A fines del siglo VIII Y en el IX se da la edad media, lo que se llama el renacimiento caronlingio:

Carlomagno preocupado por levantar el nivel cultural de su Imperio, manda a crear escuelas
independientes de los monasterio, en que se comienza a enseñar el trívium: gramática,
retórica y dialéctica, y el quadrivium: aritmética s, música,, astronomía y geografía.

A lo largo de este proceso, el eje central desde el cual el hombre filosofa es una situación
cristiana, en el sentido de que lo vivido a nivel social, (instituciones, creencias comunes,
valores apreciados, el sentido de la vida aceptado y compartido) están impregnados de
cristianismo, aunque esto no quiere decir que todos los hombres fueran cristiano. Prodría
decirse que la fe no era el problema individual, sino algo que se respiraba socialmente. Y es
desde esta situación desde donde el hombre filosofa. En consecuencia, siempre estará
presente el problema de las relaciones entre la fe y la razón.

En el comienzo de la escolástica la razón es considerada la esclava de la teología, y la filosofía

es considerada una ayuda para desarrollar o aclarar la fe, pero nunca considerando la
posibilidad de cuestionar algún dogma. Para algunos filósofos de este primer periodo de la
escolástica, como San Anselmo, los dogmas son hechos tan reales, como pueden serlo los de la
experiencia. El termino Escolástica proviene del lugar donde se enseñaba, era la filosofía que
se hacía en las escuelas, (de los Monasterios). Pero durante la Edad Media se fueron creando
otros centros de enseñanza que fueron mucho más importantes para la filosofía : las
Universidades, de las cuales la más famosa fue la de Paris, donde se enseñaron San Anselmo y
Santo Tomas de Aquino, entre otros :y que fue la protegida de los papas y vista como el centro
intelectual donde se pensaba y desde donde se expandía la teología. A ella llegaban
estudiantes de todas las regiones de Europa, los cuales hablaban latín, que era la lengua culta
de la época.