Você está na página 1de 7

ANÁLISIS E INTERPRETACIÓN DEL TÍTULO PRELIMINAR

DEL CÓDIGO PROCESAL CIVIL PERUANO

Artículo I.- Derecho a la tutela jurisdiccional efectiva

“Toda persona tiene derecho a la tutela jurisdiccional efectiva para el ejercicio o


defensa de sus derechos o intereses, con sujeción a un debido proceso”.

ANÁLISIS:

Artículo II.- Principios de Dirección e Impulso del proceso

“La dirección del proceso está a cargo del Juez, quien la ejerce de acuerdo
a lo dispuesto en este Código.

El Juez debe impulsar el proceso por sí mismo, siendo responsable de


cualquier demora ocasionada por su negligencia. Están exceptuados del
impulso de oficio los casos expresamente señalados en este Código”.

ANÁLISIS: También se le denomina principio de autoridad, el cual afirma que el


juez no puede mantener la actitud pasiva que tuvo en el proceso de otros
tiempos, sino que debe estar provisto de autoridad, el juez se convierte en
director de proceso, provisto de una serie de facultades; por ello que este
principio consiste en otorgar al juez la capacidad necesaria para conducir
autónomamente el proceso sin necesidad de intervención de las partes para la
consecución de sus fines.

El principio de impulso procesal por parte del Juez es una manifestación concreta
del principio de dirección, “podemos considerar que la dirección del proceso es
un deber, no de carácter funcional sino de carácter procesal”1 el deber de
mantener la igualdad entre las partes, el de prevenir y sancionar todo acto
contrario al deber de veracidad, probidad, lealtad y buena fe, etc. Tal actividad
es necesaria para el desarrollo normal del proceso, haciéndolo avanzar a fin de
que pueda cumplir su propia finalidad dentro del orden jurídico. El impulso
procesal tanto puede corresponder a las partes que peticionan ante el juez, como
al juez que, por su propia iniciativa, adopte medidas encaminadas a evitar la
paralización del proceso.

Artículo III.- Fines del proceso e integración de la norma procesal

“El Juez deberá atender a que la finalidad concreta del `proceso es resolver
un conflicto de intereses o eliminar una incertidumbre, ambas con

1 TICONA POSTIGO, Víctor. Análisis y comentarios al Código Procesal Civil. Lima - Perú:
Editorial San Marcos, 1996.
relevancia jurídica, haciendo efectivos los derechos sustanciales, y que su
finalidad abstracta es lograr la paz social en justicia.

En caso de vacío o defecto en las disposiciones de este Código, se deberá


recurrir a los principios generales del derecho procesal y a la doctrina y
jurisprudencia correspondientes, en atención a las circunstancias del
caso”.

ANÁLISIS: Este principio previsto en el Código lo que regula es que el Juez no


sea un espectador de las motivaciones periódicas de las partes; ya no va a estar
a merced de su ánimo o disposición, sino que podrá en el proceso, durante todo
su recorrido, intervenir en su desarrollo, conducirlo al fin, a los fines del derecho:
el fin concreto (resolver un conflicto de intereses o eliminar una incertidumbre
con relevancia jurídica) y el fin abstracto (lograr la paz social en justicia).
“La idea de proceso, es necesariamente teleológica, pues solo se explica por su
fin. El proceso por el proceso no existe”.2

Además, este principio ha optado por conceder al Juez la posibilidad de cubrir


los vacíos o defectos en la norma procesal, es decir, las lagunas, en base a
ciertos recursos metodológicos y a un orden establecido de éstos, consistente
en recurrir inicialmente a los principios generales del derecho procesal y, luego,
a la doctrina y a la jurisprudencia, respectivamente.

Artículo IV.- Principios de Iniciativa de parte y de Conducta procesal

“El proceso se promueve sólo a iniciativa de parte, la que invocará interés


y legitimidad para obrar. No requieren invocarlos el Ministerio Público, el
procurador oficioso ni quien defiende intereses difusos.

Las partes, sus representantes, sus Abogados y, en general, todos los


partícipes en el proceso, adecuan su conducta a los deberes de veracidad,
probidad, lealtad y buena fe.

El Juez tiene el deber de impedir y sancionar cualquier conducta ilícita o


dilatoria”.

ANÁLISIS: En nuestro ordenamiento procesal, el proceso civil no puede ser


iniciado en ningún caso de oficio por parte del juez, necesariamente requiere
iniciarse a instancia de parte, siguiendo en este sentido el principio dispositivo,
pues no hay juez sin demandante. Entendiendo por ende que una persona
diferente al juez debe ser quien ejercite el derecho de acción, interponiendo la
demanda para que el respectivo proceso inicie; dicha parte puede estar
constituida por una o varias personas, naturales o jurídicas.

2 HERNANDEZ LOZANO, Carlos y VASQUEZ CAMPOS, José. Código Procesal Civil. Lima -
Perú: Ediciones Jurídicas, 1995.
Mientras que el interés y la legitimidad para obrar, conforman lo que en doctrina
se conoce con el nombre de condiciones de la acción, que son presupuestos
necesarios para que el juez pueda expedir un pronunciamiento válido sobre el
fondo.

Además, es un deber judicial la conducta de los partícipes del proceso o también


denominado moralidad procesal: “La lealtad (es el cumplimiento de lo que exigen
las leyes de la fidelidad y las del honor), la probidad (es la honradez e integridad
en el obrar, la rectitud de ánimo), la buena fe (es la honradez, rectitud, el buen
proceder, una conducta sin intención de dañar dolosamente) y la veracidad (que
es la actuación y expresión con arreglo a la verdad de los hechos y las cosas”.3
Todos estos presupuestos se refieren a la moralidad de las conductas humanas
dentro del proceso, de existir alguna conducta ilícita que infrinja el deber de la
moralidad procesal, deberá responder en un proceso aparte por los daños y
perjuicios que le haya irrogado si la acción fue irregular o arbitraria.

Artículo V.- Principios de Inmediación, Concentración, Economía y


Celeridad Procesales

“Las audiencias y la actuación de medios probatorios se realizan ante el


Juez, siendo indelegables bajo sanción de nulidad. Se exceptúan las
actuaciones procesales por comisión.

El proceso se realiza procurando que su desarrollo ocurra en el menor


número de actos procesales.

El Juez dirige el proceso tendiendo a una reducción de los actos


procesales, sin afectar el carácter imperativo de las actuaciones que lo
requieran.

La actividad procesal se realiza diligentemente y dentro de los plazos


establecidos, debiendo el Juez, a través de los auxiliares bajo su dirección,
tomar las medidas necesarias para lograr una pronta y eficaz solución del
conflicto de intereses o incertidumbre jurídica”.

ANÁLISIS: El principio de inmediación tiene por objeto que el juez quien va, en
definitiva, a resolver el conflicto de intereses o la incertidumbre jurídica, tenga el
mayor contacto posible con todos los elementos subjetivos (intervinientes) y
objetivos (documentos, lugares, etc.) que conforman el proceso. La idea es que
tal cercanía le puede proporcionar mayores o mejores elementos de convicción
para expedir un fallo que se adecúe a lo que realmente ocurrió, es decir, a la
obtención de un fallo justo. El Juez está en contacto directo con las partes, las
pruebas, la oralidad (contacto juez y protagonista). “El Código, acoge como

3 TICONA POSTIGO, Víctor. Análisis y comentarios al Código Procesal Civil. Lima - Perú:
Editorial San Marcos, 1996.
patrón el proceso oral, consiguientemente aplica la vigencia del principio de
inmediación en todas las estructuras de los procesos que regula”.4

Por su parte, el principio de concentración concierne que el juez debe regular y


limitar la realización de actos procesales, integrar el proceso que dará al Juez
una visión de conjunto del conflicto que va a resolver. “El principio de
concentración apunta a la abreviación del proceso mediante la reunión de toda
actividad procesal en la menor cantidad de actos y a evitar, por consiguiente, la
dispensión de dicha actividad”.5

En mención al principio de economía procesal, es mucho más trascendente de


lo que comúnmente se cree. El concepto de economía procesal, en su acepción
de ahorro, está referido a su vez a tres áreas distintas: tiempo (la urgencia de
acabar pronto el proceso y por otra la urgencia del otro por prolongarlo, debe ser
ni tan lento, ni tan expedito), gasto (las desigualdades económicas no deben ser
determinantes, la necesidad de los costos del proceso no impida que las partes
hagan efectivo todos sus derechos) y esfuerzo (posibilitar de concretar los fines
del proceso evitando la realización de actos innecesarios para el objetivo
deseado, simplificar, la economía de esfuerzo).

Finalmente, la celeridad es la expresión concreta de la economía por razón de


tiempo. Los plazos, normas expeditas y sancionadoras de la dilación
innecesaria.

Artículo VI. - Principio de Socialización del proceso

“El Juez debe evitar que la desigualdad entre las personas por razones de
sexo, raza, religión, idioma o condición social, política o económica, afecte
el desarrollo o resultado del proceso”.

ANÁLISIS: Nuestro proceso civil se rige estrictamente por el principio de


igualdad procesal de las partes, la cual exige que éstas dentro del proceso
tengan el mismo trato encontrándose en la misma situación procesal, en igual
situación, igual derecho u obligación. Por ejemplo: “Cuando se ampara a la parte
litigante más débil, mediante la concesión de ciertas situaciones de privilegio, lo
que hace el legislador no es imponer una desigualdad entre las partes, sino
regular y favorecer una igualdad por compensación”.6

En síntesis, el juez debe procurar a toda costa que las partes, estén en igualdad
de prerrogativas, facultades u obligaciones, si se encuentran en igualdad de

4 TICONA POSTIGO, Víctor. Análisis y comentarios al Código Procesal Civil. Lima - Perú:
Editorial San Marcos, 1996.
5 ENRIQUE PALACIO, Lino. Manual del Derecho Procesal Civil. Buenos Aires - Argentina:
Editorial Abeledo Perrot, 2016.

6 TICONA POSTIGO, Víctor. Análisis y comentarios al Código Procesal Civil. Lima - Perú:
Editorial San Marcos, 1996.
condiciones, aunque muchas veces resulta complicado, sobre todo cuando la
desigualdad económica existe entre las partes.

Artículo VII.- Juez y Derecho

“El Juez debe aplicar el derecho que corresponda al proceso, aunque no


haya sido invocado por las partes o lo haya sido erróneamente. Sin
embargo, no puede ir más allá del petitorio ni fundar su decisión en hechos
diversos de los que han sido alegados por las partes”.

ANÁLISIS: Un juez se encuentra capacitado para calificar autónomamente los


hechos de la causa y subsumirlos en las normas jurídicas pertinentes que los
rigen, independientemente del derecho mismo por ellos invocado, en virtud del
principio “iura novit curia”. Por tanto, frente al deber del juez por suplir o corregir
la norma correspondiente resolviendo todos y únicamente los puntos en
controversia de lo que manda o decide; existe la limitación impuesta por el
principio de congruencia procesal para el juez, pues, éste solamente debe
sentenciar según lo alegado y probado por las partes.
“Por el principio de congruencia procesal, el juez no puede emitir una sentencia
ultra petita (más allá del petitorio, diferente al petitorio o con omisión del petitorio)
bajo riesgo de incurrir en vicio procesal, el cual puede ser motivo de nulidad o
de subsanación (en vía de integración por el superior), según sea el caso”.7

Artículo VIII.-Principio de Gratuidad en el acceso a la justicia

“El acceso al servicio de justicia es gratuito, sin perjuicio del pago de


costos, costas y multas establecida en este Código y disposiciones
administrativas del Poder Judicial”.

ANÁLISIS: El presente artículo tiene una raigambre constitucional y se basa en


la necesidad de garantizar la defensa e igualdad de las partes en un proceso, es
decir que considera la posibilidad de comparecer ante el órgano judicial en
defensa de la justicia, la cual se vería impedida si no se pudiese demandar por
no contar con los medios indispensables como son los gastos propios de la
actividad jurisdiccional. El Código Procesal menciona que el Estado concede
gratuitamente la prestación jurisdiccional, sin perjuicio de que el litigante vencido
en un proceso, deba abonar las costas, costos y las multas que para cada caso
específico determine la ley. “Este principio tiene una verdadera función cautelar
al remover el obstáculo dañoso que significa la condición de inferioridad
económica de su titular, mediante una efectiva observancia del principio de
igualdad de las partes en el proceso”.8

7 TICONA POSTIGO, Víctor. Análisis y comentarios al Código Procesal Civil. Lima - Perú:
Editorial San Marcos, 1996.

8 HERNANDEZ LOZANO, Carlos y VASQUEZ CAMPOS, José. Código Procesal Civil. Lima -
Perú: Ediciones Jurídicas, 1995.
Artículo IX.-Principios de Vinculación y de Formalidad

“Las normas procesales contenidas en este Código son de carácter


imperativo, salvo regulación permisiva en contrario.

Las formalidades previstas en este Código son imperativas. Sin embargo,


el Juez adecuará su exigencia al logro de los fines del proceso. Cuando no
se señale una formalidad específica para la realización de un acto procesal,
éste se reputará válido cualquiera sea la empleada”.

ANÁLISIS: En la relación jurídica procesal, entre el órgano jurisdiccional y las


partes, se encuentra la presencia del Estado el cual le imprime un carácter
público a esta relación refiriéndose al cumplimiento ineludible de las normas
imperativas, bajo este supuesto es que las normas que regulan esta relación
fundamentalmente sean de orden público, con las excepciones previstas en el
mismo código; el carácter público es el que advierte de la finalidad abstracta
(lograr la paz social en justicia) lo que es de interés para la colectividad. Por otra
parte, no se puede olvidar la finalidad concreta (resolver un conflicto de intereses
o eliminar una incertidumbre con relevancia jurídica), esta es la referida
esencialmente al interés privado.
“Pero el que las normas procesales sean de Derecho Público no implica, como
resulta evidente, que sean de orden público; aquél concepto tiene que ver con
su ubicación, éste con su obligatoriedad.”9

Nuestro Código Procesal Civil presenta formalidades que son de obligatorio


cumplimiento, el Juez está en la capacidad de adecuar la exigencia de cumplir
con estos requisitos formales a dos objetivos más trascendentales que son los
fines del Derecho. “Como regla general se debe aplicar el principio de formalidad
y como excepción a esta regla el principio de la libertad de formas, es decir que,
si la ley no señala una formalidad específica para un acto procesal, éste se
tendrá por válido cualquiera sea la forma empleada”.10

Artículo X.- Principio de Doble Instancia

“El proceso tiene dos instancias, salvo disposición legal distinta”.

ANÁLISIS: Este artículo pretende que un proceso judicial deber ser gestionado
y resuelto por varios organismos jurisdiccionales y en distintas instancias, se
establece como regla general que el proceso tiene dos instancias las cuales

9 MONROY GÁLVEZ, Juan. Introducción al Proceso Civil. Santa Fe de Bogotá - Colombia :


Editorial Temis - de Belaunde & Monroy, 1996.
10 TICONA POSTIGO, Víctor. Análisis y comentarios al Código Procesal Civil. Lima - Perú:
Editorial San Marcos, 1996.
prestan seguridad y garantía a los litigantes, para evitar los errores judiciales y
las conductas dolosas o culposas de los jueces de primera instancia en la
emisión de sus resoluciones.

Nuestro Código concede el recurso impugnatorio denominado apelación para


viabilizar esta doble instancia, si las partes están de acuerdo pueden prescindir
de este recurso para ir en recurso de casación contra las sentencias de primera
instancia; todo este proceso con el fin de obtener una resolución final con
mayores garantías de justicia, además “la norma bajo examen admite la
posibilidad de que el proceso tenga tres instancias, lo que será expresamente
regulado por ley, el recurso de casación no genera ni constituye una tercera
instancia, en lo que la doctrina ha convenido casi unánimemente”.11

11 TICONA POSTIGO, Víctor. Análisis y comentarios al Código Procesal Civil. Lima - Perú:
Editorial San Marcos, 1996.

Você também pode gostar