Universidad Nacional Experimental de las Artes

Centro de Estudio y Creación Artística Metropolitano

Programa Nacional de Formación: Artes Audiovisuales
Plan de Estudio: Licenciatura en Artes Audiovisuales
Mención: Cinematografía
Sección: Piso 02, Aula 10
Unidad Curricular: Bioética y Modelos de Desarrollo 1
Profesora: Gepsi Gastello

Actividad N° 06

ENSAYO SOBRE INTERVENCIÓN DEL HOMBRE SOBRE LOS

SERES VIVOS. TEMA: ANIMALES.

Bachiller: Eduardo Conde

CI.V-13.859.799
eduardolibertador@gmail.com
0414-225.44.78

Caracas, 14 de Diciembre de 2018

 Es una realidad indiscutible el hecho que la especie humana en el devenir de su
historia ha mantenido una estrecha interrelación con los animales por razones de
supervivencia. Una de las actividades a las que el ser humano se ha dedicado
para lograr este fin es al estudio del comportamiento humano a través del estudio
del comportamiento de los animales; es así que la Psicología investiga cómo y por
qué los animales actúan como lo hacen y a su vez transpolar los resultados de sus
investigaciones a la comprensión del comportamiento humano. Se cree que esto
podría inclusive ayudar a explicar la etiología y el tratamiento de las enfermedades
mentales de las personas. Pero una investigación más profunda en los anales de
la historia de estas prácticas científicas, nos lleva a descubrir que se han originado
en la consecución y el mantenimiento del poder económico y financiero de algunas
personas y grupos, y no por razones altruistas como se querido hacer creer.

La primera y la segunda guerras mundiales fueron caldos de cultivo y

justificación para la realización de experimentos psicológicos con animales; dichos
estudios fueron autorizados por Estados y gobiernos que ansiaban establecer,
mantener y ampliar su poder político e ideológico sobre los pueblos del mundo;
empero, las máximas experiencias nos dicen que dichas acciones bélicas fueron
(y hoy día aún los son) promovidas y financiadas por personas y grupos
económicos hegemónicos que solo procuran expandir y asegurar su capital
financiero.

Es así que el estudio del comportamiento animal desde esas remotas épocas
es hecho con el fin de controlar el comportamiento humano para hacerlo más
adaptable al sistema que se procura imponer y mantener. Por ejemplo, durante las
precitadas guerras las escuelas Conductista, Gestalista y Psicoanalítica
experimentaron un amplio desarrollo bajo el amparo de gobiernos totalitarios como
el nazismo, el fascismo y el estalinismo, y el apoyo financiero de fundaciones
adscritas a Ford y Rockefeller, entre otros.
 De modo que, a partir de los crecientes resultados de las investigaciones de
estas y otras escuelas psicológicas se ha intentado ejercer el control sobre las
masas. Desde esta ciencia y otras relacionadas al campo humano y social se han
creado los modelos sociales imperantes; sus hallazgos comportan los principios,
creencias, normas y valores que atraviesan las legislaciones, los programas
educativos y la información que se transmite a través de los medios de
comunicación de masas; la familia, la escuela, el trabajo, etc., es decir, todas las
instituciones socializadoras en las que el ser humano nace, se desarrolla y muere,
devienen así en instrumentos incuestionables de reproducción de sistemas de
poder.

Ahora bien, muchas de esas investigaciones realizadas a partir de la

experimentación con animales, una vez expuestos sus métodos a la luz de la
opinión pública, han sido objeto de cuestionamientos y debates que han colocado
en tela de juicio la crueldad a la que han sido sometidos éstos. Muchas
organizaciones han emergido y se han alzado en protesta contra este tipo de
prácticas logrando incidir en las legislaciones de muchas naciones con miras a
proteger y a mermar el desastre ecológico y moral de nuestra sociedad. Un
ejemplo de ello es la creación de los Derechos Humanos de Cuarta Generación.
Pero más allá del aspecto moral, de lo que se trata, creo yo, es de cada ser
humano se haga un profundo cuestionamiento ético de sus prácticas cotidianas,
de su estilo, modo y proyecto de vida.

He de comenzar por mí mismo. Estoy preparándome para hacer artes

audiovisuales, de tal manera que bien puedo hacer un guión, un diseño de
dirección, de fotografía, de sonido y de montaje que tome en consideración el
componente moral con respecto a la preservación del ecosistema, la fauna en este
caso; y ello implicaría revelar estéticamente mi compromiso bioético con esa noble
e impostergable causa con miras a transformar los paradigmas que se reproducen
desde las esferas de poder.
 Por último, y a modo de ejemplificar lo expuesto, me permito mencionar que
entre las décadas de 1940 a 1950 el Psicólogo estadounidense Harry Harllow en
la Universidad de Wisconsin, realizó un conjunto de experimentos con monos
Rhesus, con la intención de estudiar la relación entre la privación del estímulo
social y el comportamiento. Este científico sometió a dichos primates a
experiencias de privación sensorial y de estimulación social, que conllevaron a los
monos a auto mutilarse, deprimirse y suicidarse. A partir de los resultados de sus
investigaciones hoy está en boga la llamada Teoría del Apego; la cual es plexo de
legislaciones y tratados científicos que tratan sobre la importancia del vínculo
afectivo parento – filial. No obstante, dichos estudios, fueron objeto de severas
críticas por parte de la comunidad científica, sobre todo porque a criterio de
algunos Psicólogos de la época los resultados de dichas investigaciones ya se
habían logrado obtener a partir de estudio del comportamiento de los niños que
eran víctimas de la orfandad y de la institucionalización producto de las guerras
mundiales. Pese a las críticas, estudios como estos se continúan llevando a cabo
en la actualidad bajo el consentimiento de algunos gobiernos.

“…En el Laboratorio de Primates de Wisconsin, se ha llevado a cabo el estudio del

comportamiento social temprano durante más de 20 años. Han prevalecido tres
estrategias básicas: la primera, trata de identificar las variables que afectan el rol
comportamental en monos de diferente sexo y edad. Por ejemplo, los estudios
realizados con madres sustitutas artificiales, han mostrado que el contacto
confortable es la variable más importante en el establecimiento de la relación
madre-infante, mientras que la temperatura, nutrición y movimiento son variables
aunque significativas, secundarias. (Harlow y Suomi, 1970)…”

Suomi, Stephen J.; Harlow, Harry F. Experiencias tempranas y psícopatología

inducida en monos Rhesus. Revista Latinoamericana de Psicología, vol. 7, núm. 2,
1975, pp. 205 -229. Fundación Universitaria Konrad Lorenz. Bogotá, Colombia.

Estos experimentos han continuado llevándose a cabo en las instalaciones de la

National Insitute of Health, en Poolesville, Maryland, creado en 1962. El Instituto
es parte de los Institutos Nacionales de la Salud (NIH, por sus siglas en inglés) del
Departamento de Salud y Servicios Humanos de los Estados Unidos, y al Instituto
Nacional de la Salud Infantil y Desarrollo Humano Eunice Kennedy Shriver
(NICHD, por sus siglas en inglés) una agencia del gobierno federal de ese país
que realiza investigaciones sobre temas de salud.

EXPERIENCIAS TEMPRANAS Y PSICOPATOLOGIA INDUCIDA EN MONOS

RHESUS

Véase también: http://losmonosdeharlow900.blogspot.com/