Universidad Autónoma del Estado de México

Centro Universitario UAEM Texcoco.

Licenciatura en Derecho.

Derechos Humanos, Cultura y Democracia.

“Antígona de Sófocles”

Presenta:
López Carrillo Viliulfo

4° Semestre.

febrero del 2019

Edipo era rey de Tebas, pero fue exiliado y se acompaño de Antígona, pero falleció, así
que ella no tuvo otra opción que regresar a Tebas.
Debido a la ausencia de Edipo, se acordó que el trono de Tebas iba a ser rolado
periódicamente por sus hijos, sin embargo, existió una constante combate entre estos,
los hermanos de Antígona (Eteocles y Polinices).

Todo empieza a marchar mal cuando Eteocles decide quedarse con el trono sin respetar
el periodo de su hermano, esto da como resultado una guerra interna, una invasión que
al final no dejo nada bueno, puesto que ambos murieron, cada uno a manos del otro.

Por esta razón, Creonte (tío de Antígona) toma el poder del trono de Tebas.

Al iniciar Creonte da su primer edicto diciendo que Eteocles será honrado con sepultura
y ritos fúnebres por ser un buen rey. Pero Polinices quedará insepulto y manda a que su
cuerpo sea arrojado fuera de la ciudad para hacer banquete de los buitres por traidor,
por ser él quien realizó la invasión y haber destruido la ciudad.

Como Creonte era muy autoritario y todos le tenían miedo de inmediato cumplieron su
edicto y lanzaron el cuerpo de polinices fuera de Tebas, está grave por el hecho de que
ningún individuo podría quedar insepulto pues se creía que así no llegaría al Inframundo,
por lo tanto, el castigo de Creonte a polinices fue dejarlo vagando en el mundo de los
vivos como un espíritu por toda la eternidad.

Luego de que Antígona se enterara de lo que iba a suceder, decide hablar con Ismene
su hermana para explicarle el devastador edicto del Rey.

Ella le propone que le ayude a enterrar el cuerpo de su hermano, y prepararlo para su

viaje al más allá, sin embargo, Ismene era una chica muy temerosa y le recordó Antígona
sobre lo que el rey Creonte le haría A quién tocará el cuerpo de su hermano.

El castigo consistía en la muerte para el que se atreviera a tocar el cuerpo del superior
traidor de Tebas.

Antigua la no está conforme con lo que expresó su hermana sobre el cadáver de polinices
y le Recuerda que antes de acatar las leyes por los hombres deberían acatar las leyes
divinas, pero Ismene se rehúsa ayudar diciendo que ella no puede desobedecer las leyes
de la ciudad Antígona se molesta y se marcha realizar su loco plan.

Cuando el rey Creonte estaba junto a su séquito hablando de la lealtad que deberían
tenerle diciendo que al igual que al rey anterior ellos le deben obediencia y lealtad
absoluta.

Llega de repente un militar con malas noticias las cuales eran que hay en había tratado
de enterrar el cuerpo de polinices desobedeciendo el mandato real

Sin embargo, él no supo quién fue a lo que el rey Creonte lo amenaza y lo culpa de que
seguramente fue él quien lo trató de enterrar, la amenaza consiste en que si no averigua
quién trató de enterrar a polinices el soldado tendrá que pagar con su vida.

El soldado se retira y los guardias prosiguen a sacar el cuerpo y nuevamente dejarlo

tirado, para buena suerte del soldado, Antígona regreso a tratar de sepultar nuevamente
su hermano y practicar ritos fúnebres a escondidas.

De repente los guardias salen de su escondite y apresan Antígona, ellas y luchar acepta
y la presentan frente a Creonte para que dicte castigo por haber desobedecido el edicto.

Creonte le pregunta Antígona se sabía acerca de lecto a lo que ella responde que sí y
que no le importa lo que haga con ella puesto que ella cumplió con su deber ante los
dioses, recalcó Que para ella está en primero las leyes de los dioses y después la de los
Reyes que sólo buscan infundir miedo.

Creonte libera al soldado de su acusación y dicta muerte Antígona y ordena que se

aparece a Ismene pues a su parecer se estaba comportando de una manera extraña.

Ismene al ver a su hermana que está a punto de ser ejecutada, ella acepta parte de la
culpa y de la participación en el improvisado entierro de Polinices, por lo que quiere morir
junto a ella.

Antígona al ver esto detiene a Ismene y le dice a Creonte es que ella no tuvo nada que
ver con el entierro, que ella no necesita que se adjudique hazañas que no cometió por
culpa del miedo que le tiene de hacer lo correcto.
Antígona le pide al rey que la deje vivir, principalmente por la decepción que tuvo al
percatarse de la cobardía de Ismene.

Creonte absuelve a Ismene y ordena que la retiren, condenado a Antígona a ser

sepultada viva en una cueva con una ración diaria de comida para evitar que se pensarán
que él la mataría.

Hemón, hijo de Creonte y enamorado de Antígona, creía que su padre tenía un buen
juicio, sin embargo, empieza a discutir sobre la decisión tomada respecto Antígona en
donde le reclama su inmadurez y soberbia, razón por la cual los Tebanos ya no lo
querían.

Creonte se enfurece y pide que traigan a Antígona para ser ejecutada frente a Hémon,
pero él se va y deja a su padre enfurecido.

Antígona fue transportada al lugar de su muerte y por primera vez demuestra indecisión
y miedo, aun así, mantuvo su postura y fue sepultada en una cueva tal como indicó
Creonte.

Después se presenta ante el rey un adivino ciego llamado Tiresias, que era famoso
porque siempre acertaba en sus vaticinios, cuando pide audiencia con Creonte, le
atiende y le menciona que a lo largo de ciudad ha visto señales de que los dioses están
furiosos con Tebas por sus decisiones.

Tiresias le propone que libere a Antígona de su castigo fatal, pero Creonte se enfada y
le responde que todos a su alrededor no hacen mas que atacarlo y criticar sus decisiones,
pero el respeto que le tiene a Tiresias es tal que comienza a pensar seriamente en lo
que dice y valiéndose de sus asesores finalmente decide que tiene que ceder a su
capricho y liberar a Antígona por el bien de la ciudad.

Después de que mando a varias personas para realizar la tarea, un mensajero vuelve y
le pide que lo acompañe a la cueva personalmente.

Cuando Creonte llego, se percata que se escuchan unos lamentos que parecen ser de
su hijo Hémon y al entrar a la cueva se encuentra con una escena terrible, Antígona se
había ahorcado con y Hémon se encontraba con ella llorando.
Creonte intenta levantar a Hémon y hacerlo entrar en razón, pero su hijo saca su espada
e intenta atacarlo, pero falla, sin remedio, Hémon se clava él mismo la espada y muere
junto a Antígona.

Creonte al ver esto, su pesar fue bastante pero ahí no acabarían las desgracias que el
mismo provoco.

Yendo a casa con su hijo en brazos, es informado que Eurídice su esposa hizo lo mismo
que Hémon al enterarse que él había muerto.

El rey Creonte termino perdiéndolo todo por sus decisiones al querer enfrentar su
voluntad contra la de los dioses que le colocaron ese destino fatal del que no pudo
escapar para escarmentarlo del peor modo posible.

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Título: Antígona.
Autor: Sófocles.
Editorial: DEBOLSILLO
Número de páginas: 80
Año: 443 a. C.

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