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CORTE SUPREMA DE JUSTICIA

SALA DE CASACIÓN CIVIL

Bogotá, D. C., siete (07) de junio de dos mil dieciocho (2018).-


SC2026-2018
Radicación n° 11001 02 03 000 2016 02647 00
(Aprobado en sesión de cuatro de abril de dos mil dieciocho)
ÁLVARO FERNANDO GARCÍA RESTREPO
Magistrado Ponente

Decide la Corte sobre la solicitud de exequátur elevada por MARTA CECILIA


GIRALDO DE VÖLKER, respecto de la sentencia dictada el 20 de septiembre de 2011 por el
Tribunal Municipal Bad Homburg v.d. Höhe de la República de Alemania.

I. ANTECEDENTES

1. La demandante a través de apoderado judicial, pretende la homologación del


fallo antes mencionado, en el cual se decretó la adopción de la menor Elica Lorena Münch
Giraldo, a favor de Kai Andreas Völker; y, en consecuencia, requiere la inscripción de tal
providencia en el registro civil correspondiente.

2. Como fundamento de su petición, la actora adujo, que

2.1. El día 21 de septiembre de 1999, nació su hija, la señorita Elica Lorena


Münch Giraldo, según el registro civil de nacimiento indicativo serial No. 27958973 sentado en
la Notaría Trece del Círculo de Cali, cuyo padre, obedece al nombre de Horst Münch.

2.2. La actora y el ciudadano Kai Andreas Völker contrajeron matrimonio civil en


el año 2007 en Tonder Kommune, Dinamarca, unión que se registró ante la Notaría Primera
del Círculo de Bogotá.

2.3. Como quiera que el padre biológico de la ahora adolescente, «acept[ó]» la


adopción solicitada por el cónyuge de la señora Giraldo de Völker, mediante sentencia del 20
de septiembre de 2011, el Tribunal Municipal de Bad Homburg v.d. Höhe de la citada nación,
accedió a tal pretensión, resolviendo que la menor, Elica Lorena llevara el apellido Völker
«como apellido de nacimiento» (fls. 28 a 31).

3. La demanda fue admitida mediante auto de 31 de octubre de 2016, en el


que se ordenó correr traslado al Ministerio Público en la forma prevista en el artículo 607 del
Código General del Proceso, sin que se dispusiera lo propio respecto a Horst Münch, por
cuanto el litigio no fue contencioso.

4. Al emitir su criterio frente al escrito inicial, la Procuradora Delegada para la


Defensa de los Derechos de la Infancia, la Adolescencia y la Familia, tras pronunciarse sobre
los hechos, discurrir sobre los requisitos que deben acreditarse en el caso concreto para la
procedencia de la figura invocada, advirtió que en el presente asunto, concurren la mayoría
de ellos, siendo necesario ahondar, en la verificación en punto de que la providencia foránea
se acompase con las exigencias contempladas en nuestra legislación interna, respecto de la
voluntad expresada por el padre biológico de la menor involucrada (fls. 36 a 40).

5. Dentro de la etapa de ordenación y práctica de pruebas, se dispuso tener en


cuenta los documentos anexados con la demanda y se ofició al Ministerio de Relaciones
Exteriores para que certificara si entre Colombia y Alemania existen tratados o convenios
vigentes sobre el reconocimiento recíproco de las sentencias judiciales extranjeras en
procesos de adopción (fl. 42).

II. CONSIDERACIONES

1. La exclusividad de la jurisdicción es una de las manifestaciones de la


soberanía del Estado, y como tal, comporta que éste se reserve para sí la sublime función
pública de administrar justicia, en virtud de la cual, únicamente las decisiones judiciales
adoptadas por los jueces permanentes y los particulares habilitados transitoriamente para ello,
producen consecuencias jurídicas y son de obligatorio acatamiento dentro del territorio
nacional.

Sin embargo, dicho imperio jurisdiccional, y más concretamente, el axioma de la


independencia de los Estados, ha adoptado «una nueva concepción (…), más acorde con la
universalización de ciertos valores y formas de organización política y económica», en razón
al inacabado proceso de globalización, «[e]l creciente flujo de bienes y personas y la agilidad
de todo tipo de comunicaciones» (CSJ SC, 16 jul. 2004, Rad. 2003-00079-01, reiterado en
SC14776-2015).

Es por eso que, excepcionalmente se ha admitido, en atención a exigencias prácticas


de internacionalización, cooperación y eficacia de la justicia, que las sentencias, laudos
arbitrales y otros proveídos que tengan tal carácter, dictados en un Estado foráneo, en
procesos contenciosos o de jurisdicción voluntaria, surtan efectos en Colombia, siempre que
se respeten los postulados sustanciales y procesales establecidos en los artículos 607 y 608
del Código General del Proceso.

2. Así las cosas, el legislador nacional diseñó un sistema mixto en aras de


conceder las mencionadas homologaciones, sobre el cual ha precisado esta Corporación:

[P]ara que los fallos extranjeros produzcan efectos en el territorio colombiano,


necesariamente deberá acreditarse la existencia de un tratado suscrito entre Colombia
y el país que dictó la sentencia, es decir lo que es conocido como la reciprocidad
diplomática; o, en su defecto, lo que a ese respecto prevea la ley foránea o la práctica
jurisprudencial imperante, en orden a reconocerle también efectividad a las sentencias
dictadas en Colombia, fenómenos denominados en su orden reciprocidad legislativa
y reciprocidad de hecho (CSJ SC, 17 jul. 2001, Rad. 0012, reiterada en SC14776-
2015).

Por consiguiente, al adoptar esta clase de decisiones,

se atiende [en primer lugar] a las estipulaciones de los tratados que tenga celebrados
Colombia con el Estado de cuyos tribunales emane la sentencia que se pretende
ejecutar en el país. Y en segundo lugar, a falta de derecho convencional, se acogen
las normas de la respectiva ley extranjera [o su jurisprudencia reinante] para darle a
la sentencia la misma fuerza concedida por esa ley [o la doctrina jurisprudencial] a las
proferidas en Colombia (G.J. t. LXXX, pág. 464; CLVIII, pág. 78; CLXXVI, pág. 309;
CSJ SC, 18 dic. 2014, rad. 2013-02234-00, reiterada en SC14776-2015).

3. De otra parte, también se requiere, adicionalmente, que la respectiva


providencia que se aspira irradie efectos en Colombia, cumpla con los requisitos consagrados
en el prenotado artículo 606 del Código General del Proceso y las del correspondiente
instrumento internacional, ley o jurisprudencia.

4. En el expediente contentivo de la petición de exequátur se tiene acreditado


lo siguiente:

a.- Escritura pública No.4334 del 29 de septiembre de 2008, mediante la cual se


protocolizó el matrimonio en el exterior de Kai Andreas Völker y Martha Cecilia Giraldo Rendon
(fls. 2 a 4).

b.- Registro Civil de Nacimiento de Elica Lorena Münch Giraldo del 21 de


septiembre de 1999 en la ciudad de Cali (Colombia); cuyos padres biológicos obedecen a los
nombres de Martha Cecilia Giraldo Rendón y Horst Münch (fl. 9).

2
c.- Sentencia del 20 de septiembre de 2011, emitida por el Tribunal Municipal Bad
Homburg v.d. Höhe de la República de Alemania, mediante la cual, en virtud de los artículos
1741 y siguientes del Código Civil de la citada nación, declaró que «Elica Lorena Völker,
nacida el 21.09.1999 de Cali, Colombia (…) es adoptada por el señor Kai Andreas Völker (…);
La adoptada lleva el apellido Völker como apellido de nacimiento (…); los efectos de la
adopción se rigen por las disposiciones sobre la adopción de un menor» (fls 19 y 20).

d.- Oficio S-GTAJI-17-011932 de 13 de febrero de 2017, de la Coordinadora del


Grupo Interno de Trabajo de Tratados del Ministerio de Relaciones Exteriores, quien mencionó
que: «pudo establecer que (…) no reposa información sobre tratados bilaterales o
multilaterales en materia de reconocimiento recíproco de sentencias civiles, en los que la
República de Colombia y la República Federal de Alemania sean Estados Parte» (fl. 47).

e.- El tratado relativo a la «Protección de los Niños y a la Cooperación en Materia de


Adopción Internacional» celebrado en la Haya el 29 de mayo de 1993, el cual fue suscrito y
aprobado por el Estado colombiano mediante la Ley 265 de 1996, y rigió en Alemania desde
el 1° de enero de 2002 (fls. 76 a 94).

f.- Ley sobre los Asuntos de la Jurisdicción Alemana, que permite el reconocimiento
de sentencias extranjeras, expedida el 5 de noviembre de 2001 (fls. 96 a 111).

5. En el asunto que se analiza, Martha Cecilia Giraldo de Völker solicitó la


homologación de una decisión en virtud de la cual el Tribunal Municipal Bad Homburg v.d.
Höhe de la República de Alemania, accedió a la adopción de la menor Elica Lorena Münch
Giraldo a favor del señor Kai Andreas Völker, razón por la cual, corresponde a esta Sala
analizar la convergencia de las exigencias mencionadas en párrafos precedentes.

6. Resulta entonces pertinente entrar a establecer frente a la sentencia cuyo


exequátur se implora, si con el país de origen de la decisión existe reciprocidad diplomática o,
en su defecto, legislativa.

En el presente asunto se observa, que no existe reciprocidad diplomática entre las


Repúblicas de Colombia y Alemania, debido a que, si bien, ambas naciones suscribieron
el acuerdo internacional sobre «Protección de los Niños y a la Cooperación en Materia de
Adopción Internacional», este no es aplicable al presente asunto, como quiera que se
advierte, que el desplazamiento de la menor adoptada al citado país europeo no se dio en
virtud del anhelado trámite de adopción que culminó con el fallo de 20 de septiembre de
2011, sino en razón del vínculo matrimonial existente entre la madre biológica y el padre
adoptante con vigencia desde el 14 de diciembre de 2007, luego entonces, la aludida
circunstancia no se acompasa con lo dispuesto en el numeral 1º del artículo 2º de la
Convención el que prevé que

«se aplica cuando un niño con residencia habitual en un Estado contratante ("el
Estado de origen") ha sido, es o va a ser desplazado a otro estado contratante ("el Estado
de recepción"), bien después de su adopción en el Estado de origen por cónyuges o por
una persona con residencia habitual en el Estado de recepción, bien con la finalidad de
realizar tal adopción en el Estado de recepción o en el Estado de origen».

La Sala señaló en un caso de similares contornos que:

«No obstante, relativamente a la naturaleza de la adopción decretada, el convenio no


es aplicable al caso, porque como se informa en las diligencias, el desplazamiento de
la menor adoptada del Estado de origen y los procedimientos observados se realizaron
al margen de la normatividad internacional. Baste señalar, en efecto, que su traslado
al Estado de recepción, no tuvo como mira realizar la adopción propiamente dicha, al
punto que ni siquiera participaron las Autoridades Administrativas Centrales de uno u
otro país, referidas en el convenio, por el contrario, su permanencia allí obedeció a
circunstancias diferentes, como que el padre adoptante, antes que serlo, contrajo
matrimonio con la madre biológica, quienes desde entonces y por ese motivo todos
viven en los Estados Unidos de América (…)» (CSJ STC 28 Sept. 2010 Rad. 2004-
00097-00).

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Sin embargo, aparecen documentos (Ley de Adopción de Menores Bajo el Derecho
Foráneo) que reconocen la fuerza de los fallos extranjeros en Alemania (fls. 96 a 100), cuando
se trate de sujetos «menores de 18 años» y entre otras, «1. Se puede apreciar como parte del
interés superior del menor (…); 2. Se cuenta con el consentimiento necesarios (sic) para dar
por terminado (sic) la relación padres-biológicos –menor (…); 3. No se contrapongan de forma
predominante y generen así conflicto de intereses del cónyuge, de la pareja de hecho o de los
hijos de la familia adoptante», luego entonces, la existencia de la reciprocidad legislativa se
encuentra acreditada.

7. Así, constatado dicho requisito, corresponde a la Corte verificar si el fallo


extranjero cuyo exequátur se solicitó, cumple las exigencias del artículo 606 del Código
General del Proceso, a la luz del entendimiento que la jurisprudencia les ha dado, es decir,
que no «…verse sobre derechos reales respecto de bienes situados en territorio nacional; que
no recaiga sobre asuntos de resorte exclusivo de los jueces nacionales o respecto de los
cuales exista proceso en curso o sentencia en firme. Además, si el fallo fue contencioso, se
haya cumplido la debida citación y contradicción del demandado» (CSJ SC 20 mar. 2014, rad.
2012-02652-00).

7.1. Examinada la actuación, se destaca que se aportó copia el fallo proferido


por el Tribunal Municipal Bad Homburg v.d. Höhe de la República de Alemania, mediante la
cual, se declaró que «Elica Lorena Völker, nacida el 21.09.1999 de Cali, Colombia (…) es
adoptada por el señor Kai Andreas Völker (…); La adoptada lleva el apellido Völker como
apellido de nacimiento (…); los efectos de la adopción se rigen por las disposiciones sobre la
adopción de un menor» (fls 19 y 20), debidamente legalizado conforme a los artículos 3º y 4°
de la Ley 455 de 1998.

7.2. Tal pronunciamiento foráneo es definitivo y se encuentra en firme,


desprendiéndose lo primero de su tenor pues en este se precisó que «la decisión no es
impugnable (Art. 197 inciso 3 frase 1 FamFg)», y la firma del funcionario que profirió el fallo,
igualmente, fue autenticada mediante la apostilla de que trata la aludida Convención de La
Haya (Cit.).

Igualmente, refiere exclusivamente a la adopción de la infante, así como sus efectos, tener
relación alguna con derecho real, y menos aún, sobre bienes ubicados en la República de
Colombia.

De otra parte, es necesario que la sentencia extranjera sea compatible con los
principios y las leyes de orden público del Estado colombiano, condición ésta que el fallo
cumple a cabalidad, toda vez que en Colombia se admite la adopción y no existe proceso en
curso o sentencia ejecutoriada de los jueces colombianos sobre el mismo asunto.

Así mismo, se puede establecer que la sentencia cuyo homologación se solicita no se


opone, ni en lo formal ni en lo sustancial, a las disposiciones de orden público nacional, si se
tiene en cuenta que, como se dijo, también en Colombia es procedente la adopción cuando
se trata de menores de 18 años de edad, está presente la voluntad de los padres biológicos y
el interesado sea cónyuge o compañero permanente de uno de los progenitores, ello según lo
dispuesto en los artículos 63, 66 y 68 de la Código de la Infancia y la Adolescencia, modalidad
que también inspiró la sentencia judicial en la nación Alemana.

8. Con base en lo anterior y por hallarse reunidos todos los presupuestos legales es
procedente otorgar efecto jurídico a la mencionada determinación de «adopción», como en
casos anteriores lo ha dispuesto la Sala, y ordenar su inscripción en el respectivo registro del
estado civil.

III. DECISIÓN

En mérito de lo expuesto, la Corte Suprema de Justicia, en Sala de Casación Civil,


administrando justicia en nombre de la República de Colombia y por autoridad de la ley,

RESUELVE

PRIMERO.- CONCEDER el exequátur de la sentencia proferida el 20 de septiembre


de 2011 por el Tribunal Municipal Bad Homburg v.d. Höhe de la República de Alemania,

4
mediante la cual se dispuso la adopción de adolescente Elica Lorena Völker, a favor del señor
Kai Andreas Völker,

SEGUNDO.- INSCRIBIR esta decisión, junto con la providencia reconocida, en el folio


correspondiente al registro civil de Elica Lorena Völker, para los efectos previstos en los
artículos 6º, 106 y 107 del Decreto 1260 de 1970 y de conformidad con el artículo 13 del
Decreto 1873 de 1971, líbrense, por Secretaría, las comunicaciones pertinentes.

TERCERO.- Sin costas en el trámite.

AROLDO WILSON QUIROZ MONSALVO


Presidente de Sala

MARGARITA CABELLO BLANCO

ÁLVARO FERNANDO GARCÍA RESTREPO

LUIS ALONSO RICO PUERTA

ARIEL SALAZAR RAMÍREZ

OCTAVIO AUGUSTO TEJEIRO DUQUE

LUIS ARMANDO TOLOSA VILLABONA

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