TEOREMA ENTREVISTA A JOSE FERRATER MORA TEOREMA prosigue en este mimero su serie de entrevistas a figuras representativas del pensamiento espafiol actual. El propésito de esta serie es ofrecer al lector una imagen viva de esos autores y perfilar un panorama de la presente situa- cién filoséfica. José Ferrater Mora, pensador polifacético, es el filésofo espafiol mds leido entre nosotros desde Ortega. Nacido en Catalufia (1912) y profesor de filosoffa en Norteamérica {desde 1949), Ferrater muestra en su obra un tinte anglo- sajén, que lo distancia, acaso, de muchos filésofos de su generacién, preferentemente influidos por la filosofia alemana, y lo acerca, ciertamente, a los lectores de mas recientes Promociones, entre los que ejerce indiscutible magisterio. La copiosisima obra de Ferrater Mora, desde el Diccio- nario de Filosofia a sus Indagaciones sobre el lenguaje, pa- sando por El ser y la muerte y El ser y el sentido, es un alarde de informacidn, versatilidad y equilibrio. Una de las principales aportaciones de Ferrater es el «integracio- nismo» filoséfico, fundado en la sintesis de contrarios, que primero se manifest6 de una manera «ontoldgican e histé- rica, y posteriormente ha cobrado un aspecto metodoldgico y critico. Las obras ensayisticas, en varios idiomas (caste- llano, cataldn, inglés), de Ferrater Mora son muy nume- rosas. Entre las ultimas se cuentan Las palabras y los hombres y El hombre y su medio y otros ensayos. En 197i, José Ferrater Mora presidio en la Universidad de Valencia el Simposio sobre «Filosofia y Ciencia en el pensamiento espafiol contempordneo (1960-1970)», cuyas actas apareceran en breve publicadas por Editorial Tecnos. 97TEOREMA ENTREVISTA T.: La consideracién diacrénica de tu obra, que tan fuerte impacto ha causado en el ambiente filosdfico espaiol de la tiltima década, se asemeja a un viaje a través de muchas y muy diversas geografias. ;Cudles son o han sido las prin- cipales claves y los estimulos determinantes de tal itinerario? F.: Estas cosas son mas dificiles de ver «desde dentro» que «desde fuera»; uno mismo no se da siempre bien cuenta de por dénde «pasd», dénde «se pard», hacia donde «avan- z6» (o «retrocedié»), etc. La dificultad apuntada es en mi caso algo mayor que en otros a causa de lo que certera- mente se llama en la preguata «mucl y muy diversas geografias». Resulta que me he interesado, en efecto, por muchos y bastante diversos temas filos6ficos, por un mimero crecido de tendencias: en realidad, he padecido un poco de la abundancia —quiero decir, claro, de la abundancia de intereses. De todos modos, sospecho que pueden ya trazarse algunas «ineas» de «desarrollo», En lo que concierne a los temas, he ido pasando de cuestiones concernientes al hombre y a su historia, a cuestiones concernientes al cono- cimiento y al lenguaje; esto parece una «reduccidn» de intereses, pero no lo es. En lo que se refiere a disciplinas filoséficas —caso que las haya—, mi interés ha ido pasando de la filosofia de la historia y de la metaffsica, a la episte- mologia, a Ja «ontologia» (no metaffsica) y a la filosofia de la ciencia. En cuanto a tendencias filosdficas, he ido pasando (para ser breve) de la fenomenologia, incluyendo Ja llamada «fenomenologia existencial» al andlisis. Sin embargo, todo eso describe bastante imperfectamente «las principales claves y los esiimulos determinantes» del citinerarion que se me pide. Por ejemplo, no creo que los temas relativos al «hombre» y a la chistoriay sean hoy para mi menos interesantes que antes; son interesantes de otra manera y desde otros puntos 99100 Teorema enirevista de vista. Ademds, y sobre todo, tengo la impresién de que casi desde el «principio», con no pocas limitaciones, tanteos, vacilaciones y, no digamos, torpezas, he tenido ciertas «conje- turas» que se han ido precisando y que han ido encontrando «contextos filosdficos» cada vez mas adecuados para la manifestacién de la «filosofia integracionista», por la cual se me pregunta un poco mas tarde. T.: El pensamiento de los hombres de tu generacion que han hecho filosofia fuera de Espafia es hoy entre nosotros, y cada dia mds, objeto de interés y de andlisis critico. {Hay un denominador comin a este pensamiento? Qué justificacién tiene para ti este fendmeno? F.: El unico denominador comin a ese pensamiento espafiol fuera de Espafia es —y ya es bastante— el haberse desarrollado independientemente de las circunstancias politico- sociales que han interferido en el pensamiento en Espafia en los ultimos treinta y pico de afios. Creo que esto es lo que ha suscitado el mencionado interés. T.: Pasando a tu vida personal, ¢qué ambiente filoséfico habia en la Universidad de Barcelona y en la Catalufia de tus tiempos juveniles, y en qué medida influydé en tu dedi- cacion a la filosofia? F.: Habfa un ambiente de renovacién universitaria muy intenso, no especialmente un ambiente de renovacién filosé- fica. Este hubiera seguramente venido luego, pero habia que pasar por la primera etapa, y ésta se interrumpid con la guerra. El] principal motor de la renovacién universitario- filosdfica en Barcelona fue el malogrado Joaquin Xirau, cuyos intereses filos6ficos estaban principalmente orientados en la fenomenologia. No creo que el ambiente filosdfico de la Universidad influyera en lo mds minimo en mi dedicacién a la filosofia, por la sencilla razdn de que ésta se desperié en mi muy temprano, en afios pre-universitarios, no sé si para bien o para mal (durante un tiempo me atrajo la ciencia, especialmente [a ffsica, y atin me pregunto si no hubiera sido mejor...).