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“ESTRÉS & BURNOUT EN EL MINISTERIO PASTORAL; QUE ES, Y COMO

AFRONTARLO”

Por
Raúl Martínez García
Monterrey, México

TRABAJO DE INVESTIGACIÓN

En cumplimiento parcial de los requisitos


del Seminario I del
INSTITUTO DE SUPERACION MINISTERIAL

y relativo a la asignatura
“Psicología Pastoral”
Cursado en Monterrey, México, Junio de 2018

Profesor: Raymundo Gutiérrez

Julio 2018
CONTENIDO

Introducción .............................................................................................................. 1

1. Estadísticas del estrés en pastores y ministros ...................................................... 2

1.1 Estadísticas sobre la falta de cuidado emocional y falta de capacitación de los

pastores. ................................................................................................................ 3

2. Características del estrés en el ministerio ............................................................. 5

2.1 Sugerencias extraídas de la Biblia. ................................................................. 8

Conclusión .............................................................................................................. 13

Bibliografía ............................................................................................................. 14

ii
1

Introducción

Pastores y otros líderes ministeriales están constantemente bajo mucho estrés de

manera que pueden llegar a encontrarse en situaciones de riesgo, a punto de llegar a un

estado de burnout por agotamiento, o de extinguirse moralmente.

El estrés que los pastores enfrentan hoy en día es enorme. Las expectativas que las

personas ponen sobre sus hombros son debilitantes. A donde quiera que los pastores van

se espera que siempre estén en condiciones óptimas, listos para dar un liderazgo estelar,

compasión sin fin, un mensaje inspirador, oraciones llenas de unción, y palabras de

ánimo.

Sin embargo, como en cualquier otro empleo y aún mucho más por la naturaleza

de su trabajo, y las demandas que las personas ponen sobre de ellos, “puede que los

pastores experimenten altos niveles de estrés, depresión, quedar atrapados en conductas

compulsivas y pecaminosas. Oh que se terminen sintiendo espiritualmente secos,

cansados del ministerio, enojados con Dios, estancados en su vida espiritual, o con

síndrome de burnout.”

Por lo tanto, en este trabajo de investigación se tiene como objetivo el informar

sobre las características del estrés, y del síndrome de burnout, su presencia en pastores

evangélicos, sus principales causas, alarmantes consecuencias, medidas preventivas y

soluciones para afrontar este urgente problema.


2

Así mismo se muestran los resultados de una encuesta aplicada a estudiantes ISUM

Quinta Sede, Monterrey, N.L. México de las Asambleas de Dios, los cuales arrojan

información sobre el nivel de estrés, y del síndrome de burnout entre los ministros. De ser

necesario se llevarán los resultados con las autoridades competentes para sugerir el

implementar un plan de acción para salvaguardar la integridad, y la efectividad de su

cuerpo pastoral.

Estadísticas del estrés en pastores y ministros

De acuerdo con la organización sin ánimo de lucro Soul Shepherding, ministerio

enfocado al cuidado emocional de los pastores obtuvo estos resultados después de

entrevistar 1,050 pastores reformados y evangélicos de los Estados Unidos. La pregunta

fue la siguiente: “¿Cuál es la causa de los problemas emocionales de los pastores, y de sus errores

morales? Un factor principal es el gran estrés provocado por el ministerio.

 75% reportan estar “extremadamente estresado” o “muy estresado”

 90% trabajan de 55 a 75 horas por semana.

 90% se sienten fatigados y desgastados al menos una vez a la semana.

 70% dicen que su trabajo es muy mal pagado.

 40% reportan un serio conflicto con un feligrés al menos una vez al mes.

 78% fueron forzados a renunciar, 63% al menos dos veces, en su mayoría

por conflictos de la iglesia.


3

 80% no van a estar en el ministerio en diez años, y solo una pequeña

fracción logran una carrera de por vida en el ministerio.

 100% de los pastores evangélicos y pastores reformados conocen a un

colega que ha abandonado el ministerio debido al cansancio, a un conflicto

en la iglesia, o a una falta moral.

 91% ha experimentado síntomas de burnout.”1

Estadísticas sobre la falta de cuidado emocional y falta de capacitación de los

pastores.

 70% no tienen a alguien que consideren un verdadero amigo cercano.

 50% no frecuentan regularmente a una *“persona o grupo de

responsabilidad”

 72% solo estudian la Biblia cuando preparan un sermón o lección.

 21% invierten menos de 15 minutos en oración al día — El promedio es 39

minutos al día.

 16% están “muy satisfechos” con su vida de oración, 47% están

“moderadamente satisfechos”, y el 37% están “insatisfechos” con su vida

de oración.

1
“Pastor Stress Statistics” Soul Shepherding. www.soulshepherding.org/pastors-under-stress/
Último acceso el 01 de noviembre del 2018).
4

 44% de los pastores no toman regularmente un día libre.

 37% no hace ningún tipo de ejercicio.

 90% dicen no haber recibido un entrenamiento adecuado para satisfacer las

demandas del ministerio.

 85% nunca han tomado un periodo de descanso de sus actividades

ministeriales.”2

Es importante que el ministro tenga un compañero de batalla, no es nada

recomendable que tenga una vida solitaria y alejada de toda relación humana. Compañero

de responsabilidad: Proviene del término “accountability partner”, “Un compañero de

batalla” “Es la colaboración de dos colegas que se quieren y respetan el uno al otro, es una

persona en quien confías, y te ayuda a mantenerte honesto y avanzando hacia los objetivos

que te has planteado. Este término fue usado por primera vez en los 60’s en los programas

de pérdida de peso.”3 La Biblia dice: Sobrellevad los unos las cargas de los otros, y

cumplid así la ley de Cristo.4

La investigación titulada: “Calidad de vida, desarrollo personal y profesional de

los pastores protestantes” analizo las variables enmarcadas en el titulo antes expuesto en

un grupo de 504 pastores protestantes evangélicos que ejercían sus funciones en 31 países

entre los meses de mayo y noviembre del año 2015. Y se encontró una opinión

2
“Pastor Stress Statistics” Soul Shepherding. www.soulshepherding.org/pastors-under-stress/
Último acceso el 01 de noviembre del 2018).
3
Katy Christian Magazine. Retrieved 2016-02-13.
4
Gá 6:2 RV60
5

generalizada en que, al momento de desarrollar ciertas actividades, ello genera mucha

tensión que da con la presencia de altos niveles de estrés, lo cual se ve reflejado en el

deterioro de la salud de muchos de los participantes. Los conflictos relacionados con el

estrés en el entorno pastoral pueden ser atribuidos a múltiples factores, siendo uno de los

principales el intentar paliar las necesidades de muchos fieles o personas que demandan

apoyo, con escasos recursos, ello impacta negativamente el estado emocional de los

pastores en gran manera, con un nivel de frecuencia alto.”5

Características del estrés en el ministerio

De un modo muy simplificado, si el estímulo psicosocial (stressor) se prolonga en

el tiempo y es significativo para su receptor, las personas tenderán a sufrir 4 tipos de

alteraciones; 1) Psicológicas (cuadros de ansiedad, depresión, agresividad) y

psicosomáticas (hipertensión, úlcera duodenal, infarto de miocardio, etc.) 2)

Interpersonales: trastornos en las relaciones con los demás: violencia verbal o física,

aislamiento, impaciencia. 3) Tendencia a adicciones: alcohol, tabaco, drogas, café,

alimentos, especialmente los llamados “comida chatarra”. 4) Tendencia a accidentes.

Cada vez son más los ministros y pastores que sufren alteraciones psicológicas a

causa del stress:

En 2ª Corintios 11:28. Tenemos a Pablo, enumerando todas las formas en las que ha

sido azotado por la causa de Jesús: encarcelamientos, latigazos, varas, pedradas,

5
Mario Javier Cuevas Henríquez, “Calidad de vida, desarrollo personal y profesional de los
pastores protestantes” (tesis doctoral, 2017), 180.
6

naufragios, navegando a la deriva en el mar, hambre, sed, frío, peligro de todos en todo

lugar (vv. 23-27). Y al final como queriendo separar y resaltar de manera especial, Pablo

menciona una prueba más: “Además de tales cosas externas, está sobre mí la presión

cotidiana de la preocupación por todas las iglesias” (v. 28). Este es el apóstol, el que

contó una alegría el “gastarse y ser gastado” para su pueblo (12:15), el que se entristecía,

pero siempre regocijaba (6:10). Este es el Pablo que enfrentó toda oposición imaginable

y aun así aprendió a estar contento (Fil 4:11) y ansioso por nada (4:6). Y aquí está

admitiendo que aun con todo lo que ha sobrellevado, todavía siente preocupación por

todas las iglesias

No es que los ministros y pastores hayamos logrado lo que Pablo logró o que haya

sufrido lo que Pablo sufrió, pero cada ministro serio siente esta carga por la iglesia. Y

Pablo tenía varias iglesias por las que sentir carga. Las iglesias estaban llenas de luchas

internas y murmuración. Soportaban las falsas enseñanzas. Eran propensas a legalismo en

un extremo y a un completo caos en el otro. Algunos de los miembros de la iglesia estaban

haciendo demasiado importantes las cosas insignificantes, mientras que otros estaban

demasiado dispuestos a ceder en los esenciales cristianos. Pablo amaba a estas iglesias, y

sus luchas lo cargaban más que el naufragio o el encarcelamiento.

Antes hay que resaltar algo muy importante: Los pastores no son los únicos que

tienen cargas. En muchos sentidos, tienen el mejor trabajo en todo el mundo. Ciertamente

los llamados por el Señor se deben de sentir privilegiados y agradecidos porque fue El

quien los llamó a su servicio. No se tiene ningún interés en comparar la dificultad del
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ministerio pastoral con las dificultades de otras vocaciones. Lo único que se quiere es

animar a los pastores y ministros a seguir peleando la buena batalla y animar a las

congregaciones a que continúen apoyando a sus pastores.

Cada una de estas circunstancias tal vez se pasen en menor o mayor grado por cada

uno de los que han sido llamados a este ministerio pastoral, no deben olvidar que cuando

el llamado es divino la provisión, la fortaleza y la soluciones son divinas.

Kurt Brink en su libro “Superando las trampas pastorales”6 escribe sobre lo que

uno debe pensar de sí mismo, así evitando el pecado de orgullo, soberbia y vanidad

(paráfrasis): La Escritura advierte contra este pecado y lo castiga. Pablo dice, "El que se

cree ser algo, no siendo nada, a sí mismo se engaña" (Gálatas 6:3). Pregunta a los

corintios, “¿quién te hace superior? ¿Y qué tienes que no hayas recibido? Y si lo recibiste,

¿por qué te glorías como si no lo hubieras recibido?" (1ª Corintios 4:7). Pedro exhorta,

"y todos, sumisos unos a otros, revestíos de humildad, porque “Dios resiste a los

soberbios, y da gracia a los humildes”. Humillaos, pues, bajo la poderosa mano de Dios,

para que él os exalte a su debido tiempo" (1ª Pedro 5:5-6). Y Pablo otra vez, "Digo, pues,

por la gracia que me es dada, a cada cual que está entre vosotros, que no tenga más alto

concepto de sí que el que debe tener, sino que piense de sí con cordura, conforme a la

medida de fe que Dios repartió a cada uno" (Romanos 12:3). Comentando sobre los

atributos de las epístolas pastorales, el autor escribe:

Los ministros que han estado en la vocación por un tiempo pueden comprender las
dificultades en cumplir con las palabras en el pastoreo diario. Un miembro puede

6
Kurt, Brink, Overcoming Pastoral Pitfalls (Concordia Publishing, 2003), 130.
8

llegar a estar muy enojado en una asamblea, a veces sin un buen motivo. Cuando
esto pasa, el pastor debe, por la gracia de Dios, mantener la calma y no responder
de una manera similar. Las Escrituras animan al pastor a sufrir lo malo, más bien
que hacer lo malo. Pastores que son como un toro en la tienda de cerámicas en una
reunión de la congregación perderán su reputación delante de los miembros y
pueden poner a riesgo su ministerio en ese templo.

Sugerencias extraídas de la Biblia.

El libro de los Proverbios ofrece estas joyas de la sabiduría divina: "El que

fácilmente se enoja hará locuras" (14:17). "El hombre iracundo promueve contiendas;

Mas el que tarda en airarse apacigua la rencilla" (15:18). "La blanda respuesta quita la

ira; Mas la palabra áspera hace subir el furor" (15:1). Los pastores deben estar prontos

a decir; "Lo siento; por favor, perdónenme," cuando fallamos, y no guardar rencor contra

la persona que nos ha ofendido, como dice el apóstol Pedro: “Porque esto merece

aprobación, si alguno a causa de la conciencia delante de Dios, sufre molestias

padeciendo injustamente. Pues ¿qué gloria es, si pecando sois abofeteados, y lo

soportáis? Mas si haciendo lo bueno sufrís, y lo soportáis, esto ciertamente es aprobado

delante de Dios. Pues para esto fuisteis llamados; porque también Cristo padeció por

nosotros, dejándonos ejemplo, para que sigáis sus pisadas; el cual no hizo pecado, ni se

halló engaño en su boca; quien cuando le maldecían, no respondía con maldición; cuando

padecía, no amenazaba, sino encomendaba la causa al que juzga justamente; quien llevó

él mismo nuestros pecados en su cuerpo sobre el madero, para que nosotros, estando

muertos a los pecados, vivamos a la justicia; y por cuya herida fuisteis sanados. Porque
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vosotros erais como ovejas descarriadas, pero ahora habéis vuelto al Pastor y Obispo de

vuestras almas.” (1° Pedro 2:19-25). Es muy difícil ser un buen y fiel pastor; si no por la

gracia de Dios, ¡no habría sobrevivientes! El líder pastoral necesita trabajar diariamente

para preservar la unidad del espíritu en el vínculo de paz en la congregación que sirve.

Contienda y amargura y falta de unidad son la regla en algunas congregaciones cristianas;

la falta de armonía entre el pastor y el pueblo es común. El evangelio de Cristo no

prosperará en tal ambiente, y las congregaciones no crecen mientras tales condiciones

existen. La siguiente es una lista de sugerencias: 1) El pastor necesita estar lleno de fe en

Cristo como su Salvador personal del pecado y lleno de un profundo amor a su Salvador

y a la gente que sirve. 2) El pastor necesita constantemente nutrir la fe de los miembros

por medio de la palabra en sus sermones. 3) El pastor luchará contra del diablo y no contra

los miembros. 4) El pastor debe ser apacible y pacífico. Debe luchar para controlar su

temperamento. Muestras de ira pueden causar divisiones y negar el ministerio del

evangelio. 5) Debe haber buenas comunicaciones. Miembros bien informados

contribuirán a la cohesión de la congregación. 6) El pastor no se exaltará sobre los

miembros. No somos señores sobre la herencia de Dios, sino siervos, tal como nuestro

Señor no vino para ser servido, sino para servir. 7) El pastor estimará a sus miembros. La

iglesia es el pueblo. El pastor respetará los miembros por su oficio. 8) El pastor confiará

en los miembros, en la junta. Escuchará sus consejos para mejorar su ministerio entre

ellos. 9) El pastor ayudará la congregación en la selección de su junta, buscando la persona

más apta para cada posición de autoridad en la congregación. 10) El pastor buscará
10

sabiduría y un buen sentido común en sus relaciones con sus miembros. No insistirá en

que sus ideas son las mejores. Si la congregación no acepta sus ideas, se retrocederá y

mostrará paciencia, pensando que su idea servirá en otra oportunidad. No se molestará con

los miembros que no aceptan sus ideas. 11) El pastor no participará en la facciones en una

congregación. Mantendrá buenas relaciones con todos los miembros, aún con los que le

oponen. Algunos notarán que Dios mismo se enojó en la Biblia. Cuando Dios se enojó

siempre era por causa de alguna actividad que resultaría en que personas dejen de creer o

no lleguen a creer en el evangelio. Jesús se enojó con los fariseos, llamándoles

"Generación de Víboras" porque estaban engañando a la gente y mostrando un falso

camino a la salvación. El caso de los vendedores en el templo es similar, inhibiendo que

las personas pongan en práctica su fe salvadora. Jesús dijo: "Cualquiera que haga tropezar

(es decir, causar que no crea en él) a alguno de estos pequeños que creen en mí, mejor le

fuera que se le colgase al cuello una piedra de molino de asno, y que se le hundiese en lo

profundo del mar" (Mateo 18:6). En contraste, al enfrentarse con los pecadores, Jesús

siempre mostró compasión, perdonando los pecados. Además, Dios (Jesús) tiene pleno

derecho de enojarse porque él es perfecto. Un imperfecto no tiene tal derecho. Dios no

quiere que la ira, el enojo, el regaño, la gritería, sea una parte de nuestras relaciones

interpersonales. Pongamos en práctica la humildad, la paciencia, la compasión Me gusta


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el poema titulado “Si…”de Rudyard Kipling un poeta, periodista y novelista inglés que

dice:7

Si puedes mantener la cabeza cuando todo a tu alrededor

pierde la suya y te culpan por ello;

Si puedes confiar en ti mismo cuando todos dudan de ti,

pero admites también sus dudas;

Si puedes esperar sin cansarte en la espera,

o, siendo engañado, no pagar con mentiras,

o, siendo odiado, no dar lugar al odio,

y sin embargo no parecer demasiado bueno, ni hablar demasiado sabiamente;

Si puedes soñar-y no hacer de los sueños tu maestro;

Si puedes pensar-y no hacer de los pensamientos tu objetivo;

Si puedes encontrarte con el triunfo y el desastre

y tratar a esos dos impostores exactamente igual,

Si puedes soportar oír la verdad que has dicho

retorcida por malvados para hacer una trampa para tontos,

O ver rotas las cosas que has puesto en tu vida

y agacharte y reconstruirlas con herramientas desgastadas;

7
Tu nueva información.“Un maraviloso poema de Rudyard Kipling”.
http://www.tunuevainformacion.com/gente-y-mundo/305-un-maravilloso-poema-de-rudyard-kipling-para-
deleitaros-con-su-lectura-en-espanol-y-en-ingles.html (Último acceso el 2 de noviembre del 2018).
12

Si puedes hacer un montón con todas tus ganancias

y arriesgarlo a un golpe de azar,

y perder, y empezar de nuevo desde el principio

y no decir nunca una palabra acerca de tu pérdida;

Si puedes forzar tu corazón y nervios y tendones

para jugar tu turno mucho tiempo después de que se hayan gastado

y así mantenerte cuando no queda nada dentro de ti

excepto la Voluntad que les dice: “¡Resistid!”

Si puedes hablar con multitudes y mantener tu virtud

o pasear con reyes y no perder el sentido común;

Si ni los enemigos ni los queridos amigos pueden herirte;

Si todos cuentan contigo, pero ninguno demasiado;

Si puedes llenar el minuto inolvidable

con un recorrido de sesenta valiosos segundos.

Tuya es la Tierra y todo lo que contiene,

y —lo que es más— ¡serás un Hombre, hijo mío!


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Conclusión
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Bibliografía

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