Escolar Documentos
Profissional Documentos
Cultura Documentos
Pastas Cerámicas
Contacto Engobes Esmaltes de Alta Esmaltes de Baja Esmaltes de Media Hornos Raku
► Ir al inicio
Mostrando entradas con la etiqueta Pastas Cerámicas. Mostrar todas
las entradas
índice:
El secado de los ladrillos lleva por lo menos unos 30 días si los colocamos
a resguardo, donde haya buena ventilación pero no a la intemperie para evitar la
lluvia. (los hemos colocado bajo techo, estibados en pallets de madera, y ya
tienen 3 semanas y aún no se han secado completamente).
Los vamos a cocinar a unos 1200ºC (ver curva de temperatura más abajo), claro,
eso en la escuela, pero si no podemos llegar a esa temperatura en un horno más
pequeño a gas o leña con que los horneemos a 1000ºC también será suficiente,
una vez armado el horno y con las sucesivas encendidas se terminarán de cocer.
El aserrín se quemará y estos ladrillos van a quedar porosos y livianos.
Los moldes para fabricar ladrillos son simplemente cuatro maderas (sin fondo)
dispuestas en rectángulo, con dos asitas de madera como para poder maniobrar
más cómodamente. el molde se puede fabricar del tamaño que uno necesite,
incluso, si tenemos ingenio, podemos hacer ladrillos curvos o hacer moldes de
dos, tres o más ladrillos. depende del tiempo y las ganas de hacerlos. Nosotros
usamos moldes de dos ladrillos cada uno.
Sacamos cuentas y para fabricar el horno botella y necesitamos unos 150
ladrillos refractarios. Sin contar la cúpula.
-----------------------------
24/09/2009
Pudimos! pudimos hacerlo!! no se vino abajo nada y acá están las pruebas: Las
cimbras las hicimos con tergopol, conseguí una media esfera para la cúpula y
con otros trozos armamos la boca del horno
Acá nuestras manos...
Bueno, acá publico las fotos, se cortó la tapa en tres partes (para alivianar el
peso al maniobrar para cargar el horno) y ahora lo estamos dejando secar.
¿Cómo lo ven? a mi me gusta.
Y bueno, ya pasó más de un mes en que venimos dejando secar los ladrillos para
poder hornearlos, la profe sospecha que aún no están bien secos, empezamos a
cargar los hornos, en el grande de gas entraron casi todos los ladrillos y en uno
eléctrico cargamos la cúpula y el resto de ladrillos que no habían entrado en el de
gas a riesgo de quemar las resistencias, pero era eso o esperar hasta otra
encendida:
Colocando los conos pirométricos:
Cerrando la puerta:
Encendido del horno:
De ahora en más, durante una semana vamos a darle un templado todos los días,
para terminar de secar los ladrillos completamente. No se secan más!!! La
profesora estaba en lo cierto, este clima húmedo de Buenos Aires no los dejó
secar bien.
El primer día el horno grande subió a sólo 104ºC y por la cantidad de vapor de
agua que salía hasta ahí se llevó y se apagó.
El segundo día se llevó a unos 130º
El tercer día a 150º, siempre apagando el horno luego de alcanzar la temperatura.
Así sucesivamente hasta llevarlo a unos 350-400 ºC al sexto día .
Y el séptimo día se empezará la cocción definitiva, se encenderá a las 08:30 hs.
calculando que finalizará la horneada a eso de las 22 horas cuando alcance los
1200ºC.
Si dicen que Dios creó el mundo en seis días y al séptimo descansó, esta vez
vamos a contradecirlo y trabajaremos como locos justo el día siete, elevando de
manera constante la temperatura y controlando siempre los quemadores. Le
haremos turno por postas para que todo salga bien.
Deséennos suerte.
------------------------
07/11/2009
Estoy sangrando. Resulta que al fin, luego de templar y templar los hornos para
cocer los ladrillos para el horno botella, luego de soportar la humareda que nos
dejó con los ojos enrojecidos cuando el aserrín de los ladrillos se empezó a
combustionar (esto ocurrió cuando tocamos aprox. los 300º C) y tuvimos que
apagar los hornos porque era imposible que en la escuela se siguieran dando las
otras clases, dejamos para este martes la bizcochada final, bien tempranito y sin
alumnos tomando cursos para que no padecieran nuevamente el humo.
Al final, no hubo nada de humo (ya se había quemado todo el jueves pasado).
Llegué ese día después de trabajar a eso de las 15 hs. (nos fuimos turnando
entre los alumnos y Marta, la profesora fue la que estuvo de principio a fin), ya
estaba por los 700ºC, si bien había visto este horno de gas en funcionamiento,
jamás había hecho una horneada en él y me encantó el tema del control del aire,
la tobera, mirar constantemente los quemadores, el gas, la presión, la abertura
del tiraje... fue una buena experiencia, que incluyó el apagado accidental de un
quemador mientras hacíamos el temple y por eso tomar todos los recaudos para
el reencendido, dejar que se ventile bien el horno por las dudas de que se haya
acumulado gas en su interior (fueron dos segundos) pero hicimos todo como si no
hubiéramos visto cuando se apagó, practicamos y memorizamos una y otra vez
los pasos de cierres de llaves en caso de emergencia, incluido el corte de energía
eléctrica. Con estos bichos grandotes no hay que descuidarse.
Mucho antes de lo que habíamos previsto, a las 18:40 cayó el cono superior
indicando que ya había alcanzado los 1200ºC. A las 19:00 hs. cayó el cono
inferior y procedimos al apagado completo del horno.
El jueves se descargaron los hornos. Los ladrillos perfectos y Ay! se nos partió la
cúpula! por eso sangro. Quedó ahora en cuatro lindos gajos. Lo haremos de
nuevo!
--------------------------------------------------------
06/12/2009
No llegamos a terminarlo, nos agarró el final de clases y falta hacerle el revoque
con cemento refractario y volver a hacer la cúpula. De seguro esto queda para el
año que viene, pero bueno, acá muestro lo que hicimos hasta hoy partiendo del
polvo. No quedó tan perfecto, estuvo levantado a las apuradas y el año que viene
vamos a desarmarlo para rehacerlo más tranquilos.
Todo no se puede. la culpa la tiene la "gripe A", que nos hemos perdido varias
clases y eso nos atrasó, hubiéramos llegado sinó con encendida y todo, pero el
hombre propone y una gripe dispone... ¡Ay Dios!
Algo me quedó muy en claro: a cualquier parte del mundo que vaya soy capaz de
fabricarme un hornito de ladrillos de la nada. En cuanto solucione poder cocinar
los ladrillos a cielo abierto... ¡¡hago desastre!! jajajajaj!! me van a echar, los
vecinos me van a echar...
Buena experiencia. Acá el video final.
0:00 / 4:01
25 comentarios:
Tags Hornos, Pastas Cerámicas, ► Hornos para cerámica, ► Ladrillos refractarios, ♦ Horno
botella
Esta pasta para su mejor trabajabilidad, se debe dejar estacionar por lo menos un
par de semanas.
Igual, a mi con el torno me costó un poco al principio ya que no tenía la
plasticidad de una pasta roja. Le encontré la vuelta trabajándola muy blanda,
como suelo decir, "tipomoco", pero eso va a depender de la habilidad de cada
uno.
Veremos como queda cocida. Y ni idea de cuanto contrae.
1 comentario:
► Ollas de barro
El quid de la cuestión en las ollas de barro es que éstas no deben sufir
dilataciones abruptas con los cambios bruscos de temperatura. El enemigo de
estas pastas es el cuarzo o sílice, que con el calor se dilata, con el frío se
contrae y a la larga o de golpe provoca rajaduras o directamente se rompen las
piezas. El agregado de talco es lo que se utiliza para que las pastas no sufran
estas dilataciones/contracciones cada vez que las sometemos al calor.
Es un mecanismo complicado, pero podemos decir en lenguaje criollo que el
talco actúa como un captador de las moléculas de cuarzo o sílice libre que tienen
las arcillas, caolines y feldespatos, y no deja que se dilaten y contraigan cada
vez que las ponemos al fuego o al horno.
55 a 75 % de Arcilla
0 a 10 % de Caolín
0 a 5 % de Feldespato
5 a 45% de Talco
0 a 20 % de Ceniza volcánica (ahora que tenemos por todo el sur)
0 a 20 % de Chamote impalpable o fino (de granos del tamaño de arena
fina)
0 a 5% de Cuarzo (si podemos obviarlo mejor, puede ir para pastas de
fuentes de horno, a veces nos permite mejor el amasado o torneado, pero
no debe usarse para piezas que irán a llama directa)
• FÓRMULA Nº 18:
58 % Arcilla blanca o roja
21 % Talco Industrial
17 % Chamote impalpable
4 % Feldespato K estándar
Tengamos en cuenta que todo el conjunto no debe tener ángulos rectos, sinó
que haremos una curva entre la pared y el fondo, los ángulos rectos hacen que
existan tensiones y puede que se nos raje:
Y también por lo mismo, todas las paredes y el fondo de la olla deben tener
el mismo grosor o espesor.
Terminación:
En crudo podemos bruñirla, esto es cuando estando húmeda pero ya durita (se
le dice "estado cuero", porque si la tocamos tiene la dureza del cuero de los
zapatos, pero aún no se ha secado del todo), con una piedrita brillante o con las
barritas de téflon que se venden ahora, la comenzamos a frotar con cuidado de no
deformarla y veremos que saca brillo.
Por qué pasa ésto? Si vemos nuestra olla de barro en el microscopio electrónico,
veremos que las moléculas de arcilla de la superficie son como "pequeñas
escamas" todas atiborradas, lo que hacemos al bruñirla es acomodar esas
minúsculas escamitas como si las estuviéramos planchando, acostamos una
sobre otra, las encimamos prolijitas y por eso comienzan a brillar, (al estar todas
acomodadas brillan como lo hacen las escamas del pescado, salvando las
diferencias, pero válido como ejemplo), además con esto la hacemos más
impermeable, puesto que todas las cerámicas a no ser la porcelana y el gres
(cerámica cocida a muy alta temperatura) siempre son porosas. Nunca les pasó
que un lindo florero al rato comienza a transpirar agua? bueno.
Bruñido: El bruñido lleva paciencia, hay que bruñirla varias veces, puesto que
veremos que la dejamos brillante, la pusimos a secar y al rato de nuevo se ha
opacado, ¿cómo es posible? pasa que las primeras veces que bruñimos junto
con las moléculas de arcilla también estamos "planchado" las moléculas de
agua, y claro, éstas moléculas de agua se van evaporando y otra vez nos quedan
despareja la superficie (si la miramos al microscopio vemos los pequeños
cráteres que dejó el agua evaporada), uf! volvemos a bruñir y reacomodamos todo,
brillante de nuevo. Así tendremos que hacer hasta que toda el agua de la
superficie se haya evaporado y sólo estemos acomodando arcilla, sólo así nos
quedará brillante. Podemos decir que los aborígenes y los antiguos alfareros
tenían mucha paciencia, cierto? jajaj!
Horneado:
Podemos hornearla entre una temperatura de 950 a 1050ºC.
Las pastas que irán a fuego directo, sobre la llama de gas, leña o apoyada sobre
brasas, deben ser cocidas entre los 950-1050ºC para que aún permanezcan
porosas, estos poros no se ven a simple vista, nos haría falta un microscopio para
verlos, pero deben ser porosas para que la vajilla al humectarse con los alimentos
o cuando la lavamos e inmediatamente la usamos, permita eliminar el vapor de
agua que se genere dentro de sus paredes, pues en una pasta cocida a mayor
temperatura los poros se hacen cada vez más chicos e incluso llegan a cerrarse
casi completamente como en las pastas de gres. El agua va a entrar igual en
esos pequeñísimos poros, pues la molécula de agua es infinitamente chica, y una
pasta así, al tener los poros mucho más chicos permitiría que dentro de esos
pequeños poros (siempre tienen poros las pastas cerámicas) se alojen igual las
moléculas de agua, pero cuando el calor las convierta en vapor de agua, al estar
alojada dentro del poro casi cerrado la presión del vapor sería inmensa
provocando rajaduras y roturas. Imaginen miles de minúsculas ollitas a presión en
donde el vapor pugna por salir y unicamente puede hacerlo por la pequeña válvula
de la tapa....
Curado de las ollas de barro:
Si la hemos esmaltado por dentro, no hace falta ningún curado pues el esmalte la
ha impermeabilizado, pero si la hemos bruñido o engobado podemos curarla, para
esto con sólo llenarla de leche y ponerla a hervir despacito (para que no se nos
chorree por toda la cocina) por el lapso de dos horas, luego apagar la hornalla y
dejar así hasta que se enfrie la leche, lavar con esponja y jabón neutro, enguajar
muy bien y ya está lista para usarse. El curado hace que la olla se
impermeabilice un poco, pero no del todo, aunque hay gente que no la cura y la
usa directamente dejando que se vaya curando con el tiempo y el uso. Esto es a
gusto de cada uno.
Glosario:
Arcilla: Se entiende como toda aquella que sea de color rojo o blanco y según los
países adquiere distintos nombres o nombres comerciales: Tínkar, APM, arcilla
de bola o ball clay, clay, caolín, etc.
31 comentarios:
Tags Pastas Cerámicas, ► Ollas de barro, ► Pasta cerámica para ollas de barro
► Barbotina
Fórmulas:
80 % arcilla Tinkar
10 % de carbonato de calcio Ca (CaO3)
10 % cuarzo
0,15 % silicato de Sodio (SiO2Na2)*
0,15 % Carbonato de sodio (CO3Na2)*
en peso:
800 grs. arcilla tinkar
100 grs. de carbonato de calcio
100 grs. de cuarzo
1,5 grs. silicato de sodio*
1,5 grs. carbonato de sodio*
2 comentarios:
Esta fórmula cocida a alta sufre un 15% de contracción. Tener en cuenta ésto si
tenemos que hacer piezas con una medida o dimensiones determinadas.
No hay comentarios:
FÓRMULA 2:
en la amasadora, mezclar en seco todo durante 5', luego ir agregando agua o (si
tenemos acumulada) barbotina hasta lograr una pasta que se desprenda de la
amasadora.
por supuesto, estas cantidades se pueden reducir siguiendo siempre las
proporciones.
1 comentario:
en la amasadora, mezclar en seco todo durante 5', luego ir agregando agua o (si
tenemos acumulada) barbotina hasta lograr una pasta que se desprenda de la
amasadora.
por supuesto, estas cantidades se pueden reducir siguiendo siempre las
proporciones.
2 comentarios: