AGORA —Papeles de Filosofia (1999), 181: 55.67 ISSN o21t-s682 LA NECESIDAD DE LA BIOETICA (REPENSAR EL SUJETO) Javier Sadaba, Universidad Autonoma de Madrid Resumen Bete trabajo es un intent de repens stare maral deade la Blade, En ml opin, esta nuestra hoy I que i in debe eet en correo, ndien cose son los mits lo problemas © Inclan el sujet de Ia etca, ademas de conte el empla mae relevante de dtica splieada Printer, esboearé una breve historia dela Diostin x, despa, examina el puesta del sujeto la len actual Polabras clave: Blodtea, tea aplcada syjeto moral Abstract ‘This paper ian attempt to nethink ee task of morale from the boethicl point of view In iy opinion Bioethics shows us day what ethics ought fo be tore precsely, points out what the mits the problems abd even the eet isl of ethics are. Te also constitucs tho most felevant example of proctinl ethics First Tahal outline a short history of Biothin And, ‘erards aballexamane the place ofthe sujet in today’s eles ‘Reword: ioethis, practical eties, mal subject. Lo que a continuacién voy a exooner os un intento de repensar la labor moral desde aquello que se ha dado en lamar Bioétiea. En este sentido, no quiero hacer una historia de la Bioétiea o un eatdlogo de sus problemas, Deseo, més bion, situar la importarcia de la moral en su justo lugar a través de un breve recorrido de lo que ha supuesto el nacimiento, todavia reciente, de la Bioética, Al final, sacaré alguna elemental conclusién que tiene su especial aplicacién en nuestro pais. Una observacién adicional antes de continuar. Doy por supuesto que la salud es fundamental para la ética. Entiéndase bien, no quiero decir, cosa que seria absurda, que ser moral implica tener o no tener buena salud. Este tipo de tonterias se le ocurrié a aljsin roméntico como aquel que, en una de las novelas de T: Mann, llega a afirmar que quien no esta enferme es tonto, Lo que quiero decir, mas bien, es que si uno ha de tener un modelo empitico de buena vida no hay mas remedio que recurrir a la armonfa corporal, a la proporeién de cada uno de los elementos que componen el cuerpo humano. Bs lo que hicieron los griegos yy recordé, agudamente, E. Tugendhat todavia no hace mucho tiempo. 55 Acyptocion:XI1/1999Jaser Stabe La sees de la Bitton Que la Bivética es de importancia no se diseute. Ahora bien, convendria sefialar en qué preciso sentido la Bioética es, para nosotros, de interés, al margen de otros aspectos a los que més adelante me referiré, La Bioética, antes de nada, es importante porque esclarece o aclara lo que la ética debe ser. Dicho de otra forma, nos muestra Ias limitaciones, las debilidades o, por €l contrario, el aleance de Ia ética o moral. Cuando ésta choca con algo que la deja en estado de shock tenemos Ia ocasién de observacla en toda su real dimensin, Bn segundo lugar, muestra su importancia porque es un signo de la temporalidad de Ia étiea. La étiea 0 moral se extiende en el tiempo y en cada momento debe enfrentarse con Ios problemas que le ha tocado en suerte vivir, Los de hoy son, especialmente, biosticos. En tercer lugar, es importante porque In Bioétiea hace su aparicién de modo desafiante. Los problemas que detecta la Bioética no sélo ponen en entredicho el objeto de Ia moral sino, cosa esencial, el sujeto de Ia étiea: quiénes somos o eudl es nuestra Idea de Homo. Finalmente, la Bioética se revela como el easo mas ccumplido o el ejemplo mas relevante de Io que ha de ser una ética aplicada. Si en algo debe entretenerse la étiea hoy es, por encima de todo, en los dilemas de la Bioética Pero, {por qué ha tomado tanta importancia y en tan poco tiempo la Bioética? ¢Bs un caso mas do la omnipresente moda biocritica como algunos han dicho irénicamento? {Existe, en fin, alguna razén qu> explique el boom de la Bioétiea? Se pueden dar dos razones 0 argumentos que explican dicho boom, En primer lugar, los avances espectaculares de Ia biologia molecular. No ge trata de una mera adjetivacién ni de un modo metaforico de hablar. ‘Los avanees son gustantivos. Y en algiin sentido dnicos. Hasta ahora ha- bbéamos reparado los euerpos de manera real. Y sélo le imaginacién —el Golem, Frankenstein, ete.— habfamos conseguido crearles. Actualmente es- ‘tamos en Ia frontera de una real reereacién de la vida humana, Podriamos. manipularla hasta extremos que nos colocan, repitmoslo, en Ia recreacién de lo humano, La palabra reereacién esti en su sitio. Permftaseme una comparacién para explicar qué es lo que quiero decir. En las discusiones de nuestros dias sobre Ia posibilidad conceptual del mito existiano de Ia resu- rreceién algunos vuelven a la vieja teoria tomista segiin Ia cual resucitar, por medio del buen y omnipotente Dios, consistiria en lo siguiente: no se conservaria la identidad numérica, por ejemplo, de Javie- sino su identidad ceualitativa. O, lo que es lo mismo, ese ser omnipotente pod-ia recrear después. de la muerte de Javier otro Javier idéntieo al que vivis. Naturalmente, on. tal discusién, a los tedlogos les interesa si vamos a vivir y emo, mientras {que muchos fildsofos se contentan eon que el asunto arrae allguna luz sobre lo que entendemos por identidad personal. Bs también lo que a nosotros nos. interesa, Recrear no ser, en el supuesto real de un avarce espectacular de Ta genética, lo mismo que seria en manos de ese ser omnipotente. Y la razén ‘es que no Somos omnipotentes, por mucho que te6logos como Ramsey Lan- zaran dicha acusacién contra las aplicaciones de la biotecnologta. Pero si podriamos trastoear, cambiar, reparar, regenerar, combinar, mejorar o em- 56 AGORA (1900), Vol 18, 1:55.67ssier Staabo La moves de a Biosticn peorar los componentes de lo humane de tal forma que nuestro ser indivi- ual, la evolucién e intercambios personales han de ser vistos bajo una luz hasta el momento inédita. Bs ésta una razén eseneial del boom de la Bioética. a segunda razén tiene que ver con el progreso moral. Expliquemos breve- ‘mente Io que queremos decir. No hablamos de progreso moral en términos ‘bsolutos, cosa harto dificil, Ahora bien, es evidente que hemos legado a ser extraordinariamente autoconscientes de nuestra autonomia. ¥ al margen de que, después, sepamos utilizarla ¢ nos traiga mas males que bienes, es un hhecho que la autonomia nos hace més exigentes. Procisamente uno de los ‘efectos de la Modernidad consiste en haber colocado en el centro de nuestros: planteamientos tesricos y nuestras decisiones précticas Ia autonomia de las personas. Nadie tiene por qué decidir por mi, es el lema de quien se considera ‘auténomo, Dicha actitud ha traids como consecuencia una postura mucho menos condescendiente en determinados campos. Y uno muy concreto y directo es el que atarie al cuerpo ¥ a sus atributos de enfermedad y salud. La Carta de los Derechos de los Pecientes, fechada en EEUU en 1972 y que tanta influencia habria de tener, es impensable fuera del contexto de la utonomfa en cuestién. Se trata de un ejemplo entre mil. Las asociaciones de enfermos maltratados, el euidado en la investigacién médica y su corres- pondiente experimentacidn, el llamado consentimiento informado, la eritica al paternalismo y un sinntimero de conceptos y casos mas se inseriben en Ta conciencia de independencia y dominio sobre nuestro cuerpo que han mareado los decenios que nos prezeden. Son éstas, en consecuencia, dos de Jas razones fandamentales que hacen que la Bioétiea no se reduzea a una ‘moda, a un fenémeno superficial oa una invencidn de sla filosofia de sal6n>, que diria R. Levontin. Pero demos un paso mas y preguntémonos por la etimologia de Bioética antes de entrar en su definicién, La palabra Bioética esti compuesta de los ‘términos griegos bios (vida) y étice (costumbre o norma de vida). Obviamente, 4 las etimologias no hay que pedirles mucho. En nuestro caso permanece indeterminada Ia idea de vida puesto que podriamos preguntarnos, por ejem- plo, hasta dénde se extionde, si sélo ge da en éste o on otros universos. posibles, ete. Por otro lado, no queda claro emo se juntan vida y étiea. Veamos dicha oscuridad con un ejemplo. No es lo mismo, desde un punto de vista conceptual, bioteenologia que bioquimica. En ol primer caso queremos decir que se trata de un estudio o investigacién sobre la tecnologia de la vida, En fl segundo caso, lo que queremos decir es que existe una materia compleja fque es, justamente, la bioquimica (a bioquimica se ha constituido en una rama de la biologia que estudia, especialmente, las estructuras ultramicros- cépicas de las células y sus fundones). Luego en bioteenologia se supone toda la vida y en bioguimica un fregmento muy especifico. En cualquier caso, la etimologia de Bioética nos indica 0 sugiore que se abre un campo que relaciona la vida y Ia moral de manera especial. Pero, al mismo tiempo, deja ‘en el aire el tipo de relacién que la moral debers mantener con las ciencias de la vida, Y es que, como enseguida veremos, Ia moral puede proyectarse 87 AGORA (1999), Vo 18, n° 1:56:67