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IDRC-MR182s

CLASIFICACIÓN DE SISTEMAS DE
FINCA PARA GENERACIÓN Y
TRANSFERENCIA DE TECNOLOGÍA APROPIADA
Seminario efectuado en Ciudad de Panamá,
Panamá, del 7 y al 12 de diciembre de 1986

Editor:
Germán Escobar

Este trabajo se publica luego de su edición por los autores. La División


de Comunicaciones del CIID no ha participado en esta edición ni lo ha
sometido a un comité de revisión técnica. A menos que se indique lo
contrario, los derechos del material aquí publicado pertenecen al autor. La
mención de una marca registrada no constituye un aval de dicho producto, la
misma se incluye solamente a título de información.
Contenido

Introducción 5

PRIMERA PARTE: Marco conceptual

Componentes, subsistemas y prioridades a nivel de fin-


ca que pueden servir como criterios para la clasificación de
fincas.
Robert Hart 9

Referencias, comentarios y posiciones preliminares en


torno al tema de enfoque de sistemas de finca y tipificación
de unidades de producción agropecuaria.
Mario Kaminsky 27

SEGUNDA PARTE: Aplicación a proyectos específicos

La construcción de una metodología de tipificación de fincas.


Ruth Suárez y Luis G. Escobar 39

Tipificación de pequeños agricultores: Ejemplo de la metodología


aplicada a los productores de fríjol de ltararé, S.P., Brasil.
Evaristo E. Miranda · 54

Técnicas de análisis multivariado y de programacion li-


neal en la evaluación de alternativas tecnológicas mejoradas
a nivel de finca: El caso de Estelí, Nicaragua.
Gustavo Calvo y Javier lcaza 90

Operacionalización del enfoque de sistemas en el INIPA:


Identificación de sistemas de producción.
José Gil y Wilfredo Caballero 120

Una tipología de sistemas de producción ganadera: Prime-


ra aproximación.
Equipo de Ganadería, DEA-UNAN 136

3
Caracterización de sistemas de producción agrícola de
pequeños y medianos productores de la cuenca del
Río Achiguate, Guatemala.
Ariel A. Ortiz, et al 171

Modelos y simulación para la transferencia de tecnología.


José Arze 179

Discusión general 195


Conclusiones 203
Anexos 205
Algunas citas significativas 207
Programa 215
Lista de participantes 218

4
Introducción
El Centro Internacional de Investigaciones para el Desarrollo (CllD) apoya
un número considerable de proyectos de investigación, dedicados a generar
tecnología apropiada de producción agropecuaria para las condiciones de los
pequeños productores de América Latina. Estas experiencias junto con las
aprendidas en proyectos similares de numerosas instituciones nacionales y region-
ales, han permitido identificar varios problemas empíricos en la aplicación de
conceptos teóricos y técnicas analíticas, a la tarea de generartecnologías eficientes
y adoptables.
El enfoque metodológico que se discute desde la década de los 70, ha
evolucionado hacia un consenso sobre las etapas más importantes que se deben
cumplir para la generación de tecnología, y que siguen un enfoque jerarquice de
siste-mas. Existe, sin embargo, una manifiesta debilidad en la solución de ciertos
problemas prácticos que permitan completar la aplicación de las etapas
metodológicas. Tal es el caso de la identificación de grupos objetivo diferenciados,
la determinación de funciones objetivo de los productores, el conocimiento de las
interrelaciones entre los componentes del sistema finca, y las relaciones de éste
sistema con el macro-sistema. Otro tanto sucede con el análisis dinámico de
registros y otros tipos de información de fuente primaria, la evaluación de alterna-
tivas tecnológicas dentro del sistema finca, y las estrategias de toma de desci-
siones.

Con el ánimo de contribuír a la solución de alguno de esos problemas, varios


proyectos de investigación iniciados recientemente y que cuentan con el auspicio
del CllD, han introducido en sus objetivos específicos el uso y adaptación de
técnicas analíticas. Estas técnicas permiten establecer marcos comparativos de
referencia y tienen la finalidad de generalizar métodos que imprimen precisión,
rapidéz y eficiencia a los esfuerzos de generación y transferencia de tecnología
para pequeños productores.

Este seminario ha sido el primer intento para intercambiar experiencias y


observar los avances técnicos de los proyectos, para análizar en forma crítica el
camino recorrido y al mismo tiempo estudir la conveniencia, el aporte y los méritos
de ese tipo de desarrollo metodológico. Con este fin se reunieron investigadores de
la Universidad de San Carlos de Guatemala, la Universidad Nacional Autónoma de
Nicaragua (UNAN), la Corporación de Estudios Ganaderos y Agrícolas (CEGA) y la
Universidad Javeriana, de Colombia, el Instituto Nacional de Investigación y
Promoción Agrícola (INIPA) del Perú, el Instituto de Investigación Agrícola y
Pecuaria (IDIAP), de Panamá y el Centro Agronómico Tropical de Investigación y

5
Enseñanza (CATIE). Participaron, así mismo, investigadores invitados del Instituto
Interamericano de Cooperación para la Agricultura (llCA), la Empresa Brasi-lera de
Investigación Agrícola (EMBRAPA) y Winrock lnterna-tional.

El tema central del trabajo metodológico fue la identificación de grupos


objetivos diferenciados. Las experiencias indican que la selección de áreas para
desarrollar proyectos de generación de tecnología incluye, usualmente, un alto
grado de heterogeneidad. Este se encuentra asociado no solamente con las
condiciones ecológicas, sino con los aspectos económicos de la estructura de
producción, la disponibilidad de factores de producción y la influencia de con-
dicionantes macro, como la especialización del mercado y el acceso a diversos
servicios de la infraestructura de producción.

Desde un punto de vista empírico, no son numerosas ni muy adecuadas las


herramientas para disminuír la heterogeneidad de las áreas bajo estudio. Estas no
permiten ga-rantizar cierta validéz de los resultados en el tiempo, y especialmente,
una diferenciación mutuamente exclusiva que haga posible la generalización y
evaluación de alternativas tecnológicas. Por ello, los proyectos de investigación se
han concentrado en el desarrollo de marcos teóricos y en la aplicación de técnicas
de clasificación de sistemas de finca, que faciliten el agrupar aquellas con condi-
ciones homogéneas y permitan determinar, en forma clara, grupos de trabajo
caracterizados, en los cuales sea posible conocer limitaciones y posibilidades para
la introducción de cambios tecnológicos.

El trabajo del seminario fue dividido en dos partes: Una primera, en la que se
presentaron y discutieron documentos sobre el avance de los proyectos de
investigación, así como las experiencias de los investigadores invitados; y una
segunda, en la cual los participantes se dedicaron a la discusión del tema de
investigación metodológica y al establecimiento de prioridades de investigaciones
sobre otros pro-blemas detectados en la práctica de generación de tecnología
apropiada. Esta organización se refleja en la presentación y ordenamiento del
presente documento. Los trabajos que en él se incluyen fueron seleccionados entre
los presentados durante la reunión. El criterio de selección se basó en el a-vanee
de los proyectos en el desarrollo de la metodología, incluida la formulación del
correspondiente marco teórico y analítico.

El éxito en la realización del seminario fué posible gracias a la amplia


colaboración de los investigadores asistentes y a la ayuda logística y secretaria!
de la Señora Gladiz de Galvis. El presente documento recoge el trabajo
pormenorizado de Jaime Rojas H., quien ha reconstruído los trabajos y discusiones
a fin de presentarlos de manera coherente.

6
PRIMERA PARTE
Marco conceptual

7
COMPONENTES, SUBSISTEMAS Y PROPIEDADES
DEL SISTEMA FINCA
COMO BASE PARA
UN METODO DE CLASIFICACION
Robert Hart*

Las fincas, como cualquier otro organismo, se pueden agrupar en conjuntos


según su similaridad. Los científicos se refieren a ellas com pequeñas o grandes,
de subsistencia o comerciales, y según su especialización como agrícolas, ganade-
ras o mixtas. Pero estas descripciones no guardan relación con ningun sistema
aceptado de clasificación. Los sistemas de finca se han categorizado, pero no han
sido sistemáticamente clasificados.

No existe un sistema de clasificación de sistemas de finca que sea en general


aceptado, debido a que hasta el momento no había tenido demanda. Pero hoy,
cuando las instituciones de investigación agrícola adelantan proyectos para mejorar
el desempeño de los sistemas de fincas, existe una gran demanda por un sistema
de clasificación. Este se requiere como un mecanísmo de ordenamiento teórico
para la investigación en sistemas de fincas, y como herramienta de comunicación
que facilite el intercambio de información entre los investigadores, y entre estos y
los extensionistas.

Un problema clave, sin embargo, es la carencia de conocimientos suficientes


sobre los sistemas de fincas, que permitan la estructuración de un mecanísmo
lógico de ordenamiento, aceptado por todos. Pero la herramienta de comunicación
es una necesidad inmediata. Esto ha ocurrido en muchas disciplinas científicas y la
solución ha sido proponer una clasificación preliminar basada en teorías aceptadas,
y luego agrupar los fenómenos según criterios prácticos de observación hasta que
la base de conocimientos se desarrolle lo suficiente como para permitir un cambio
de criterio. Por ejemplo, en teoría, el sistema filogenético utilizado por los biólogos
se basa en las relaciones evolutivas, pero en la práctica los primeros taxónomos
utilizaron criterios estructurales (semejanza entre órganos sexuales) como base
para la agrupación de organismos. También los especialistas en suelos han ideado
sistemas de clasificación basados en el orígen de los mismos y en las relaciones
teóricas entre clima y suelo, pero han utilizado criterios prácticos y mensurables
como la base real de agrupación.

* Funcionario de Winrock lntemational.

9
Este artículo no propone un sistema de clasificación de fincas; más bien se
refiere al difícil tema de los principios generales que puedan servir de base para una
clasificación. Su enfoque está basado en la aplicación de los princípios de sistemas
al estudio de fincas.

Con ese propósito, en la primera parte del documento se definen los


componentes, subsistemas, y propiedades a nivel de finca; en la segunda parte se
identifican los principios generales y las hipótesis específicas; y en la tercera y
última, se argumenta sobre la posibilidad de utilizar algunas propiedades esenciales
de los sistemas de finca como criterios de clasificación.

Componentes, subsistemas y propiedades a nivel de finca

El interés actual en la clasificación de sistemas de finca resulta,


principalmente, de un aumento en los proyectos de investigación agrícola con fines
de desarrollo. Tales proyectos utilizan (o dicen utilizar) conceptos de sistemas y
técnicas de análisis de sistemas. Ante esta realidad, cualquier búsqueda de
principios generales que pueda servir como herramienta de ordenamiento para un
sistema de clasificación, deberá partir del hecho de que una finca es un sistema. Las
fincas, como sistemas vivos que son, tienen en común con otros sistemas vivos
ciertas propiedades básicas que han sido estudiadas, clasificadas y definidas por
diferentes autores. A menos que se indique lo contrario, las definiciones de sistema
y sus propiedades, que se comentan a continuación, son todas de Miller (1978).

Definiciones

Un sistema es un conjunto de componentes interactivos. Los sistemas


físicos, en contraste con los sistemas abstractos o conceptuales, son acumula-
ciones no aleatorias de materia y energía organizadas en espacio y tiempo, que
tienen subsistemas y componentes interactivos e interrelacionados. La disposición
de los componentes y subsistemas le proporciona al sistema sus propiedades
estructurales, mientras que los cambios de materia, energía o información repre-
sentan sus propiedades funcionales.

Los teóricos generalistas de sistemas como Von Bertalanffy (1968} y Lazlo


(1972), han tratado el concepto de jerarquía de sistemas como paradigma central.
La visión del universo es la de una jerarquía de sistemas compuesta por distintos
niveles de organización. En cualquier nivel, un sistema funciona simultáneamnete
como subsistema del sistema próximo superior y como suprasistema de aquellos

10
pernecientes al nivel próximo inferior. Allen y Starr (1982) sugieren que los sistemas
individuales son niveles arbitrarios en jerarquías de sistemas continuos, y que los
niveles estan conectados por flujos de materia, energía e información. Los concep-
tos de sistemas jerárquicos se utilizan regularmente en las ciencias biológicas
(organismos-órganos-tejidos-células) y en las ciencias sociales (tribu-clan-familia-
individuo).
Hart (1980, 1982), Conway (1983) y otros, han propuesto los conceptos de
sistemas agrícolas jerarquícos como un marco útil para la investigación agrícola
orientada al desarrollo. Estos proyectos tienen, generalmente, metas de Macro-
desarrol/o, como el desarrollo regional; sin embargo, la propia investigación se
orienta a la generación de micro-tecnologías: nuevas variedades de cultivo. Estas
macro-metas de desarrollo se pueden ligar con los micro-objetivos de la
investigación, mediante la identificación de la jerarquia entre el sistema que se
quiere desarrollar y el sistema seleccionado para la investigación.
La Figura 1 representa una jerarquía de sistemas agrícolas con un sistema
de finca identificado como un nivel arbitrariamente definido. En esa jerarquía los
cultivos son componentes de sistemas de cultivo, los que a su vez son componentes
de ecosistemas agrícolas (explotaciones a nivel de parecla). Estos, a su turno, son
componentes de sistemas de finca, los cuales son componentes de sistemas
regionales mayores.
Una razón por la que se ha realizado relativamente poca investigación sobre
sistemas de finca, es que éstos han sido simultáneamente, áreas de interes para las
ciencias biológicas y las ciencias sociales. Los biólogos se han preocupado por el
estudio de poblaciones de plantas y animales, y por el de los sistemas de cultivo y
ganadería dentro de los cuales los primeros funcionan como componentes. Los
sació-lagos por su parte, se han han preocupado por la economía de la producción,
el mercadeo, los objetivos del productor, etc. Pero la agricultura comprende
componentes tanto bio-lógicos como socioeconómicos. Las propiedades estructu-
rales y funcionales que resultan de la disposición de los componentes y subsistemas
de los sitemas de finca, así como del procesamiento de materia, energía e
información, proporcionan sus características únicas. Esto implica que para el
estudio de sistemas se requieran conceptos, tanto de las ciencias biológicas como
de las ciencias sociales.
Para los propósitos de éste artículo, un sistema de finca se define como un
nivel de una jerarquía de sistemas agrícolas. Las fincas son sistemas con diferentes
tipos de recursos, procesos y componentes de producción, que los agricultores,
individual o colectivamente, combinan para formar subsiste mas. Estos subsistemas
convierten recursos en productos y productos en recursos, mediante la asignación
sistemática de recursos, la recolección sistemática de productos y el intercambio

11
REGION

,
' Comupidades
' ~ Agricolas
, r
,
, 1

/
/ COMUNIDAD

Centro Finca, Tipo 1


Urbano

Finca, Tipo 2-n


,
, --~~~~~~~~___,,
'
, SISTEMA DE FINCA

I Agroecosistema 1
Casa
,
Agroecosistema 2-n

'
'
Malezas Pred.
Paras.
ratog.
Cultivos ' Herb.
' ...
,, ''
/ Sistema De Cultiva ' '
Poblacio'n 1

Población 2-n

Figura 1. Ejemplo de una jerarquía de sistemas agrícolas.

12
igualmente sistemático, de ambos dentro del contexto socioeconómico del sistema,
de tal manera que éste se sostiene como un todo.

Componentes de la finca

Muchas veces la distinción entre un componente y un subsistema parece


arbitraria, pero si las fincas se conceptual izan como una familia (o grupo de familias)
dentro de un conjunto de procesos interactivos de orden principalmente biológico,
los elementos que forman cada proceso (recursos, unidades de procesamiento y
productos resultantes) podrán definirse como componentes de la finca.

El Cuadro 1 presenta doce diferentes tipos de componentes que se pueden


hallar en una finca. Estos se identificaron luego de asumir que una finca puede tener
cuatro clases básicas de procesos: 1) producción de cultivos (incluyendo silvicul-
tura); 2) producción ganadera (incluye toda clase de animales); 3) procesamiento
de productos; y 4) transacciones entre la finca y el ambiente que la rodea (incluído
todo tipo de compra, venta, comercialización e inversión). Cada u nade estas clases
de procesos requiere recursos, unidad de procesamiento y componentes de
producto.

Los componentes presentados en el cuadro son unicamente ejemplos.


Algunas fincas podrían tenertodos estos componentes, pero la mayoría no. Muchas
tendrán solamente los recursos para cultivo y ganadería (tierra, mano de obra, etc),
unidades de procesamiento (potreros, campos, corrales, etc.) y productos (granos,
leche, etc.). Otras fincas incluirán componentes de procesamiento, frutas frescas
(recursos), área de procesamiento, y frutas enlatadas (producto). Casi todas las
fincas, si no todas, tendrán componentes de transacción entre ellas y el ambiente
que las rodea. Aún aquellas que producen todos los alimentos que consume la
familia y no utilizan dinero, con frecuencia intercambian trabajo con los vecinos o
adquieren tierra mediante el sistema de aparcería.

Subsistemas de finca

Los doce tipos de componentes descritos fueron identificados por su rol en


las cuatro clases de procesos. Estos cuatro subsistemas de finca son del tipo que
toma los recursos y los convierte en productos (labor en grano, alimento en leche,
leche en queso, etc.). Pero las fincas tienen otros subsistemas que asignan
recursos, recoltan productos, toman productos de un proceso y los trasladan como
recursos a otro, etc.

13
Cuadro 1 . Ejemplo de doce diferentes tipos de componentes de sistemas de
finca.

Recursos Proceso Productos

Transacciones Dinero Compra Trabajo


dentro del
contexto de Grano Venta Dinero
finca
Dinero Inversión Dinero

Procesamiento Leche Queso por unidad Queso


de productos
de explotación Frutas Latas por unidad Fruta enlatada

Paja Unidad tejida Artesanía

Producción Trabajo Hato ganadero Animales vivos


ganadera
Forraje Rebaño de ovejas Leche

Medicinas Rebaño de cabras Abono

Producción de Tierra Cultivos Grano


cultivos
Trabajo Pastura Forraje

Semillas Arboles Combustible

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La Figura 2 presenta doce tipos de subsistemas de finca agrupados en cuatro
categorías: 1) subsistemas recurso-a-producto; 2) manejo de productos y recursos;
3) subsistemas producto-a-recurso; 4) intercambio de recursos y productos entre la
finca y los sistemas superiores.

El subsistema recurso-a-producto se utilizó como criterio para clasificar los


componentes de la fi nea. En la Figura 2 aparecen cuatro subsistemas de esta clase,
clasificados según su nivel en la cadena de procesos que pueden ocurrir en una
finca. La producción de plantas (incluyendo alimentos, forrajes, combustibles,
cultivos) está en un primer nivel, puesto que toma recursos naturales básicos y los
convierte en productos (plantas). La producción ganadera se identifica como un
proceso de segundo nivel, ya que uno de sus recursos básicos (alimento) es
producto de un proceso de primer nivel. El procesamiento de productos agrícolas
(elaboración de quesos, artesanías en lana, etc.) se identifica como un proceso de
tercer nivel, dado que, con frecuencia, uno de sus recursos es un proceso del
segundo nivel (ganado), aunque los productos de plantas también pueden ser
importantes recursos de procesamiento. El uso del recurso familia se define como
un proceso de cuarto nivel, puesto que en éste se maneja la información que afecta
todos los procesos inferiores.

Los subsistemas que regulan la asignación y recolección de productos son


igualmente importantes. Mediante estos subsistemas el productor toma decisiones
en cuanto a la cantidad de tierra y trabajo que se debe asignar a otros subsistemas
de finca. La recolección de productos implica decisiones: un producto se debe
almacenar, consumir en casa, o poner a la venta.

Los subsistemas producto-a-recurso conectan los subsistemas recurso-a-


producto que se encuentran en los tres primeros niveles. Dichos subsistemas
pueden ligar la producción de cultivos y animales mediante el uso de residuos de
cultivos para la alimentación (producto de cultivo-a-animal), y el uso de estiercol y
tracción animal como una entrada a la producción de cultivos (producto animal-a-
cultivo). Los subsistemas también trasladan productos de cultivos y de animales a
subsistemas de procesamiento de tercer nivel. La madera como producto de
subsistemas de planta, se convierte en un recurso para fabricar carbón de leña; la
lana, producto de un subsistema animal, se convierte en recurso para una unidad
de procesamiento de vestuario; etc.

Las unidades de finca en la Figura 1 estan definidas como un nivel arbitrario


en una jerarquía de sistemas agrícolas. Dado que las fincas se encuentran en el
área de transposición o traslape de los sistemas biológico y socioeconómico, el
límite entre la finca y la comunidad socioeconómica que la rodea no es siempre fácil

15
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¡ recursos
---,
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-- --\..- - - ... ..._ niveles de subsistemas

.
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Tipos de Subsistemas '
Recurso - producto , ' 3
*produccion de cultivos .:-._
*produccion de animales ',
*procesamiento de productos;
de cultivos y animales ~
* procesamiento de informacion ' '
''''
'
_____
Producto - recurso 2
*producto de cultivo a recurso animal
*producto de animales a recurso para ~ __.,
'
..
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cultivos 'I '1Jlantas
*producto de cultivos y animales a !... - --- ·'\cultivos)
recurso para procesamiento ',
'
*producto de procesamiento a recurso para produccio~
de cultivos y animales ',
,
'' 1

Manejo de recursos y productos ' }.... - --


*asignacion de recursos
*coleccion de productos '- - -
Intercambio con el ambiente socioeconomico
*cambio de produ~tos por recursos
*cambio de recursos por recursos

Figura 2. Doce clases de subsistemas de finca que convierten los recursos en


productos, o manejan productos y recursos, o convierten productos en
recursos, o intercambian productos y recursos con el contexto
socioeconómico del que forman parte.

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de identificar. Los subsistemas de finca que intercambian productos por recursos
(granos a cambio de dinero, animales por obligación trabajo futuro, etc.) y recursos
por recursos (trabajo por tierra, dinero por alimentos, etc.) traspasan el límite entre
la finca y su sistema superior.

Propiedades a nivel de finca

La Figura 3 es un diagrama de flujo de un sistema de finca que incluye todos


los componentes y subsistemas descritos anteriormente. Las entradas y salidas de
la finca han sido combinadas con los flujos de materia, energía e información que
ocurren dentro del subsistema finca, para formar un modelo generalizado del
sistema finca.

No todos los sistemas de finca tendrán representada en el diagrama la


totalidad de sus componentes, subsistemas, entradas y salidas. Muchas explo-
taciones tienen solamente cultivos o animales y no cuentan con un procesamiento
de productos. Pero en los trópicos del Tercer Mundo muchas fincas tienen por lo
menos un componente de los identificados en el diagrama y muchos de los
subsistemas, entradas y salidas.

El sistema finca, visto como un todo, tiene entradas de recursos naturales


(energía solar, tierra, agua, etc.) que sumadas al trabajo, las semillas -y en algunos
casos otras entradas- permiten obtener plantas (productos). Estos productos
pueden ser para consumo familiar o servir de alimento para los animales, también
pueden venderse para adquirir más entradas que permitan aumentar la producción
de cultivos y animales. Los subsistemas de asignación de recursos y de recolección
de productos sirven de unión entre los subsistemas de plantas, animales y
procesamiento, y entre éstos, la familia y los subsistemas que conectan el sistema
finca con el ambiente socio-económico que la rodea.

Principios generales de sistemas de finca

La descripción de fincas como sistemas que tienen componentes, subsis-


temas y propiedades, es un proceso de conceptualización. Esta consiste en la
aplicación de un modelo mental que permita verificar si los conceptos (en este caso
de sistemas) explican la realidad. Sin embargo, para llegara los principios generales
se requiere ir más allá de plantearpreguntasdel tipo estructura-función: ¿en qué for-
ma funcionan los sistemas de finca?y más bien plantear algunas del tipo estructura-
ambiente, como ¿Porqué, arreglosespecíficosdecomponentesysubsistemas, son

17
mano de obra, tierra
de cultivos
de animales
rocesados
..._ _ _ _ _ _ l
....- .,.....-... - --- .
r inversion

~"e·\
o-~~--~=- dinero

Figura 3. Diagrama de flujo de una sistema de finca con doce tipos de componentes
que procesan entradas mediante varios subsistemas. Estos convierten
recursos en productos, o productos en recursos. El sistema de finca asigna
recursos, recolecta productos e intercambia los mismos con el contexto
socioeconómico del que hace parte.

18
seleccionados en contextos ecológicos y socioeconom1cos igualmente
específicos? El primer paso es formular algunas hipótesis generales que relacionen
la estructura del sistema finca con el ambiente que le rodea. Dada la validéz de estas
afirmaciones, es posible formular hipótesis más específicas.

Planteamiento general

Antes de plantear cualquier hipótesis sobre el sistema finca y su ambiente es


necesario hacer algunos enunciados generales:

1. Los sitemas de finca son el producto de tres fuerzas generales: las características
del ambiente fisicobiológico; las características del ambiente sodoeconómico;
y las metas y habilidades del productor (individual o colectivo).

2. Las fincas, como sistemas ecológicos que son, no pueden actuar fuera de los
límites impuestos por los procesos fisiológicos que ocurran dentro de sus
componentes biológicos. Estos, a su vez, están limitados por la competencia
con otros componentes biológicos no agrícolas y por las características del
ambiente físico.

3. El comportamiento de las fincas, como sistemas socioeconómicos, está limitado


por la amplitud de decisión permitida al productor por el sistema social (político);
por el valor que el sistema económico asigna a los recursos y productos de la
finca; por la disponibilidad de tierra, mano de obra y capital; y por la disponibili-
dad de tecnología e información sobre la manera de combinar los componentes
disponibles en la finca (recursos, unidades de procesamiento y productos).

4. Como sistemas guiados por el productor, el comportamiento de la finca depende


de la percepción que éste tenga del ambiente ecológico y socioeconómico que
le rodea, y de su habilidad para procesar información y para manejar como un
todo los subsistemas y la finca misma.

Una implicación importante de estos enunciados generales señala que el


funcionamiento de la finca siempre estará por debajo de su potencial. No es posible
diseñar y manejar un sistema finca que utilice al máximo el potencial productivo del
ambiente ecológico, y que al mismo tiempo aproveche, también al máximo, el
ambiente socioeconómico y las habilidades del productor. Para aprovechar todo el
potencial del ambiente ecológico, el productor tendría que intervenir constante-
mente en los sitemas biológicos, y no tendría tiempo para obtener y utilizar la
información necesaria para sacar ventaja del sistema socioeconómico. O el tiempo

19
utilizado en aprovechar las ventajas del sistema socioeconómico no le dejaría
tiempo suficiente para manejar los sistemas biológicos. Los agricultores habitu-
almente admiten que "producen por debajo de sus conocimientos de como
producir". Estos sugiere que son concientes de que algunas de sus prácticas no son
ideales, pero que, limitados por su situación, las utilizan.

Por lo general los productores se proponen metas que nunca alcanzan o que,
quizá, no son realizables. Los componentes disponibles se combinan en subsis-
temas que interactúan para formar un sistema. Este funciona de tal forma que, o
bien es sostenible (porque no excede de los límites ecológicos, socioeconómicos
ni de habilidad) o no lo es (porque alguno de sus límites se ha excedido). Pero
ninguno de los límites ecológicos, socioeconómicos o de habilidad es constante.
Cada uno de elloscambiaamedidaque los sistemas climático, político y económico,
lo mismo que las habilidades del individuo, cambian.

Las fincas son dinámicas porque las metas de los productores nunca se
alcanzan completamente, y porque responden a los continuos cambios en los
ambientes ecológico y socioeconómico.

Princípios específicos

La Figura 4 resume un conjunto de hipótesis interrelacionadas. Estas se


pueden proponer como relaciones: a) entre fuerzas ecológicos y socioeconómicas
específicas y una estructura seleccionada de sistema finca; b) entre varias fuerzas
del ambiente ecológico; y c) entre varias fuerzas del ambiente socioeconómico. La
figura pretende enfocar la primera clase de relación. Una discusión sobre la relación
entre los elementos del ambiente ecológico (productividad natural-competencia
biológica) o entre los elementos del ambiente socioeconómico (poder político-
ingreso ), va más allá del alcance de este trabajo. Más aún, la figura implica
relaciones directas y simplistas entre estas fuerzas ambientales, que simplemente
son falsas.

Los siguientes enunciados son relaciones claves representadas en la Figura


4 y discutidas en la siguiente sección como un posible criterio para ser considerado
en el desarrollo de un sistema de clasificación:

1. Una importante fuerza motivadora (meta) de los productores es maximizar tanto


el acceso como el control sobre la tierra, el trabajo y el capital. Esta meta no es
lo mismo que el deseo de maximizar la producción (eje de las Y) o de maximizar
el ingreso (eje de las X).

20
Situacion de La Finca Disponibilidad de
Tierra, M/obra y Capital

A B

c
Ul
QJ
..-i Cll
Tipos de subsistemas
,..Cll ..-i
o
;:l u c= Cultivos
~
Cll ,..
ºM
C+A Cultivos y animales
r:: bO
Cll Ul
Cll C+A+P = Cultivo + animales
u o Cll + procesamiento
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ºM
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bO bO ;:l o ºM
Ul Ul "O p. ~
QJ QJ o Ul r::
ºM ºM 1-1 ºM Cll
¡:.: lid. p.. A u

Calidad (valor) de Biomasa

Disponibilidad de tecnologia pecuaria y de proces.

Ganancia economica

Riesgo economico

Enlace con el sistema social

Figura 4. Alternativas que presentan los subsistemas de finca frente a diferentes


contextos ecológicos y socioeconómicos.

21
2. La cantidad de biomasa producida (peso seco/unidad de área/unidad de tiempo)
es una función de varias características del ambiente ecológico (agua, suelo,
competencia biológica, etc.) y de la disponibilidad de tierra, mano de obra y
capital. Las fuerzas en los sitemas socioeconómicos afectan indirectamente la
cantidad de biomasa producida, mediante la regulación del acceso a la tierra, la
mano de obra, el capital y la tecnologóa. La cantidad de biomasa es también
afectada indirectamente por el valor (precio) que el sistema social da a los va-ríos
tipos de biomasa.

3. La calidad de la biomasa producida (valor) es una función de varias


características del ambiente socioeconómico. El rol que el productor desempeña
en un sistema social y político es, quizás, el factor más importante, puesto que
determina el acceso a la tierra, la mano de obra y el capital. El siguiente factor en
importancia es, probablemente, la forma como se establecen los precios para los
diferentes tipos de biomasa. La disponibilidad de tecnología que permita utilizar
biomasa de escaso valor en la producción de biomasa de mayor valor, puede
también afectar la calidad de la biomasa producida.

4. Establecida la disponibilidad de recursos (tierra, mano de obra, capital), de un


ambiente ecológico, y de situaciones en el ambiente socioeconómico (Figura 4,
ejemplos 1y11), los productores pueden elegir varios subsistemas. Por lo general,
cuando se desea producir una gran cantidad de biomasa de baja calidad se
seleccionan sistemas basados en cultivos; los subsistemas de forraje y ganadería
se seleccionan cuando se desea producir cantidad de biomasa, de calidad media;
y cuando se desea producir una baja cantidad de biomasa de alta calidad, se
escogen los subsistemas de cultivo o animales junto con los de procesamiento de
productos.

5. Los sitemas de finca pueden cambiar sus situaciones (por ejemplo de 1a11 o lo
contrario) cuando alguno de los ambientes (ecológico osocioeconómico)cambia;
o cuando las fincas aprovechan ventajas en cualquiera de estos ambientes para
adquirir tierra, mano de obra y capital. Esto se puede lograr manteniendo los
actuales subsistemas de finca o cambiandolos (y la estructura de la finca). Por
ejemplo: un mayor nivel de lluvia puede producir más grano del necesario para
adquirir más fertilizante del que se puede utilizar en la producción de mayor
cantidad de grano; todo esto sin cambiar la estructura del sistema finca. En forma
similar, un productor puede adquirir una nueva tecnología ganadera que le
permita convertir un residuo de cultivo de baja calidad en leche de alta calidad,
cuya venta facilite la compra de tecnología para la fabricación de quesos. En este
caso cambiará la estructura de la finca.

22
Posibles criterios de clasificación

Los principios generales así como las hipótesis más específicas relaciona-
das anteriormente, se basan en la presunción de que las fincas son sistemas de
valor agregado. Las ficas toman la luz solar, de bajo valor y la convierten en biomasa
de plantas, que tiene un mayor valor. Dadas una meta y unas relaciones entre el
sistema socioeconómico y el productor (que determinan el acceso a la tierra, mano
de obra y capital), éste tiene la opción de agregar un mayor valor a la biomasa si
la utiliza como alimento para el ganado; y todavía es posible producir una biomasa
de mayor valor, si a la biomasa de plantas y animales se le somete a un proceso de
tercer nivel.

Si se admite la aplicabilidad de los conceptos de sistemas presentados en la


primera parte de este trabajo, y la veracidad de las relaciones hipotéticas delineadas
en la segunda -dos suposiciónes quizás tenues- los criterios más importantes para
la clasificación de fincas serían los siguientes:

1. El acceso y control sobre la tierra (cantidad y tenencia), la mano de obra (familiar


u otra) y el capital (costo real del crédito para el productor, no la tasa de interés
bancario).

2. La productividad biológica (peso seco/unidad de área/unidad de tiempo), com-


parada con la productividad de los ecosistemas naturales en el mismo ambiente.

3. El valor total de la biomasa producida en la finca (ingresos brutos/unidad de área/


unidad de tiempo), comparado con el de la finca de mayor producción en la misma
región.

4. El número y tipo de niveles de subsistemas (cultivos, ganado, procesamiento) y


componentes encontrados en la finca.

El primer grupo de criterios está relacionado con el éxito del productor en


alcanzar la meta de maximizar el acceso a los recursos. El segundo se refiere a la
relación entre el sistema finca y el ambiente ecológico. El tercer grupo de criterios
contempla la relación entre el sistema finca y el ambiente socioeconómico. Y en el
cuarto grupo los criterios se relacionan con la estructura del sistema finca.

Antes de utilizar cualquiera de estos criterios en el desarrollo de un sistema


de clasificación de fincas, será necesario comprobar las hipótesis básicas sobre la
relación entre las metas del productor y las fuerzas de los ambientes ecológico y

23
socioeconómico. Aunque algunas de estas hipótesis, sin duda, resultarán de-
masiado simplistas o aún falsas, el solo hecho de refinar y comprobar las relaciones
deline-adas en este documento ayudará no solamente a entender la estructura del
sistema finca, sino que proporcionará conocimientos sobre el porqué de su
funcionamiento.

Literatura citada

ALLEN, T. F. H. y T. B., STARR. 1982. Perspectivas far Ecological Complexity. The


University of Chicago Press, Chicago. 31 O p.

CONWAY, G. R. 1983. Ecosystem Analisys. Imperial College Centre far Envirom-


ental Technology, ICCET Series E No. 1, University of London. 51 p.

VON BERTALANFFY, L. 1968. General Systems Theory. Gerge Braziller, New


York. 295 p.

HART, R. D. 1982. An Ecological System Conceptual Framework far Agricultura!


Research and Development. In: W.W. Shanner, P.F. Phillip, W.R. Schmehl
(Ed.) Readings in Farming Systems Research and Development, pp 44-58.
Westview Press, Boulder Colorado.

LAZLO, E. 1972. The System View of the World. George Braziller, New York. 131
p.

MILLER, J. G. 1978. Living Systems. McGraw Hill, New York. 1102 p.

24
Discusión

La discusión se planteó sobre dos preguntas principales: ¿Cómo funciona


una finca (estructura/función)? y ¿Porqué se presenta un tipo de finca en un lugar
y momento determinados?

En la primera parte de la discusión se confrontó la opción metodológica entre


tipificar el ambiente o las estructuras (condiciones internas de las fincas). De forma
análoga se confrontó la opción entre tipificar las fincas o los productores. En los dos
casos los conceptos son distintos y también influye laalternativadel investigador en
relación a sus objetivos. Hubo consenso en que quizás lo fundamental sea conocer,
explicar, tipificar y clasificar las relaciones entre ambiente-estructura o entre finca-
productor.

En la segunda parte de la discusión se reiteró que la tipificación, como punto


de partida para conocer el funcionamiento de las fincas, debe ser multivariada y la
consideración de las variables, simultánea; además, los criterios de selección
habrán de depender de los objetivos propios de los proyectos o de los investiga-
dores. Las variables de ambiente, tanto como las de estructura, pueden contribuír
a la tipificación de fincas, pero lo importante es encontrar las relaciones, las
evidencias de una lógica mayor a nivel del universo estudiado.

A continuación se análizó la relación que debería existir entre los comportam-


ientos de los productores y los tipos obtenidos en una tipificación. Una forma de
constatarlo es que, en la cuestión de riesgo, con frecuencia el enlace social de la
finca parece influír de manera "negativa" en las decisiones. Cuanto mayor es el
enlace social de la finca, parece ser mayor la naturaleza económica de los riesgos
que condicionan el comportamiento del productor. Cuanto menor es el enlace de la
finca con la economía y la sociedad urbana, la naturaleza biológica del riesgo que
condiciona su comportamiento parece ser menor.

Lo anterior señaló la importancia de detectar y comprobar la forma en que los


productores interna/izan -como sistemas de valores- esas influencias (¿cuál es el
objetivo del productor: maximizar venta, minimizar riesgo, acumular?, etc.). Es
decir, una tipificación de comportamientos.

Hart ha ilustrado las relaciones que se deben tener en cuenta en una


caracterización:

25
SOCIOECONOMICO
AMBIENTE PRODUCTOR ESTRUCTURA FUNCION
ECOLOGICO

Si las razones de la tipificación son también las de facilitar la comunicación


entre investigadores y entre éstos y los extensionistas, concluyó Hart, los técnicos
deberían estar dispuestos a proponer alternativas más drásticas, dado que la
dinámica de la realidad es muy grande, como también lo es la respuesta de los
sistemas. En la medida en que la investigación y la extensión trabajen juntas, los
problemas de comunicación se reducirán y habrá menos necesidad de utilizar la
teoría. La comunicación entre investigadores ya es difícil; pero la conceptualización
es un camino de ayuda que permite identificar mejor el objetivo (finca) y sus
patrones de evolución.

En éste sentido la tipificación es bien diferente de la tipología (poner rótulos),


que puede partir de situaciones a priori. La tipificación renuncia a poner rótulos e
intenta entender lo que acontece, para luego buscar respuestas a los problemas en
forma diferenciada. Porconsiguiente, la tipificación está en oposición a las actuales
políticas agropecuarias, que no se dirígen a un grupo en particular de productores
y terminan por favorecer solamente a una parte del universo.

Conceptualizar las fincas y sus relaciones internas y externas es una


estratégia completa, pertinente y económica que permite identificar lo que estas
hacen y la forma en que lo hacen.

26
ENFOQUE DE SISTEMAS DE FINCAS Y
TIPIFICACION DE UNIDADES DE PRODUCCION
AGROPECUARIA:
REFERENCIAS, COMENTARIOS Y POSICIONES PRELIMINARES*

Mario Kaminski**

El presente documento contiene, a título de primeras aproximaciones,


referencias y notas preliminares sobre el tema. No pretende un tratamiento
exhaustivo ni riguroso del mismo, mucho menos sistemático. Se trata apenas de
apuntes que intentan incorporar temas relevantes acerca del tópico general sujeto
a discusión, cuyo propósito es llamar la atención y actuar de recordatorio.

Mucho de lo que podrá encontrarse a continuación puede perder vigencia o


ser inadecuado, en función de los objetivos específicos que se vayan poniendo de
manifiesto a lo largo del seminario; pero tampoco puede excluirse que tenga mayor
vigencia o grado de adecuación que lo previsto originalmente.

El concepto de sistemas

El enfoque de sistemas es esencialmente una forma de percibir problemas.


El análisis de sistemas es la tarea de entenderlas partes, una vez establecido el tipó
de síntesis que el enfoque adoptado debe producir. Análisis es, en este sentido,
describir y explicar el comportamiento del sistema.

La tipificación de fincas se vincula necesariamente con el enfoque de


sistemas. Cada tipo de empresa representa un sistema de producción, que a la vez
se integra a un sistema económico-social agregado. Desconocerlo es un error
-evitable si se tiene claridad de objetivos- en el que parecen incurrir algunas
tipificaciones. Por esta razón, en las tipificaciones usualmente requeridas en
economía agrícola, investigación tecnológica y extensión, es importante elegir
atributos que permitan explicar comportamientos diferenciados ante distintas
medidas de politica económica.

Para adoptar decisiones de politica es indispensable conocer las condi-


ciones reales en que se desarrolla la producción, y en particular, las motivaciones
• El conjunto de citas que el autor consideró significativas para el tema del seminario se incluyen como un anexo de esta
publicación, página 211.
•• Funcionario del Instituto Interamericano de Cooperación para la Agricultura (llCA).

27
del productor, su comportamiento ante el marco económico vigente y sus modifica-
ciones. La tipificación de sistemas de productores de acuerdo a sus condiciones
productivas y su comportamiento en relación con factores de índole económica,
constituye una base necesaria para aumentar la eficiencia de medidas de política
que pretendan modificar las actuales formas de producción. Comprobada la
factibilidad económica de la adopción de nuevas técnicas que hacen posible
aumentar los niveles de producción, es necesario investigar en qué medida el
comportamiento real de Jos productores responde a las motivaciones consideradas
como objetivo de los modelos técnicos.

Los factores de diferenciación entre empresas agropecuarias son diversos:


el grado de desarrollo económico y social de la región donde se ubica la finca; el tipo
de relaciones de producción predominante; la aptitud de los recursos naturales de
la zona y el acceso a los mismos; la dotación de factores productivos; la naturaleza
y características de la producción y su vinculación a los mercados; el sistema de
tenencia de los recursos; etc. Es obvio que cualquier decisión en materia de política
agropecuaria promovida por el Estado, así como la evaluación de sus resultados,
deberá reconocer esa heterogeneidad. Esto es más válido para aquellos casos en
los que se desea ponderar el impacto de la política agropecuaria sobre el medio
rural, en términos de objetivos de planificación más complejos: distribución intrasec-
torial y regional de ingresos, metas de producción, etc.

A continuación se presentan algunas características que distinguen el


enfoque/análisis de sistemas de producción:

- Investigación aplicada, orientada a la solución de problemas.

- Naturaleza totalizadora.

- Modelamiento/s multi/inter/disciplinario.

-Centrado en los problemas de grupos de productores, relativamente


homogéneos.

- Reconocimiento del productor como elemento clave del sistema de


producción.

- Preocupación por las interrelaciones con la investigación básica.

- Orientación a la acción, dinámico y adaptativo.

28
- Evalúación en torno a resultados de técnicas de producción eficientes y
adoptadables por grupos específicos de productores (especialmente
pequeños productores).

- La investigación aplicada está orientada a la solución de problemas


específicos.

Una de las tareas principales del economista agrícola que actúa en el


contexto de enfoque/análisis de sistemas de fincas es la asistencia para identificr
y definir las circunstancias de los grupos-objetivo de productores.

En la investigación de sistemas de fincas se reconoce la importancia de la


recolección de datos a nivel de unidades de producción. Sin embargo, muchos
investigadores que han realizado esfuerzos en este sentido (incluyendo economis-
tas), se ve limitados muchas veces a realizar análisis descriptivos de status-quo ,sin
entrar a analizar las bases de información, para prescribir -o sugerir al menos-
cambios deseables en los sistemas.

El enfoque/análisis de sistemas de fincas tiene como justificación y atractivo


su lógica intrínseca de búsqueda de entendimiento, que se aparta de los incon-
venientes del reduccionismo y el mecanicismo. El mismo conduce al recono-
cimiento de que los sistemas agrícolas globales tienen una intencionalidad; com-
prenden partes físicas, biológicas y sociales; y funcionan dentro de ambientes
(sistemas?) que también poseen elementos de intencionalidad.

El enfoque/análisis de sistemas de fincas es un proceso que estudia un


universo, especifica un sub-universo relevante, su desempeño y las variables de
"ambiente" que lo constriñen; en igual forma, determina las relaciones mutuas entre
las variables de ese subuniverso, y entre estas y las del "ambiente" o sistema
superior; por último (pero claramente no en importancia) recompone el sistema para
que se desempeñe de manera óptima, en función de ciertos objetivos (que distan
mucho de ser los tradicionales de las investigaciones disciplinarias).

El estudio y la praxis de ese proceso comprende, típicamente, las siguientes


etapas y funciones básicas: desarrollo de un modelo de investigación, síntesis e
interpretación de la información; formulación de modelos corregidos; y síntesis de
la información relativa al desempeño de los modelos formulados.

El cumplimiento de estas etapas y funciones presupone que en el proceso


ha habido un delineamiento adecuado del sistema relevante. Este no es un
problema facil, ya que la determinación de los límites del sistema constituye uno de

29
los factores más importantes del alcance y de la intensidad del trabajo de
investigación/análisis de sistemas. Este es factor sobre el que, desafortunada-
mente, existen pocas directrices. Es precisamente aquí donde los procesos de
tipificación estan llamados a jugar un papel estratégico para Ja revitalización del
enfoque.

La tipificación de sistemas de finca es útil -entre otros- para desarrollar los


siguientes aspectos generales del enfoque/análisis de sistemas: investigación
(aislamiento de grupos de sistemas suficientemente homogéneos para permitir la
construcción de una unidad modelo típica representativa); planificación (empleo del
modelo representativo típico para evaluar la viabilidad y resultados de, por ejemplo,
prácticas tecnológicas innovadoras); y extensión (entrega a los servicios de
diseminación, de recomendaciones apropiadas para los grupos-objetivo, con-
venientemente tipificados.

Algunos ejemplos específicos de lo anotado son el uso de la tipificación de


sistemas de finca para: generación de hipótesis (para iniciar nuevos caminos de
investigación); clasificación de variables (según su comportamiento y distribución);
ajuste estadístico y simulación de modelos (para identificar debilidades en sistemas
de producción específicos); comprensión de datos (mediante la identificación de
subconjuntos de variables típicas o representativas, o de sistemas típicos o
representativos, en ambos casos a partir de universos más numerosos y por lo tanto
intratables o dificilmente tratables); inspección a fondo (mediante, por ejemplo,
estudios de casos identificados en los procesos de tipificación) de los tipos
conformados (tendientes, por ejemplo, a la identificación de "innovadores", etc.).

El concepto "tipificación"

El para qué la clasificación o tipificación debe ser el punto de partida. La


adecuación de una técnica específica a un fin de clasificación depende de -y
presupone- una adecuada especificación del para qué de la clasificación o ti-
pificación.

Si ciertas variables no han sido o no pueden ser medidas, no significa que


deban ser ignoradas al momento de agrupar por "/a" variable de tipificación, ya que
pueden ser responsables de influencias perturbadoras. Es importante tratar de
aislar el efecto perturbador espúreo del factor tamaño.

30
El investigador debe diferenciar aquellas situaciones en que un método
revela o confirma una interesante estructura inherente a ciertos datos o a cierto
problema, y aquellas en que la metodología impone una estructura inex-sistente.

En este sentido, Cualquier aplicación mecanicista y torpe de las técnicas


lleva a condiciones nocivas desde un doble punto de vista:

- Los resultados son inconducentes para los objetivos explícitos o implícitos.

- Se derivan rechazos de las técnicas por usuarios potenciales, que sí podrían


obtener resultados conducentes.

Estos efectos nocivos hacen daño a las técnicas estadísticas y a la


estadística en general; pero el mayor daño se da en el sentido de que no se obtienen
resultados útiles, que de otra manera se podrían obtener.

La correlación canónica en procesos de validación de tipificacionese s


relevante para entrar a considerar rigurosamente hipótesis muy importantes, como
laque postula la asociación entre estructura y comportamiento. Esto es central para
propósitos de análisis de política agropecuaria en sus distintas formas. Un esbozo
de la aplicación de este tipo de inquietud, sujeto al carácter meramente experimen-
tal ("toy problem", como se lo define allí mismo) del ejercicio, puede encontrarse en
"Tipificación de Conglomerados y su Análisis de Estabilidad". Publicación
Miscelánea, No. 166, llCA, Bogotá, 1977. (Documento PROTAAL No.8).

La metodología desarrollada recientemente por el autor de estas notas,


basada en el estudio y la experiencia a lo largo de años, ofrece -entre otros- el
atractivo de dirigirse (y consecuentemente basarse) en dos problemas omnipresen-
tes en ejercicios de tipificación: por un lado, la inestabilidad de los grupos o tipos
resultantes; y por otro, la presencia de unidades (sistemas, productores, etc.)
"residuales", "transicionales", o como quiera llamárselas. Esta categoría puede ser
explícita o puede ser implícita, (dependiendo de las técnicas y algoritmos de
clasificación que se empleen); pero en cualquier caso es dafíina, y por lo tanto
conviene que sea explícita.

El primer problema no ha sido suficientemente estudiado ni puntualizado en


la literatura previa; el segundo lo ha sido en contados casos, pero el "remedio" no
ha aparecido. Tal vez se presente la ocación de expandir el tema durante el
desarrollo del Seminario, y al mismo tiempo presentar las trazas más destacadas
de la metodología heurística, desarrollada y aplicada ya en varias oportunidades.

31
El resultado general más amplio de investigaciones ya concluídas es que
diferencias de estructuras productivas y de rasgos socio-culturales del productor,
determinan diferencias estadísticamente significativas en el tiempo de uso de Ja
tecnología disponible. Los sistemas de producción de los grandes grupos básicos
identificados son distintos y la tecnología disponible sólo se adapta razonablemente
al grupo empresarial.

A continuación se presenta, resumida, una selección de las conclusiones y


recomendaciones del Seminario sobre Métodos y Problemas en Tipificación de
Empresas Agropecuarias, llevado acabo en Montevideo, Uruguay, en diciembre de
1975:

- Los trabajos que usualmente emplean tipificación de empresas agropecuarias


suponen la necesidad de reconocerque distintos casos responderán de manera
diferenciada a diversos tratamientos de política económica.

- Las actividades de clasificación no deben estar orientadas hacia las técnicas.

- En toda actividad de investigación, la combinación de diversos métodos y


técnicas puede ser conveniente y necesaria.

- Seremos capaces de decir más sobre estas recomendaciones del Seminario a


medida que avancemos en el proceso de interacción entre teoría y aplicaación.
Por el momento, la teoría en que se basan las técnicas lleva la delantera. Son
necesarias más y continuadas aplicaciones para mejor conocer, evaluar y
mejorar las propiedades, ventajas y limitaciones de las técnicas.

- En todo proceso de clasificación se hace necesario recomendar el uso conjunto


de diversas técnicas posibles de clasificación. La obtención de agrupamientos
similares mediante el uso de distintas técnicas, sugeriría la robustezdel proceso
de tipificación que se intenta. Esta cuantificación podría llevarse a cabo
computando varianzas dentro de grupos de diversas características.
- Se deben reconocer las limitaciones de trabajos con estadísticas puntuales,
obtenidas por cortes transversales. Si se acepta que un tipo viene conformado
-entre otros atributos- por su permanencia y estabilidad relativa en el tiempo,
ello lleva a insistir aún más sobre este punto. Parece indispensable iniciar
esfuerzos serios de constitución y operación de paneles de productores que
permitan conocer, en forma razonable, el proceso de posible cambio de
sistemas particulares en una muestra representativa de las poblaciones rele-
vantes.

32
- Pasos recomendables en futuros trabajos de tipificación:

* Definición de objetivos y metodología; a ellos debe responder la tipificación.

* Definición del papel de la tipificación y hacer explícitos sus objetivos.

* Indagación de atributos relevantes para discriminar entre sistemas, en función


de lo precedente.

* Evaluación y selección de las técnicas de tipíficación que más se adecúen a los


objetivos.

*Aplicación de la metodología; caracterización de sistemas-tipo y determinación


de su representatividad.

* Integración de los resultados al proceso global de investigación de sistemas.

A manera de resumen tentativo e incompleto se presentan las siguientes


clases de tipificaciones:

Estratificación de unidades de producción. En la práctica parten de una variable,


sin especificación del por qué de su selección y, casi siempre, fundamentada
implícitamente en apriorismos e intuiciones.

Tipologización de unidades de producción. Una ''tipología" (como distinto de


tipificación), caracterizada por el predominio casi total o absoluto de apriorismos,
algunas veces fundamentados en la teoría o en evidencia empírica suelta, no
sistemática.

Clasificación "administrativa" de unidades de producción. En general es el


resultado de las actividades de unidades generadoras de estadísticas a nivel global,
como oficinas de censos, oficinas de estadísticas nacionales, etc. Este tipo de
clasificación puede mostrar un alto nivel de elaboración ("sofisticación:) y
básicamente se fundamenta en apriorismos y orientaciones de "propósito múltiple".
En materia de antecedentes más desarrollados de esta clase, la búsqueda debe
orientarse a Europa (en especial a Francia, Alemania, Holanda, y la CEE). Una
característica de los resultados de las clasificaciones administsrativas lo constituye

33
el hecho de que la aplicacione de criterios aparentemente similares o muy próximos
entre sí, rinden resultados (particiones) completamente diferentes del universo
sometido a prueba (generalmente poblaciones de unidades de producción
agropecuaria de carácter muy amplio, como, por ejemplo, el país).

Tipificación "propiamente dicha": Naturalmente, esta no se basa en ninguno de


los criterios o modalidades mencionados arriba, sino en procesos dirigidos por un
propósito único, (generalmente bien determinado) o en todo caso limitado (pero
alejado de orientaciones de "propósito múltiple"). La selección de variables
adecuadas se hace en función del propósito y la teoría subyacente o disponible; y
se aplican técnicas estadísticas o cuantitativas que, en general, rinden particiones
típicas relevantes, generalmente fundamentadas en criterios de minimización de
varianzas intra-grupo/maximización de varianzas inter-grupo. Los resultados de
esta tipificación son, generalmente, sometidos o se prestan a validaciones objeti-
vas.
•••

DISCUSION
1. Proceso estructura-comportamiento: Cómo funciona? Como propósito de
política lo que interesa es el comportamiento diferenciado de ciertas poblaciones
gruesas. Si se pueden descubrir ciertas asociaciones entre estructura y compor-
tamiento, es posible conocer el último medio por la primera, que es de fácil acceso
cuantitativo. Se usaría el estudio estructural como proxi de comportamiento, si se
puede establecer el carácter de su asociación. Un caso específico es el trabajo de
Friedman sobre el impuesto negativo a nivel experimental, en el cual se analizó el
comportamiento bajo condiciones estructurales de impuestos. Esta es una
hipótesis que podrá llevar a gran cantidad de información.

2. El ejemplo de Colombia. Las relaciones entre mano de obra y disponibilidad de


capital (escaso entre minifundistas) daban lugar a cambios de comportamiento en
el uso de la mano de obra. Muy buena experiencia recopilada en la presentación;
pero se sigue buacando el uso de análisis estadístico. No se incluyen los conceptos
de validación ni dinamísmo, que permiten asegurar la estabilidad de los grupos.

34
3. ¿Cómo se relacionan heterogeneidad y una muestra paqueña? El tamaño debe
ser suficiente como para tener en cuenta la varianza tan grande que existe,
dependiendo de la intención de la tipificación. Cuando se quieran determinar
subpoblaciones, será necesario aumentar la muestra.

4. Inquietudes de la finca hacia adentro. El comportamiento a nivel individual puede


entenderse en forma diferente y también su relación con la estructura. ¿Para qué
tipificamos? es una pregunta vital que se debe responder a micro-nivel. ¿Cómo se
relacionan las tipificaciones con la problemática fisico-biológica a nivel de finca? ¿La
validación se refiere al método o a la comparación de varios métodos? En una
tipificación, ¿cómo se plasmaría el elemento dinámico dentro de la homogeneidad
fisico-biológica; ¿cómo ayuda la tipificación a manejar esa variabilidad? La
variación se refiere a los tipos determinados. ¿Son los grupos realmente significa-
tivos de comportamientos reales? También se incluye validación de métodos en el
sentido de cuestionar si sirven para lo que se quiere lograr.

El elemento dinámico es muy importante y debe incorporarse paulati-


namente al estudio de tipificación. Se asocia como cambio a través del tiempo pero
puede asociarse a cambios en factores ambientales. Este elemento implica la
necesidad de dar seguimiento a los grupos afectados.

5. La relación estructura-comportamiento es un proceso que relaciona


características físicas y de tenencia. Pero, ¿son estas variables válidas? Es
necesario estar seguro de para qué se quiere tipificar. En general la partición por
tramos puede ser muy ineficiente debido a la interacción de varia-bles. Si se desea
clasificar por variables, estas no se deben tratar en forma separada, sino en
conjunto.

6. El tamaño de la muestra de aproximadamente 50 cosos puede parecer pequeño,


pero una muestra mayores difícil de manejar. No existe una receta para determinar
el tamaño de la muestra; pero cuanto más pequeña esta sea, más grande será la
variación de los estimados. De ser posible, se debe hacer un esfuerzo por achicar
la varianza. Es necesario replantear el universo que nos interesa y plantear además,
la representatividad del grupo y dentro de éste la representatividad de la muestra.
Una alternativa es llegar al nivel de finca por etapas, partiendo de universos
representativos desde niveles más altos (país región, etc).

35
7. Cuando la muestra está referida a una variable, ¿cuál debe ser esa variable o
cuales aquellas que se deben seleccionar? La teoría de muestreo es univariada;
para muestrear universos multivariados se deben construír indicadores sintéticos a
fin de poder aplicar la teoría de muestreo. Este paso requiere una gran cantidad de
información. Un método univariado toma ciertas interrelaciones entre variables, lo
que ofrece más posibilidades que una variable con cero interacciones en otras
variables. Los estudios previos sobre una zona, tales como la determinación de
áreas agroecológicas ó agroeconómicas, permiten homogeneizar un poco el
universo del que se tomará la muestra, aunque la determinación de tamaño sólo se
haga en una variable.

8. Implicaciones metodológicas de la formulación de hipótesis que permiten


establecer criterios de tipificación. Si se sigue el método científico, este proceso
facilita la tipificación. El entronque de la teoría con la tipificación son las variables
que pueden ser utilizadas. No hay inconveniente en teorizar en el equipo teórico.
Si existe un buen conocimiento, es necesario elaborar hipótesis y reducir el número
de variables, lo mismo que el ruido asociado; por el contrario, cuando es poco lo que
se conoce puede ser aconsejable consignar un gran número de variables.

9. Escoger variables con la mayor variabilidad no es necesariamente un buen


criterio de selección. El conjunto puede jugar un papel muy diferente a la varianza
de una variable específica. El poder diseminatorio del conjunto no necesariamente
se relaciona con la varianza de una variable. De hecho, las variables se toman
homogeneizadas (con varianza= 1), lo que demuestra la poca importancia de las
variables individuales.

1O. ¿Cómo se utilizaría la tipificación para la extrapolación de tecnología? No es


posible crear un tipo de finca indefinido. Los modelos universales pueden no existir
en la realidad. Es necesario repetir el ejercicio para los casos específicos.

36
SEGUNDA PARTE
Aplicación a proyectos
específicos

37
LA CONSTRUCCION DE UNA METODOLOGIA
DE TIPIFICACION DE FINCAS
Ruth Suárez y Luis Guillermo Escobar*

La investigación aquí comentada tiene el propósito de diseñar una


metodología sencilla de clasificación de pequeños productores que permita identi-
ficar rápidamente los principales problemas de una región, y señalar la forma más
efectiva de contribuír a su solución, tomando en consideración los efectos para la
finca en su conjunto.

El estudio obedece a una preocupación primordial de las entidades que se


ocupan del sector agropecuario y de la seguridad alimentaria en el país, dado que
en Colombia los pequeños productores estan ampliamente vinculados a la oferta
de alimentos en las ciudades.

Enfoque de la investigación

El primer paso consistió en selecciónar el punto de vista más conveniente


para el estudio de la finca. Una opción era tipificar algunos de sus componentes
basicos, como mano de obra familiar, magnitud de los recursos, ingresos y egresos,
etc.; pero se corría el riesgo de excluírotroscomponentesque entonces no parecían
importantes, y de perder de vista la mutua interacción de los elementos que
conforman la finca en un sistema complejo. En los dos casos la capacidad de
predicción y de explicación del estudio se afectaría sensiblemente.

Otro punto de vista más amplio y adecuado, contempla el caracter adaptativo


de la pequeña producción. Es conocida la flexibilidad de la finca de subsistencia
para adecuarse a diferentes circunstancias. La pequeña producción sobrevive a las
variaciones del medio, y las asimila tomando distintas formas de organización. Su
respuesta ante nuevas circunstancias no es la transformación radical, sino la
adaptación mediante modificaciones sucesivas -activas o pasivas- que garantizan
su supervivencia. Las unidades empresariales concebidas para obtener ganancias,
y que para su desarrollo requieren una infraestructura productiva y comercial
mínima, carecen de esta flexibilidad.

• Funcionarios de la Corporación de Estudios Ganaderos y Agrlcolas (CEGA), de Colombia.

39
Metodología

Partiendo de los anteriores puntos de vista, se planteó una metodología que


permitiera identificar los diversos condicionantes internos y externos de la pequeña
producción, así como las respuestas particulares de las fincas a estos condicionan-
tes. Los resultados se obtendrían en dos sentidos: de una parte, la relación de las
fincas con el medio, y de otra, la relación de los mecanismos particulares de
funcionamiento de la finca y sus respuestas a estímulos externos. El primero
permitiría identificar tipos de finca, y el segundo proporcionaría elementos de juicio
para prever el comportamiento de las fincas ante diversos cambios.

Los criterios de clasificación serían los que, de manera más amplia, permi-
tieran identificar una serie de relaciones en cadena, desde los criterios condicionan-
tes, hasta los elementos que estructuran la finca y que determinan la organización
de la producción. Pero si unavezseleccionado un criterio, no hubiese comprobación
de su clara relación condicionante, éste sería abandonado y se reemplazaría por
otro que permitiera la formulación de hipotesis y su clara comprobación en el campo.

La aplicación de la metodología se planteó en dos frentes: uno. de


elaboración de hipótesis respecto a los condicionantes externos de la finca y otro,
de permanente comprobación en el campo, que permite aceptar, rechazar o
replantear las hipótesis preliminares. La zona seleccionada como objeto de estudio
es una comarca de pequeños productores, con una diversidad de circunstancias
naturales, geográficas y por tipo de productos, que facilita el estudio de las
comunidades, de acuerdo asu diferente ubicación respecto a un gran centro urbano
de consumo.

La metodología utilizada tiene un sentido inverso res-pecto a otras que


parten de un trabajo estadístico previo. En esta, la búsqueda se orienta a establecer
relaciones cualitativas significativas, que una vez seleccionadas y estructuradas en
un sistema denominado finca, se someten a comprobación estadística. Aunque los
riesgos son notables, la metodología brinda oportunidades para plantear hipótesis,
descartarlas e introducir otras nuevas; pero el procedimientos es largo y no hay
garantía de obtener resultados.

Para la ejecución del proyecto se plantearon cuatro etapas: La primera, de


corta duración, contempla una revisión bibliografica y la definición tanto de los
criterios de clasificación como de las hipótesis. La segunda etapa comprende el
estudio de las relaciones condicionantes de las fincas a traves de la región. Estas
dos primeras etapas ya han sido ejecutadas. La tercera etapa, la más prolongada,
se concentrará en el estudio de la finca desde su perspectiva de funcionamiento. Y

40
en la cuarta y última, de concluírse su viabilidad, se comprobará la tipología
diseñada en las etapas anteriores. Cada etapa está estrechamente relacionada con
la anterior y la siguiente, dado que cada una proporciona elementos de juicio para
formular nuevas hipótesis o replantear las existentes.

Parte 1

LA FINCA DESDE LA PERSPECTIVA REGIONAL

En Colombia la mayor parte de la pequeña producción se sitúa sobre Los


Andes o en la Costa Atlantica, regiones ampliamente influídas por el desarrollo de
las ciudades más importantes. Casi toda la oferta de alimentos de los pequeños
productores se destina a las ciudades, por lo que en gran parte está sometida a la
influencia directa del mercado. Las zonas de colonización estan menos sujetas a
esta influencia, pero en ellas la porción de pequeños productores es menor.

El estudio se podía enfocar con dos criterios: uno, la identificación de


aspectos dinámicos de la región que pudieran influír en las fincas; y dos, bajo el
criterio de mercado. Dadas las características de la producción nacional anotadas
anteriormente, el segundo criterio parecía servir como punto inicial para la
observación de contrastes.

En la primera etapa del proyecto se seleccionó una zona de exploración de


tamaño restringido, conformada por cinco municipios que comprenden toda la
gama de pisos térmicos y cuya producción se destina al consumo interno y a la
expor-tación. Estos municipios, que se relacionan con un epicentro comarcal, estan
situados a diferente distancia de Bogotá, gran centro de consumo urbano.

De los cinco municipios anteriores se seleccionaron dos aproximadamente


homogéneos por el tipo de producción y de clima, con el fin de observar con mayor
nitidez los contrastes entre dos zonas productoras con diferente ubicación respecto
al mercado mayorista: una situada relativamente cerca de Bogotá y la otra alejada
(dos horas y media y seis horas, respectivamente).

Las hipótesis

Con anterioridad al inicio del trabajo de campo se formularon algunas


hipotesis relacionadas con el impacto de las diferentes distancias al mercado y su
influencia en las fincas.

41
Se consideraba que los municipios cercanos al mercado mayorista
estarían más tecnificados y especializados, tendrían un mayor poder de
negociación y, en el caso de que fuese posible la mecanización, mostrarían
condiciones más atractivas para el afianzamiento de grandes productores.
También se consideraba que en épocas de sobreoferta, podrían desalojar a
los más alejados del mercado, debido a su mayor especialización.

Por otra parte, se estimaba que si en estos municipios coexistían


grandes y pequeños productores, los segundos probablemente estarían
sometidos a una presión más intensa para introducir técnicas nuevas,
similares a las de los primeros, bajo el riesgo de desaparecer de la
producción en el caso de no acceder al cambio o de reducir su oferta a
mercados locales, con menores posibilidades de venta.

La hipótesis inicial consideraba que los productores más grandes de


los mercados más alejados, estarían en condiciones de competir con los de
mercados más cercanos a los centros urbanos, mediante volúmenes y
mecanización; se pensaba, en cambio, que los pequeños productores no
podrían hacerlo y posiblemente destinarían la mayor parte de su producción
a abastecer los mercados más próximos.

Otros aspectos de las hipótesis también preveían que los comercian-


tes más grandes y especializados probablemente acopiarían la producción
de los agricultores de mayor tamaño, y fijarían los precios en el mercado
local. Se esperaba que los acopiadores tradicionales comprarían la
producción de los pequeños productores; estos posiblemente no serían
especializados y no tendrían la misma capacidad de negociación y venta en
el mercado mayorista, que los más grandes.

De ser ciertos estos comportamientos hipotéticos, se podría afirmar que los


factores de cambio de la pequeña producción dependen de las mayores posibili-
dades de venta, y que estas inducen a que la especialización y la tecnificación se
extienda en una misma región, de los productores más grandes hacia los más
pequeños y luego hacia los más grandes de las regiones más alejadas. Aún así,
sería factible el crecimiento autónomo de la producción en la región más alejada, si
la integración del mercado fuese puramente local y si la demanda de los municipios
cercanos estuviese en ascenso.

Partiendo de estos planteamientos preliminares, y con el propósito de


precisar los efectos que en los pequeños productores tienen las diferentes distan-

42
cias al mercado, se elaboró una regionalización de la pequeña producción y de su
comercialización, para identificar los flujos de venta y el grado de integración al
mercado.

Conjuntamente con estas exploraciones, se planteó el estudio de las


características de los intermediarios, lo mismo que de los criterios en que éstos se
basan para la fijación de precios.

La comprobación en el campo

De antemano se conocía la conveniencia de llevar a cabo el estudio con un


equipo multidisciplinario; pero en el transcurso del trabajo se hizo evidente la
dificultad para integrar visiones fragmentadas y surgió la necesidad de ampliar el
horizonte de quien observa, más allá de su propia disciplina. A medida que avanzó
el trabajo de campo fue notoria la ausencia de respuestas nítidas, ligadas exclusi-
vamente a criterios económicos; también fue evidente la imposibilidad de separar
las circunstancias económicas, de las geográficas, sociales, culturales e históricas.

Para analizar la comarca y su dinámica, se efectuó un diagnóstico de


reconocimiento. Los resultados muestran que los municipios de mayor población
rural se caracterizan por ser los más antiguos y por tener una mayor capacidad de
producción y más opciones de venta (mejores tierras, disponibilidad de agua,
producción con venta segura o cercanía a los mercados mayoristas). Estos
municipios tienen mayor densidad de población y en ellos se presenta una intensa
presión sobre las tierras. Cuando la demanda por estas, lo mismo que su frac-
cionamiento, son excesivos, la tasa de migración rural aumenta. Sin embargo, esta
migración parece más acentuada en aquellos municipios con escasas posibilidades
de venta permanente de productos, a pesar de tener tierras disponibles a precios
inferiores.

También se encontró que el esquema demográfico rural de la región en su


conjunto parece reproducirse en el municipio: la población campesina tiende a
agruparse en las tierras quebradas más fértiles, dotadas de mayores recursos
productivos y con mejores posibilidades de venta permanente (las zonas planas
mecanizables presentan un fenómeno contrario: hay mayor concentración de la
propiedad). A medida que las oportunidades de venta se distancian y disminuyen
las posibilidades de obtener varias cosechas con mercados mayoristas, el tamaño
de la finca aumenta y la tierra tiene precios más bajos.

Los servicios comunales muestran características acordes con la

43
distribución de la población rural. Las fincas situadas en la franja de mayor densidad
de población tienen más vias de comunicación, servicios, luz, agua y créditos. Por
esta razón no se aprecia mayor diferencia entre las fincas -en cuanto a su distancia
al mercado se refiere- cuando ellas se concentran en los sitios más poblados.

Por otra parte, los factores de atracción de la población no son solamente de


tipo agronómico o económico, sino social y recreativo, de manera que los habitan-
tes, además de producir, desean mejorar su nivel de vida de acuerdo a los patrones
de la comunidad.

El tipo de organización de la población en la región y dentro de un mismo


municipio está relacionado con lo que se encontró al explorar el criterio mercado:

Contrario a lo que se pensó inicialmente, en zonas de pequeños agricultores


no es muy notoria la influencia de los grandes productores. La presión de las familias
sobre las tierras con limitantes de mecanización, cuya producción tiene más
posibilidades de venta, restringe el acceso de los grandes productores. En la
medida en que el municipio es más antiguo, el número de grandes productores
desciende; lo mismo acontece con la extensión de sus tierras: estas disminuyen,
pero se conservan las mejores, las mecanizables. La mayor parte de la producción
que se negocia en el municipio más cercano es abastecida por los pequeños
agricultores. Muchas veces los grandes productores no intervienen en forma directa
en la fijación de precios para el mercado local, dado que suelen negociar direc-
tamente con los comerciantes en el mercado mayorista.

Otro hecho posible, que estaría en contradicción con las hipótesis iniciales,
es que no existe una relación entre el tamaño de los intermediarios y el de los
productores, ni su grado de especialización. Las zonas de pequeños productores,
desde las más cercanas hasta las más alejadas, abastecen el mercado mayorista
a cuya influencia estan sometidas. La producción la obtienen con recursos mone-
tarios que son igualmente apreciables para las zonas lejanas o cercanas, y para
continuar participando en el mercado mayorista todos deben producir en forma
intensiva.

Aparentemente existen algunos mecanismos para evitar que la producción


con mayores costos de transporte debidos a la distancia, sea desplazada por las
áreas productoras más cercanas a los mercados mayoristas.

Uno consiste en abastecer la demanda de alimentos que más consume la


población, porvolúmenes y por frecuencia. Cuanto más distantes se encuentran las
zonas productoras del mercado mayorista, mayor es la tendencia a que la finca

44
cultive alimentos de amplio consumo, cuyos mercados, integrados a nivel nacional
o regional, ofrecen garantía de absorber toda la oferta. A menudo la seguridad de
venta es estimulo suficiente para la producción, a pesar de que los ingresos netos
sean inferiores a los de las zonas más cercanas a los centros urbanos, debido al
diferencial de costos de transporte.

Otra forma de amortiguar el impacto de los costos de transporte en las tierras


más alejadas, es la venta de productos que incorporan un alto valor por unidad o la
salida de los productos en épocas de altos precios.

Las zonas especializadas, que tienen ventajas ecológicas o conocimientos


exclusivos sobre técnicas de manejo, aseguran la venta total en condiciones
atractivas debido a los altos rendimientos o a la calidad especial de sus cultivos, a
pesar de que en muchas ocasiones los productos no corresponden a mercados
plenamente integrados.

La cercanía de los municipios productores al mercado mayorista parece


influír más en las oportunidades de venta, que en la ampliación de la capacidad de
producción y especialización en un cultivo. En la pequeña producción este hecho
se manifiesta en la posibilidad de mantener una oferta más continua de alimentos;
con ella se sostienen simultaneamente varios mercados mayoristas ó la producción
en que se especializa la finca tiene un flujo de permanente salida (el caso de las
hortalizas).

El uso intensivo de mano de obra que demanda la producción con salida


continua, influye en el abandono de los cultivos extensivos. En los dos municipios
explorados en este proyecto se encontró que el más alejado sólo abastecía un
mercado mayorista con integración nacional, mientras que el más cercano
abastecía tres mercados mayoristas: dos integrados localmente, con flujo de salida
prácticamente regular, y uno integrado nacionalmente de carácter estacional.

Los intermediarios se especializan según el tamaño de la oferta de los


municipios. En la medida en que la oferta global adquiere dimensiones apreciables
-independientemente del tamaño de los productores- los comerciantes mayoristas
son especializados, aumenta su capacidad de compra y venta en los mercados, y
también el tonelaje de sus vehículos. Los precios del mercado local son determina-
dos por los grandes intermediarios, pero éstos, a su vez, toman como referencia el
precio del mercado mayorista.

La integración de los mercados es manifiesta, dado que aún en los municip-


ios cercanos a las zonas productoras hay influencia de los precios del mercado

45
mayorista. Cuando se presenta una sobreoferta los precios en el mercado ma-
yorista se deprimen a tal punto, que los detallistas de los municipios próximos a las
zonas de producción prefieren abastecerse en él, antes que a través de los
productores locales.

A medida que las zonas productoras se alejan del mercado mayorista y


experimentan restricciones para sostener mercados urbanos amplios, por la
dificultad de efectuar ventas permanentes (costos de transporte y baja competi-
tividad), la producción secundaria -no sujeta a la competencia de los mercados
mayoristas- se destina al consumo local. Pero dada la limitada capacidad de
absorción del mercado local, no hay garantía de venta para toda la producción. Los
agricultores, en consecuencia, cultivan en pequeñas áreas, en forma rústica y
extensiva.

Los acopiadores tienen características acordes con este tipo de oferta: no


son especializados, el tonelaje de sus camiones es pequeño y su capacidad de
negociación débil. Entre productor y comprador se presenta un alto grado de
apreciación subjetiva en la fijación de precios.

El mercado y la finca

La estructura de comercialización tiene repercusiones de importancia en la


forma de organización de la finca. La integración de varios productos con mercado
mayorista en una misma finca permite la conformación de una inversión rotativa y
permanente, estimulada por ciclos cortos de erogación y de recuperación de gastos
monetarios. Esta inversión rotativa, a su vez, consolida la producción múltiple y
contra-rresta las ocasionales caídas de producción que pueden ocurrir por
depresión de los precios. "Los mejores precios de un producto compensan los bajos
precios de otro", es la forma en que los campesinos expresan esta misma idea.
Pero, al mismo tiempo, la existencia de varios productos con mercado mayorista
en una misma finca impide el crecimiento de la producción ante una mayor demanda
coyuntural.

Los intermediarios más grandes señalaron cómo, a pesar de garantizar la


seguridad en la compra de los productos con mercado mayorista s-no necesa-

riamente mejores precios- encuentran lento el crecimiento de la producción re-


gional. Este escaso dinamismo dificulta su expansión, a tal punto que prefieren
competir con otros intermediarios en regiones más dinámicas.

46
El riesgo de pérdida de la inversión yde la fuente más importante de ingresos
para la subsistencia de la familia es mayor en zonas de pequeños productores, que
sólo cuentan con una salida estacional de sus productos y no tienen garantías de
precios estables en el mercado mayorista. Por las características anotadas, y por
tener una mayor disponibilidad de tierras, las zonas de pequeños agricultores con
una oferta de productos limitada y estacional estan más predispuestas al cambio,
si éste garantiza una salida permanente de la producción. Mientras ésto no ocurra
el uso de capital continuará siendo poco intensivo, debido a que la inversión no es
rotativa sino de largo plazo.

Las caracteristicas comentadas acerca de la estructura de la


comercialización de la pequeña producción, proporcionaron una idea bastante
general sobre la configuración que podría tener la producción de la finca en las
regiones más alejadas de los centros urbanos (un cultivo con gastos monetarios,
con otros explotados en forma extensiva), lo mismo que en las zonas más cercanas
(varios productos con gastos monetarios y mayor continuidad en las salidas de
cosechas).

Parte 11

ORGANIZACION DE LA PRODUCCION

El siguiente problema consistió en buscar la forma de diferenciar las fincas


sometidas a influencias similares, de caracter natural o regional, bajo diversos
criterios de organización de la producción.

La hipótesis preliminar señala que a través del ordenamiento de la


producción en la finca se expresan condicionamientos y necesidades rela-
cionados con el uso de la mano de obra familiar, los hábitos de autoconsumo,
el aprovechamiento de efectos residuales, y la disponibilidad de recursos.

Para su verificación se preparó una segunda aproximación que permitiera


observar como se particularizaban las circunstancias regionales en la finca. Al
efecto se realzaron encuestas sistemáticas de profundidad, por pisos térmicos, con
el fin de establecer franjas de observación en fincas situadas en condiciones
similares, que permitiesen distinguir la variariación en las formas de organización
de una finca a otra.

Conocidos los cultivos más adecuados para varios pisos térmicos, así como
aquellos principales con mercados mayoristas, se establecieron alternativas de

47
ordenamiento de fincas bajo diversos criterios. Algunas opciones contemplaban
formas de organización de la producción por lotes y arreglos, orientados a efectuar
un mejor aprovechamiento de la mano de obra; otras, preveían sistemas
particulares de rotación con diversos productos destinados al autoconsumo y al
mercado local; y en otras, se pensaba que la producción mayorista tendría diversas
proporciones, según el diferente impacto de los precios en cada finca.

La comprobación en el campo

Para la comprobación en el campo se seleccionó un solo municipio en el cual


se efectuaron varias encuestas de profundad en las diferentes franjas de pisos
térmicos, defi-nidas con unos 300 metros de diferencia. Nuevamente, en esta etapa
de comprobación, se encuentró ladificultaddequien observa, para lograr una visión
íntegra de la finca.

En ese momento se consideraba que la producción reflejaría, ineludible-


mente, los aspectos vitales y cotidianos de quien produce. Sin embargo los
resultados mostraron que las alternativas de organización de la producción
diseñadas previamente, no eran tan variadas como se pensaba. Por el contrario, en
una franja homogénea de piso térmico, los cultivos más importantes con mercado
mayorista predominan en todas las fincas en proporciones más o menos similares.

La producción complementaria, que se suponía bastante heterogénea entre


una finca y otra, resultó ser más o menos la misma en una franja definida, sólo que
explotada en proporciones diversas, ya fuera para autoconsumo o para mercado
local. Ocasionalmente se encontraron algunas fincas que diferían completamente
del resto en la forma de explotación y tipo de cultivos, pero estas se consideran
excepciones que aprovechan conocimientos exclusivos en cuanto a técnicas y
manejo de los cultivos.

Se identificó una franja de transición entre el municipio en estudio y el


municipio más cercano. En ella la producción es más variada, ya sea porque los
intermediarios del municipio cercano compran la producción ó porque su ubicación
permite al campesino trasladar, en forma continua y por su cuenta, las cosechas al
mercado.

Los pequeños productores se integran colectivamente en el municipio al cual


confluyen con sus cosechas. Esta integración, que imprime cierta similitud a la
producción, se ha establecido a medida que las condiciones del mercado se tornan
atractivas para productos iguales, por la seguridad y facilidad de la venta y por los

48
precios. Es un proceso simultáneo: a medida que el mercado ofrece más garantías,
la producción se amplía y consolida por el intercambio de opiniones y experiencias
de los productores en el punto de venta de sus cosechas.

La cercanía a los grandes centros urbanos aumenta las posibilidades de


acceso al mercado mayorista para varios productos; pero se presentan exigencias
en cuanto a las calidades que tienen mayor acogida en el mercado, exigencias que
definen las condiciones más adecuadas para la producción. Los cultivos que por su
importancia se destacan en la finca, usualmente se desarrollan en las mejores
condiciones naturales, las cuales permiten utilizar un determinado nivel de
tecnología para satisfacer los hábitos de consumo de la población urbana. Cuando
en las zonas quebradas hay escaso control sobre el medio natural -como es usual
en áreas de pequeños productores- los medios más propicios para los cultivos o las
actividades pecuarias suelen coincidir con franjas definidas de altura, humedad,
precipitación, etc.

Pero en los demas pisos térmicos, no igualmente adecuados, se puede


introducir un producto secundario que aproveche la existencia de un mercado
seguro y estable en la región, en lugar de cultivos que, a pesar de encontrarse en
su mejor medio, no tengan una producción contínua o carezcan de garantías de
venta.

La explotación de cultivos en medios inadecuados tiene consecuencias en


la calidad, que puede ser deficiente debido a rendimientos menores y a costos de
producción más elevados. Mientras los ingresos son aceptables estos aspectos no
parecen apreciables al productor; pero las diferencias entre las zonas más propicias
y las marginales se acentúan cuando se presenta depresión en los precios,
aumento de costos de producción ó se introducen insumos costosos o variedades
más adaptables a las condiciones naturales óptimas. Las áreas marginales se
convierten entonces en áreas críticas, dispuestas al cambio.

Durante la etapa de comprobación se observó la desaparición de varios


cultivos que, siendo principales, se encontraban en áreas cuyas condiciones
naturales no eran las mejores para su desarrollo. En estos casos confluyeron
condiciones críticas de venta, precios bajos, alto costo de insumos y la opción de
nuevos mercados.

El gremio de cafeteros ha aprovechado estas franjas críticas para adelantar


una política de diversificación en zonas marginales, basada en la sustitución del
café por otro tipo de cultivos. Esta política tuvo acogida en circunstancias de precios
bajos y aumento en el costo de los insumos.

49
La presencia de franjas críticas es bastante generalizada cuando hay varios
mercados mayoristas en una región con diversidad de pisos térmicos. Existen
razones para que así sea. En zonas de pequeños productores, la formación de
volúmenes que puedan ser adquiridos por los grandes intermediarios es propor-
ciconal a la cantidad de familias que se dedican al mismo cultivo. Si la magnitud de
la producción es apreciable, aumentarán no solamente los servicios de comer-
cialización e intermediación, sino la seguridad en la venta y las relaciones con los
acopiadores. Todo esto contribuye a ampliar y fortalecer la oferta mayorista, lo cual,
a su vez, refuerza los incentivos para tener en la finca un cultivo secundario. Parece
probable que en una región de pequeños productores, mientras más segura sea la
venta de varios productos con mercado mayorista las fincas tendrán una
combinación frecuente de uno o varios cultivos principales con mercado mayorista,
y productos secundarios, también con posibilidades de venta mayorista.

Los aspectos comentados permiten precisar factores de ordenamiento de la


producción agrícola, lo mismo que algunas circunstancias que pueden provocar
cambios en ella; pero no permiten establecer diferencias entre diversas formas de
organización de las fincas.

Los aspectos sociales y la finca

En el trabajo de campo se encontraron también otros elementos de


diferenciación que no habían sido considerados, como el ciclo biológico de la
familia, su estructura cualitativa y el papel de las herencias.

Desde el punto de vista economico, la familia recien formada tiene las


mayores dificultades: Si no posee tierra seco nvierte en arrendataria, compra tierras
inferiores o forma compañías en las que aporta su trabajo; además, su
consolidación económica se dificulta por los hijos. En cambio, la madurez es la
mejor época de la familia. En ese momento las tierras han aumentado y la familia
cuenta con una mayor capacidad productiva, porque los hijos, ya crecidos, aportan
su trabajo. En la vejez de los padres la familia se fragmenta y ya la finca no se cultiva
con la misma intensidad que en el pasado. Los miembros viejos de la familia
financian compañías y aportan tierras, pero no trabajo, ó se dedican a actividades
que utilizan la mano de obra en forma extensiva.

Las herencias influyen en la posibilidad que tiene la familia para organizarse


y avanzar más o menos rápidamente. Cuando la familia se inicia sin herencias, su
crecimiento es restringido; aunque puede alcanzar un nivel de vida aceptable,
según la región donde se encuentre. Sin embargo, las posibilidades más altas de

50
crecimiento las tienen las familias que al inicio de la vida conyugal, cuentan con
alguna base de recursos. En los dos casos la elección siempre es del individuo.

El desarrollo urbano de la región influye en forma notable sobre la familia. Si


éste es elevado, aumentarán las oportunidades laborales y educativas que pueden
estimular la migración o la introducción de modificaciones en la forma de explotación
de la finca (más intensiva o más extensiva).

Conclusiones

En términos generales, los pequeños productores no muestran un esfuerzo


intencional hacia la consecución de un fin. Las mayores posibilidades de venta no
se aprovechan en la ampliación de la oferta individual con el fin de aumentar
ganancias, sino que se utilizan para sobrevivir ó mejorar las condiciones de vida.

Dentro de una misma región no hay una actitud -al menos notoria- de
búsqueda de cultivos o de adaptación de variedades que provoquen innovaciones
en la producción. En los casos estudiados en los cuales se presentaron cambios
radicales de producción, fue evidente la presencia de un agente externo, con cuyo
concurso se introdujeron en la región, semillas, cultivos, técnicas de producción,
hábitos de consumo, etc.

Las zonas productoras más dinámicas en la introducción de cambios son


aquellas que están en contacto permanente entre sí o con expertos de entidades
de fomento, y que a través del intercambio de experiencias generan cambios
frecuentes. Es el caso de los productores que se desplazan con mayor regularidad
al epicentro regional, vinculado con un gran centro urbano como Bogotá No
presentan la misma dinámica quienes se encuentran más alejados del epicentro o
quienes no necesitan desplazarse con frecuencia fuera de la región.
Las estrategias de producción de la finca tampoco parecen orientadas hacia
un fin preconcebido de aprovechamiento de la mano de obra o de autoconsumo;
parecen más bien una serie de respuestas pasivas y coordinadas a las condiciones
internas y externas. Pero la sola visión de la finca desde el exterior-como hasta el
momento se ha enfatizado en éste trabajo- no proporciona explicaciones acerca de
la forma en que la finca asimila las circunstancias internas y externas, mediante
decisiones y nuevas formas de adaptación. Por esta razón se considera necesario
cambiar el ángulo de observación para situarlo en la perspectiva de la finca. Esto
permitirá analizar las circunstancias y la forma en que el pequeño productor decide
la organización de su explotación.

51
La segunda etapa de trabajo de campo ha mostrado que la investigación no
puede restringirse al aspecto de producción, así se la conciba como un resultado
complejo de circunstancias que exceden la órbita de una sola disciplina.

Hay situaciones que no son explicables solamente desde el punto de vista de


la producción, dado que esta se genera en un medio condicionante, que incluye
aspectos tan variados como la migración, los gastos de consumo urbano de las
familias, la actitud frente al cambio, etc. El estudio de la finca trasciende la
producción y debe buscar una relación más íntegra con el individuo. Se trata de
descubrir como la interacción de factores económicos, sociales, políticos, culturales
y naturales, influyen sobre las familias, y la forma como estas responden con su
producción y consumo a los cambios, a las convenciones sociales y en general, a
lo que se considera patrones más humanos de vida.

***

DISCUSION

De acuerdo con las intervenciones de los participantes, la discusión de este


trabajo cubrió tres tópicos principales: a) algunas definiciones puntuales; b) el
enfoque teórico del trabajo; y c) algunas sugerencias e interpretaciones de los
resultados parciales de la investigación adelantada por CEGA.

Las aclaraciones puntuales se refieren principalmente a las definiciones de


los conceptos de finca y sistema de finca, y al procedimiento de generación de
hipótesis y su confrontación con las condiciones de la zona de estudio, antes de la
comprobación cuntitativa. Estos puntos fueron aclarados por los autores del trabajo.

La discusión relativa al marco teórico del trabajo se centró en la importancia


de la influencia del mercado como factor de diferenciación entre fincas, el énfasis
en la explicación de comportamientos a nivel de finca y, en general, en la
determinación cuidadosa de un marco teórico que se traduzca en hipótesis de
trabajo. Se comentó que el acceso a centros y mercados urbanos parece influír el
grado de especialización e intensificación de los productores, en contraposición con
áreas más apartadas de los núcleos de mercado. Los productores tienden a
diversificar sus actividades y a producir para mercados locales, generalmente no
especializados.
Se cuestionó la explicación de comportamientos a nivel del productor frente
a condiciones regionales, en lugar de concentrar los esfuerzos en .variables que
expliquen diferencias entre fincas y permitan concretar más rápidamente una
clasificación. La discusión de este aspecto produjo un consenso sobre el peligro de

52
tipificar sistemas de finca a priori, dado que la realidad cambia con rapidez. Por esto
se hace necesario determinar no sólo variables, sino procesos más estructurales
que, si bien son dinámicos por naturaleza, se mantienen a traves del tiempo y
permiten establecer diferenciaciones más permanentes.
En relación con el punto anterior, se exploró la posibilidad de determinar un
patrón de cambio en el tiempo para conocer el continum de transición entre
condiciones regionales y de finca "tradicionales", hacia las condiciones más
"modernas" que caracterizan las áreas rurales.
Entre las sugerencias de los participantes en la discusión se planteó la
posibilidad de identificar patrones de producción y consumo que permitieran
caracterizar el "nivel de evolución" de las fincas en el tiempo, y utilizar esta
información para complementar el análisis de otros procesos ligados a condiciones
estructurales de las fincas. Sobre este tema, los autores enfatizaron la fuerte
relación que se empieza a encontrar entre esos procesos, las fincas y la regiónes.
Este tipo de interacción podría plantear la necesidad de clasificar regiones y no
necesariamente fincas, ya que los procesos y las variables ligadas a ellas no afectan
fincas individuales, sino comunidades y regiones. Las diferencias particulares entre
fincas podrán estar dadas, entonces, por características muy particulares, pero que
no necesariamente son variables estructurales, ni permanentes.
Hubo acuerdo entre los participantes sobre la necesidad de continuar
elaborando un marco teórico generalizable, que permita establecer líneas de
hipótesis sobre procesos y variables estructurales. Estos podrán ser aplicados
calificadamente a condiciones reales, con fines de separar o agrupar fincas y micro-
regiones, como población objetivo para desarrollar tecnología apropiada y para
aplicar decisiones de política específica que permitan acelerar los procesos de
cambio.
Finalmente, se discutió la conveniencia de incluír algunas actividades del
pequeño productor -especialmente las innovaciones tecnológicas- como una
posible condición del proceso evolutivo de una región.

53
TIPIFICACION DE PEQUEÑOS AGRICULTORES:
EJEMPLO DE LA METODOLOGIA APLICADA A LOS PRODUCTORES DE
FRIJOL DE !TARARE, S.P., BRASIL

Evaristo E. Miranda*

La diversidad y complejidad de las situaciones que viven los pequeños


productores son fenómenos facilmente perceptibles. Sin embargo, para apreciar la
estructura de algo tan complejo, de manera que permita agrupar esa realidad en
unidades más homogéneas, se requieren exigencias metodológicas que, a veces,
parecen más complejas que el objeto mismo del estudio. Ante esa dificultad,
frecuentemente se opta por subestimar la diferenciación campesina; se trabaja
entones con promedios, estudios de caso o recetas, con paquetes tecnológicos,
productores patrón o típicos, etc.

La definición de una tipología de productores es inseparable de las hipótesis


y conceptos que el investigador utiliza de manera más o menos objetiva. El primer
interrogante que se debe plantear cuando se quiere hacer una tipología, es la
finalidad de su utilización. Cuando los objetivos del estudio son restringidos la tarea
es más fácil, dado que bastará un simple ordenamiento o clasificación de los
productores. Por ejemplo, la tipología de productores para un programa de
introducción de la tracción animal utilizará criterios principales como existencia de
animales de tracción en la finca, fuerza de trabajo disponible, profun-didad y
pedregosidad de los suelos, etc. En ese caso se trata de una partición de lo real, a
través de algunos criterios que indicarán la posibilidad de introducir y extra-polar
una técnica o un resultado. Ese tipo de análisis ayuda a definir una estrategia de
acción adaptada a la situación estudiada y no plantea grandes problemas
metodológicos de ejecución.
Una tipología de productores que permita definir la muestra base para un
programa de investigación y desarrollo rural, debe resultar de un censo de su
realidad, a priori desconocida. Ese estudio de la finca como un todo debe conducir
a tres resultados principales: 1) descripción de las situaciones existentes en cada
finca, que incluya la importancia relativa con respecto de las demás; 2)
confirmación, parcial o total, de las hipótesis formuladas al inicio de la investigación;
y 3) selección de variables que contribuyan de manera determinante en la
diferenciación de los productores.
La finca se puede enfocar a diversos niveles, y la pormenorización del
enfoque dependerá de los objetivos de la investigación y de los medio
metodológicos y logísticos empleados.
* Coordinador de Investigación, Centro Nacional de Investigación y Defensa de la Agricultura, CNPDA/
EMBRAPA, Brasil.

54
metodológicos y logísticos empleados.

Este documento resume las principales etapas metodoló-gicas utilizadas en


la tipificación de los pequeños productores de ltararé (Figura 1): el fruto de un
proyecto de investigación financiado por el Centro Internacional de Investigaciones
para el Desarrollo (CllD), ejecutado entre julio de 1985 y junio de 1986 por el Centro
Nacional de Investigación y Defensa de la Agricultura (CNPDA/EMBRAPA) y la
Coordinadora de Investigación Agropecuaria del Estado de San Pablo. Los datos
obtenidos fueron procesados en Montpellier, Francia, gracias a la colaboración del
PRIFAS/CIRAD, dentro del Convenio EMBRAPA/CIRAD, Proyecto de Ecología
Operacional.

El área de estudio

El municipio de ltararé tiene una extensión cercana a los 2000 km 2 (Figura


2). En 1980 su población era de 37,758 habitantes, de los cuales el 64.5% vivía en
la zona urbana. Las pequeñas fincas representaban el 87.1 % de los estableci-
mientos rurales y sólo ocupaban el 16.9% del área agrícola. Esa importante y
característica concentración de los predios tiende a aumentar. El índice de Gini
pasó de 0.7936 en 1950 a 0.8387 en 1980. Según éste último censo, cerca del
21.5% del área del municipio estaba ocupada con cultivos temporales, contra 11.5%
en 1960.

Gracias a condiciones climáticas favorables, en ltararé se producen dos


cosechas de fríjol anuales, una de verano y otra de invierno, con lo cual la región
contribuye con el 15% de la producción nacional, equivalente al 65% de la del
Estado de San Pablo.

Para caracterizar las diferencias entre los pequeños productores del mu-
nicipio, se definieron etapas metodológicas que permitieran señalar las condi-
cionantes de naturaleza agroecológica y socioeconómica que pesaban sobre las
fincas.

La tipificación de los agricultores, de sus sistemas técnicos de producción y


de los problemas que limitaban su productividad fue la primera etapa de un proceso
que tenía como fin definir una serie de experimentos multilocales y multifactoriales.
El confrontar las alternativas tecnológicas disponibles en estaciones experimen-
tales de investiga-ción con los problemas identificados a nivel de los agricultores
que limitan su producción y productividad- debería generar los sistemas alternati-
vos que serían examinados. Esos experimentos no solamente deberían probar la
tecnología a nivel de agricultor -prueba que debería realizarse dentro de una

55
UNIVERSO DE LOS AGRICULTORES
4

¡
UNIVERSO DE LOS PEQUEÑOS PRODUCTORES

l'
DIFERENCIACION CAMPESINA

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SITUACIONES AGRICOLAS
1 1

TIPOLOGIA(S)
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Muestra de fincas
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Muestra de productores

Figura 1. Proceso metodológico utilizado en la definición de muestras y tipologías


de productores rurales.

56
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Figura 2. Municipios que conforman la Oficina Regional de Gobierno, EPG de


ltapeva.

57
muestra representativa- sino definir y valorar sistemas alternativos a partir de los
problemas identificados en las propias fincas.
Pero para que ese tipo de trabajo pase de ser un simple estudio de caso, a
una verdadera experimentación que permita generalizaciones y que esté basada
en una tipología de productores, se requiere un muestreo correcto.

Método de obtención de datos

El obtener información a nivel de productores rurales implica la formulación


de una serie de hipótesis en cuanto a la estrategia de muestreo y el tipo de encuesta
que debe ser adoptada. Desde hace varios años EMBRAPA viene consolidando
una experiencia con ese tipo de encuesta; cerca de 25.000 agricultores en
aproximadamente 100 municipios ya fueron objeto de investigaciones de esa
naturaleza. Las razones para definir la naturaleza de la tipología que se quiere
obtener deben ser tomadas en cuenta desde el inicio del trabajo. En ltararé la
investigación consideró dos puntos fundamentales e inseparables para la obtención
de datos: la estrategia de muestreo y el tipo de ficha o cuestionario que sería
utilizado en las encuestas.

Estrategia de Muestreo

Con el fin de captar las diversas situaciones agroecológicas y


socioeconómicas presentes en la zona de estudio, se utilizó una muestra aleatoria
y estratificada de agricultores.
El muestreo estratificado es una técnica que consiste en subdividir una
población heterogénea en subpoblaciones o estratos más homogéneos, virtu-
almente exclusivos y colectivamente exhaustivos. La población heterogénea de un
universo Nse divide en kestratos más homogéneos de un universo Nh, de tal forma
que:

En este caso se seleccionó, en forma aleatoria, una muestra independiente


de cada uno de los estratos, mediante un plan de muestreo definido
específicamente para el municipio bajo estudio.

La primera etapa en la construcción de los estratos consistió en la elección


de un criterio de estratificación. El mejor sería el de la propia variable estudiada -los
pequeños agricultores- pero ese criterio no era aplicable pues supondría el
conocimiento a priori de lo que se quiere medir: en este caso, las diferencias en los

58
sistemas técnicos de producción de los agricultores. Se definió entonces como
variable estratificadora las unidades de paisaje presentes en el municipio de !tararé.

Estas se delimitaron con el auxilio de imágenes del satélite LANDSAT V,


tratadas a través de algoritmos pertinentes al problema estudiado (Miranda, et al.
1986). Este bosquejo cartográfico se complementó con el estudio de fotografías
aéreas. El Cuadro 1 resume las doce unidades de paisaje identificadas. Estas
presentan diferentes determinantes de naturaleza agroecológica para el cultivo de
fríjol en el municipio y fueron dispuestas en un mapa a escala 1 :35,000. Su
distribución y frecuencia se podría dividir en distintas clases o estratos, con lo cual
se reduce automáticamente la variante intraestratos y aumenta la homogeneidad
dentro de los mismos.

A la definición del tamaño de las muestras en cada uno de esos estratos le


siguió una idea básica que buscaba, además de satizfacer los objetivos de la
investigación, maximizar la precisión del muestreo, teniendo en cuenta las limi-
taciones de su aplicación en el campo. En ese sentido, la estrategia de muestreo en
cada estrato no siguió el camino de la selección proporcional, ni la selección
optimizada. Algunas unidades de paisaje fueron desechada a prio-ri debido a que
ni en las fotos aéreas ni en las visitas al campo se pudo constatar que tuvieran
parcelación agrícola. En otras unidades, si bien existían parcelas agrícolas, no fue
posible localizar agricultores que correspondieran al público-meta de la
investigación: aquellos con fincas menores de 50 hectareas. Esa selección inten-
cionada llevó a fijar un número mínimo de individuos que serían encuestados en
cada uno de los estratos.

Posteriormente, partiendo de la información de campo, se llevó a cabo una


estrategia de muestreo residual en función de algunas reglas establecidas. De
forma general, el tamaño de la muestra del estrato (nh) fue tan grande como el
desvío-padrón de la variable estudiada en el estrato (sh) y el tamaño del estrato (Nh)
fueron grandes, y el costo relativo al levantamiento y a la medida de una unidad del
estrato (ch), fué pequeño. El resultado final del muestreo, resumido en el Cuadro
2, cubrió el 15.9% de los pequeños agricultores del municipio de ltararé.

Como el plan de muestreo en cada estrato fue aleatorio, los casos presen-
tados en el cuadro se catalogaron mediante la siguiente fórmula:

59
Cuadro 1. Descripción preliminar de las unidades de paisaje del municipio de
ltararé.

Unidades morfoclimáticas Unidades de paisaje Código

Altiplanicie Meridional Sierras 01


Serranías 02
Altiplanicie Inclinada Altiplanicie 03
Escarpas 04
Altiplanicie intermedia Entalladuras 05
Altiplanicie Septentrional Meseta Superior 06
Espigones poco
entallados 07
Espigones entallados 08
Zonas poco disecadas 09
Zonas disecadas 10
Zonas muy disecadas 11
Dique de Diabasa 12

Cuadro 2. Esfuerzo de Muestreo en el Municipio de ltararé

Unidad Paisaje Cuest.Previstos Cuest. Aplicados

01 15
02 20 20
03 20
04 15
05 30 30
06 15 11
07 30 30
08 30 30
09 35 35
10 30 30
11 35 35
12 15 10

TOTAL 290 231


público meta relativo 20.1% 15.9%

60
con:

Donde:
nh =Tamaño de la muestra del estrato h.
ch= Costo de encuesta y medida de una unidad del estrato h.
co =Gastos generales o fijos independientes del tamaño n.
c =Costo total de la operación (C = C 0 +Lch.nh)
n =Tamaño del estrato h.
sh = Desvío-padrón de la variable estudiada a nivel del estrato h.
Wh =Peso del estrato h (Wh = Nh/N)
N =Tamaño de la población
V = Variación deseada en la variable estudiada

Un caso especial, llamado Alocación de Neyman, es posible cuando los


costos unitarios son iguales (Ch = c,Vh). La precisión optima se obtiene por la
siguiente fórmula simplificada (Frontier, 1983):

(C - c 0 ) Whsh
nh =
k
c 'J_Whsn)

Instrumento de recolección de información


El formulario utilizado para caracterizar las fincas en una primera etapa se
divide en tres partes: los descriptores de localización de la finca (13 variables), los
descriptores agroeconómicos y socioeconómicos (67 variables), y los descriptores
de los sistemas de producción (21 variables para 11 cultivos, 7 variables para 1O
actividades pecuarias y 8 variables para fruticultura u horticultura).
El formulario tiene pocos temas abiertos: sólo ocho entre 116 variables. La
mayoría de estas se codificó en forma disyuntiva y binaria; los grupos homogéneos
como instalaciones permanentes, equipos, etc., se trataron como un número binario
con tantos guarismos como variables tuviera. Luego de una prueba de campo y
algunos ajustes, el formulario fue aplicado por agrónomos y técnicos de diversas

61
instituciones (CNPDA/EMBRAPA, CPA, CATI), siguiendo la estrategia de muestreo
definida anteriormente.

Tratamiento de la información

El conjunto de datos recolectados fue verificado y homogeneizado con la


ayuda de un microcomputador. A partir de las variables primarias se generaron
otras mas complejas, trabajo que dió origen a los archivos: Estructuras de
producción de las fincas (61 variables); Sistemas de producción de la finca (45
variables); Sistemas de cultivo existentes en la finca (19 variables por cultivo); y
Sistemas de cría de la finca (7 variables por tipo de animal). Esa estructura permitió
dar un tratamiento independiente a los datos de estructura, sistemas de producción,
cultivos y cría. Los tratamientos numéricos que se detallan a continuación,
aparecen resumidos en la Figura 3. ·

Tratamientos numéricos globales

El tratamiento simultáneo de un alto número de datos (231 fincas y cerca de


100 descriptores con cinco modalidades) se llevó a cabo mediante el Análisis
Multivariado, método de estadística no paramétrica. Se utilizaron también el
Análisis Factorial de Correspondencia y la Clasificación Ascendente Jerarquica
(Bouroche y Saporta, 1980). Es importante precisar que la aplicación de esos
métodos desde el i-nicio y a lo largo de todo el trabajo, está condicionada por los
primeros resultados de los propios tratamientos numéricos (Figura 3).
Los datos y los archivos permitieron la elaboración de histogramas con
descriptivas sencillas, complementados por cálculos de frecuencia y con un análisis
de división en clases. Cuando se comprobaron anomalías (variables con malas
muestras, división en clases inadecuadas, etc.) se hizo una nueva división en clases
o una nueva codificación de las variables o los individuos estudiados, según fuera
el caso, hasta la construcción de una matriz disyuntiva completa. En ocaciones esos
individuos o variables fueron colocados como elementos suplementarios antes o
después de efectuar un análisis factorial de correspondencias.

La repetición de ese tipo de cálculo condujo progresivamente a un análisis


factorial de correspondencias, sin mayores anomalías. En éste caso, las coordena-
das factoriales se conservaron en el computador. Según los resultados obtenidos
y en función del grado de perfección deseado en los resultados, se fijó un cierto
número de ejes factoriales para la clasificación ascendente y jerarquica.

62
Definición de la estrategia Elaboración de la fe-
cha de levantamiento
de muestreo
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Levantamientos de campo "'
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Toma de datos en bruto.
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Corrección y homogenización.
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Definición de variables comple-


jas.
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Rectangularización de la matriz
de datos .
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Recodificación a partir de los histogramas, de las frecuencias,
de las divisiones en clase y de las disyunciones finales.

Análisis Factorial de
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(Anomalías si Colocación
--
en elemen-
tos suplementarios.
no ¡
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Almacenamiento de las
coordenadas factoriales
..
Selección del número de ejes
factoriales

1Clasificación "'
ascendente jerárquica de líneas y columnas 1

Edición de los resultados 1

Figura 3. Principales etapas metodológicas aplicadas al tratamiento global de


los datos recogidos en el municipio de ltararé.

63
También se conservaron en la memoria los resultados obteni-dos a nivel de líneas
y de columnas (Figura 3).

Antes de llegar a un resultado satisfactorio fue necesario efectuar varios


análisis factoriales de correspondencia, lo mismo que varias clasificaciones
ascendentes jerárquicas. Finalmente, mediante un programa de edición elaborado
por PRIFAslc1RAD, se obtuvieron cuadros sintéticos de los resultados, de facil
interpretación.

Análisis factorial de correspondencias

El análisis factorial de correspondencias (Benzecri 1973 y 1977, Cordier


1965) es un método clásico en el estudio de grandes cuadros o matrices de datos
que incluyan variables cualitativas (Guinochet' 1973, Duranton y Lecoq 1980,
Dahdouh, et al, 1978). Existe una literatura cada vez más amplia sobre los
principios básicos de ese análisis así como de sus aplicaciones. En 1975, Hiernaux
describió de ma-nera concisa los principios del análisis factorial de co-rresponden-
cia.

Para la tipificación de fincas de ltararé se llevó a cabo un Análisis Factorial


de Correspondencia sobre una matriz de números de coexistencia entre elementos
de dos conjuntos: el conjunto de fincas y el conjunto de clases de las variables
definidas. El análisis consiste en calcular una distancia entre elementos de cada
uno de los conjuntos, tomados por parejas. La distancia entre dos elementos de un
mismo conjunto es función de la diferencia entre los perfiles distribucionales de las
frecuencias que ellos presentan y los elementos de otro conjunto (métrica del chi
cua-drado). Una finca está ligada a otra por una distancia que es función de la
semejanza existente entre los perfiles distribucionales de las clases de sus
variables. En una representación geométrica, las fincas aparecen como puntos
localizados en un espacio, que tendrá tantas dimensiones como fincas independi-
entes o clases de variables existan.

El conjunto forma en el espacio una nube, en la cual los puntos se presentan


en pares, separados un a distancia geométrica igual al valor de ladistanciacalculada
y expresada por un coeficiente. Esa nube aparece como una expresión completa de
las afinidades entre los elementos y el conjunto, deducidas a partir de superficies
distribucionales representadas por esos elementos frenta a aquellos de otro
conjunto. La forma y la estructura de la nube, su alargamiento sobre los ejes o
planos, sus polos y densidades, representan la heterogeneidad de las uniones de
los elementos. Pero como puede presentarse un alto número de dimensiones del

64
espacio, se hace indispensable una simplificación de su representación. Esta
consiste en determinar la sucesión de los ejes factoriales de la nube.

El primero de esos ejes explica el punto máximo de i-nercia de la nube. La


inercia explicada por un eje es función del cuadrado de la distancia de los puntos
de la nube al eje, y de la frecuencia unida a cada uno de esos puntos. Los ejes
siguientes son perpendiculares a los precedentes, lo que elimina la multicolineali-
dad y maximiza la inercia explicada en el factor. El número total de ejes es igual al
número total de dimensiones en el espacio. Para conocer la estructura de la nube
se debe calcular su inercia total -explicada por cada uno de sus ejes factoriales- y
luego interpretar el sentido de esos factores.

Esa interpretación se apoya en los valores absolutos o relativos de la carga


de cada variable, clase o grupo de variables. La participación de un elemento es
el producto del cuadrado de la abscisa de ese elemento sobre el sentido de
intervención sobre el eje; al valor así calculado se debe agregar el signo de la
abscisa (negativo o positivo). Esa interpretación usa la contribución relativa de cada
eje res-pecto a la inercia de cada variable, clase o grupo de varia-bles (Waksman,
1974).

La aplicación de ese procedimiento a los datos de !tararé permitió efectuar


un análisis de las 231 fincas, en función de los factores discriminantes, y un análisis
análogo de las variables importantes, en función de las mismas fincas.

Clasificación ascendente jerárquica

La Clasificación Ascendente Jerárquica es un método que complementa el


Análisis Factorial de Correspondencia.

Se trata de un algoritmo que tiene por objeto la agregación de los individuos


u objetos de una matriz, en función de sus distancias o similitudes. Esta clasificación
reune los grupos de elementos que presentan los coeficientes de distancias o las
similitud más próxima dentro de la matriz (Legendre y Legendre, 1979). Se trata de
un tipo de Cluster Analysys (Everitt, 1981 ). El individuo u objeto sólo se une a un
grupo, si está unido a todos los individuos u objetos de ese mismo grupo. Dos grupos
solo podrán ser fusionados, si cada uno de los individuos del primero presenta una
vinculación con los individuos del segundo, o viceversa. Una descripción de los
principios matemáticos de ese algoritmo fue dada por Benzecri en 1973 y por Jambu
en 1978.

65
Gracias a esa estrategia, los grupos que crecen hacen cada vez más dificil
la inclusión de nuevos individuos u objetos, pues estos, antes de su inclusión,
deberán tener vínculos con todos los objetos del grupo (Fenelon, 1981 ). Las
agrupaciones jerárquicas son importantes para la tipificación de agricultores. Los
histogramas u otras formas de representacion gráfica, son útiles para decidir a qué
nivel de partición la jerarquía corresponde mejor a la situación que se desea
describir, teniendo en cuenta el grado de fraccionamiento buscado y el límite de
significación o de interpretación de los grupos o variables encontradas.

Los métodos de clasificación ascendente jerárquica también facilitan la


interpretación gráfica de los análisis factoriales de correspondencia (Diday, et al,
1982). Los resultados obtenidos en dos ejes son semejantes pero no idénticos. La
clasificación ascendente jerárquica permite la fácil individualización de grupos y
concentra la atención sobre la interpretación de los gráficos del análisis factorial de
correspondencia, gracias a los cuales las relaciones intergrupos y la composición
de algunos de ellos pueden ser mejor determinadas.

Cuando se trata de seleccionar una segunda muestra de agricultores,


representativa de la tipología encontrada, la disposición de los individuos en grupos
jerarquizados permite definir también un universo compatible con los requerimien-
tos logísticos y el costo de las acciones propuestas.

En el caso de !tararé, la clasificación jerárquica ascendente permitió una


división de los agricultores en grupos más o menos homogéneos. Esos grupos son
una buena representación de la diferenciación existente. En su formación se
utilizaron, además del procedimiento de cálculo, los resultados del análisis factorial
de correspondencia.

Inicialmente se obtuvieron 16 grupos de productores. El número de agricul-


tores en cada categoría es variable y da una idea de su representatividad
cuantitativa. Como ejemplo, los de la categoría 4, correspondiente a un grupo
bastante diferenciado de pequeños agricultores que se dedican al cultivo del arroz,
no poseen animales (con excepción de gallinas) y presentan una bajísima produc-
tividad de mano de obra y de la tierra. Es el grupo que tiene la mas baja tasa de
adopción de tecnología. No alcanza a tratarse de un caso especial, pues su
representatividad numérica es significativa para marcar el universo de los pequeños
agricultores con el que mantiene toda una serie de relaciones socioeconómicas
(suministro o ausencia de mano de obra para trabajos rurales y extra-agrícolas
durante la estación, etc.).

66
Análisis de los resultados y tipificación

Presentación de los resultados de base

Los archivos parciales construídos con los datos provenientes de los


cuestionarios, permitieron elaborar otro archivo, en el cual cada variable fue
transformada mediante un programa de estadística descriptiva, con el propósito de
realizar pruebas de validación, buscar características no numéricas o determinar
problemas de almacenamiento.

Esos primeros resultados permitieron una visión inicial del comportamiento


de las variables estudiadas. Por ejemplo, la estratificación de muestras observada
a nivel de las modalidades de las variables unidad de paisaje (UNP) y área total de
las fincas (STO), no era una regla general. La presencia de cosechadoras (ECO) o
la existencia de subsola-doras (ESS), son extremadamente desequilibradas. Eso
indicó la necesidad de retirarlas de los análisis multivariados prouestos.

Para ejecutar el Análisis Factorial de Correspondencia y la Clasificación


Jerárquica Ascendente, fué necesario reagrupar y volver a dividir en clases
determinadas variables, lo que permitió transformar las variables cuantitativas en
cualitativas. Sin embargo, tanto el número de clases como el de individuos por clase
o modalidad, debieron respetar ciertos límites críticos con respecto a la naturaleza
de cada variable, su extensión y variabilidad.

Por esos procedimientos también se identificaron variables redundantes y se


constituyó el archivo de datos secundarios para los nuevos tratamientos, mediante
su transformación en una matriz disyuntiva completa.

Ejemplos de la tipificación

El Análisis Factorial de Correspondencia se aplicó en las 231 unidades


estudiadas para obtener una tipología de las principales fincas de !tararé. La
repetición del análisis, luego de ajustes y correcciones en los datos mencionados,
permitió identificar 16 tipos principales constituídos por bloques de fincas bastante
próximas, de acuerdo al conjunto de las modalidades de las variables utilizadas.

Es importante resaltar que esa tipología es el resultado de un trabajo


interactivo entre el investigador y la información disponible. Por ejemplo, se optó por
no eliminar ninguna finca y, si fuera necesario, colocar solamente algunas variables
como elementos suplementarios del análisis. Los resultados de los valores propios

67
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76
necesario, colocar solamente algunas variables como elementos suplementarios y
los porcentajes de inercia presentados a continuación, son los obtenidos en el último
Análisis Factorial de Correspondencia, juzgado satisfactorio para la realización de
la tipología:

Eje Valor propio % de inercia

01 0.1989064 10.94
02 0.0900273 4.95
03 0.0796533 4.38
04 0.0642489 3.53
05 0.0586613 3.23
06 0.0524517 2.89
07 0.0496867 2.73
08 0.0459570 2.53
09 0.0455031 2.50
10 0.0435242 2.48

El decrecimiento relativo de los valores propios se puede observar en la


Figura 4. La inercia captada por los ejes 01 y 02 indica su importancia en la tipología
obtenida, aunque esa comprobación sea en parte formal. Por la naturaleza del
algoritmo de construcción, siempre hay decrecimiento y fue demostrado (Cibois,
1983) que la importancia del eje o los ejes principales depende también del número
total de ejes, o en cierta forma, de las dimensiones del cuadro de datos.

El diagrama del análisis factorial fue interpretado con la ayuda de los


resultados obtenidos en la clasificación ascendente jerárquica. Varios niveles de
tipificación (16, 1Oy05) pudieron así interpretarse. La proyección del número de las
fincas en el plano determinado por los ejes 01 y 02 del análisis factorial no puede
ser interpretada unicamente desde el punto de vista visual, aún con la ayuda de los
histogramas de la clasificación. La proyección del hiperespacio constituído por las
fincas, en un plano único, puede generar confusiones. Para comprender e interpre-
tar la con-tribución de las variables o modalidades en la formación de los ejes fue
necesario examinar los valores numéricos de las contribuciones absolutas. El
estudio de esos resultados permitió detectar las variables que más contribuyeron en
la formación de los ejes 01 y 02, y a posteriori, en la tipificación o en la diferenciación
de las estructuras de producción. En los Cuadros 3 y 4 se reunen, a manera de
ejemplo, las principales variables o modalidades que contribuyeron en la formación
de los ejes 01 y 02. El examen del Cuadro 3 permite, además, identificar la
naturaleza de la contribución de cada modalidad, con relación al origen determinado
por los ejes 01 y 02.

78
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7 -~~~~~~~*~****#~·~****~***
¿ *~~*~~~~#~*****~***~****
9 ***•=~~~*#**************
10 *********•**************

Figura 4. Decrecimiento relativo de los valores propios para los 1O principales ejes
del Análisis Factorial de Correspondencia de las 231 fincas del municipio
de !tararé.

79
Cuadro 3. Contribuciones "absolutas" de las variables en la formación del eje 01 del
Análisis Factorial de Correspondencia, aplicado sobre 231 fincas del
municipio de !tararé.

Variables Modalidades con Modalidades con


coordenadas - coordenadas +

Tiempo de existencia TPE 1y2 TPE 3, 4 y 5


del establecimiento Menos de 2 años Más de 2 hasta 80

Superficie total del STO 1, 2 y 3 STO 4, 5 y 6


establecimiento Menos de 15 ha. Más de 15 hasta 50

Superficie cultivada scu 1, 2 y 3 scu 4, 5 y 6


en el establecimiento Menos de 1O ha. Más de 10 hasta 41

Superficie en bosques SMNO SMN1y2


naturales Inexistente Hasta 15 ha

Superficie ocupada SPAO SPA 1, 2 y 3


con pastos Inexistente Hasta 45 ha.

Superficie inapro- SIN O SIN 1y2


vechable Inexistente Hasta 21 ha

Condición legal CPR O CPR 1


propietario

Condicion legal CMEO CME1


mediero

Asistencia técnica HATO HAT 1

Crédito rural HCAO HCA 1

Instalaciones o 1
(todas sin excepción)

Equipos (todos sin o 1


excepción

Número de personas PFA 1y2 PFA 3, 4 y 5


en la familia Menos de 4 Más de 4 hasta 33

Tiempo dedicado TOP 1y2 TOP 3 y 4


a la finca menos de 50% Más de 50% hasta 100%

80
Cuadro 4. Contribuciones "absolutas" de las variables, en la formación del eje
02 del Análisis Factorial de Correspondencia, aplicado sobre 231
fincas del municipio de ltararé.

Variables Modalidades con Modalidades con


coordenas - coordenadas +

Superficie total del


establecimiento STO 2,3 y 4 STO 1, 5 y 6

Superificie
cultivada en el
establecimiento scu 2, 3 y 5 scu 1, 4 y 6
Superficie ocupada
con pastos SPA 1y2 SPA O y 3

Número de personas
en la familia PFA 3 y 4 PFA 1, 2 y 5

Número de activos
agrícolas PAA 3 y 4 PAA 1, 2 y 5

Número de mano de
obra temporal PTQ O y 1 PTQ 2, 3 y 4

Tiempo dedicado a
la finca TDP4 TDP 1, 2 y 3
Existencia tractor ETR O ETR 1
Existencia arado EAR O EAR 1
Existencia arado
animal EAR O EAR 1
Existencia grada EGRO EGR 1
Existencia
sembradora EMAO EMA 1
Existencia
desgranadora EDE O EDE 1
Instalación corral ICU O ICU 1
Instalación elect. IEE IEE 1

81
Sin pretender con ello un analisis exhaustivo de los resultados, se pueden
hacer algunas observaciones: En el eje 01 hay una clara oposición entre variables
vinculadas a las estructuras de producción. Así, en coordenadas negativas se
encuentran las fincas menores, con familias pequeñas, mal equipadas y sin
instalaciones adecuadas, que se dedican a actividades fuera de la finca, y que en
general, se encuentran en una situación legal precaria (propietarios, arrendatarios
y otros). En coordenadas positivas están las fincas ubicadas en mejores condi-
ciones. En ellas existen áreas de reserva para futura expansión de la producción
(bosques naturales, áreas inutilizadas, etc.).

Esas fincas concentran las instalaciones y los equipos agrícolas identifica-


dos en el municipio. Pertenecen a familias más grandes que se dedican casi
exclusivamente a la producción agrícola dentro de un cuadro estable de tenencia
de la tierra, bien sea mediante título (propietarios) o por su capacidad de producción
(aparceros). A priori, la agricultura aparece también más diversificada, como lo
seña-lan las áreas consagradas a pastos.

En el eje 02 se puede observar una composición de variables distinta. Más


que las estructuras, se manifiestan las condiciones de producción y funcionam-
iento de las fincas, principalmente en lo que se refiere a la intensificación de mano
de obra y uso de la tierra.

Las fincas ubicadas en las coordenadas negativas cultivan sus tierras en


forma manual y como pertenecen a familias numerosas, dedican gran parte del
tiempo a esa actividad. En ese caso las áreas cultivadas, así como las áreas totales
de las fincas, aparecen en un plano intermedio. Se trata de fincas de dimensión
mediana dentro de la muestra estudiada. En las coordenadas positivas se ve
claramente la intensificación creciente del uso de los factores de producción. La
presencia de tractores y arados, la contribución absoluta de la tracción animal, la
existencia de sembradoras y desgranadoras, etc., son indicaciones de esa probable
productividad creciente de la mano de obra y de la tierra, a medida que una finca
se ubica a lo largo del eje 02. Finalmente, la disponibilidad de energía eléctrica
confirma esas observaciones.

Sin detallar los valores numéricos de las contribuciones de las variables a la


formación de un eje, debemos indicar que esas tendencias principales (correspon-
dencias) pueden ser observadas y deben guiar el análisis de los diagramas
obtenidos. Las Figuras 5 y 6 corresponden a la proyección de las 231 fincas
analizadas en !tararé, sobre un plano determinado por los ejes 01 y 02

82
Oposición entre presencia de medios de producción (parte negativa 1) y ausencia (parte positiva
11) a lo largo del eje 01.

Evolución de las superficies cultivadas a lo largo del eje 01.

Evolución del total de personas encuestadas a lo largo del eje 01.

Evolución de las superficies totales de las fincas a lo largo del eje 01.

Figura 5. Diagrama de AFC aplicado a las variables estudia-das en 231 fincas de


ltararé, S.P.

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Tipos A
B
e
D
E

Figura 6. Diagrama de AFC aplicada 231 fincas de pequeños agricultores de


!tararé, S.P. Tipología de la "estructura" de producción.

84
La pertenencia de cada finca a un tipo determinado puede ser discutida a la
luz de las variables descritas y según el nivel de jerarquización deseado. Los
cambios en los niveles de jerarquización o de tipificación conducen a la aparición
de bloques distintos. Las agrupaciones no siguen la proximidad que aparece en la
proyección del plano creado por los ejes 01 y 02, sino la proximidad entre fincas en
el nivel del hiperespacio que constituyen.

Una discusión alrededor de las contribuciones de cada variable a los ejes y


de la ubicación de las ficas en los planos definidos por estos ejes, es bastante
explicativa para la definición de muestras. Existe también una proyección de las
fincas segun los ejes 02 y 03 o 01 y 03, que aquí no se presenta. Al confrontar esos
resultados se pueden definir criterios para obtener muestras representativas de los
diferentes tipos de agricultores en el universo estudiado. Esas muestras pueden ser
reducidas numericamente, pues su representatividad está bien controlada y su
conclusión se hará sobre grupos homogéneos. De la misma forma, el análisis de las
contribuciones de las variables permite la definición de algunas hipótesis para los
trabajos de campo.

Es posible aplicar a las variables el Análisis Factorial de Correspondencia en


función de las fincas. En esa forma se examinaron las 121 variables que intervini-
eron en la tipificación, lo que dió origen a una tipología de modalidades.

Conclusión

El reconocer la diversidad agroecológica y socio-económica del medio, sus


interacciones y condicionantes, y lo que éso representa para el desarollo de la
producción y la productividad agrícola, es un problema primordial dentro del
proceso de generación y difusión de tecnología en cualquier área rural de Brasil.

El ejemplo del municipio de ltararé ilustra bien ese hecho. En un área


relativamente restringida y considerando un público meta también restringido, se
identificaron 16 categorías bien diferenciadas de productores que presentan entre
sí y con otras categorías de agricultores, articulaciones bastante complejas y
dinámicas. Ese método de trabajo, desarrollado por el CNPDA y la CPA, es
innovativo y con-trasta con el proceso tradicional de la investigación y la extensión.

En el proceso tradicional los investigadores y extensionistas se dedican a


probar y evaluar los resultados de nuevas técnicas e insumos agropecuarios en las
condiciones del productor, en lugar de identificar los problemas de la baja
productividad agrícola a través de un análisis agro-socioeconómico desarrollado a

85
partir de sistemas productivos reales. En otras palabras, se parte de la tecnología
y no de la realidad del agricultor. Eso ocurre porque es difícil a-bordar la temática
de la diferenciación campesina, aunque hoy esta es objeto de numerosos estudios.
Sin embargo, compete a los investigadores y extensionistas intentar una
aproximación a ese fenomeno dinámico, en la forma más objetiva posible para las
condiciones concretas de cada región.

La metodología aquí expuesta parte de dos postulados: por una parte, el


necesario análisis e interpretación de las condiciones agroecológicas y
socioeconómicas que interactúan a nivel de la pequeña producción; y por otra, la
elaboración de una base y una estrategia de muestreo bastante rigurosas.

Los métodos de tratamiento -numéricos, gráficos y cartográficos- que


completan el método general de obtención de datos, se deben utilizar de manera
interactiva. Entre los numéricos, la utilización del Análisis Factorial de Corres-
pondencia y la Clasificación Jerarquica Ascendente (además de la estadística
paramétrica en la homogenización de las variables), permitió una aproximación
satisfactoria de diferenciación campesina a través de conceptos como categorías
de productores y situaciones agrícolas. La información generada posee un
estructura clara e interactiva que permite otras interpretaciones.

No existe una tipología de agricultores. Para cada problema, de acuerdo a


lo que se quiere obtener, es posible generar una tipología adecuada, debido a que
cualquier tipología presupone la elección de criterios y factores que determinen una
jerarquización y el establecimiento de relaciones casuales. En consecuencia, la
información obtenida mediante la aplicación de la metodología descrita puede tener
dos utilizaciones principales:

* La forma de obtener, tratar y almacenar datos (informatización) permite


generar tipologías de agricultores en función de las necesidades de investigación
y extensión rural en una región. Con la misma base de datos disponibles se podrán
construír tipologías adecuadas para casos específicos: como un programa de
conservación de suelos, la introducción de mecanización agrícola a tracción
animal, etc.; pero al final, todas serán distintas.

* Las observaciones y comprobaciones realizadas permiten formular


hipótesis sobre la estabilidad de las categorías de productores, las relaciones entre
estas y el sector no agrícola, y sobre su inserción en las estructuras agrarias
regionales. Esas hipótesis pueden respaldar trabajos concretos en investigaciones
posteriores.

86
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Ministére des Terres et Forets, 56 p.

88
DISCUSION

Algunos problemas metodológicos se generan por la ausencia de valores en


variables específicas (el problema del cero). Esto tiene implicaciónes sobre el uso
de ciertas técnicas analíticas que generan problemas como los de sumas iguales
de indicadores para grupos distintos. Es muy importante estudiar las relaciones
entre variables, cuando se crean nuevas y se utiliza el Análisis de Componentes
Principales.

¿Es aconsejable o deseable la separación analítica entre estructura (datos


cualitativos) y desempeño (datos cuantitativos)? ¿Se podrían reunir datos
cualitativos con cuantitativos?

Las aleaciones jerárquicas macro-micro se muestran más cercanas con el


uso de sistemas de muestreo y análisis de datos muy analíticos. ¿Cómo está
diseñada en términos de cubrimiento la rapidez del trabajo (resultados) por
aproximaciones? Depende del cuadro institucional en el que se pueda desarrollar
el trabajo.

89
EVALUACION DE ALTERNATIVAS
TECNOLOGICAS MEJORADAS A NIVEL
DE FINCA:
EL CASO DE ESTELI, NICARAGUA

Gustavo Calvo y Javier lcaza*

Con el propósito de colaborar directamente en los esfuerzos de los


gobiernos de Centro America para mejorar el bienestar del sector rural pobre, el
Centro Agronómico Tro-pical de Investigación y Enseñanza (CATIE), con el aporte
económico de la Comunidad Económica Europea (CEE), desarrolló durante el
período 1983-1 985 el proyecto "Módulos de Acción Canee ntrada - 11 Fase". El secta r
rural pobre, conformado por fincas pequeñas, comprende la mayor parte de la
población rural y la mitad de la población total de la región. Sus recursos, bajos en
calidad, constituyen sólo la cuarta parte del total de los insumos agrícolas y su
ingreso per capita se encuentra por debajo de los US$100 anuales. En contraste
este sector aporta los dos tercios del valor total de los cultivos alimenticios de la
región, excluído el arroz (CATIE, 1985).

Para cumplir con el propósito del proyecto en Nicaragua, se seleccionó la


región de Estelí. Allí se validaron dos alternativas tecnológicas mejoradas: maíz-
frijol en relevo y frijol-frijol+sorgo en franjas alternas. La actividad se llevó a cabo en
fincas seleccionadas al azaren los municipios de Estelí, Pueblo Nuevo, La Trinidad
y Condega. El criterio de selección incluyó fincas que tuviesen al menos una
hectárea dedicada a cultivos anuales y alguna de sus parcelas al sistema maíz-
frij"ol en relevo o al sistema frijol-frijol.

Durante un año agrícola se recolectó información de las parcelas de


validación y sobre todas las actividades realizadas por el agricultor en su finca. La
información obtenida dió origen al análisis que se presenta en este documento, que
tuvo el propósito de evaluar -a nivel de finca- las alternativas validadas, y de
contribuír con el desarrollo de la metodología de investigación y generación de
tecnología apropiada para agricultores de escasos recursos.

El documento presenta la metodología de trabajo utilizada por el proyecto,


así como los resultados de su aplicación en Nicaragua, incluídos logros y dificul-
tades.
*Funcionarios del Centro Agronómico Tropical de Investigación y Ensei'ianza (CATIE), especlficamente del
Proyecto Módulos de Acción Concentrada, durante los periodos 84-86 y 83-86, respectivamente.

90
Metodología de trabajo

El CATIE ha desarrollado una metodología para generar opciones


tecnológicas en áreas específicas, que consta de diferentes etapas (Figura 1) y
cuya aplicación tiene como punto focal el sistema finca (unidad productiva), aunque
el desarrollo de tecnología se centra en el subsistema de producción (Escobar y
Moreno 1984).

La etapa de validación o pruebas de pre-producción se define como "la


prueba final en la cual el manejo de la producción está a cargo del agricultor; la idea
es someter la alternativa tecnológica -agroeconómicamente factible, experimen-
tada, y viable- al manejo exclusivo del agricultor" (Escobar y Moreno, 1984).

El análisis económico, necesario en esta fase, incluye dos niveles: sistema


de producción y sistema finca. Las técnicas utilizadas en el primer nivel permiten
evaluar factibilidades agroeconómicas (presupuestos, retorno a factores, etc.). La
evaluación de una alternativa en el segundo nivel implica el uso de diferentes
técnicas de análisis.

La complejidad del sistema finca exige modelos de análisis que, por


definición, son sólo una representación de la realidad. La representatividad de los
modelos presenta dificultades, dado que estos se construyen a partir de un grupo
grande y heterogéneo de fincas.

Surgió así la necesidad de utilizar técnicas diversas de análisis multivariado


que permiten agrupar fincas en conglomerados similares, lo que facilita la
construcción de modelos representativos de la realidad.

Como primer paso del proceso se seleccionaron las variables que mostra-
ban mayor variabilidad entre fincas, dentro de un grupo amplio de variables
presentes en la in-formación recolectada. Para esto se utilizó el Análisis de
Componentes Principales, con el objeto de resumir la información existente y
obtener los componentes más importantes.

A continuación, los grupos fueron sometidos al Análisis de Conglomerados,


técnica que permitió separar las fincas en grupos homogéneos. A estos se les
sometió al Análisis Discriminante, a fin de estimar probabilisticamente la bondad de
su conformación. El propósito de esta segunda parte del proceso fue construír
modelos representativos de cada grupo o conglomerado, en los cuales se
procedería a evaluar las alternativas tecnológicas a nivel de finca mediante un
modelo simple de programación lineal.

91
SELECCION
DEL
AREA

\/
CARACETRIZACION

(orden jerorquico )

'[/
,.--) DISENO DE TECNOLOGIA
DE ~
\1/
~ ALTERNATIVA I"'
INVESTIG AC 1ON ~ REGISTRO DE
DE APOYO ""' DINAMICA DE
BIOLOGICA FINCA
'/
~

_.. PRUEBAS
~ EXPERIMENTALES "'
.....
EN LA FINCA
EVALUACION
\/ NIVEL DE
EXTRAPO LAC ION FINCA
TECNOLOGICA ,..::- VALIDACION ""
1\.

l
DIFUSION MASIVA ~

.....

\1/

PEQUEÑO AGRICULTOR

Figura 1. Etapas en la investigación de sistemas agrícolas y metodología de


desarrollo de tecnología del CATIE.

92
Por último, en el modelo lineal de cada grupo de fincas se evaluó el ajuste de
las alternativas a las características de los agricultores representados en esos
modelos. El objeto de este último análisis fue determinar la probabilidad de adopción
de las alternativas desarrolladas.

A continuación se presenta la aplicación de la metodología de trabajo en


Nicaragua, sus resultados y conclusiones. El trabajo se inicia con la recolección y
sistematización de la información, y continúa en cada sección del documento con
reseñas descriptivas sobre las técnicas estadísticas y los métodos cuantitativos
empleados para el logro de los objetivos planteados.

Recolección y sistematización de la información

Durante el ciclo agrícola 83-84 se validaron las alternativas tecnológicas


citadas en 63 fincas del departamento de Estelí, ubicadas en los municipios de
Condega, Pueblo Nuevo, Estelí y la Trinidad.

Para evaluar el comportamiento de las alternativas se recolectó información


de tipo agronómico y económico, me-eiante visitas quincenales a las fincas. Esta
información incluyó, además de las actividades en las parcelas de validación y su
testigo, todas aquellas que realizó el agricultor en su finca. La inclusión de estas
actividades aumentó el volúmen y grado de complejidad de la información, lo que
demandó el uso de un sistema que facilitara la organización, recolección, almace-
namiento y actualización de los datos, así como su posterior codificación y
procesamiento.

El sistema de información concebido consta de tres ins-trumentos: a) boletas


para recolección de datos de campo; b) boletas de codificación de datos; y c)
archivos sistematizados para el manejo y procesamiento electrónico de datos, así:

1. Indicadores de capital.
2. Uso de la tierra.
3. Inventario de recursos humanos.
4. Asistencia técnica y crediticia.
5. Inventario de ganado.
6. Actividades y uso de insumos en ganadería.
7. Actividad pecuaria.
8. Producción de leche.
9. Actividades y uso de insumos en sistemas de cultivo.
1O. Rendimiento de los sistemas de cultivo.

93
11. Trabajo fuera de la finca.
12. Otras fuentes de ingreso.
13. Movimiento de inventario de ganado.

Segun su naturaleza, la información se recogió con variada periodicidad. Así,


para los arachivos 1 y 3 se recogieron datos en la primera visita; para los archivos
2, 4 y 5 se recolectaron al inicio del ciclo de siembra; y en el resto de los archivos,
la información se actualizó cada 15 días.

Análisis de componentes principales

El seguimiento de las actividades productivas del sistema finca implicó la


recolección de información sobre un gran número de variables que correspondían
a la desagregación de las tareas realizadas y que, a su vez, pueden contener
información adicional a la requerida para entender la estructura del sistema finca.
Fué necesario entonces, resu-mir y reducir el número de variables, de tal manera
que se facilitara explicar las causas de la variación entre carac-aterísticas de las
fincas.

Para reducir el número de variables se utilizó la técnica de Componentes


Principales, que se ha aplicado en trabajos de diversa índole. Las siguientes
variables fueron finalmente consideradas en el análisis: capital; años de educación
del jefe de familia; costos de semilla y de prepa-ración de la tierra; mano de obra
para preparación del te-rreno, manejo del cultivo, y cosecha; inversiónes en ganado
mayor y menor; e ingreso bruto.

Desde un punto de vista no matemático (Holland, 1969) el Análisis de


Componentes Principales se describe como un procedimiento de cálculo que
permite transformar un conjunto de variables en otro que cumpla con ciertas
características: a) Que las variables derivadas sean independientes unas de otras.
b) Que se puedan expresar como funciones lineales de las variables originales: por
ejemplo, si los registros ori-ginales representan mediciones de x e y, las variables
serán de la forma u = (u 1x + u2 x) y v = (v 1x + v2 x). c) Que la va-riación total en las
variables derivadas sea igual a la variación en las variables originales. d) Que la
primera va-riable derivada contribuya con la mayor proporción de la variación total,
la segunda con la siguiente mayor proporción posible del resto de la variación, y así
sucesivamente.

Las variables derivadas son conocidas como componentes principales y las


varianzas correspondientes como raíces latentes. En teoría, el número de factores

94
o componentes puede ser igual al número de variables; sin embargo, para éste
trabajo solamente se estimaron cinco factores con el fin de apreciar la contribución
de cada componente a la variación total, lo mismo que la interrelación de las
variables en cada factor. De esa manera fue posible introducir mayor cla-ridad a la
interpretación de los resultados.

El análisis de Componentes Principales permitió identificar los factores que


caracterizan las fincas de Estelí. Con esa técnica se determináron cinco factores
que explican el 77.2% de la varianza, y la importancia de las variables estudiadas
en la conformación de estos factores se definió así:

Factor Nombre Variables Influyentes


Dimensionalidad de Area total de la finca
la finca Area en pastos
Area en cultivos anuales

2 Uso de mano de obra Mano de obra familiar y


contratada en preparacion
del terreno

Mano de obra familiar y


contratada en manejo del
cultivo

Mano de obra familiar y


contratada en cosecha
3 Nivel de tecnología Costo de semillas

Costo de fungicidas e
insecticidas

Costo de fertilizantes
4 Características del Inversión en ganado mayor
agricultor
Años de educación del
jefe de familia
5 Limitantes de la Costos de preparación de
producción la tierra

Capital

De la aplicación de la técnica de Componentes Principales a la información


recolectada surgieron dos grupos de resultados: a) Los indicadores de la variabili-
dad de los datos, que permiten hacer una primera selección de variables relevan-
tes, mediante la eliminación de aquellas con coeficiente de variación bajo; de esta
forma se conservan las de coeficiente mayor, que explican mejor la variabilidad
entre fincas. b) Los componentes formados por las variables seleccionadas.

95
Como resultado del análisis, en el primer grupo se eli-minó la variable Dias
de trabajo en la finca considerada como menos importante en la variación entre
fincas (Cuadro 1). En el segundo grupo se consideraron cinco componentes que
explican el 77.2% de la variación total entre fincas (Cuadro 2).

El primer componente se refiere al uso de la tierra en la finca. Las más


grandes dedican una mayor área a pastos. Este componente refleja la distribución
del factor tierra según las actividades productivas de la finca, así como su
dimencionalidad.

El segundo componente se relaciona con la utilización de la mano de obra


familiar durante el ciclo vegetativo de los cultivos; en él se observan valores altos
en los coeficientes de las variables relacionadas con mano de obra familiar. Esto
indica que la participación de la familia ejerce influencia en la toma de decisiones
según su objetivo. La más inmediata es la relativa a la contratación de mano de obra,
que parece importante en la conformación del segundo componente.

El tercer componente se refiere al nivel de tecnología empleado por los


agricultores del área. Se observan valores altos en los coeficientes de las variables
relacionadas con el costo de los insumos utilizados en la producción.

El cuarto componente es de dificil interpretación y se podría relacionar con


las características particulares del agricultor en la zona. Se cree que el agricultor
tiene alguna inclinación por la cría de ganado mayor, bien porque posee en su finca
cierta superficie dedicada a pastos o porque este tipo de explotación está sujeta a
un menor riesgo, comparado con la agricultura. La situación se relaciona con la
experiencia y la educación del agricultor.

En el quinto componente la totalidad de los coeficientes incluídos tienen


valores bajos, con excepción de dos: costo de preparación de la tierra y capital. Eso
se puede entender como el reflejo de una limitante, ya que la mayoría de los
pequeños agricultores no posee bueyes y su capital es escaso. Ese componente
contribuye, apenas, con el 7.8% de la variación total.

La principal conclusión de este análisis indica que "La estructura de las fincas
o unidades productivas en la zona de Estelí, entendida como variables que explican
la diferenciación entre ellas, puede comprenderse si se conocen los valores de un
número reducido de variables que midan el monto y distribución de los principales
factores de producción, el costo de la tecnología empleada y algunas características
personales del agricultor" (lcaza y Escobar, 1984).

96
Cuadro 1. Valores promedios de las variables consideradas para el Análisis de
Componentes Principales. Estelí, Nicaragua.

Variables Unidad Media CV*

1. Capital c 343.240.00 63.5


2. Años de educación jefe familia años 1.88 73.9
3. Area total de la finca ha 8.19 103.6
4. Días de trabajo en la finca D/h 19.65 31.7**
5. Area en cultivos anuales ha 3.25 58.2
6. Area en pastos ha 4.22 174.4
7. Costos de fertilización c 295.42 87.7
8. Costos de semilla " 415.61 69.6
9. Costos de fungicidas e insecticidas " 35.25 149.7
1O. Costos de preparación de la tierra " 291.0 7122.2
11. Mano de obra prep. tierra (fam.) " 200.07 111.5
12. Mano de obra prep. tierra (contr.) " 150.61 139.6
13. Mano de obra manejo cultivos (fam.) " 684.94 73.6
14. Mano de obra manejo cultivos (contr.) " 351.58 122.7
15. Mano de obre cosecha (fam.) " 408.87 70.7
16. Mano de obra cosecha (contr.) " 348.05 95.1
17. Inversión en ganado mayor " 1,744.00 739.6
18 Inversión en ganado menor " 5,200.80 121.2
19. Ingreso bruto " 4,939.92 64.6

* Coeficiente de variación
** Eliminada

97
Cuadro 2. Coeficiente de los componentes principales y valores de comunalidad de
las variables seleccionadas.

Comuna- Componentes
Variables lidad
1 2 3 4 5

Area total de la finca 0.899 0.801 0.130 0.470 0.132 0.041


Area en pastos 0.866 0.770 0.021 -0.456 0.243 0.075
Capital 0.889 0.071 0.043 -0.100 -0.029 -0.482
Area en cultivos anuales 0.817 0.653 0.523 0.003 0.341 0.022
Mano de obra contr. cosecha 0.518 0.581 -0.019 0.197 -0.132 0.351
Inversión en ganado menor 0.779 0.553 0.249 0.438 -0.424 -0.195
Ingreso bruto 0.795 0.542 0.365 0.227 0.480 0.290
Costos de semillas 0.750 0.535 0.405 0.433 -0.074 0.323
Mano de obra contr. man. cult. 0.828 0.524 -0.543 0.431 0.204 0.174
nversión en ganado mayor 0.790 0.505 -0.403 -0.351 0.640 0.001
Mano de obra contr. prep. tie. 0.799 0.320 -0.673 0.158 0.017 0.466
Costos de fungicidas insectic. 0.866 0.236 -0.544 0.662 0.300 -0.073
Costos en fertilización 0.611 0.210 0.262 0.432 0.351 -0.433
Mano de obra fam. prep. tie. 0.770 -0.624 0.271 0.259 0.454 0.182
Mano de obra fam. cosecha 0.898 -0.566 0.651 0.202 0.068 0.328
Mano de obra fam. manejo cult. 0.921 -0.450 0.627 0.289 0.485 0.074
Costos prep. tierra (bueyes) 0.654 -0.171 0.363 0.425 0.203 -0.520
Años de educación jefe famil. 0.670 -0.133 0.053 0.328 -0.719 0.151

% Variación explicada 28.7 15.6 12.9 12.2 7.8

TOTAL: 77.2

98
Análisis de agrupamiento

Los sistemas de clasificación utilizados con mayor frecuencia se basan en


pocas variables (tamaño de la finca, usos de la tierra, etc.). Una clasificación de este
tipo tiene el inconveniente de utilizar en forma muy pobre la información disponible,
ya que toma en cuenta ciertas características y deja de lado otras que pueden ser
importantes y que por lo tanto, podrían agregar información útil para comprender
mejor el conjunto de fincas que se desea clasificar.

Según Alonso (1976) "todo criterio de clasificación debería considerar el


mayor número posible de atributos que resultan distintivos en los elementos que se
quieren agrupar".

Lo anterior justifica la utilización de la técnica de Análisis de Conglomerados,


que permite tipificar las fincas con base en un número elevado de variables.
Mediante la aplicación de esta técnica se pueden agfupar las explotaciones de
manera tal que las diferencias entre los elementos de un conglomerado sean
mínimas, al tiempo que la diferencia entre los conglomerados sea máxima.

En estadística se puede hacer una distinción entre técnicas algorítmicas y


técnicas heurísticas (Alonso, 1976). Las algorítmicas garantizan una partición
óptima y las heurísticas el descubrimiento y la interpretación de hechos. Las
técnicas heurísticas son utilizadas con mayor frecuencia por ser de aplilcación
práctica. Entre las diferentes técnicas estadísticas de clasificación se escogió el
Algorítmo de Ward, que presenta ventajas sobre otros criterios de clasificación
(Alonso, 1976; Milligan, 1980).

El Algoritmo de Ward es jerárquico y de tipo aglomerativo; a partir de una


partición politética va agrupando elementos o conglomerados, hasta llegar a la
partición monotética. En cada iteración se consideran todas las uniones posibles
entre conglomerados y se elige la que produce el menor incremento en la suma de
cuadrados dentro de los grupos.

Este algoritmo agrupa minimizando la función objetivo F, definida como:


t

F[F,
t=1
donde F1 es la suma de cuadrados dentro del conglomerado t.

99
El algoritmo trabaja a partir de la matriz de distancias al cuadrado, y en un
primer paso une los dos elementos más cercanos, dado que busca la menor
distancia d2 •

La suma de los cuadrados en cada grupo es nula al comienzo del análisis,


debido a que parte de una partición politética. Al finalizar el análisis la función
objetivo dará el valor total de la suma de cuadrados, lo que ocurre porque se llega
a una partición monotética. La varianza dentro del conglomerado será igual a la
varianza total, y la varianza entre conglomerados será nula.

Resultados del análisis

El Análisis de Conglomerados permitió considerar como la mejor, la partición


en 1O grupos (CCC = 3.2021 ). A continuación se presentan las características más
relevantes presentes en cada conglomerado:

Conglomerado 1: Está constituído por 21 fincas con un area promedio de 5.16 ha,
de las cuales se encontró que el 43% se dedica a cultivos anuales y el 48% a pastos.
El sistema de cultivo más frecuente es el frijol-frijol, practicado en 71 .43% de las
fincas, seguido por los sistemas maíz solo, con el 57.14%, maíz-frijol (33.33%) y
maíz-mi/Ion (23.8%). El sistema pecuario, con un promedio de 1.64 u.a.laño y una
carga animal de 0.66 u.a./ha, produce leche sólo para consu-mo de la finca (594.2
l/año, en promedio).
El Cuadro 3, presenta los promedios de las variables utilizadas en el análisis.
Se destaca la baja utilización de capital de trabajo -presente en el bajo costo de la
semilla- así como de fertilizantes y otros insumos. También importante en relación
a los demás grupos, son el bajo ingreso bruto obtenido y el bajo valor del inventario
de ganado mayor.

Conglomerado 2: Constituído por un total de 11 fincas con un área promedio de


8.87 ha, de las cuales un 39% se dedica a cultivos anuales y otro 39% a pastos. El
sistema de cultivo más frecuente es el maíz solo, que se practica en el 72% de las
fincas; le siguen los sistemas maíz-frijol (63%,) frijol-frijol (54%), y frijol solo (36%).
El sistema pecuario, con un promedio de 2.76 u.a./finca y una carga animal de 0.79
u.a./ha, produce leche sólo para consumo interno (991 l/año, en promedio).
El Cuadro 4 muestra los promedios de las variables utilizadas en el análisis.
Se destaca el crecimiento en los costos de producción, influído por el aumento del
área sembrada. También se observa un aumento en el ingreso bruto y en el
inventario de ganado mayor.

100
Cuadro 3. Promedios de las variables utlizadas en el Análisis de Conglomerados.

Variable Promedio Min. Máx. c.v:


Area total 5.16 0.97 11.02 64.431
Area en pastos 2.48 O.O 8.4 116.73
Area en cultivos anuales 2.22 0.97 4.12 34.04
Costos de semilla 1, 159.43 217.0 4,485.00 82.88
Costo de fertilizante 1, 115.78 o.o 2,589.00 56.72
Costo de insect. y fungic. 296.56 o.o 1,386.0 131.19
Mano de obra prep. tierra 59.19 O.O 112.0 44.2
Mano de obra en cultivo 602.36 280.0 1, 184.0 38.35
Mano de obra en cosecha 419.5 184.0 784.0 40.02
Costo preparación de la tierra 267.47 166.39 460.0 26.12
Ingreso bruto (capital) 23, 113.24 6,328.00 87,242.00 77.37
Inventario en ganado mayor 12,506.19 O.O 45,000.00 127.32

• Coeficiente de variación.

Cuadro 4. Promedios de las variables utilizadas en el Análisis de Conglomera-


dos. Conglomerado 2.

Variable Promedio Min. Máx. c.v:


Area total 8.87 4.2 16.2 45.76
Area en pastos 3.5 O.O 7.7 84.85
Area en cultivos anuales 3.5 2.0 5.6 27.82
Costos de semilla 1,380.40 345.00 2,712.00 45.4
Costo de fertilizante 1,886.14 420.00 3,908.00 55.3
Costo de insect. y fungic. 492.79 0.00 1,575.00 127.0
Mano de obra prep. tierra 44.64 o.o 80.0 62.07
Mano de obra en cultivo 1,169.00 O.O 1,768.00 28.06
Mano de obra en cosecha 911.45 492.00 1,760.00 39.94
Costo preparación de la tierra 129.57 O.O 285.7 64.2
Ingreso bruto (capital) 33, 100.0 18,450.00 69,229.00 44.45
Inventario en ganado mayor 17,229.1 4,020.00 36,500.00 65.3

·Coeficiente de variación.

101
.Conglomerado 3: En este conglomerado, integrado por nueve fincas con un área
promedio de 8.54 ha, el 47% se dedica a cultivos anuales y el 49% a pastos. Los
sistemas de cultivo más frecuentes son maíz solo y frijol-frijol, que aparecen en el
89% de las fincas; a continuación se encuentran los sistemas maíz-frijol (67%) y
frijol+millón (44.4%). El sistema pecuario, con un promedio de 2 u.a./finca y una
carga animal de 0.47 u.a./ha, produce leche sólo para consumo (900 l/año, en
promedio).
Del análisis de los promedios de las variables utilizadas (Cuadro 5) resulta
evidente el aumento en los costos de producción así como en el inventario de
ganado mayor. El ingreso bruto disminuye en relación con el conglomerado anterior,
lo que parece indicar que este grupo de agricultores es menos eficiente en el uso
de sus recursos productivos.

Conglomerado 4: Está formado por nueve fincas con un promedio de 19.76 ha.
El 16% está dedicado a cultivos anuales y el 76% a pastos. El principal sistema de
cultivo es el maíz solo que aparece en el 89% de las fincas; luego aparecen los
sistemas maíz-frijol (77.8%) y frijol-frijol (44.4%). El sistema pecuario produce leche
para consumo y venta (1626.3 y 835 l/año respectivamente). El promedio de
animales por finca es de 7.2 u.a., con una carga animal de 0.48 u.a./ha.
Los promedios del conglomerado en las variables ingreso bruto e inventario
de ganado mayor (Cuadro 6), lo diferencian completamente de los demás grupos.

Conglomerado 5: Está compuesto por cuatro fincas con un área promedio de 5.58
ha, de las cuales el 55% está dedicado a cultivos anuales y el 30% a pastos. El
principal sistema de cultivo es el frijol-frijol con una frecuencia del 75%; lue-go
figuran los sistemas frijol-frijol, maíz solo y frijol+millon (50%). El sistema pecuario
con 1.55 u.a./finca y una carga animal de 0.93 u.a./ha, produce leche solo para
consumo de la finca (870 l/año, en promedio).
El conglomerado presenta promedios altos en los costos de producción y un
ingreso bruto mucho mayor respecto a los demas (Cuadro 7); es probable que este
grupo tenga un mayor nivel tecnológico aplicado a la producción, lo que redunda en
un aumento en el ingreso.

Los cinco conglomerados restantes están compuestos por una sola finca, y
fueron separados por el análisis debido a que las mismas muestran características
especiales. Estas fincas tampoco fueron consideradas en el análisis de
Programación Lineal.

102
Cuadro 5. Promedios de las variables utilizadas en el Análisis de Conglomerados.
Conglomerado 3.

Variable Promedio Min. Máx. C.V.*

Area total 8.54 4.11 18.82 52.94


Area en pastos 4.24 O.O 11.2 84.85
Area en cultivos anuales 4.07 2.1 6.3 31.84
Costos de semilla 2,684.05 1,046.00 5,390.00 54.68
Costo de fertilizante 2,812.94 1,827.00 3,965.00 28.36
Costo de insect. y fungic. 1,005.71 O.O 2, 193.00 70.6
Mano de obra prep. tierra 160.67 11 O.O 264.0 29.18
Mano de obra en cultivo 1,691.00 836.0 2,568.00 38.76
Mano de obra en cosecha 1,047.94 456.00 1,872.00 44.35
Costo preparación de la tierra 323.88 107.14 623.22 58.6
Ingreso bruto (capital) 29,397.22 18.126 54,035.00 36.92
Inventario en ganado mayor 23,938.89 O.O 8,000.00 126.56

· Coeficiente de variación.

Cuadro 6. Promedios de las variables utilizadas en el Análisis de Conglomerados.


Conglomerado 4; nueve fincas.

Variable Promedio Min. Máx. C.V.*

Area total 19.76 9.9 29.5 34.45


Area en pastos 15.118 5.6 24.15 45.32
Area en cultivos anuales 3.11 2.2 3.85 17.35
Costos de semilla 1,170.96 537.00 1,937.50 35.59
Costo de fertilizante 2,005.07 633.00 5,079.00 64.26
Costo de insect. y fungic. 831.68 46.0 2,038.07 89.08
Mano de obra prep. tierra 58.67 o.o 144.0 78.85
Mano de obra en cultivo 1, 158.83 646.0 1,687.00 28.75
Mano de obra en cosecha 734.20 148.00 1,976.00 88.16
Costo preparación de la tierra 374.98 142.86 579.00 58.63
Ingreso bruto (capital) 53,773.22 25,460.0 112,694.00 52.58
Inventario en ganado mayor 97,444.50 o.o 20,100.00 62.87

· Coeficiente de variación.

103
Cuadro 7. Promedios de las variables utilizadas en el Análisis de Conglomerados.
Conglomerado 5; cuatro fincas.

Variable Promedio Min. Máx. C.V.*

Area total 5.58 3.17 7.27 33.51


Area en pastos 1.66 O.O 2.08 75.66
Area en cultivos anuales 3.07 9.0 4.28 52.7
Costos de semilla 2,981.82 1,411.80 5,140.50 52.93
Costo de fertilizante 4,939.22 1,800.00 11,303.20 87.96
Costo de insect. y fungic. 3,336.55 o.o 4,366.50 30.5
Mano de obra prep. tierra 44.0 o.o 122.0 108.84
Mano de obra en cultivo 1,383.32 862.0 1,895.00 38.28
Mano de obra en cosecha 793.75 488.00 1,422.00 53.47
Costo preparación de la tierra 338.50 178.57 548.00 46.0
Ingreso bruto (capital) 51,422.5 26,523.0 75,546.00 54.1
Inventario en ganado mayor 11,250.00 o.o 36,000.00 147.92

· Coeficiente de variación.

104
Análisis Discriminante

Los métodos de conglomeración producen grupos, existan estos o no en la


población original (Ling y Killough, 1976). Por esta razón es necesario probar la
bondad de las clasificaciones, analizando los resultados a posteriori mediante
técnicas que permitan comprobar la calidad de los grupos resultantes. Con este fin
se utilizó el Análisis Discriminante, una técnica para describir y clasificar elementos
representados por un número elevado de variables.

El Análisis Discriminante busca entre las combinaciones lineales de las


variables, aquellas que tengan una varianza mínima entre ellas y una intravarianza
igualmente mínima; esto permite resaltar la diferencia entre clases y facilita su
delimitación (Lebert y Fenelón, 1973).

La bondad de los agrupamientos formados mediante el Análisis Discrimi-


nante se podrá comprobar si se obtiene un valor altamente significativo del
estadístico de Mahalonobis, y si las observaciones de un mismo conglomerado
presentan una alta probabilidad asociada con la función discriminante correspon-
diente a ese agrupamiento.

Los resultados de la aplicación del análisis se presentan en el Cuadro 8. Se


observa cómo ninguna finca fue reclasificada y cómo son altas las probabilidades
asociadas con la función discriminante de las fincas por grupo.

Análisis de Programación Lineal

Para cada uno de los cinco conglomerados se determinaron los coeficientes


técnicos de los principales sistemas pecuarios y de cultivo. La información obtenida
en la inves-tigación de campo permitió determinartambién, los coeficientes técnicos
de las alternativas evaluadas.
A continuación se discuten las actividades, disponibilidades y restricciones
de cada grupo, así como sus características particulares (Cuadros 9 a 12).

Disponibilidad de los recursos y restricciones

Tierra: En cada grupo se utilizó el área promedio de las fincas sin importar el
porcentaje que se utiliza en cultivos anuales o pasto.

105
Cuadro 8. Resultados del Análisis Discriminante.
Probabilidades de ser miembro del grupo
No. del clasificado
finca grupo en el grupo 2 3 4 5
1 2 2 0.0001 0.9999 0.0000 0.0000 0.0000
2 2 2 0.0142 0.9858 0.0000 0.0000 0.0000
3 2 2 0.0001 0.9998 0.0000 0.0000 0.0000
4 4 4 0.0000 0.0000 0.0000 1.0000 0.0000
5 4 4 0.0000 0.0000 0.0000 1.0000 0.0000
6 2 2 0.1267 0.8733 0.0000 0.0000 0.0000
7 3 3 0.0005 0.0020 0.9975 0.0000 0.0000
8 2 2 0.2887 0.7111 0.0002 0.0000 0.0000
9 1 1 0.9931 0.0068 0.0001 0.0000 0.0000
10 5 5 0.0000 0.0000 0.0000 0.0000 1.0000
11 1 1 0.9908 0.0092 0.0000 0.0000 0.0000
12 4 4 0.0000 0.0000 0.0000 1.0000 0.0000
13 1 1 0.9778 0.0222 0.0000 0.0000 0.0000
14 1 1 0.9935 0.0064 0.0000 0.0000 0.0000
15 2 2 0.0071 0.9929 0.0000 0.0000 0.0000
16 1 1 0.9989 0.0011 0.0000 0.0000 0.0000
17 2 2 0.0037 0.9889 0.0069 0.0000 0.0005
18 3 3 0.0000 0.0000 1.0000 0.0000 0.0000
19 3 3 0.0001 0.0012 0.9987 0.0000 0.0000
20 1 1 0.6438 0.3562 0.0000 0.0000 0.0000
21 2 2 0.2101 0.7898 0.0001 0.0000 0.0000
22 3 3 0.0000 0.00087 0.9993 0.0000 0.0000
23 1 1 0.8131 0.1869 0.0000 0.0000 0.0000
24 1 1 0.9982 0.0015 0.0002 0.0000 0.0000
25 1 1 0.9992 0.0008 0.0000 0.0000 0.0000
26 1 1 0.9452 0.0531 0.0017 0.0000 0.0000
27 1 1 0.9997 0.0003 0.0000 0.0000 0.0000
28 4 4 0.0000 0.0000 0.0000 1.0000 0.0000
29 4 4 0.0000 0.0000 0.0000 1.0000 0.0000
30 3 3 0.0000 0.0000 1.0000 0.0000 0.0000
31 1 1 0.9904 0.0084 0.0012 0.0000 0.0000
32 2 2 0.0006 0.9994 0.0000 0.0000 0.0000
33 2 2 0.0343 0.9657 0.0000 0.0000 0.0000
34 4 4 0.0000 0.0000 0.0000 1.0000 0.0000
35 1 1 0.9302 0.0698 0.0000 0.0000 0.0000
36 5 5 0.0000 0.0000 0.0000 0.0000 1.0000
37 4 4 0.0000 0.0000 0.0000 1.0000 0.0000
38 1 1 0.9477 0.0523 0.0000 0.0000 0.0000
39 4 4 0.0000 0.0000 0.0000 1.0000 0.0000
40 1 1 0.9994 0.0006 0.0000 0.0000 0.0000
41 3 3 0.0033 0.0000 0.9967 0.0000 0.0000
42 3 3 0.0000 0.0000 1.0000 0.0000 0.0000
43 5 5 0.0000 0.0001 0.0001 0.0000 0.9998
44 3 3 0.125 0.0000 0.9875 0.0000 0.0000
45 3 3 0.0000 0.0000 1.0000 0.0000 0.0000
46 1 1 0.9939 0.0059 0.0002 0.0000 0.0000
47 1 1 0.9959 0.0041 0.0000 0.0000 0.0000
48 5 5 0.0000 0.0000 0.0000 0.0000 1.0000
49 1 1 0.9186 0.0814 0.0000 0.0000 0.0000
50 2 2 0.0166 0.9834 0.0000 0.0000 0.0000
51 4 4 0.0000 0.0000 0.0000 1.0000 0.0000
52 1 1 0.9991 0.0009 0.0000 0.0000 0.0000
53 1 1 0.9963 0.0037 0.0000 0.0000 0.0000
54 1 1 0.9791 0.0209 0.0000 0.0000 0.0000

106
Cuadro 9. Disponibilidad de tierras por grupo de fincas

Grupo Area promedio

1 5.16
2 8.87
3 8.54
4 19.76
5 5.58

Cuadro 1O. Disponibilidad de mano de obra familiar

Grupo Jornales/mes

1 25.93
2 26.23
3 23.50
4 28.61
5 23.63

Cuadro 11. Disponibilidad de capital propio del agricultor.

Grupo Capital (C)

1 14,227.5
2 24,667.5
3 38,903.3
4 102,156.0
5 23,396.2

Cuadro 12. Monto promedio de crédito y porcentaje de utilización.

Grupo o/o que utilizan monto promedio

1 71 3,253.0
2 54.5 2,718.3
3 46.11 2,578.5
4 66.7 5,066.6
5 75 6,250.66

107
Mano de obra familiar: Se calculó la disponibilidad mensual de mano de obra del
agricultor y su familia, expresada en jornales de ocho horas.

Capital: Para su cálculo se partió del total de los costos de producción de los
sistemas de la finca durante el período, a lo que se agregó el valor del inventario
de ganado mayor y se restó el monto de los créditos. Esta disponibilidad de capital
es el promedio del grupo.

Crédito: Se determinó el porcentaje de las fincas que utilizan crédito, lo mismo que
su monto. Un porcentaje menor del 50% en el modelo, se consideró como no
utilización del crédito por el grupo.

Otros coeficientes: Para cada grupo se determinaron el promedio total de uso de


mano de obra, los costos variables (que incluyen el valor de la semilla, el fertilizante,
los insecticidas y fungicidas y la preparación de la tierra) y los rendimientos de los
sistemas de cultivo. Esta información se resume en los Cuadros 13 a 17, en los
cuales, los sistemas 7 y 9 corresponden a las alternativas tecnológicas evaluadas.

Resultados del análisis

En el Análisis de Programación Lineal se utilizaron cuatro modelos: El


modelo 1, representativo de la situación actual de agricultor, incluye como necesaria
la actividad pecuaria en la finca -poco factible de ser cambiada o eliminada en el
corto plazo. El modelo 2 varía con respecto al anterior, en que deja libertad en el
uso de crédito, permitiendo observar el efecto del apoyo crediticio en las decisiones
del agricultor respecto al uso de las alternativas. Los modelos 3 y 4 se diferencian
de los anteriores en que introducen la actividad pecuaria como competitiva, utili-
zando crédito restringido en un caso y en el otro no, con el propósito de evaluarla
y confirmar el supuesto de que, ante todo, la actividad pecuaria es para consumo
familiar.

Conglomerado 1: El Cuadro 18 presenta los resultados de los modelos utilizados.


En los primeros dos modelos, que incluyen la producción de leche como una
actividad necesaria en la finca, aparece como solución el modelo del agricultor,
cuando existe limitación de capital. Esto indica que el agricultor utiliza el capital en
forma más eficiente. Pero cuando no existe restricción de capital (crédito dispo-
nible), aparece en la solución la alternativa frijol-frijol+sorgo, lo cual indica que la
alternativa necesita una mayor inversión de capital. En los modelos 3 y 4, donde se
incluye como competitiva la actividad pecuaria, esta no aparece en la solución.

108
SISTEMA Requeri- -------------------~!9~!E!~!~~~~~-~!-~~~~-~~-~~E~------~~!~~~~!2 ____________ F.equeri- Rendimientos
mientos miento
tierra
E F H A H J J A s o ll D
capital
Cul- Culti- Culti- Leche Terneros
tivo vo 2 vo 3 Lts/ VA
(Ha) (capital) VA
1 maiz. frijol millón
(Kg) (Kg) o sorgo
(kg)

Sistema 1 Haiz 9.14 o o o 6. 9 s 9. 1 s 9.96 o 9.82 o o o 1286.3 43 s. 37 843, 71


+ H1116n
Sistema 8 Haiz 10.14 o o o o 18.44 9.38 o 19.42 10. 13 7.9 10.39 2039.79 1340.35 438.63
seguido frijol
Sistema 22 frijol o o o o o 18.29 17.01 15.98 20. 07 14.81 o 15.38 3455.S 688.69*
seguido frijol 605.01**
Sistema 26 Haiz 10.57 o o o o 1s.23 17.38 2.81 o o o 21. 7 5 1259.67 11so.67
solo
...... Sistema 7 Haiz 19.79 o o o 9.29 l. s 16.44 19.79 2.4 16.7 34 4134.22 1861.92 60 s. 79
o seguido frijol
'° Sistema 9 frijol
seguido Frijol +
10. l o o o o 21. 2 21. 4 17. 7 18.11 17.8 o 16. s 1046.5*
704. 76** 375.69
sorgo
Ganadería.!./ l. s 7 l. 74 l. 77 l. 77 3.03 l. 81 l. 85 l. 2 s l. 79 l. 53 l. 69 l. 7 l. 66 9 394. 11 2 ºº. 82 .3

.. Rendimiento de frijól en el primer semestre

Rendimiento de frijol en el segundo semestre

El requerimiento de capital en ganaderia incluye el costo de compra de una unidad animal y su mantenimiento en el periodo.

Cuadro 13. Coeficientes técnicos de los sistemas utilizados en los modelos de


programación lineal. Conglomerado 1.
Rendimiento
Sistema Requeri- ------------~~S~~~!~!~~~~~-~~-~~~~-~~-~~E~--~~~~~~~!2 ____________ Reque- -----------------------------------------------·
mientos rimien- Cultivo Cultivo Cult. leche Terneros
(Ha) E F M A M J J A s o N D to capi- 1 Ma1z 2 frijol Lts/ VA
tal (pe- (Kg) (Kg) VA
r1cdo)

Sistema 8 Maíz seguido 17.81 o o o o 15.93 17. 18 20 17.14 3.09 o 2 7. 68 2066.55 1267.4 429.86
de frijol

sistema 18 Frijol solo o o o o o 12. 32 18.3 21. 7 o o o o 72i.65 702.61

Sistema 22 Frijol seguido o o o o o 18.39 2 3. 58 19 .68 18. 77 22.64 o 2 s. 3 3070.74 817.4*


de frijol 879.07**

__. Sistema 26 maíz solo 22.23 o o o o 17.33 14.65 o o o o 12.56 1145.66 132 6. 1

o Sistema 7 (alternativa)
\O
lll maíz seguido de frijol 19. 79 o o o 9.29 25 4 16.44 19.79 2. 4 16.7 34 4134.22 1861.92 605.79

Sistema 9 (alternativa) !O.O o o o o 21. 2 21. 4 17. 7 18.4 17.8 o 16.5 4643. 1 1046.5* 375.69
Frijolseguido de frijol 704.76**
y
Ganadería l. 26 2. 6 l. 46 1.46 2. 31 2.07 l. 59 !. 44 l. 54 1.48 l. 71 3. 5 !. 46 359 .o
.'

Rendimiento de frijol en el Primer Semestre.


Rendimiento de frijol en el Segundo Semestre.
y El requerimiento de capital en ganadería incluye el costo de compra de una nunida anirr.al y su mantenimiento en el periodo.

Cuadro 14. Coeficientes técnicos de los sistemas utilizados en los modelos de


programación lineal. Conglomerado 2.
Rendimientos
SISTEMA Req~eri-
-------------------~~g~~~!~!~~~~~-~~-~~~~-~~-~~~~-~~~~~~~!l _________________ Requeri- -cüít1vo-c-ü1t1v-o--cúrtrvo--ceche--1erñero·
miento
A o miento l maíz 2 frijol 3 sorgo Lts/ V.A.
E F 11 11 J J A N D
tierra Capital (Kg) (Kg) o millón VA
(Ha) (periodo) (Kg)

Sistema 8 maíz 38. 99 o o o o 4 5' 82 3 7. l 5 o 13.74 6.9 o 22.85 3000.75 1157.2 327.8
seguido de frijol

Sistema 22 frijol
seguido de frijol o o o o o 31. 44 45 .13 23.51 22.77 2 4. 46 o 13.2 3288.93 607.5
.
516.98**
Sistema 22 o o o o o 26.46 27 .1,9 l. 44 o o o 2 !. 01 1419. 77 877. l 5
maiz solo

Sistema 31 frijol 6.85 o o o o 16.99 25.65 22.4 o o o o 1805.09 544.87 666.19


más mil 16n
........
........ Sister.i.l 7 (alterna- 19.79 o o 9.26 25 16.44 19.79 2.4 16.7 34 4134.22 1816.92 605. 79
o ti va) maiz seguido
de frijol

Sistema 9 (alterna-
ti va) frijol seguido
to.! o o o 2 l. 2 2 l. 4 17.7 18.4 17.8 o 16.5 4643.l 1046.5
. 375.69
704. 76**
de frijol + sorgo

Ganadería·!./ 2'. 12 l. 66 l. 5 7 l. 5 7 l. 62 l. 3 7 l. 3 7 l.?! l. 4 7 l. 9 3 l.89 l. 62 l. 65 323.08 .3

.. Rendimiento del f rijo 1 en el primer semestre


Rendüaiento del frijol en el segundo semestre

.!./ El requ.er ir.iiento de capital i ne luye el costo de compra de una unidad de animal y su mantenimiento en el periodo.

Cuadro 15. Coeficientes técnicos de los sistemas utilizados en los modelos de


programación lineal. Conglomerado 3.
Rendimientos
SISE:1A Req:..:.eri- c~1t1vo---cü1~1vo--cü1-t1vo--ccche--rerñero
--------------------~~S~~E~~!~~~~~-~~-~~~~-~~-~~~~--i~~~~~~!2 ________________ Requeri-
miento miento 1 mafz 2 frijol 3 sorgo Lts/ V.A.
tierra
E F M A M J A s o N D
capital (Kg) (Kg) (Kg) V.A.
(Ea) (pedo-
do)

Sistema 8 se- 18.96 o o o o 25.91 7.05 10 43.09 4.61 o 30.28 2892.47 1268.61 4 78. 92
guido de frijol

SistPma 22 se-
guido de frijol o o o o 5. 71 7 .01 14.63 18.08 15.59 9 .16 o 14.29 2798.03 649.5 •
1.i38.3**

Sistema 22
maíz solo o o o o 14. 59 6.6 7.63 o o o o 30.94 1608.28 1260.53
__,
__, Si ster.ia 7 19.79 o o o 9.79 25 16.44 19. 79 2. 4 16.7 34 4132.22 1861. 2 605.79
o (alterr.ativa)
su maiz seguido de
frijol

Sistema 10. l o o o o 21. 2 21. 4 17. 7 18.4 17.8 o 16.5 4643.l 1046.5* 375.69
(alternativa) 704.6**
frijol seguido
de frijol +
scrgo

Ganaderia!/ 2.08 3.: 3 .51 . 51 .68 .51 . 72 .72 . 71 • 72 •63 .63 .60 12213.7 303.24 .3

Cuadro 16. Coeficientes técnicos de los sistemas utilizados en los modelos de


programación lineal. Conglomerado 4.
SISTEMA Requeri- -------------------~~g~~E~~~~~~~~-~=-~~~~-~~-~~~~--!~~~~~~!2 _______________ Requeri- ----------~~~~!~!=~~~~--------------------
mientos mientas Cultivo Cultivo Cultivo Leche/ Terne·
tierra
E F M A M J J A s o N D
capital l maiz 2 frijol millón/ Lts ro
(Ha) (perio- (~) (~) sorgo V.A. V.A.
do) (~)

Sistema 18
frijol solo o o o o o 30.89 83.68 31. 83 o o o o 1735.02 665.17

Sistema 22 frijol
seguido de frijol o o o 2. 22 5.63 13.23 o 15.51 14.11 8.47 2. 2 9.58 4609.27 454.34*
649. 3'"**
Sistema 26
maiz solo o o o o o 11. 07 2 3. 03 o o o o 16.42 2344.33 974

Sistema 31 frijol 8.2 o o o 3. 21 5.36 10. 71 o 14.64 o o o 2083.57 389.61 422.07


más millón

....... Sistema 7 19.79 o o o 9.29 25 16.44 19.79 2. 4 16.7 34 4134.22 1861. 2 605.79
....... rnaiz seguido
....... de frijol

Sistema 9
frijol seguido 1046.5*
de frijol + sorgo 10. l o o o o 21. 2 21. 4 17. 7 18.4 17.8 o 16.5 4643.l 704.6** 375.69

Ganadería .U 1.07 1.18 1.19 1.19 1.19 3.92 1.42 l. 4 3 l. 42 ) . 42 l. 42 3.43 l. 3 5843.8 369. 2 3 .3

..
Rendimiento del frijol en el primer semestre .

Rendimiento del frijol en el segundo semestre.

!/ El requerimiento de capital en ganadería incluye el costo de compra de una unidad y su mantenimiento en el periodo.

Cuadro 17. Coeficientes técnicos de los sistemas utilizados en los modelos de


programación lineal. Conglomerado 5.
Cuadro 18. Resultados de los modelos de programación lineal.
Conglomerado 1.

Valor Actividad seleccionada


M función Uso de Uso de Recurso
objetivo Sistema Area capital crédito limitante

1 5,762.4 Maíz-frijol* 1.02 14,227.5 3,253.0 crédito


Produc. de leche 2.48

2 19,413.98 Frijol-frijol 2.68 14,227.5 13,638.83 tierra


+sorgo**
Produc. de leche 2.48

3 46,192.73 Maíz-frijol* 2.41 14,227.5 3,253.0 tierra y


Frijol-frijol crédito
+sorgo** 2.75

4 49,850.58 Frijol-frijol 5.16 14,227.5 9,730.89 tierra

* Tecnología del agricultor M=Modelo


**Alternativa

Cuadro 19. Resultados de los modelos de programación lineal.


Conglomerado 2.

Valor Actividad seleccionada


M función Uso de Uso de Recurso
objetivo Sistema Area capital crédito limitante

1 29,450.06 Frijol solo 4.83 24,667.2 2,718.3 tierra y


Frijol-frijol* 1.20 crédito
Produc. de leche 2.85

2 48,464.84 Frijol-frijol* 6.02 24,667.2 14,062.64 tierra


Produc. de leche 2.85

3 89,422.16 Frijol-frijol* 8.87 24,667.2 2,570.3 tierra

4 89,422.16 Frijol-frijol* 8.87 24,667.2 2,570.3 tierra

* Tecnología del agricultor M=Modelo

112
Se concluye entonces, que la factibilidad de que los a-gricultores con
características similares a las de este conglomerado adopten las alternativas
tecnológicas propuestas, depende de que los planes de difusión sean apoyados por
un programa de crédito.

Conglomerado 2: Como se aprecia en el Cuadro 19, ninguna de las alternativas


tecnológicas propuestas aparece en la solución.
Por consiguiente, se concluye que los agricultores con características
similares a las de este conglomerado no adoptarán ninguna de las alternativas
propuestas, las cuales resultan poco atractivas en sus condiciones.

Conglomerado 3: En todos los modelos de este grupo aparece como solución la


alternativa tecnológica frijol-frijol+sorgo (Cuadro 20). Otra característica importante
en este conglomerado es que en la realidad el grupo utiliza poco crédito, al tiempo
que en las soluciones de los modelos aparece una baja o ninguna utilización del
mismo.
Se concluye entonces, que existe unas alta probabilidad de que los
agricultores con características similares a las de este conglomerado, adopten la
alternativa tecnológica probada.

Conglomerado 4. Se caracteriza por ser el único en que se vende leche y por tener
el promedio más alto de área disponible (19.76 ha). En este conglomerado sólo se
conside-raron los modelos 1 y 2, dado que los modelos 3 y 4 presentan resultados
poco factibles en la realidad (Cuadro 21 ). En los dos modelos considerados aparece
en la solución, junto al sistema maíz solo del agricultor, la alternativa maíz-frijol.
Se concluye que la alternativa evaluada representa una buena opción para
agricultores con características similares a las de este conglomerado, y que, en
consecuencia, es alta la probabilidad de que sea adoptada.

Conglomerado 5: Los modelos analizados en este grupo señalan en todos los


casos la alternativa frijo/-frijol+sorgo como solución (Cuadro 22). Cuando se incluye
la actividad pecuaria como competitiva, esta no aparece en la solución.
Se concluye que la alternativa evaluada constituye una buena opción para
agricultores con características similares a las de este conglomerado, y que es alta
la probabilidad de ser adoptada por estos agricultores.

113
Cuadro 20. Resultados de los modelos de programación lineal.
Conglomerado 3.

Valor Actividad seleccionada


M función Uso de Uso de Recurso
objetivo Sistema Area capital crédito limitante

1 37,985.78 Frijol-frijol 2.62 33,530.88 o tierra


+sorgo**
Produc. de leche 5.92

2 37,985.78 Frijol-frijol 2.62 33,530.88 o tierra


+sorgo
Produc. de leche 5.92

3 109, 136.85 Frijol-frijol 8.32 38,903.26 o capital


+sorgo**

4 110,271.48 Frijol-frijol 8.54 38,903.26 748.814 tierra

** Alternativa M=Modelo

Cuadro 21. Resultados de los modelos de programación lineal.


Conglomerado 4.

Valor Actividad seleccionada


M función Uso de Uso de Recurso
objetivo Sistema Area capital crédito limitante

1 37,787.97 Maíz solo 1.0


Maíz-frijol** 3.65 102, 156.03 o tierra
Produc. de leche 15.13

1 37,787.97 Maíz solo 1.0


Maíz-frijol** 3.65 102, 156.03 o tierra
Produc. de leche 15.13

3 142,468.62 Maíz-frijol 19.76 81,692.19 o tierra


+sorgo**

** Alternativa M=Modelo

114
Cuadro 22. Resultados de los modelos de programación lineal.
Conglomerado 5.

Valor Actividad seleccionada


M función Uso de Uso de Recurso
objetivo Sistema Area capital crédito limitante

1 33,923.95 Frijol-frijol 3.06 23,396.2 4,575.63 tierra


+sorgo**
Produc. de leche 2.52

2 33,923.95 Frijol-frijol 3.06 23,396.2 4,575.63 tierra


+sorgo**
Produc. de leche 2.52

3 63,633.95 Frijol-frijol 5.58 23,396.2 2,512.3 tierra


+sorgo

4 63,633.95 Frijol-frijol 5.58 23,396.2 2,512.3 tierra


+sorgo

** Alternativa M=Modelo

115
Comentarios finales

El uso de técnicas de análisis multivariado, permitió separar las fincas


estudiadas en grupos o conglomerados que presentan características similares
entre sí. Esta separación, a su vez, permitió evaluar las alternativas probadas por
modelos en cada grupo.

Se concluye que hay grupos de fincas en los cuales las alternativas


tecnológicas evaluadas no resultan atractivas, ya sea porque utilizan más capital -
escaso en la zona- o porque los sistemas de cultivo del agricultor son más eficientes
en el uso de este recurso. En otros grupos, alguna de las alternativas resulta
apropiada y se constituye en una opción compatible con las condiciones de todo el
sistema representado en el modelo.

En consecuencia, se recomienda que los esfuerzos de difusión de las


alternativas se orienten hacia fincas con características similares a las de los grupos
señalados.

También se recomienda que el esfuerzo de difusión de las alternativas


mejoradas sea acompañado de apoyo crediticio para los posibles adoptantes.

El esfuerzo realizado en este estudio es importante dado que permite


evaluar, ex ante, los posibles resultados de la difusión de las alternativas probadas
ydeterminarsus probables adoptantes. Esto asu turno, permite dirigirlos esfuerzos
de difusión y el apoyo técnico y crediticio hacia esos prospectos.

Otro aspecto importante del estudio señala que es posible clasificar nuevos
agricultores, partiendo de las variables utilizadas en la determinación de los
conglomerados. Esto permite asimilarlos con alguno de los grupos aquí determina-
dos y establecer su posible comportamiento futuro.

116
Bibliografía

ALFONSO, ALFREDO. 1975. Algunas técnicas de conglomeración, su naturaleza


y posibilidades de tipificación de empresas. In Reunión Técnica sobre
Tipificación de Empresas Agropecuarias. Montevideo, Uruguay. llCA.

CENTRO AGRONOMICO TROPICAL DE INVESTIGACION Y ENSEÑANZA. 1985.


Informe Final del Proyecto Modulas de Acción Concentrada, Fase 11. CATIE,
Turrialba, Costa Rica. 136 p.

ESCOBAR, GERMAN y MORENO, R. 1984. Desarrollo de tecnología para sistemas


de producción agrícola, enfoque metodológico y aplicación empírica. CATIE,
Turrialba, Costa Rica. 44 p.

HOLLAND, O.A. 1969. Component Analysis: an aproach to the interpretation of soil


data. Journal Sci. Fd. Agricultura., Vol 20, January. pp 26-31.

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la estructura de sistemas de fincas pequeñas de la región de Estelí, Nicaragua.
Trabajo presentado el la XXX Reunión Anual del PCCMCA, Managua, Nicara-
gua, 23 a 28 de abril de 1984.

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a theory of random graphs. Journal of the American Statistical Association. Vol
71, No. 354.

MILLIGAN,G.W. 1980. An examination ofthe effect of sixtypes of errorperturbation


on fifteen clustering algorithms. Phychometrika 45. pp 325-342.

117
DISCUSION

Antes de iniciar la discusión pormenorizada de algunos aspectos de este


trabajo, se hicieron varias menciones sobre la calidad del estudio y sobre la
aplicación metodológica de técnicas analíticas combinadas para clasificar sistemas
de finca y evaluar alternativas tecnológicas, según los grupos de fincas estableci-
dos.

Un tema de discusión acerca de la hipótesis de la conformación de grupos


de fincas a partir de un Análisis de Conglomerados (Cluster Análysis), fue el uso
del Análisis Discriminante. Algunos participantes opinaron que el uso de una función
discriminante para determinar la probabilidad que tiene cada finca de pertenecer a
un conglomerado específico, es innecesario y repetitivo, dado que la separación de
conglomerados es una técnica válida y robusta por sí misma, para dividir los
miembros de una población. El autor principal del trabajo expicó que el algoritmo de
Ward y el criterio cúbico de agrupamiento -utilizados para determinar la
composición de los conglomerados- no ofrecen un estadístico que permita
establecer una diferenciación de los mismos, de manera que se pueda asegurar la
pertenencia exclusiva de los componentes a cada conglomerado. Así mismo,
comentó que el número de conglomerados es una decisión del investigador, y que
esta es una de las razones por las que no es posible determinar probabilísticamente
la conformación exclusiva de cada componente dentro de un conglomerado.

Se presentaron algunas intervenciones sobre la selección de variables en el


caso de utilizar las técnicas de Componentes Principales y de Análisis Discrimi-
nante. También se mencionaron los problemas potenciales de determinación de
conglomerados pequeños, originados por el número de observaciones con re-
specto al número de variables utilizadas para conformar los conglomerados. Sobre
este aspecto se recomendó conformar un marco teórico robusto que anteceda al
uso de las técnicas estadísticas, que esté de acuerdo con los objetivos que se
persiguan y con el uso potencial de los conglomerados de fincas.

En la discusión acerca de los aspectos logísticos y de aplicabilidad inmedi-


ata, surgieron preguntas sobre el costo de utilización de las técnicas analíticas
mencionadas, dada la cantidad y calidad de información requerida. Se custionó,
igualmente, la replicabilidad del análisis en el caso específico del Perú, donde se
trabaja en 84 zonas. Sobre este particular se señaló que en ese país existen datos
de por lo

118
menos 60 variables en cada zona, lo que hace que la metodología sea perfec-
tamente utilizable.

En general, hubo acuerdo entre los asistentes sobre las posibilidades que
estas técnicas ofrecen para clasificar grupos de trabajo a nivel de campo, con
propósitos de generación y difusión de tecnología agropecuaria.

119
OPERACIONALIZACION DEL ENFOQUE DE
SISTEMAS EN EL INIPA:
IDENTIFICACION DE SISTEMAS DE PRODUCCION

José M. Gil D. y Wilfredo Caballero A.*

El objetivo final de todo proceso de generación y transferencia de tecnología


es su adopción por parte del productor; sin embargo, el logro de éste objetivo
depende de que las tecnologías propuestas sean adecuadas a las características
y circunstancias del productor al cual van destinadas.

En países como Perú, con más de 1,200,000 unidades de producción


distribuidas en tres regiones naturales -costa, sierra y selva- existe una gran
variabilidad de circunstancias que afectan la producción (84 zonas de vida con
grandes diferencias en el desarrollo económico y social) y que es necesario
estudiar.

El Instituto Nacional de Investigación y Promoción Agropecuaria (INIPA)


inició, en mayo de 1984, el estudio de los sistemas de producción presentes en el
área de influencia de sus agencias de extensión, con el propósito de facilitar las
tareas de planificación, extensión y fomento que permitan el logro de dos objetivos
específicos: 1) Apoyar la generación y transferencia de tecnología; y 2) contribuír
al fortalecimiento empresarial de las fincas pequeñas y media-nas (Figura 1).

Este documento presenta la mecánica operativa aplicada a la identificación


de los sistemas de producción de las agencias de extensión y, a manera de ejemplo,
la caracterización a nivel de región y sub-región del Valle Sagrado de los Incas, que
para los efectos del trabajo se denominó microregión Culca-Urubamba.

Marco conceptual

Según Hart, un agroecosistema es un componente del sistema finca; a su


vez, las fincas con características similares dentro de·una zona territorial deter-
minada, forman parte de un sistema denominado región, que tiene diferentes tipos
de componentes físicos (suelo, minerales, agua), socioeconómicos (edificios,
carreteras, mercados) y bióticos (plantas y animales).

• Funcionario del Instituto Nacional de Investigación y Pro-moción Agropecuaria, INIPA, Oficina de


Agroeconomla.

120
INVESTIGACION Y DESARROLLO DE LOS SISTEMAS DE PRODUCCION

1. Identificación de zonas agroecológicas

2. Determinación de zonas agroeconómicas

3. Identificación de los sistemas de producción agropecuaria

4. Diagnóstico del proceso productivo

APOYO A LA GENERACION Y APOYO AL FORTALECIMIENTO


TRANSFERENCIA DE TECNOLOGIA EMPREARIAL DE LAS FINCAS
PEQUEÑAS Y MEDIANAS

5. Identificación y priorización 5. Seguimiento del proceso


de problemas. productivo en espacio y tiempo

6. Confrontación de la oferta y 6. Caracterización del sistema de


demanda tecnológicas. producción agropecuaria.

7. Formulación de alternativas 7. Estudio de las relaciones de


tecnológicas. producción y de la capacidad
empresarial.
8. Validación en campo de
productores. 8. Formulación y evaluación de
alternativas al sistema.
9. Análisis técnico-económico.

1O. Recomendaciones tecnico- 9. Recomendaciones para mejorar


financieras. el sistema.

11. Demostración en campo de 1O. Evaluación ex-post.


productores.

12. Evaluación ex-post.

Figura 1. Metodología de estudio de los sistemas de producción agropecuaria.

121
En forma similar, el sistema finca tiene componentes físicos, bióticos y
socioeconómicos que interactúan para formar conjuntos con estructura y función
propias, y que constituyen subsistemas del sistema finca.

En la finca, los agroecosistemas estan constituídos por las parcelas donde


se producen los cultivos o se crían los animales; los componentes son las
poblaciones de plantas (cultivos, pastos, maleza, etc.) y de animales (ganado,
insectos, microorganismos, etc.), lo mismo que el ambiente físico que interactúa con
la comunidad biótica de plantas y animales.

En el caso que nos ocupa, la teoría de sistemas se aplicó a la caracterización


de las agencias de extensión. Cada una de estas se consideró como una micro-
región en la que existen diferentes tipos de sistemas de finca -conformados por
sistemas de cultivos, animales y mixtos- donde el productor toma decisiones sobre
los productos que quiere producir, y sobre la combinación y asignación de recursos
y la utilización de insumos para éste propósito.

Metodología

El proceso de identificación de sistemas de finca comprende tres etapas de


recolección de información que se llevan a cabo a nivel de la región, la subregión
y la finca:

A nivel de región: Se basa en los datos generados pór estudios de identificación


de zonas agroecológicas y agroeconómicas.

A nivel de sub-región: Parte de información obtenida por medio de encuestas.


Esta información permite determinar, entre otras variables, los tipos de productores
y los sistemas de producción prevalecientes.

A nivel de finca: Proviene del análisis de información entrevistas a productores.


Este procedimiento permite conocer los problemas y limitaciones específicas de la
producción.

Cada una de las etapas señaladas proporciona información útil para delinear
estrategias de investigación, extensión y fomento.

Durante 1985 se adelantaron los estudios para determinar zonas


agroeconómicasy agroecológicas, correspondientes ala primera etapa del proceso
de identificación. Igualmente, en ese año se iniciaron las encuestas en las agencias

122
de extensión, con el propósito de conocer la estructura de la producción agropec-
uaria de las fincas entre 1 y 20 ha y de identificar en ellas los sistemas de producción
prevalecientes.

La encuesta incluyó preguntas acerca de los siguientes temas:

- Ubicación geográfica.
- Superficie total y parcelación.
- Aprovechamiento de la tierra de cultivo, tanto bajo riego como en secano
(pastos naturales, monte, bosque, etc).
- Superficie cosechada y producción de cultivos en riego y secano.
- Principales animales domésticos.

El trabajo de campo, llevado a cabo entre los meses de marzo y septiembre


de 1985, contempló en cada agencia una muestra sistemática con arranque
aleatorio, de acuerdo al siguiente detalle:

- Elaboración de un padrón de fincas separado en tres registros así: fincas


de 1 a> 5 ha, fincas de 5 a> 1O ha, y fincas entre 1O y> 20 ha.

- Ejecución de la encuesta en forma simultánea a la elaboración del padrón.


Con este propósito fueron encuestadas una de cada 1O fincas del primer
estrato, y una de cada cinco en los demas estratos.

Para el procesamiento de la información recogida en la encuesta se siguieron


los siguientes pasos:

- Ordenamiento de las boletas de encuesta según el registro del padrón


correspondiente.

- Comprobación de consistencia y codificación de la información, de acuerdo


al Manual de Crítica y Codificación elaborado para tales fines.

- Ingreso de la información a discos duros y de estos al computador.

- Procesamiento de los datos para obtener los cuadros de salida de acuerdo


al plan de tabulaciones.

123
La micro-región Calca-Urubamaba

Las provincias de Calca y Urubamba, Departamento de Cuzco, abarcan


73,500 ha distribuidas entre los 2700 y los 4000 metros de altura sobre el nivel del
mar. En 1981 la región tenía una población de 55,600 habitantes, de los cuales el
63% vivía en la zona rural y el 37% en áreas urbanas.

Los volúmenes anuales de precipitación varían entre 430 y 513 mm; el mes
más húmedo es enero con un promedio de 106.5 mm. La temperatura media anual
en el valle varía entre 15º y 16º C y disminuye hacia las partes más altas. La
temperaturas más bajas se presentan entre mayo y agosto, y entre junio y julio
ocurren heladas con temperaturas por debajo de Oº C durante las noches.

La información del último Censo Nacional (1972), señala para la micro-región


una superficie agropecuaria de 43,055 ha. Solamente un tercio de la superficie
ocupada por fincas tiene uso agrícola y algo más de otro tercio está cubierto de
pastos naturales, indicador de su capacidad ganadera. Sólo el 36.2% de la
superficie agrícola tiene disponibilidad de agua para riego; el 63.8% restante
corresponde a tierras de secano, de las cuales 4822 ha se hallaban en descanso,
período que en el caso de la sierra peruana puede extenderse hasta los siete años.

Zonas agroecológicas

La región comprende tres zonas agroecológicas: una zona baja o de valle


(2700-3000 msnm), una intermedia (3000-3500 msnm) y una zona alta (arriba de
3500 msnm). La distribución de la superficie territorial y cultivada se presenta en el
Cuadro 1.

En forma coincidente, la superficie territorial y la cultivada son significativa-


mente mayores en la zona alta, seguida, muy por debajo, por las zonas de valle e
intermedia. La superficie cultivada en cada zona agroecológica es baja y decrece
ligeramente desde el valle hasta la zona húmeda.

La zona baja o de valle se cubre de una vegetación estacional durante los


meses de lluvia, que se aprovecha para el pastoreo del ganado. Los cultivos más
importantes son el maíz y la papa, seguidos por cebada, trigo y haba (Cuadro 2).

La zona intermedia se caracteriza por tener una evapotranspiración una o


dos veces mayor que la precipitación, lo que acaciana un déficit de agua en el suelo.
Esta zona es la menos agrícola de las tres, con un patrón de cultivos similar a lazo na
de valle (Cuadro 2).

124
Cuadro 1. Distribución de la superficie territorial y cultivada.

SUPERFICIE
Zona
agro Territorial Cultivada
ecológica ha % ha %

Valle 16.990 23.0 2.950 27.0


% (100) (17.4)

Intermedia 10.967 15.0 1.81 o 17.0


% (100) (16.5)

Alta 45.568 62.0 6.160 56.0


% (100) (13.5)

Total 73.525 100.0 10.920 100.0


% (100) (14.9)

Cuadro 2. Cultivos más importantes en la subregión Calca-Urubamba, distribuidos


por zonas agroecológicas. Datos del año 1984, expresados en
hectáreas.

Zonas agroecológicas
Cultivos
Baja Media Alta Total

Maíz 1.006 530 1.950 3.486


Papa 472 330 979 1.781
Cebada 217 221 570 1.008
Trigo 182 120 286 588
Haba 109 123 281 513
Olluco 65 46 202 313
Oca 24 14 94 132
lzaño 31 1 77 109
Repollo 31 11 59 101
No tradicionales 812 414 1.663 2.889

Total ha 2.949 1.81 o 6.161 10.920


% 27.0 16.6 56.4 100.0

125
En la zona alta la evapotranspiración también es menor que la precipitación
en relaciones que llegan a 0.5 en el bosque y 0.25 en el páramo. Esta zona es la de
mayor superficie cultivada y corresponde a una agricultura de secano. El cultivo más
importante es el maíz, seguido por la papa y la cebada; en un segundo grupo se
encuentran el trigo y el haba, y finalmente cultivos típicamente andinos como la u-
lloca, la oca y el izaño (Cuadro 2).

Las subregiones riego y secano

A continuación se presenta el análisis de algunas variables que permiten


apreciar las diferencias existentes en el interior de la región y por lo tanto, definir
y caracterizar subregiones (o tipos).

La variable ordenadora del análisis ha sido la fuente de agua, que permite


diferenciar entre áreas bajo riego y áreas de secano; la hipótesis fué la siguiente:

La dotación regular de agua influye en la estructura de los cultivos y en la


toma de deciciones del productor.

El trabajo se basó en una encuesta dirigida a 61 fincas, de las cuales 45


corresponden a lazonabajo riego y 16 a lade secano. Del total, 37fincas pertenecen
al estrato de 1 a > 5 ha; 18, al estrato de 5 a > 1O ha; y 6, al estrato de 1O a> 20
ha.

En esta aproximación se agrupan los productores de las áreas bajo riego y


los de las áreas de secano, y se señalan sus diferencias en cuanto a estructura de
la producción, sistemas. En las áreas de secano el relieve va de quebrado a
ondulado, la tenencia de la tierra es individual o asociativa, y la producción se
destina al autoconsumo y los excedentes al mercado.

Tamaño de la finca

El número de fincas bajo riego y secano por estrato, lo mismo que su tamaño
promedio se ofrecen en el Cuadro 3.

Las fincas pequeñas (1 - > 5 ha) de zonas bajo riego tienen un tamaño
promedio de 1.88 ha y las de secano, 2.27 ha. En las fincas medianas (5 - > 1O ha),
el promedio es de 6.82 ha en la zona bajo riego y de 6.29 ha para la zona de secano.
Las fincas grandes (1 O - > 20 ha) tinen un promedio de 17.4 ha, en zonas irrigadas

126
y de 1o ha en zonas de seca-no. Este último dato que debe tomarse con reserva por
tra-tarse del resultado de una sola finca.

Componentes de los sistemas de producción

El estudio de las fincas en la región Calca-Urubamba indica que en el área


bajo riego el 84% de las fincas son de explotación mixta y el 16% de explotación
agrícola. En contraste, en las zonas de secano el 100% de las fincas son de
explotación mixta.

En el subsistema agrícola con riego el sistema de cultivo más frecuente


(49%) es el maíz, seguido de maíz-papa (31 %) y con menos frecuencia el arreglo
maíz-papa-trigo (9%); los demás no son relevantes (Cuadro 4). En el subsistema
agrícola de secano predominan los arreglos maíz-papa-cebada-haba (63%) y maíz-
papa-trigo-cebada-haba (19%).

En la agricultura de secano de la zona alta-de alto riesgo por la irregularidad


de las lluvias, las heladas y los derrumbes- el productor utiliza arreglos con tres o
más cultivos de mayor rusticidad o resistentes a las heladas y sequías, lo que le
permiten asegurar el abastecimiento en años malos. En cambio, en la agricultura
bajo riego de la zona baja o de valle, los sistemas imperantes se componen de uno
o dos cultivos, debido a la disponibilidad de agua y la relativa protección contra las
inclemencias del tiempo.

En el subsistema pecuario de la zona bajo riego predo-mina el sistema


vacuno (40%), seguido por el arreglo vacuno-porcino-cuy (16%). Los demás
arreglos, que son varios, no tienen significación.

En las áreas de secano aumentan las tierras en barbecho (17%), dado que
no es posible cultivar todo el año por falta de agua permanente. El período de
aprovechamiento coincide con la estación de lluvias (noviembre-mayo). La
proporción de tierras en descanso es alta (11.5%) debido a la falta de asistencia
técnica que propicie un cambio en la mentalidad del productor.

En áreas bajo riego las fincas presentan un uso intensivo de la tierra: cerca
del 90% del total se hallaban cultivadas al momento de recolectar la información.

La proporción de tierras ocupadas con pastos naturales, tanto en riego como


en secano, es baja, por tratarse de Cuadro 3. Número y superficie de las fincas de
1 a 20 hectáreas por estrato.

127
Riego Secano Total

Estrato 1>5 5> 1o 10>20 1>5 5> 1o 10>20

No. de fincas 30 10 5 7 8 1 61

Superficie 56.27 60.28 87.0 15.9 50.5 1o.o 287.87

Tamaño X 1.88 6.82 17.4 2.27 6.29 1O.O

Cuadro 4. Frecuencia de diferentes areglos de cultivo en á-rea de riego y secano.

Riego Secano
Subsistema agrícola
finca % finca %

Maíz 22 49
Maíz-papa 14 31 1 6
Maíz-papa-trigo 4 9 1 6
Maíz-papa-cebada-haba 10 63
Maíz-papa-trigo-cebada-haba 3 19
Otros 5 11 1 6

Totales 45 100 16 100

128
fincas menores de 20 ha. Los censos nacionales indican que estas se hallan
bastante extendidos en las fincas grandes (20 a 100 ha).

Para el caso en estudio, el 84.6% de las tierras agrícolas se hallan en secano


y sólo el 15.4% corresponden a tierras bajo riego.

Superficie dedicada a los principales cultivos

En el área bajo riego prevalecen los cultivos de maíz (78.8%) y papa (13.5%);
en cambio, en el área de secano prevalece la cebada (41.6%) y son también
importantes la papa, el maíz y el haba. Los cuatro cultivos mensionados cubren el
91.4% de la superficie cultivada. Con excepción del maíz, los demás cultivos son
en su mayoría de secano (Cuadro 5).

Preferencia de los productores

La oferta de producción es un indicador de lo que el productor espera colocar


en el mercado y de lo que requiere para su autoabastecimiento. En áreas bajo riego
la mayoría de los productores prefieren cultivar maíz (91 %) y papa (49%). Por
tradición, el maíz ha sido un producto de exportación en la región Calca-Urubamba
y si bien en los últimos años se han perdido los mercados internacionales, aún
continúa la demanda del producto en el mercado interno.

En las áreas de secano los productores prefieren cuatro cultivos: maíz (94%),
papa (94%), haba (88%) y cebada (81 %). Se observa, sin embargo, que no hay una
total concordancia entre la preferencia de los productores y el área dedicada a cada
cultivo. En el subsistema pecuario de las áreas de secano (Cuadro 6) es dominante
el arreglo vacuno-ovino-equino (75%), seguido del vacuno-cuy-ave-equino (13%).
En esta área es importante la presencia de los equinos como animales de carga
para el transporte de los productos desde las chacras a los centros de mercado, y
viceversa.
El Cuadro 7 presenta, en cifras porcentuales, el uso o aprovechamiento de
las tierras en las fincas investigadas.

Area promedio por cultivo

El área dedicada a cada cultivo es un indicador importante del destino de la


producción (Cuadro 8). Es probable que las áreas muy pequeñas de la finca se

129
Cuadro 5. Porcentaje de la superficie cultivada bajo riego y en secano en la región
Calca-Urubamba.

Principales cultivos
Superficie
cultivada Bajo riego En secano
% %

Maíz 78.8 14.7


Papa 13.5 20.5
Cebada 2.3 41.6
Trigo 3.1 8.6
Haba 14.6
Hortalizas 2.0
Frutales 0.3

Cuadro 6. Frecuencia de diferentes arreglos pecuarios en áreas de riego y


secano.

Riego Secano
Subsistema pecuario
finca % finca %

Vacuno 18 40
Vacuno-porcino-cuy 7 16 1 6
Va cu no-ovino-equino 12 75
~cuno-cuy-ave-equino 2 4 2
Otros 11 24 1 6
Ninguno 7 16

45 100 16 100

130
Cuadro 7. Aprovechamiento de la tierra en las áreas bajo riego y de secano.

Superficie Riego Secano Total


% % %

Cultivos 81.8 66.9 77.7


Barbecho 4.7 17.2 8.1
Descanso 1.0 11.5 3.8
Pastos cultivados 8.1 5.9
Pastos naturales 2.8 4.4 3.3
Otros usos 1.6 1.2

Superficie total 100.0 100.0 100.0

Cuadro 8. Superficie en hectáreas dedicada por cultivo, según el tamaño de la


finca.

Riego Secano
Cultivo
ha 1>5 5>10 10 > 20 1>5 5>10 10 > 20

Maíz 1.32 4.18 12.4 0.46 0.50 1.0


Papa 0.43 1.36 4.0 0.53 0.82 1.0
Cebada 2.00 2.0 0.68 1.93 5.0
Trigo 0.31 2.00 2.0 1.00 0.50 2.0
Haba 0.29 0.65 1.0
Hortalizas 0.50 1.00
Frutales o.50

Cuadro 9. Rendimientos por cultivo en fincas bajo riego y en secano.

Riego Secano

Cultivo No. fincas Tm/ha No. fincas Tm/ha

Maíz 41 2.54 15 1.51


Papa 22 7.55 15 6.69
Trigo 4 2.36 4 2.04
Cebada 2 2.03 13 1.89
Haba 13 1.59

131
dediquen al autoabastecimiento, en tanto que las áreas mayores puedan esta
orientadas al mercado. Pero este comentario debe tomarse con reserva, atendi-
endo a la naturaleza e intensidad de uso de los productos, como podría ser el caso
de las hortalizas y los frutales. Los resultados de la encuesta muestran que la
asignación del recurso tierra en el área bajo riego está dedicada, en su mayoría, al
maíz y a la papa (relación de 3 a 1). En el área de secano esta asignación se dedica
a la cebada, la papa y el haba.

Rendimiento de los principales cultivos

Los rendi mientas observados para los diferentes cultivos en riego y secano
se presentan en el Cuadro 9. En él se observa una diferencia entre los rendimientos
entre las zonas bajo riego y en secano. Con excepción de la papa, los rendimientos
de los demás cultivos en ambas zonas se pueden considerar como de tecnología
media.

Conclusiones y recomendaciones

Dos tercios de la población de la zona bajo estudio se encuentra en áreas


rurales, indicativo de la importancia de la actividad agropecuaria de la población. El
35% de la superficie se encuentra cubierta por pastos naturales, lo cual supone la
existencia de una ganadería extensiva. Por esta razón, tanto la investigación como
la extensión deben considerar éste rubro en sus respectivas estrategias.

La existencia de tres zonas agroecológicas implica que las recomendaciones


tecnológicas y la investigación deben ser diferenciadas para cada una de ellas.

La mayor parte de la superficie agrícola se encuentra en el área de secano


(50%), por lo que la investigación básica debe enfocar su atención hacia esta área.

Dado que los datos climáticos indican la presencia de heladas, se propone


una línea de investigación que busque la reducción de riesgos mediante el uso
variedades resistentes a las heladas, o la variación en las fechas de siembra.

El análisis de las variables demuestra que la diferenciación entre áreas bajo


riego y áreas en secano es perfectamente válida para planificar estrategias de
acción.

132
Las variables indican también una aparente homogeneidad de la producción
agropecuaria y el tipo de productor en las áreas bajo riego, lo cual facilitaría el
estudio de modelos tecnológicos y de transferencia de tecnología.

El sistema de producción que se quiere estudiar en las áreas bajo riego se


basa en cultivos de maíz y papa, complementados con ganado vacuno. Tomando
en consideración el nivel tecnológico y la simplicidad de los sistemas en el área bajo
riego, se sugiere adelantar acciones de fomento que incluyan recomendaciones
sobre manejo empresarial de la finca, con el fin de lograr un incremento del ingreso,
princi-palmente mediante relaciones insumo/insumo y producto/pro-dueto.

Los resultados indican la posible existencia de diferentes tipos de produc-


tores en el área de secano. Será necesario, por lo tanto, cuantificar las variables
sobre tenencia de la tierra, fisiografía y destino de la producción, a fin de establecer
una nueva aproximación a la tipología de productores.

En el área de secano los arreglos muestran una mayor complejidad: el más


frecuente (63%) tiene cuatro o cinco componentes agrícolas (19%) y tres
componentes pecuarios (19%), lo cual indica una aversión al riesgo y por lo tanto,
al cambio. En este caso la asistencia técnica debe ser directa.

Tanto la estructura de cultivos como la asignación de recursos parecen


guardar proporcionalidad en los tres estratos de tamaño promedio de las fincas. Los
cultivos principales en el área de secano, a los que el productor destina una mayor
asignación del recurso tierra, son la cebada, el trigo y la papa. Es importante
considerar éste factor en la definición de estrategias para la investigación y la trans-
ferencia de tecnología.

Finalmente, se recomienda contemplar la conservación de los suelos como


línea futura de investigación.

133
Bibliografía

CABALLERO, W. y GIL, J. M. 1981. El enfoque de sistemas en la generación y


transferencia de tecnología del INIPA, Nota Agroeconómica No. 3. Sep-
tiembre de 1981. INIPA, Lima.

HART, ROBERT. 1979. Agroecosistemas: conceptos básicos. Centro Agronómico


Tropical de Investigación y Enseñanza. Turrialba, Costa Rica.

PERU, INIPA. s.f. Determinación de zonas agroecológicas en el Valle Sagrado de


los Incas, OCAR. Trabajo inédito.

PERU. 1972. 11 Censo nacional agropecuario. INE, Lima.

PERU. 1981. VIII Censo nacional de población y vivienda. INE, Lima.

***

DISCUSION

Se preguntó si en otras partes podrían efectuarse ca-racterizaciones


similares a la efectuada en Perú, en cambio de otras metodologías más complejas
y porqué sería necesario comenzar a nivel de región y no por la finca. Pero se dijo
que este enfoque no era excluyente de otras metodologías, sino complementario.
Se comentó que podría tener similitud en resultados con metodologías más
sofisticadas como la de Brazil, pero desde el punto de vista de su aplicación podría
estar acorde con las condiciones de quienes no tienen acceso a la tecnología de
comunicaciones; además, parecía válido efectuar una partición previa antes que
tener fincas determinadas. De todas formas, para utilizar éste método se trataría
primero de lograr un marco conceptual, dado que la realidad se puede organizar
en formas diferentes para establecer jerarquías. Por ejemplo, se puede comenzar
el estudio con concepciones generales que se van particularizando a medida que
el trabajo se adelanta.

Se mencionó que se estaba formando un conjunto de conocimientos de


arriba a abajo. Este enfoque es a veces suficiente, pero su utilidad depende de los
objetivos que se persigan. Por ejemplo, para especificar medidas de política

134
económica no será necesario trabajar con datos de zonas agroecológicas -las
cuales, en ocasiones, no responden a estas necesidades- sino, con datos a nivel
macro que miren más a las estructuras del sector económico. De otra parte, a ni-
vel de municipio será necesario conocer no sólo el número de productores, sino
efectuar una caracterización de los mis-mas, así como de su distribución.

La aplicación de métodos analíticos a nivel de fincas es bastante difícil,


porque generalmente -desde el punto de vista de sus interacciones- no existe
información a este nivel. La información existe más a menudo a nivel de región o de
cultivos. Este hecho implica la utilización de otro tipo de técnicas para la recolección
y análisis de información. Esto debe justificarse según los objetivos de la clasifica-
ción de fincas y el uso inmediato que se busque dar a esta clasificación, ya que
debido a la dinamicidad propia del sector agrícola, puede estar sujeto a cambios en
el mediano plazo. A veces se presentan marcos conceptuales de proyección y hasta
se define un marco muestra! que en muchas ocaciones es el propio censo. No se
hacen segmentos censales para establecer cuales casos van juntos y cuales
separados. En consecuencia, para facilitar el trabajo de clasificación se sugiere
encontrar equivalentes a nivel de finca.

135
UNA TIPOLOGIA DE SISTEMAS DE
PRODUCCION GANADERA:
PRIMERA APROXIMACION

Equipo de ganadería, DEA-UNAN*

El estudio de la ganadería forma parte de los programas docentes y de


investigación del Departamento de Economía Agrícola de la Universidad Nacional
de Nicaragua, y de su Centro Regional en Juigalpa. Con el apoyo financiero del
CllD, esta actividad hace parte hoy de un debate académico sobre las
características de los sistemas de producción ga-nadera en el país.

El proyecto de investigación "Sistemas de Producción Ganadera" adelantó


en su primera etapa, el reconocimiento global de la problemática ganadera de la
Región V de Nicaragua. El resultado de la segunda etapa, cuyo propósito fué
obtener una primera aproximación de la tipología de sistemas de producción, se
presenta en éste documento. La tipología será objeto de un exámen riguroso en la
siguiente etapa del proyecto, con el propósito de comprender, desde el punto de
vista técnico y socioeconómico, la lógica de los sistemas de producción que permita
formular una política de desarrollo ganadero.

Hipótesis generales

Las hipótesis generales fueron las siguientes:

1. Dada la cantidad y tipo de recursos a disposición de los ganaderos, los


problemas de alimentación del hato en el verano se pueden solucionar de tres
maneras: a) Los ganaderos que poseen dos fincas, una en la zona seca y otra
en la húmeda, practican el traslado de su ganado a la "montaña" (zona húmeda)
en los meses de verano. b) Los ganaderos que tienen una sola finca alquilan
"pastos de verano". c) Los ganaderos que poseen una finca pequeña pueden
intensificar el capital (concentrado, etc.) o el trabajo (siembra de pastos de
corte, caña de azucar, etc.). Estos ganaderos tienen un área de tierra menor,
pero generalmente con con buenas condiciones de fertilidad y pendiente, un
buen acceso al mercado y son principalmente productores de leche.
Se presume que a cada una de esas formas de alimentar el ganado
en verano, corresponden niveles diferentes de intensificación y productividad.

* Departamento de Economía Agrícola, Universidad Nacional de Nicaragua.

136
2. Las características de los sistemas de producción de los pequeños y medianos
ganaderos son tales (propósito principalmente lechero) que el material genético
produ-cido en las empresas estatales Area Propiedad del Pueblo (APP), no
responde a las necesidades de esos productores.

3. La política de precios que impulsa la "dolarización" de la ganadería beneficia un


determinado estrato de ganaderos (grandes, intermediarios y repastadores).
Los pequeños y medianos productores no se benefician, dado que la mayoría
vende sus terneros a los productores grandes, cuando cumplen un año de edad.
Esa política acentúa el desarrollo desigual entre productores.

4. Las políticas de precios impulsadas a través de la Empresa Nicaraguense de


Productos Lácteos, ENILAC yde la Empresa Nacional de Mataderos y Reforma
Agraria, ENAMARA, tienen una influencia negativa sobre la producción de
carne a mediano plazo.
La dolarizaciónde la ganadería incentiva al productor a especializarse
en el engorde del ganado (novillos de 2 años y más). El alto precio de la leche
estimula en los pequeños productores el ordeño a fondo, que perjudica el
crecimiento del ternero, por lo que éstos se venden con un peso bajo (100 a 11 O
Kgs), fenómeno que perjudica las siguientes etapas del proceso de producción
de carne (desarrollo y engorde).

Partiendo de estas hipótesis que constituyen la base de las encuestas


realizadas en Mayo de 1986, se trató de elaborar una tipología de sistemas de
producción de la Región V. El analisis de los datos permitió formular hipótesis
adicionales relativas al carácter de los distintos sistemas de producción, para lo cual
se utilizaron las siguientes características:

- Area ganadera total de la finca.


- Número de fincas incluídas en el sistema de producción.
- Zona agroecológica.
- Propósito de la ganadería.
- Tipo de fuer~a de trabajo (familiar, asalariada, permanente o temporal).
- Sistema de alimentación del ganado, particularmente en verano.
- Características de la intensificación en trabajo y en capital proporcional
(alimento concentrado).
- Características de los rendimientos físicos (carga animal, producción de
leche por lactancia).
- Características de los rendimientos económicos (pro-ductividad del trabajo
(margen/OH), rendimiento de la tierra ganadera (margen/Mz)).

137
Metodología

Los pasos metodologícos puestos en práctica fueron los siguientes:

Encuestas: Con el propósito de caracterizar sus sistemas de producción se


entrevistaron 48 ganaderos (un día por finca), en las diferentes zonas selecciona-
das que comprenden ocho municipios. En el levantamiento participaron 13
estudiantes del primer año de Economía Agrícola de la Universidad Nacional.

Tabulación de resultados: Después de cada encuesta se tabularon las


características mas relevantes de los sistemas y se cálcularon los indicadores
zootécnicos de producción, costos proporcionales (el tipo de encuesta no permite
recopilar los costos fijos), y resultados económicos y de productividad.

Hipótesis de Trabajo: Como resultado del análisis de cada una de las encuestas
se formularon tres hipótesis adicio-nales relacionadas con: a) Las relaciones entre
las dife-rentes características de los sistemas de producción; b) Los diferentes tipos
de sistemas de producción; ye) Los problemas que enfrenta cada tipo de productor.

Correlación de Variables: Las diferentes características de los sistemas de


producción se correlacionaron por medio de gráficas. Esto permitió comprobar las
hipótesis planteadas y comprender, en forma preliminar, las características de un
mismo sistema de producción.
En cada gráfica se correlacionan dos características cuantificadas, A y B.
Cada sistema de producción está representado por un símbolo, para el cual se lee
la característica A en el eje de las X y las características B en el eje de las Y. El
símbolo utilizado no es el mismo para cada sistema, éste difiere según el propósito:
una estrella, indica el sistema "leche + crianza de terneros propios"; un cuadro, el
sistema "leche +crianza+ desarrollo de terneros propios", etc. De esta manera, en
la misma gráfica es posible correlacionar el propósito con la carcterística A ó B, o
con las dos en forma simultánea.
Los símbolos son de color blanco, negro o gris, según el número de fincas
que integran el sistema de producción;junto a cada símbolo aparece un número que
identifica las fincas.

Elaboración de la Tipología: En una sola gráfica es posible correlacionar cuatro


características. Los productores con comportamiento común se agruparon hasta
obtener tipos de fincas con características similares, particularmente en cuanto a
niveles de intensificación, rendimientos y productividad del trabajo.

138
Representación gráfica de la tipología: La agrupación en gráficas de correlación
de variables permitió evidenciar la similitud de los productores por tipo. Adicion-
almente, se calcularon los promedios de una serie de datos cuantitativos para cada
tipo.

Resultados de las encuestas

Datos generales

Como un producto del trabajo de investigación se prepararon trece gráficas


que comprenden diferentes correlaciones. Estos instrumentos fueron construídos
con la información recogida en las encuestas, y constituyen la base para el análisis
y los resultados que se presentan a continua-ción.

El conjunto de gráficas, encuestas y tabulaciones permite visualizartodas las


características de un sistema de producción dado; más aún, permite conocer los
grupos de sistemas de producción presentes en más de una gráfica.

La información recogida en 48 fincas de ocho municipios, se observa en el


Cuadro 1. El 35% de los municipios que conforman la región se encuentra en la
zona seca y el 65% en la zona semi-húmeda.

Las fincas encuestadas se agruparon en los siguientes estratos, según su


área: Oa 100 manzanas (Mz), 101 a 250, 251 a 500, 501 a 750, y mayores de 750
manzanas. El Cuadro 2 presenta la agrupación por estratos del número de
ganaderos, número de fincas, promedio de fincas por ganadero y número de
productores en relación a la tenencia de 1, 2 y 3 fincas (Figuras 1 y 2). El promedio
de fincas para cada estrato se obtuvo de relacionar el número de fincas y el número
de ga-naderos por estrato. Se observa cómo, al aumentar el número de fincas que
posee cada productor, disminuye su número. El Cuadro 3 presenta el propósito de
la ganadería en relación al número de fincas poseídas

Correlación: intensificación en trabajo - área total ganadera - propósito -


número de fincas (Gráfica 1): La intensificación en trabajo (IT) resulta de dividir
el número de días de trabajo invertidos en ganadería por el área total ganadera; esta
última incluye las áreas en pastos y en tacotal utilizadas por el ganado, sean estas
propias o alqui-ladas, así:

139
.Cuadro 1. Número de encuestas por municipio.

Municipio No. Encuestas %


San José de los Remates 6 12.50
Boaco 8 16.66
Camoapa 10 20.88
San Lorenzo 5 10.41
Juigalpa 5 10.41
AcoyaQa 7 14.55
Santo Tomás 4 8.33
San Pedro de Lovago 3 6.23
TOTAL 48 100.00

Cuadro 2. Datos generales de la encuesta, por estratos.


No. fincas/ganadero
Estrato No. No. X de fincas
(Mz) Ganaderos Fincas /ganadero 1 2 3 +3 Total
0-100 15 16 1.06 14 1 15
101-250 14 23 1.64 5 9 14
251-500 10 22 2.20 2 6 2 10
501-750 6 12 2.00 1 4 1 6
751-más 3 8 2.66 1 2 3
Total 48 81 1.68 22 21 3 2 48

Cuadro 3. Propósito de la ganadería en relación a la posesión de las fincas.


No. fincas a b c a+d b+d a+c total
1 finca 17 3 1 1 22
2 fincas 11 3 5 1 1 21
3 fincas 2 1 3
+ 3 fincas 2 2

Total 30 6 5 2 4 1 48
a= crianza y leche.
b = crianza, leche y desarrollo de terneros producidos en
la finca.
c = crianza, leche, desarrollo y engorde de terneros,
tanto nacidos en la finca como adquiridos.
d = compra de terneros para desarrollo.
e = compra de terneros para engorde.

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Figura 1. Nivel de intensificación en trabajo (IT) por área total ganadera.

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Figura 2. Nivel de intensificación en capital-costo de capital proporcional, por Mz,


por área total gana-dera.

142
Número total de días-hombres
IT=
area total ganadera

Al analizar la ubicación de los diferentes símbolos en relación al área total


ganadera, se observa cómo entre 1 y 100 Mz sólo se encuentran productores que
tienen una sola finca (símbolos blancos); entre 100y150 Mz se encuentran aquellos
con una ó dos fincas (símbolos blancos y negros). De 150 Mz en adelante los
productores tienen dos fincas o más (símbolos negros y rayados). Del análisis de
esta gráfica podemos inferir lo siguiente:

Al aumentar el área de las fincas, el número de productors tiende a disminuír,


al tiempo que el promedio de fincas por productor tiende a aumentar. Lo anterior
señala claramente el grado de concentración de la tierra dedicada a la ganadería.

A medida que aumenta el número de fincas (y su área) por productor, la


actividad o propósito presenta una tendencia a la variación. El 52% de los que
poseen dos fi neas se dedican al propósito A y el 48% restante a otros. Esta relación
es inversa en el caso de los que poseen una sola finca: el 77% se dedica al propósito
A y el 23% a otros propósitos.

Características de los Sistemas de Producción

Las características analizadas tienen relación con la actividad ganadera. Sin


embargo, cuando la agricultura y la ganadería son parte de un mismo sistema de
producción, existen interrelaciones que es necesario considerar para comprender
el funcionamiento de las fincas pequeñas.

La mayoría de los productores que poseen menos de 250 Mz se dedican a


la actividad lechera yde crianza de sus propios terneros (estrellas). Por el contrario,
los productores con más de 250 Mz generalmente engordan -o por lo menos
desarrollan- novillos propios o comprados (cuadros, círculos, rectángulos, círculos
con recta).

Un productor desarolla y engorda novillos, solamente en la medida en que


cuente con suficiente pastos que aseguren la alimentación en el verano; esto
significa que probable mente éste productor tiene una segunda finca en la zona
húmeda.

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Gráfica 1. Nivel de intensificación en trabajo - área total ganadera.

144
Se observa una correlación negativa entre el nivel de intensificación en
trabajo y el área total ganadera (línea). En las explotaciones más pequeñas se
invierte más trabajo por manzana para obtener un mayor ingreso, resolver el pro-
blema de alimentación en verano, etc. La mano de obra, en su mayoría familiar,
tiene un costo de oportunidad bajo; además, el propósito lechero en esas fincas,
requiere un ma-yor trabajo que el de engorde.

En cuanto al nivel de intensificación del trabajo se destacan, en forma global,


tres grupos:

1. Los sistemas de producción de una sola finca, de tamaño pequeño a


medio (menor de 150 Mz) y con propósito lechero y de crianza (estrellas blancas).
Estas presentan un nivel de intensificación en trabajo de medio a alto (más de 1O
DH/Mz).
Dentro de éste grupo se presentan algunos sistemas que incluyen dos fincas
(estrellas negras). Estos tienen un nivel de intensificación inferior a los de una sola
finca, de-bido a que el productor, al poseer una segunda finca en zona húmeda,
puede invertir menos trabajo para asegurar la alimentación del ganado en el verano.

2. Sistemas con dos fincas de extensión media (100 a 250 Mz), propósito
lechero y de crianza (estrellas negras) y un nivel medio de intensificación en trabajo
(7 a 11 DH/Mz).

3. Sistemas con dos o más fincas grandes (más de 250 Mz), con propósito
lechero, y de crianza, desarrollo y engorde (cuadros, círculos, círculos con recta,
negros y rayados). Estos presentan un nivel bajo de intensificación en trabajo
(menor de 8 DH/Mz).

Cabe anotar que el análisis global de las gráficas se basó en tendencias


generales. Los casos particulares se analizaron individualmente con el fin de
explicar su carácter "marginal".

Correlación: intensificación en capital - área total ganadera - propósito-


número de fincas: El capital invertido en el sistema puede ser fijo, es decir,
independiente del volumen de actividad o proporcional a éste volumen (Gráfica 2).
En esta etapa de la investigación solamente se evaluó el nivel de intensificación en
capital proporcional. De éste nivel se excluyeron los novillos adquiridos para
desarrollo o engorde durante menos de un año, a fin de tener un criterio homogéneo
de comparación entre los diferentes sistemas de producción. Así, el capital
proporcional tomado en cuenta corresponde a los insumos pecuarios adquiridos en
la finca.

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Gráfica 2. Nivel de intensificación en capital - costo de capital proporcional por


manzana (Mz) - área total ganadera.

146
La mayor parte del costo en insumos proviene de la compra de alimentos comple-
mentarios.

En el grupo de fincas menores de 200 Mz se encuentran sistemas con alta


intensificación en capital y otros con un nivel de medio a bajo, particularmente en
las fincas muy pequeñas (menores de 40 Mz).

Pero mientras esa diferenciación existe para los sistemas de una sola finca,
los sistemas con dos fincas (símbolos negros) muestran bajos niveles de
intensificación. Estos utilizan poco alimento concentrado, porque la finca de zona
húmeda brinda forraje en verano (los sistemas 26 y 15 tienen un alto nivel de
intensificación en capital e incluyen dos fincas, pero ambas estan ubicadas en la
zona agro-ecológica seca, donde el sistema de alimentación de verano no se basa
en el traslado del ganado). Por la misma razón, los sistemas mayores de 200 Mz
presentan, igualmente, un bajo nivel de intensificación en capital.

Correlación: tipo de mano de obra familiar - a rea total ganadera -propósito -


número de fincas: En esta correlación las fincas menores de 50 Mz emplean, en
su mayoría, mano de obra familiar; la asalariada es de carácter temporal (Gráfica
3).

En el grupo de fincas de 50 a 150 manzanas la mayor parte de la mano de


obra es asalariada. En ellas, además de la familia y de los obreros temporales, se
emplea muchas veces un obrero permanente.

En fincas mayores de 150 Mz la mano de obra es en su mayoría asalariada.


Hasta las 700 Mz la mano de obra familiar continúa siendo importante (15 a 45% de
la mano de obra total), pero está especializada en algunas tareas (compras y
ventas, control del trabajo, etc.) y el ganadero empieza a mostrar un comportam-
iento semi-ausentista (es frecuente que viva en la ciudad). Aunque el tamaño de
la muestra es demasiado pequeño para generalizar, es probable que en fincas con
más de 700 Mz el productor se torne definitivamente ausentista.

Correlación: producción lechera por lactancia - costo anual de alimento


suplementario por unidad ganadera - propósito - número de fincas: En la
Gráfica 4 se aprecia cómo el promedio de producción de leche por lactancia se
correlaciona positiviamente con la cantidad de alimento adquirido como comple-
mento para el ganado. Es probable que el nitrógeno sea un factor limitante en la
producción lechera, dado que en verano la producción disminuye considerable-
mente en las fincas de zona seca, donde no se suministra alimento complementario.

147
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Gráfica 3. Proporción de mano de obra asalariada - área total ganadera.

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Gráfica 4. Producción lechera media por lactancia - costo anual de alimento


suplementario I unidad ganadera.

149
Se cree que al suministrar el elemento limitante (nitrógeno), la producción
lechera de verano puede alcanzar niveles similares a la de invierno.

Correlación: carga animal media - área total ganadera - propósito - número de


fincas: La carga animal 1 puede ser un indicador de intensificación (Gráfica 5). En
éste caso el ganado se considera como un capital que el productor invierte en sus
tierras. Pero, cuando el ganado se considera como producción final (un novillo de
engorde) o como intermediario (una vaca lechera), la carga puede ser también un
indicador de rendimiento. Al invertir cantidades determina-das de capital y de
trabajo en sus tierras, el productor logra aumentar en un número dado sus cabezas
de ganado. Este valor, que se agrega o se extrae al ganado, es un producto del
trabajo invertido.

La gráfica muestra cómo los sistemas menores de 500 Mz presentan una


gran variabilidad de carga, mientras que aquellos con más de 500 Mz presentan
cargas bajas (menores de 0.5 UG/Mz). Estos ultimas son característicos de la
ganade-ría extensiva de engorde, que traslada el ganado a la zona húmeda en el
período estival y tiene un bajo rendimiento por manzana.

Las fincas pequeñas (menores de 60 Mz) tienen una carga relativamente alta
(más de 0.9 UG/Mz). Esto ocurre también en el caso de las fincas medianas (60
a 150 Mz) cuyos productores tienen una sola finca (símbolos negros), donde los
altos niveles de intensificación en trabajo permiten una carga media-alta (más de
0.7 UG/Mz). Por el contrario, las explotaciones medianas con dos fincas presentan
una carga animal inferior (0.4 a 0.8 UG/Mz).

Correlación: márgen por unidad de superficie- rendimiento de la tierra· área


total ganadera - número de fincas - propósito: Se trata aquí de comparar los
sistemas según un criterio de rendimiento económico 2 (Gráfica 6). El margen se
calcula restando los costos proporcionales al producto bruto; sin embargo, los
costos de mano de obra no se restan, a fin de tener un criterio de comparación
homogéneo entre los diferentes sistemas. En algunos sistemas la fuerza de trabajo
es en su mayoría asalariada, y tiene un costo financiero superior al de aquellos que
emplean la misma cantidad de fuerza de trabajo, pero de tipo familiar.

En la gráfica se aprecia claramente el bajo rendimiento de la tierra en los sistemas


con varias fincas, área grande y actividad de desarrollo-engorde. En los demás
sistemas se presenta un alto rendimiento de la tierra en unos casos, y bajo en otros.
Esas diferencias se explican al cruzar la información con la de otras gráficas
(conforme a las topologías de fincas).
1 La carga animal se mide en unidades ganaderas por manzana (1 UG = una vaca parida).
2 No se trata de un verdadero rendimiento económico de la tierra, ya que solamente se descuenta una parte
de los costos.

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Gráfica 5. Carga animal media anual - área total ganadera


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Gráfica 6. Rendimiento de la tierra - área total ganadera

152
Correlación: productividad del trabajo -área total ganadera - número de fincas
- propósito: Para establecer esta correlación se utilizó el mismo margen de la
anterior, pero en éste caso se dividió por el número de días de trabajo (Grá-fica 7).

Los sistemas con varias fincas, área grande y propósito de desarrollo-


engorde tienen una alta productividad del trabajo. El sistema es extensivo en trabajo
y utiliza una área considerable de tierra, lo que rentabiliza el trabajo invertido.

La gran variabilidad en el caso de las demás fincas se explica a continuación.

Tipología de las fincas

Productor tipo A: Son los que poseen una sola finca con un área entre pequeña
y media (1Oa150 Mz), dedicada a la producción de leche, la crianza de terneros y,
en algunos casos, al desarrollo de novillos.

Estos sistemas se encuentran ubicados generalmente, en zonas con clima,


tipo de suelos y acceso al mercado, favorables. Los productores utilizan la mano de
obra familiar y la asalariada en una proporción más o menos equilibrada. Tienen
una alta intensificación en trabajo en relación a los demás tipos de productores (16.7
DH/Mz). Esta intensificación les permite tener una carga animal media-alta (0.83
UG/Mz.), debido a que manejan mejor sus pastos y por lo tan-to, obtienen un mejor
rendimiento por manzana.

También tienen una alta intensificación en capital (4327 Córdobas (C)/Mz de


capital proporcional). La cantidad de alimento concentrado por unidad ganadera es
igualmente alta. Esto afecta la producción de leche y se refleja en una elevada
producción por lactancia (1549 litros, en promedio).

Los productores se benefician de rentas diferenciales de las clases 1y11 (en


términos relativos, condiciones favorables de producción y alto grado de
intensificación en capital, respectivamente). Esas rentas se manifiestan a

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Gráfica 7. Productividad del trabajo - área total ganadera.

154
través de un alto rendimiento de la tierra (58.000 C/Mz) y una productividad de
media a alta (4.800 C/DH, en promedio).

Productor tipo B: Son aquellos que poseen una sola finca de área pequeña a
media (1 oa 200 Mz) que, al igual que los del tipo A, se dedican a la producción de
leche, la crianza de terneros y, en ocaciones, a su desarrollo.

Estos productores viven en una zona agroecológica desfavorable (zona


seca). Debido a esto, aunque tienen una alta intensificación en trabajo (14,8 DH/Mz)
no logran valorizarlo tanto como los del tipo A. La intensificación en trabajo, sin
embargo, les permite tener una carga animal media (0.80 UG/Mz).

La producción depende, principalmente, del trabajo familiar. Se identifican


como de capital medio (191 O C/Mz de capital proporcional), que no es suficiente
para alcanzar una buena producción de leche (61 Olitros por lactancia, en prome-
dio). Esto se debe, en parte, a que no ordeñan completamente las vacas para no
afectar el desarrollo de los terneros.

Las adversas condiciones de producción en ese grupo y quizás la poca


intensificación en capital, hace que los productores tengan un margen bajo por
manzana y por día hombre (22,000 C/Mz y 1.600 C/DH, respectivamente).

Productores tipo C: Grupo integrado por aquellos ganaderos con 1 o 2 fincas en


una misma zona de condiciones agroecológicas favorables. Las fincas, con un área
media (100 a 250 Mz), se dedican a la producción de leche y a la crianza y desarrollo
de terneros.

Los ganaderos de éste grupo obtienen su producción del trabajo asalariado.


La intensificación en trabajo es media (10.8 DH/Mz), pero las favorables condi-
ciones agroecológicas les permiten mantener una carga animal alta (1.26 UG/Mz).

En el verano estos productores alimentan el ganado con pastos de corte, que


resisten la época seca. Aún así, el alimento no es suficiente para satisfacer las
necesidades del ganado, y como tienen una baja intensificación en alimento
concentrado por unidad ganadera (579 C/Mz de capital proporcional), la
producción de leche por lactancia es baja (641 litros).

Dada su condicion ventajosa (renta diferencial clase 1), estos productores


pueden lograr un buen rendimiento de la tierra mediante la intensificación mediana

155
del trabajo (47,000 C/Mz), sin necesidad de comprar alimentos concentrados. El
margen día/hombre es, en estos casos, de tipo medio (4,500 C/DH en promedio).

Productor tipo D: A éste grupo pertenecen los ganaderos con dos fincas, una en
la zona seca y otra en la zona húmeda (montaña), con un área media (100 a 350
Mz), dedicadas a la producción de leche y a la crianza de terneros.

Estos productores resuelven el problema de alimentación en el verano


trasladando su ganado a la fi nea de montaña, donde los pastos se mantienen verdes
durante todo el año.

Los productores del tipo D tienen un sistema de producción más extensivo,


tanto en trabajo como en capital (7.3 DH/Mz y 459 C/Mz de capital proporcional,
respectivamente); tienen una carga animal y una producción de leche por lactancia
bajos (0.50 UG/Mz y 699 litros, respectivamente) y también bajos niveles de márgen
de ganancia (20.000 C/Mz y 2900 C/DH, respectivamente). Se creyó que
obtendrían mayor rentabilidad a la inversión, dado que utilizan poco trabajo en
extensiones de tierra mayores; sin embargo, el márgen de ingreso medio resultó
contradictorio. Se supone que éste márgen está subestimado debido a la baja
calidad de la información proporcionada por los productores.

Productor tipo E: Son ganaderos con dos o más fincas con un área grande (más
de 250 Mz) y al menos u nade ellas en la montaña. Estan dedicadas a producir leche,
a la crianza, desarrollo y engorde de los animales producidos, y también a la compra
de novillos para engorde.

La producción de estas fincas depende del trabajo asalariado. Tienen una


baja intensificación en trabajo y capital (4.6 DH/Mz y 449 C/Mz de capaital
proporcional), éste último representado en alimento suplementario e instalaciones;
pero en general, disponen de mayor capital, tierra y ganado.

Las fincas tienen una carga animal baja (0.72 UG/Mz) y una producción
media de leche por lactancia (827 litros). El margen de ganancia por manzana es
bajo (23,000 C/Mz) pero el márgen pordía/hombre resulta alto (6,300 C/DH), debido
a la actividad de engorde, que utiliza poco trabajo.

Los productores del Tipo E tiene la clara racionalidad capitalista de producir


a bajo costo y rentabilizar al máximo su capital.

156
Productores tipo F: Este grupo de productores es prácticamente similar al
anterior. La diferencia radica en que el productor tipo F intensifica la producción de
leche hasta alcanzanzar, entre los seis tipos, la proporción más alta de alimento
suplementario por UG para el ganado lechero de la zona seca. Este productor
Tiene un nivel promedio de intensificación en capital proporcional de 6.667 C/Mz.

Debido al manejo extensivo del ganado de carne en las fincas de éste tipo,
la carga animal es de baja a media (0.77 UG/Mz), pero tienen una alta producción
de leche por lactancia (1.17 litros).

El margen de ganancia es alto (46,000 C/Mz y 6,200 C/DH, en promedio),


debido a que se benefician del producto diferencial de rentas de las clases 1y11 y
de la actividad de engorde.

Representación gráfica de la tipología

En esta sección se presenta un análisis de los sistemas de producción


agrupados por tipo, a partir de gráficas preparadas con los mismos conceptos
señalados en la metodología.

Nivel de intensificación en trabajo - área total ganadera (Gráfica 8). Los


productores de los tipos A y B son en general, los que tienen niveles altos de
intensificación en trabajo, aunque algunos presentan niveles solamente medianos.
Los tipos C y D presentan niveles medianos y el tipo E niveles bajos. El tipo F tiene
un nivel medio-bajo.

Nivel de Intensificación en capital (costos de capital proporcional/ Mz)-área


total ganadera (Gráfica 9): Mientras los productores tipos A y F presentan niveles
altos de intensificación en capital, el tipo B muestra niveles de medianos a bajos y
los tipos C, D y E niveles bajos, particularmente el tipo E.

Producción lechera media por lactancia -área total ganadera (Gráfica 1O): Los
tipos A y F presentan niveles altos de producción lechera por lactancia; el tipo E
niveles medianos; y los tipós B, C y D, niveles bajos.

Carga animal - área total ganadera (Gráfica 11): El productor tipo e se


caracteriza por tener cargas altas; los tipos A, B, D, E y F presentan cargas
medianas, con una variabilidad marcada dentro de los diferentes tipos de produc-
tores. Sin embargo, los sistemas que pertenecen a los tipos A y B tienen
globalmente, cargas superiores a las de los tipos D y E.

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Gráfica 8. Nivel de intensificación en trabajo - área total ganadera.

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Gráfica 9. Nivel de intensificación en capital (costos de capital proporcional por


manzana) - área total ganadera, agrupados por tipo de finca.

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dos por tipo de finca.

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Gráfica 11. Carga animal - área total ganadera, agrupados por tipo de finca.

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Nivel de margen por manzana - área total ganadera (Gráfica 12): Los produc-
tores tipos A, C y F presentan niveles altos de margen de ganancia por manzana,
mientras que los otros tipos presentan niveles bajos.

Productividad del trabajo - área total ganadera (Gráfica 13): El productor tipo
A muestra una gran variabilidad en los niveles de productividad del trabajo, con un
promedio medio-alto. Los tipos C, E y F presentan niveles altos, mientras los tipos
By C muestran niveles bajos.

Seguimiento de Sistemas de Produccion Ganadera

En la tipificación preliminar, cada tipo reúne aquellos productores que


presentan niveles similares de rendimiento y productividad del trabajo, un proceso
de producción semejante, y que trabajan con recursos parecidos en un mismo
ambiente agro-socio-económico.

El seguimiento de los productores a lo largo de un año contínuo hace parte


de la tercera etapa del proyecto y tiene el propósito de comprobar y profundizar la
tipificación des-crita en éste trabajo. En ella se buscará evidenciar, para cada de
tipo de productor: 1) Las relaciones entre niveles de rendimientos y productividad,
el funcionamiento del conjunto pastos-hato y las técnicas empleadas en la finca; 2)
Las relaciones entre el conjunto proceso de producción, objetivos del productor y
el conjunto recursos, medio agro-socio-económico, necesidades e historia del
productor; 3) Las relaciones de producción existentes entre los productores de cada
tipo y los demás; y 4) La dinámica pasada y ac-tual del sistema de producción.

De esta manera será posible obtener, además de una tipificación estática de


sistemas, una tipología dinámica de clases sociales. Se pretende demostrar que
cada clase social tiene una posición específica en la sociedad, que esa posición
determina su estrategia socioeconómica y sus comportamientos, y que cada clase
tiene una dinámica propia.

El seguimiento dinámico también debe facilitar la proposición de soluciones


concretas que permitan mejorar los rendimientos y la productividad de los sistemas
ganaderos, mediante la solución de los cuellos de botella y la supresión de
limitantes, y mediante el cambio de los recursos de los productores y de las
características del medio socioeconómico, todo lo cual, a su vez, debe modificar
los objetivos del productor y por lo tanto el sistema mismo, incluídos los niveles de
productividad. Es en éste sentido que el seguimiento dinámico se presenta como
una herramienta al servicio del desarrollo regional.

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TIPOS DE A
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Gráfica 12. Rendimiento de la tierra - área total ganadera, agrupados por tipo de
finca.

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Gráfica 13. Productividad del trabajo - área total ganadera, agrupados por tipo de
finca.

164
Metodología de seguimiento

Los bajos rendimientos de la tierra y de la productividad del trabajo en los


sistemas de producción ganadera, son los problemas centrales identificados en la
Región V. Partiendo de la tipificación preliminar obtenida, en la tercera etapa se
pretende investigar qué factores inciden en esa problematica, hasta arribar progre-
sivamente a niveles de conocimiento más detallados sobre: 1) el funcionamiento
del sistema pastos-hato y el impacto agronómico y zootécnico que representan las
técnicas aplicadas sobr su funcionamiento; y 2) los diferentes objetivos del produc-
tor, la manera en que éstos están determinados por el medio y sus recursos, y la
forma en que los objetivos determinan técnicas particulares de aprovechamiento.

En la medida en que se avance en la comprensión de una nueva relación o


de un nuevo aspecto del funcionamiento del sistema, será posible formular hipótesis
más afinadas.

El trabajo permitirá contar con una visión analítica y sintética del sistema a
nivel agronómico, zootécnico y socioeconómico. En cada paso de la investigación
será preciso combinar el análisis con la síntesis. El primero permitirá probar una
hipótesis a nivel de detalle, y la segúnda, observar nuevamente el sistema a la luz
de un nuevo hallazgo. Ese procedimiento se visualiza en la Figura 3. Es claro que
no existe una primera etapa de análisis y una segunda de síntesis, sino una
dialéctica permanente entre estas dos. Las encuestas sucesivas a los productores
deben ser el lugar y el momento de ese proceso.

Método comparativo

Se formularán hipótesis sobre las relaciones entre niveles de rendimiento y


productividad del trabajo, funcionamiento del conjunto pastos-hato, tecnicas utili-
zadas, y las limitantes no superadas. Igualmente, sobre las relaciones entre los
recursos del productor, los medios y la historia del mismo, y los objetivos y las
técnicas que utiliza.

La formulación de hipótesis correctas implicará utilizar un marco de referen-


cia que reuna los conocimientos en agronomía, zootecnia, sociología y economía,
así como la experiencia acumulada sobre éste tipo de investigación. La reunión
periódica del equipo de investigación pérmite multiplicar las posibilidades de
comparación y amplíar en cada uno de sus integrantes y en el conjunto, el marco
de referencia, que se verá reforzado y enriquecido a medida que avance la
investigación.

165
NIVEL GENERAL

1. Hipótesis o 3. Síntesis

2. Análisis
\ o
1. Hipótesis 3. Síntesis

2. Análisis

º, \
\
\
\
o

1. Hipótesis 3. Síntesis

2. Análisis

NIVEL PARTICULAR

Figura 3. Esquema de la metodología de investigación en la cual se combinan, en


forma sucesiva, el análisis y la síntesis.

166
Entrevistas y observaciones

La encuesta en la propia finca tiene la ventaja de permitir la observación de


la realidad, observación que facilita la formulación de preguntas e hipótesis, permite
comprobar el decir del productor y constatar el impacto de la tecnica utilizada sobre
la finca.

Para las entrevistas y las observaciones se elaboraron dos fichas: una de


información estática, diseñada para recoger información general sobre el productor
y su sistema de producción; y una de información dinámica, para ser utilizada cada
vez que se visita un productor, cuya información servirá de apoyo a la reflección y
para la formulación y comprobación de hipótesis.

Conclusión

Los resultados de la segunda etapa del proyecto han sido satisfactorios. Se


cuenta ahora con una primera aproximación a la tipología de los sistemas de
producción de la Región V, que comprende seis categorías de productores. Esta
aproximación será examinada en una tercera etapa con el propósito de verificar
algunas hipotesis que, para cada uno de los tipos de productor propuestos,
pretenden contestar dos preguntas fundamentales.

¿Por qué el productor organiza sus recursos en la forma que lo hace y no de


otra? y,

¿Por qué a esta forma de organización, le corresponden los niveles de


rendimiento y productividad del trabajo encontrados?

Para el caso de la primera pregunta es preciso determinar qué fundamenta


la toma de decisión del productor, es decir, su estrategia socioeconómica. Esta
dependerá de las cantidades relativas de recursos a su disposición y de su situación
en el ámbito socioeconómico.

Un productor con un recurso limitantetratará de optimizar su uso y maximizar


su rendimiento. Pero esa limitante será diferente en el caso de otro productor, que
combinará en forma diferente el conjunto de sus recursos. El productor con una
alternativa de inversión para un recurso determinado, asignará a éste un costo de
oportunidad igualmente determinado, el cual tomará en cuenta para sus
decisiónes. El productor que no tiene esa alternativa asumirá un costo de

167
oportunidad nulo para dicho recurso y puede que lo utilice de forma distinta al primer
productor. De esta manera, el examinar los recursos con que cuenta un tipo de
productor y su respectivo costo de oportunidad, permite explicar la forma como el
productor los organiza y utiliza.

El factor limitante no es siempre el mismo a lo largo del ciclo productivo, por


lo que es necesario examinar la situación total de las fincas a lo largo de un año
completo.

En cuanto a la segunda pregunta, es necesario estudiar de cerca las técnicas


que el productor utiliza y relacionar esas técnicas con el desarrollo y el crecimiento
de las especies que produce. Este análisis permitirá explicar los niveles de
rendimiento y productividad de cada tipo de sistema de acuerdo a bases
agronómicas y zootécnicas. El seguimiento de las fincas a lo largo del año
contribuirá, igualmente, al cumplimiento de ese objetivo.

Para cada tipo de sistema se seleccionarán determinados casos y a estos se


agregarán otros que fueron excluídos de la muestra en el presente estudio: los
ganaderos sin tierras, los productors con áreas pequeñas (menos de 1OMz) o muy
grandes (más de 1000 Mz), lo mismo que las Cooperativas Agrícolas Sandinistas
(CAS) y las Areas Propiedad del Pueblo (APP) dedicadas a la ganadería.

168
Discusión

Un primer grupo de preguntas de los participantes se refirió a la cantidad de


información recolectada y a su grado de utilización para completar la tipología de
fincas.

Se explicó que la recolección de la información había tomado dos semanas


y que en su procesamiento se invirtió aproximadamente un mes. A pesar de ello,
se cuestionó el tipo de preguntas y el método mismo de recolección de la
información. Se señaló, además, la falta de un esfuerzo de división y clasificación
de las preguntas, que facilitara la construcción de una matriz; esta permitiría
elaborar una clasificación previa, que serviría como guía para la tipología de fincas.

Se comentó también la posibilidad de reducir los ambientes sobre los cuales


enfocar la tipología, mediante un análisis general de la información conocida que
buscara seleccionar las variables más importantes o de estructura, a fin de facilitar
el primer esfuerzo de separación de grandes zonas ambientales.

Otro grupo de preguntas y respuestas se refirió a las pretensiones mismas


del trabajo de tipificación. Se argumentó que la reducción en área, objetivos y
número de a-gricultores, favorecería la precisión del muestreo y la reducción del
ámbito de análisis, sin dejar por fuera variables y estratos estructurales importantes
que permitan generalizar la tipología.

En lo que al análisis metodológico se refiere, se recomendó seleccionar una


o más variables analíticas que servieran de ordenadoras para hacer los primeros
trazos generales sobre la zona de trabajo. Al respecto, el expositor mencionó que
en el estudio se tomaron como ordenadoras, variables del tipo natural como la
zonificación entre áreas secas y húmedas. Sin embargo, algunos participantes
consideraron que una mayor precisión en ese tipo de criterios iniciales de
separación, aumenta la concentración del muestreo sin dejar de contemplar otros
factores responsables de la variabilidad entre fincas y áreas. Para el caso específico
de Nicaragua la investigación se podría concretar al estudio de la intensidad de
producción y el mercadeo de productos como hortalizas, frutas y animales, que
parecen característicos de algunas zonas de la región bajo estudio.

Finalmente, se hicieron algunos comentarios sobre los análisis estadísticos


en los que se utiliza una muestra grande, teniendo en cuenta que, en este caso
específico, muchas de las correlaciones entre variables importantes a nivel de
hipótesis se hicieron en forma gráfica y manual. La discusión se centró en la
dificultad operativa de este tipo de análisis cuando involucra muestras grandes y un

169
número importante de variables. Sin embargo, se destacó la facilidad de utilización
de éstos métodos, que en casos como el que se discute permitieron efectuar análisis
para argumentar algunas de las hipótesis planteadas, a pesar de la ausencia de
indicadores estadísticos que facilitaran la prueba de las hipótesis.

170
CARACTERIZACION DE SISTEMAS DE
PRODUCCION AGRICOLA
LA CUENCA DEL RIO ACHIGUATE, GUATEMALA

Ariel Ortiz, Negli Gallardo, Luis Reyes y Edgar Martínez*

La República de Guatemala tiene una población de ocho millones de


habitantes distribuídos en 108,889 km 2 • El 60% de la población deriva sus ingresos
de actividades agrícolas; el 78% de los agricultores posee extensiones menores de
3.5 ha y se reparte el 10.5% de la superficie registrada como espacio
agroeconómico.

El país se divide en tres grandes zonas: El Altiplano, en el que vive el 43%


de la población rural, la Llanura Costera del Pacífico y las Tierras Bajas del Norte.
El ingreso per cápita fluctúa entre Q.1200 y Q.3000 1 al año, según el tamaño y
localización de las fincas.

En el Altiplano se encuentran las cabeceras de varias cuencas hidrográficas,


las que, de acuerdo con análisis físicos, biológicos y económicos, presentan
problemas de manejo y degradación.

La cuenca del Río Achiguate tiene una extensión total de 1350 km 2 -el 5.51 %
del área de la vertiente del Pacifico de Guatemala (Figuras 1 y 2). Esta cuenca, con
148 habitantes/km 2 , es tal vez, la de mayor concetración de po-blación, comparada
con el registro nacional de 70.7 habitan-tes/km 2 •

La región, que presenta en forma típica los contrastes y características de


la mayoría de las cuencas de la vertiente del Pacífico, se divide en tres zonas: Una
de "tierras altas" en la que se cultivan granos básicos y hortalizas, que tiene grandes
densidades de población, minifundio y bajos niveles de calidad de vida. Una zona
media de suelos volcánicos llamada "pié de monte", en la cual predominan las
fincas multifamiliares medianas con cultivos perennes. Y una zona baja, la "llanura
costera del Pacífico", donde predominan las fincas multifamiliares grandes con
ganadería extensiva y cultivos de exportación.

Toda la cuenca presenta notables problemas ambientales: son notorios la


pérdida de los suelos en sus partes alta y media, y en la parte baja, las inundaciones
en la época lluviosa, así como los bajos caudales de los ríos en la época seca.
• Funcionarios del Instituto de Investigaciones Agronómicas, Facultad de Agronomla, Universidad de San
Carlos.
1
0.1.00 = US$0.30

171
lllNOI CONVINCIONLIEI
-DIVllOftlo\ Da VUTlaNTa.
- DIVltoltlA 1u,a .. PICIA L
Da CUaNCAI
-AlltaA Da a ITUDIO

10 O 10 ao IO••·

CU!HC.A IANALA
t CU.t:HCA AC.HllUAT!
! C.U!HCA .. 10 l .. ANDI

Figura 1. Mapa de cuencas de la República de Guatemala.

172
Etcclc 1 2~0,000
O ~ IOkmt
_.~::-~-===---~- ::J

MAPA DE DRENAJE
SUPERFICIAL

R1f1r1nclo
Río P1r1nn1
RÍ o In t ermlt1nt1

FUCNTC • Mopa
( tC.OIO 1:2~0,000 l.G,N

OCÉANO PACIFICO
Figura 2. Cuenca del Río Achiguate.

173
Las partes alta y media de la cuenca del Achiguate fue-ron seleccionadas por
el Instituto de Investigaciones Agronómicas de la Universidad de San Carlos, para
llevar a cabo un proyecto de caracterización de sistemas de producción agrícola
con pequeños y medianos productores.

El proyecto tiene como objetivo general el desarrollo de alternativas


tecnológicas adaptadas a las condiciones de los pequeños productores, que
integren aspectos físicos, biológicos y económicos. En este desarrollo participará
un equipo multidisciplinario de profesores y estudiantes de la Facultad de
Agronomía.

Los objetivos específicos del proyecto incluyen: la caracterización de los


componentes físico-biológicos y socioeconómicos de los sistemas de producción
y la tipifica-ción de los sistemas de finca; la determinación, diseño y evaluación de
posibles cambios en los sistemas de producción, sobre la base de resultados de
investigación en la región y en otras áreas similares; y la evaluación, a nivel de finca,
de los resultados agroeconómicos de las alternativas propuestas y su confrontación
con los factores limitantes de los productores.

Marco conceptual

El sistema de producción es "el organismo formado por la modalidad


productiva social, la tecnología y el medio ambiente natural, que responde a una
racionalidad determinada y posee mecanismos peculiares de producción, así como
determinadas formas de manifestarse en el espacio geográfico".

La finca se define como un sistema agrícola que funciona como una unidad
de producción, cuenta con una superficie medible y es controlado por un individuo
o un grupo de individuos.

El termino pequeño o mediano productor se relaciona con el tamaño de la


finca. Estas pueden ser de varias clases, segun la definicón del Comité Interameri-
cano de Desarrollo Agrícola (CIDA), que tomó como criterio la relación entre el
tamaño de la finca y su capacidad de generar empleo o ingresos a la familia.

El pequeño y mediano productor es quien trabaja la tierra, posee medios en


propiedad u otra forma de tenencia, emplea fuerza de trabajo familiar, su
producción la dedica al autoconsumo y cuando le quedan excedentes los vende
para adquirir aquello que no produce.

174
El área de estudio

El Proyecto se circunscribe a la parte alta y media de la cuenca, con un área


aproximada de 835 km 2 (el 62% del total de la cuenca). Incluye 15 municipios de
los departamentos de Chimaltenango y Sacatepéquez, que reunen una población
de 160,737 habitantes (49% del total de la cuenca).

La población rural está compúesta por pequeños y medianos productores


que en la parte alta de la cuenca son en su mayoría indígenas.

Predominan en la zona las microfincas y las fincas sub-familiares, en las que


se practica una agricultura de subsistencia. Los principales cultivos son el maíz
(1170 kg/ha) y el fríjol (205 kg/ha). En algunas fincas, además del maíz, se
producen hortalizas y flores para el mercado.

La época de cultivo está sujeta a la distsribución de las lluvias que, con


valores entre 1200 y 2000 mm anuales, ocurren de mayo a octubre. Debido a la
alta capacidad de conservación de humedad de los suelos volcánicos, algunos a-
gricultores practican cultivos con humedad residual -principalmente hortalizas-
que se plantan en noviembre y se cosechan en enero y febrero.

La tecnología utilizada es tradicional, en la que el terreno se prepara con


bueyes, se usan semillas criollas que se siembran en forma manual, y en la cual los
insumos agrícolas (insecticidas y fertilizantes) tienen un uso limitado.

Metodologia

Para lograr el objetivo de caracterización y tipificación propuesto, se utilizará


la siguiente metodología:

Como un primer paso, se revisará la información secundaria proveniente de


trabajos realizados en el área de es-tudio por la Facultad de Agronomía de la
Universidad de San Carlos, así como los resultados de investigación provenientes
de la Estación Experimental del Instituto de Ciencia y Tecnología Agrícola (ICTA).

Posteriormente se recopilará información primaria mediante la técnica de


encuesta, en cada una de las zonas de trabajo seleccionadas. Esta información
será analizada utilizando procedimientos estadísticos estandar, que permitan
comparar variables seleccionadas entre estratos y determinar los factores de tipo
agro-económico que limitan la producción de la finca. la información primaria servirá

175
a la vez, como marco de referencia para el diseño y ejecución de la fase dinámica,
en la que se hará un seguimiento meticuloso del trabajo de las fincas.

Para la tipificación de estos sistemas se usará como criterio inicial de


estratificación, la proporción de mano de obra familiar utilizada en la finca; este
criterio se seleccionó por estar relacionado con los rasgos principales que caracteri-
zan al campesinado guatemalteco.

Cmo una primera aproximación de tipificación, se pretende estratificar las


fincas según cuartilesde u na distribución normal. Esdecirque lasfincasque ocupen
el primer cuartil serán las que utilicen de Oa 25% de la mano de obra familiar en los
procesos productivos; las que utilicen de 26 a 50% ocuparán el segundo cuartil,
y así sucesiva-mente.

La fase dinámica comprende un período de 12 meses durante el cual se hará


un estudio de seguimiento en fincas seleccionadas de cada estrato o cuartil. El
estudio incluye un registro cronológico de todas las actividades de la finca:
identificación, orígen y costo de los jornales utilizados; clase, cantidad y costo de los
insumos; arreglos espaciales y cronológicos de los cultivos; densidad de población
de plantas; producción total, almacenamiento, destino final y precio de venta de la
. producción. El estudio también incluye información relativa al tamaño de la finca,
tipo de tenencia de la tierra, uso de crédito, organización de los productores, etc.

Cada estrato se caracterizará mediante la utilización de variables


tecnológicas (cantidad de insumos) y variables económicas (costos de producción,
valor, ingresos netos), que permitan su comparación y finalmente la definición de
tipos de finca.

Para el diseño y evaluación de las alternativas tecno-lógicas se


determinarán primero posibles modificaciones en uno o mas componentes del
sistema, de acuerdo con el análisis de la información primaria.

Las alternativas seleccionadas serán comparadas y evaluadas contra las


prácticas del agricultor en las fincas escogidas para el seguimiento dinámico.
Posteriormente, las tecnologías que resulten promisorias serán entregadas a
organismos de extensión para su futura difusión en el área de influencia del estudio.
Las alternativas que no superen al testigo serán devueltas al organismo de
investigación para continuar el trabajo de adaptación.

176
Bibliografía

CABRERA GAILLARD, C. R. 1986. Caracterización de los recursos naturales


renovables de la subcuenca del Río Pensativo. Tesis lng. Agr., Guatemala,
Universidad de San Carlos, Facultad de Agronomía. 212 p.

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del Río Achiguate. Tesis lng. Agr., Guatemala, Universidad de San Carlos,
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cuenca del Río Achiguate. Tesis lng. Agr., Guatemala, Universidad de San
Carlos, Facultad de Agronomía. 200 p.

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Achiguate. Tesis lng. Agr., Guatemala, Universidad de San Carlos, Facultad de
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PERRIN, R. K., et al. 1976. Formulación de recomendaciones a partir de datos


agronómicos: Un manual metodológico de evaluación económica. CIMMYT,
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REYES-HERNANDEZ, M., FARCIA, S. S. y CAMPOS, A. 1985. Sistemas de


producción practicados en el altiplano de Chimaltenango, Guatemala: Una
caracterización socioeconó-mica. Guatemala, Instituto de Ciencia y
Tecnología Agrí-colas. 172 p.

177
DISCUSION

La discusión se centró sobre la metodología propuesta para tipificarlas fincas


en el área del proyecto. Específicamernte, la discusión giró alrededor del uso de la
varia-ble mano de obra como criterio principal para el agrupamiento de fincas, con
el objeto de conformar la tipología. Sobre este particular la discusión se sintetiza
como sigue:

Se cuestionó el uso de la mano de obra familiar como criterio de separación


de fincas, debido al reconocimiento del carácter multivariado implícito en la
tipificación de los sistemas de finca, y a la poca confiabilidad en esa va-riable, como
representativa de la diferenciación y variabilidad entre fincas.

En el mismo sentido de inconveniencia de la variable mano de obra familiar,


se puntualizó que es necesario tener en cuenta el uso de la mano de obra fuera de
la finca, por su potencial importancia como generador de ingresos familiares. Así
mismo, se buscó explicación para la exclusión de la mano de obra asalariada
utilizada en la fica, ya que la subtitulación entre una y otra no necesariamente añade
o sustrae características de diferenciación entre sistemas de fincas.

La discusión incluyó también otros aspectos que sirven como sugerencias


para replantear el marco metodológico utilizado en la tipificación de fincas. En este
sentido se sugirió reemplazar el uso de técnicas analíticas -como el presupuesto
parcial- por otras técnicas más poderosas. La programación lineal, por ejemplo,
incorpora los cambios económicos en un conjunto mayor de restricciones y permite
analizar toda la finca, aún dentro de las condiciones restrictivas de este tipo de
modelo.

De la misma manera, se sugirió revisar el diseño de muestreo para recolectar


información de fuente primaria. Se comentó que frente a la ausencia de un conjunto
de variables que pueda recoger buena parte de la variabilidad esperada entre
fincas, una muestra pequeña, en una zona amplia, con diferentes comunidades,
puede no representar la diferenciación esperada. Es necesario, por lo tanto,
trabajar con una muestra aleatoria -debidamente estratificada- lo suficientemente
grande como para captar la heterogeneidad descrita en el trabajo presentado.

178
MODELOS V SIMULACION PARA LA
TRANSFERENCIA DE AGROTECNOLOGIA
José Arze B.*

En los países en desarrollo es característico observar dos problemas


comunes en el sector agrícola: la mínima adopción y adaptabilidad de las alterna-
tivas tecnológicas generadas por las instituciones de investigación, y la poca
eficiencia en su transferencia a los agricultores para los cuales ha sido creada.

El despliegue de recursos para la investigación agrícola es, a menudo, poco


satisfactorio para los gobiernos de muchos países (5). En forma general se
cuestiona el reducido impacto que se observa en la producción y productividad de
alimentos de consumo básico para la población.

En la mayoría de los países de América Tropical la producción de alimentos


básicos se encuentra en manos de agricultores de escasos recursos. Gener-
almente, los sistemas de producción desarrollados por estos agricultores represen-
tan condiciones de marginalidad ecológica, social y cultural, donde las
características de incertidumbre ambiental (clima, suelo) y otras de tipo
socioeconómico, (crédito, mercado), limitan el desarrollo de la población rural.

Muchos de los esfuerzos para mejorar los niveles de producción de cultivos


alimenticios no han logrado los resultados esperados, debido a los diferentes
factores que influyen en el proceso de generación de tecnología. Un problema muy
generalizado se refiere a las dificultades encontradas para integrar, en forma
adecuada, la información producida por diferentes investigadores especializados.
Estos conocimientos no han sido suficientemente integrados como para ofrecer
alternativas tecnológicas que favorezcan la producción sostenida, sin contribuir a la
destrucción de los recursos naturales, especialmente en el tipo de agricultura
desarrollada en condiciones de marginalidad.

El desarrollo de tecnologías apropiadas para la producción agrícola ha


conducido al análisis y entendimiento de unidades más complejas que el sistema
individual de cultivo. Para este fin ha sido necesaria la formación de equipos
multidisciplinarios que, generalmente, utilizan modelos para integrar los cono-
cimientos aislados aportados por las diversas disciplinas (6).

• Fisiologo de Cultivos, Centro Agronómico Tropical de Investigación y Enseñanza (CATIE).

179
La modelación de cultivos, como instrumento para simular la producción en
diferentes ambientes, recursos y condiciones de manejo, contribuye a la
identificación de los procesos prioritarios y a la racionalización de la toma de
decisiones. Se establece así un ámbito más amplio para validar los resultados de
investigación y la transferencia de tecnología agrícola (2).

Niveles de organización biológica

En nuestro planeta los organismos vivos utilizan los recursos físicos dis-
ponibles: la energía, proveniente principalmente del sol, y la materia, presente en
el suelo y en la atmosfera. Tanto la materia como la energía son utilizadas dentro
de un cuidadoso orden jerarquice, mediante una complicada organización
biológica. Las unidades biologicas mas pequeñas, como los genes, utilizan materia
y energía de manera similar a las organizaciones biológicas más com-plejas, como
las comunidades o conjunto de poblaciones. La vida entonces, es un continuo
intercambio de materia y energía (componente abiótico), debido a la actividad de
los se-res vivos (componente biótico) que presentan una organización jerárquica,
producto de la evolución. Las interrelaciones entre los componentes bióticos y los
abióticos se ca-nacen con el nombre de biosistemas. Estos son sistemas biológicos
con diferentes niveles de organización jerarquica. Los genes, las células, los
órganos, los organismos, las poblaciones y las comunidades (ecosistemas) son
biosistemas que tienen distintos grados de agregación de componentes (Figura 1).
No es pósible precisar líneas de ruptura entre la secuencia de jerarquías biológicas,
ni siquiera entre organismos y población.

La idea de la jerarquía biológica continua podría parecer extraña, toda vez


que al ocuparnos del hombre y los animales superiores, estamos acostumbrados
a pensar en el individuo como la unidad lógica. Sin embargo, desde el punto de vista
de la interdependencia de las relaciones recíprocas yde la supervivencia, no puede
existir una solución brusca de contuinuidad en ningun lugar de la jerarquía. El
organismo individual, por ejemplo, no puede sobrevivir por mucho tiempo sin su
población, del mismo modo que tampoco un órgano podrá subsistir por mucho
tiempo sin su organismo. De manera análoga la comunidad biológica (animales y
plantas), no puede existir sin la circulación de materia y energía en el ecosistema.

180
~oMponente viv~ + ~o•ponen f"isic~ e
Siste•a vivo )
e Biotico ) + e Abiotico ) e Biosiste•a )

Gene ...... MATERIA ...... Genetico


"
1
~ ......
~
Ce lula 1 Celular

Organo ...... ' ...... Organico

Organis1110 ...... lndiuiduo

Poblacion
"
1
~ ...... Poblacional

...... ~ 1

......
Co111unidad
ENERGIA' ECOSISTEMA

Figura 1. Componentes y jerarquías de los sistemas biológicos.

181
Niveles de organización humana

De manera general, en cualquier país se pueden distinguir dos grandes


grupos: 1) La organización humana, estrechamente relacionada con los aspectos
económicos, sociales y políticos que norman el comportamiento de las relaciones
en-tre individuos; y 2) el ordenamiento biológico (sin el hom-bre) que comprende
las relaciones bióticas y abióticas de la jerarquía biológica.
En forma conceptual se podría considerar que la regionalización en un país
-la población urbana, los servicios y las actividades de transformación de la
producción-comprende los niveles de organización humana, donde lajerarquíade
poder reviste gran importancia; mientras que el ordenamiento biológico en el mismo
país comprende las relaciones físico-biológicas vinculadas con la producción y el
manejo de los recursos naturales renovables, donde los componentes principales
serían las cuencas, la población rural, las fincas, los productores y los agroecosis-
temas.

Consideraciones básicas de la producción agrícola

En los biosistemas del mundo la producción agrícola está dada por la


.respuesta del componente biótico de interés para el hombre (cultivos, animales), a
las condiciones de variación abiótica (materia, energía), representada por el
componente físico (clima, suelo). La respuesta del componente biótico está sujeta,
además, a competencia (malezas) o interferencia (plagas). Estas comprenden la
parte indesea-ble del componente biótico, para los fines perseguidos por la
agricultura. Todas las relaciones (biótico-abióticas) son controladas, modificadas
y dirigidas por el hombre (a través de su capacidad de manejo -bombeo energético-
) y definidas por sus características socio-económico-culturales (1 ).
En los ecosistemas modificados por el hombre, denominados agroecosis-
temas, se presentan tres fuentes importantes de variabilidad, de las cuales
depende la producción agrícola: la física, la biológica y la socio-económica.

Variabilidad física (abiótica): Son las condiciones de clima y suelo en el lugar


donde se encuentran los sistemas de producción, que presentan variabilidad en
dos dimensio-nes: espacio y tiempo.
En el espacio, las variaciones físicas para un mismo período están dadas por
las características climáticas (lluvia, temperatura) y de suelo (relieve, fertilidad),
propias de cada sitio. Así, cada sitio tiene condiciones físicas que permiten
diferenciarlos de los demás; por ejemplo, en un lugar llueve más que en otro durante
el mismo período.

182
En el tiempo, las características de un sitio varían, debido, principalmente,
a las fluctuaciones ocacionadas por los componentes climáticos; por ejemplo, en
un año llueve más que en otro.

Variabilidad biológica (plantas y animales): Esta es una respuesta a la


variabilidad física. La naturaleza brinda una amplia gama de posibilidades
genéticas adaptadas a las condiciones de variabilidad física. Estas se expresan en
el espacio por la distribución biológica (fitogeografía), y en el tiempo, por la
ubicación, su ciclo de vida y su capacidad para producir. Los agricultores manejan
estas condiciones de variabilidad, mediante arreglos cronológicos y espacia-les.

Variabilidad socio-económica: Los agricultores, como todo grupo social,


presentan heterogeneidad y evolución. Las condiciones de heterogeneidad socio-
económica presente en di-versos lugares en un momento dado (variación en el
espacio), permiten comprenderlosdiferentes intereses, aspiraciones y, en general,
el comportamiento de los agricultores según su accesibilidad a los recursos de
producción.

Las características de evolución campesina en un lugar dado (variación en


el tiempo), muestran la dinámica de los patrones de comportamiento según una
acumulación de valores. Esto hace que el agricultor vaya modificando sus intereses
y espectativas, y consecuentemente, su capacidad de riesgo. El agricultor regula
su comportamiento a medida que adquiere nuevas experiencias y acumula o pierde
recursos de producción durante el transcurso de su vida, circunstancia que le
permite crear continuamente nuevas posibilidades en el manejo de los recursos de
producción.

Metodología pára el desarrollo de


alternativas tecnológicas

La metodología de investigación que estudia los siste-masde producción de


los agricultores, ha sido desarrollada en el mundo por varios equipos de trabajo (1 O).
Esta com-prende diferentes fases interconectadas, que siguen un pro-ceso deduc-
tivo-inductivo (Figura 2).

183
lo
e
Seleccion
de areas
Region
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D
E E
I
o
e
Caracter i --
D o zac ion
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o
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o 1
M Region
I

1 e
o
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Difusion
1
Figura 2. Proceso para el desarrollo de agrotecnología.

184
La primera fase de esta metodología es principalmente analítica y se inicia
con la selección de áreas (aspectos físicos) y de beneficiarios (agricultores
objetivo). Continúa con la caracterización, que consiste en recopilar información
acerca de los modelos de producción y los ambientes físico y socioeconómico
prevalecientes en la zona objeto del estudio. El producto final es una descripción
que incluye la síntesis de los factores limitantes de la producción agrícola y una
recopilación del conocimiento tecno-lógico confiable, disponible para las condi-
ciones de la zona en estudio.
La segunda fase se caracteriza por un proceso de síntesis, con modelos de
producción organizados en jerarquías (región, finca, agroecosistema). En esta
etapa los equipos de trabajo utilizan la información obtenida en la primera fase, para
diseñar sistemas de producción teóricamente mejores, basados en la organización
-con diferentes niveles de complejidad- de las investigaciones y los trabajos
experimentales. En esta fase, los diseños de alternativas son controlados, ajusta-
dos y verificados mediante pruebas y evaluaciones de comportamiento de las
alternativas tecnoló-gicas propuestas; además, se identifican las respuestas a las
modificaciones de los componentes individuales (3).

La tercera fase consiste en un proceso de validación y transferencia, que


busca ajustar la tecnología a las condiciones económicas y socioculturales
evolutivas de los agricultores, para ofrecerles alternativas dinámicas (11 ).

Modelos
La construcción de modelos no es necesariamente una actividad nueva ni
diferente en nuestra experiencia diaria (9). Constantemente los construímos en
nuestra imaginación, aunque no se les designe con ese nombre. Un modelo es una
simplificación del mundo real. Como las relaciones de unas cosas con otras en el
mundo son en extremo complejas y detalladas, es necesario construir modelos para
simplificar esas relaciones y poder así conceptualizarlas y entenderlas, sin el detalle
extraño que sólo nubla el cuadro total. Los modelos pueden expresarse en forma
mental, verbal o escrita. Por ejemplo, un mapa es un modelo simplificado de una
porción de un paisaje, que sólo muestra sus características más relevantes. Una
ecuación es el modelo de la relación entre la variable dependiente y una o más
variables independientes. Los modelos representados mediante diagramas
(gráficos lineales), ayudan a comunicar conceptos y datos, como si se emplearan
ecuaciones y palabras.
El proceso de construír el modelo de un sistema de producción y represen-
tarlo en forma de diagrama es de suma importancia. La construcción de un modelo
exige dedicación; quien lo construye debe reunir información y conocimientos

185
referentes al sistema y desplegarlos dentro del marco de un formato bien definido.
En el curso de este proceso se identifican los aspectos menos comprendidos, las
fallas en la información y los aspectos que requieran estudio adicional.

Los modelos sirven, además, como medios de comunicación de inestimable


valor para sintetizar los conocimientos de personas de diferentes especialidades,
que permiten enfocar problemas de naturaleza interdisciplinaria. La capacidad de
construcción y cuantificación de un modelo, teóricamente válido, es indicio de que
se ha logrado cierta comprensión de un sistema y de la dinámica de su comportam-
iento. Si esta comprensión de un sistema no basta para construír su modelo,
tampoco será suficiente para administrarlo.

Modelos de finca

El modelo es una representación abstracta de la realidad que facilita la


comprensión de su estructura y función. En la definición de hipótesis para el estudio
de la finca se requiere la conceptualización de un modelo inicial de trabajo. Este
modelo permite diseñar alternativas mejoradas dentro de las condiciones predomi-
nantes que rodean la finca. La modelación es, por lo tanto, una herramienta útil de
trabajo. En procesos de simulación y optimización es posible utilizar un modelo,
srempre y cuando la información que contenga esté suficientemente validada, y
represente la funcio-nalidad del mismo. Los principales problemas se presentan en
el ordenamiento de la información; recogerla, almacenarla e interpretarla,
siguiendo un ordenamiento jerárquico claramente establecido, contribuirá a la
utilización racional de los recursos.

Las experiencias en el manejo de modelos no son recientes. Se han


desarrollado una serie de trabajos sobre aspectos físicos, biológicos y económicos,
sobre los que existe abundante literatura. Sin embargo, estos modelos no han
podido simular, en forma satisfactoria, procesos complejos que incluyen varios
modelos más simples. Con la evolución de los sistemas electrónicos de procesam-
iento de datos se ha mejorado la estructura de los bancos de información, el análisis
de datos y los programas de simulación, todo lo cual constituye un nuevo campo en
el desarrollo de la transferencia de agrotecnología.

En los últimos años han sido notables los progresos en el desarrollo de


métodos para la transferencia de agrotecnología de un lugar a otro con
características similares o diferentes en cuanto a clima y suelo (8). Esta es una
alternativa interesante y de mucho potencial. Tres aspectos hacen atractiva esta
idea:

186
1. El manejo de la información a través de un proceso organizado, con la posibilidad
de integrar información física (clima y suelo) con la respuesta biológica (cultivo).
2. La posibilidad de racionalizar la generación de información tecnico-científica
producida por los centros de investigación y estaciones experimentales, para
contribuir con el perfeccionamiento de un modelo de referencia (cul-tivo),
orientador de estas actividades.
3. Favorecer un proceso de transferencia con mayores posibi-lidades de decisión
frente a eventos aleatorios de difí-cil control (clima) ó de sitio específico (suelo),
con los recursos genéticos de mayor potencial (cultivo).

Las estrategias seguidas hasta ahora muestran resultados halagadores,


principalmente en el desarrollo de modelos de cultivo, documentos apropiados para
archivo de datos, manejo de base de datos y programas para validación y
calibración de modelos de cultivo, entre otros.

Modelos de síntesis de recursos ambiente-cultivo

Se han probado, con resultados exitosos, modelos en los que se integran


informaciones fisico-biológicas para simular el crecimiento, desarrollo y producción
de cultivos (4).
Las experiencias del IBSNAT (lnternational Benchmark Site Network far
Agrotechnology Transfer), muestran las grandes posibilidades que se ofrecen a
través de estos modelos (8). La simulación y validación de modelos constituye un .
elemento orientador para los investigadores, una referencia didáctica para la
enseñanza, un instrumento para la transferencia de agrotecnología y una guía en
la toma de decisiones para la planificación de políticas de desarrollo.

El funcionamiento de este sistema requiere, en general, cuatro condiciones:

- Ingresar, almacenar y organizar toda la información disponible.

- Recuperar, analizar y presentar la información.

- Validar y calibrar los modelos de cultivo.

- Asegurar el acceso adecuado al proceso de transferencia.

Para responder a estos requisitos funcionales es necesarió asegurar la


existencia de los siguientes componentes:
- Archivos de datos apropiados.

187
- Sistema de manejo de base de datos.

- Modelos de cultivos.

- Programas de cómputo que permitan unir estos componentes y producir


resultados específicos para los usuarios.

Set mínimo de datos: Este conjunto se ha creado con el propósito de estandarizar


y organizarla información requerida en la base de datos. Tanto los archivos de clima
y suelos (pedón y descripción de perfiles), como la descripción de las condiciones
experimentales, son indispensables para interpretar los coeficientes genéticos y los
parámetros de los modelos de suelos y de cultivo.

La planificación del set mínimo de datos ha sido una buena contribución, sin
embargo, se han encontrado algunas dificultades debidas, principalmente, a falta
de experiencia en su utilización; entre ellas, la descripción de los perfiles de suelos
por estratos, la identificación de coeficientes genéticos, y la escasa disponibilidad
de datos sobre radiación solar en los observatorios meteorológicos.

Bases de datos: Es indispensable contar con registros de información de las


características físicas, biológicas y socioeconómicas que influyen el proceso
productivo agrícola. Esto es más cierto si se considera que las respuestas del
componente biológico productivo de las fincas está influído por las características
del ambiente físico (clima, suelo), ya sea en forma natural o modificada por el
hombre.

El ordenamiento sistemático de la información implicaconsiderarestructuras


de bases de datos que permitan el intercambio de información entre diferentes
usuarios y programas de cómputo, de manera que se pueda disponer de un ins-
trumento de fácil acceso que permita la rápida recuperación de la información.

Tres son las grandes áreas de información en la base de datos:

Clima y suelo: Aquí se registran las variaciones de ra-diación solar (energía),


temperatura y lluvia de las dife-rentes regiones o sitios en estudio. También se
registran
las características de los perfiles de suelos donde se desarrollan los cultivos,
siguiendo las normas establecidas.

188
Parámetros genéticos: Are a destinada a registrar los requisitos ambientales
de cultivos y animales, según su respuesta a las variaciones del ambiente.

Características socioeconómicas: Recoge información sobre las condi-


ciones predominantes en este aspecto que influirán el manejo de los recursos
físicos y biológicos dispo-nibles para la producción.

Validación de modelos de cultivo: Los modelos existentes representan un gran


esfuerzo para simular las relaciones entre las condiciones ambientales y el cultivo.
El desarrollo de los mismos está bastante avanzado, aunque falta la incorporación
de las subrutinas de plagas, enfermedades y elementos nutritivos.

Para simular el desempeño biológico de un cultivo en las condiciones


climáticas y de suelos presentes en un lugar determinado, con un nivel adecuado
de confianza, el modelo necesita un proceso de calibración y ajuste a las condicio-
nes predominantes. Se han sugerido ensayos de validación que comprenden cinco
pasos:

- Desarrollo experimental.

- Evaluación de las condiciones experimentales para las entradas requeridas


por el modelo.

- Evaluación real del desempeño del sistema.

- Corrida del modelo para simular el experimento.

- Análisis de los resultados de simulación frente a los resultados observados.

Los tres primeros pasos corresponden a observaciones cuidadosas y


detalladas sobre el set mínimo de datos. Esto ha permitido utilizar experimentos
planeados con otros fines, para validar alguno o algunos de los tratamientos de
mayor interés para el investigadoren los modelos de cultivos. También ha permitido
utilizar diversos tratamientos para someter los cultivos a diversas condiciones de
competencia o stress, aspecto que ha favorecido la calibración de múltiples
procesos fisiológicos del modelo de cultivo.

El incorporar al modelo los archivos de clima y suelo, y de parámetros


genéticos, y luego correrlo, ha permitido interpretardiferentes grados de discrepan-

189
cia con niveles de aproximación aceptables, al comparar los resultados ofrecidos
con los observados durante la fase experimental. Esto, a su vez, ha permitido
calibrar el programa del modelo a las condiciones experimentales locales, cuando
la información disponible sobre aspectos específicos lo permite.

Transferencia de agrotecnología

El poner en práctica los modelos para la transferencia de agrotecnología


requiere una definición clara de lo que se quiere realizar, a fin de conceptualizar
tanto la estructura como la función más adecuadas del modelo. Con ello se podrá
puntualizar el tipo de información mínima necesaria para un acertado proceso de
simulación. Para la simulación de fincas se requiere atender, por lo menos, los
siguientes puntos:

- Identificar un grupo de procesos que permitan definir aquellas relaciones


fisico-biológicas en donde el agro-ecosistema (planta-animal} constituye el
nivel focal para el estudio de las relaciones de materia y energía con los
organismos vivos Uerarquía biológica). La res-puesta de los recursos
biológicos frente a las condi-ciones ambientales predominantes permitirá
identificar la potencialidad del agroecosistema.

- Conocer las relaciones sociales y económicas que influyen en el agroecosis-


tema (físico-biológico), expresadas principalmente por las jerarquías de
poder predominantes en el sistema social.

El desarrollo de Los modelos para la transferencia de agrotecnología


mediante simulación, deberá considerar pri-mero la expresión del potencial
biológico frente a condiciones de variabilidad ambiental -en muchos casos errática-
y sobre estas características, expresar las relaciones sociales y económicas que
facilitan o entorpecen la expresión biológica de producción.

La simulación de fincas requiere un cuidadoso estudio de los agroecosis-


temas que las componen, así como del comportamiento de los elementos que
constituyen cada uno de esos agroecosistemas. La agregación de los modelos
individuales y poblacionales en la comunidad (agroecosistema), y de éstos en la
finca, permitirá conocer el potencial conjunto de producción biológica.

190
La responsabilidad de proporcinar la información básica requerida para la
simulación del potencial biológico, descanza en los científicos de las ciencias físicas
y biológicas. Los niveles de precisión estarán supeditados a la especialización y
a la confiabilidad de la información.

Las relaciones de producción donde el hombre participa como modificador


de las condiciones naturales predominantes, deben ser estudiadas por científicos
sociales y economístas.

La capacidad predictiva de los modelos para transferencia de


agrotecnologíadependerá, en todos los casos, de la clara conceptualización de los
propios modelos y de la ela-boración de programas de computo que interpreten
fielmente las ideas conceptuales. Además, será necesario asegurar el suministro
de información confiable y de alto nivel que permita simulaciones próximas a la
realidad.

La simulación es un proceso de continuo ajuste, que al comienzo demanda


una gran cantidad de información básica para ordenar procesos y lograr relaciones
adecuadas que, a su vez, permitan validar el modelo. En este proceso la capacidad
del modelo mejora en la medida en que la información básica sea adecuada. Sin
embargo, un modelo podrá lograr simulaciones muy próximas a la realidad, pero
nunca reemplazarlas.

El proceso de transferencia de agrotecnología a usuarios intermedios


(extensionistas) o a usuarios potenciales (agricultores), está en una etapa de
definición. Las actua-les estrategias permiten utilizar la información producida por
modelos de cultivo debidamente validados, en la transferencia de agrotecnología a
expertos, cuya experiencia puede contribuír en la toma de decisiones.

191
Bibliografía

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de desarrollo de tecnología apropiada. In Centro Agronómico de
Investigación y Enseñanza. Reunión interna de discusión sobre
validación/transferencia en la metodología de desarrollo de tecnología
apropiada (1982 : Turrialba, C. R.). pp 45-54. (Serie técnica. Informe
técnico No. 78).

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research. J. R. Wight, Ed. U.S. Department of Agricultura. Miscellaneus
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3. CENTRO AGRONOMICO TROPICAL DE INVESTIGACION Y ENSEÑANZA.


1986. El diseño de alternativas tecnológicas en la investigación de
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Turrialba, Costa Rica, Serie técnica, Informe técnico No. 91. 51 p.

4. CERES-MAIZE. 1986. A simulation model of maize growth and development.


C. A. Janes, J. R. Kirky, Eds. Texas A & M University. 194 p.

5. DENT, J. B., BLACKIE, M. J. 1979. Sistems Simulations in Agricultura. London,


Applied Science Publisher. 180 p.

6. HART, R. D. 1986. Conceptos básicos sobre agroecosistemas. CATIE, Serie


materiales de enseñanza No. 1. Turrialba, Costa rica. 159 p.

7. HEER, A. 1986. Validación de un modelo de crecimiento de maíz (Zea Mays L.)


en monocultivo y asociado con yuca (Manihot esculenta C.) en el trópico.
Tesis Mg. Se. UCR/CATIE, Turrialba, Costa Rica. 199 p.

8. INTERNATIONAL BENCHMARKSITES NETWORK FOR AGROTECHNOLOGY


TRANSFER. 1985. IBSNAT Progress Report 1982-1985. Honolulu,
Hawaii. 48 p.

192
9. LUGO, A. E., MORRIS, G.L. 1982. Los sistemas ecológicos y la humanidad.
OEA, Serie de biología No. 23. Washington. 82 p.

1O. MORENO, R. 1985. Diseño de opciones tecnológicas para mejorar sistemas


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de Investigación y Enseñanza. Conceptos metodológicos sobre
investigación y desarrollo de tecnología para sistemas de producción de
cultivos. Turrialba, Costa Rica, Vol. l. pp. 17-33.

11. ZANDSTRA, H. G., et al. 1981. A Methodology on Farm Cropping Systems


Research. IRRI, Los Baños, Filipinas. pp. 29-46.

193
Discusión general

El análisis general sobre el tema y los conceptos utilizados en los trabajos e


informes de avances de los proyectos, tuvo lugar en una mesa redonda a la que
asistieron todos los participantes en el seminario. Una participación mayor se
solicitó a los investigadores invitados del llCA, CATIE, EMBRAPAyWINROCK, en
razón de su amplia experiencia sobre el tema de investigación en situaciones de
producción y en proyectos de generación de tecnología para pequeños produc-
tores.

Luego de una recapitulación de los trabajos presentados, la discusión se


centró en la compatibilidad de los conceptos de investigación con el enfoque de
sistemas y con la tipificación. Se dijo que muchos trabajos permiten genera-lizar
la combinación práctica de estos conceptos, y se acentuó el hecho de que existen
técnicas analíticas adecuadas para definir grupos objetivo o tipos de finca. Sin
embargo, la aplicación de estas técnicas se ve limitada por varios factores: la
complejidad de los sistemas de finca de los pequeños productores; lajerarquización
de los sistemas de estudio; la determinación de un marco de teórico robusto que
relacione los objetivos de la tipificación; y la propia dinamicidad del sector agrícola,
que influye en el subsector de los pequeños agricultores.

La relación entre la jerarquización de los sistemas (sistema macro, área,


finca, agroecosistema, etc.) y la clasificación del sistema objetivo (finca), presenta
un problema conceptual, ya que la clasificación es de carácter multivariado y la
jerarquización implica la eliminación de variables a medida que se simplifica el
sistema de estudio. Por otra parte, los aspectos agroecológicos no son separables
de los socioeconómicos, lo que agrega problemas de escala, espacio y tiempo. Una
manera de enfrentar estas limitaciones es realizar la clasificación por etapas,
partiendo de variables de carácter agroecológico -donde se clasificarán ambien-
tes y áreas-- y posteriormente, agregar las variables de tipo socioeconómico para
refinar la clasificación hasta el nivel finca. Este análisis por etapas mantendrá la
variabilidad que caracteriza el subsector de pequeños productores.

La formulación de un marco teórico fue materia de una discusión que integró


la mayoría de los aspectos mencionados en los trabajos, lo mismo que la aplicación
de técnicas analíticas, dado que se cuestionó si lo que se buscaba clasificar era,
simplemente, información o los sistemas de finca existentes en una región. Se llegó
a un consenso sobre la necesidad de precisar los objetivos de la clasificación de

195
finca, su utilización inmediata y el período de uso de la misma. Sobre la base de esas
definiciones, se mencionó la necesidad de construir el marco teórico que permita
formular hipótesis comprobables empíricamente o mediante variables específicas.
Este paso se consideró esencial para disminuir el número de variables por analizar.
Así mismo, se enfatizó la nacesidad de conocer los objetivos y aspiraciones del
agricultor según los grupos de fincas, a fin de garantizar un diseño apropiado de
alternativas tecnológicas y de transferencia.

Las condiciones dinámicas en que se desarrolla la actividad productiva de las


fincas fueron analizadas desde dos puntos de vista: la validez de la clasificación de
fincas en el tiempo, y la incorporación de los elementos dinámicos del sistema. La
validez temporal es muy dificil de establecer, pero se estimó que para proyectos de
generación y transferencia de tecnología -que son generalmente de corto y
mediano plazo- una clasificación robusta no debería caducar antes de que los
efectos del proyecto sean adoptados a nivel de finca. La incorporación de los
elementos dinámicos fué ampliamente tratada y fue tema específico de uno de los
grupos de discusión, cuyas conclusiones se presentan más adelante.

Desde un punto de vista más aplicado a las condiciones generales que se


dan en los proyectos de investigación y transferencia de tecnología apropiada, se
· discutieron temas relacionados con las estrategias de aplicación de los análisis de
clasificación de fincas. Se recalcó la necesidad de mantener actividades de
investigación-acción que permitan enriquecer la aplicación de conocimientos
teóricos y plantear problemas específicos que deben ser resueltos por los investi-
gadores. Sin embargo, esta doble tarea obliga a buscar estrategias eficientes,
aplicadas a problemas particulares bien definidos. El caso específico de la
clasificación de grupos de fincas deberá ser parte de la etapa de caracterización,
para superar definitivamente el contexto físico-biológico que se le ha asignado en
no pocos proyectos de éste tipo. 99Cada grupo de fincas debe ser foco de la
caracterización, en la cual se señalen las diferencias entre grupos y se recoja la
información necesaria para diseñar alternativas tecnológicas específicas para cada
grupo, lo mismo que las estrategias de transferencia.

En el mismo orden de ideas, se discutió la necesidad de generar información


empírica que permita conocer parámetros sobre muestreo, lo mismo que los tipos
de variables más indicados para la clasificación de fincas. De acuerdo con los
ejemplos de algunos trabajos discutidos anteriormente, se buscaría conocer un
número reducido de variables estructurales en un número considerable de fincas,
según las separaciones iniciales dadas por las condiciones agroecológicas. De otra
parte, se presentaron sugerencias para revisar las clasificaciones conocidas, a fin

196
de buscar variables comunes que puedan ayudar a seleccionar aquellas que sean
diferenciadoras de fincas. Se sugirió discutir el tema en forma más cuidadosa y
probar en forma empírica las mejores alternativas.

Con el propósito de hacer una sinopsis de los temas de discusión, los


aspectos sobresalientes de algunos de los trabajos presentados y las recomenda-
ciones generales en cuanto a los factores que se deben tener en cuenta para
mejorar el trabajo metodológico, se elaboró el siguiente gráfico:

ropóslto Ambiente Ambiente Agricultor Estructura Función


etapas) agroecológlco socloeconómlco (famllla) de la finca de la fine

lasificación

aracterización

studios dinámicos

valuación

ifusión/monitorla

V = variables, M z métodos

Se trató aquí de resumir los principales factores y relaciones entre las etapas
generales de un proyecto de generación y transferencia de tecnología, en las que
se han detectado debilidades metodológicas. Estas, por lo tanto, son sujeto
potencial de investigación, si se mantiene la necesidad de aplicarlas al desarrollo
y difusión de tecnología apropiada, por lo menos al sector de pequeños produc-
tores.

Dado que esta sinópsis puso otra vez de manifiesto la complejidad de los
problemas metodológicos y su interrelación, los asistentes a la reunión fueron
divididos en tres grupos de trabajo con el propósito de analizar más cuidadosa-
mente los temas siguientes: a) caracterización y clasificación de los sistemas de
finca; b) análisis dinámico y seguimiento de los tipos de finca; y c) proceso de toma
de decisiones y adopción de tecnología. Con ese fin se elaboró una guía de
preguntas para cada grupo, que fue presentada y discutida en mesa redonda con
todos los participantes. A continuación se presenta un resumen de los informes de
discusión de los grupo de trabajo.

197
Caracterización y clasificación de los sistemas de finca

La guía de preguntas para este grupo contempló la compatibilidad de la


clasificación y caracterización de fincas; así mismo, incluyó preguntas sobre la
comparación de varios enfoques para reducir la heterogeneidad, los vacíos que
pudieran detectarse en la aplicación de técnicas de clasificación, y la relación entre
clasificación, seguimiento dinámico y función objetivo del productor.

La discusión de grupo sobre la relación entre caracterización y clasificación


de sistemas de finca se resume en el siguiente esquema:

Marco teórico - - - - - - - (definición conceptual)

l
Clasificación general---- (modelos agroecológicos)

l
Clasificación específica--- (modelos específicos)
(ambiente socioeconómico)
(herramientas estadísticas)

\
J
r
Datos específicos - - - (encuestas)
(estudios)
(imágenes de satélite) "

Sistemas de finca investigación específica


[Re ali dad]
oE-------- de sitio

El punto másimportantefue la sugerencia de integrar la clasificación ala fase


de caracterización, siguiendo el orden jerárquico de sistemas y las etapas de
clasificación que incluyen los ambientes agroecológicos y socioeconómicos. En
estos términos se sugiere que la clasificación de sistemas de finca sea el resultado
final de la caracterización, que debe aplicarse a cada grupo de fincas determinado
en la clasificación.

Sin embargo, las consideraciones anteriores contienen algunas restric;..


cienes que deben tomarse en cuenta: la clasificación se justifica cuando el
desarrollo teórico y la información disponible permiten prever un universo

198
heterogéneo; pero la clasificación es indispensable aún en los casos que prevean
universos relativamente homogéneos. De otra parte, la decisión de clasificar fincas
está ligada a la capacidad técnica y logística para manejar un volumen relativa-
mente grande de información.

La comparación de enfoques para reducir la heterogeneidad de las áreas de


trabajo se limitó a los conceptos sobre dominio de recomendación, evaluación
rápida (rapid appraisal) y sondeo y caracterización físico-biológica. Se concluyó que
todos los métodos, con excepción de la caracterización físico-biológica, pueden ser
exitosamente utilizados, siempre que se basen en una muestra válida del universo,
que permita inferir con mínimos grados de confiabilidad. La sola clasificación físico-
biológica no ofrece una visión completa del sistema finca; en consecuencia, no
permite un análisis multivariado que origine el tipo de clasificación propuesta.

Con respecto a los factores que afectan la aplicación de las técnicas de


clasificación, la discusión se centró en dos aspectos: identificar vacíos en la
aplicación de esas técnicas y hacer algunas recomendaciones puntuales. Los
vacíos mencionados se refieren a otro tipo de análisis que podría incorporarse para
mejorar la clasificación, especialmente si se introdujera información dinámica. Se
planteó también la necesidad de contar con una revisión extensiva de la literatura
que incluya un inventario de variables, lo cual, si bien no es normativo, contribuye
a simplificar la aplicación de las técnicas de clasificación.

Algunas recomendaciones puntuales se refieren al uso combinado de


variables seleccionadas a priori y aquellas que se encuentren estadísticamente
significativas de acuerdo al marco teórico y de utilización de la clasificación. Al
relacionar la clasificación con el seguimiento dinámico y con el proceso de toma de
decisiones se consideró que el seguimiento es deseable para cada grupo clasifi-
cado, pero se reconoció que este es un proceso costoso. Como alternativa se
planteó la posibilidad de realizar encuestas múltiples que contengan indicadores de
la estructura de la finca y de los sistemas de producción seleccionados para
introducir cambios tecnológicos. Hubo acuerdo sobre la necesidad de conocer la
función objetivo de los productores en cada grupo; pero se dijo que la ausencia de
este conocimiento no descalifica la agrupación de fincas por herramientas
analíticas. El conocimiento de la función objetivo tiene mayor incidencia en el diseño
de alternativas tecnológicas y en su transferencia.

199
Análisis dinámico y seguimiento a los tipos de finca

La guía de preguntas para este grupo se centró en las características del


análisis dinámico, el manejo de la información y algunas estrategias operativas para
la ejecución de este tipo de trabajo.

La discusión empezó por diferenciar los conceptos de estudio cinemático y


estudio dinámico. Se explicó que, en general, un estudio cinemático es una
descripción del estado de un fenómeno en el tiempo. Por su parte, el estudio
dinámico, además de describir los cambios en el tiempo, identifica las relaciones
entre los factores que determinan cambios. Se dijo que los estudios dinámicos son
exigentes en datos y recursos y que, además, las técnicas analíticas presentan
grandes vacíos para reflejar la dinamicidad del sistema que se pretende estudiar.

Se discutieron e identificaron los pasos del proceso que generalmente se


sigue en los estudios dinámicos. Los siguientes pasos pueden servir como pauta
para la elaboración de un proceso específico, reconociendo que en cada caso se
debe partir de la situación específica del lugar:

1. Analizar la tipificación de fincas resultante de un estudio estático, a fin de


identificar los procesos que merecen un estudio dinámico.

2. Elaborar modelos cualitativos (diagramas o cuadros en blanco) de los


procesos identificados como prioritarios y utilizar la información secundaria
para estimar los coeficientes del modelo.

3. Verificar los modelos en fincas reales a fin de buscar posibles interacciones


con otros subsistemas de la finca, lo mismo que los puntos donde se
presenta una influencia directa de las decisiones de los productores.

4. Decidir cuantos locales, fincas, variables y período entre mediciones se


deben elegir, de acuerdo con los recursos disponibles.

5. Definir una estrategia de muestreo y utilizarla en la identificación de fincas


específicas.

6. Recolectar la información que sea necesaria para mejorar el modelo.

7. Validar el modelo y continuar los estudios dinámicos que permitan mejorarlo.

200
Desde el punto de vista de la estrategia de aplicación, la discusión se centró
en algunos aspectos metodológicos y de capacitación para los investigadores que
se dediquen a conformar un cuerpo metodológico. Como aspectos prioritarios de
análisis aplicado se enfatizó la necesidad de contar con una clasificación robusta
que permita cuantificar los casos representativos de un grupo de fincas, y de reducir
sustancialmente la muestra de fincas a las que se de seguimiento -al menos- por un
ciclo. completo de producción. Se le asignó considerable importancia a la
determinación de las principales interacciones entre subsistemas (sistemas de
producción), especialmente entre los agrícolas y pecuarios. El análisis de las
interacciones debe ser el objetivo principal en los estudios de seguimiento.
El análisis de la información debe ser dinámico en sí mismo, para conocer
cómo cambian las asignaciones de recursos, lo mismo que las interacciones entre
subsistemas y componentes, y el porqué de esos cambios. En este punto los
estudios dinámicos se ligan con la determinación de los procesos de toma de
decisión a nivel de sistema finca. El análisis debe incluír, además, los flujos de
recursos, insumos y productos; los efectos de factores físicos (lluvia, sequía, etc.);
el flujo y oportunidad de los factores de infraestructura productiva (crédito, asisten-
cia técnica, acopio, etc.); la variablilidad de los precios de los insumos y productos;
y, finalmente, otras relaciones dinámicas de dependencia con el suprasistema, tales
como la utilización y venta de mano de obra, la integración en tiempo yvolúmen con
el mercado, y las principales tendencias de consumo del subsistema familia.
El manejo y análisis de la información constituye un gran reto que requiere
bastante investigación aplicada, en la que se trate de seleccionar las técnicas
analíticas y los modelos más apropiados para maximizar el uso de la información.
Se mencionó la necesidad de crear indicadores que sean comparables en el tiempo
y que reflejen el proceso dinámico que se pretende estudiar. Al respecto se discutioó
el nivel de agregación de la información (sistema de producción, agroecosistema,
componentes, etc.), requerido para mantener un conocimiento adecuado de los
cambios y el porqué de los mismos. Ligado a este punto, se generaron preguntas
sobre la frecuencia con que debe registrarse la información a nivel de finca. Sobre
este mismo tema se plantearon problemas de investigación e interrogantes
metodológicos sobre la evolución dinámica de las alternativas tecnológicas y su
, impacto a nivel del sistema finca.

El proceso de toma de decisiones y la adopción de tecnología


Este grupo de trabajo se concentró en la importancia de conocer la función
objetivo del productor, para los fines de generación y transferencia de tecnología
adaptable a nivel de finca. La discusión partió de la hipótesis de que en la

201
clasificación se distinguen condiciones estructurales de las fincas, que estan
ligadas al proceso de toma de decisiones y a la capacidad de introducir cambios
tecnológicos Esta relación y su análisis secuencial se representa en el siguiente
esquema:
Agrupaciones
Clasificación de fincas sobre variables
{ estructurales
!
Caracterización de grupos

/~
Agroclimáticos Socioeconómicos
~.,/
.----runción objetivo

!
Asignación de recursos Decisión actual
¡ { Riesgo

Alternativa tecnológica

L
Proceso de toma de decisiones

¡
Adopción { Evaluación

i
Impacto

Sobre el particular se plantearon varias inquietudes de orden metodológico


que indican la necesidad de realizar investigación aplicada. Se hicieron varias
preguntas sobre cómo se llega a conocer el proceso de toma de decisiones a partir
de variables dinámicas. Se planteó la necesidad de construir modelos (matrices de
decisión, árboles de decisión, etc.) que permitan acercarse al conocimiento del
proceso de una manera metódica, sobre la base de la información recolectada
durante los estudios dinámicos.
Un planteamiento unánime señala que son enormes las ventajas de conocer
la función objetivo yel proceso detomadedecisiones paraconseguirimpacto a nivel
de finca. Este conocimiento se debe reflejar en el tipo de tecnología que se genere,
en la estrategia de transferencia y en el método de evaluación a nivel de finca. Hubo,
igualmente, consenso sobre la necesidad de establecer estas relaciones como
temas de investigación, que hagan parte del esfuerzo para generar metodologías
aplicadas que garanticen una mayor eficiencia en los proyectos de generación y
transferencia de tecnología.

202
Conclusiones

1. El dedicar esfuerzos a los aspectos metodológicos específicos dentro de una


estrategia de investigación con el enfoque de sistemas, es una idea valiosa que
puede contribuír en forma significativa a la investigación aplicada, orientada a
generar y transferir tecnología apropiada para el pequeño productor.
Se recomendó, por ello, repetir esta clase de reuniones para intercambiar
experiencias y planificar -en lo posible- los esfuerzos de investigación, con el
fin de ganar agilidad y mayor conocimiento en este cometido.

2. Los proyectos de investigación que entre sus objetivos han incorporado la


clasificación de fincas, han tocado un punto muy importante -quizás el de
partida- para generar un cuerpo metodológico. No obstante, existen grandes
diferencias en el desarrollo de marcos teóricos y de técnicas analíticas, que
deben ser reducidas.

3. El desarrollo de la metodología no puede reducirse al aspecto de clasificación de


fincas para homogenizar los grupos objetivo de trabajo. Con toda su com-
plejidad, los temas y problemas analizados sobre el estudio y análisis dinámico;
la determinación de la función objetivo; las relaciones micro-macro, según el
ordenamiento jerárquico de sistemas; y el conocimiento del proceso de toma de
decisiones, deben incorporarse al esfuerzo por encontrar metodologías eficien-
tes y aplicables a problemas prácticos.

4. Es notoria la necesidad de capacitar los investigadores dedicados a este


esfuerzo; necesidad que surge del análisis de las presentaciones de los
proyectos. Por consi-guiente, se recomienda establecer un plan de entrenam-
iento a mediano plazo, cuyo inicio sea un curso aplicado de tres o cuatro
semanas de duración, sobre utilización de técnicas y de herramientas multivari-
adas para tipificar individuos pertenecientes a poblaciones heterogéneas.

203
ANEXOS
Algunas citas significativas*
Mario Kaminski**

Dentro del contexto general de las relaciones entre "análisis de sistemas/


enfoque de sistemas/investigación de sistemas"; y "clasificación/tipificación/
tipologización", se incluyen aquí algunas citas breves que se consideran significa-
tivas para arrojar alguna luz adicional sobre el tópico, y que complementan los
comentarios y posiciones esbozados en el trabajo de la página 27. El origen de la
cita, en cada caso, se indica entre paréntesis, con el mayor grado de precisión
posible. Su selección es informal, basada en una revisión de literatura en áreas
específicas. El criterio de selección -aunque informal- está dictado en algunos
casos, por la importancia de la posición transcrita y en otros, además de lo anterior,
por su coincidencia con posiciones sustentadas por el autor. El contenido está
dividido en los dos campos mayores que se intentan relacionar: elConceptol
enfoque análisis de sistemas y el Concepto de tipificación de unidades de
producción. Dado que se declara que se trata de citas, se obviará el uso de las
comillas de rigor.

En torno al concepto/enfoque de análisis de sistemas

... hay expectativas crecientes sobre la contribución de la Investigación de


Sistemas de Fincas a la efectividad de la investigación agropecuaria. Mientras que
compartimos este sentido de optimismo, estamos preocupados por la posibilidad
real de que estas expectativas puedan verse frustradas por esfuerzos fuera de foco,
vacilantes y -por demasiado cuidadosos- pesados. (BYERLEE, D., Harrington, L.,
and Winkelmann, D.L., "Farming Systems Research: lssues in Research Strategy
and Technology Design", American Journal of Agricultura/ Economics, Volumen
64(5) :897. Diciembre 1982) .

... este tipo de investigación se ha conducido típicamente en estaciones


experimentales, bajo condiciones que no son representativas de los campos de los
productores y con poca o ninguna participación de los mismos. (IBIDEM, p. 898) .

... un sistema integrado de investigación-extensión forma parte de un


ambiente político más amplio. Los objetivos de política pueden guiar la selección
de Jos grupos-objetivo de productores para el programa de investigación. (IBIDEM,
p. 899).

• Este material es complementario al trabajo del mismo autor que aparece en la página 27 de esta publicación.
•• Funcionario del Instituto Interamericano de Cooperación para la agricultura (llCA).

207
Los programas de investigación basada en fincas/perspectiva de sistemas
de finca (OFR/FSP: On Farm Research/Farming Systems Perspectiva) se llevan a
cabo más eficientemente para estratos identificados o grupos homogéneos de
productores. .. . de allí que hemos propuesto el concepto de Dominio de
Recomendación (RO: Recommendation Domain) como un grupo de productores
agropecuarios, con prácticas y circunstancias aproximadamente similares y para
los cuales una recomendación dada sería apropiada en términos generales. Se
trata de una estratificacion de productores, no de áreas. Los productores -no los
campos- son los que adoptan decisiones sobre tecnología. (IBIDEM, p. 899) .

... Ley de los Números Medianos (Law of Medium Numbers) (Winberg, 1975).
"Para sistemas de números medianos ... se presentarán fluctuaciones, irregulari-
dades y grandes'. Esta ley sirve para advertir a un analista potencial de sistemas
de pequeños productores que la tarea será dificil -aún imposible- y probablemente
conducirá a muchos errores. (ANDERSON, Jock, R. Hardakery J. Brian. "Economic
Analysis in Design of NewTechnologies far Small Farmers", Capítulo 2. In Econom-
ics and the Design of Small Farmer Techno/ogy. Valdes, A., Scobie, G.M., & Dillon,
J.L. (Eds.), Ames, lowa University Press, 1979. pp. 11-29; p. 12).

El problema del análisis in vivo surge de la diversidad del grupo objetivo de


pequeños productores. Los sistemas de pequeños productores se caracterizan por
patrones diferen-ciados de disponibilidad de recursos, oportunidades de
producción, habilidades, creencias y preferencias. Es casi imposible lograr
soluciones generalizadas para tales sistemas, mientras que por otro lado la
cantidad de explotaciones o fincas es muy grande como para permitir el análisis de
todos los casos individua/es. (IBIDEM, p. 14).

En la práctica todos los productores son diferentes en términos de ambiente,


objetivos y, quizas, tecnologías. Sin embargo, los recursos de investigación son
insuficientes para hacer de la finca individual la base de estudio y mejoramiento.
El objetivo de la clasificación de sistemas de fincas dentro de una determinada
región de mandato es identificar los parámetros que permitan su agregación en un
número relativamente reducido de sistemas de fincas, en los cuales focalizar los
recursos de investigación. (MENZ, K. M., & Knipscheer, H. C. ''The location
Specificity Problem in Farming Systems Research ". Agricultura/ Svstems. 7
(1981):95-103; p. 96).

Mientras que los esquemas de clasificación de sistemas de fincas abundan


(?), aparentemente se ha dedicado muy poco esfuerzo al diseño eficiente de tales
esquemas para guiar la investigación agropecuaria. (IBIDEM, p. 98).

208
Existen, por lo tanto, interacciones fuertes entre la forma de clasificación más
apropiada y la naturaleza y estado del desarrollo de la tecnología. Existen
procedimientos matemáticos manejables por medios computarizados que (dada
una base de datos) permitirían conducir, en forma ite-rativa, clasificaciones de
sistemas de fincas, que sean apropiadas para la naturaleza/estado de la tecnologia
bajo consideración. (IBIDEM, p. 102).

Continuando este intento de especificar un marco para el diagnóstico, se


discuten brevemente herramientas de tipificación de sistemas y mecanismos de
recolección de datos. (COHAN, H. C. "Diagnosis Methods in Farm Systems
Researach". llCA, Caribbean Seminar on Farming Systems Research Methodol-
ogy, May 4-8, 1980. pp 523-541; p.524.

Es costumbre aceptar una equivalencia semántica entre el enfoque y una de


sus etapas. Esto ha conducido al uso indiferenciado de "enfoque de sistemas' y
"análisis de sistemas" en la mayor parte de la literatura relacionada con aplicaciones
agrícolas. (IBIDEM, p. 527).

El enfoque de sistemas requiere cuatro etapas secuenciales (y cíclicas), así:

- Especificación de los sistemas relevantes ...

- Descripción del desempeño del sistema ...

- Medición del grado y forma de la relación entre las variables relevantes ...

- Uso de simulación y prueba de hipótesis para arreglar o rediseñar componen-


tes del sistema, de manera de lograr el desempeño meta del mismo.

Cada una de las etapas señaladas incluye las tres funciones de investigación
mutuamente dependientes: desarrollo del modelo, recolección de información y
síntesis de la información. (IBIDEM, pp. 527/528).

Estos juicios no pretenden ser excitantemente nuevos e incluso pueden


parecer obsoletos y de alguna manera reaccionarios, dado el enfasis prevaleciente
en la asignación de tareas complejas de enfoque de sistemas a unidades de
investigación. Sin embargo son importantes porque las experiencias frustrantes en
materia de adopción de resultados de investigación han conducido al empleo de
enfoques, que están oscureciendo las diferencias entre las agencias y sus respec-
tivas responsabilidades. (IBIDEM, p. 530).

209
Las generalizaciones requeridas por las unidades de investigación y de
asistencia en la toma de decisiones para sistemas de finca (DAFS, Decision
Assistance far Farm Systems), deben trabajar con "tipos de empresas agropecuar-
ias". (IBIDEM, p. 534).

Los esfuerzos deberían dirigirse a buscar tipos definidos para un propósito


específico. ...esto vuelca una pesada carga en quienes definen las variables que
van a ser empleadas, como criterios de tipificación en cualquier caso específico.
(IBIDEM, p. 535).

Hasta el momento se ha ensayado una gran variedad de herramientas


estadísticas y cuasi-estadísticas pertenecientes al conjunto del análisis multiva-
riante. Estas incluyen componentes principales, análisis discriminante y varios
algoritmos de conglomeración, todos habilitados ahora en la División de
Computación del llCA, en San José, Costa Rica. (IBIDEM, p. 535).

Al respecto se pueden hacer ciertas recomendaciones:

1. Los objetivos del análisis y el método para ejecutarlo deben ser bien
definidos antes que puedan serseleccionados los criterios de tipificación
y validación.

2. Los métodos de prueva y validación tambien deben ser definidos antes de


la tipificación, como parte crucial del proceso analítico completo.

3. Solamente después que se han cubierto estas etapas, se es posible


evaluar el papel de las técnicas estadísticas.

4. Puede hacerse necesaria la aplicación de varias técnicas durante el


proceso.

5. La tipificación puede, legitimamente, tener lugar antes de un diagnóstico


a nivel de fincas, siempre que los datos recolectados se empleen para
validar los tipos. (IBIDEM, P. 356).

En torno al concepto de tipificación de unidades de producción.

En tanto exista un gran numero de fincas agrícolas de muchos tipos


diferentes en la Comunidad, el análisis de su situación requiere el empleo de una

210
tipología en la Comunidad. (EEC, Commission Decision of 7 April 1978 establishing
a Community typology far agricultura! holdings, 78/463/EEC, Official Journal of the
Euro pean Communities. 6.6. 78, No. L 148/1, pp. 1-78; p. 1)

Artículo 3. 1. La tipología se diseñará para hacer frente, en particular, a las


necesidades de información de la política agrícola común. (IBIDEM, P. 2).

Artículo 3. 3. Las principales aplicaciones de la tipología consistirán en la


recolección y presentación de datos por tipo de agricultura y grupo de tamaño,
particularmente en relación con los relevamientos y censos estadísticos de la
Comunidad y con la red de datos contables de fincas de la CEE. (IBIDEM, P. 2).

Artículo 4. Antes del 31 de diciembre de 1980, la Comisión, en cooperación


con los estados miembros, encarará una revisión a fondo de la tipología, tomando
especialmente en cuenta la experiencia adquirida en la aplicación de esta Decisión
y las nuevas necesidades de la Comunidad. (IBIDEM, P. 2).

Esta tres realidades diferentes exigen soluciones muy diferentes:


Habilitación, ordenamiento y fomento territorial para el primer tipo; política social,
para el segundo; política de precios, para el tercero. (BARBERIS, Cerrado. "Pour
une Stratification de l'Agriculture ltalienne". Economie Rural, 107:41-45; p. 44).

La disponibilidad de paquetes computacionales de técnicas de clasificación


ha conducido a un desperdicio de tiempo científico, mayor que cualquier otra
innovación "estadística" (con la posible excepción de las técnicas de regresión
múltiple). El deseo de producir un único nicho rotulado al cual pueda ser lanzada
-y luego olvidada- una entidad individual, es natural a la mente humana; o si nó lo
es, se nos han dicho esto tan frecuentemente que ahora es una respuesta
condicionada. "Una preferencia por la clasificación se desarrolla en la niñez y
persiste como una forma habitual de pensamiento en la edad adulta" (Goodall,
1954a). Antes que un nuevo factor condicionante de bibliografías infladas refuerce
el reflejo, debemos parar y preguntarnos porqué y cuándo, lo mismo que cómo
deberíamos intentar una clasificación. (CORMACK, R. M., "A Review of
Classification". Journal of the Royal Statistical Society, Series A, 1971, 134:321-
367; p. 321.

Si una clasificación va a permanecer virtualmente inalterada cuando se


midan variables extra de las mismas entidades, la clasificación debe ser claramente
capaz de predecir variables no observadas. (IBIDEM, P. 323).

211
En las ciencias sociales la búsqueda se ha orientado a conglomerados
apretados o camarillas, en las que cada entidad se parezca a las otras, y en las
cuales todas puedan ser descritas satisfactoriamente por una-el perfil del conjunto.
(IBIDEM, p. 329).

El propósito general deberia ser describir los datos de una manera más
simple que lo que se hace originalmente, sin incurriren consecuencias matemáticas
ofensivas (Needham, 1965a). (IBIDEM, P. 329).

Si las entidades son poblaciones, para las que (en cada caso) es posible
postular una distribución probabilística de variables, el problema de asignar un
nuevo individuo a una entidad existente, es el problema estadístico de
discriminación múltiple. (IBIDEM, P. 336).

Hay ejemplos de los que informa Boyce (1969) y William, et al (1969), para
los que las componentes o coordenadas principales suministran evidencia más
clara e iluminadora de los conglomerados, que las técnicas estandar de
clasificación. (IBIDEM, P. 340).

Wishart (1969c) recomienda clasificar por análisis de conglomeración de


enlace singular todos los puntos cuya densidad local se encuentre por encima de
algún umbral, para asignar más tarde los puntos "ruidosos" remanentes. (IBIDEM,
p. 341).
Y los argumentos sobre la ética de la ponderacíón se hacen irrelevantes
cuando se descubre que se da infinitamente más peso a una variable observada que
a una no observada. (IBIDEM, p. 346) .
... una de las necesidades reales del usuario de estos métodos es verse
forzado a pensar acerca de que es lo que desea hacer. (IBIDEM, Discusión por R.
Sibson, P. 355).
Pienso que ha llegado el momento de dedicar más esfuerzos a la aplicación
eficiente de métodos que se conoce son útiles, y cuya base teórica se entiende bien,
en vez de desarrollar más técnicas ad-hoc. (IBIDEM, Discusión por R. Sibson, p.
356).
La razon principal de la gran popularidad del análisis de conglomeración es
que él es, en n dimensiones, un sustituto exitoso de lo que los gráficos de dispersión
producen en dos dimensiones. (IBIDEM, Discusión por E. M. L. Beale, p. 358) .

... proceder al análisis de componentes principales y reducir el número de di-


mensiones efectivas, si usted está preparado a sacrificar los valores característicos
inferiores de la matriz. En cantidad de casos en que hemos empleado la técnica,

212
uno rebaja el número de 50 as, sin ningunapérdidaefectivaen el proceso. (IBIDEM,
Discusión por M. G. Kendall, p. 359) .
... ninguno de estos métodos es muy confiable, a menos que la situación sea
reproducible .... me parece deseable partir las observaciones en dos o más grupos
y proceder a un ejercicio sobre cada uno de ellos y ver si se obtienen resultados
similares para los subgrupos, de manera tal que se tenga alguna idea de la
reproducibilidadde los resultados. Esta es una técnica que debería ser mucho más
empleada de lo que ha sido. (IBIDEM, Discusión por M. G. Kendall, p. 360).
Sin clasificación muy dificilmente podríamos comunicarnos, porque las
palabras que usamos son los nombres de clases con propiedades o conceptos
asociados. {IBIDEM, Discusión por J. C. Gower, p. 360).
Aún con poblaciones puntuales, la distinción entre clasificación y asignación
no es tajante. Una vez que las clases están conformadas, una de las primeras
preguntas es cómo asignarcada entidad en forma correcta. (IBIDEM, Discusión por
J. C. Gower, p. 363).
En la situación general yo apoyaría al científico experimentado. Tengo
escasa fe en una respuesta definitiva proporcionada por un método pobremente
definido, a una pregunta pobremente definida. Para mi, ... la clasificación es una
técnica descriptiva conducente a un apropiado re-examen de los datos. El científico
experimentado puede aceptar las sugerencias de los resultados de la clasificación
como más informativas que sus hipótesis previas, . (IBIDEM, Réplica del autor, R.
M. Cormack, a las discusiones, p. 366).
Cormack (1971 ), (el relevamiento al que se viene haciendo referencia
extensivamente en lo precedente; nota del autor) ha llamado la atención sobre dos
condiciones previas que se aplican a todos los métodos de agrupamiento. En primer
lugar se deben aplicar pruebas a los datos para descubrir si de hecho contienen -
o no- grupos o conglomerados, dado que Forgy (1965) ha demostrado que las
técnicas de clasificación pueden producir grupos inexistentes. En segundo lugar,
Kendall (1971) y Cormack (1971 ), (de nuevo en el relevamiento y discusiones que
se vienen citando extensivamente en lo precedente; nota del autor), hicieron una
observación en el sentido de que, de hecho, ninguno de estos métodos es muy
confiable, a menos que los resultados sean reproducibles. (JOHNSON, P. H. S. "An
lntroduction to the Use of Multivariate Analysis Techniques to lnterpret ·surveys"'.
Zimbabwe Agricultura/ Journal, (1982), Vol. 79 (6): 215-219; p. 218).
Las limitaciones de las clasificaciones existentes resaltan en forma
prominente, cuando se hace un intento por lidiar con muchos de los problemas
sociales relacionados con unidades agrícolas y la gente de la agricultura. La falta
de adecuación resulta particularmente significativa, por ejemplo, para mostrar la

213
escala de operaciones y la significación relativa de los diferentes grupos produc-
tores en el cuadro total. (BENEDICT, M. R., Tolley, H. R., Elliot, F. F. y Taeuber,
Conrad. "Need far a New Classification of Farms". Journal of Farm Economics,
November 1944, 26:694-708; p. 695).

Lo que es particularmente necesario es una partición de las fincas en unas


cuantas clases simples, distintivas y claramente reconocibles, y una tabulación para
cada una de estas clases y datos, de manera que sean los necesarios para
reconocer y entender sus problemas. (IBIDEM, p. 695).

Con las fincas de los países agrupadas de esta forma, podríamos comenzar
a pensar más efectivamente en términos de los problemas e intereses de los
agricultores que operan cada tipo de finca, en vez de pensar en términos de alguna
finca promedio intangible, que no existe. (IBIDEM, p. 696).

Una clasificación de datos es significativa solamente en relación con algún


propósito para el cual va a ser usada. (IBIDEM, p. 697) .

... como si estos seis millones de fincas fueran parecidas en sus condiciones,
previsiones, y los problemas que confrontan. La legislación nacional que afecta a
las fincas se sanciona y frecuentemente se aplica, en forma más o menos uniforme
a todas las secciones del país. Tal legislación puede provocar problemas adicion-
a/es para algunas, dar ventajas inmerecidas a otras, y fracasar en la creación de un
programa agrícola bien ordenado y realista. (IBIDEM, p. 698) .

... los criterios elegidos deberían, tanto como sea posible, distinguirfincascon
base en diferencias significativas en intereses, características y comportamientos,
bajo condiciones cambiantes. (IBIDEM, p. 695).

Se debe encontrar alguna especie de compromiso entre el ideal de agru-


pamientos realistas y muy detallados, y las muy burdas clasificaciones que hoy, en
forma tan generalizada, se emplean para la discusión pública y la acción legislativa.
La mejor esperanza es que se pueda progresar hacia una clasificación más
práctica, con el pensamiento de que ella pueda eventualmente ser refinada.
(IBIDEM, p. 699).

El objetivo de la investigación tipológica es producir una expresión com-


puesta del tipo o clase de objeto, de manera tal que sea, al mismo tiempo,
distinguible de otros tipos y parte de una clasificación integrada o taxonomía.
(TROUGHTON, M. J. "Approaches to an Agricultura! Typology far Canada".
Economic Geography, 50(1974):356-384; p. 371 ).

214
Programa

Lunes 8

8:30 a.m. Inauguración.

9:00 a.m. Presentación de proyectos.

10:15 a.m. Café.

10:45 a.m. Referencias, comentarios y posiciones


preliminares en torno al tema de enfoque de
sistemas de finca y tipificación de unidades de
producción agropecuaria. M. Kaminsky.

12:00 m. Discusión. Moderador: R. Hart.

12:30 p.m. Almuerzo.

2:00 p.m. Conceptos generales sobre sistemas de finca,


niveles jerárquicos, su función y principales
interrelaciones. R. Hart.

3:00 p.m. Discusión. Moderador: E. Miranda.

3:30 p.m. Café.

4:00 p.m. Presentación de trabajos analíticos de variables


relacionadas con la tipificación de fincas.

La adopción tecnológica y al9unas variables


relevantes en el estudio de sistemas de fincas.
L. Agudelo.
5:00 p.m. Discusión. Moderador: E. Martínez.

Martes 9

8:30 a.m. Componentes, subsistemas y propiedades a nivel de


finca, que pueden servir como criterios para su
clasificacion. R. Hart.

9:30 a.m. Discusión. Moderador: E. Miranda.


10:00 a.m. Café.
10:15 a.m. Técnicas de análisis multivariado y de
programacion lineal en la evaluación de
alternativas tecnológicas mejoradas a nivel de
finca: El caso de Estelí, Nicaragua. G.
Calvo y J. lcaza.

215
11 :00 a.m. Discusión. Moderador: L. A. Agudelo.

11 :30 a.m. Á
Antecedentes, metodología resultados del
Proyecto Doble Propósito. . Iglesias.

12:00 m. Discusión. Moderador: G. Calvo.

12:30 p.m. Almuerzo.


1 :30 p.m. Aplicación de métodos cuantitativos al estudio de
sistemas de producción. J. Arze.

2:30 p.m. Discusión. Moderador: M. Kaminsky.

3:00 p.m. Café.

3:15 p.m. Aplicación de tipología de fincas.


M. Kaminsky.
4:00 p.m. Discusión. Moderador: B. Hart.

4:30 p.m. Tipificación de pequeños agricultores: Ejemplo de


la metodología aplicada a los productores de
fríjol de ltararé, S.P ., Brasil. Evaristo E.
Miranda.
5:30 p.m. Discusión. Moderador: L. G. Escobar.

Miércoles 10
8:30 a.m. La construcción de una metodología de
tipificación de fincas. R. Suárez y L. G.
Escobar.
9:30 a.m. Discusión. Moderador: L. M. Videa.

10:00 a.m. Café.

10:15 a.m. Aplicación de la teledetección espacial y de


sistemas geográficos de información, en las
estrategias de muestreo.

Ejemplos de los problemas y estrategias de


tipificación de fincas en Brasil. E. Miranda.

11 :30 a.m. Discusión. Moderador: L. G. Escobar.

12:00 m. Almuerzo.

1 :15 p.m. Una tipología de sistemas de producción ganadera:


Primera aproximación. L. M. Videa.

216
2:00 p.m. Discusión. Moderador: J. Gil.

2:30 p.m. Caracterización de sistemas de producción


agrícola de pequeños y medianos productores de
la cuenca del Río Achiguate. E. Martínez.

3:15 p.m. Café.

3:30 p.m. Discusión. Moderador: A. Iglesias.

4:00 p.m. Operacionalización del enfoque de sistemas en el


INIPA. J. Gil.

5:00 p.m. Discusión. Moderador: R. Suárez.

Jueves 11
8:30 a.m. Comentarios sobre las presentaciones y el tema de
investigación.
M. Kaminsky, R. Hart, E. Miranda y J. Arze.
9:30 a.m. Propuesta para analizar la conveniencia de
continuar este enfoque en proyectos de
investigación de sistemas de fincas, y otros
problemas metodológicos. G. Escobar.

10:30 a.m. Café.

11 :00 a.m. Organización de grupos de trabajo.

12:00 m. Almuerzo.

2:00 p.m. Trabajo en grupos.

Viernes 12
8:30 a.m. Informe de grupos. Moderador: G. Escobar.

10:00 a.m. Café.


10:30 a.m. Discusión general. Moderador: J. Arze.

12:00 m. Almuerzo.

2:00 p.m. Discusión y recomendaciónes sobre futuras líneas


de investigación. Moderador: M. Kaminsky.

4:30 p.m. Café.

217
Participantes

Luis A. Agudelo PONTIFICIA UNIVERSIDAD Colombia


JAVERIANA
Programa de Desarrollo Rural
Integrado
Carrera 1Oa No. 65-48
Bogotá D.E.
José Arze CATIE Costa Rica
Telex: 8005 CATIE C.R.
Turrialba

Gustavo Calvo CATIE Costa Rica


Telex: 8005 CATIE C.R.
Turrialba

Evaristo De Miranda EMBRAPA Brasil


C.P. 69
13.820 Jaguariuna,
Sao Paulo

Germán Escobar CllD Colombia


Calle 72 No. 5-83, P.12
Bogotá D.E.

Guillermo Escobar CEGA Colombia


Carrera 9a No. 72-21, P.10
Bogotá D.E.

José Gil INIPA Perú


Apartado 248
Lima 100

Robert Hart RODALE RESEARCH CENTER U.S.A.


R.D. 1, Box 323
Kutztown, PA. 19530

Alexis Iglesias IDIAP Panamá


Apartado 958
David, Chiriquí

Mario Kaminsky llCA Costa Rica


Apartado 55-2200
San José, Coronado

Edgar Martínez UNIVERSIDAD DE SAN CARLOS Guatemala


Ciudad Universitaria, Zona 12
Guatemala

218
Ruth Suarez CEGA Colombia
Carrera 9a 72-21, P.1 O
Bogotá O.E.
Luz M. Videa UNIVERSIDAD NACIONAL Nicaragua
AUTONOMA DE NICARAGUA
Apartado 663
Managua

219

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