Você está na página 1de 4

Consejos para manejar la rebeldía de los

adolescentes
Ser padres se convierte en una tarea compleja cuando sus hijos llegan a la adolescencia. En la
edad entre los 12 a los 17 años, los jóvenes parecen inalcanzables e intocables dentro de su
entorno.

Aquellos progenitores que están pendientes del crecimiento de sus pequeños se dan cuenta que
los cambios hormonales, físicos y sicológicos se hacen evidentes en el desarrollo del
adolecente.
Pero ¿Qué hacer cuando estos cambios también llegan con rebeldía, inconformidad o pataletas?
Pues Vanguardia Liberal consultó a varios expertos y llegó a la conclusión de que mamá y papá
tienen que asumir esta situación con naturalidad porque estos cambios de comportamiento son
normales a esta edad.
Del mismo modo en esta etapa los adolescentes también empiezan a formar su personalidad u
optar por buenas o malas decisiones por eso es significativo ofrecerles amor, comprensión y ser
personas que les brinden buenos consejos para que ellos y ellas opten buenas conductas y
posturas.
En varios hogares empieza a sobresalir la rebeldía del menor cuando se les pone prohibiciones,
límites o fronteras por esa razón ellos eligen hacer lo contrario a lo que se les asignó, de esta
manera existirán choques que parecen incontrolables. A causa de esto es mejor crear lazos de
confianza que le permita al joven contarle por voluntad propia lo que desea hacer.
Edades
La adolescencia, desde la pubertad hasta la edad adulta, se puede dividir a groso modo en tres
etapas según la sicóloga Elvira Vera Sánchez:

• Adolescencia temprana, generalmente entre los 12 y 13 años de edad.

• Adolescencia media, entre los 14 y 16 años de edad.

• Adolescencia tardía, entre los 17 y 21 años de edad.

Además del crecimiento fisiológico, de estos años se pueden extraer siete tareas clave de
desarrollo intelectual, sicológico y social. El propósito fundamental de estas tareas es formar la
propia identidad y prepararse para la edad adulta.

Pautas para padres


1 Elvira Vera Sánchez, Psicóloga y especialista en Clínica de la salud, da algunas pautas para
los padres.

1 Establezcan normas y sanciones, previamente acordadas con ellos.


2 Mantengan la diferenciación de los roles.

3 Propicien y determinen momentos para compartir en familia

4 Permitan que su hijo adolescente tenga su propio espacio para estar solo.

5 Fomenten charlas donde usted habla y su hijo escucha y viceversa.

6 Tenga en cuenta que así como a ustedes no les gusta que le ‘esculquen’ sus pertenencias sin
permiso a su hijo también le puede molestar.

7 No cuestionar su estado de ánimo.

8 Pretender controlar todo el tiempo a ese hijo adolescente sólo le da más argumentos para que
él se muestre más rebelde.

9 No traten al hijo con malas palabras, insultos y acciones violentas, eso sólo ayudará a
distanciarlos de él.

1 0. Interésense en conocer y ser amables con los amigos y amigas de sus hijos.

1 1. Feliciten a su hijo por los logros obtenidos, reconózcanlo y valórenlo.

1 2. Cuando corrijan a su hijo, háganlo con ternura y amor. Recuerden que es un ser en
formación a quien Dios les delegó para educar.

1 3. En pareja, revisen si al interior del hogar existen aspectos o situaciones que de alguna
forma pueden estar fomentando una actitud rebelde en sus hijos.

Angélica María Figueredo Rodríguez

Sicóloga con postgrado en Educación Emocional

¿Por qué los padres deben asumir esta etapa con naturalidad?

“La adolescencia es una etapa de transición donde el complemento rebelde y desafiante es una
forma de poner a prueba los límites impuestos a lo largo de la formación del niño, no todos los
adolescentes presentan el mismo grado de rebeldía, todo depende de la relación que los padres
han cultivado con sus hijos y de que tanto le ha enseñado a resolver conflictos, y el diálogo ha
tenido con él, siendo el ejemplo algo primordial. Se puede ayudar a orientar sus emociones para
que su conducta sea más conciliadora”.

¿Qué sucede si los padres pierden la paciencia y el control sobre los hijos?

“El control y la paciencia son muy importantes ya que no se aconsejan los enfrentamientos y
las consecuencias extremas a menos que sean estrictamente necesarios. El control les ayuda a
ellos mismos a establecer sus propios límites y autoregulación, el control acompañado de
normas claras, firmes y contundentes y con consecuencias definidas a las cuales muy
seguramente habrán objeciones por parte de ellos, pero si los padres mantienen las normas, el
adolescente termina entendiendo que esas reglas no son negociables. La paciencia sumada al
diálogo, compañía y apoyo ayudará a generar la confianza necesaria para acompañarlos en esta
etapa”.

¿Cómo apoyarlos?

“Manteniendo siempre los canales de comunicación abiertos, nunca dejar de hablarles por
periodos largos. El diálogo debe ser tranquilo, evitar los gritos, las discusiones constantes, los
largos discursos y mostrar interés por el adolescente como persona por sus gustos, intereses,
por las personas con las que se relacionan. Es indispensable que los padres no se queden en la
crítica, darle la opción de que mejores sus errores y expresarles reconocimientos si cumple con
todas las normas, escucharlos con calma, validar sus emociones y recordarles con precisión y
firmeza las reglas sin gritarlos o dejarse llevar por la rabia. Es bueno identificar si hay algo
detrás de su rebeldía y tratarlo a tiempo indicado”.

Elvira Vera Sánchez

Sicóloga y especialista en Clínica de la salud.

¿Cuáles son las etapas de la adolescencia de acuerdo a la edad?

“Es importante antes de definir estas etapas, de la adolescencia, evidenciar que los procesos de
desarrollo y, en general, todo lo referente a la vida del ser humano se desenvuelve a través de
sucesivas etapas que tienen características muy especiales. Cada una de ellas se funde
gradualmente en la etapa siguiente. Sin embargo, no hay un acuerdo unánime para determinar
cuántas y cuáles son esas etapas. Tampoco se puede decir cuándo comienza exactamente y
cuándo termina cada una, pues en el desarrollo influyen diversos factores individuales, sociales
y culturales. Por eso se dice que cada ser humano tiene su propio ritmo de desarrollo”.

¿Cómo manejar la rebeldía de un adolescente?

“La rebeldía inicia en el momento exacto en el que la ira rebasa el temor a las amenazas, gritos,
golpes y castigos que consideran injustos. La rebeldía se da en cualquier edad, sin embargo, es
en la adolescencia en la que los desquites son más abiertos, debido al deseo de liberarse del
control que los agobia (dígase de la autoridad caprichosa que algunos padres ejercen) La
rebeldía es un problema porque impide la integración y la convivencia en el hogar, en las
escuelas y en la sociedad. Las conductas de los jóvenes rebeldes reflejan menosprecio a la
autoridad de los padres y maestros, debido a que el derecho y el respeto a los demás “les vale”.
Estos jóvenes creen que su libertad está en hacer lo que “se les da la gana” Los adolescentes
manifiestan ese desacuerdo, oposición, sublevación de distintas formas, murmurando, gritando,
reclamando, y en su comportamiento hostil traducido en violencia física directa (hacia otras
personas, las peleas son muy comunes entre los jóvenes) o destruyendo objetos como símbolo
de su bronca y desencanto”.

¿Qué tan importante es que los padres respeten la intimidad o los espacios de los adolescentes?
“Los padres pueden tener un buen clima de entendimiento con su hijo adolescente, escuchando
sus problemas e intentando ayudarlo, pero no como un amigo sino desde la responsabilidad
adquirida ya desde su nacimiento, crianza y posterior educación. Los padres tienen pues una
responsabilidad legal y están obligados a proporcionarle todos los cuidados materiales
(alimentación, casa, ropa, higiene, etc.) y sicológicos (educación, afecto, etc.). Un amigo puede
aconsejarlos, un padre debe además tomar decisiones por el bien de sus hijos aunque estas sean
dolorosas”.

Você também pode gostar