Pruebas tipo ICFES
CODIGO
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Ga EL LA
SECUNDARIALa Prueba ICFES
La prueba ICFES esta disefiada para evaluar a los estudiantes en el uso de las competen-
clas en los diferentes componentes propuestos para cada area. Para el caso de lenguaje,
las competencias y los componentes estan centrados en el uso del lenguaje en diferentes
Contextos, es decir, evalua la capacidad discursiva dentro de diferentes contextos en los que
Se pueden involucrar multiples areas del conocimiento.
Competencias para el area de lenguaje
Las competencias establecen una serie de procesos y estrategias que debe realizar el estudiante
frente a diversas situaciones de ensefianza/aprendizaje.
Las competencias de lenguaje son las habilidades necesarias para la adquisicién y perfeccionamiento
de la capacidad comunicativa. Por ejemplo, identificar el contexto comunicativo, emplear las expresiones
adecuadas y las cargas de la intencién comunicativa necesaria para que el interlocutor comprenda
un mensaje.
En el rea del lenguaje hay tres competencias especificas:
Competencia interpretativa: centrada en la identificacion y andlisis de textos. _—|
* Competencia argumentativa: se ocupa de las ideas que dan sentido al texto a partir
___ de ctiterios como el reconocimiento, la construccién y el establecimiento de razones. |
* Competencia propositiva: plantear alternativas y posturas frente a las diferentes op-
ciones expresadas en los textos.
Componentes para el area de lenguaje
Los componentes sittian al estudiante en los contextos en los que deberd aplicar sus competencias.
En el caso del area del lenguaje, los componentes se centran en los diferentes niveles del proceso
lector. Estos sor
Componente Componente 2: ___| Componente 3
Funcién seméntica de los elemen-
tos locales. Indaga por la funcion
que cumplen los elementos basicos
del texto (nombres, verbos, adjeti-
vos, preposiciones, etc.), las pala-
bras y las frases en la construccién
de sentido del texto y la forma como
|Configuracién del sentido glo- Del sentido del texto ha-
bal del texto. Establece el sentido cia otros textos. Indaga
del texto a nivel global y la inten- por la relacién que se es-_
cidn comunicativa que este posee. tablece entre lo que se dice
Pregunta por lo que esta dicho de en el texto con otros tipos |
manera explicita y por lo que esta | de textos,
sugerido en el texto.
| esta organizado. | %
Tipos de preguntas
Las preguntas pueden ser de dos clases:
Tipo I: preguntas de seleccién multiple con Unica respuesta. Las preguntas de este tipo constan de
un enunciado y de cuatro opciones de respuesta, entre las cuales se debe escoger la que considere
correcta,
Tipo IV: preguntas de seleccién multiple con multiple respuesta. Constan de un enunciado y cuatro
posibilidades de respuesta designadas con ntimeros (1, 2, 3 y 4). La combinacién de dos de estas
opciones responde correctamente a la pregunta. La seleccidn de la respuesta correcta debe hacerse
de acuerdo con el siguiente criterio:
Si 1 y 2 son correctas, Ilene el circulo A.
Si 2 y 3 son correctas, Ilene el circulo B.
Si 3 y 4 son correctas, llene el circulo C.
Si 2 y 4 son correctas, Ilene el circulo D5
8 Colegio:
3
1 Prueba ICFES. casa
RESPONDA A LAS PREGUNTAS 1 A 12 DE ACUERDO CON EL SIGUIENTE TEXTO.
El vino y la leche
La nacién francesa siente al vino como algo propio, del mismo modo que sus trescientas
sesenta especies de quesos y su cultura. Es una bebida tétem, que corresponde a la leche
de la vaca holandesa o al té absorbido ceremoniosamente por la familia real inglesa.
(...) Como todo tétem vivaz, el vino soporta wna mitologfa variada que no se perturba con
contradicciones. Por ejemplo, esta sustancia galvdnica siempre es considerada como el
més eficaz de los elementos para apagar la sed o al menos la sed sirve de primera coar-
tada para consumirlo (“hay sed”). Bajo su forma roja tiene como hipéstasis muy antigua
a la sangre, al liquido denso y vital. De hecho, su forma humoral no interesa mucho: es
ante todo una sustancia de conversion, capaz de cambiar las situaciones y los estados, y
de extraer de los objetos sut contrario, de hacer, por ejemplo, de un débil un fuerte, de un
silencioso un parlanchin; de allf proviene su vieja herencia alquimica, su poder filoséfico de
trasmutar o de crear ex nihilo.
(...) Pero la particularidad de Francia consiste en que, aqui, el poder de conversi6n del
vino jamés se considera abiertamente como un fin: otros paises beben para emborracharse
y todos lo dicen; en Francia la ebriedad es consecuencia pero nunca finalidad; se siente ala
bebida como la ostentacién de un placer y no como la causa necesaria de un efecto busca-
do: el vino no sélo es filtro, también es acto duradero de beber; el gesto tiene aqui un valor
decorativo y el poder del vino jamés est separado de sus modos de existencia (contraria-
mente al whisky, por ejemplo, que se bebe porque su borrachera es “mds agradable, de
secilelas menos penosas”, que se apura, se repite, y beberlo se reduce a un acto-causa)..
Todo esto es conocido; se dice mil veces en el folklore, en los proverbios, las conversacio-
nes y la literatura. Pero esta misma universalidad supone conformismo: i
es un acto de compulsi6n colectiva: el francés que tomara distancia del mito se expondria
a problemas no graves pero sf precisos de integracién; el primero de ellos consistiria, jus-
tamente, en tener que dar explicaciones. En esto el principio de universalidad se muestra
en plenitud, en el sentido de que la sociedad designa como enfermo, defectuoso o vicioso a
cualquiera que no crea en el vino: no lo comprende (en los dos sentidos, intelectual y espa-
cial, del término). Por contraparte, el que realiza la practica del vino obtiene un diploma de
buena integraci6n: saber beber es una técnica nacional que sirve para calificar al francés,
para probar simultdneamente su poder de actuacién, su control y su sociabilidad. De esta
| manera, el vino funda una moral colectiva en cuyo interior todo se rescata: los excesos, las
desdichas, los crimenes, son sin duda posibles con el vino, pero de ningiin modo la maldad,
la perfidia o la fealdad; el mal que puede engendrar entra en el de la fatalidad y escapa por
Jo tanto al castigo; constituye un mal de teatro, no un mal de temperamento.
Tomado de: Barthes, Roland. Mitologias.
Siglo XXI, 1999, pp. 40-41.