Capítulo I

VIDA DE SAN JUAN BAUTISTA

1.1. Los antepasados de san Juan Bautista

Cuando el pueblo de Israel era peregrino en el desierto, guiado por la
mano de Moisés (s. XIII a.C), Dios nuestro Padre, digno de recibir culto por parte
de su pueblo, tuvo bien en elegir a la tribu de Leví1 para el servicio de la Morada
(Núm 3,1-13). Ésta tribu estaba compuesta por tres clanes descendientes de
Leví2. De estos tres clanes Dios eligió al clan de Quehat y de este clan a la familia
de Aarón3 junto con dos de sus cuatro hijos que tuvieron descendencia4 (1 Cron
24,2) para darles una misión especial5 (Ex 28,1; 29,44; Lv 8-9). A Los primogénitos
descendientes de esta familia sacerdotal les correspondían la función de sumos
sacerdotes6. Esta clase sacerdotal debido a su misión mediadora, eran
intercesores entre el pueblo y Dios, con la consiguiente exigencia de una
santidad más elevada (Lv 19,1-20) y con características muy peculiares7.
En los tiempos del rey David (1010-970), tuvo lugar una división en la
familia sacerdotal de Leví. David junto con Sadoc descendiente de Eleazar y con
Ajimélec descendiente de Itamar, clasificó la familia sacerdotal según sus
funciones. Eleazar tenía una gran descendencia varonil y su descendencia fue
clasificada en dieciséis jefes de casas paternas, por su parte la descendencia de
Itamar solo fue clasificada en ocho jefes de casas paternas (1 Cro 24,3-4), en total
tenemos veinticuatro jefes de casas paternas, de entre las cuales está la casa de
Abías (1 Cro 24,10) de la cual es descendiente el sacerdote Zacarías el padre del
precursor del Señor (Lc 1,5).

1
Tercer hijo de Jacob nieto de nuestro padre Abraham.
2
Guersón, Quehat y Merari, formaban las tres clases levíticas para el servicio de la morada.
3
Hermano mayor de Moisés.
4
Eleazar e Itamar.
5
Hacerse cargo de ofrecer el culto sacerdotal.
6
Quienes llevaban vestiduras especiales (Ex 28) y podían entrar en el Sancto Sanctorum una vez
al año el día de la expiación (Lv 16).
7
Cf. M.A. TÀBET, Introducción al antiguo testamento. I. Pentateuco y libros históricos, 217.
 Por parte de la madre de Juan Bautista sabemos con seguridad por san
Lucas que también es descendiente de Aarón (Lc 1,5). Sus antepasados los
encontramos en algún escrito apócrifo y tal vez correcto8. En este escrito
encontramos que Mathan tuvo tres hijas: María la mayor desposó a un hombre
de Belén y fue la madre de Salome; Soba desposó a un hombre también de Belén
pero de la tribu de Leví y fue la madre de Isabel la madre de Juan; Ana desposó a
un hombre galileo llamado Joaquín los cuales fueron los padres de la madre de
Dios. De esta manera Salome, Isabel y la Virgen María fueron primas. Isabel es
descendiente de Aarón por línea paterna y prima de la Madre del Verbo
encarnado por línea materna9.

1.2. El anuncio del nacimiento de san Juan Bautista

Hemos conocido la línea cronológica que nos conduce a los antepasados
de Juan Bautista, y pudimos encontrar su ascendencia sacerdotal. Ahora
pasaremos a conocer la persona del Bautista comenzado por el anuncio de su
nacimiento. El evangelista Lucas escribe que en los días de Herodes el grande (73
a.C- 4 d.C) rey de Judea había un sacerdote llamado Zacarías del grupo de Abías,
desposado con una mujer descendiente de Aarón llamada Isabel, los dos eran
justos ante Dios y esperaban el advenimiento del Mesías, pero no tenian hijos
porque Isabel era estéril y los dos eran de edad avanzada (Lc 1,5-7). Sucedió que,
en esos días le toco al grupo sacerdotal de Zacarías el servicio en el santuario10
(Lc 1,8-9).
Resulto que le toco por gracia a Zacarías realizar este rito que coincidía
cuando el pueblo afuera estaba reunido orando11. Zacarías se encontraba
realizando el rito cuando se le apareció el arcángel Gabriel a la derecha del altar
del incienso, al verlo, Zacarías se atemorizó, pero el arcángel le dijo: No temas,

8
Nicefor II, III.
9
Cf. J. GÀLVEZ, San Juan Bautista, in http://ec.aciprensa.com/wiki/San_Juan_el_Bautista
[8-03-2016].
10
Ofrecer el incienso en el altar que se encontraba en el lugar santo, justamente de frente al
santísimo cubierto con el velo donde había estado el arca de la alianza (Lc 1,8-9; Ex 30,1-7).
11
Pues el significado del incienso que subía a la presencia de Dios era precisamente la oración del
pueblo (Sal 141,2).

9
Zacarías, porque tu petición ha sido escuchada; Isabel tu mujer, te darà un hijo, a
quien llamarás Juan; será para ti gozo y alegría, y muchos se gozarán por su
nacimiento, porque sera grande ante el Señor; no bebera vino ni licor; estará
lleno del Espíritu Santo ya desde el seno de su madre, y convertirá al Señor su
Dios a muchos de los hijos de Israel e irá delante del Señor con el espíritu y el
poder de Elías, para hacer volver los corazones de los padres a los hijos y a los
rebeldes a la prudencia de los justos, para preparar al Señor un pueblo bien
dispuesto (Lc 1,11-17).
Ante ésta buena noticia anunciada por el arcángel Gabriel, Zacarías no
creyó, y por haber dudado a las palabras anunciadas permaneció mudo hasta
que se cumplió lo anunciado por el mensajero de Dios. Cuando terminó éste
evento, Zacarías salió del santuario pero no podía hablar, y las personas
comprendieron que había tenido una visión (Lc 1,20-22). “Una vez cumplidos los
días de su servicio en el templo, regresó a su casa que se encontraba en Ain
Karem12, un pueblecito entre las montañas de Judá”13. Días después concibió su
mujer Isabel y estuvo durante cinco meses recluida diciendo: esto es lo que ha
hecho por mí el Señor en los días que se dignó quitar mi oprobio entre la gente
(Lc 1,23-25)14.

1.3. El nacimiento de san Juan Bautista

Al sexto mes de embarazo de Isabel, el arcángel Gabriel fue enviado a la
virgen María anunciarle su elección para ser la madre de Dios. Después de que
Maria dio su fiat a y al enterarse por la boca del ángel de que su parienta Isabel
había concebido un hijo, se encaminó con prontitud a la región montañosa de
Judá, y cuando entro en la casa de Zacarías y saludo a Isabel el niño que llevaba
en su seno saltó de gozo y su madre quedó llena del Espiritu Santo, a esto Isabel
exclamó: bendita tu entre las mujeres y bendito el fruto de tu seno, ¿quien soy
yo para que la madre de mi Señor venga a verme?, feliz porque has creído todo

12
Situado a seis km al oeste de la ciudad vieja de Jerusalén.
13
Cf. H. R. ROSOLEN, San Juan Bautista el precursor, 8.
14
Cf. L. MONLOUBOU, Dizionario bíblico, 959. Pues la esterilidad era vista como un castigo y algo
contradictorio a la alianza que uno de sus aspectos era la fecundidad.

10
cuanto te fue anunciado departe del Señor. Entonces María proclamó el bello
cantico que la tradición ha titulado El magníficat15 (Lc 1,26-55.
El evangelista Lucas escribe que la virgen María permaneció tres meses
con Isabel y luego volvió a su casa (Lc 1,56). Tomando en cuenta estos datos,
María estuvo con su prima seguramente hasta el nacimiento de Juan, es decir
cuando ella ya llevaba tres meses de embarazo. Con respecto a la fecha de
nacimiento del Bautista no podemos decir nada con seguridad, pues partiendo
del evangelio afirmamos que nació seis meses antes que el Salvador; pero si
tomamos en cuenta la historicidad, podemos afirmar que Jesús nació entre el
año 7 a.C., cuando según Mt 2,1 y Lc 1,5 gobernaba en Judea Herodes el grande
(73 a.C-4 d.C) y en Roma el emperador Cesar Augusto (63 a.C-14 d.C)16.
Partiendo de lo dicho, confirmamos que el Bautista nació exactamente
seis meses antes de Jesús en el año 7 a.C., el cual según la Tradición el
nacimiento de Jesús lo ubica el 24 de diciembre17. Es así, que seis meses antes
del 24 de diciembre es 24 de junio cuando en Ain Karem se cumplieron las
palabras del arcángel, e Isabel dio a luz a su hijo, lo cual fue motivo de alegria y
gozo para muchos (Lc 1,57).

1.4. La Circuncisión de san Juan Bautista

En la alianza hecha con Abraham, Dios pide que a los ocho días después
del nacimiento el niño, sea circuncidado (Gn 17,10-14; Lv 12,3) y cumpliendo con
la ley, Zacarías e Isabel circuncidaron al niño (Lc 1,59). En seguida viene la
imposición del nombre18. San Lucas escribe que los presentes querían ponerle
Zacarías19 como su padre, pero Isabel intervino y no quiso que se le pusiera ese

15
Contiene la alabanza de María a Dios, la alegría que está en su corazón, la esperanza en la
misericordia de Dios que recordó su promesa hecha a Abraham que se manifestará en la llegada
del Mesías esperado.
16
Cf. A. ZIEGENAUS, Gesu Cristo la pienezza della salvezza, 43.
17
Fecha que no está datada con evidencia historica sino mas bien por consideraciones
astronomicas.
18
Cf. P.M. BOGAERT, Diccionario enciclopedico de la biblia, 1091. El significado del nombre estaba
ligado a la persona, el nombre es el alma, es lo que hace perceptibles su origen (Gn 2),
comportamiento (1 Sam 25,25) mision (Jue 6,12; Mt 16,18) y destino (Ex 2,10)
19
Significa Dios se ha acordado.

11
nombre, sino mencionó el nombre de Juan. Los presentes replicaron a Isabel que
no había nadie en su familia con ese nombre y entonces preguntaron por señas a
Zacarías20 (Lc 1,59-62).
Zacarías entonces para responder pidió una tablilla y escribió: Juan es su
nombre, tal como le había indicado el arcángel. A esta respuesta de Zacarías
todos quedaron maravillados y al momento se le abrió la boca y comenzó a
bendecir al Señor lleno del Espiritu Santo por el cumplimiento de la promesa
hecha por Dios a traves del anuncio de los profetas y tambien profetizó la mision
de su hijo diciendo: a ti, niño, te llamarán Profeta del Altísimo, porque irás
delante del Señor a preparar sus caminos, anunciando a su pueblo la salvación, el
perdón de sus pecados (Lc 1,67-79). Estas cosas invadieron de temor a sus
vecinos y en la región de la montaña de Judea se comentaba lo sucedido, y todos
los que se enteraban las grababan en su corazón diciendo: que será de este niño,
porque en efecto, la mano del Senor estaba con el. (Lc 1, 62-66).

1.5. Los años desconocidos de san Juan Bautista

Hemos llegado a un momento decisivo en la historia del Bautista, pues el
evangelista Lucas ha sesado de escribir sobre él y aparecerá de nuevo en el
capítulo tres, pero ya en edad adulta; esto quiere decir que la Sagrada Escritura
no nos da ningún dato más sobre la infancia del niño Juan después de su
circuncisión. Pero en nuestra busqueda nos encontramos con dos escritos, de los
cuales no podemos afirmar una absoluta veracidad: el protoevangelio de
Santiago y un escrito de Serapion (300-395-?)21. Retomando el escrito inspirado

20
Estaba privado del habla y por lo tanto no podía escuchar pues la mudez científicamente está a
menudo relacionada con la sordera.
21
E. WEIDIGER, Gli apocrifi, 548-549. 575-577. Protoevangelio de Santiago. Escrito apócrifo que
data aproximadamente del año 150, escrito por un cristiano desconocido proveniente del
paganismo; narra del cap. 22 al 24 el triste martirio de Zacarías en el templo por parte de
Herodes al negarse a dar la ubicación de su hijo Juan recien nacido; pues Herodes lo buscaba
para matarlo. Vida de Juan Bautista de Serapion Obispo de Thmuis Egipto, discípulo de san
Antonio Abad (251-356) y amigo de san Atanasio (296-373). Datado entre 385-394 d.C., narra la
muerte de Isabel por su ancianidad, la compañía que le hicieron el Niño Jesús y la virgen María
durante siete días en el desierto y el comienzo de la vida solitaria de Juan desde los siete años.

12
nos dice que Juan crecía y su espíritu se fortalecía y vivió en lugares desérticos22
hasta el día de su manifestación a Israel (Lc 1,80)23.

1.6. La vida pública de san Juan Bautista

A partir de ahora tomaremos en concordancia algunos de los datos que
nos ofrecen los evangelios sinópticos y el evangelio de san Juan sobre la misión y
predicación del Bautista hasta su muerte24.

1.6.1. La personalidad del Bautista

El bautista durante su preparación en el desierto logró adquirir una
personalidad muy particular, diversa a la de los hombres de su tiempo. Tuvo
siempre una vida austera en el desierto (Lc 1,80); Juan no bebía vino ni licor,
según lo predicho por el arcángel (Lc 1,15). Con sus palabras y ejemplo predicaba
la mortificación que él mismo practicaba (Mt 3,8); se vestía con pelo de camello25
y lleva ceñido un cinto de cuero (Mc 1,6; Mt 3,4). Se alimentaba de langostas26 y
miel silvestre27 (Mc 1,6). El Bautista era un hombre con discípulos que les
enseñaba a orar y a ayunar (Lc 5,33; 11,1; Mc 2,18); era un hombre que había
marcado una gran impresión en la sociedad por su modo de vivir y era
reconocido y recordado por muchos (Mc 8,27-36; 6,14-20; Mt 16,13-20; 14,1-3;
Lc 9,7-8;18-21); era un gran moralista pues su predicación animaba al
arrepentimiento de los pecados, invitaba a hacer penitencia (Mt 3,8); su carácter
era fuerte, pues sin miedo llamaba las cosas por su nombre y hacia ver las

22
Ain el Habis es según la tradición el desierto donde se preparó para su misión, ubicado a tres
Km de Ain Karim; también Ain el Mamoudiyeh desierto donde según la tradición hacia su
penitencia situado a nueve Km al noroeste del monte Hebron.
23
Cf. H. R. ROSOLEN, San Juan Bautista el precursor, 9-10.
24
Mateo comienza en el capítulo tres, Marcos en el capítulo uno, Lucas lo retoma en el capítulo
tres, y Juan en el capítulo uno.
25
Ligeramente suave y grueso y poco flexible, el color es principalmente de oro con una variación
del rojo a la luz tonos marrones. El cabello contiene propiedades termostáticas que pueden
proteger y aislar el vaso de las condiciones extremas de frío, así como mantenerlos fresco en el
desierto.
26
Una clase de saltamontes de la familia de los acrídidos. La especie más común en Israel es una
langosta migratoria conocida como langosta peregrina o del desierto, que suele llegar a ser una
plaga devastadora (Joel 1,4-7; Nahúm 3,15).
27
Probablemente venía de panales que las abejas hacían entre las rocas, o en algunos árboles del
desierto.

13
injusticias en frente de aquellos que las cometían (Mt 11,7-8; 3,7-8; Mc 6,18;
1,6); entrego su vida por la justicia y por la verdad (Mc 6,16-30; Mt 14,3-12; Lc
3,19-20; 9,9).

1.6.2. La misión del Bautista

Aproximadamente en el año 26 o 27 d.C., según el evangelio en el año
quince del imperio de Tiberio Cesar (42 a.C-37 d.C) cuando Poncio Pilato era
procurador de Judea entre los años 26 y 36 d,C; tetrarca de Galilea Herodes
Antipas (20 a.C-39 d.C); tetrarca de Iturea y de Traconitide Filipo (4 a.C-34 d.C), y
Lisanias tetrarca de Abilene; en el pontificado de Anás y Caifás entre los años 18-
36 d.C; fue dirigida la palabra de Dios a Juan en el desierto de Judea28 (Lc 3,1-2).
El Bautista ejerció su ministerio predicando un bautismo de conversión para el
perdón de los pecados (Lc 3,1-3; Mt 3,1) en el rio Jordán29 a donde Juan
bautizaba; principalmente en la región que está en la cercanía con el mar
Muerto30, Tambien san Juan menciona otro lugar llamado Ainon cerca de Salin31,
pues ahí había mucha agua (Jn 3, 23)32.
La principal mision de Juan era preparar al pueblo para que estuviera bien
dispuesto a la llegada del Mesías (Lc 1,17); su misión estaba delineada por el
mensaje del arcángel a Zacarías: convertir al Señor su Dios a muchos, ir delante
del Señor con el espíritu y poder de Elías, hacer volver los corazones de los
padres a los hijos y a los rebeldes a la prudencia de los justos (Lc 1,16-17). Ésta
misión se completó con las palabras de su padre Zacarías: ir delante del Señor a
preparar sus caminos y dar a su pueblo el conocimiento de la salvación mediante
el perdón de los pecados (Lc 1,76-77); esta misión se desarrolló en las distintas
actividades realizadas por el Bautista como fue la predicación de la llegada del

28
Ubicado al este de Jerusalén.
29
Nace en el monte Hermón y fluye atravesando el suroeste de Líbano hacia el sur entrando en
Israel y desemboca en la costa norte del mar de Galilea, sigue su camino y sale del mar de Galilea
por el sur y sigue su trayecto hacia el mar Muerto.
30
Según Mateo en Qasr al-Yehud cerca de Jericó (3,13-17), pero según Marcos (1,5-11) y Juan (Jn
1,28; 10,40) al otro lado del Jordán en la parte de Perea llamado Bethabara a siete km al norte
del mar muerto en Kharrar.
31
En el camino entre el mar de Galilea y el mar Muerto, a cinco km de Siquem, en la Samaria.
32
Cf. H. R. ROSOLEN, San Juan Bautista el precursor, 11.

14
reino de los cielos (Mt 3,2), proclamó un bautismo de conversión y de penitencia
para perdón de los pecados (Lc 3,3; Mc 1,5; Mt 3,2-5), vino para ser testigo de la
Luz a fin de que todos creyeran por medio de él (Jn 1,6-8), bautizaba a los
hombres que venían de Jerusalén, Judea y de toda la región del Jordán y
confesaban sus pecados (Mt 3,6).

1.6.3. La predicación del Bautista

Juan pertenece al ciclo profético del AT, cuyas características enmarcan la
predicación de Juan33. “El profeta era consciente que a través de su palabra
habla Otro. Su palabra era palabra de Dios, en este sentido fue acogida por siglos
el testimonio profético en Israel”34. Juan es más que un profeta (Lc 7,26), Juan
concluye el ciclo de los profetas iniciado por Elías que anunciaba el día de la
llegada del Mesías (Mt 11,13-14). De ahí que las palabras del arcángel llegan a
cumplimiento, pues tenía el poder y el espiritu de Elías (Lc 1,17) y también vestía
como él (2 Re 1,8).

a) Enseñanza moral
Por aquellos días se presentó Juan en el desierto proclamando el reino de
los cielos (Mt 3,2). Llevaba en sus labios las palabras del profeta Isaías: voz que
clama en el desierto, preparad el camino del Senor, enderezad sus sendas, todo
barranco será rellenado, todo monte y colina será rebajado. Lo tortuoso se hará
recto, y las esperanzas serán caminos llanos, y todos verán la salvación de Dios
(Lc 3,4-6). Decía a la gente que acudía a bautizarse: raza de viboras, den frutos
dignos de conversión, ya está el hacha puesta a la raíz de los árboles y todo árbol
que no de buen fruto será cortado y arrojado al fuego (Lc 3,7-8).
Recordaba los mandamientos: a Herodes le decía que no le era lícito
tener la mujer de su hermano (Mc 6,18; Ex 20,14), a la asamblea les decía que
fueran caritativos, que quien tuviera dos túnicas que diera una al que no tiene, el

33
Denunciar la injusticias, es aquel que habla en lugar de Dios (Ger 14,17) lleva y proclama su
palabra (Ne 6,7; Ex 4,14-17), aquel que profetiza (1 Sam 19,20), es un hombre de Dios (1 Re
17,18).
34
L. MONLOUBOU, Dizionario biblico, 795.

15
que tenga para comer que haga lo mismo (Lc 3,10-11; Lv 19,18), a los publicanos
les decía que no exigieran más de lo que estaba fijado, a los soldados les decía
que no extorsionaran, que no hicieran denuncias falsas y que se encontentaran
con sus sueldo (Lc 3,7-14, Ex 20,15-17). Arrepientanse pues el reino de Dios está
cerca (Mt 3,2). Predicaba la práctica de la virtud, incitando a vivir con justicia
mutua y con piedad hacia Dios, para asi poder recibir el bautismo35.

b) Anuncio del Mesías

Confiesa que él no es el Cristo, que tampoco es Elías y menos un profeta,
declaro que él no lo era: yo los bautizo con agua en señal de conversión, pero
está a punto de llegar el que es más fuerte que yo, uno que está en medio de
ustedes que ni siquiera conocen (Jn 1,26-27), a Él no soy digno de desatar la
correa de sus sandalias, Él los bautizará en Espíritu Santo y Fuego, en su mano
tiene el bieldo para la parva, recogerá el trigo en su granero pero quemará la
paja con fuego que no se apaga (Lc 3,15-18, Mt 3,11-12). Yo no soy el Mesías sino
que he sido enviado delante de Él (Jn 3,19-28).

1.6.4. Jesús y el Bautista

a) El bautismo de Jesús por el Bautista
El ministerio de Jesús comenzó con su bautismo en el Jordán (Hch 1,15-
26). Después de un periodo de predicación, finalmente llegó el momento del
gran encuentro entre el Mesías y su enviado36. Es así que una ocasión mientras
Juan bautizaba a las multitudes que acudían a él, vio venir al Mesías hacia él y
dijo: he aquí el Cordero de Dios que quita el pecado del mundo (Jn 1,29.36-36),
este era del que yo dije: el que viene detrás de mí se ha puesto delante de mí
porque existía antes que yo. Yo no le conocía, pero he venido a bautizar en agua
para que Él sea manifestado a Israel. Aquél quien me envió a bautizar me dijo

35
FLAVIO JOSEFO, Antiguedades Judias, libro XVIII cap. V.
36
Según el evangelista san Juan, sucedió en Bathabara al otro lado del Jordán en Kharrar (Jn
1,28), pero san Mateo en Qasr al-Yehud cerca de Jericó (3,13-17).

16
que Aquél sobre quien viera que bajaba el Espíritu y se quedaba sobre Él, ese es
el que bautiza con Espíritu Santo y de que es el elegido de Dios. (Jn 1,15-34).
Jesús se presentó ante Juan para ser bautizado, pero Juan trataba de
impedírselo diciendo que él era el que necesitaba ser bautizado por Él, pero
Jesús le respondió que convenía que se cumpliera con justicia lo que el pedía;
una vez bautizado, salió del agua y se abrieron los cielos y vio al Espíritu de Dios
que bajaba como paloma y venía sobre él y escuchó una voz que decía. Éste es
mi Hijo amado en quien tengo mis complancencias37 (Mc 1,9-12; Mt 3,13-17; 4,1;
Lc 3,21-22).

b) Jesús habla sobre el Bautista

Jesús considera el bautismo del Bautista como un bautismo que viene de
arriba, pues era un profeta, no era un bautismo de hombres (Mt 21,24-23; Mc
11,27-33; Lc 20,1-8), pero también lo considera inferior al nuevo bautismo, pues
el Señor después de resucitar dice a sus apóstoles que el bautismo de Juan era
con agua pero ellos serían bautizados con el Espiritu Santo (Hch 1,5). Jesús
considera a Juan más que un profeta, no es un hombre elegante que viste
magnificamente y no vive en un palacio (Lc 7,24-26).
Lo llama mensajero el cual había de preparar su camino (Lc 7,27). Lo
considera el más grande de los nacidos de mujer y también el más pequeño en el
reino de los cielos (Lc 7,28-30). Jesús compara el rechazo de su ministerio como
lo hicieron con el Bautista, aquel que le llamaban endemoniado porque no comía
ni bebía vino (Lc 7,31-35). Juan el Bautista llevó el espíritu de Elías; vino al mundo
pero hicieron con el todo lo que quisieron, y Jesús compara su fin como el del
Bautista, pues dice que así como hicieron con el Bautista asi también tenía que
padecer Él delante de ellos (Mt 17,9-15). El Señor reconoció el testimonio de
Juan (Jn 5,32-36).

37
Después de este acontecimiento Jesús fue impulsado por el Espíritu al desierto para
permanecer ahí durante cuarenta días.

17
c) El Bautista habla sobre Jesús
Una ocasión los discípulos de Juan fueron a verlo y le dijeron: maestro, el
que estaba contigo al otro lado del Jordán, aquel de quien diste testimonio esta
bautizando y todos van a Él, entonces Juan sabiamente respondió: no puede el
hombre recibir nada, si no le fuere dado del cielo, ustedes mismos fueron
testigos de que dije: yo no soy el Cristo, sino que soy enviado delante de Él. El
que tiene la esposa, es el esposo; mas el amigo del esposo, que está a su lado y le
oye, se goza grandemente de la voz del esposo; así pues, este mi gozo está
cumplido. Es necesario que él crezca, y yo disminuya. El que de arriba viene, es
sobre todos; el que es de la tierra, es terrenal, y cosas terrenales habla; el que
viene del cielo, es sobre todos. Y lo que vio y oyó, esto testifica; y nadie recibe su
testimonio. El que recibe su testimonio, éste atestigua que Dios es veraz.
Porque el que Dios envió, las palabras de Dios habla; pues Dios no da el
Espíritu por medida. El Padre ama al Hijo, y todas las cosas las ha entregado en
su mano. El que creé en el Hijo tiene vida eterna; pero el que rehúsa creer en el
Hijo no verá la vida, sino que la ira de Dios está sobre él (Jn 3,26-36). Declara la
superioridad de Cristo, pues el Mesías es más fuerte que Juan el Bautista, no era
digno de desatarle las sandalias (Mc 1,7), se considera él quien debe ser
bautizado por Jesús (Mt 3,14), reconoce que su bautismo es con agua y el de
Jesús es con el Espíritu Santo y con fuego (Mc 1,8; Mt 3,11; Jn 1,35; Lc 3,16), en
cuanto a la preexistencia el Mesías ya era junto al Padre en la creación del
mundo, es primero que el Bautista (Jn 1,15.30), se alegra de la venida de Cristo
(Jn 3,29). Predica que Jesús es el Hijo de Dios, el Mesías esperado (Jn 1,32-34;
3,31-36) y el pueblo creyo en su predicación al ver las maravillas que realizaba
Jesús (Jn 10,41-42).

18
1.7. El martirio de Juan Bautista
Sobre el trágico martirio de Juan 38 tenemos los escritos canónicos de
Marcos y Mateo y los escritos del historiador Flavio Josefo. Según el evangelista
Lucas, Herodías39 (7 a.C-39 d.C) indujo a Herodes de encarcelar a Juan, pues
buscaba deshacerse de él, porque temía que Herodes le hiciera caso y la deja40
(Lc 3,19). Otra causa de su encarcelamiento lo cuenta el historiador judio Josefo
y nos dice que Herodes mandó encarcelar a Juan porque temía que con su
autoridad indujera a sus subditos a rebelarse, pues el pueblo parecía estar
dispuesto a seguir sus consejos, y consideró encarcelarlo41 en la fortaleza
Maquero42.
Surgió que en un festejo por el cumpleanos de Herodes, la hija de
Herodías bailó para él, fue tanto el agrado de su baile, que Herodes le quizo dar
un premio y le ofreció la mitad de su reino u otra cosa que ella quisiera, a esto la
joven salió a ver a su madre y le pregunto qué le debía pedía a Herodes, a lo que
Herodías pidió la cabeza de Juan el Bautista. Al escuchar Herodes la petición de la
muchacha el rey se lleno de tristeza, pero no quiso desairarla a causa de su
juramento y por quedar bien ente sus invitados mandó a uno de sus guardias a
llevar la cabeza de Juan Bautista que estaba encarcelado. El guardia trajo la
cabeza de Juan y la entregó al rey, él a la joven y ella la entregó a su madre.
Después de lo sucedido los discípulos de Juan fueron a recoger el cuerpo de su
maestro y lo sepultaron43 y luego fueron a informarle a Jesús quien al oír esto se
retiró de allí en una barca, aparte, en un lugar solitario (Mc 6,14-29; Mt 14,3-13).

38
D. NOBEL, The anchor bible dictionary v.3, 887.Probablemente entre el año 28 y 29 d.C.
39
Mujer de Filipo hermano de Herodes. Herodías convivía con Herodes cometiendo el pecado de
adulterio.
40
Herodes temía a Juan pues sabía que era un hombre justo y santo y le protegía; y al oírle
quedaba muy perplejo y le escuchaba con gusto (Mc 6,20, Mt 14,5).
41
Cf. FLAVIO JOSEFO, Antigüedades Judías, libro XVIII cap. V.
42
Una Fortaleza contruida sobre una colina ubicada entre Palestina y Arabia a 24 Km de Jordania
y 25 km del rio Jordán, construida por Alejandro Janeo (104-78 a.C) en el año 90 a.C.
43
H. R. ROSOLEN, San Juan Bautista el precursor , 12-13. Según una tradición antigua desde el s. IV
su tumba se encontro en Sebaste, una ciudad de Samaria a 78 km al norte de Jerusalén,
actualmente el lugar es una mezquita.

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