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PROGRAMA DE FORMACIÓN DOCENTE DE EDUCACIÓN MEDIA SUPERIOR

DIPLOMADO

“COMPETENCIAS DOCENTES EN EL NIVEL MEDIO SUPERIOR”

MÓDULO 2

DESARROLLO DE COMPETENCIAS DEL DOCENTE EN EDUCACIÓN MEDIA


SUPERIOR

EQUIPO No.3

PARTICIPANTES:

GARCÍA PINEDA ROSARIO


GUERRERO INES ALVARADO SALAYANDIA
GUTIERREZ BONILLA GUSTAVO ADOLFO
JIMENEZ RUIZ MARIO
MENDOZA OLGUIN NARCISO
OLIVO ALEMÁN RICARDO

ENSAYO

COMPETENCIAS DOCENTES, DEL BACHILLER Y MODELOS DE


CONCRECIÓN DIDÁCTICA CENTRADOS EN EL APRENDIZAJE.

ACTIVIDAD INTEGRADORA DE LA UNIDAD 1

GRUPO:

UAEMEX-M1-10

GENERACIÓN:

CUARTA GENERACIÓN
ENSAYO
COMPETENCIAS DOCENTES, DEL BACHILLER Y MODELOS DE
CONCRECIÓN DIDÁCTICA CENTRADOS EN EL APRENDIZAJE.

Conforme a la Reforma Integral de Educación Media Superior (RIEMS) , para la


creación de un Sistema Nacional de Bachillerato (SNB), en el marco de la
diversidad, un enfoque en competencias debe permitir que los estudiantes
adquieran las competencias genéricas expresadas en el perfil de egreso de la
Educación Media Superior (EMS), es fundamental para este logro el perfil docente
del Nivel Medio superior (NMS), así como la concreción didáctica centrada en el
aprendizaje, en el proceso de enseñanza y aprendizaje.

Resulta que una vez evaluadas las competencias de los alumnos es prescindible
analizar el perfil del docente del nivel medio superior, el cual se conforma por un
conjunto de competencias que integran conocimientos, habilidades y actitudes que
pone en juego, a fin de generar ambientes de aprendizaje con el sustento de
modelos de concreción didáctica centrados en el aprendizaje para que los
estudiantes adquieren, desarrollen, evidencien y fortalezcan las competencias
genéricas del bachiller.

La demanda actual de la pedagogía y la didáctica en un contexto de globalización


y sociedad del conocimiento a nivel internacional ha resultado un gran impacto en
nuestro país, lo que conlleva a aceptar y aplicar el cambio de forma holística e
integral en beneficio de la educación.

En el NMS, la Educación Basada en Competencias, ha sido un parteaguas desde


su surgimiento y ha marcado una gran diferencia entre una estructura tradicional y
la constructivista. La educación está viviendo cambios radicales dentro y fuera de
las escuelas, está teniendo un vínculo con los niveles que le anteceden, con el
sector productivo -lo que anteriormente no existía- y sobre todo está teniendo un
alto impacto social, con los resultados a nivel mundial, donde desafortunadamente
nos encontramos en los niveles últimos de aprovechamiento escolar, según los
exámenes estandarizadas nacionales e internacionales (PISA. ESCALE Y
ENLACE).

Con el objetivo principal de mejorar la calidad de la educación a nivel mundial,


diversos autores presentan fundamentaciones teóricas que serán una herramienta
para el desempeño de nuestro quehacer profesional, fomentando modelos
didácticos centrados en el aprendizaje rompiendo en la enseñanza tradicional.
Uno de los instrumentos clave para lograr este cambio es la puesta en marcha de
estrategias en la que se apliquen modelos didácticos como el modelo de las
dimensiones del aprendizaje de Marzano, el diseño didáctico de Estévez,
alineamiento constructivo de John Biggs; es decir, una nueva teoría basada en el
cambio de Paradigmas: de Enseñanza al Aprendizaje, tal como lo plantean los
autores Robert B. Barr y John Tagg en su texto denominado “Evaluación
Educativa”. Enfatizando que el alumno es el centro del aprendizaje y tendrá que
contextualizar su conocimiento, crear verdaderas y sustantivas relaciones entre los
contenidos de aprendizaje que construye diariamente y sus conocimientos previos,
identificando su funcionalidad. Asimismo destacan el papel integral de una
institución educativa para lograr el éxito en un modelo académico, deben
conocerlo y aplicarlo en coadyuvancia y corresponsabilidad con el docente, para
obtener el producto más relevante: el aprendizaje del alumno.

Robert Marzano plantea una nueva Taxonomía en el año 2001, donde destaca
niveles integrados por sistemas como: Sistema de Conciencia del Ser, Sistema de
Meta-cognición, Sistema de Cognición y los Dominios del Conocimiento. Creador
de las Dimensiones del Aprendizaje, modelo que hace uso de lo que los
investigadores saben acerca del aprendizaje para definir el proceso de aprendizaje
a través de las cinco estructuras mentales:

a) Actitudes y percepciones.
b) Adquirir e integrar el conocimiento.
c) Extender y refinar el conocimiento.
d) Uso significativo del conocimiento, y
e) Hábitos mentales

Sus aportaciones son esenciales en los nuevos Modelos Educativos de los


diferentes subsistemas y a través de ellas que se concretan las competencias
docentes que impactarán en la mejora de la calidad de la enseñanza y el
aprendizaje, lo cual permite, reorganizar el currículo, la reestructuración de la
instrucción hacia el aprendizaje, evaluaciones acorde a procesos de pensamiento
cognitivo de alto nivel, y desde luego, en el alumno el desarrollo y potencialización
de las competencias genéricas del bachiller.

Parte total del cambio es definitivamente la currícula escolar y la planeación


didáctica del docente, al respecto Etty Estévez, en su obra “Enseñar a Aprender”:
Propone un modelo que busca centrar la educación en la necesidad de aprender
aprender, es decir, enseñar aprender a través de estrategias cognitivas; donde
enfatiza que tanto la curricula y la planeación para el proceso didáctico, a través
de 5 fases: 1.- Elaboración de fundamentación y directrices curriculares, 2.-
Formulación de objetivos generales y esbozo de contenidos, 3.- Organización y
desarrollo de contenidos y formulación de objetivos particulares, 4.- Selección y
desarrollo de estrategias cognitivas, 5.- Evaluación del proceso de enseñanza y
aprendizaje. El diseño didáctico deben basarse en la especificación y evaluación
de Contenidos Conceptuales, Procedimentales y Actitudinales; en donde el
estudiante es capaz de conocer y usar sus estrategias cognitivas, como medio de
aprendizaje, por lo que el docente motiva hacia ese cometido. Existen ya
instituciones educativas que las manejan en una Matriz de Evaluación. Con lo
anterior se refuerza el Paradigma de Aprendizaje.

Como agentes importantes del cambio en la educación tenemos al profesor y al


alumno, Biggs cita en su obra “Calidad del Aprendizaje Universitario”, así como en
el video denominado enseñar la enseñanza y entender el entendimiento, en donde
el punto medular es: enseñar a enseñar, en donde el docente aplicara las
competencias docentes; para que logre desarrollar en los estudiantes, aprender a
aprender, es decir; que los estudiantes se apropien las 11 competencias genéricas
del bachiller.

Sabemos que el proceso de enseñanza y aprendizaje, en nuestro universo de


alumnos, existen dos tipos de alumno, a los que se alude como las “Susan” y los
“Robert”, con características propias cada uno; la primera es la estudiante activa,
comprometida con el aprendizaje, reflexiva y creadora; el segundo, el estudiante
pasivo, conformista, apático y falto de interés académico, al que lo único que le
interesa es salir de la escuela. Sin duda los intereses que cada tipo de alumnos
es evidente en su desempeño, lo preocupante resulta ser que los “Robert” se han
incrementado, por lo que se requiere toda una reestructuración de los modelos de
concreción didáctica cuyo enfoque este centrado en el aprendizaje, el papel del
profesor es motivarlos al cambio, a la construcción de sus conocimientos, con
objetivos acordes a una taxonomía de alto nivel cognitivo, generando actividades
que propicien ambientes de aprendizaje, que fomenten una experiencia de
aprendizaje cuya principal plataforma es explicar, relacionar, tomar decisiones,
solución de problemas, invención, indagación experimental, investigación, análisis
de situaciones, es decir el uso significativo del conocimiento, según Marzano, para
la potencialización de las competencias del bachiller.

lo anterior implica, que el docente se ocupa de lo que el estudiante hace, antes,


durante y después de enseñar, ocupándose del producto o del resultado de
aprendizaje de la enseñanza, un aprendizaje de entendimiento profundo, en donde
existe nivel de relación (integrar, comparar, analizar, etc.), y un nivel de resumen
extenso (planteamiento de hipótesis y examinar situaciones, etc.). La meta no
debe ser aprendizajes superficiales en donde solo se recita o se sigue un
procedimiento o si acaso se clasifica. La alineación constructiva implica que el
docente debe perfilar su quehacer en cada una de sus actividades en el proceso
de enseñanza y aprendizaje a desarrollar habilidades de explicar, relacionar,
demostrar, aplicar, etc. es decir; enseñar a aprender.

Otro de los autores que manifiesta su preocupación por la formación profesional


de los docentes es Philippe Perrenoud en su texto denominado “La formación de
los docentes en el siglo XXI”. En este muestra claramente algunas orientaciones
básicas para una formación de docentes, así mismo la finalidad del profesor (su
objetivo) y la escuela como la estructura formativa.
Perrenoud explica que prácticamente las orientaciones deseables para la
formación de docentes no serán radicalmente diferentes de aquellas que se
podían proponer hace cinco años. Básicamente piensa que la era digital traerá
como consecuencia la desaparición de la formación tradicional por parte del
profesor. Textualmente cito. “Puede ser que la escuela haya desaparecido, que se
hable de la enseñanza como de uno de esos oficios del pasado, muy
conmovedores a fuerza de ser”.

Es importante lo que menciona al pensar en la formación de los profesores sin que


existan opciones ideológicas. En este sentido habla acerca de que según el
modelo de sociedad y del ser humano, los objetivos que tenga la escuela no serán
las mismas y en consecuencia, el rol de los profesores no se definirá de la misma
manera para cada tipo de situación.

Este autor considera que la calificación definitiva la hacen las empresas que los
emplearán. También dicta acerca del sistema educativo.
“No podemos disociar tan fácilmente las finalidades del sistema educativo de las
competencias que se requieren de los docentes. No se privilegia la misma figura
del profesor según se desee una escuela que desarrolle la autonomía o el
conformismo, la apertura al mundo o el nacionalismo, la tolerancia o el desprecio
por las otras culturas”.

En el texto llama la atención que menciona la diferencia de la curricula de


formación inicial, diferente de la aplicación real de la vida profesional, plantea la
importancia de las transformaciones, para hacer evolucionar las prácticas y
describir las condiciones y las dificultades del trabajo real de los docentes.
Las reformas escolares fracasan, los nuevos programas no son aplicados, se
exponen, pero no se aplican bellas ideas como los métodos activos, el
constructivismo, la evaluación formativa o la pedagogía diferenciada. ¿Por qué?
Precisamente porque en educación no se mide lo suficiente la distancia
astronómica entre lo que se prescribe y aquello que es posible hacer en las
condiciones efectivas del trabajo docente.
Idealmente, cuando se elabora un plan de formación inicial, sería necesario darse
el tiempo para una verdadera indagación sobre las prácticas. La práctica muestra
que el estrecho calendario político de las reformas obliga a saltarse esta etapa,
suponiendo que ha sido prevista. Parece indispensable, entonces, crear en cada
sistema educativo un observatorio permanente de las prácticas y de los oficios del
docente, cuya misión no sería pensar la formación de profesores.
Es importante, por tanto, sentar las bases de una transferencia didáctica a partir
de las prácticas efectivas de los profesores, que respete la diversidad de
condiciones de ejercicio docente. Sin encerrarse en esto, se podrá encontrar la
justa distancia entre lo que se hace en lo cotidiano, los contenidos y objetivos.

Para el autor la construcción de una identidad profesional y disciplinar requiere de


la apropiación de saberes teóricos o metodológicos amplios. Critica que muchos
especialistas piensan todavía que un buen dominio de los saberes disciplinares
dispensa saberes pedagógicos o didácticos minuciosos o permite reducirlos al
mínimo vital. Cuando debería ser que en la medida de lo posible, hay que
asociarlos a la construcción de los objetivos y de los procesos de formación.

La decisión de fortalecer el proceso de cambio en la Educación Media Superior


depende del docente, de la capacidad que tiene para interpretar esta Reforma y la
decisión de ponerlo en práctica.

El proceso para establecer una Reforma educativa real en México, ha pasado por
varias etapas y según se percibe en el grupo colegiado, no ha sido tan
trascendente como la actual.

Se debe garantizar que el perfil del docente y el del egresado sean congruentes.
Es decir, de una manera dialéctica, donde el estudiante cobra una faceta activa, él
ya es participe de la construcción de su propio aprendizaje, mismo que le permitirá
tomar decisiones y solucionar sus problemas que se encuentren vivenciando
dentro del ambiente escolar. Además, el docente al concienciar sus competencias,
elaborará esquemas holísticos que favorecerán las estrategias didácticas para el
buen funcionamiento en la praxis.

El motivo principal de proponer la RIEMS es que principalmente se eleve el nivel


de la educación a este nivel y se eviten los principales factores de deserción que
se presentan, en los cuales creemos podemos influir directa o indirectamente,
sobretodo en la parte en donde podemos presentar al joven un panorama más
alentador y mejor de la situación, mostrándole una prospectiva positiva en donde
se mire triunfante y mejor ser humano. La decisión de favorecer el proceso de
cambio en la educación media superior depende de nosotros, de la capacidad que
tengamos para entender esta reforma y la manera de ponerlo en práctica.

Se recomienda que el docente realmente conciencie, protagonice las


competencias docentes a través del empleo de modelos de concreción didáctica
centrados en el aprendizaje y formación de competencias genéricas en el
bachiller.
Bibliografía

BIGGS, Jhon, Calidad del Aprendizaje Universitario, Editorial Narcea, 2ª. Edición, España, 2002.

Marzano y otros autores, Dimensión del aprendizaje, Editorial ITESCO, 1ª. Edición, México, 2005.

Estévez, Nenniger Etty Haydee, Enseñar a aprender, Editorial Paidos, 1ª. Edición, México, 2002.

Philippe Perrenoud, Competencias para enseñar, Biblioteca para la


actualización del maestro, Editorial GRAO de IRIF, 2004.

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