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artículo de revisión / review article

revisión básica / basic review

Neuroplasticidad, Neuromodulación y
Neurorrehabilitación: Tres conceptos distintos y
un solo fin verdadero

Neuroplasticity, Neuromodulation, and Neurorehabilitation:


Three different concepts, one only true goal

Edgardo A. Bayona1, Jaime Bayona Prieto2, Fidias E. León-Sarmiento3

Resumen

El sistema nervioso es un sistema cerrado pero, a la vez, muy dinámico, que asimila,
reorganiza y modifica los mecanismos biológicos, bioquímicos y fisiológicos que posee. Esta
capacidad se denomina neuroplasticidad e implica cambios en el tejido neural que incluyen
regeneración axonal, colateralización, neurogénesis, sinaptogénesis y reorganización fun­
cional, entre otros mecanismos. Dichos mecanismos emplean neurotransmisores como el
N-metil-D-apartato (NMDA), el ácido gama-aminobutirico (GABA), la acetilcolina o la
serotonina, involucrados en la potenciación o depresión sináptica a corto o largo plazo, la
cual puede durar horas o días, sostenida por segundos mensajeros como el AMP cíclico,
cuyos efectos pueden ser transitorios o permanentes. Estos efectos son la base de la

Fecha de aceptación: 18 de marzo de 2011


Fecha de recepción: 8 de octubre de 2010
neuromodulación. Esta última genera cambios a largo plazo en la actividad metabólica
neuronal y su respuesta a diversos estímulos eléctricos, magnéticos o químicos, empleados
en la neurorrehabilitación clínica. Dicha neurorrehabilitación es una intervención nece­
saria en, al menos, el 75% de los pacientes que han padecido un insulto neural, cuyo
fundamento es la recuperación funcional del paciente. Por esto, la responsabilidad de los
neurólogos clínicos, los neurocirujanos, los pediatras, los neuropediatras, los ortopedistas,
los siquiatras y los cirujanos en general, entre otros profesionales de la salud, debería ser
no solo proveer un diagnóstico y suministrar un tratamiento médico o quirúrgico, sino
reorientar al paciente hacia un programa formal de neurorrehabilitación, liderado por
especialistas en el área, en el que le ayudarán a alcanzar una apropiada funcionabilidad,

1
Coordinador del Laboratorio Neuroclínico y Funcional Neuro.net, Fundación Tomodachi; director
del Grupo PEDIGRAFIA, Colciencias. Bogotá (Colombia).
2
Especialista en Neurorrehabilitación; Master en Investigaciones y Neurorrehabilitación Clínica;
director del Centro de Investigaciones en Rehabilitación Integral y Neurofisiatría del Oriente
(CIRINEO). Bogotá (Colombia).
3
Neurólogo Clínico, Subespecialista en Movimientos Anormales y Enfermedades Neuromusculares;
director de la Unidad de Parkinson y Movimientos Anormales, Mediciencias Research Group,
categoría A, Colciencias; profesor de Neurología y Neurofisiología Clínica, Sección de Medicina
Aeroespacial, Universidad Nacional. Bogotá (Colombia).
Correspondencia: Dr. Fidias E. León-Sarmiento, Unidad de Parkinson y Movimientos Anormales,
Mediciencias Research Group, calle 50 n° 8-27 (604), Bogotá (Colombia); Tel/Fax: 3112427571.
feleones@gmail.com Vol. 27, N° 1, 2011
ISSN 0120-5552

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Jaime Bayona Prieto, Edgardo A. Bayona, Fidias E. León-Sarmiento

una óptima neurorrestauración y una adecuada calidad de vida, incluyendo la de sus


correspondientes familias.
Palabras clave: Neuroplasticidad, neuromodulación, neurorrehabilitación, inte­
gración sensori-motora, neurofisiatría.

Abstract

The nervous system is a closed system but, at the same time, is very dynamic and able to
adapt, reorganize and modify the biological, biochemical and physiological mechanisms
that it poses. This ability is called neuroplasticity and implies changes in neural struc­
tures such as axonal regeneration, collateralization, neurogenesis, synaptogenesis and
functional reorganization, among other mechanisms. These mechanisms involve differ­
ent neurotransmitters such as N-metil-D-apartate (NMDA), gama-amynobutiric acid
(GABA), acetilcholine or serotonine; they are involved in short-term depression and po­
tentiation which may last hours or days, maintained by second messengers such as cyclic
AMP; its effects may be transient or permanents, and they are the basis of neuromodula-
tion. This latter concept involves long term changes on the neuronal metabolism and its
responses to electrical, magnetic or chemical stimuli are employed for neurorehabilitation.
Neurorehabilitation is an intervention that must be applied in, at least, seventy five per­
cent of patients suffering neural injuries being its main goal the functional recovery of
patients. Accordingly, clinical neurologist, neurosurgeons, pediatricians, neuropediatri­
cians, orthopedic surgeons, psychiatrists and general surgeons, among other health care
professionals should offer not only a diagnosis and its corresponding medical or surgical
treatment, but also to reorient patients toward neurorehabilitation programs led by a
specialist properly trained in this area. This will help patients to obtain optimal function­
ing, better neurorestaurative condition and a more appropriate quality of life of patients
and their relatives.
Key words: Neuroplasticity, neuromodulation, neurorehabilitation, sensori-mo-
tor integration, neurophysiatrist.

INTRODUCCIÓN En la actualidad, la neuroplasticidad, la


neuromodulación y la neurorrehabilitación
El sistema nervioso es no solo complejo sino son áreas que, en general, han aportado
dinámico, y su funcionamiento depende en gran­des beneficios a los programas de in­
gran parte del aporte adecuado de oxí­ge­ tervención clínica, programados de ma­nera
no y glucosa, principalmente (1); por ello, cuidadosa para cada caso en particular.
la falta de alguno de estos elementos ori- Con este enfoque se está logrando cambiar
gina un sinnúmero de trastornos que en la aquel cruel destino establecido en algunos
actualidad se abordan desde diver­sos án- círculos científicos y académicos para las
gulos, que incluyen el empleo de la neuro- personas que sufren lesiones neurológi-
plasticidad intrínseca que po­see el sistema cas, quienes han tomado solo, de manera
nervioso, utilizando los neuromo­duladores par­cial, la parte introductoria que Ramón
propios de cada grupo celular, con el fin de y Cajal planteó hace ya más de un siglo
ayudar a neurorehabilitar al in­dividuo afec­ cuan­­do dijo inicialmente: “En los cerebros
tado. adultos las vías nerviosas son algo fijo; ter­
minado, inmutable. Todo puede morir,

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Neuroplasticidad, Neuromodulación y Neurorrehabilitación:
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nada puede regenerase”…pero no hubiera ciencias básicas, traslacionales y clí­nicas y


sido quien fue don Santiago Ramón y Cajal que están demostrando, cada vez más, que
si no hubiera concluido de manera visionar- la integración de estas disciplinas ayuda a
ia que correspondía “a la ciencia del futuro mejorar la calidad de vida de los individuos
cambiar, si es posible, este cruel decreto” (2) afectados o a riesgo de serlo, de una mejor
(Figura 1). forma que la planteada aún a finales de
siglo XX.

Neuroplasticidad

Ramón y Cajal (3) postuló que el cerebro


cam­bia de forma permanentemente, lo
que le da la oportunidad de adquirir y eli­
minar datos de manera continua, desde la
concepción hasta la muerte. Lo anterior
fue apoyado por Lugano, en 1906, quien
acuñó el tér­mino “plasticidad cortical” para
referirse a la capacidad que tiene el sis­te­
ma nervioso de adaptarse a los insultos
(4); pero fue hasta 1973 que se encontraron
evidencias que apoyaron los supuestos de
Ramón y Ca­­jal, resaltadas en su momento
por unos pocos científicos de la época, entre
los que se encontraba el premio Nobel John
Eccles (5).

Gollin (6) la definió como el potencial para el


cambio y la capacidad de modificar nuestra
conducta, esto con el fin de adaptarse a las
demandas de un contexto particular. Ka­­
plan (7) dijo que es la habilidad que tie­ne
cualquier organismo vivo para modifi­car
sus sistemas orgánicos y patrones con­duc­
Figura 1. Portada del libro escrito por Santiago tuales. Bergado (8) considera que el sis­
Ramón y Cajal, en el que sugirió que el proceso te­ma nervioso es un producto sin ter­mi­
de plasticidad cerebral era algo posible de nar y es el resultado siempre cambiante y
demostrar en las generaciones que le seguirían cam­biable, de acuerdo con la interacción
a sus investigaciones. de factores genéticos y epigenéticos. James
planteó que es la capacidad que posee una
El propósito de este trabajo es ofrecer una estructura “tan débil como para ser in­fluen­
mirada holística a estas tres formas de en­ ciada, aunque suficientemente fuerte co­
focar la intervención funcional del sis­tema mo para que esta influencia no se pierda
nervioso de los humanos, que invo­lucran en su primer uso” (9). Hallett, director del

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Medical Neurology Branch en los Institutos Estos mediadores neuroquímicos producen


Nacionales de Salud de los Estados Unidos un aumento o disminución de la amplitud
(exjefe de uno de nosotros, FEL-S), dijo tam­ del potencial postsináptico debido a una
bién, al respecto, que los humanos están acción repetida y usualmente rápida, cono­
constantemente aprendiendo, y la esencia cida como "tetanización" (23,24), que puede
de ese aprendizaje es el cambio (10). causar la potenciación o la depresión co­
men­tadas, la cual puede durar horas o días,
Autores como Cohen (11), Pascual-Leone sostenida en parte por moléculas lla­ma­das
(12), Wassermann (13), Sawaki (14) y el mis­­­ "mensajeros retrógrados" (25). Esta po­ten­­
mo Hallett (10), entre muchos otros, han de- ciación o inhibición puede ser homo o hete­
mostrado que el sistema nervioso hu­­mano rosináptica, la cual afectará finalmente la
posee una notable capacidad de mo­­dulación expresión de segundos mensajeros como el
por estimulación sensitiva, sen­­sorial, endo- AMP cíclico, efecto este que puede ser tran-
crina o motora. Dicha mo­du­lación se refleja sitorio o permanente (26).
como facilitación o inhi­bición de las estruc-
turas involucradas, lo cual se evidencia Cabe resaltar que la plasticidad neural per­
como aumento o disminución del potencial mite cambios de adaptación y/o reorga­
de acción correspondiente, de­­ mostrables nización, en condiciones normales o patoló­
con diversos procedimientos que incluyen gicas (6, 27, 28). El primer caso incluye,
la estimulación magnética trans­­craneal de
por ejemplo, procesos de aprendizaje con­
alta y baja intensidad, co­ rrien­
tes trascra-
dicionado y no condicionado; en el se­gun­
neales y estimulaciones va­ga­les directas
do se destacan eventos adaptativos y ma­
(15-18).
ladaptativos que, en últimas, son los que
acom­­pañan la evolución de enfermedades
La neuroplasticidad se considera, enton­ces,
neurológicas establecidas (20, 27,29).
como la capacidad que tiene el teji­do neu-
ronal de reorganizar, asimilar y mo­dificar
De manera interesante, investigaciones he­
los mecanismos biológicos, bioquí­micos y
chas en la última década han demostrado
fisiológicos, implicados en la co­municación
intercelular, para adaptarse a los estímulos que es posible inducir neuroplasticidad en
recibidos (19, 20). Esta carac­terística implica los humanos, por medio de la deaferentacion
modificaciones del tejido neural correspon- central, al colocar a los individuos en con­
diente, que incluyen, entre muchos otros, diciones especiales de oscuridad, per­ma­
la regeneración axonal, la co­lateralización, neciendo allí con los ojos cerrados por pe­
la neurogénesis, la sinapto­génesis y la reor- rio­dos de tiempo que alcanzan, máximo,
ganización funcional (20). Estos procesos se los 90 minutos (30-33); este tiempo se ha
fundamentan en las señales generadas por considerado suficiente para generar res­
el mismo teji­do nervioso que los facilita o pues­tas similares a las observadas en la
inhibe, en pre­­ sencia de neurotrasmisores po­­­tenciación a largo plazo, descritas en
como el N-metil-D-apartato (NMDA), el áci­ otros escenarios científicos (34). Dichas in­
do gama-amino butírico (GABA), la acetil- ter­­­venciones han permitido avanzar en la
colina o la serotonina, entre otros más, los comprensión de la plasticidad en individuos
cuales pro­mueven la potenciación o depre- normales y aun en condiciones patológicas,
sión sináp­tica a corto o largo plazo (21, 22). al estudiar sus mecanismos de generación

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en áreas motoras, sensitivas y sensoriales


(30-33).

Entender y aplicar adecuadamente estos


y otros procesos mucho más complejos NEUROPLASTICIDAD
re­­la­­cionados con neuroplasticidad, cu­ya
re­­visión no es el propósito de este traba­
jo, podría ayudar a ofrecer un mayor ren­
dimiento de las capacidades biológicas y
cinemáticas del ser humano (35). Por todo lo NEUROMODULACIÓN
anterior Wilson (29,36) afirmó que “[…] en
el futuro buscaremos una combinación de
neurofármacos y neurorrehabilitación que
pueda ser eficaz para la recuperación de
la función diaria, más allá de nuestros más
audaces sueños”; esto con el fin de lograr NEURORREHABILITACIÓN
que el sistema nervioso sea, en un futuro
cercano, más que un simple espectador de Fuente: Propia de los autores.
la neuromodulación, que se genera a dia­­
rio en el ser humano, como veremos a con­ Figura 2. Representación esquemática de la
tinuación, sin necesidad de aplicar ac­ciones interrelación existente entre la neuroplasticidad
y la neuromodulación, que son el fundamento
agresivas, como algunos de los mé­todos
para la ejecución de una adecuada
que aun se ofrecen como solución a diversos
neurorrehabilitación.
trastornos neurológicos como el dolor, la
hiperhidrosis, diversas clases de distonías y
La primera descripción del uso de la neuro­
la espasticidad, entre otros (37- 40).
modulación ocurrió al parecer en el año
15 D.C., cuando el emperador Tibeirus ex­
Neuromodulación
perimentó disminución del dolor produ­
cido por un problema de gota que le aque-
El término “neuromodulación” se encuentra
jaba, luego de haber sido picado acciden-
de manera fácil en el léxico convencional
talmente por un pescado torpedo (43). En
biomédico, pero entender a qué hace re­
1911, Head y Holmes demostraron la mo-
ferencia es algo mucho más complejo. Es­
dulación cor­tical como resultado de la acti-
to debido a que, en general, se asocia este
vidad talá­mica (44);  Hagbarth y Kerr hacia
concepto a eventos que involucran la esti­
1954 es­cla­recieron el control supraespinal
mulación eléctrica del piso pélvico, prin­
de las vías neurales ascendentes (45), y en
cipalmente en estados de incontinencia fecal
1965 Car­penter publicó su trabajo acerca
y urinaria (41). En términos más es­trictos,
del control descendente sobre las aferencias
este concepto se refiere a la capacidad de
(46). En ese mismo año, Melzack y Wall des-
las neuronas de alterar las propiedades
cribieron la teoría de la compuerta y cómo
eléc­tricas en respuesta a los cambios bio­
esta in­tervenía en el control del dolor, a ni-
químicos, resultado de la estimulación hor­
vel del sistema nervioso central (47). Hacia
monal o sináptica (42) (Figura 2).
1969 Reynolds (48) descubrió el efecto anal-

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gésico de la estimulación eléctrica al investi- polarice, produciendo un efecto in­me­diato


gar sus efectos en el área periventricular de y que puede durar hasta unos cien­tos de
ratas, la cual se relacionó con la producción milisegundos (53). En la neuro­modulación
de en­­dorfinas. Luego de los avances logra- se produce la misma acti­vidad comentada
dos en diferentes aplicaciones clínicas, ha- anteriormente a nivel sináp­tico, pero ade-
cia 1980 se encontró su papel mediador en más de generar información que produzca
la neuroplasticidad del dolor (43,49). Todo efectos a largo plazo en la actividad meta-
esto ha permitido en la actualidad inducir bólica neuronal y su res­puesta a subsecuen-
pro­­­cesos de neuromodulación no solo para te impulsos; tal efecto postsináptico puede
inhibir el dolor, sino también para modular persistir por varios días (53). Este mecanis-
la actividad sensorial, sensitiva y motora mo es el que se rela­cio­na, a la fecha, con
del sistema nervioso, permitiendo imple- funciones como el apren­dizaje, la memoria
mentar en el individuo la neurorrestaura- y el olvido.
ción co­rres­­pondiente.
Cabe aclarar que la neuromodulación de la
El concepto moderno de neuromodulación región postsináptica no depende tanto del
emergió hacia 1970, cuando Greenfield men­ neurotrasmisor cuanto más del receptor al
cionó que este proceso “es una respuesta cual se liga este, denominado "receptor me­
variable a un estímulo invariable”, aso­cian­ tabotrópico" (53,54). En este sentido, mien­
do ésta a procesos eléctricos de excita­ción tras el receptor inotrópico clásico afecta la
neural (50). Con el paso del tiempo, otros permeabilidad de manera directa, el meta­
autores mencionaron que este proceso no botrópico produce cambios en la neurona
solo involucraba cambios en el potencial postsináptica por medio de la activación in­
de acción sino que, además, incluía el inter­ tracelular molecular, utilizando los así lla­
cambio de sustancias que ejercen, al parecer, mados "segundos mensajeros". Esto hace
efectos prolongados sobre la membrana y la que una vez activadas las proteínas dentro
excitabilidad neuronal (51). de la célula postsináptica (51), lo cual influ-
ye en la respuesta futura a posteriores es-
La neuromodulación se ha caracterizado tímulos (53). Y aun­que los efectos del pri-
por la aplicación de electroterapia, aunque mer mensajero se inac­tivan rápidamente,
de manera reciente se han incluido otros los del segundo pue­­den durar varios días;
elementos, como la estimulación magnética más aun, algunas pro­teínas pueden afectar
a altas y bajas intensidades, la estimulación el genoma de una célula postsináptica, alte-
somatosensorial y sensoperceptual, la neu­ rando de manera per­manente su actividad
ro­­navegacion electromagnética e, inclu­sive, (53).
la acupuntura (52).
La neuromodulación, además de abarcar
La neuromodulación difiere del concepto los aspectos expuestos anteriormente que
clásico de la trasmisión nerviosa. En este se consideran netamente biológicos, aborda
úl­timo caso, la información recibida utiliza los biotecnológicos, que incluyen equi­pos
di­versos neurotrasmisores que van de la re­ implantables y no implantables; tam­bién
gión presináptica a la postsináptica, ha­cien­­ están los clínicos, cuyo fin último es modi-
do que esta última se despolarice o hiper- ficar el curso de la enfermedad de di­versas

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formas, bien sea por medio de estí­mulos neurorrehabilitación, como los que comen­
eléctricos, magnéticos o químicos, y final- taremos a continuación.
mente están los quirúrgicos, los cuales usan
técnicas intervencionistas y utilizan los pro- Neurorrehabilitación
ductos biotecnológicos arriba mencio­nados
(55). Debido al desconocimiento que existió
has­­ta hace muy poco tiempo de la capaci-
Lo anterior ha permitido avanzar en las téc­ dad plástica que tiene el sistema nervioso
nicas de neuromodulación cerebral, sien­­do hu­ma­no, y por ende, la posibilidad de ser
la estimulación cerebral profunda una de neu­­ro­modulado, como lo comentamos an­­
las más utilizadas a la fecha en pa­­cientes te­­
rior­
mente, se consideró entonces por
con temblor esencial y en en­fer­medad de mu­­­cho tiempo que el neurólogo clínico
Parkinson; hay que enfati­zar que aunque que se dedicaba a la neurorrehabilitación
beneficiosa en ciertos escena­rios clínicos, se preocupaba era por actividades exentas
dicha intervención neuro­qui­rúrgica no pre- de glamour, dado que esta última incluye el
viene el progreso de la neu­rodegeneración. uso de elementos como escaleras, rampas
De igual forma, la neu­ro­modulación se está de acceso y utensilios de cocina (58). Por
empleando en el tratamiento de la cefalea ello, no extraña ver cómo los orígenes cien­
en racimos, alte­ra­ciones de la marcha, do- tíficos de la rehabilitación neurológica son
lor, depresión, tras­torno obsesivo compul- relativamente recientes (59), los cuales se
sivo, síndrome de Tou­rette y aun en coma. consideran alrededor de la Segunda Guerra
Así mismo, se está aplicando la estimula- Mundial, aunque hay indicios que Heinrich
ción del nervio vago como tratamiento de Sebastian Frenkel estableció las bases de la
algunos tipos de crisis epilépticas y depre- neurorrehabilitación moderna un poco an-
sión severa resistente a tratamiento. Existen tes de esa época (60).
también avances en la neuromodulación
medular, principalmente en dolor cróni- Durante décadas la conducta del profesional
co, con buenos augurios en pacientes con de la salud era la de esperar un gran periodo
is­quemia cerebral, atrofia ce­rebral, y en el de tiempo la evolución de la enfermedad;
tratamiento de ciertos tipos de tumores ce- esto con el fin de determinar qué “sugería”
rebrales. En cuanto al sistema nervioso pe- el establecimiento completo de los síntomas
riférico se encuentran estudios que indican (61). Entonces, y solo entonces, se trataba
el beneficio de la estimulación subcutánea de hacer el diagnóstico, con el agravante
en casos de neuropatía herpética y dolor de que para el momento en que los sín­
neuropático facial, así como la esti­mulación tomas estaban floridos poco o nada era
de raíces lumbosacras, en el caso de inconti- lo que se podía hacer para brindarle una
nencia fecal o urinaria (55,56). opor­­tuna rehabilitación al paciente. Con
el advenimiento de las neuroimágenes, la
La neuromodulación es, por lo tanto, una inmunología y la biología molecular, entre
al­ternativa terapéutica en aquellos casos en otras disciplinas sofisticadas, las demoras en
que otros tratamientos tradicionales no lo­ el diagnóstico arriba mencionadas se pensó
gran su propósito (57), contribuyendo así que eran parte de la historia de la medicina;
a mejorar los procesos relacionados con la sin embargo, la realidad es otra. Esto debido

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a que algunos galenos no logran avanzar en tos como la levodopa y los ago­nistas de la
el tratamiento y urgente rehabilitación de dopamina eliminó, duran­te años, la neuro-
los pacientes que sufren diversos trastornos rrehabilitación de los pro­gramas de aten-
neurológicos, debido a que los hallazgos ción a estos pacientes (63). Además, llama
que obtienen de tales pacientes no llenan la atención ver cómo con relativa frecuencia
los requisitos planteados por las ciencias el profesional de la sa­lud no tiene en cuen-
basadas en modernas evidencias. ta que algunos medi­camentos que formula
son los mismos que impiden la neurorres-
Curiosamente, esto último está generando tauración de sus pa­cientes (20,58), dentro
consecuencias deletéreas, similares a las ex­ de los que se des­ta­can fenitoina, haloperi-
pe­rimentadas hasta hace unos años por los dol, clonidi­na, dia­zepan, prazocin, biperi-
pacientes, cuando el diagnóstico se basaba deno, dextro­me­­torfano, fe­no­xi­benzamina,
en la anatomía, fisiología y patología clá­ fenobarbital, la­­motrigin y me­mantine, entre
sicas, esto es, en cuanto al urgente inicio otros (20, 58, 63).
de un programa de neurorrehabilitación
pa­ra el individuo afectado. Porque aunque Por todo esto, Shahani y cols (61) destacan el
los profesionales de la salud buscan, de hecho que ocho de las nueve enfermedades
diferentes formas, brindar lo mejor de su neurológicas que generan los mayores costos
respectivo arsenal a sus correspondientes a los sistemas de salud producen problemas
pacientes, es notorio aún que la farmaco­
crónicos que alteran la calidad de vida de
logía empleada actualmente por internis­
los pacientes afectados, y son estos los que
tas, neurólogos y pediatras, entre mu­chos
requieren neurorrehabilitación de manera
otros profesionales clínicos, o las correc­
obligatoria; mas aun, hasta el 75% de los
ciones quirúrgicas ofrecidas por, casi exclu­
pacientes que reciben neurorrehabilitación
si­vamente, los cirujanos, o las terapias si­
han padecido un insulto neurológico. Sin
co­­lógicas o siquiátricas orientadas a tra­­tar
embargo, la concepción del profesional de
el estado mental o cognitivo del pa­cien­
la salud, en algunas latitudes, es aun muy
te no se concatenan en muchos ca­ sos, o
ni siquiera consideran importante con­tar reduccionista en cuanto al enfoque clínico-
con un programa apropiado de neuro­rre­ quirúrgico y, por ende, terapéutico de sus
habilitación, para realizar el seguimiento de pacientes, dejando de lado la rehabilitación
los pacientes (55,61). neurológica.

Peor aun, el enfoque farmacológico usado Afortunadamente, la Organización Mundial


por prácticamente todas las disciplinas bio­ de la Salud (OMS) tomó cartas en el asunto
médicas ha nublado y, en ocasiones, elimi­ y definió la neurorrehabilitación como un
nado de la mente de muchos profesionales proceso activo por medio del cual los indi­
de la salud, la posibilidad de ofrecerles a viduos con alguna lesión o enfermedad
los pacientes un programa de rehabilitación pue­den alcanzar la recuperación integral
neurológica con orientación científica (62). óptima que permita el desarrollo físico,
men­tal y social, para integrarse a su en­tor­
Tal es el caso de lo que sucedió con pa­cien­tes no de la mejor manera posible (64). Es­to
que padecían la enfermedad de Par­kinson, ayudó al desarrollo científico de la neuro­
en quienes el advenimiento de medicamen- rrehabilitación, principalmente en los lla­

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ma­dos países desarrollados, donde evo­­lu­ Y es que diversos trastornos como, por
cionó junto a otras ciencias como la neu­ro­ ejem­­plo, la enfermedad cerebrovascular,
logía, la neurocirugía, la siquiatría, la orto­ que se consideraba aun a finales del siglo
pedia y otras más. XX que los tres primeros meses eran los crí-
ticos pa­ra lograr el restablecimiento funcio-
Este impulso brindado por la OMS llevó a nal del paciente afectado (61), han demos-
que, hacia finales del siglo XX en algunos trado re­cuperación funcional cuando se
países diferentes de Colombia, el profesional aplican las medidas de neurorrehabilitación
de la salud no se conformara con hacer un apro­pia­das, aun años después de padecido
excelente diagnostico, y una vez finalizado, el insulto neurológico (72,73). Algo similar
éste le dijera al paciente: “váyase a la casa está ocurriendo con trastornos como el sín­
y aprenda a vivir con ese problema; no hay drome de hiperactividad, la enfermedad
más que yo pueda hacer por usted” (61,69). de Parkinson, diferentes tipos de distonías,
Y decimos que no en Colombia, debido a neuropatías periféricas y trastornos neuro­
que en este país la influencia del Sistema podales, entre otros (74-80).
General de Seguridad Social, llamado
Ley 100, es cada vez más inoperante para Esto ha sido posible debido a los avances
solu­cionar los problemas más básicos de científicos hechos por diferentes grupos
la salud de sus habitantes, incluyendo la (81), incluyendo el nuestro, quienes han de­
ausencia total de programas oficiales de mostrado con el uso de nuevas herramien­
neu­rorrehabilitación (70). tas, como la estimulación magnética de alta
y baja intensidad o las corrientes directas,
Por lo anterior vale la pena recordar que entre muchas otras, que el sistema nervioso
Crusk decía que “[…] la responsabilidad del adulto puede experimentar reor­ganización
médico no termina cuando la enfermedad neural aun en épocas tardías de haber pa­
aguda termina o la cirugía se realiza; ésta decido el insulto neurológico; algo consi­
termina es cuando el individuo es re-en­ derado hasta hace poco un imposible fisio­
trenado para vivir y trabajar con lo que lógico. Cabe enfatizar que el principio de
le haya quedado útil, orgánicamente ha­ la rehabilitación neurológica toma como
blando […] y esto solo se puede alcanzar ban­dera la recuperación funcional del pa­
cuando la rehabilitación es parte integral ciente lesionado y su correspondiente mejo­
de los servicios médicos que se le brinden ría de calidad de vida, dejando de lado, en
a dichos pacientes” (71). Por ello, se sugiere numerosas ocasiones, la etiología propia de
que los neurólogos, los neurocirujanos, los cada evento, la cual en muchas ocasiones no
pediatras, los neuropediatras, los orto­pe­ se logra dilucidar ni siquiera en los mejores
distas, los siquiatras y los cirujanos, en­­tre centros clínico-patológicos del mundo.
muchos otros profesionales de la sa­lud,
asuman con más responsabilidad el ma­ CONCLUSIÓN
ne­jo a largo plazo de sus pacientes (63), a
sabiendas de que el concepto de “cuidar Por todo lo discutido en este artículo, con­
vegetales”, relacionado con los individuos sideramos que la neurorrehabilitación de­be
que habían sufrido un insulto neurológico, ser holística pero individualizada; in­clu­
es ya parte del pasado (20). siva y participativa; generar indepen­dencia;

Salud Uninorte. Barranquilla (Col.) 2011; 27 (1): 95-107 103


Jaime Bayona Prieto, Edgardo A. Bayona, Fidias E. León-Sarmiento

aplicarse de por vida, si fuere ne­cesario; (8) Bergado-Rosado JA, Almaguer-Me­lián J.


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un adecuado control sen­sori-motor de los (12) Bolognini N, Pascual-Leone A, Fregni F.
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