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La intrusión astral se produce cuando una o varias entidades pertenecientes al plano
comúnmente conocido como astral o etéreo se introducen en el campo energético de un
individuo humano, con o sin su expresa autorización, fundiéndose parcial o totalmente en la
mente subconsciente del individuo. Estas entidades se abastecen, a modo de parásitos de los
aparatos sensorio-motor y emocional de éste, a través de los cuales se relaciona con el
medio externo.
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La intrusión astral no implica posesión, aunque ésta no se descarta. Un individuo puede
desarrollar una vida absolutamente normal sin ser jamás consciente de que su “espacio” ha
sido ocupado por diversas entidades adheridas a él.
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Hay diferentes tipos de EAPs. Su grado de seriedad depende de muchos factores. La más
común es la producida por la consciencia de entidades humanas descarnadas, es decir, seres
humanos que por algún motivo no han completado el proceso de transición después de la
muerte del cuerpo físico, quedando “atrapados” con o sin su consentimiento en el estado
intermedio o bajo astral. También hablaremos de las entidades demoníacas y de parásitos
semi-conscientes o larvas. El tema de las entidades demoníacas es muy complejo, y para
comprenderlo en su totalidad es necesario que el lector se familiarice con determinados
conceptos relacionados con el sistema de control.
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La muerte por sobredosis de drogas o alcoholismo puede provocar que el espíritu del
difunto conserve el apetito o el deseo de consumir tales sustancias; al ser un estado de
conciencia-energía, el mundo astral no puede satisfacer tales apetitos, por lo que el espíritu
decide holgazanear hasta encontrar un sujeto al que adherirse, por ejemplo, un adicto que le
proporcionará satisfacción a través de su aparato sensorio-motor. De esta forma el espíritu
se convierte en un parásito. Lo mismo puede ocurrir con cualquier tipo de apetito u
obsesión asociada al mundo material y físico de la tercera densidad, por ejemplo: comida,
sexo, otro ser humano, étc. } Si al morir la persona tenía dentro de sí una o varias entidades
parasitarias, la transición puede resultar un proceso difícil. En este caso hay varias
posibilidades: El espíritu del recién difunto puede llevar consigo a la entidad parasitaria
hacia la luz y de esta forma rescatar al alma perdida. El espíritu del recién difunto puede
separarse de la entidad parasitaria y dirigirse solo hacia la luz. Después de la separación la
EAP puede encontrarse nuevamente perdida, por lo que reinicia la búsqueda de otro
huésped en quien alojarse. Si la EAP posee una fijación con el individuo al que estuvo
adherida, puede esperar hasta la próxima encarnación de éste, localizarlo en el momento en
que se produzca el nacimiento, y unírsele nuevamente. Esta intrusión puede ocurrir en
repetidas encarnaciones del huésped. Si el espíritu de la persona recién fallecida no puede
separarse de la entidad intrusa, quizás por carecer de la energía necesaria, puede también
pasar a ser una entidad parasitaria con la otra EAP adherida a él. De esta forma, ambas
entidades pueden unírsele a otra persona, la cual a su vez, al morir, queda atrapada, y así
sucesivamente, hasta formar verdaderas cadenas de EAPs. Estos espíritus encadenados
pueden formar verdaderos cúmulos de entidades errantes. Es necesario comprender que no
se trata de una realidad física y que aplicar conceptos que sólo rigen en un estado material
es un error fundamental. Los espíritus son energía y no ocupan lugar. Una persona puede
tener docenas, hasta cientos de entidades adheridas. Éstas pueden “acomodarse” en el aura
o flotar dentro del aura fuera del cuerpo. Si una parte del cuerpo de una persona es
particularmente débil, o ha sufrido un accidente o enfermedad, puede alojar a una EAP que
a su vez, se identifica con dicha debilidad. También pueden situarse en cualquiera de los
chakras, atraídos por la peculiar energía de uno de ellos o por las estructuras físicas de esa
parte del cuerpo. Hay diferentes clases de EAPs. Los hay benignos, malignos y neutrales o
pasivos.
Las razones que pueden llevar a que una persona actúe como imán de estas entidades son
muchas y de muy diversa índole. Puede tratarse de algo muy simple, como el hecho de
estar físicamente próximo al lugar donde se produjo el deceso. De acuerdo a W. Baldwin,
aproximadamente el 50% de los casos investigados clínicamente se debieron a situaciones
fortuitas sin que existiera relación alguna entre los EAP y el huésped ni en ésta ni en
ninguna otra encarnación. La otra mitad de los casos pueden deberse a que existe algún tipo
de relación o asunto sin terminar en esta u otra vida.
De acuerdo a los especialistas del tema, el fenómeno de Intrusión Astral se da con mucha
frecuencia y todas las personas son afectadas por uno o más EAPs en algún momento de
sus vidas.
Una debilidad física, psíquica o emocional es una invitación inconsciente para que una
entidad se adhiera al individuo. Emociones demasiado fuertes, sentimientos negativos
reprimidos consciente o inconscientemente pueden ser la señal que las EAPs necesitan para
convertirse en inquilinos indeseados.
Algunos de los motivos que atraen a una EAP son: Todo tipo de cirugías, transplantes de
órgano, transfusiones de sangre, enfermedades, debilidades físicas o psíquicas, depresión,
enfermedades mentales, golpes en la cabeza, stress, étc. El uso de drogas, especialmente las
alucinógenas, el alcohol, la anestesia, calmantes, y sustancias similares producen una
abertura en campo energético que nos protege. Las relaciones sexuales pueden permitir el
intercambio de EAPs. El abuso sexual, el incesto, las violaciones, incrementan la
posibilidad de intrusión astral por parte de entidades que se sientan atraídas por las
vibraciones que semejantes situaciones producen.
Las prácticas mágicas de cualquier tipo, la canalización, la acción de pedir ayuda a “los
guías” sin tener el conocimiento suficiente sobre el mundo invisible, las prácticas de
meditación para contactar a los “maestros espirituales”, las sesiones espiritistas y todo tipo
de “actividades espirituales” que sean realizadas sin un profundo conocimiento de los
mundos invisibles, son invitaciones gratuitas a que espíritus oportunistas de toda clase,
tanto descarnados como entidades demoníacas interfieran y produzcan todo tipo de
problemas. He aquí que muchas de las ideas propagadas por la “Nueva Era” no sean más
que pura desinformación que puede costar MUY CARO a quienes no estén dispuestos a
investigar más profundamente este tipo de enseñanzas.
Un hecho que los jóvenes de hoy (y los no tan jóvenes también), que ignoran
profundamente la seriedad del tema, están expuestos a la intrusión astral al escuchar cierto
tipo de música, así como también a inclinarse por la práctica sexual promiscua, las drogas,
el alcohol, etc. No se trata aquí de ser “puritano”. Se trata de que el Sistema de Control
utiliza estas herramientas para su beneficio, asignando una gran cantidad de entidades
demoníacas a aquellos que podrían tener la posibilidad de DESPERTAR y de ENTENDER
la verdadera naturaleza de nuestra realidad. De esta forma, los jóvenes –y hablo
especialmente de los jóvenes porque en cierta forma, son los más vulnerables a las
influencias externas – impulsados por la necesidad de “pertenecer” a un determinado grupo,
andan por caminos sinuosos que ponen en peligro mucho más que su vida física: ponen en
peligro la libertad de sus ALMAS. Hablaremos de esto cuando tratemos el tema de
entidades demoníacas.
Una persona puede ser afectada por una EAP de muchas formas sin llegar a sospechar
nunca que una o varias EAPs se hallan adheridas a ella. Las actitudes, la conducta, las
inclinaciones, los deseos, los pensamientos y las emociones pueden estar influenciadas o
incluso ser determinadas por la acción de otra personalidad con una historia y un patrón de
conducta diferentes, sin embargo el individuo creerá que son sus pensamientos y sus
emociones. Tal entidad actúa como un vampiro psíquico –sin importar cuál sea la intención
de la entidad, negativa o positiva – succionando la energía vital del huésped quien en su
ignorancia, cree que se trata de un hecho incorregible. La entidad vive al nivel del
subconsciente del individuo y ejerce sobre él, todas sus cargas mentales, emocionales y
físicas.
En muchos casos una persona reconoce la posibilidad de haber albergado una EAP sólo
después de haberse sometido a terapia y de haber descubierto o notado que ciertos hábitos,
pensamientos, adicciones u obsesiones han desaparecido. Esta nueva conciencia puede
llegar pasados meses del tratamiento.
Los síntomas de la intrusión astral pueden ser muy sutiles. Una EAP puede estar presente
sin producir ningún síntoma notable – y esto se aplica también a las entidades demoníacas.
Sin embargo EAPs SIEMPRE ejercen algún grado de influencia.
Los lazos que unen a dos individuos en esta u otra vida –ya sean de amor, de odio, celos,
venganza, etc.- pueden ser un factor importante que permita la intrusión astral.
Sin saberlo, un individuo puede, inconscientemente, “invitar” a un ser querido a unírsele cuando
este último ha fallecido. Esta invitación puede producirse por el dolor que produce la pérdida y
por rehusarse a “dejar ir” al ser amado. El espíritu de la persona fallecida puede sentir de la misma
forma y decidir “quedarse” para acompañar al otro, protegerlo, darle “amor”, etc. Sin embargo
esto NO BENEFICIA a ninguno de los dos. La intrusión que se produce por los lazos de “amor” que
unen a dos individuos es una VIOLACIÓN del LIBRE ALBEDRÍO de ambas almas. La realidad es que
por mucho que la persona que continúa viva extrañe, anhele o sienta dolor por la pérdida del
fallecido, el espíritu de este NO TIENE derecho a invadir el espacio y la energía de la otra persona,
así como tampoco, la persona viva NO DEBE jamás invitar a un espíritu a quedarse. De ninguna
manera es un acto de AMOR impedir el progreso espiritual de otro ser y es una acto extremo de
servicio a sí mismo (SAS). Violar el libro albedrío de un ser es anotar una gran deuda en el libro del
Karma y es completamente perjudicial para ambos seres.
Sin embargo pareciera ser que hay algunos casos en donde la intrusión astral es planificada en la
etapa previa a la vida como parte del plan para aliviar deudas kármicas. De todas formas puede
que esto sea una excepción que sólo se permite a ciertas almas.
La intrusión astral NO necesita del permiso del huésped para producirse. La ignorancia y el
rechazo ante la idea de las EAPs NO ES DEFENSA contra éstas. El poseer un determinado
sistema de creencias NO ES DEFENSA contra la intrusión astral. La ÚNICA protección es
el CONOCIMIENTO de que hay una gran cantidad de evidencia –tanto en la historia, como
proporcionada por investigadores científicos del campo de la psiquiatría y la psicología, de
que la intrusión astral ES una REALIDAD. SABER que EXISTE y cómo se produce es ya,
de por sí un escudo protector. EL CONOCIMIENTO PROTEGE, LA IGNORANCIA NOS
PONE EN PELIGRO.
Una conducta inconsistente y errática puede resultar del pase del control del individuo de
una EAP a otra. Este tipo de comportamiento es similar al cambio que se produce entre
personalidades alternas en los casos de trastornos disociativos de indentidad o personalidad
múltiple.
Una intrusión reciente o una posesión puede causar el deseo desmedido por la comida, las
bebidas, las drogas, el sexo, la obsesión por una idea o una persona, el cambio repentino del
sistema de creencias, de los intereses, de los gustos, etc. La voz y las expresiones faciales y
corporales también pueden cambiar drásticamente.
La realidad de las EAPs refuta el lema tan difundido en los últimos años por el movimiento
de la “Nueva Era” de que “tú creas tu propia realidad”. Esto es una falacia peligrosa y
puede desatar un verdadero caos psicológico en la mente de un individuo. A este respecto
pueden leer el artículo de “Por qué TU NO creas tu propia realidad” por Moris Tarantella.
Una persona que sufre la intrusión astral puede tener ideas suicidas que parecieran salir de
la nada. Puede experimentar imágenes mentales inexplicables, oír voces, presenciar
extraños fenómenos, sentir miedo repentino o tener la sensación de ser observada o
perseguidas. Las EAPs también se manifiestan en sueños y pesadillas. Una EAP puede
reactivar la memoria de su muerte en la mente del huésped haciendo que éste tenga visiones
o sueños con dicha escena. También puede generar emociones asociadas a lugares,
situaciones, ideas u otras personas.
Es muy importante tener en cuenta que antes de realizar cualquier terapia de vidas pasadas,
el terapeuta debe diagnosticar la posible presencia de EAPs. Una terapia de vidas pasadas
realizada sin esta precaución puede resultar en un completo fracaso para aliviar los
síntomas del paciente, ya que podría estar tratando la vida de una EAP.
Una persona puede creer que está recordando sus otras vidas, cuando en realidad, son las de
la EAP. Si realmente se trata de la vida del individuo, éste deberá recordar los
acontecimientos que siguieron a la muerte, es decir, la luz, la transición a la 5ta densidad –
conocida como el Bardo por algunos autores- su estancia allí, el proceso de la planificación
de la nueva vida, la vuelta a la 3ra densidad, la entrada al cuerpo y el nacimiento. Si por el
contrario, el individuo no tiene recuerdos sobre el proceso posterior a la vida, es probable
que se trate de los recuerdos de la EAP. La entidad ha quedado traumatizada por los hechos
previos a la muerte por lo que los síntomas del paciente pueden ser los de la entidad. El
terapeuta o la persona misma deberá cuestionar los recuerdos hasta encontrar la prueba de
que estos son de la persona en cuestión y no los de una EAP. Por ejemplo, el tiempo o la
época en la que transcurre la vida de la EAP pueden no ser los apropiados para los del
individuo. La EAP recordará la edad que el huésped tenía cuando ésta se le unió así como
también las circunstancias de la intrusión.
La entidad debe ser liberada guiándola hacia la luz, el terapeuta o la persona que hace la
liberación debe asegurarse de que la entidad caiga en buenas manos, es decir, que los guías que
acuden a su encuentro provengan de la luz. Es necesario explicarle qué es lo que va a ocurrirle de
modo que se deshaga de los obstáculos que le impiden partir. Una espíritu humano descarnado
puede no presentar tantos problemas como uno que tenga dentro de sí a una o varias entidades
demoníacas o como una entidad demoníaca en sí misma
¿Cuáles son las diferencias entre los síntomas de una persona víctima de una EAP y los de
una persona que sufre de un trastorno disociativo (TDI)?
Un individuo que sufre de un TDI es incapaz de integrar la personalidad, siendo ésta una
proliferación de personalidades diferentes entre sí. El Trastorno Disociativo de Identidad se
caracteriza, de acuerdo al DSM-IV (Manual Diagnóstico y Estadístico de los Trastornos
Mentales, 4ta. Edición), por la presencia de dos identidades o personalidades distintas -cada
una con su patrón estable de percibir, relacionarse y pensar sobre el ambiente y sobre uno
mismo -, que alternativamente, al menos dos de ellas, toman el control del comportamiento
de la persona y que se acompaña por una incapacidad para recordar información personal
importante que es demasiado amplia para ser explicada por un simple olvido. Este trastorno
se define por períodos de amnesia.
Aunque la tercera edición revisada (DMS III R) del DMS eliminó el criterio de amnesia, la
cuarta edición lo restableció por dos razones:
Sin el requisito de amnesia, los criterios diagnósticos son demasiado amplios y facilitan el
diagnóstico excesivo de este trastorno.
Los pacientes con trastornos disociativos presentan, por lo general, diversos síntomas
psicológicos y físicos:
Ansiedad, depresión.
Automutilación.
Intentos de suicidio.
Síntomas de:
El diagnóstico diferencial de este trastorno incluye síntomas causados por los efectos
fisiológicos de una enfermedad, particularmente, algunas formas de epilepsia, y los efectos
agudos de un medicamento.
De acuerdo al Dr. Richard Kluft (1986), hay cuatro factores determinantes para el
desarrollo del TDI: [*]
Estructuras psicológicas específicas o contenidos que pueden ser usados para la creación de
personalidades múltiples.
El Doctor Bennet Brown (1986) propuso un modelo 3-P del desarrollo de este
desorden: [*]
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Los trastornos disociativos no especificados se definen, según el DMS-IV, como
trastornos en los que la característica predominante es un síntoma disociativo, por
ejemplo, una perturbación de las funciones habitualmente integradas de la
consciencia, la memoria, la identidad o la percepción del medio, que no cumple los
criterios de los trastornos disociativos mencionados:
Estados disociativos en individuos que han sido sometidos a formas crónicas e intensas
de coerción (por ejemplo, lavado de cerebro).
Conclusión:
Podemos concluir que hay diversos factores que diferencian al Síndrome de Intrusión
Astral del Trastorno Disociativo de Identidad.
Veamos un cuadro que resume estas diferencias.
TDI SIA
· Una Entidad Astral Parasitaria puede a
vida del huésped, manteniendo una consc
·Los síntomas se inician en la infancia. Los síntomas visibles
momento en el que se unió al huésped y d
se dan, por lo general, entre los 20 y 40 años. La mayoría de
unión. Sin bien la salud mental, emocion
los pacientes fueron víctimas de abuso durante la infancia.
en la atracción de la entidad, no juegan u
astral.
·En el SIA, sólo la liberación de la entida
·La meta de la terapia es la integración de las distintas
Por lo tanto el tratamiento de los conflict
personalidades o al menos, la cooperación y co-consciencia.
un medio para lograr su partida. El obje
[Braun, 1986][*]
paciente.
·Por lo general, el huésped no presenta a
·Las personas que sufren de este desorden padecen de
identifica con las conductas, las emocione
amnesia durante el período de control de una de las
como si se tratara de los suyos propios. S
personalidades.
posesión total, lo que no es muy común.
·Dr Ralph Allison (1985)[*], que ha investigado en detalle el ·Después de liberada la entidad, el pacien
tratamiento del TDI, declara que muchos de sus pacientes actuar, sentir o pensar. Puede incluso lle
con TDI, han demostrado síntomas de posesión. peso se le hubiera quitado de encima.
·Las personalidades toman completo control de la conducta
del individuo, resultando en personalidades diferentes entre · La entidad es consciente de que no se en
sí sin ser conscientes de la presencia de otras personalidades.
Por último, Allison (1980) describe numerosos casos de supuestas posesiones en pacientes
con TDI. Ha desarrollado un esquema conceptual que distingue cinco niveles o tipos de
posesión:[*]
> Los implantes y los dispositivos de limitación espiritual son barreras vibratorias
> en el camino de ascensión que bloquean tu progreso hacia la plena
> autofacultación. Estos bloquean tu camino poniéndote antifaces y creando
> falsas realidades en tu conciencia, por lo tanto limitando tu acceso hacia tu Ser
> Superior. Estos son mecanismos de control externo de las Fuerzas Oscuras que
> te mantienen en una realidad dual. Aunque hay muchos tipos, propósitos y
> causas, todos actúan como canales inconscientes de energía negativa en tu
> vida y representan ataduras kármicas y asociaciones que necesitan ser
> sanadas y rectificadas.
> Los implantes representan patrones kármicos colectivos que han sido
> impuestos externamente por las Fuerzas Oscuras, en un esfuerzo por controlar
> el pensamiento y las respuestas emocionales de la humanidad. A través de la
> historia de este sector del Universo, las realidades duales (bien y mal) han sido
> muchas. Nosotros como trabajadores de la luz hemos estado en muchas de
> estas diferentes realidades. Nosotros nos estamos acercando ahora al tiempo
> de cumplimiento y ascensión para este planeta, por lo que se necesita que
> seamos libres nuevamente para regresar a nuestro estado plenamente
> facultado, llevando al planeta y a sus habitantes con nosotros. Cada vez que
> entramos en un nuevo sistema planetario, para salvarlo de las Fuerzas
> Oscuras, es necesario que nosotros nos asociemos con la experiencia de vida
> de ese planeta para que podamos cambiarlo desde adentro. Es un acto sagrado
> el encarnar una realidad dual, apropiarse de sus disfunciones, elevarse sobre
> ellas y regresarlos a Dios.
> Esos implantes son karma del alma que cargamos de una encarnación a otra.
> La última forma en que se han recibido los implantes es a través de
> asociaciones con diferentes organizaciones espirituales de naturaleza negativa.
> Esto incluye cualquier religión o secta que utilice el control mental y el miedo
> para reforzar el control de sus miembros. Esto son todas las instituciones
> religiosas principales, así como las más obvias sociedades de magia negra, que
> han usado votos, acuerdos y mecanismos de control relacionados para ejercer
> control sobre sus miembros. Esos votos de fidelidad permanecen hasta ser
> revocados. Esta energía necesita ser transmutada.
> Los implantes se reciben a través de los cuerpos sutiles y controlan nuestro
> acceso a las frecuencias superiores. Cuando nuestras vibraciones caen al nivel
> de dualidad y nosotros creemos en la ilusión de separación de Dios, nosotros
> somos susceptibles. Ya que la humanidad como un todo vive en una realidad
> dual y ha comprado la ilusión de la separación de Dios, todos estamos viviendo
> bajo la influencia de algún tipo de implante o dispositivo de limitación
> espiritual. Todos los tenemos hasta que sean limpiados. Recuerden, los que nos
> implantaron quieren controlarnos y hacernos creer que no somos uno con
> nuestro Creador. Si nosotros creemos eso nos convertimos en una amenaza
> para ellos.
> Los implantes han jugado una parte primordial en el karma que necesita ser
> resuelto de una vida a otra. Cuando estás implantado se te requiere que
> regreses en la rueda de la reencarnación una y otra vez para resolver el karma
> y ser controlado por las Fuerzas Oscuras otra vez, una manera muy inteligente
> para garantizar el estado del planeta para siempre, esto es, hasta ahora. Al
> ascender un alma de regreso a su presencia YO SOY, todo el karma debe ser
> balanceado, todos los implantes removidos. Aunque haya individuos que han
> ascendido desde el tiempo de Jesús, esto ha sido un suceso raro hasta ahora.
> El planeta mismo tomó la decisión de ascender hacia una realidad de quinta
> dimensión. La Gracia se ha extendido para absolver todo el karma para
> aquellos que elijan la ascensión con él. Parte de la Gracia es la liberación de
> implantes.
> Este proceso limpia todos los implantes y dispositivos de limitación espiritual,
> conocidos y desconocidos, armas espirituales, parásitos mentales y del cuerpo
> emocional, entidades pegadas, formas de pensamiento de todos tipos , y los
> votos y acuerdos que mantienen los dispositivos dentro de ti.
Parásitos energéticos
Al separarse el espíritu del cuerpo sin vida, se produce también la separación del cuerpo de
los principios animales inferiores del hombre, es decir el conjunto de sus pasiones
inferiores y malas acciones. A este ser lo llamaremos el "cascarón astral", ya que es como
una corteza que recubre el cuerpo astral. Normalmente este “cascarón” se desintegra en
cierto lapso de tiempo por falta de energía. Sin embargo cuando este “cascarón” es de gran
fortaleza, lucha por sobrevivir y busca sujetos en los cuales pueda introducirse a fin de
continuar su existencia en el plano de la materia. Cuando uno de estos entes logra entrar en
el ovoide mental de un hombre se produce en éste un marcado cambio de carácter, ya que
toma la personalidad inferior e instintiva del difunto a quien pertenecía esta entidad.
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Toda clase de obsesiones se producen por esta causa, y si el cascarón es suficientemente
poderoso puede llegar a desalojar completamente al espíritu, produciéndose entonces la
locura. En otros casos más graves son varias las entidades usurpadoras que se disputan el
cuerpo produciéndose locura furiosa. En un elevado porcentaje la insania es provocada por
esta causa.
En algunos casos es posible proceder a la expulsión de estos entes ya que temen al
individuo puro, bien posesionado de sí mismo, de fuerte voluntad y carácter magnético o
solar.
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Las sesiones de espiritismo son el lugar donde se manifiestan los cascarones para
alimentarse de las energías del médium y de los que forman la cadena de invocación. Es a
causa de esto que los médiums sufren de agotamiento nervioso y consunción, ya que están
entregando sus energías a estos vampiros del invisible que se burlan de ellos simulando ser
espíritus desencarnados. Los grandes engañados y perjudicados son los que asisten a estas
sesiones creyendo sinceramente que se materializan los espíritus de los difuntos. Sin darse
cuenta están haciendo un gran daño al mantener con vida a estas entidades que al absorber
parte de la conciencia de los asistentes quedan capacitadas para actuar conscientemente
haciendo el mal.
Cuando la ciencia compruebe la existencia de estos seres, se habrá dado un gran paso en el
tratamiento de la locura, obsesiones, y enfermedades nerviosas y mentales.
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Todas las enfermedades se originan en la mente y sólo después de cierto período llegan a
manifestarse en el cuerpo físico.
http://www.concienciadeser.es/chakras/parasitos_astral.html