UNIVERSIDAD NACIONAL AUTONOMA DE MEXICO
CUADERNOS
AMERICANOS
NUEVA EPOCA
ARO II VOL. 3
9
MAYO-JUNIO 1988
UNIVERSIDAD NACIONAL AUTONOMA DE MEXICO:
‘MEXICO 1988|
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BORGES Y EL ULTRAISMO: UN CASO DE
ESTETICA Y POLITICA
Por Jorge RUFFINELL
STANFORD UNIVERSITY
Bit wiraisuo se desatrolls en dos paises y en dos épocas
sucesivas: Espaiia, entre 1918 y 1922, y Argentina, entre 1921
j 1927. El nexo entre los dos ultraismos fue Jorge Luis Borges
(1899-1986), quien se empapé de la nueva poética y ayudd a
darle forma y difundirla durante el tiempo que vivié en Mallorca
y Madrid (1920), y luego la Ilevé consigo como novedad al pais
tatal. El ultraismo espafiol era otto de los tempranos ismos euro-
pe0s, pero parte de su origen se debe al creacionismo, es decir
4 Huidobro, diciendo con esto que se nutre de savia americana
aunque sus ‘origenes pudieran filiasse mis adecuadamente en Ia
roesia de Apollinaire y en el cubismo como movimiento plistico.
Pero mis que un movimiento de vanguardia, con una filosofia
Yuna estética propias, como el futurismo italiano y el dadaismo
de Teara, el ultraismo se vio desde un comienzo como el lugar
de una convergencia para la “nueva sensibilidad” (como la Ila-
m6 Ortega y Gasset) descontenta con Ia situacién —entonces
actual— de la poesia. Guillermo de Torte sefiala ese rasgo; para
4, el ultraismo “no marca una hermética escuela sectaria ni una
direccién estrictamente unilateral, como otros movimientos de van-
geardia. Por el contrario, aspira a condensar en su haz genérico
una pluralidad de direcciones entcecruzadas”.*
Como muchos otros movimientos, el ultraismo siguié Ia ruta
de las revistas, Este es un modo de decirlo, Otro seria seialar que
dl ultraismo es la nueva poesia (asi como sus manifiestos progea-
miticos) que se fue publicando en esas revistas. Por ende, se
tno u otro el enfoque, lo cierto es que Ia suerte de ambos esta
‘mutuamente sellada: el ultraismo espaol acaba con el limo
nimero de Uléra en 1922 y el argentino con el iltimo nimero de
* Git. por Ramda Gimez de la Serna, “Ultcaismo”, en Gonzilez Porto
Bompiani,” Diccionario literario, Uarcetona, Montanet y Simén, 1959,
two T, p. 349,156 Jorge. Rosine
Martin Fierro en 1927. Una manera dixecta de seguic el itinera-
rio del ultraismo consiste en seguir el de sus revistas,
En 1918 se funda Grecia en Sevilla, y aunque es un inequk
voco vehiculo del ultraismo, se nota en su nombie la ambigitelad
—que el propio ultraismo siempre mantuvo— ante el modernis
ino, En 1920 Grecia pasb a Madsidy alli dejé de exist. Cero
es habia sido fundada en 1916, antes de la eclosién vanguardista,
pero cedié a ella en 1919 cuando Rafael Cansinos Asséns sustituyd
fen la direcci6n a Villaespesa, Urbina e Ingenieros, En cambio,
Ulira, con sus veinticuatro ntimetos publicados entre 1921 y 1922,
fue ultraista desde su titulo, Otras revistas (de Mallorca y de Mu.
drid) publicaron textos ultraistas sin serlo ellas enteramente.
A su vez, el ultraismo argentino tuvo dos etapas distingui-
bles, que por lo general han sido designadas como primer y se
Bundo vanguardismo. Lo que podria Mamarse estrictamente sltra-
ismo corresponde a la primera, es decir a Prisma, revista mural
de la que aparecieron dos nimeros en 1921, bajo la direccién de
Jorge Luis Borges, Eduardo Gonzilez Lanuza, Francisco Pifiero
¥ Guillermo Juan (primo de Borges), y a Proa, que dio tres ni
‘meros en 1923 (primera época) y quince en 1924-1925 (segunda
época). El segundo periodo vanguardista fue el de la revista Mar-
tin Fierro (1924-1927) ditigida por Eva Méndez, que si bien
recogié el espiritu innovador de las anteriores, abierto. a los aires
europeos, no se atuvo rigidamente a una poética como lo hicieron
Prisma y Proa antes. El debate intelectual en torno a la vanguat-
dia argentina, especialmente en lo que se refiere a Martin Fierro
y su relacién con el grupo Boedo, ha sido examinado muchas ve-
Ces, pero en cambio la historia del ultraismo argentino y de la
Pacticipacién de Jorge Luis Borges en él ha quedado como un
capitulo destefiido en una historia que no acaba de escribirse.
La renuncia del maestro
Ew 1927 Borges comenz6 a abjurar del ulteaismo aunque habia
sido uno de sus mis preciados adalides, y a denunciarlo’ (denun.
idndose) como un exceso asentado en bases tan falsas como las
que en su momento los vanguardistas sefialaran con respecto al
Modernismo. Pero fue en sus conversaciones con Charbonnict, en
1964, cuando Borges puso absolutamente en claro, de manera de-
finitiva, no sélo su actitud de rechazo de aquellos afios y aquellas
empresas poéticas, sino también Ia necesidad y In conveniencia de
olvidarlos,
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Borges y el Ultrsisme, Un Caso de Fatética y Politica ast
Je crois que le micux, cest d'ignorer totalement Tultraisme, L'ul-
lraisme est un mouvement Jittéraire qui a commencé en Espagne:
‘on voulait imiter des poétes, je ne sais pas, dans le genre de Pierre
Reverdy, On voulait imiter Apollinaire, le Chilien Huidobro. Une
théorie, théorie qui je trouve 4 present tout 4 fait fausse, voulait
réduite toute la poésie & la métaphore et croyait & la possibilité
de faire des métaphores nouvelles?
Hay una sutil distorsién de la memoria y del criterio en estas
frases de Borges ya que, si bien el ultraismo ponia énfasis en la
fetifora, no era el inico procedimiento ni la Gnica figura poé-
tia, ni la sola preocupacidn estética y tampoco a ella se reducia
fada la poesia, En todo caso, ésa seria Ia posiciin de Borges,
Preocupado por tomar de la vanguardia ultraista lo que ésta tenia
de novedad formal, Muy pronto, en su temprano articulo sobre
‘Andamios interioves del estridentista mexicano. Manuel Maples
Arce, Borges emperd a sefialar la limitactin de la metéfora.en
unto a novedad y multiplicidad;
Ea mi opiniéa no es dable urdir metiforas de una plenaria no-
edad, En todo el miltiple decurso que han seguido las letras cas.
fellanas no creo pasen le una trcintena los procedimientos emplea-
dlos para alcanaar figuras novedosas,*
Salvado este lapsus, es interesante observar cémo Borges en-
tong frente a Charbonnier el mea «alfa, sintetizando y enume-
‘ando su arrepentimiento en tomo a diversas ideas sobre Ia poesia
¥ 50 ejerc
Je cis que Tulteaisme a fait son temps. Ji un peu honte d'avoie
signe des manifests. Quant & ner la imusgue du vers, je troure
aque cela est un ercur dvidente, Je eois que ce qu'il y 2 dessentiel
dans un vers, Cest la misiqu, Cesta-die une corcespondance entre
Teémoton et le son du vers, Je diris de méme de Ia prose. Quant
a la rime, je ne sais pas quelle raisons iy aurait de renoncer 4
un moyen aussi agrable de plaite que la fine” (pp. 2829),
Borges empezd a despojarse del acento vanguardista con Fer-
wr de Buenos Aires (1923), dejando de lado, sin incluir, los
yoemas més representativos de la actitud ultraista, De todos mo-
2 Georges Charbonnier, Eniretiens avec Jorge Luis Borges, Pats, Galli
sun, 1967,
* Jorge Luis Borges, Inguisciones, Buenos Aires, Editorial Proa, 1925.