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6.

Las Lenguas Germánicas

Constituyen una de las grandes familias que se reparten la mayoría de los territorios de la Europa continental y
va a dar lugar a varias de las lenguas literarias más importantes de la cultura europea. Todos conocemos la expansión de
las lenguas germánicas de la actualidad, sin embargo esa expansión la experimentan estas lenguas a partir de nuestra
Edad Media, su patria originaria ocupaba un territorio muy reducido y, también estas lenguas sufrieron un periodo de
etnogénesis en los territorios europeos donde se asentaron, y desarrollaron en ellos las características que las definen, es
decir, no son lenguas que porten un tipo bien diferenciado de indoeuropeo, sino que tienen rasgos de lenguas orientales,
y los rasgos que las definen como lenguas germánicas, los desarrollan en su patria originaria, que habría que situar en
los territorios del Norte de Europa, en la Península de Jutlandia, Dinamarca actual, y una cierta extensión en las costas
del Báltico, tanto del territorio continental como, quizá del Sur de la Península de Escandinavia, esta región del Sur de
Suecia, que conocemos como Götaland, y probablemente, la isla de Gotland, que parece ser “Tierra de Godos”.

Desde estos territorios se expanden por la costa del Báltico, hasta llegar al Vístula, hay una primera expansión,
probablemente lenta, y cuando alcanzan el Vístula es cuando empiezan una rápida expansión hacia el Sur.
Fundamentalmente siguen las cuencas de los grandes ríos, el Elba, el Oder, el Vístula, y penetran entonces en los
territorios continentales europeos.

Entre los siglos VII a.C., que es donde podríamos situar esa patria originaria, y el I a.C., y I d.C., las tribus
germánicas se expanden de una forma muy libre por los territorios del continente, alcanzan al Este las riberas del
Vístula, y al Oeste las del Rin, y estas fronteras del Rin, son importantes porque es la frontera del Imperio Romano, los
germanos llegan a las fronteras del Rin, antes del Imperio y atraviesan frecuentemente esas fronteras y van, primero
luchando con los galos y muy pronto bajando al Sur, y topándose, por primera vez con los romanos, y durante siglos,
entre el Imperio y los germanos se mantiene una tensa calma, el Imperio logra contener durante siglos a los germanos,
al Este del Rin y al Norte del Danubio.

Nuestras primeras noticias de los germanos, los tenemos de sus encuentros con las grandes culturas, la primera
noticia nos la da un viajero griego, que también es de los primeros que habla de los celtas, Piteas, del siglo IV a.C., que
nos habla de la tribu de los teutones, “teuta” es la palabra germánica que significa “pueblo” y, todavía nos sitúa a estos
teutones en las costas del Mar del Norte, esta tribu penetra en la Gallia en el siglo I a.C., unida a los cimbrios y, son los
que se unen a los galos e inflingen terribles derrotas a los romanos y, son detenidos por Mario en el Norte de Italia,
después de Mario y de otras guerras con los germanos, el siguiente que se enfrenta a una tribu germánica es César, que
derrota a los suevos, derrota a Ariovisto, y lo que logra César con su habilidad guerrera y habilidades diplomáticas es
pactar con los suevos dándoles territorios al otro lado del Rin, al Este del Rin, es decir, es César el que traza la frontera
defensiva, nos habla César, nos habla Plinio, y, sobre todo nos habla Tácito, que dedica una obra entera titulada
Germania a describir la historia y costumbres de los germanos.

En el siglo I d.C., se producen constantes confrontaciones de Roma con las tribus germánicas del Rin. En la
Germania, Tácito nos sitúa a la mayor parte de las tribus germanas en una región limitada al Oeste por el Rin, al Sur por
el Main y, al Este por el Oder, y describe muchas cosas, su religión, pero no nos da el nombre de los dioses, sino su
equivalente romano.

En la Columna de Marco Aurelio está representada una de las instituciones que describe Tácito, que escribe en
pleno imperio, cuando ya se han producido todos los desastres de los primeros emperadores y, para la época, los
germanos, representaban para los romanos una especie de romanos primigenios. El Thing es simplemente la asamblea.

En realidad nosotros dividimos las lenguas germánicas dialectalmente en tres grupos, occidental, oriental y
nórdico, esta división es muy antigua, de hecho está ya en el árbol de Schleicher, es actualmente discutida, pero nadie
ha ofrecido una agrupación alternativa, las grandes dudas son si oriental y nórdico pertenecen a dos grupos diferentes o
si están estrechamente emparentados, pero claro, cuando coinciden, que es muy frecuentemente, presentan las
coincidencias en arcaismos, lo cual es muy poco definitorio y, las lenguas occidentales si que han sufrido
dialectalizaciones muy profundas a lo largo del tiempo, del grupo oriental sólo conocemos una lengua, un dialecto, el
gótico, atestiguado desde el siglo I d.C., del grupo nórdico conocemos una forma dialectal arcaica que solemos llamar
antiguo nórdico, o antiguo norse, que algunos autores tienden a considerar como una especie de germánico común, y
luego hay un hueco y volvemos a encontrarnos lenguas nórdicas ya en la Edad Media, a partir del siglo XII, con unos
dialectos que derivan en lenguas literarias. El grupo occidental va a dividirse en tres grandes apartados, por un lado el
que da lugar al inglés, es decir, las lenguas germánicas que migran hacia las Islas Británicas y ahí evolucionan, y las
lenguas continentales, divididas en dos ramas, alto y bajo alemán.

Las lenguas germánicas comparten algunos rasgos que las identifican, que les son propios y exclusivos, que
nos permiten decir de cada nuevo documento que aparezca si es germánico o no, igual que ocurre con el celta, donde la
aparición o no, de P, indicaba si una lengua es celta, aquí es un cambio global de las oclusivas, que no se corresponden
con las indoeuropeas, sino que rotan, la sonora aspirada del indoeuropeo, aparece como sonora, la sonora indoeuropea
como sorda, la sorda indoeuropea en fricativa sorda, este rasgo nos lo identifica como germánico y no como otra rama.

Hay dos rotaciones consonánticas, una prehistórica que define el grupo germánico, y otra más reciente que
define el alto alemán frente al resto, además han pasado una etapa de acento de intensidad inicial, que provocó cambios
condicionados, las sonantes vocalizan con u, tienen unas declinaciones determinadas del adjetivo, tienen un pretérito
irregular, derivado del pretérito indoeuropeo con alternancias vocálicas.

Tenemos testimonios de estas lenguas desde época bastante reciente, las más antiguas son esas inscripciones en
antiguo nórdico, que se extienden entre el 200 y el 600 d.C., pero que son muy breves y repetitivas, la lengua más
antigua de testimonio largo es el gótico, que fechamos en el 350 d.C., y de otras lenguas germánicas no volvemos a
tener testimonio hasta que las tribus germánicas que invaden el Imperio Romano logran asentarse en sus territorios
actuales y son cristianizadas, tanto los godos, como el resto de los hablantes de lenguas germánicas empiezan a ser
conocidos y sus lenguas cuando son cristianizados.

Los testimonios más antiguos son breves textos en inscripciones rúnicas, es decir, en escritura Futhark
(ᚠᚢᚦᚫᚱᚲ ), consta este alfabeto rúnico de 24 letras, de origen discutido, se han propuesto muchas teorías, no sabemos
cuando se adapta, a lo mejor los inventores adaptan varios alfabetos distintos, las más antiguas aparecen en el siglo I
d.C., y este tipo de escritura sigue en uso hasta la Baja Edad Media, conviviendo con la escritura latina, se suelen
distinguir dos periodos de este alfabeto rúnico, las runas antiguas entre el 150 y el 750 d.C., las runas del periodo
vikingo del 750 al 1050 y, las runas tardías. Las inscripciones están dispersas porque están en pequeños objetos, y ya en
época vikinga lo que tenemos son inscripciones monumentales en piedra, que se usaban como demarcación.

Ya decíamos que de todas las lenguas de los germanos orientales sólo conocemos una, la lengua de los godos,
que son el otro grupo de tribus que se enfrentaron a los romanos en la segunda y definitiva oleada, ellos mismos
comienzan esa segunda oleada, cuando en el siglo IV a.C., atraviesan el Danubio, y se asientan en la Mesia, huyendo de
la presión de los hunos, el origen era la zona del Vístula, en el intermedio -desde el origen hasta cruzar las fronteras del
Imperio-, se dividen en varias ramas, una que llamamos ostrogodos y, otra que llamamos visigodos, a partir de ahí se
lanzan a una migración que les hace recorrer todo el territorio europeo, una vez que atraviesan la frontera del Imperio y
tras varias rebeliones arrasan el Imperio, llegan a entrar en la Capadocia, arrasan la Capadocia, que es un territorio muy
importante, se llevan cautivos, vuelven a las fronteras del Danubio, vuelven a atravesar, entran en la Península con las
guerras góticas que nos cuentan los historiadores griegos y, luego se lanzan a migrar hacia el Occidente, atacan Roma,
se romanizan y acaban fundando un enorme reino romanizado, el primer reino romano-germánico, que ocupa
prácticamente la mitad de la Gallia, y gran parte de Hispania, y donde, siendo presionados por los francos, acaban
situándose tras los Pirineos, y mantienen un reino visigodo en España del que sabemos bastante.

Es en el siglo IV cuando un godo, prisionero de los romanos en Tesalonika, dónde en las incursiones entran y
arrasan la Capadocia llevándose profesionales consigo, estos profesionales se instalan a vivir con los godos al otro lado
del Danubio, y hay una segunda generación de griegos capadocios cristianos viviendo con los godos, cuyos hijos son
medio godos, medio capadocios. Ulfilas es enviado a un concilio y más tarde a evangelizar a sus compatriotas, pero lo
que necesita es un alfabeto para poder escribir la lengua con un sistema de escritura precario, el alfabeto que crea está
basado en la cursiva griega, tiene influencias del latín y del rúnico.

El principal testimonio de la lengua gótica es la traducción de la Biblia a la lengua gótica, en un manuscrito


que conocemos como Codex Argenteus, que data de la primera mitad del siglo VI, se conservan 187 páginas con texto
de los Evangelios de Mateo, Juan, Lucas y Marcos. Además de las traducciones hay algunos textos más, vinculados a
este Codex Argenteus, no son traducciones, sino comentarios, o acotaciones. A parte de este manuscrito, conocemos lo
que se llama tradicionalmente Anillo de Petroassa, con una inscripción rúnica, escrita en gótico.

Después del gótico, lo que tenemos son lenguas que conocemos a partir de la segunda mitad del siglo VIII
d.C., y van entrando en escena las lenguas y los pueblos a medida que se van cristianizando, unos se cristianizan muy
pronto, otros más tarde, cuando más al Norte, más tarde, las lenguas nórdicas las conocemos desde el siglo XII, que es
cuando se cristianiza a los vikingos, islandeses, daneses, suecos y noruegos, son lenguas que van a derivar en grandes
lenguas literarias, el antiguo islandés es el único nórdico que nos queda. De hecho desarrolla una potentísima literatura
medieval y, es la lengua en que se transmiten las viejas costumbres de los germanos.

De las lenguas occidentales, por un lado tenemos el inglés antiguo, llamado también anglo-sajón, son los
pueblos que pasan de la isla al continente en el siglo V. El resto de las lenguas occidentales son dialectos del continente
y, están divididos en dos grupos: alto y bajo alemán, divididos según experimenten o no la segunda rotación
consonántica y, además geográficamente, los dialectos del bajo alemán son los que se hallan en las zonas bajas del
Norte del continente.

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