¿Cuál es la perspectiva que se adoptará en la lectura de La ceiba de la memoria?
La tesis sostenida por Kevin Alexis García es que La ceiba de memoria es una versión posmoderna de la novela total, “asistimos a la creación de un meta-relato literario que busca a su vez combatir otros grandes meta-relatos de la literatura latinoaméricana” (19). En lo que respecta a la delimitación que he realizado (pensar una poética de la incertidumbre en la experiencia creativa), García propone los siguientes horizontes: “lo que en realidad ha incorporado Burgos Cantor de la propuesta de Carpentier es su concepción del arte de la novela, su perspectiva de mirada, el llamado a inscribir la fisionomía de nuestras ciudades en la gran literatura universal y la pertinencia del barroco (posterior neobarroco) latinoamericano como estilo idóneo para la nueva narrativa” (23). “demuestro los motivos de estas rupturas lógicas gramaticales, y expongo los pilares poéticos (poesía antillana) y filosóficos (pensamiento posmoderno) en que se inscribe”. Me doy cuenta de un horizonte para profundizar: García expone las características meta- ficcionales al interior de la novela de Burgos. Es así que da cuenta de la máscara creada por Roberto para reflexionar sobre su ejercicio creativo. Denomina a esto como “la omnipresente conciencia de autor”, por medio de la cual le permite a la obra “evidenciar su proceso de construcción, más allá de denotar su condición de artificio” (101). García utiliza el concepto de “novela traslucida” para exponer que en La ceiba de la memoria “se pueden identificar, a manera de espejo, el proceso creativo de Roberto Burgos” (101). En unas cuántas páginas, García sintetiza las características meta-ficcionales dentro de La ceiba de la memoria: “la novela traslucida”, “la literatura como iluminadora de las huellas de las ausencias de la historia”, “el lenguaje como revelación y acontecimiento”, “la necesidad de construir una realidad ficcional con múltiples puntos de vista”, “la escritura como acontecimiento”, “la inspección de escenarios como metodología para la creación de una ficción” (98-105). El problema que vislumbro es que García deriva sus conclusiones sobre la metaficción a partir de la experiencia de Thomas Bledsoe, cuando en la novela de Roberto Burgos los personajes de Alonso de Sandoval y Dominica de Orellana también se presentan reflexiones alrededor del proceso de escritura. De este modo la visión de García es limitada porque deriva la mayoría de sus ideas de la experiencia creativa de Thomas Bledsoe. El horizonte que se abre es el siguiente: una profundización de los procesos metaficcionales al interior de la obra de Burgos al abordar en su conjunto los personajes de Thomas Bledsoe, Alonso de Sandoval y Dominica de Orellana. Me centro en la relación entre creación y procesos de escritura, reconociendo un horizonte que no pretendo abarcar ya que desborda los límites de mi proyecto: en La ceiba de la memoria se encuentra reflexión profunda entre los procesos de creación literaria y la oralidad. Esta dimensión se encuentra en las voces de Benkos y Analia Tu-bari y significan un horizonte hermenéutico aun por explorar en la obra de Roberto Burgos.