Você está na página 1de 20

MEDIO AMBIENTE

Con la intención de sensibilizar a la población mundial en el tema de conservación del


medio ambiente, intensificar su atención y promover políticas para la defensa del mismo,
el 5 de junio de 1973 la Organización de Naciones Unidas, declara este día como el Día
Mundial del Medio Ambiente.

Según el programa para Medio Ambiente del organismo internacional, el lema de este
año es, Alza tu voz, no el nivel del mar, haciendo referencia a los pequeños estados
insulares, como islas o países propensos a tsunamis e inundaciones.

En el tema ambiental, Guatemala es considerada como uno de los países que brinda
gran cantidad de oxígeno al mundo, por lo mismo debemos velar por la principal tarea
que es, la conservación de nuestros bosques.
La deforestación es el tema más importante en nuestro país si de conservación de medio
ambiente se trata.

Como su nombre lo indica Quauhtlemallan, lugar de muchos árboles, catalogándonos


como un país forestal, sin embargo, anualmente perdemos alrededor de 73 mil hectáreas
de bosque, haciendo más difícil la recuperación, ya que el país queda expuesto a la
erosión, la reducción de lluvias y la merma en absorción de dióxido de carbono,
ocasionando escases de agua.

Para garantizar la conservación de los bosques, es recomendable que por cada poblador
se siembre un árbol y le de los cuidados necesarios así garantizamos la vida del mismo,
indica Julia Flores, educadora ambiental del Ministerio de Ambiente y Recursos
Naturales.

Hace ver que conservar los arboles es tan importante, ya que proporcionan oxígeno y
son sumideros de dióxido de carbono y ese es su mecanismo de mitigación de emisiones
de gases de efecto invernadero que está relacionado directamente con el cambio
climático. Asimismo la tala incontrolada de árboles es la causante de tantos deslaves, ya
que existen muchas zonas deforestas y degradadas provocando que el suelo se sature
de agua, dice Flores.

El planeta está dando un claro mensaje que debemos atender, enfatiza la experta, al
referirse a la contaminación de ríos, mares, aire, la extinción de animales, plantas,
personas muriendo por contaminación ambiental, ya que cuando los fenómenos
naturales se presentan cada vez lo hacen con mayor dureza y destrucción. También
resalta que es responsabilidad de todos los habitantes de la tierra que debemos poner
nuestro granito de arena, ya que aún hay tiempo para controlar y detener el daño, nuestra
obligación es actuar ahora no esperar a llegar a un punto sin retorno en donde al final el
ser humano se extinga, asegura Flores.
La educadora ambiental recomienda que desde la casa se enseñe y aprenda a adquirir
buenos hábitos para la conservación del medio ambiente, como por ejemplo.

Cambiar los bombillos normales a bombillos ahorradores o bombillos led.

Sino estas usando la luz de ciertas habitaciones, apágalas y al momento de dormir


desconecta aparatos electrónicos sin usar.

Usa baterías recargables, las baterías normales al momento de desecharlas contaminan


hasta 600 mil litros de agua.

Ahorra y aprovecha el agua, sólo el 2.8 % del agua de nuestro planeta es dulce y tan
sólo el 0.01 % se encuentra en lagos y ríos.

Bañarse en cinco minutos.

Si tienes auto, compártelo, el planeta te lo agradecerá, si tienes bicicleta úsala tu salud


te lo retribuirá.

Aprende a reciclar y separa los desechos.

Si vas al mercado, no uses bolsas plásticas, la mayoría después de su uso paran en los
lagos, ríos y mares.

Y por último comienza desde el hogar e inspira a los demás con tu compromiso.

Los resultados que se buscan de las acciones e iniciativas


El gobierno por su parte a tomado distintas iniciativas, como por ejemplo la aprobación
en el 2013 de la Ley Marco para Regular la Reducción de la Vulnerabilidad, la Adaptación
Obligatoria ante los Efectos del Cambio Climático y la Mitigación de Gases de Efecto
Invernadero.

El objetivo de la Ley es establecer regulaciones necesarias para prevenir, planificar y


responder de manera urgente, adecuada y coordinada a los impactos de este fenómeno,
a cargo del Ministerio de Ambiente y Recursos Naturales, con esta ley se creó también
el Fondo Nacional del Cambio Climático, que cuenta con programas y proyectos de
gestión de riesgo.
Según Flores, el Ministerio de ambiente y Recursos Naturales, dio la instrucción para
que trabajan a nivel institucional y apoyar las políticas públicas, iniciativas de ley pero
sobre todo con las municipalidades para adecuar sus planes de orden y así mitigar los
efectos de cambio climático.
Otro ministerio que se ha sumado a la labor de conservación es el Ministerio de Energía
y Minas el cual diseña un plan de promoción de consumo de energía con fuentes
renovables.
Otra de las acciones a tomar en cuenta es la creación del Corredor Biológico Cultural y
de Desarrollo Sostenible Zunil-Atitlán Balam Juyú, cuyo objetivo es fortalecer los sub-
sistemas de parques regionales municipales de reservas naturales privadas, el
mantenimiento etno biológico entre comunidades y su entorno y la contribución de la
conservación.

La educación ambiental también es una de las distintas acciones que promueve el


Ministerio de Ambiente, con su delegación ya son 5 mil educadores a nivel nacional con
el apoyo de la Facultad de Latinoamericana de Ciencias Sociales.

La aprobación incluye la educación ambiental permanentemente en el sistema educativo


nacional, en los diferentes niveles, ciclos, grados y etapas del sistema escolar, así como
en sus distintas modalidades, Centros Educativos Públicos, privados y por cooperativas,
en el entorno multilingüe, multiétnico y pluricultural.
Otro sector preocupado por el medio ambiente es el empresarial. De tal manera que el
Comité Coordinador de Asociaciones Agrícolas, Comerciales, Industriales y Financieras
en el día Mundial del Medio Ambiente planteo gestiones para el desarrollo
socioeconómico de los pueblos como el uso responsable de los recursos naturales.

En el tema de desarrollo sostenible de recursos naturales, el empresariado visualiza


como se encuentra la situación de recursos hídrico, minerales, petróleos y forestal del
país, otro seria la energía renovable y la industria extractiva responsable.

En un documento donde se analiza el tema, el sector empresarial indica que el debate


por los recursos naturales se ha prejuiciado y polarizado en clave política y de
conflictividad socio-ambiental. Enfatizan que por esa causa, las inversiones en sectores
que tienen que ver con la industria energética, extractiva y forestal, para mencionar
algunas, tienen un grave estigma de origen que les ocasiona importantes dificultades
para operar en condiciones normales. Lamentan que la situación que genera conflictos
innecesarios en varios departamentos de la República y vulnera progresivamente la
imagen internacional de Guatemala.

El reto es mantener una visión integral y de sostenibilidad en sus administraciones, para


que en algunos años la industria se reconozca como un motor eficiente del desarrollo,
puntualizan.

En la cuarta edición del documento de Análisis Desarrollado por PROA, que es la unidad
estratégica de la cúpula empresarial guatemalteca, dentro de las gestiones para el mejor
uso de los recursos naturales recomiendan.

Facilitar y fortalecer una producción responsable, que incluya uso y re-utilización de los
recursos, reciclaje y almacenamiento de excedentes.

Contribuir al desarrollo social, económico e institucional de las comunidades cercanas.


Implementar una estrategia transparente y abierta de acercamiento a las comunidades,
así como arreglos basados en información veraz con actores clave.

Defender los derechos humanos y respeto a la diversidad cultural, así como los valores
y cosmovisión de los colaboradores de la empresa y otros actores afectados por la
actividad.

Implementar estrategias de manejo de riesgo basadas en información científica.

Buscar el continuo mejoramiento de las prácticas de salud y seguridad y mejoramiento


del desempeño ambiental.

Los grupos ambientalistas, también monitorean y realizan acciones en pro del medio
ambiente. Uno de ellos la Fundación para el Eco desarrollo y la Conservación, han
creado proyectos de Manejo Sostenible del Agua para contribuir a combatir la
desnutrición crónica y la pobreza extrema en estas zonas donde existen escases de este
vital líquido.

Germánico Blandón, de Fundaeco indico que estos proyectos consisten en


infraestructuras de captación de agua de lluvia, desde los techos hasta los tanques
comunales. Asimismo buscan como administrar las cuencas hidrografías, protegiendo
los bosques de zonas de recarga de acuíferos y con reforestación en las microcuencas
y así administrar bien el manejo de agua.

Fundaeco se ha dado a conocer por el apoyo a procesos de conservación en más de 20


áreas protegidas, en regiones de importancia ecológica para Guatemala, la zona del
caribe, los Cuchumatanes, Biosfera Maya, Trifinio, Costa Sur y el cinturón ecológico
metropolitano.

En conclusión la conservación del medio ambiente es una contribución que va mucho


más allá del espacio que ocupan y del tiempo que vivimos. De la conservación de la
naturaleza que hagamos hoy, de la responsabilidad colectiva y del respeto que sintamos
por el Medio Ambiente dependerá que nuestros hijos y las generaciones venideras
puedan tener un futuro sostenible, porque la naturaleza siempre nos devuelve mucho
más de lo que se le da.

En Guatemala el tema de medio ambiente es algo que para muchos es relativamente


nuevo, para otros no es un tema que valga la pena abordar, para algunos es el medio
del cual se debe aprovechar lo máximo para hacer dinero y obtener ganancias
comercializando los recursos sin importar de quien sean o a quienes perjudiquen, para
otros es el centro de un todo y se encuentran íntimamente ligados a la naturaleza y por
ende al medio ambiente y es el lugar donde viven y por lo tanto es necesario conservarlo,
protegerlo y aprovechar los recursos que la naturaleza provee evitando acabar con ellos
para que así futuras generaciones tengan de donde disponer es decir visualizan la
sostenibilidad.
Si se toma en cuenta que el ambiental encierra diferentes actores que conviven entre si
e interactúan unos con otros y agregando que existen diferentes criterios de lo que es
medio ambiente, es casi imposible afirmar que no existan conflictos entre los que
conservan el medio ambiente y los que aprovechan los recursos que provee la naturaleza
y no hacen mayor cosa, por no decir nada en relación a mitigar el daño causado al
ambiente por sus acciones.

Sí, es cierto que el ser humano necesita de los recursos naturales que provee la madre
naturaleza porque no se podría vivir por ejemplo sin leña que se utiliza como medio de
combustión para cocinar o la madera que se obtiene de los árboles y de la cual se
construyen viviendas como uso primario, ya que los usos secundarios que se le dan son
bastantes, además quien podría vivir sin el agua que es indispensable para el buen
funcionamiento del organismo humano, para las plantas y animales que cumplen un
papel importante en el ciclo de la vida, o bien quién de nosotros podría vivir sin
alimentarse de los frutos que son cultivados por la gente que se dedica a tan noble oficio.
Son tantos los ejemplos que se podrían citar sin embargo hemos citado a tres recursos
naturales en estos ejemplos y que son de suma importancia analizar su situación en
Guatemala.

Hablemos del recurso bosque y sus alarmantes cifras, según ambientalistas se pierden
101 mil hectáreas de bosque al año como consecuencia de la tala inmoderada, la
extracción ilícita de maderas preciosas, los incendios forestales, el cambio en el uso
actual de la tierra, es decir aquellas tierras que son de vocación forestal y pasan a ser
tierras cultivables aunque las características topográficas no lo permitan.

Si analizamos el crecimiento demográfico que se ha dado en el país y la necesidad de


los productos y subproductos del bosque para cubrir los requerimientos, será que se está
haciendo un uso sostenible de este recurso o se están planteando estrategias que
permitan buscar la sostenibilidad, además será que se está utilizando el recurso solo
para cubrir las necesidades básicas de vivienda o algunas personas que están
acostumbradas a cumplir sus caprichos hacen el uso irresponsable solo porque según
ellos la posición social les permite devastar los bosques y lucrar con ellos.

Aquí es donde nos preguntamos cómo se puede evitar la conflictividad entre los que
tienen a los bosques como un recurso sagrado sin ir muy lejos y un ejemplo muy claro,
las comunidades de Totonicapán que han conservado sus bosques por décadas, frente
a la depredación que se da en el municipio del Petén o el cambio en el uso de la tierra
en los bosques nubosos de San Marcos que han pasado a ser tierras productoras de
papa en donde antes era una reserva de bosque escaso en Guatemala y el mundo y
servía de hábitat para cientos de especies de fauna y flora.

Ahora analicemos rápidamente la situación del agua en el país. Guatemala es recorrida


por cientos de ríos y en sus caudales abastecen a varias comunidades que utilizan sus
aguas para riego y consumo humano. Lo contradictorio es mencionar que de toda el agua
existente en Guatemala el 97% se encuentra contaminado ya sea por desechos sólidos
o por algún cuerpo extraño que hace de esta no apta para el consumo humano. Además
algunos de los caudales de los ríos son aprovechados para generar energía eléctrica y
beneficiar a otras comunidades, excluyendo muchas veces a las comunidades que están
alrededor de los ríos y que algún beneficio deberían recibir.

Será esto justo y será que se puede vivir tranquilo y en paz cuando se sabe que se están
aprovechando los recursos de su hábitat en otros lugares y usted que es dueño de ese
recurso no recibe nada a cambio de la explotación de los recursos naturales con los
cuales ha crecido y convivido.

Además tomemos en cuenta el desvío de caudales de los ríos que hacen los dueños de
las fincas cañeras para regar sus monocultivos y que dejan con escasa o nada de agua
a las familias que viven aguas abajo, o la desleal competencia que realizan las empresas
mineras con la población en relación al uso del agua que en una hora gastan en agua lo
que una familia consume durante toda su vida.

Y como se evita la conflictividad ambiental si muchos de los ríos y nacimientos son


contaminados por fabricas e industrias que desvían sus desechos a los cuerpos de agua
condicionando así el derecho a todo ser humano de un agua libre de contaminantes
porque si no lo sabían es un derecho fundamental de todo ser humano el acceso a agua
pura y libre de contaminación.

Lastimosamente si mencionamos la situación actual del lago Amatitlán ubicado en el


municipio del mismo nombre en la zona central de Guatemala la situación no es nada
alentadora y el acceso a un agua limpia es algo casi imposible para la población que vive
alrededor de este cuerpo de agua ya que según estudios realizados recientemente a
este cuerpo de agua que un día fue la atracción de muchos ahora está a escasos 25
años de convertirse en un pantano, debido a los altos niveles de contaminación por
desechos sólidos, desechos industriales entre otros.

Será este el futuro de todos los cuerpos de agua en Guatemala o será que las
organizaciones encargadas de velar por este recurso están exagerando y todo está bajo
control y es necesario para el desarrollo de Guatemala hacer un uso indiscriminado e
irresponsable del vital líquido.

Similar situación pasa con la tierra, tercero en mencionar al inicio de este artículo. Una
particularidad que pasa en el país es que se da el cambio en el uso actual de la tierra y
no se toma en cuenta que no todas las áreas de Guatemala son aptas para los cultivos
mucho más si tomamos en cuenta que el país es considerado netamente forestal pero
en contrariedad el avance de la frontera agrícola crece a pasos alarmantes, para darle
vía a los monocultivos y a la agricultura convencional que se basa en agroquímicos y en
cocteles de productos que dañan a la salud y acaban con insectos y especies
beneficiosas para la agricultura ecológica y además dañan la salud de las personas.

Sera posible evitar la conflictividad ambiental entre los sectores del país que arrasan
con grandes extensiones de terreno para sembrar y lograr grandes ganancias y otro
sector que viven en armonía con la madre tierra y solo toman lo necesario de ella y ven
como un abuso la actuación de aquel grupo que explota este recurso tan valioso
dejándolo infértil e inservible para cultivar.
Ahora la pregunta es ¿Será necesario talar grandes extensiones de bosque para plantar
monocultivos que benefician a unos pocos y perjudican hasta destruir un ecosistema que
muy difícil podrá ser como antes?

Por último, la explotación minera de metales en Guatemala y la conflictividad ambiental


que produce entre sus habitantes es muy importante analizarlo para determinar el
comportamiento de las comunidades beneficiadas y afectadas y ya que analizamos
rápidamente el contexto de los demás recursos naturales abordemos este tema.

La minería en Guatemala ha venido a ser la propuesta del gobierno actual y de otros que
ya cumplieron su tiempo de gobernar para implementar el desarrollo en las comunidades
y generar ganancias para las transnacionales a cambio de regalías que dan a las
comunidades a las que pertenece el territorio a costa de la destrucción de montañas,
bosques, la contaminación de los ríos entre otros problemas que genera esta actividad.
Es interesante ver como se complica este tema en sectores donde se ubican la
extracción de metales y por lo tanto las plantas procesadoras.

En un contexto donde las comunidades de los pueblos indígenas muchas veces se


encuentran confundida las empresas utilizan estrategias para ganarse la confianza y el
aval de las personas, entre las que están.

El empleo de mano de obra calificada y no calificada, los proyectos productivos, la


compra de líderes comunitarios para que ellos puedan dominar y manejar a su antojo a
la población, los obsequios y las regalías que año con año dan a las corporaciones
municipales y en las que muchas veces no existe transparencia para saber que se hizo
con esos millones de quetzales recibidos.

Hasta aquí el desarrollo parece llegar a las comunidades ya que muchas familias son
beneficiadas, además la infraestructura que llega como por arte de magia y es extraño
porque antes en una comunidad que estaba olvidada de pronto inician a construir una
carretera y no es que nos opongamos a esto, sino que nos preguntamos porque hasta
ahora y quienes son los beneficiarios reales de estos proyectos.

Ahora surge una pregunta ¿qué pasa con las personas que están en desacuerdo con
esta propuesta de desarrollo que el gobierno pretende implantar? Será que ellos son
tomados en cuenta y sus propuestas son escuchadas y es que al informarse estas
personas se dan cuenta de las consecuencias de la minería y como ya comentamos las
comunidades de los Pueblos Indígenas están íntimamente ligadas a la naturaleza por lo
tanto la minería no es el desarrollo que ellos desean porque atenta contra el buen vivir y
la herencia que le dejarán a sus hijos. Esta es la cara oscura del desarrollo ya que
muchas de estas personas sufren persecuciones, no les dan trabajo por oponerse al
desarrollo prometido, es decir quedan excluidos de un mínimo beneficio que pudieran
recibir por parte de la transnacional que ha llegado a imponerse a un territorio del cual
es totalmente ajena.

Esta acá el verdadero conflicto entre una comunidad que antes vivían en paz y se
dedicaban a sus actividades diarias que aunque no les traían grandes ganancias
tampoco los ponían en contra unos de otros. Entonces ¿a favor de quien se mueven los
megaproyectos y a que intereses responde el gobierno cuando los trata de implantar?
Será que es necesario este tipo de desarrollo o sería mejor escuchar las prioridades de
desarrollo de la sociedad en general.

Lo cierto es que mientras estos proyectos implantados estén, no se podrá evitar la


conflictividad ambiental, social, económica, cultural que hasta ahora existe y es una clara
evidencia de que no existe un verdadero proyecto de gobierno que incluya a todos los
sectores del país sino que solo a algunos, siguiendo con las mismas violaciones a los
derechos humanos, derecho a un ambiente sano y derecho a agua libre de
contaminantes.

Para terminar dejo esta inquietud y es que me surge la duda de cómo sería si la
legislación ambiental de Guatemala es decir la ley de áreas protegidas, la ley forestal y
su reglamento, y los convenios internacionales que Guatemala ha firmado a favor de la
protección del medio ambiente si cumplieran y se hicieran respetar en el país, y si la ley
de minería actual respetara el derecho de consulta de los pueblos indígenas y se
privilegiara el bienestar social sobre el particular, seria esto suficiente para mitigar la
conflictividad social en Guatemala o sería necesario muchas cosas más.

Sequía, Canícula y Cambio Climático en Guatemala


La sequía es un tiempo seco de larga duración en el que el agua disponible de una
determinada región se ubica por debajo de los parámetros habituales, por lo tanto, no
resulta suficiente para satisfacer las
necesidades de los seres humanos, los
animales y las plantas. En Guatemala la
sequía ha afectado principalmente a la zona
semiárida del país, conocida como Corredor
Seco, pero se cree que esta región se
extenderá hacia el altiplano en los próximos
años. Esto basado en los escenarios de
cambio climático que el IPPC proyecta.
Según el INSIVUMEH, se han producido
canículas prolongadas en años de sequía y
en ocasiones en años catalogados como años Niño o condiciones neutras. Entre estos
años se puede mencionar la sequías de 1998, 2009 y 2014.

La canícula, o veranillo, es un fenómeno meteorológico-climático que se caracteriza por


la escasez o ausencia de agua durante la época lluviosa de Guatemala, según
INSIVUMEH. La canícula significa reducción en lluvias dentro de la época de lluvias,
comúnmente entre 10 a 20 días en los cuales la lluvia es reducida significativamente o
incluso sin lluvias. Durante esta época los vientos secos impiden el paso de la humedad
y por ello aparece un calor seco más perceptible. En los últimos años estos períodos
cálidos y sin lluvia han sido más prolongados. Esta nueva tendencia se le atribuye al
cambio climático.

En Guatemala se presenta la sequía generalmente cuando la temperatura del océano


pacifico está más cálida de lo normal, un fenómeno conocido como El Niño. Cuando hay
condiciones océano-atmosféricas que favorecen a El Niño, se puede presentar sequía y
a su vez una canícula extendida. Esto ocurre por el resultado de variabilidad en las
condiciones climáticas mundiales que alteran el ciclo hidrológico del país y suben las
temperaturas oceánicas. Se cree que el calentamiento global y cambio climático provoca
eventos meteorológicos más intensos y recurrentes en Guatemala y en el mundo.

En 2014 Guatemala fue afectada por una sequía que provocó una canícula prolongada,
con ausencia de lluvia de hasta 45 días según comentarios de pobladores.

Según las autoridades gubernamentales se perdieron más del 70% de los cultivos de
granos básicos del país, principalmente de pequeños productores, afectando
directamente a más de un millón de personas y subiendo los precios de los alimentos,
sobre todo en el Corredor Seco, donde el cambio climático ya había causado una pérdida
masiva también en la otra fuente principal de ingresos, la cosecha de café, por medio de
la roya.

Todo esto agudizó la desnutrición en niños y niñas menores de cinco años y mujeres en
edad reproductiva, aumentando el riesgo de conflictividad social y familiar e
incrementando flujos de migración interna y al exterior.

Esta sequía fue provocada por un leve calentamiento en la temperatura del océano
pacifico. Este calentamiento de aproximadamente 0.6 grados arriba de lo normal se
mantuvo en varios meses del año 2014. Este período de calentamiento prologando causó
la sequía en Guatemala pero hay que aclarar que nunca fue considerado como un
fenómeno del Niño, porque las diferencias de temperatura no sobrepasaron los límites
establecidos por la Organización Meteorológica Mundial.

En el futuro es de esperarse que, debido al cambio climático, las sequías y las canículas
en Guatemala aumenten en intensidad, severidad, extensión y duración,
incrementándose la frecuencia de su ocurrencia, así como la vulnerabilidad y el impacto
en la población. Guatemala no puede comparar su contribución al cambio climático con
las de los países desarrollados, pero debido a su alta vulnerabilidad y poco desarrollo
ambiental está sufriendo las repercusiones de esta problemática. Anudado a eso las
erupciones volcánicas, la quema de combustibles fósiles, la deforestación y la actividad
industrial local del país, no solo contaminan nuestro entorno sino que aceleran los efectos
de degradación ambiental que tendrá nuestro país debido al cambio climático.

Cambio Climático en Guatemala


El cambio climático es definitivamente uno de los retos más grandes que actualmente
enfrenta la humanidad, tanto en la búsqueda de acuerdos que limiten la generación de
los gases contaminantes que causan este problema, así como en cuanto a implementar
medidas que nos ayuden a adaptarnos a los cambios que está causando esta alteración
del clima.

El cambio climático está afectando y llegará a afectar a todos los sectores importantes
de la vida nacional, desde la producción de alimentos, la salud pública, la infraestructura
y la misma seguridad pública.

A pesar de que ha habido mucha controversia en cuanto a la veracidad de este problema


global, el año pasado mucha de esa controversia fue reducida con la publicación del
Quinto Informe sobre Cambio Climático que presentó el Panel Intergubernamental de
Cambio Climático.

Esta organización creada por Naciones


Unidas contó con un equipo de más de 800
científicos seleccionados alrededor del
mundo, para escribir este informe sobre el
estado del problema climático con el fin de
informar a los países que se reúnen
anualmente a negociar sobre las medidas a
tomar para resolver este problema. Este año,
dicha negociación ocurrirá en diciembre en
Paris, y se tienen muchas expectativas de
que todos los países incluyendo Guatemala
lleguen con propuestas concretas sobre los niveles de reducción de emisiones a los que
se comprometerán.

El Quinto Informe del IPCC presentó tres conclusiones contundentes. Primero,


prácticamente no hay duda de que el planeta se está calentando. Esto se evidencia no
solo por el aumento de las temperaturas alrededor del planeta, sino también por el
derretimiento de los cascos de hielo en lugares como el Polo Norte y Groenlandia y
también en los glaciares de los Andes y los Alpes. Adicionalmente, se ha observado un
aumento en el nivel de los océanos.

Segundo, este calentamiento se debe principalmente a las actividades humanas que


emiten los gases de efecto invernadero que aumentan la captura de calor en la
atmósfera. Aunque sabemos que históricamente el planeta se ha calentado en múltiples
ocasiones en el pasado, nunca el aumento de temperatura ha sido tan rápido, lo cual
puede explicarse únicamente si se consideran influencias que se originan en actividades
humanas tales como quema de petróleo y carbón mineral, agricultura y deforestación
entre otras.

Y tercero, aunque se logre un acuerdo mundial para detener la generación de los gases
contaminantes, el efecto de calentamiento mantendrá su influencia en el clima global al
menos durante un siglo más. Esto implica que estamos forzados a adaptarnos a vivir con
un clima más cambiante.

¿Qué efectos concretos podemos esperar para Guatemala? Investigaciones que hemos
hecho en la Universidad del Valle de Guatemala preguntando a agricultores qué cosas
han notado con el clima, muestran que ya es evidente un aumento de la variación del
clima del país. Por su posición geográfica, Guatemala siempre ha tenido un clima muy
variable, pero esa variabilidad ha aumentado mucho más en las últimas décadas. Por
ejemplo, los agricultores reportan que es más difícil ahora predecir el inicio y el fin de la
época lluviosa. Esto por supuesto les complica mucho determinar cuándo hacer la
siembra. Las famosas aguas de mayo no han llegado en los últimos años ya que la época
lluviosa ahora está establecida hasta junio.

Por cierto, los también famosos zompopos de mayo cada vez se están convirtiendo más
en zompopos de junio. Esto por supuesto ha aumentado considerablemente el problema
de inseguridad alimentaria y hambrunas especialmente en el llamado corredor seco del
país.

Vemos entonces que el cambio climático, a


pesar de ser un problema que se desarrollará a
largo plazo durante el resto del presente siglo,
es un problema que ya está teniendo efectos
fuertes que se agregan a los problemas ya
existentes en el país como pobreza, hambruna y
salud pública deficiente, entre otros.

Y es esta pobreza, entre otras cosas, la que


hace que el país sea altamente vulnerable a los embates de un clima más extremo. La
tasa de pobreza en Guatemala sigue a más de 50% y la de desnutrición infantil entre
niños menores de cinco años es más de 40%.

El cambio climático se manifestará en nuestro país esencialmente como un problema de


manejo de agua. Así como hemos tenido deficiencia de lluvias en los últimos dos años,
en la década pasada las variaciones de clima se expresaron como un aumento en los
eventos extremos de lluvia, no solo tormentas tropicales y huracanes, sino eventos de
lluvias torrenciales que resultaron en inundaciones y deslaves con un saldo de muertos
y damnificados muy considerable.

Necesitamos entonces prepararnos para afrontar períodos intercalados de deficiencia de


lluvia, a través de un aumento en nuestra capacidad de almacenamiento y movilización
de agua, con períodos de exceso de lluvia donde tendremos que tener una mejor
infraestructura para reducir los impactos de las inundaciones y la probabilidad de
deslaves mortíferos.

La alternancia de períodos secos con períodos de exceso de lluvia continuará en las


siguientes décadas, pero los modelos climáticos que se han desarrollado a nivel mundial
y regional, muestran que a largo plazo, la región centroamericana experimentará una
disminución gradual de la cantidad de lluvia. Uno de estos análisis muestra una
disminución de un 13% en la lluvia del país para el año 2050 y del 27% para el 2100.

Aunque estos porcentajes podrían no parecer muy altos a primera vista, si pueden
resultar en un aumento considerable del estrés hídrico que el país ya evidencia en varias
regiones, particularmente las regiones orientales del país y las áreas al sur de los
departamentos de Huehuetenango, Quiché y las Verapaces. Mucha de la falta de agua
ya observada en estas y otras regiones del país proviene del mal manejo que hacemos
de este recurso vital, especialmente en cuanto a la contaminación de aguas superficiales
al descartar nuestras aguas servidas sin ningún tratamiento previo. Más de 90% de las
fuentes de agua y más de 98% de los afluentes del país en Guatemala tienen
contaminación bacteriológica.

Por tanto, el cambio climático pondrá una presión adicional para que Guatemala
desarrolle una legislación adecuada para que podamos manejar y conservar mejor
nuestro recurso hídrico.

El cambio climático también traerá temperaturas más altas lo que aumentará la


probabilidad de tener regiones áridas y con menor productividad agrícola. Los modelos
climáticos muestran un aumento de temperatura entre los 2 y los 4 grados centígrados
en el transcurso del presente siglo. El nivel real de aumento de temperatura que se
observará dependerá de los niveles de emisión de gases contaminantes que se tengan
en todo el mundo.

Es por ello que la cumbre en diciembre en Paris es de suma importancia para el futuro
de nuestra nación. Un acuerdo vinculante entre todos los países del mundo para reducir
emisiones, especialmente los que más contaminan que en la actualidad incluyen a China,
Estados Unidos, la Unión Europea y la India, permitirá mantener el aumento de
temperatura en un rango debajo de dos grados centígrados o menos. Guatemala también
debe hacer su propuesta de reducción de emisiones y la misma debería desarrollarse en
un proceso participativo liderado por el Ministerio de Ambiente y Recursos Naturales.

Pero más allá de prestar atención a estas negociaciones, los guatemaltecos debemos
empezar a trabajar conjuntamente para construir nuestros planes nacionales y locales
de adaptación al cambio climático que estaremos enfrentando en el resto del presente
siglo. La tarea y la responsabilidad son de todos, tanto gobierno como sociedad civil.

El fututo ambiental de Guatemala


fue el resultado de más de cuatro años de labor bajo el liderazgo de ministros, científicos,
expertos ambientalistas, economistas, líderes de la sociedad civil y un sinnúmero más
de actores, quienes determinaron un borrador del modelo ambiental que deben seguir
los países desarrollados y los que están en vías de desarrollo.
A partir del lunes 7 de diciembre, los mismos ministros y líderes participantes en la
elaboración del borrador se reunirán, en una intensa y larga semana, para intentar
convertir el borrador en un acuerdo que sirva para frenar las emisiones antropogénicas
que atrapan el calor del sol en la superficie del planeta y han contribuido a un aumento
del calentamiento global.
Entre los países más afectados por el calentamiento global se encuentran las naciones
insulares, los países con centros urbanos ubicados en las áreas costeras, los países con
la mayoría de su población viviendo en extrema pobreza, las naciones con sistemas
industriales basados en energías fósiles y los territorios del planeta en los que habrá
mayores fluctuaciones de las condiciones climáticas.
La advertencia es que el planeta se volverá cada vez más hostil para la humanidad en
esas regiones, por lo que muchas de las acciones del borrador de la COP21 van
enfocadas a fortalecer la adaptación de esos países a los cambios por venir. Es inevitable
que el nivel del mar aumente e inunde grandes territorios e incluso países enteros en
nuestros océanos. Además, países como Guatemala se verán afectados no solo por el
aumento de la cantidad de huracanes, sino también por sequías severas que afectarán
la seguridad alimentaria de millones de guatemaltecos.
La reducción de emisiones requerirá de un cambio en la matriz energética mundial, lo
que debe llevarnos a utilizar métodos distintos a la quema de carbón, petróleo y gas para
la generación de energía. Guatemala es un país que en los últimos años ha diversificado
su matriz energética y que actualmente produce más de la mitad de su energía mediante
energías renovables. Sin embargo, la caída de los precios internacionales de los
combustibles fósiles podría retrasar este proceso, y dependerá de nuestro liderazgo en
el Gobierno velar por que la mitigación del cambio climático en el país sea efectiva.
Sin duda, el futuro gobierno de Guatemala y sus ministros de Ambiente y de Energía y
Minas tendrán un resbaladizo trabajo evitando caer ante los sobornos y la presión de
los lobbies de distintos sectores industriales y mineros, así como de los intereses del
carbón y del petróleo, entre otros, que podrían surgir ante los acuerdos que emanen de
la COP21.
Desde ya sabemos que esta semana se pactará un acuerdo que será revisado al menos
cada cinco años, cuando se evaluarán los compromisos adquiridos por todas las
naciones, y le tocará al gobierno de Jimmy Morales vigilar el cumplimiento de lo
acordado.
Los países del Sur global han pedido financiación para pagar la costosa mitigación y
adaptación al cambio climático mediante tecnologías renovables. Millones de dólares
fluirán a través de organizaciones gubernamentales y no gubernamentales de los países
del Norte global hacia el Sur. Sobre la sociedad civil y las comunidades en las que se
invertirán estos recursos recaerá la difícil responsabilidad de fiscalización de miles de
millones de dólares que empezarán a fluir hacia nuestros países a partir del año 2020.
Mientras tanto, en los próximos cuatro años tendremos la responsabilidad de identificar,
en colaboración, mediante un nuevo pacto ambiental inclusivo, las áreas y regiones de
Guatemala que requieren la mayor atención para mitigar los cambios climáticos por venir
y adaptarnos a ellos.
El próximo viernes 11 de diciembre finalizará la COP21, y nuestros negociadores
regresarán a casa con nuevas noticias y retos sobre los compromisos, las obligaciones
y las responsabilidades compartidas que se pactaron. Mientras tanto, a nosotros, como
líderes de nuestros grupos de interés, nos toca empezar a identificar proyectos de
mitigación y adaptación ante el cambio climático antropogénico. Finalizo
compartiéndoles una lista de los temas que considero que requerirán de nuestra iniciativa
y creatividad para proponer proyectos de mitigación y adaptación ante el cambio
climático.

Los bosques del país continúan desapareciendo y son reemplazados por cultivos.

La escasez del agua aumentará debido a la deforestación y a la extracción no sostenible


del agua para actividades industriales, lo cual aumenta la vulnerabilidad de las cuencas
del país.

La contaminación del recurso hídrico ha aumentado, y no tenemos una política de


manejo de aguas o una ley que regule el uso del agua.

Actualmente, la gran mayoría de los desechos sólidos se depositan a cielo abierto en


basureros ilegales.

Las áreas protegidas y las reservas naturales están siendo destruidas por actividades
económicas ilegales.

Las actividades de extracción de recursos del subsuelo continuarán bajo un sistema de


permisos ambientales que no cumplen con requisitos internacionales de protección de
los intereses, la salud y la propiedad de todos los guatemaltecos.

Los cambios en la cantidad de lluvia que afectará a algunas regiones del país y la sequía
en otras regiones aumentarán la fragilidad de la seguridad alimentaria de los habitantes
más pobres del país según la CEPAL, 70 % de la población guatemalteca se encuentra
en una situación de pobreza multidimensional.

El crecimiento de la población y el avance de las urbanizaciones de manera desordenada


son algunos de los principales riesgos para el ambiente, y Guatemala es el país de
América Latina con las proyecciones de tasa de natalidad más altas. Para el año 2050
habremos duplicado nuestra población actual, según datos del Banco Mundial.

Carecemos de la capacidad técnica, tecnológica y económica para enfrentar los


desastres naturales, tal y como la reciente catástrofe de El Cambray II, en la ciudad de
Guatemala, lo demostró. La amenaza que representarán mayores desastres climáticos
tiene actualmente a millones de guatemaltecos viviendo en zonas de alto peligro, y no
existe ninguna propuesta gubernamental para cambiar esta situación.

Mejorar la calidad de vida de la población en el contexto del cambio climático por medio
del ejercicio de sus competencias ambientales, además de incentivar cambios de
actitudes y de comportamientos de los guatemaltecos ante el cambio climático.

El 95% del agua se desperdicia en Guatemala debido a la


contaminación ambiental
El río Las Vacas, en la capital, está libre de metales pesados, pero contiene materia fecal
y contaminación bacteriológica.
La mala calidad del agua impacta en la vida de miles de personas que dependen de lo
que producen los ríos, los cuales son afectados por la acumulación de basura, que hace
que el vital líquido no sea apto ni para la recreación y mucho menos para el riego de
cultivos o el consumo humano.
La mala calidad del agua impacta en la vida de miles de personas que dependen de lo
que producen los ríos, los cuales son afectados por la acumulación de basura, que hace
que el vital líquido no sea apto ni para la recreación y mucho menos para el riego de
cultivos o el consumo humano.

El 80% de niños del área rural está desnutrido


De acuerdo con expertos, los efectos de la contaminación de los afluentes se refleja en
los altos índices de desnutrición y diarrea, principalmente en niños. El Ministerio de Salud
registra que 143 niños murieron en el 2016 por este mal.

El problema se intensifica en sectores donde no llueve mucho, por ejemplo, en


municipios de los 11 departamentos que forman el Corredor Seco, pues en esos
lugares, pese a que corren algunos ríos, los pobladores no pueden aprovechar el agua
debido a la contaminación, empeorando así la seguridad alimentaria de las familias.
Sídney Samuel, ministro de Ambiente, comentó que el 95 por ciento de los ríos del país
están contaminados y que sus aguas se desaprovechan.

Metales pesados
La situación de miles de personas que dependen de las aguas de los ríos Las Vacas y
Villalobos, en el área metropolitana, es desalentadora, pues ambos afluentes están
contaminados. El último, por ejemplo, con metales pesados, causantes de varios tipos
de cáncer y dolencias hepáticas.
Rolando Alfaro Arellano

La contaminación del medio que nos rodea puede presentarse de diversas formas y que
van, no sólo al deterioro del ambiente, sino aún más, el de la conducta, rendimiento
intelectual y ético, entre otros males. Ello, se traduce con hechos deplorables que se
presentan cada día así, aire contaminado por humo negro de diversos vehículos,
deforestación, paisajes alterados, ruidos estridentes de diversas fuentes, incendios,
violencia, irrespeto a la naturaleza incluyéndose sus ecosistemas, y un largo etcétera.
Los primeros síntomas del deterioro especialmente urbano, fueron detectados en el año
de 1978, y siguientes con investigaciones de campo que se efectuaron en la ciudad de
Guatemala y que arrojaron cifras alarmantes de contaminación por ruido Rolando Alfaro,
Ruido contaminante ambiental no legislado en Guatemala. Editorial de León Palacios.
Luego, en los años ochenta una firma Suiza, efectuó mediciones del aire en la ciudad de
Guatemala, con resultados negativos para la salud de los habitantes del territorio
nacional. Tampoco existe un programa educativo al respecto y falta legislación que
regule este contaminante.

En ese sentido, la reacción de las autoridades y población en general es casi nula, quizás
por falta de conciencia ambiental y en esos años se carecía de una legislación específica
ambiental que regulara los fenómenos ya descritos. Lamentablemente, se continúa sin
el respaldo normativo necesario para enfrentar a la contaminación, se reitera este vacío
legal porque tampoco existen políticas ambientales que eduquen a la población y
autoridades.

La alarma, en algunos sectores, quizás por tantas noticias a la fecha ha sido. El cambio
Climático, que, por cierto, carece de legislación propia en nuestro entorno humano y lo
más grave, que a pesar de haberse suscrito el TLC con los países del norte de América
y de la región centroamericana, no han motivado a los entes encargados de velar por la
modernización de la legislación ambiental de la República de Guatemala para ponerla al
nivel de la ya existente en otras Naciones de América Latina. Esta indiferencia le
representará al país, en su momento, graves problemas.
No está demás reiterar que el Derecho Ambiental empezó a difundirse en los años
sesentas, y en Latinoamérica en 1970.
Por otro lado, se han efectuado infinidad de seminarios, mesas redondas y otros eventos
en el medio, pero sin resultado positivo alguno e incluso en el año de 1996, se efectuó
el XIX Congreso Jurídico Guatemalteco, dedicado exclusivamente al Derecho Ambiental,
pero con el poco interés de algunos profesionales que quizás por falta de
actualización, no han querido estudiar la evolución de esta nueva rama del Derecho.
El término contaminación, significa introducción de elementos extraños a un ambiente
dado, éstos pueden ser los de gases, polvo en suspensión, basuras, lagos
envenenados, trepidaciones y vibraciones, etc.
Para muchos especialistas, la contaminación significa la muerte lenta, quiérase o no
aceptar.

Pero, la falta de conocimiento de muchos habitantes de nuestras ciudades, les hace creer
que tales contaminantes son normales y esa circunstancia es la que tiene a todos los
guatemaltecos con la camisa levantada, pues la violencia, principalmente, es producto
de un medio totalmente contaminado como ya lo es la República de Guatemala.
Por último, los resultados están a la vista en pleno siglo veintiuno, violencia imparable,
deterioro de diversas fuentes, jóvenes con problemas psicológicos y de conducta
irregular, y, una falta absoluta de conciencia social y ambiental.
Las presentes y futuras generaciones de guatemaltecos, esperan trabajo efectivo de las
entidades, obligadas a mejorar nuestro entorno humano, a efecto de poder resolver la
situación que atraviesa el país en este tema, de lo contrario los problemas ambientales
continuarán con o sin conocimiento de los habitantes del territorio nacional.

El medio ambiente
Es un sistema formado por elementos naturales y artificiales que están interrelacionados
y que son modificados por la acción humana. Se trata del entorno que condiciona la
forma de vida de la sociedad y que incluye valores naturales, sociales y culturales que
existen en un lugar y momento determinado.

Los seres vivos, el suelo, el agua, el aire, los objetos físicos fabricados por el hombre y
los elementos simbólicos componen el medio ambiente. La conservación de éste es
imprescindible para la vida sostenible de las generaciones actuales y de las venideras.

Podría decirse que el medio ambiente incluye factores físicos como el clima y la geología,
biológicos, la población humana, la flora, la fauna, el agua y socioeconómicos la actividad
laboral, la urbanización, los conflictos sociales.
Se conoce como ecosistema al conjunto formado por todos los factores bióticos de un
área y los factores abióticos del medio ambiente, en otras palabras, es una comunidad
de seres vivos con los procesos vitales interrelacionados.
La ecología es otra noción vinculada al medio ambiente, ya que se trata de la disciplina
que estudia la relación entre los seres vivos y su entorno, cuya subsistencia puede
garantizarse a través de un comportamiento ecológico, que respete y proteja los recursos
naturales.
Lamentablemente, el ser humano hace lo posible por atentar contra su propia especie y
contra las demás, a través de diversas acciones que afectan a cada uno de los elementos
que componen el medio ambiente. Comenzando por el suelo y el agua, los residuos
inorgánicos arrojados en la naturaleza constituyen una auténtica bomba de tiempo, a
menos que alguien los recoja, llegará el día en que se interpongan entre los animales y
el suelo.
Intentar comprender la mente de alguien
que desecha una botella de vidrio o una lata
en un parque o en un lago es una tarea muy
difícil.
¿Qué piensa esa persona que ocurrirá con
la basura que tan irresponsablemente está
tirando?
¿No considera, acaso, que puede causar
un daño físico a otro ser vivo o, incluso, a sí
misma?
Si su nivel de espejismo nubla su
consideración por los animales y las plantas,
¿no teme siquiera que un niño se lastime con los trozos de vidrio o con el metal oxidado?
Dado el número de gente que incurre en actos de este tipo, parece que no.
El aire que respiramos es otro de los elementos del medio ambiente que alteramos
considerablemente a causa de nuestra irresponsabilidad y por negarnos a usar nuestro
cuerpo tal y como hacen el resto de los animales.
Si los automóviles existieran para asistir a individuos con discapacidades físicas o
simplemente para realizar viajes de larga distancia, quizás sería más aceptable
considerarlos indispensables. Sin embargo, un gran número de personas dependen de
sus coches para desplazarse por la ciudad, sin importar la distancia a recorrer, y esto
potencia el volumen de contaminación que generamos a diario.
Si a esto le sumamos que en países subdesarrollados los vehículos en circulación suelen
tener más de dos décadas de antigüedad y no son sometidos a todos los controles
necesarios para certificar su buen funcionamiento, llegamos a un nivel muy preocupante
de polución, que parece no tener fin.
Por otro lado, desde hace ya unos años, en algunas ciudades existen planes que
promueven la realización de ejercicio físico a través, por ejemplo, de la concesión de
bicicletas sin ningún coste.
Por último, los edificios, los monumentos, los bancos de las plazas, los puentes y todo
aquello que el ser humano construye, y que también forma parte de su medio ambiente,
sufren de la acumulación de residuos, de la contaminación del aire y de la destrucción
deliberada por parte de los propios ciudadanos.
1. https://republica.gt/2014/06/06/conservacion-del-medio-ambiente-_88a8a3/

2. https://definicion.de/medio-ambiente/

3. https://republica.gt/2014/06/06/conservacion-del-medio-ambiente-_88a8a3/

4. http://copaeguatemala.org/articulosCOPAE/Conflictividad%20ambiental%20en%2
0Guatemala.html

5. https://lahora.gt/hemeroteca-lh/causas-y-efectos-de-la-contaminacion-ambiental-
en-guatemala/

6. https://www.prensalibre.com/ciudades/el-95-del-agua-se-desperdicia-en-
guatemala-debido-a-contaminacion-ambiental/

7. https://www.plazapublica.com.gt/content/el-futuro-ambiental-de-guatemala

8. http://copaeguatemala.org/articulosCOPAE/Conflictividad%20ambiental%20en%2
0Guatemala.html

9. http://www.entremundos.org/revista/medio-ambiente/cambio-climatico/cambio-
climatico-en-guatemala/

10. http://www.entremundos.org/revista/medio-ambiente/sequia-canicula-y-cambio-
climatico-en-guatemala/

11. http://www.entremundos.org/revista/medio-ambiente/sequia-canicula-y-cambio-
climatico-en-guatemala/

Você também pode gostar