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Introducción

Hoy en día muchos de los aparatos tecnológicos de nuestro diario vivir, Teléfonos móviles,
ordenadores con conexión wireless, headsets, libros electrónicos, edificios inteligentes,
aparatos médicos wireless, cámaras wireless, son algunos ejemplos de nuestra realidad sin hilos.
En la cual la antena es el protagonista, porque sin esta no habría una comunicación sin cables.

¿Qué es una antena?

Una antena es un sistema conductor metálico capaz de radiar y recibir ondas electromagnéticas,
y una guía de onda es un tubo metálico conductor por medio del cual se propaga energía
electromagnética de alta frecuencia, por lo general entre una antena y un transmisor, un
receptor, o ambos. Una antena se utiliza como la interface entre un transmisor y el espacio libre
o el espacio libre y el receptor.

Operación básica de una antena

Sin meterse en cuestiones físicas, si una corriente circula por un conductor, creará un campo
eléctrico y magnético en sus alrededores, como supondremos que la distancia entre los dos
conductores que forman nuestra línea es pequeña, no se creará una onda que se propaga,
puesto que la contribución que presenta el conductor superior se anulará con la que presenta
el conductor inferior.

Pero si separamos en un punto los dos conductores, los campos que crean las corrientes ya no
se anularán entre sí, si no que se creará un campo eléctrico y magnético que formará una onda
que se podrá propagar por el espacio.

Según esto, dependiendo del punto desde el que separemos el conductor, tendremos una
longitud en los elementos radiantes variable. Al variar esta longitud, la distribución de corriente
variará, y lógicamente la onda que se creará y se propagará.

Hay que seguir observando que en los extremos seguimos teniendo un mínimo de corriente y
que continúa repitiéndose cada media longitud de onda. Luego ahora podemos ver de forma
gráfica, que si suponemos que nuestra antena son solo los elementos radiantes y que el punto
en el que los hemos separado es el punto de alimentación de la antena, el módulo de la
intensidad en el punto de alimentación varía y lógicamente, también varía la impedancia que
presenta la antena.

Como podemos ver, no por tener una antena más larga logramos radiar mejor, lo único que
conseguimos es variar el diagrama de radiación y la impedancia que presenta.

Ganancia directiva y de potencia

Los términos ganancia directiva y ganancia de potencia con frecuencia no se comprenden y, por
tanto, se utilizan incorrectamente. La ganancia directiva es la relación de la densidad de potencia
radiada en una dirección en particular con la densidad de potencia radiada al mismo punto por
una antena de referencia, suponiendo que ambas antenas irradian la misma cantidad de
potencia. El patrón de radiación para la densidad de potencia relativa de una antena es
realmente un patrón de ganancia directiva si la referencia de la densidad de potencia se toma
de una antena de referencia estándar, que por lo general es una antena isotrópica. La máxima
ganancia directiva se llama directividad.
La ganancia de potencia es igual a la ganancia directiva excepto que se utiliza el total de potencia
que alimenta a la antena (o sea, que se toma en cuenta la eficiencia de la antena). Se supone
que la antena indicada y la antena de referencia tienen la misma potencia de entrada y que la
antena de referencia no tiene pérdidas.

La intensidad de radiación se utiliza para definir la ganancia directiva de una antena (D(θ,φ)) de
acuerdo con los estándares del IEEE. Ésta se define como la relación entre la intensidad de
radiación en una dirección y la intensidad de radiación de una antena isótropa que radiara la
misma potencia total.

donde se ha sustituido la intensidad de radiación de la antena isótropa por su valor: Prad/4π. El


término de ganancia proviene de que esta magnitud indica lo que la antena refuerza su
intensidad de radiación en la dirección considerada con respecto a la antena isótropa (que
distribuye la intensidad de radiación de manera uniforme en todas las direcciones del espacio).

Directividad.

La directividad (ganancia directiva en la dirección de máxima radiación) se suele expresar en


unidades logarítmicas (dBi - decibelios con respecto a la antena isótropa). Esta magnitud
representa la capacidad que tiene una antena en concentrar la intensidad de radiación en una
determinada dirección del espacio, con lo que se convierte en una figura de mérito de su
direccionalidad, siendo mayor cuanto más estrecho sea su haz principal. Por la propia definición
de directividad, ésta tiene que ser siempre mayor que uno (igual en el caso ideal de antena
isótropa) o expresado en dBi mayor o igual a 0 dBi.

Ganancia de potencia

La ganancia de potencia se define de forma equivalente a la ganancia directiva pero


considerando la potencia entregada a la antena por el transmisor (PET) en lugar de la potencia
radiada.

La ganancia de potencia se utiliza a nivel práctico porque es fácil medir la potencia entregada a
la antena, mientras que la ganancia directiva es un concepto más usado a nivel teórico porque
la potencia radiada es más fácil determinarla a partir de los campos radiados. La relación entre
ambas ganancias es el rendimiento de radiación.

Del mismo modo que se ha definido un parámetro directividad, como la ganancia directiva en la
dirección de máxima radiación, se puede definir el parámetro de ganancia Go como la ganancia
de potencia en la dirección de máxima radiación. Este parámetro puede ser menor que la
unidad, porque incluye el rendimiento de radiación de la antena, y también se suele expresar en
dBi, como 10 log Go Por último, también se utiliza otro parámetro (en radioenlaces y sistemas
de satélite) que es la potencia isotrópica radiada equivalente o PIRE, definida como el producto
de la ganancia de potencia y la potencia entregada a la antena. Se suele expresar en dBW
(decibelios referidos a 1 W) y permite obtener la densidad de potencia radiada sin más que
dividir la PIRE por 4πr^2.

Polarización

La polarización de una antena se refiere sólo a la orientación del campo eléctrico radiado desde
ésta. Una antena puede polarizarse en forma lineal (por lo regular, polarizada horizontalmente
o verticalmente, suponiendo que los elementos de la antena se encuentran dentro de un plano
horizontal o vertical), en forma elíptica, o circular

La polarización de la antena juega un papel importante en el diseño de la misma. Recuérdese


que la polarización viene definida por la trayectoria que describe el vector de campo eléctrico
(o magnético) cuando se observa en el sentido de propagación de la onda (la onda se aleja del
observador). Así, se tiene:

-polarización lineal: las variaciones del vector de campo eléctrico están contenidas una única
dirección;

-polarización circular: el vector de campo eléctrico describe una trayectoria circular. Si rota en
el sentido de las agujas del reloj, la polarización es a derechas. Si lo hace en sentido contrario, la
polarización es a izquierdas;

-polarización elíptica: el vector de campo eléctrico describe una trayectoria elíptica. Al igual que
antes, se puede distinguir entre polarización elíptica a derechas o a izquierdas.

Se debe tener en cuenta que un cambio en el sistema de referencia del observador no produce
un cambio en la polarización. La medida de la polarización se debe realizar en la zona lejana de
la antena de tal forma que una variación en la distancia a la misma no cambie la polarización
obtenida.
Si una antena trabaja en polarización lineal vertical (por ejemplo, perpendicular a la superficie
del suelo), en teoría sólo puede transmitir y recibir ondas verticalmente polarizadas (el campo
eléctrico ha de variar en una dirección perpendicular al suelo). Así, la antena no podrá recibir
una onda polarizada horizontalmente (paralela al suelo) y se dice entonces que la antena no es
capaz de trabajar con ondas de polarización cruzada. Esto mismo se aplica al resto de
polarizaciones. Por ejemplo, una antena que use polarización circular a derechas no podrá
recibir una onda polarizada circularmente a izquierdas. Si dos antenas no utilizan la misma
polarización, sufrirán una pérdida de potencia (desacoplo de potencia).

Considérese un radioenlace entre el satélite y la estación terrestre. En general, el sistema de


referencia de la nave no ha de coincidir necesariamente con el de la antena terrestre. En el caso
de trabajar con antenas linealmente polarizadas (dipolos, por ejemplo), se produciría un
desacoplo de potencia porque las antenas no se encuentran paralelas. Se podría pensar en
ajustar el sistema de referencia de la antena terrestre al del satélite para alinear ambas antenas,
pero una forma más fácil de solucionar el problema consiste en usar polarización circular.
Además, aunque se consiguiese la alineación total entre las dos antenas, la onda linealmente
polarizada no llegaría con la misma dirección con la que fue emitida. Ello es debido a que la
dirección de polarización se altera cuando la onda atraviesa la ionosfera. Este fenómeno es
conocido como rotación Faraday y se manifiesta para frecuencias menores que 1 GHz. Sin
embargo, el fenómeno no afecta a las ondas circularmente polarizadas y llegan a su destino con
la misma polarización.

Propagación en medios con pérdidas

Un medio con perdida existe cuando hay conductividad aunque sea mínima, y como existe
conductividad dentro de este medio la onda va a cambiar. Debemos dejar bien claro que existen
dos diferencias muy notables entre las ondas planas uniformes en medios sin pérdidas y las
ondas planas uniformes en medios con pérdidas.

Lineal Circular Elíptica

La polarización lineal se produce cuando ambas componentes están en fase (con un ángulo de
desfase nulo, cuando ambas componentes alcanzan sus máximos y mínimos simultáneamente)
o en contrafase (con un ángulo de desfase de 180º, cuando cada una de las componentes alcanza
sus máximos a la vez que la otra alcanza sus mínimos). La relación entre las amplitudes de ambas
componentes determina la dirección de la oscilación, que es la dirección de la polarización
lineal.En la figura central, las dos componentes ortogonales tienen exactamente la misma
amplitud y están desfasadas exactamente 90º. En este caso, una componente se anula cuando
la otra componente alcanza su amplitud máxima o mínima. Existen dos relaciones posibles que
satisfacen esta exigencia, de forma que la componente x puede estar 90º adelantada o retrasada
respecto a la componente Y. El sentido (horario o antihorario) en el que gira el campo eléctrico
depende de cuál de estas dos relaciones se dé. En este caso especial, la trayectoria trazada en
el plano por la punta del vector de campo eléctrico tiene la forma de una circunferencia, por lo
que en este caso se habla de polarización circular.En la tercera figura, se representa la
polarización elíptica. Este tipo de polarización corresponde a cualquier otro caso diferente a los
anteriores, es decir, las dos componentes tienen distintas amplitudes y el ángulo de desfase
entre ellas es diferente a 0º y a 180º (no están en fase ni en contrafase).

Conclusión

En el transcurso del tiempo nos hemos visto muy beneficiados por la utilización de la antena en
distintos aparatos, la capacidad de poder transmitir información sin el uso de cables le ha
permitido al hombre comunicarse a grandes distancias y observar de manera distinta el
universo. Basta con pensar todos los dispositivos caseros que usan antenas, radios, teléfonos
inalámbricos, celulares, modem, routers, televisores, autos, GPSs, computadores, notebooks,
tablets, entre otros.

En el campo de las redes y telecomunicación, todavía queda mucho que investigar y mejorar con
respecto las antenas para tener altos grados de transmisión de potencia e información

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