Escolar Documentos
Profissional Documentos
Cultura Documentos
La música es una de las pocas cosas en la vida que tiene el poder de mover emocionalmente a la
mayoría de personas. Una pieza de música puede traernos recuerdos, levantar el ánimo o calmar
nuestra alma y nos ayuda a expresar las emociones cuando las palabras nos fallan. Es este poder
que nos proporciona la Musicoterapia, utilizando los diversos componentes musicales para
proporcionar una forma de relacionarse dentro de una relación terapéutica.
La música es algo con lo que casi todo el mundo puede relacionarse y, de hecho, la mayoría de nosotros
escucha música en algún momento todos los días. Ya sea que esté cantando junto a su canción favorita
en su camino al trabajo, escuchando la radio en casa o bailando un sábado por la noche, lo más
probable es que no haya un día que se pase sin música.
La idea detrás de la Terapia Musical es aprovechar esa experiencia compartida de una manera
terapéutica. La Terapia Musical puede ayudar a una variedad de personas, incluyendo aquellas con
dificultades emocionales y con limitaciones físicas. Los niños pequeños se pueden beneficiar y mejorar
la comunicación, mientras que las personas mayores puedan recuperar la autoestima.
¿Qué es la Musicoterapia?
La Terapia Musical es un tipo de terapia creativa que consiste en escuchar y / o reproducción de
música. Dependiendo de las necesidades del participante, la Terapia Musical puede fomentar la auto-
conciencia, la capacidad de comunicación y la autoestima. La terapia utiliza la naturaleza social y
comunicativa de la música para hacer esto y tiene como objetivo facilitar los cambios positivos en el
comportamiento.
Por lo general, el musicoterapeuta llevará a cabo sesiones utilizando una serie de instrumentos y / o su
voz para provocar la interacción y la respuesta de los participantes. Este tipo de ambiente relajado y
seguro ayuda a fomentar el aprendizaje y la liberación emocional de los participantes.
La historia de la Musicoterapia
El uso de la música como terapia ha tenido lugar durante siglos, ya desde la antigua Grecia. Apolo, por
ejemplo, es el dios griego de la música y la medicina, que demuestra que los dos han sido vinculados
por lo menos desde la época griega antigua. La Terapia Musical se practica incluso en los tiempos
bíblicos, cuando se pensaba que David tocaba el arpa para librar tipo Saulo de un espíritu maligno.
La Terapia Musical como la conocemos hoy en día se inició a raíz de las Guerras Mundiales I y II. Fue
entonces que los músicos (especialmente en el Reino Unido) viajarían a los hospitales para reproducir
música para los soldados que sufrieron un trauma emocional y físico. La violonchelista francesa
Juliette Alvin fue pionera en la terapia clínica de música en Gran Bretaña en los años 60, y todavía se
considera factor de influencia más fuerte de la terapia.
Técnicas de Musicoterapia
Los musicoterapeutas utilizan una variedad de técnicas en función de las necesidades de las personas
que toman parte. Las siguientes técnicas son algunos de los que se usan más comúnmente, sin embargo,
esta lista no es exhaustiva y otras técnicas se pueden aplicar:
• Cantar – Su terapeuta musical puede invitarle a cantar mientras tocan una canción. El canto
puede ayudar a desarrollar el control de la articulación y la respiración, y dentro de un entorno
de grupo puede ayudar a mejorar las habilidades sociales.
• Tocar instrumentos – Tocar un instrumento puede ayudarle a refinar las habilidades motoras y
de coordinación. Tocar con otros también mejora la cooperación y las habilidades de equipo de
trabajo.
• Actividades basadas en ritmos – Imitando a un ritmo, o hacer uno propio, pueden ayudar a
desarrollar la coordinación y el rango de movimiento. En algunos casos, también puede ayudar
a aliviar la ansiedad y ayudar a la relajación.
• La improvisación – Dar la oportunidad de expresarse de una manera creativa gracias
improvisación musical puede ayudar cuando las palabras fallan.
• Componer / escribir canciones – Escritura de una canción sobre sus experiencias puede
resultar más fácil que hablar de ello. Componer música también puede ayudar a fomentar un
mayor sentido de conciencia de sí mismo, pues le ayuda a comprender mejor sus sentimientos.
• Escuchar – Sólo escuchar música puede tener propiedades terapéuticas. Puede ayudar a
desarrollar habilidades cognitivas y alienta a la memoria y la atención.