LOS DISCAPACITADOS EN EL EVANGELIO DE JUAN

Min. Raymundo Ramos Dávalos

PRIMERA PARTE
Introducción
Llaman mi atención dos casos muy interesantes en el evangelio de Juan
capitulo 5 y capitulo 9, los cuales refieren a un tipo de persona muy común en
nuestra fría sociedad actual, me refiero a las personas con capacidades
diferentes y que en este estudio llamaremos sin ninguna intención peyorativa,
discapacitadas; hoy llamadas también, personas con capacidades diferentes.
Entenderemos por persona con capacidades diferentes a todo enfermo que
tiene su capacidad limitada por causa de algún problema físico que lo ha lisiado
temporal o definitivamente (Brown, 1978).

El sector de población discapacitada, al igual que nosotros, se encuentra

dentro de un mundo que perece y presenta problemas de todos tipos los cuales
se acentúan cuando uno sufre de mayores desventajas para hacerles frente.
Es como un partido de futbol y, valga la comparación que no hace justicia del
todo al caso, en el que uno de los equipos se ve disminuido al perder a uno de
sus más valiosos jugadores por causa de una injusta expulsión y quedar en
desventaja para salir adelante, únicamente, con un arma, al menos.
El evangelio de Juan tiende a ser espiritualizado, helenizado o bien,
suprateologizado; no obstante, pocas veces consideramos su carácter sensible
para con quien sufre (a diferencia, por ejemplo, del evangelio de Marcos) y de
las repercusiones actuales en nuestra religiosidad y vivencia social.
Por tal motivo, en una forma breve pero crítica, trataré el tema de la
discapacidad, con la intención de ampliar un poco más la verdad de Dios desde
un enfoque del Libro de los Signos (Brown, 1978).

Realizando una teología bíblica

A) Apuntando los textos

Juan

5:1 Después de la sanidad al hijo del oficial del rey, hay una fiesta en
Jerusalén.

5:2-3 Existe un lugar de esperanza de sanidad para los discapacitados.

5:4 El lugar milagroso tenía limitantes o condiciones.

5:5 Tiempo de la discapacidad que refleja su gravedad.

5:6-9 Jesús sana voluntariamente al discapacitado y la acción se realiza en

sábado.

5:10-13 Reclamo de las autoridades religiosas al ex-discapacitado y una

explicación a medias por parte de este.

5:14 Recomendación de Jesús al hombre sano con relación al pecado.

5:15 Identificación del sanador por parte del discapacitado.

5:16-18 El obrar en sábado y apego al Padre como causa de la persecución y

búsqueda de muerte de quien sanó al discapacitado.

7:23 Jesús recuerda esta sanidad a los religiosos inconformes.

9:1-5 Un discapacitado es motivo de cuestión teológica, más que de

sensibilidad humana, pero no así para Jesús.

9:6-7 Sanidad del discapacitado por parte de Jesús.

9:8-10 Cuestionamiento de la sociedad morbosa hacia el discapacitado.

9:11-12 Nuevamente, explicación a medias por parte del discapacitado.

9:13-15 Cuestionamiento del grupo religioso al ex discapacitado porque era

día de reposo y la explicación de este.

9:16-17 Discusión teológica sobre el sanador del discapacitado.

9:18-23 Cuestionamiento del grupo religioso (Fariseos) a la familia del

discapacitado por causa de su incredulidad y respuesta egoísta de sus padres.

9:24-29 Obsesión farisea por el sanador y desinterés ofensivo por el

discapacitado.

9:30-34 Defensa del discapacitado a favor de su sanador y rechazo por parte

del judío.

9:35-39 Encuentro de fe entre Jesús y el ex discapacitado.

9:40-41 Reprimenda de Jesús hacia los engreídos fariseos, los

verdaderamente discapacitados.

B) Clasificación de los textos en categorías

1. Tiempo y momento de la sanidad del discapacitado:

Juan

5:1 Después de otra sanidad en una fiesta en Jerusalén.

5:5-38 Años en discapacidad.

5:6-9 Sanidad en sábado.

5:16-18 Jesús y el Padre obran en sábado, a pesar de todo.

7:23 Es más importante la vida humana que el día o la religión.

9:13-15 Cuestionamiento fariseo por causa del día sábado.

2. Sanidad limitada para el discapacitado

Juan

5:2-3 Hay esperanza en el lugar.

5:4 Tiene condiciones la sanidad y más aún para el discapacitado.

5:14 Si no retorna al pecado.

3. Sanidad y sensibilidad para el discapacitado

Juan

5:6-9 Jesús sana al discapacitado como respuesta a su fe.

5:16-18 Jesús es perseguido por sanar en sábado y por la unión que

manifiesta con el Padre.

9:1-5 Sensibilidad por parte de Jesús que marca la diferencia con la del
mundo.

9:6-7 Jesús sana al ciego sin que él se lo pida.

9:35-39 Jesús se acerca el ex ciego al saber de su expulsión.

4. Sanidad y sensibilidad para el discapacitado

Juan

5:10-13 Reclamos por parte de los religiosos.

9:1-5 Insensibilidad hacia los discapacitados de Jesús.

9:8-10 Cuestionamiento de la sociedad morbosa.

9:11-12 Explicación a medias del discapacitado.

9:13-34 Cuestionamientos, confusiones, desinterés, agresión y rechazo hacia

el discapacitado.

5. El discapacitado y Jesucristo
Juan

5:6-9 Jesús sana discreta y completamente.

5:14 Jesús recomienda al discapacitado.

5:15 Jesús es identificado por el discapacitado (paralítico).

9:6-7 Jesús sana al ciego con amor.

9:30-34 El discapacitado a favor de Cristo.

9:40-41 El discapacitado adora y reconoce a su sanador.

C) Resumen teológico

1. El mejor momento para que Cristo sane al discapacitado es cuando éste lo

necesite, el tiempo en que Dios hace fiesta por la liberación del oprimido
(Zorrilla, 1981), es fiesta para Dios y para quien sufre, aunque parezca un
momento difícil; la esperanza siempre estará con él.

2. Hay una sanidad, para los discapacitados, condicionada por el mundo y el

tiempo, a algunos les roban la oportunidad de una u otra forma; otras veces el
tiempo los limita, sin embargo, también dependerá de ellos el condicionamiento
de su sanidad.

3. Jesús muestra en este evangelio gran sensibilidad más allá del cumplimiento
de otra señal, muestra interés y amor aún en la gente que convive
«banalmente» (Juan 2), porque estará dispuesto a sufrir y morir por causa del
discapacitado a quien sana totalmente, porque la sanidad que nos otorga Jesús
no es incompleta.

4. La situación es muy diferente, en cuanto al mundo y a la religión, su

preocupación se centra en sus propios y mezquinos intereses que surgen a
causa de su propia desensibilización, hacia quienes están en desventaja. Al
grado de hacer presión, burla e injusticia.

5. Jesucristo, sin aspavientos apoya, enseña y sana a quien no puede (al

discapacitado) y lo hace capaz; al «poderoso» lo muestra incapaz,
«discapacitado». El supuestamente discapacitado se vuelve más capaz cuando
reconoce y sirve a Cristo su sanador y se entrega a su creador y restaurador.

II. Otras opiniones teológicas

a) El milagro del paralítico en Juan 5 es diferente al descrito en los

evangelios sinópticos en cuanto a su forma, ya que describe que Jesús
realiza el milagro en sábado, no argumenta a su favor el sentido
humanitario (Lucas 13:10-17), ni que es mayor que el templo (Mateo
12:5 ss.). Él explica que como hijo de Dios hace aquello que su Padre
realiza; los dos intervienen incesantemente y Jesús actúa en nombre de
Dios.

b) «En Juan 9 por un lado, Jesús es el dador de los beneficios de la

humanidad, la cual apartada de Él, está en un estado de completa
desesperanza; y por otro lado, no viene a un mundo lleno de hombres
concientes de su propia necesidad» (ejemplo: los fariseos), C.K. Barret
(1962).
 c) «Juan no ofrece ningún modelo de un cristianismo sin dogmas, su
característica consiste más bien en que ofrece un único dogma a saber,
el dogma cristológico de la unión de Jesús con el Padre», E. Kasemann
(1983).

d) Los capítulos que tratan del ciego y del paralítico pertenecen al Libro de
los Signos, donde las palabras y las obras de Jesús se dirigen a un
amplio auditorio el cual provoca una crisis de fe. «Un libro donde Dios
desciende hasta lo más intrascendente» Raymond E. Brown (1978).

e) En Juan 5 descubrimos que el Padre y el Hijo actúan en conjunto y la

obra a es de salvación y no de creación (el día de reposo). «No se
puede distinguir entre la obra del padre y la obra del hijo, pues los dos
están siempre presentes en ella» Dr. Mario Veloso (1975).

f) «La teología juanica invierte el orden al colocar a los poderosos abajo y

arriba a todos los hombres que creen que Jesús es el hijo de Dios, y
creyendo sean agentes de vida y bondad a todos los pequeños del
mundo. La teología de Juan nos desafía a vivir el evangelio como Cristo
lo vio, por la vida de los que están sujetos a un estado de antivida. ¿Que
significa permanecer en Cristo? La respuesta la encontramos en nuestro
compromiso cristiano con los desheredados de la Tierra si es que
queremos cumplir su evangelio» Hugo Zorrilla (1981).

Conclusión

Los discapacitados en Juan representan a la humanidad, hoy por hoy,

paradójicamente deshumanizada por no decir discapacitada, que requiere de la
liberación. Ésta empieza en el momento en que surge la necesidad del hombre,
de los desheredados o discapacitados por la cercanía de Cristo.
El mundo y aun los que no son del mundo, en palabras de Juan, no siempre
son muy sensibles hacia aquellos que sufren, Jesús sí, antes y ahora, él ha
sido identificado como despreciado y como guía de ellos, aunque muchos en
Juan tratan de identificarlo como refugio y sanado. Juan 1:38 dice, (Jesús a los
discípulos de Juan el Bautista) “¿Qué buscáis?” y en Juan 20:15 expresa: “¿A
quién buscáis?”. El mismo Juan el Bautista preguntó y Jesús respondió de una
manera sencilla: “Los ciegos ven, los cojos andan, los leprosos son limpiados,
los sordos oyen… (Mateo 11:5), en una palabra los discapacitados son
capacitados porque el reino de Dios ya está aquí y está en Cristo, «es presente
y es vida», como dice Juan.
Muchos discapacitados son más sensibles que nosotros, es curioso, pero en mi
iglesia algunas de las personas más comprometidas en el servicio de
liberación, con el deseo anunciar la vida en abundancia (Juan 10:10) que
ofrece Cristo, son las personas «discapacitadas» físicamente, pero las más
capacitadas por él, en su espíritu. La iglesia, en nuestros tiempos, necesita
acercarse como Cristo lo hizo con el necesitado y con el desesperado, y aplicar
la mejor pastoral en ellos, la del buen pastor (Juan 10:11) que da su vida por
las ovejas, aun por aquella coja y pequeña.
Finalmente evitemos cometer el error de Pedro (Juan 21) al preguntar si algún
«discapacitado» es digno de merecer todo, porque Jesús responderá: “Si
quiero que el quede hasta que yo venga, ¿Qué a ti? (vers. 23).

Bibliografía

Barret, C.K. (1962) The Gospel according to St John, an introduction with

commentary and notes on the Greek text. London: S.P. C.K.

Brown, E. Raymond (1978) El Evangelio según Juan I-XII, Madrid: Cristiandad.

Kasemann, Ernst (1983) El Testamento de Jesús, Salamanca: Sígueme.

Veloso, Mario (1975) El Compromiso Cristiano. Un estudio sobre la actualidad

misionera en el evangelio de San Juan, Argentina: Zunino Ediciones.

Zorrilla, Hugo C. (1981) La Fiesta de Liberación de los Oprimidos. Relectura de

Juan 7:1-10:21, San José, Costa Rica: Sebila.