UNIVERSIDAD DE PIURA

Área Departamental de Ciencias Biomédicas Nota sinóptica

VMC 30/04/19

Ciencias naturales y mundo actual. Tema 1.2

ORIGEN DEL UNIVERSO

La unidad del saber científico

Inicio físico del universo actual

Sobre la base del Universo en expansión fueron propuestas dos teorías: la del Uni- Nota sinóptica 1.4
verso evolutivo de Hubble y Humanson (1925), desarrollado originalmente por VMC 30/04/19
Georges Lemaître (1927), posteriormente por Gamow (1948); y la del Universo
estacionario de H. Bondi, F. Hoyle y Th. Gold (1948).
El modelo evolutivo afirma que el cosmos ha cambiado a lo largo de su historia, y
postula un Universo de comienzo temporal. Razona para esto de la siguiente
manera: si el Universo está en continua expansión en algún momento ha sido más
pequeño de lo que es ahora, y así sucesivamente, hasta su comprensión en un solo
punto, singularidad cósmica inicial de materia superconcentrada, proclive a una ex-
plosión (big bang) originante del Universo actual.
Negó la evolución del Universo la teoría estacionaria. Este modelo diseña un
Universo de edad infinita, de constitución espacial y temporalmente homogénea,
siempre con el mismo número y tipo de objetos. Y asume que ocurre la expansión
del cosmos sin que varíe su densidad material por la creación persistente y en todo
sitio de átomos de hidrógeno.
Los hallazgos científicos validaron la teoría de la gran explosión (big-bang). Modelo
que supone que en un tiempo 0, y a partir de la gran explosión de aquella
singularidad cósmica inicial de materia a una densidad y temperatura elevadísimas,
el ‘átomo primitivo’ de Lemaitre, nació el Universo actual. Hace poco más de unos
13,700 millones de años.
Y comenzó su expansión acelerada, su consecuente enfriamiento, y el desarrollo
progresivo de los distintos niveles de estructura: los protones y neutrones, los
núcleos de los átomos, las estrellas y galaxias, los cúmulos de galaxias, y,
finalmente, los supercúmulos.
En los instantes originarios habrían aparecido en
perfecta simetría: junto a cada una su opuesta las
primeras partículas elementales: el electrón y el
positrón, el neutrino y el antineutrino, etc., todas
carentes de masa y sujetas a una misma interac-
ción.
Entre los 3 minutos y los primeros 300,000 años,
el Universo, con miles de millones de grados de
temperatura, habría estado constituido princi-
palmente por una nube de electrones y positrones
y por radiación electromagnética.
Después, la energía se habría cambiado lentamen-
te a masa, y diversificadas las interacciones el
cosmos se habría hecho asimétrico y enfriado poco
a poco.
Quinientos mil años más tarde del big bang los
electrones y protones del plasma primordial –la
sopa densa y caliente de partículas subatómicas
que llenaba el universo primitivo— se combinaron
y formaron átomos de hidrógeno. Y se irradió entonces la radiación del fondo
cósmico de microondas (FCM) que impregna el universo desde entonces. Luego se
construirían átomos cada vez más pesados. Finalmente, las estrellas y las gala-
xias.
La teoría predijo la existencia actual de aquella radiación 'fósil' de fondo (RCFM), de
2.73º Kelvin (-273º C), diseminada isotrópicamente en todo el Universo. El descu-
brimiento por A. Penzias y R. Wilson en 1965 de esa radiación de microonda dio la
fuerte certidumbre científica de que hoy goza la teoría del big-bang.

Cómo se originó –todo— el mundo material

Origen metafísico del universo
Se ha llamado con equívoco creación del Universo al proceso del big-bang, y más
recientemente a un hipotético surgimiento espontáneo de materia o masa primitiva
a partir de estructuras espacio temporales por fluctuaciones del vacío cuántico o
por la acción del bosón de Higgs.
Pero el evento que narra la teoría del big-bang comienza con un ya existente
'átomo primitivo'. Y el vacío cuántico, como el clásico o cualquier otro estudiado por
la física, no es la nada en sentido absoluto. En física el término vacío designa algo:
aquel estado en que se encuentra una zona del espacio después de extraer de ella
toda masa (sólida, líquida o gaseosa) y toda radiación. En la teoría cuántica de
campos, el vacío es un mar de partículas y anti-partículas en continua creación y
aniquilación mutua, caracterizado por una energía no nula que recibe el nombre de
constante cosmológica.
Toda teoría física sólo es capaz de tratar sobre transformaciones de algo en algo.
No puede absolutamente mostrar que cualquier estado de las interacciones mate--
riales no es reducible a un estado previo, aunque sea hipotético ni que un estado
físico dado pueda deberle su existencia a un acto directamente creativo, que trajo
ese estado físico al ser desde la nada.
Creación en sentido estricto no es la simple aparición de algo por transformación de
otro algo ya existente, sino su presentación a partir de nada, su emergencia al ser.
No es dable tratar sobre la posibilidad o imposibilidad teórica del surgimiento del
Universo a partir de la nada, a partir de nada diríamos mejor, en el ámbito físico
experimental. El problema por su naturaleza requiere de un estudio científico –ob-
jetivo, racional, demostrable— de la causa definitoria del ser material, de un
abordaje que podríamos denominar metafísico: de un estudio científico –objetivo,
racional, demostrable— de la causa última del ser material. Véase al respecto la
nota sinóptica sobre la constitución fundamental del ser físico.
Desde esta óptica observamos que como última razón explicativa de origen sólo
cabe que el Universo sea o eterno o creado. Eterno, si es el cosmos un ser necesa-
rio, o una manifestación del ser necesario (panteísmo). Creado, si su ser es contin-
gente (capaz de existir o no) porque en este caso debe de haberlo recibido de—ha-
ber sido creado por el Ser necesario.
Por cuanto eternidad significa posesión perfecta del ser sin cambio, sin antes ni
después, de modo totalmente autosuficiente sólo Dios puede ser necesariamente
eterno, no puede serlo un ser limitado, ni un conjunto por grande que fuese de
seres limitados.
Un Universo material autosuficiente de características divinas: absolutamente
perfecto es contradictorio con el carácter limitado y cambiante de todo ser
material. La creación viene exigida por la existencia misma del Universo material,
sea cual fuere su historia.
En la reciente cosmología científica ha entrado por otra parte en juego el llamado
principio antrópico que apunta hacia un proceso cósmico planeado con vista al hom-
bre. Porque el Universo posee unas leyes y condiciones físicas iniciales ex-
tremadamente precisas, que si hubieran variado mínimamente, ya no habrían
permitido una situación apta para la vida en general en la Tierra, y para la vida
humana en concreto.
Por ejemplo: si la gravedad fuera un poco más intensa, las estrellas se consu-
mirían antes y no podrían tener planetas que pudieran albergar la vida, ni habría
habido tiempo para sintetizar el carbono (tan esencial para la vida, tal como la
conocemos actualmente); y si fuera más débil, el universo se habría expandido
aún más aceleradamente y no se habrían podido formar ni galaxias ni estrellas,
con lo que la vida también sería imposible. Los ejemplos en este sentido podrían
multiplicarse.

LECTURA RECOMENDADA
El Origen del Universo
En: Mariano Artigas y Juan José Sanguinetti, Filosofía de la naturaleza. 3ª parte
Capítulo II EUNSA 1993