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Análisis Literario

“No oyes ladrar a los perros”


Juan Rulfo

Alumno: Sebastián Capdevilla Sáez

Curso: 2 medio ”A”

Fecha: 11/05/18

Profesor: Daniel González


Análisis Literario “No oyes ladrar a los perros”
Esta historia, incluida en el volumen de cuentos “El llano en llamas”,
presenta a un padre llevando a su hijo herido al pueblo llamado
“Tonaya” para curarlo. La historia puede dividirse en dos secciones. La
primera cuenta el viaje de padre e hijo y acaba en el momento en que
el padre avista el pueblo; la segunda parte es breve, de unas pocas
líneas y en ella el padre oye ladrar los perros que le anuncian la
presencia del pueblo, y reprocha al hijo su falta de ayuda, mientras
que el mismo no responde por estar muerto.

Las historias de Rulfo se basan principalmente en la narración del


conflicto entre un padre e hijo, primero empezaremos con una breve
descripción de los personajes, para luego cerrar con el contexto de la
obra:

Los Personajes

El padre: El protagonista del texto y a la vez el narrador de este, un


hombre perseverante, sin nombre, un poco avanzado en edad, que
como cualquier señor mayor de edad tiene sus complicaciones, como
el hecho de que casi no escucha bien. Y va en busca del pueblo junto
con su hijo Ignacio.

El hijo: Llamado Ignacio, un joven mal encaminado, es el hijo que va


cargando a su padre, y lo ayuda a buscar el pueblo, su padre le
menciona que este muy atento al ladrido de los perros y así puedan
guiarse hacia el pueblo, al parecer, este hijo es muy amado por su
padre, pero sin recibir respeto de él.

La madre: La madre de Ignacio y difunta, de la cual no tenemos


suficiente información. El padre le habla al hijo acerca de su madre,
refiriendo tiempos en que el hijo era un niño. Se dice que la madre
podría ser la luna en efecto ya que les esta alumbrándoles el camino
hacia Tonaya.
Contexto
Podemos darnos al momento de una varias veces leídas la obra, -en
mi caso- que el contexto de este texto es sobre la dureza de vivir y
trabajar en el campo, el amor incondicional de un padre por su hijo y
su esposa y el crimen. El padre de Ignacio, narra el relato en primera
persona, intentando hacer al lector darse cuenta de lo dura que puede
ser la vida como campesino y demostrando lo que es el amor por su
familia. De una forma, Juan Rulfo escribe el libro inspirándose en la
vida diaria de padres con sus hijos. En esta historia, el ejemplo dado
es cómo a pesar que Ignacio ha cometido muchos homicidios y ha
matado a mucha gente, su padre da todo lo que tiene en él para llevar
a su hijo a algún lugar en el que lo podrán curar y ayudar, a pesar de
todos los pecados y lo malo que ha hecho. Cabe mencionar que este
texto fue escrito en medio de una guerra (Guerra Cristera, y
Revolución Mexicana).

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