Revolución de mayo, palabras alusivas

Año tras año, un nuevo aniversario de la Revolución de Mayo nos convoca a reflexionar sobre
lo ocurrido hace ya más de doscientos años.

¿Cómo era nuestro país en ese entonces? ¿Qué costumbres tenían las personas?

En 1810 estas tierras pertenecían al Virreinato del Río de la Plata. Éramos una colonia de
España cuyo rey era Fernando VII. Buenos Aires tenía aproximadamente 40 mil habitantes,
entre españoles, criollos, mestizos, indígenas y esclavos.

La gente vivía de forma sencilla, se comía a las 12 en las casas pobres, a las 3 en las casas
ricas y la cena se servía a las 10 de la noche. En las casas de familias ricas la comida era una
mezcla de platos españoles y franceses. A pesar de lo que se cree, el asado no era una
comida típica de esta época porque la carne era muy dura y se la cocinaba hervida en
puchero, empanadas o locro. Uno de los postres más comunes era el arroz con leche y el
dulce de batata y membrillo.

Poca gente sabía leer y escribir, en su gran mayoría eran blancos de familias ricas. Los libros
no eran muy abundantes y había pocas bibliotecas.

¿Quiénes participaron de la revolución?

French, Beruti, Saavedra, Castelli y Belgrano. Alberti, Larrea, Paso y Moreno, son mucho
más que nombres de calles de nuestra ciudad, son los nombres de los protagonistas de la
Revolución. Cada uno con sus ideas, algunas iguales y otras opuestas.

¿Por qué comenzó la revolución?

Porque en mayo de 1810, llego a Bs. As. La noticia que el rey Fernando VI había sido
encarcelado por Napoleón y sustituido por el hermano de éste. Los criollos, que quería desde
hacía tiempo cambiar ciertas cosas de la política, la economía y la sociedad se unieron
entonces para formar un gobierno de emergencia frente al francés usurpador.

Es a partir de ese momento que el país se plantea dejar de ser colonia para formar una
verdadera Nación bajo la guía de ilustres figuras con grandes cualidades: el valor y las
condiciones militares de Saavedra; la pasión democrática de Moreno y la valentía y la
inteligencia de Manuel Belgrano.

¿Fue todo tan fácil como parece?

Claro que no. La revolución no fue tan pacífica como aparentó y muchas veces se impuso con
violencia ante sus opositores. Fue un proceso largo y sangriento, primero vendría la guerra
contra los realistas, y luego las guerras civiles. Finalmente este proceso finalizó cuando
representantes de las provincias lograron, seis años después del inicio de la revolución de
mayo firmar la declaración de independencia.

Como cada año, desde 1813 (fecha en que la Asamblea instituye el 25 de mayo como fiesta
patria) festejamos un cumpleaños más de este acontecimiento histórico. Gracias a aquel
grupo de hombres que gestaron la Revolución de mayo de 1810 somos libres.

Libres para decir lo que pensamos aunque los demás no estén de acuerdo. Libres para
equivocarnos, reconocerlo y enmendar el error. Libres para hacer uso de nuestras
capacidades y talentos.

Pero sobre todo, somos libres para soñar que mañana será mejor. Porque en la medida que
hagamos uso de nuestros sueños, estaremos honrando a aquellos patriotas que en 1810
soñaron primero. Muchas gracias.