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Seré un miembro diligente

En el mundo ser miembro de algo tiene sus ventajas. Implica privilegios. Significa que otros me
servirán. Por desgracia hay muchas personas que también consideran así lo que significa ser
miembro de una iglesia.

¿Qué es ser miembro de la iglesia según la Biblia?

1. Ser miembro de la iglesia significa que todos somos partes necesarias de un todo.
En la biblia “miembros” no tiene el mismo significado que en la cultura secular.

“Todos ustedes en conjunto son el cuerpo de Cristo, y cada uno de ustedes es parte (miembro)
de ese cuerpo. 1 Co. 17:27 NTV

Los miembros de la iglesia conforman el conjunto y son parte esencial de la Iglesia. El apóstol
Pablo desarrolla la metáfora del cuerpo y explica que los miembros son como las partes que lo
conforman. Algunos son ojos, orejas, brazos, etc. Por eso concluye: “Porque así como el cuerpo
es uno solo y tiene muchos miembros, pero, todos ellos, siendo muchos, conforman un solo
cuerpo, así también Cristo es uno solo”. 1 Co. 12:12 NTV

Ser miembros de un mismo cuerpo significa que somos diferentes pero trabajamos juntos.
Todos los miembros tienen una función. Somos diferentes, pero todos somos necesarios para el
buen funcionamiento del conjunto.

Cada parte, por lo tanto, tiene que cumplir su función, o todo el cuerpo sufre. La biblia es clara:
si una parte no cumple su papel, todo el cuerpo deja de funcionar bien. Sin embargo cuando
una parte obra como le corresponde, todo el cuerpo se alegra y se fortalece.

“​Si una parte sufre, las demás partes sufren con ella y, si a una parte se le da honra, todas las
partes se alegran.” 1 Co. 12:26 NTV

2. Ser miembro significa que todo lo que decimos y hacemos se basa en el fundamento
bíblico del amor.

1 Corintios 13 fue escrito para mostrar cómo los miembros de la Iglesia se relacionan entre sí. Si
tan solo consiguiéramos ser fieles a los principios del capítulo del amor. Tendríamos iglesias
completamente saludables.
“El amor es paciente y bondadoso. El amor no es celoso ni fanfarrón ni orgulloso​ ​ni ofensivo. No
exige que las cosas se hagan a su manera. No se irrita ni lleva un registro de las ofensas
recibidas.” 1 Co. 13:4-5 NTV

No debemos amar sólo a los hermanos que son fáciles de amar; debemos amar también a los
que no son. No tenemos que limitarnos a orar y a animar a nuestros hermanos cuando hacen
las cosas que nos agradan; debemos orar por ellos y animarlos cuando hacen cosas que no nos
gustan. No podemos servir a la iglesia solo cuando los demás cooperan; debemos servir aún
cuando seamos los únicos que colaboramos.

El fundamento de la membresía de la Iglesia es el amor: el amor auténtico, bíblico e


incondicional.

3. Ser miembro de la Iglesia es tener una función


¿Qué hay que hacer para pertenecer a un club social? Basta pagar la cuota.
¿Qué hay que hacer para para seguir siendo un miembro bíblico de una Iglesia? Dar en
abundancia y servir sin titubear.

La membresía bíblica de la Iglesia implica dar en forma incondicional. Los miembros bíblicos de
la Iglesia son dadores alegres de los diezmos y ofrendas sin condiciones.
Los miembros bíblicos de la Iglesia sirven y ministran. Porque es la forma natural de hacer las
cosas.

Ser miembro de la Iglesia supone participar. Pablo usa la metáfora del cuerpo para referirse a la
iglesia, primero, porque el cuerpo es un conjunto unido, por consiguiente la iglesia debería
estar unida en su misión, propósito, ministerios y actividades. Y segundo, el cuerpo además de
estar unido está conformado de muchas partes y cada una de estas tiene una función
particular.

1 Co. 12:26 menciona:


- El pie: para caminar
- La mano: sostener y aferrar
- La oreja: para escuchar
- El ojo: para ver
- Nariz: para oler

Todos los que somos miembros de una Iglesia deberíamos de tener una función ahí. Por eso se
nos exhorta a conocer nuestros dones y capacidades, para usarlas de la mejor manera, al
servicio de la iglesia para la gloria de Dios. La gran diversidad en nuestras iglesias es nuestra
fortaleza. Todos tienen una función, todos deberían trabajar.

Una de las preguntas constantes que deberías hacerte y hacerle a Dios en oración es: ¿cómo
puedo servir mejor a mi iglesia?. No te preguntes nunca si deberías servir a la iglesia.

Si eres miembro de una iglesia debes estar activo. Así de simple.

La triste realidad es que si en tu iglesia asisten 300 miembros, probablemente solo 100 sean
miembros bíblicos verdaderos. Sólo un tercio son miembros diligentes, que ofrenda con
generosidad y sirve sin titubear.

PRIMER PROMESA
Yo soy miembro de una Iglesia.
Me agrada la metáfora de ser miembro. No es lo mismo que ser miembro de una organización
cívica o de un club social. Según 1 Co. 12:27 “Ahora bien, ustedes son el cuerpo de Cristo, y
cada uno es miembro de ese cuerpo”. Como soy parte del cuerpo de Cristo, debo tener una
función, “ojo”, “oreja”, “mano”. Como miembro diligente, con una función en particular, me
comprometo a dar, a servir, a ministrar, a evangelizar, a estudiar. Procuraré ser de bendición a
los demás. Recordaré que “si un miembro padece, todos los miembros se duelen con él, y si un
miembro recibe honra, todos los miembros con él se gozan”. 1 Co. 12:26

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