendedores y el empeño en
la materialización de los sueños vistos como proyectos hechos realidad sin embargo es importante
aprovechar este concepto de capacidad instalada para trabajar de manera objetiva la planeación
de nuestra capacidad productiva futura. Veamos otro ejemplo para entender la magnitud de la
importancia de este tema:

Supongamos que debido al desarrollo urbanístico de un pueblo cercano a la capital y al clima

cálido característico de la zona ha empezado a verse un incremento en la llegada de turistas a la
región. Dada esta oportunidad de negocio detectada hemos decidido montar un Hotel que
ofrezca además de los servicios tradicionales tales como habitación, comida, zonas húmedas y
recreación unos recorridos agro-turísticos gracias a un convenio con algunas fincas aledañas
donde nuestros huéspedes podrán conocer cómo se vive un día en el campo Colombiano, ordeñar
vacas y hacer un sinnúmero de actividades rurales como parte de las opciones para su ocio y
diversión durante los días que estén hospedados en nuestro hotel. En este ejemplo a diferencia de
un Hotel tradicional dónde el cálculo de la capacidad instalada estará dado por el número de
habitaciones que tenga dispuestas el hotel para la atención y por supuesto el correspondiente
número de personas por habitación, aquí entran a jugar otros factores importantes a considerar.
Como nuestra oferta de valor radica en las experiencias agropecuarias para los huéspedes
debemos considerar la capacidad instalada de nuestros aliados estratégicos que en este caso son
los finqueros de la zona, ya que para generarle valor a nuestro clientes debemos estar en
capacidad de hospedarlos cómodamente en nuestras instalaciones pero también garantizarles
que pueden disponer de las actividades agrícolas y pecuarias en el momento que ellos lo deseen
para que su estadía en nuestro hotel sea una experiencia inolvidable.
CAPACIDAD INSTALADA

Manteniéndonos en el mismo ejemplo Imaginemos que tenemos en nuestro hotel tenemos 20

habitaciones con capacidad para 80 personas, que pasaría si los finqueros de la zona no pueden
recibir más de 20 personas por día (en temporada alta)? Y adicionalmente no solo tienen contrato
con nuestro hotel sino que otros competidores de la zona que también quieren aprovechar esta
nueva bonanza de turistas han firmado convenios similares al nuestro? Esto es una clara
ejemplificación del cuidado que debemos tener al momento de calcular nuestra capacidad
instalada ya que no existe un modelo teórico tan preciso que nos pueda orientar de manera
significativa en este ejercicio, podemos quizás orientar nuestros esfuerzos teniendo como guía los
siguientes preceptos:

• Considere los costos que involucra tener una capacidad instalada sobre estimada vs. la sub
utilización de una infraestructura adquirida. Que sucedería si nuestra capacidad instalada es
para 100 huéspedes y aún en temporada alta no llegan nuestro hotel a contar con 60?

• Tenga en cuenta la capacidad económica y financiera para el momento del montaje: Nunca
está de más ser austeros en procesos de arranque empresarial, sobre todo teniendo en cuenta
que mientras se lograr el punto de equilibrio nuestro negocio nos entregará muchas
necesidades de inversión y pocas utilidades.

• Revise otras variables externas complementarias: Normalmente los cálculos de capacidad

instalada se realizan de adentro hacia afuera, por ejemplo en el caso de una empresa de
producción de vestidos de baño, la capacidad de las máquinas y los obreros delimitarán
nuestra capacidad instalada máxima pero no olvidemos que como en el ejemplo que
mencionamos del hotel, pueden existir otras variables del entorno cercano a la compañía y
complementarias que nos darán orientación sobre los niveles de producción o servicio que
estamos en capacidad de ofrecer y que nos definirán las adquisiciones de infraestructura
necesaria para la puesta en marcha de nuestro futuro negocio.