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Psicoanálisis II – Profesora: Ana Serra

Guía de Textos. Unidad III

“Inhibición, síntoma y angustia”

Bibliografía

Freud, S., A. E. XX “Inhibición, síntoma y angustia”, págs. 97-105.

1) ¿Cuál es el síntoma del pequeño Hans y qué tipo de neurosis se le atribuye?.(97)

“Como primer caso, consideremos el de una zoofobia histérica infantil; sea, por ejemplo, el de
la fobia del pequeño Hans a los caballos [1909], indudablemente típico en todos sus rasgos
principales. Ya la primera mirada nos permite discernir que las constelaciones de un caso real
de neurosis son mucho más complejas de lo que imaginábamos mientras trabajábamos con
abstracciones. Hace falta algún trabajo para orientarse y reconocer la moción reprimida, su
sustituto-síntoma, y el motivo de la represión”.

“El pequeño Hans se rehúsa a andar por la calle porque tiene angustia ante el caballo. Esta es
nuestra materia en bruto. Ahora bien, ¿cuál es ahí el síntoma: el desarrollo de angustia, la
elección del objeto de la angustia, la renuncia a la libre movilidad, o varias de estas cosas al
mismo tiempo? ¿Dónde está la satisfacción que él se deniega? ¿Por qué tiene que
denegársela?”.

“Se estará tentado de responder que yendo al caso mismo las cosas no son tan enigmáticas. La
incomprensible angustia frente al caballo es el síntoma; la incapacidad para andar por la calle,
un fenómeno de inhibición, una limitación que el yo se impone para no provocar el síntoma-
angustia. Se intelige sin más que la explicación del segundo punto es correcta, y esa inhibición
se dejará fuera de examen para lo que sigue. Pero el primer conocimiento fugitivo que
tomamos del caso ni siquiera nos enseña cuál es la expresión efectiva del supuesto síntoma. Se
trata, como lo averiguamos tras escuchar más detenidamente, no de una angustia
indeterminada frente al caballo, sino de una determinada expectativa angustiada: el caballo lo
morderá. Ocurre que este contenido procura sustraerse de la conciencia y sustituirse mediante
la fobia indeterminada, en la que ya no aparecen más que la angustia y su objeto. ¿Será este
contenido el núcleo del síntoma?”.

El síntoma del pequeño Hans es una expectativa angustiada a que el caballo lo morderá. Este
contenido se sustrae de la conciencia y se sustituye mediante una fobia indeterminada. Posee
una incapacidad para moverse por la calle, que es una limitación que impone el Yo para
impedir el síntoma angustia. Se le atribuye una zoofobia histérica infantil.

2) ¿Cómo describe Freud la situación psíquica del pequeño?. (97-8)

“No avanzamos un solo paso mientras no nos decidimos a considerar toda la situación psíquica
del pequeño, tal como se nos reveló en el curso del trabajo analítico. Se encuentra en la actitud
edípica de celos y hostilidad hacia su padre, a quien, empero, ama de corazón toda vez que no
entre en cuenta la madre como causa de la desavenencia. Por tanto, un conflicto de
ambivalencia, un amor bien fundado y un odio no menos justificado, ambos dirigidos a una
misma persona. Su fobia tiene que ser un intento de solucionar ese conflicto. Tales conflictos de
ambivalencia son harto frecuentes, y conocemos otro desenlace típico de ellos. En este, una de
las dos mociones en pugna, por regla general la tierna, se refuerza enormemente, mientras que
la otra desaparece. Sólo que el carácter desmesurado y compulsivo de la ternura nos revela que

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esa actitud no es la única presente, sino que se mantiene en continuo alerta para tener
sofocada a su contraria, y nos permite construir un proceso que describimos como represión
por formación reactiva (en el interior del yo). Casos como el del pequeño Hans no presentan
nada parecido a una formación reactiva; es evidente que hay diversos caminos para salir de un
conflicto de ambivalencia.

“Entretanto, hemos discernido con certeza algo más. La moción pulsional que sufre la represión
es un impulso hostil hacia el padre”.

“Simplifiquemos la situación psíquica del pequeño Hans, removiendo el factor infantil y la


ambivalencia; sea, por ejemplo, un sirviente joven enamorado de la dueña de casa y que goza
de ciertas muestras de favor de parte de ella. Va de suyo que odia al amo de la casa, más
fuerte que él, y le gustaría verlo eliminado; en un caso así, la consecuencia más natural es que
tema la venganza de su amo, que su actitud frente a él sea la de un estado de angustia —
semejante en todo a la fobia del pequeño Hans frente al caballo”.

El pequeño Hansse encuentra en una actitud edípica de celos y hostilidad hacia su padre, a
quien ama. Presenta un conflicto de ambivalencia: siente amor por su padre por un ladoy odio
por otro. Su fobia es el intento de superar este conflicto, mientras que la moción pulsional
reprimida es el impulso hostil hacia su padre.

3) ¿Cuál es el rango que permite el juicio del padecimiento neurótico de Hans?. (99)

“Vale decir que no podemos designar como síntoma la angustia de esta fobia; si el pequeño
Hans, que está enamorado de su madre, mostrara angustia frente al padre, no tendríamos
derecho alguno a atribuirle una neurosis, una fobia. Nos encontraríamos con una reacción
afectiva enteramente comprensible. Lo que la convierte en neurosis es, única y exclusivamente,
otro rasgo: la sustitución del padre por el caballo. Es, pues, este desplazamiento
(descentramiento) lo que se hace acreedor al nombre de síntoma. Es aquel otro mecanismo que
permite tramitar el conflicto de ambivalencia sin la ayuda de la formación reactiva. Tal
desplazamiento es posibilitado o facilitado por la circunstancia de que a esa tierna edad
todavía están prontas a reanimarse las huellas innatas del pensamiento totemista. Aún no se
ha admitido el abismo entre ser humano y animal; al menos, no se lo destaca tanto como se
hará después. El varón adulto, admirado pero también temido, se sitúa en la misma serie que el
animal grande a quien se envidia por tantas cosas, pero ante el cual uno se ha puesto en
guardia porque puede volverse peligroso. El conflicto de ambivalencia no se tramita entonces
en la persona misma; se lo esquiva, por así decir, deslizando una de sus mociones hacia otra
persona como objeto sustitutivo”.

El rasgo que permite el juicio del padecimiento neurótico de Hans es la sustitución de la figura
del padre por la del caballo. Este desplazamientoes el síntoma, que hace posible el trámite del
conflicto de ambivalencia sin formación reactiva.

4) ¿Sobre qué elementos recae el proceso represivo de Hans?. (102)

“Por tanto, donde pesquisábamos sólo una represión de pulsión, tenemos que admitir el
encuentro de dos procesos de esa índole; las dos mociones pulsionales afectadas —agresión
sádica hacia el padre y actitud pasiva tierna frente a él— forman un par de opuestos; y más

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aún: si apreciamos correctamente la historia del pequeño Hans, discernimos que mediante la
formación de su fobia se cancela también la investidura de objeto-madre tierna, de lo cual
nada deja traslucir el contenido de la fobia. En Hans se trata —en mi paciente ruso es mucho
menos nítido— de un proceso represivo que afecta a casi todos los componentes del complejo
de Edipo, tanto a la moción hostil como a la tierna hacia el padre, y a la moción tierna respecto
de la madre”.

El proceso represivo de Hans recae sobre dos mociones pulsionales principales: la actitud
hostil y la tierna hacia el padre , como así también sobre la moción tierna hacia la madre.

5) ¿Cuál es el motor de la represión?. (103)

“Creemos conocer el motor de la represión en ambos casos, y vemos corroborado su papel por
el curso que siguió el desarrollo de los dos niños. Es, en los dos, el mismo: la angustia frente a
una castración inminente. Por angustia de castración resigna el pequeño Hans la agresión
hacia el padre; su angustia de que el caballo lo muerda puede completarse, sin forzar las cosas:
que el caballo le arranque de un mordiscolos genitales, lo castre”.

El motor de la represión es la angustia frente a la castración inminente, ante la cual resigna la


agresión hacia su padre.

6) ¿Cuál es el contenido angustiante?. (103)

“Y ahora, la inesperada conclusión: En ambos casos, el motor de la represión es la angustia


frente a la castración; los contenidos angustiantes —ser mordido por el caballo y ser devorado
por el lobo— son sustitutos desfigurados {dislocados} del contenido «ser castrado por el
padre»”. Fue en verdad este último contenido el queexperimentó la represión”.

El contenido angustiante es ser mordido por el caballo, que es un sustitutodesfigurado de: “ser
castrado por el padre”.

7) ¿Porqué la angustia crea la represión?. (104)

“Pero el afecto-angustia de la fobia, que constituye la esencia de esta última, no proviene del
proceso represivo, de las investiduras libidinosas de las mociones reprimidas, sino de lo
represor mismo; la angustia de la zoofobia es la angustia de castración inmutada, vale decir,
una angustia realista, angustia frente a un peligro que amenaza efectivamente o es
considerado real. Aquí la angustia crea a la represión y no —como yo opinaba antes— la
represión a la angustia”.

“No es grato reparar en esto, pero de nada vale desmentirlo: a menudo he sustentado la tesis
de que por obra de la represión la agencia representante de pulsión es desfigurada,
desplazada, etc., en tanto que la libido de la moción pulsional es mudada en angustia. Ahora
bien, la indagación de las fobias, que serían las llamadas por excelencia a demostrar esa tesis,
no la corrobora y aun parece contradecirla directamente. La angustia de las zoofobias es la
angustia de castración del yo; la de la agorafobia, estudiada con menor profundidad, parece
ser angustia de tentación,que genéticamente ha de entramarse sin duda con la angustia de
castración. La mayoría de las fobias, hasta donde podemos abarcarlas hoy, se remontan a una

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angustia del yo, como la indicada, frente a exigencias de la libido. En ellas, la actitud
angustiada del yo es siempre lo primario, y es la impulsión para la represión. La angustia nunca
proviene de la libido reprimida. Si antes me hubiera conformado con decir que tras la represión
aparece cierto grado de angustia en lugar de la exteriorización de libido que sería de esperar,
hoy no tendría que retractarme de nada. Esa descripción es correcta, y en efecto se da la
correspondencia aseverada entre el vigor de la moción por reprimir y la intensidad de la
angustia resultante”.

Freud sostiene que no es el mecanismo de represión (mediante el cual la agencia


representante de la pulsión es desfigurada, mientras que la libido de la moción pulsional es
mudada en angustia), el que produce la angustia. Por el contrario, la angustia de la zoofobia,
angustia de castración del Yo, es la que se presenta frente a una amenaza de peligro realo así
considerado por el niño.Esta angustia del Yo es anterior a la represión y es la que impulsa.

8)¿Qué dice de las neurosis actuales y que supuesto ensaya?. (105)

“Pero confieso que creía estar proporcionando algo más que una mera descripción; suponía
haber discernido el proceso metapsicológico de una trasposición directa de la libido en
angustia; hoy no puedo seguir sosteniéndolo. Por lo demás, no pude indicar entonces el modo
en que se consumaría una trasmudación así”.

“Pero, ¿de dónde extraje la idea de esa trasposición? Del estudio de las neurosis actuales, en
una época en que todavía estábamos muy lejos de distinguir entre procesos que ocurren en el
yo y procesos que ocurren en el ello. Hallé que determinadas prácticas sexuales —como el
coitus interruptus, la excitación frustránea, la abstinencia forzada— provocan estallidos de
angustia y un apronte angustiado general; ello sucede, pues, siempre que la excitación sexual
es inhibida, detenida o desviada en su decurso hacia la satisfacción. Y puesto que la excitación
sexual es la expresión de mociones pulsionales libidinosas, no parecía osado suponer que la
libido se mudaba en angustia por la injerencia de esas perturbaciones. Ahora bien, esa
observación sigue siendo válida hoy; por otra parte, no puede desecharse que la libido de los
procesos-ello experimente una perturbación incitada por la represión; en consecuencia, puede
seguir siendo correcto que a raíz de la represión se forme angustia desde la investidura libidinal
de las mociones pulsionales”.

Freud, mientras realizabael estudio de las neurosis actuales,pudo deducir que algunas
prácticas sexuales, provocaban explosiones de angustia y un estado angustiado en
general.Estose producía porque la excitación sexual era inhibida o desviada en su camino hacia
la satisfacción, entonces, se producía una transposición directa de la libido en angustia.

Bibliografía

Freud, S., A.E. XX “Inhibición, síntoma y angustia”, Cap. VII, 118-24.

1) ¿Cómo ubica el Complejo de Edipo en el caso del pequeño Hans?. (118)

“El yo debe proceder aquí contra una investidura de objeto libidinosa del ello (ya sea la del
complejo de Edipo positivo o negativo), porque ha comprendido que ceder a ella aparejaría el
peligro de la castración”...“En el caso del pequeño Hans (vale decir, el del complejo de Edipo
positivo), ¿debemos suponer que la defensa del yo fue provocada por la moción tierna hacia la

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madre, o por la agresiva hacia el padre? En la práctica parecería indiferente, en particular


porque las dos mociones se condicionan entre sí; pero esta cuestión presenta interés teórico
porque sólo la corriente tierna hacia la madre puede considerarse erótica pura. La agresiva
depende esencialmente de la pulsión de destrucción, y siempre hemos creído que en la neurosis
el yo se defiende de exigencias de la libido, no de las otras pulsiones. De hecho vemos que tras
la formación de la fobia la ligazón-madre tierna ha como desaparecido, ha sido radicalmente
tramitada por la represión, mientras que la formación sintomática (formación sustitutiva) se ha
consumado en torno de la moción agresiva.

El autor ubica el Complejo de Edipo de Hans como positivo.La defensa del Yo se protege de las
exigencias de la libido. De este modo, la ligazón madre desaparece luego de la formación de la
fobia, tramitada por la represión; a su vez, el síntoma se crea alrededor de la moción agresiva.

2) ¿Cómo explica la “señal de angustia” y cuál es su peligro y qué significa que la


Angustia de Castración reciba otro objeto y una expresión desfigurada?. (119)
3) ¿Cuál es la formación sustitutiva, cuáles son sus ventajas y porqué la angustia de la
fobia es facultativa?. (119)
4) ¿Porqué Freud adscribe a la fobia el carácter de una proyección?.(120)
5) ¿Cómo caracteriza la angustia de las zoofobias y cuál es el peligro?. (120)
6) ¿Cuál es la diferencia respecto de la angustia realista?. ()
7) ¿Porqué el mecanismo de la fobia presta buenos servicios como medio de defensa?.
(121)
8) ¿Cuál es la función de los síntomas?. (122)
9) ¿Qué conjeturas establece a partir de la neurosis traumática respecto de la angustia?.
(122-3)
10) ¿Qué significa que la angustia de muerte debe concebirse como un análogo de la
Angustia de Castración y cómo retoma la neurosis traumática?. (123)
11) ¿Cuál es la nueva concepción de la angustia?. (123)
12) ¿Cuál es la notabilísima concordancia que postula en este capítulo y qué obsta para
sacar partido de esa concordancia?. (123-4)

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