Você está na página 1de 55

EL ARTE DE TOMAR DECISIONES

Evangelismo para HOY

ELENA G. WHITE

Ministros de Dios, con corazones ardientes de amor por Cristo y vuestros semejantes, tratad de despertar a los que
están muertos en sus delitos y amonestaciones. Enternezcan sus corazones vuestras oraciones fervientes, y los
conduzcan arrepentidos al Salvador. Sois embajadores de Cristo, para proclamar su mensaje de salvación (Obreros
Evangélicos, pág. 35. Año 1915).

EL ARTE DE TOMAR DECISIONES

7:38:00 articulo, Decisiones, escuela de evangelismo, Marck Finley, secretos para no fumar, temas para campañas No
comments

PREAMBULO

La evangelización consiste en lograr que la gente se decida en favor de Cristo. La predicación y la enseñanza de
nuestro maravilloso mensaje es algo hermoso e incluso emocionante. Pero nuestra tarea no consiste solo en
alimentar a los peces, sino en pescarlos. En este aspecto es donde más ayuda necesitamos, y estoy seguro de que
usted siente lo mismo, no importa si es un miembro de iglesia, un teólogo en ciernes o un evangelista de experiencia.

Mark Finley tiene algo que decir en cuanto a este aspecto tan vital del ministerio de la iglesia y lo dice muy bien. A
todos se nos ha encargado ser pescadores de hombres. No se nos pide que solo los contemplemos. El libro
Decisiones: Como persuadir a la gente en favor de Cristo, nos indica cuál es la diferencia. Estoy entusiasmado con
esto. Se lo recomiendo a usted: pastor, miembro de iglesia, evangelista.

En la actualidad las circunstancias en que se desarrolla la evangelización son nuevas. Parecería que la gente está más
abierta, más dispuesta a escuchar. Los principios acerca de los cuales habla Mark Finley en esta obra, contribuirán
mucho a aumentar el rendimiento, la cosecha de los muchos excelentes programas misioneros que se han
desarrollado en los últimos años. Este es el momento de la cosecha.

C. E. Bradford.
INTRODUCCIÓN
El veterano evangelista J. L. Shuler solía contar lo que le sucedió a Henry Ford al arreglar el automóvil del rey Francisco
José de Austria. Ambos personajes pasaban sus vacaciones en Inglaterra, y cierto día, mientras Henry paseaba por la
campiña, vio a un grupo de impotentes pasajeros de pie al lado de uno de los autos que él había construido. Se
detuvo y preguntó si podría ser de alguna ayuda.

Por supuesto que sí - dijo un distinguido señor a quien Henry conoció como Francisco José. Pero el rey no sabía quién
era él. Henry abrió el capó del auto, que había construido y conocía muy bien, y dirigiéndose hacia uno de los
ayudantes del rey le pidió que lo pusiera en marcha.

Escucho por un momento el áspero sonido del motor, luego tomando un martillo, lo golpeó con toda destreza. Para
sorpresa del rey el motor comenzó a funcionar como recién salido de la fábrica. Muy satisfecho le pregunto a Henry:

¿Cuánto le debo? - Cien chelines de plata. - ¿Cien chelines de plata por dos minutos de trabajo? - Repitió incrédulo
Francisco José

No - replicó Ford - Dos chelines de plata por dos minutos de trabajo, pero 98 chelines de plata por saber dónde
golpear.

Saber dónde golpear, saber cuándo y cómo llamar para que las almas se decidan por Cristo, enfatizaba Shuler, esa es
la clave para el éxito en la ganancia de almas. El tema de este libro es: la decisión, la ciencia de la decisión. Con mucha
frecuencia pastores, instructores Bíblicos, laicos y evangelistas, tratan de conseguir una decisión sin comprender los
principios básicos que la motivan. El ganador de almas debe conocer la mente humana, como piensa la gente y por
qué actúa como lo hace además de tener la habilidad necesaria para saber dónde golpear.

He leído libros que traían el tema de la decisión y me parecen manipuladores. Este libro no es así. En cada página
pone énfasis en la cooperación con el Espíritu Santo, la cooperación con Jesucristo el quiere que guiar a su creación a
la decisión. Podemos estorbarlo o ayudarlo. "No es suficiente proclamar el mensaje o aun convencer a la gente de que
las doctrinas son verdaderas. El propósito final del mensaje que predicamos es llevar a los seres humanos a obedecer
a Cristo. La comisión que recibimos del Señor no trata sólo de advertir a los hombres sino de hacerlos discípulos,
hacerlos cristianos. Ese debería ser nuestro único objetivo. Nuestra función no es sólo advertir, sino salvar: no sólo
convencer, sino convertir; tampoco estamos sólo para dar el mensaje de que Cristo Viene, sino para ayudar a la gente
a prepararse para encontrarse con el Señor. En este punto (conducir a la decisión) más de un ministro que en otros
sentidos es fuerte, se muestran lamentablemente débil. Muchos esfuerzos públicos fallan en este punto que en todos
los demás combinados", J. L. Shuler, Public Evangelism (La evangelización publica), pag. 180. Las páginas que siguen
no están dedicadas al fracaso, sino al éxito. La clave es saber donde como y cuando golpear.
Capítulo 1

El ABC De La Decisión
Cuando recibimos el llamado de Cristo para seguirlo en su obra en favor de la humanidad, nos prometió enseñamos
cómo debemos trabajar con él: "Y les dijo: Venid en pos de mí, y os haré pescadores de hombres" (Mat. 4: 19). Los
pescadores de peces y los pescadores de hombres no nacen; se hacen. Y esa preparación comienza cuando se observa
al Maestro mientras trabaja. (T)

En su ministerio por las almas, lo que Jesús era valía tanto cómo lo que decía. Se tomaban decisiones no sólo por las
evidencias que presentaba sino por el hombre que era. Jesús ganaba los corazones por medio de la amistad tanto
como por medio de la verdad. Se identificaba con las personas. La persuasión comprende tanto el logos
(conocimiento) como el ethos (confianza) en relación con el que presenta la verdad.

Pero los sentimientos pueden ser a la vez positivos y negativos. Los sentimientos negativos pueden llevar a una
decisión negativa. Por eso, no sólo el mensaje y el mensajero, sino también el método es importante para conseguir
una decisión positiva. La forma como expresamos la verdad afecta los resultados.

Así sucede cuando decimos la verdad. Un pasaje mesiánico condensa los elementos expresados anteriormente:
"Jehová el Señor me dio lengua de sabio, para saber (método) hablar palabras (que decir) al cansado: despertará
mañana tras mañana (cuando debe decirse), despertara mi oído para que oiga como los sabios. Jehová el Señor me
abrió el oído. y yo no fui rebelde, ni me volví atrás el tipo de persona que era Jesús"(Isa. 60: 4. 5).

Cada mañana, en respuesta a la oración de su hijo, el Padre le proclamaba la "sabiduría necesaria para conseguir
decisiones positivas. De la misma forma nosotros podemos aprender que decir, cómo decirlo y cuándo decirlo.

Algunos de nosotros no lo hemos aprendido todavía:

"Estoy tan entusiasmado con la verdad - me dijo un nuevo converso - que he compartido con mis familiares católicos
su grabación sobre la marca de la bestia".

El mensaje equivocado. El momento inoportuno. La forma errónea. Y sin duda un retroceso en las relaciones.

"Siguiendo la verdad en amor," aconsejó Pablo Efe. 4: 15. Ese es el método de Dios: presentar la preciosa verdad por
medio de gente que ama. Las decisiones están cimentadas en las relaciones interpersonales. Mientras más confianza
tiene en el mensajero, más profunda es la relación que se establece, y mayor es la posibilidad de una decisión
positiva.

Sigamos a Jesús y observémoslo mientras usa el ABC de la decisión.

A. Aceptar, Es evidente que Jesús aceptaba a los hombres y a las mujeres donde estaban. Les servía en la condición en
que los encontraba. No trataba de conseguir un cambio sin antes establecer una relación de confianza. Le vemos
cuando se encontró con la mujer de Samaritana junto a un pozo. Ganó su confianza pidiéndole un favor, cuando sus
conciudadanos ni siquiera le habrían dirigido la palabra. En la fuente de Betesda Jesús atendió una necesidad física
antes de buscar una decisión. Con Nicodemo aceptó una entrevista personal nocturna para preservar la privacidad del
inquisitivo fariseo.

Reflexione en cuanto a estos contactos, y es muy probable que descubra los ingredientes de la aceptación:
conformidad y aprobación.
(1) Conformidad. Al tratar de conseguir decisiones, primero busque posibilidades de conformidad, aunque sean
escasas. Una conformidad reducida abrirá el camino para otras mayores. Traten de lograr decisiones mientras se dice:
"No estoy de acuerdo con usted", es cortar una relación antes de que empiece; y una relación interrumpida lleva a
decisiones negativas.

Una damita muy sabia lo dijo de esta manera:

"Manifestados de acuerdo con la gente sobre todo punto donde podáis hacerlo en forma consecuente. Vean ellos que
amáis sus almas, y que queréis estar en armonía con ellos hasta donde sea posible. Si el amor de Cristo se revela en
todos vuestros esfuerzos, podréis sembrar la simiente de la verdad en algunos corazones; Dios regara la simiente
sembrada y la verdad brotar y llevara fruto para su gloria" (Elena G. de White. El evangelismo, pag. 107)

(2) Aprobación. Cuando los espectadores condenaron a María por "desperdiciar" un ungüento costoso sobre los pies
del Señor, Jesús la alabó por su bondad y dijo que su acción sería recordada a través de los siglos como un símbolo de
amorosa ternura. El Señor felicita al centurión al declarar: "Ni aun en Israel he hallado tanta fe" (Mat 8:10). "Oh mujer,
grande es tu fe" le dijo con admiración a la mujer Cananea (Mat. 15: 28). Muchas veces Jesús demuestra aceptación al
felicitar, apreciar y concordar con la gente tanto cuanto podía.

Hasta encontró formas para expresar su aprobación a los que dudaban de él. Al referirse a un escriba que le había
hecho preguntas al Señor, Marcos 12:34 dice: "Jesús entonces, viendo que había respondido sabiamente, le dijo: "no
estas lejos del reino de Dios". El Maestro estaba buscando un buen argumento. Demostraba aprobación. No se sienta
rechazado por las actitudes o las acciones negativas de los demás. No tienen por qué aprobar, sus acciones mientras
Usted no apruebe las de ellos. No se sienta ofendido Demuestre genuina aceptación. Trate de concordar con ellos en
todo lo posible. Busque algo donde pueda mostrar su aprecio, y entonces, en la medida de lo posible, con una
pequeña dosis de confianza, con pequeñas felicitaciones, trate de construir un lazo de unidad.

Recuerde, la aceptación se manifiesta por acuerdo y aprobación.

Para demostrar que acepta a los demás, haga que hablen de si mismos, sus hogares, la ciudad donde viven, su trabajo,
su familia, sus negocios, sus ideas, sus logros, sus antecedentes, sus pasatiempos, sus deportes. Abrase
auténticamente para aprender de ellos, y ellos se abrirán para aprender de usted Sus logros deberían ser siempre
secundarios y estar subordinados. El sabio lo dijo de esta forma: "Alábete el extraño, y no tu propia boca; el ajeno, y
no los labios tuyos" (Prov. 27:2).

Sea un buen oyente. Pierre Salinger, biógrafo de John Kennedy, al describir las entrevistas que éste tuvo con la gente
cuando era presidente de los Estados Unidos, decía que tenía la capacidad de sentarse detrás de su escritorio y dar,
durante los quince a treinta minutos que uno estaba en su presencia, toda su indivisa atención. Salinger decía que
Kennedy formulaba preguntas profundas y agudas acerca del tema, como si estuviera completamente identificado
con las necesidades de uno, y todo lo que tenía que hacer era preguntarle lo que a uno le interesaba.

No es extraño entonces que tanta gente amara a Kennedy. Jesús aceptaba a los seres humanos donde estaban, y
desde allí comenzaba a formar lazos de amistad que más tarde serían los puentes sobre los cuales la verdad podría
llegar hasta sus mentes.

B. Creer. Este es el segundo principio clave en nuestro ABC nadie es ganado por alguien que no le gusta. Nadie gusta
de alguien que al parecer no lo acepta. Crea que la persona desea sinceramente la verdad y quiere seguir a Jesús. Crea
que se lo puede ganar para Cristo y su causa. Crea que esa persona es honesta y desea tomar la decisión correcta. Si
cree que los seres humanos son duros de corazón, que no responden y no se los puede alcanzar, su propia actitud es
reflejara en las decisiones que hagan.
En un estudio reciente realizado por la Universidad Andrews con más de 8.300 adventistas norteamericanos,
incluyendo 320 diferentes iglesias, uno de los principales factores en las decisiones por Cristo y su mensaje fue el
hecho obvio de que crecían más rápidamente las iglesias constituidas por individuos que creen que los seres humanos
podrán ser ganados. Los investigadores declararon:

"Algunos han llamado a esto el síndrome de la profecía que se cumple a sí misma, pero dicho en forma simple, existe
una elevada correlación entre la convicción que el pastor tiene de que su iglesia puede crecer, y el grado en que ésta
crece. Los pastores, y podríamos agregar también los miembros de iglesia que clasificaron el potencial de su iglesia
como elevado, tuvieron un rápido crecimiento de su feligresía", "Major Church Growth Study Completed" –, Institute
of Church Growth Newsletter, feb. 1981 (" Conclusión de un estudio importante acerca del crecimiento de la iglesia",
Boletín del Instituto de Crecimiento de la iglesia; feb. 1981).

Este principio de creer, también fue ilustrado por Jesús. El veía a la gente no como era. Si no como podía llegar a ser
cuando vio a la mujer junto al pozo no vio a una desechada por la sociedad, sino a un ser humano herido y golpeado,
y la alcanzó con su amor. Jesús vio a Pedro no como a un pescador rudo suelto de lengua, sino como a un poderoso
predicador. Vio a José de Arimatea no como a un complicado hombre de negocios sino como a alguien que necesitaba
encontrar la Perla de Gran Precio. Vio al centurión no como a un endurecido militar, sino como a un amo que amaba a
su siervo. Vio a Nicodemo no como a un líder de la oposición, impregnado de fanatismo religioso, sino a alguien que
necesitaba desesperadamente un nuevo corazón Jesús veía lo mejor en la gente, Creía en ella, y confiadamente
esperaba que tomaran la decisión de seguirlo.

C. Confiar. Al guiar a los seres humanos, a una decisión por el maestro. Es imperativo que actuemos con confianza.
Como si fuera imposible que fracasáramos o pudiéramos ser chasqueados. Espere que la gente se decida. Muchas
veces actuamos precisamente como esperamos que lo haga. ¿Se ha dado cuenta de que cuando usted le sonríe a
alguien casi siempre esa persona le sonríe a su vez? La amistad suscita amistad, la confianza genera confianza., Cristo
creía en la gente y confiadamente esperaba una respuesta positiva. Extraía lo mejor que había en ellos. Y ellos se
elevaban a la altura de sus expectativas.

El libro de los hechos registra el crecimiento más explosivo de toda la historia de la iglesia Hechos 2 dice que tres mil
se bautizaron el día del Pentecostés. Hechos 4 señala que la iglesia aumento poco después a cinco mil. Si uno agrega a
estas cifras las mujeres y los niños, significa unos siete o diez mil nuevo creyentes. Al avanzar en el libro, leemos:
"Entonces las iglesias, se acrecentaban" (Hech. 9: 31), Nuevamente: "Ya ves hermano cuantos millares de judíos hay
que han creído; y todos son celosos por la ley" (Hech. 21: 20, el énfasis es nuestro). La palabra griega es "muriades," y
eso significa una decena de miles. ¡Qué crecimiento sorprendente! ¿Por qué?

Este es uno de sus secretos: "Sabed, pues, que a los gentiles es enviada esta salvación de Dios; y ellos oirán...
Predicando el reino de Dios y enseñando acerca del Señor Jesucristo, abiertamente con toda confianza y sin
impedimento" (Hechos 28: 28). Así como Jesús, la iglesia primitiva enseñaba con confianza: confianza en que donde
los enviara, el Espíritu Santo estaría presente para impresionar los corazones; confianza en que la gente los oiría y
tomarían la decisión correcta.

Para resumir, diremos que para ser ganadores de almas de éxito debemos aceptar a los hombres y mujeres como son,
y debemos ser agradables con ellos y manifestarles nuestra aprobación, creer que son sinceros y genuinos. Confíe en
que van a tomar la decisión correcta. Ponga en práctica este ABC de la decisión, y observe como obra Dios por medio
de usted.
Capítulo 2

El Poder Vivificante De La Palabra


George Whitfield pasó cierta vez una agradable velada en el hogar de un matrimonio amigo, muy rico. Al retirarse a su
habitación se sintió sumamente perplejo porque todavía no habían aceptado a Cristo. Se arrodilló en medio de esa
lujosa estancia y pidió a Dios que le ayudara a saber qué debía hacer para alcanzarlos.

A la mañana siguiente notó que el diamante de la dama había quedado en la mesa de luz al lado de su rama, lo tomó
y con el, escribió en el vidrio de la ventana: "Una cosa te falta" Sin decirle una palabra de lo que había hecho, le
agradeció por su hospitalidad y partió.

Cuando ella entró a su habitación para ordenarla, el sol brillaba a través de la ventana e iluminaban las cuatro
palabras. Sabía qué eran de la Biblia, pero no sabía dónde se encontraban ni cuál era su significado. Al principio se
sintió disgustada. Llamo a su esposo y le dijo: "Whitfield escribió en nuestra ventana: "Una cosa te falta." ¿Qué nos
falta? No nos falta nada. Si nos faltara algo lo podríamos comprar. ¿Qué quiere decir con eso?".

Esa noche la rica pareja escudriño las Escrituras, y después de mucho tiempo encontraron las cuatro palabras en la
historia de Cristo y el joven rico. Al meditar en el relato, ciertamente comprendieron su significado y descubrieron que
a pesar de tener todo les faltaba Aquel que es todo. Aquella noche se arrodillaron sobre su hermosa alfombra junto a
sus valiosos muebles, y dedicaron a Cristo todas sus posesiones, pero por sobre todo su corazón. La impresión que el
Espíritu Santo hizo acerca de esas cuatro palabras les cambió la vida.

La Biblia es el dinámico instrumento de Dios para ganar almas. Ningún ser humano puede ser un verdadero ganador
de almas a menos que sepa cómo usar el texto adecuado en el momento oportuno para generar una decisión. Pablo
dice que "la palabra de Dios es viva y eficaz, y más cortante que toda espada de dos filos: y penetra hasta partir al
alma y el espíritu, las coyunturas y tos tuétanos y discierne los pensamientos Y las intenciones del corazón" (Heb.
4:12).

Durante la Creación, la audible Palabra de Dios llevaba en si tal poder que generó la materia. "Por la palabra de Jehová
fueron hechos los cielos, y todo el ejercito de ellos por el aliento de su boca" Sal. 33: 61. Elena de White declara: "En
la palabra de Dios está la energía creadora que llamo los mundos a la existencia. Es W palabra imparte poder:
engendra vida. Cada orden es una promesa; aceptada por la voluntad recibida en el alma trae consigo la vida del Ser
Infinito "Transforma la naturaleza y vuelve a crear el alma a imagen de Dios" (La Educación, p. 122)

Las promesas y los principios dadores de vida de la Palabra de Dios poseen el poder de capacitamos para hacer lo que
declaran. Puesto que la Palabra es viva, no sólo nos dice como vivir, sino que nos da poder para vivir correctamente.
En "El ministerio de curación", p. 85. Elena de White declara este principio:

"Así sucede con todas las promesas de la Palabra de Dios. En ellas nos habla a cada uno en particular y de un modo
tan directo como si pudiéramos oír su voz. Por medio de estas promesas. Cristo nos comunica su gracia y su poder.
Son hojas de aquel árbol que es para la sanidad de las naciones (Apoc. 22: 2). Recibidas y asimiladas serán la fuerza
del carácter la inspiración y el sostén da la vida. Nada tiene tal virtud curativa Ninguna otra casa puede infundimos el
valor y la fe que dan vital energía a todo el ser".

Ningún otro libro tiene tanto poder como la Palabra de Dios para capacitar a los seres humanos a tomar decisiones
ningún método ea tan poderoso como citar los textos de la Biblia y aplicarlos a situaciones reales de la vida. AL hablar
con alguien acerca den una decisión, podríamos decir: "En mi opinión", o "Me parece" o "Mi iglesia enseña.". Pero
estas expresiones pesan Poco, en cambio Cuando usted y yo abrimos nuestras Biblias Y leemos un texto que le dice a
la persona lo que Dios le pide que le comunica la voluntad de Cristo para su vida, estamos enjaezando fuerzas
poderosas que seguramente producirán un cambio.

Una ex adventista asistió a una serie de reuniones que dirigí hace algunos años. Mientras la visitaba en su hogar una
noche, le hablé de volver e la familia de Dios. Sus ojos brillaban mientras me decía: "Me gustaría mucho, pero no
puedo porque fumo". La llamé por su nombre y le pregunte:

--"¿Cree Ud. que Jesús quiere que gane la victoria sobre este hábito?

-"Oh, si, lo creo. Pero no puedo. Soy muy débil"-

-"¿Me permite que le lea un versículo de la Biblia? - le pregunte. Y abrí mi Biblia en 1Juan 5: 14 - "Y esta es la
confianza que tenemos en el. que si pedimos alguna cosa conforme a su voluntad, El nos oye". Entonces Mary confía
Ud. en que puede dejar de fumar?

- No.

- Esta bien, porque la Biblia dice: "Esta es la confianza que tenemos en él". Entonces, ¿donde esta la con confianza?

.- En él.

Luego leí el versículo una vez más. y añadí: "Si pedimos alguna cosa conforme a su voluntad. menos dejar de fumar, él
nos oye". Me volví a Mary y le pregunte:

-¿Puedo escribir esto en su Biblia? ¿Me permite su Biblia para escribirlo?

- No, allí no dice eso - contestó ella -. Dice que si pedimos cualquier cosa conforme a su voluntad el nos oye.

-¿Será la voluntad de Dios que Ud. deje de fumar? - le pregunte.

- Si, por supuesto - fue su respuesta.

- Entonces, ¿puede pedirle a Cristo con confianza que le de el poder que le ha prometido?

-¡Oh. si! Creo que puedo.

... Una pregunta más. ¿Cuando recibirá Ud. este poder para dejar de fumar? ¿En una semana, en un mes, en tres
meses? ¿Cuando lo recibirá?

Entonces abrí mi Biblia en Juan 1:12 y leí: "Más a todos los que le recibieron , a los que creen en su nombre, les dió
potestad de ser hechos hijos de Dios"

- Cuando recibimos a Jesús, recibimos su poder - proseguí - Muy bien, esta noche hemos visto que Ud. puede confiar
en. Jesús, que lo que le pidamos, si esta de acuerdo con su voluntad, El nos lo da. Y sabemos que es su voluntad que
Ud. deje de fumar. Hemos visto, también, que al recibirlo, Ud. recibe poder.

Mary se sentó quedamente, con un resplandor nuevo en los ojos.

-¿Le gustaría arrodillarse esta noche para decirle a Jesús que confía en que él puede hacer por Ud. lo que Ud. no
puede hacer por si misma? - le pregunté - ¿Le gustaría decirle que Ud. cree que es su voluntad que deje de fumar, y
que le gustaría recibir poder ahora mismo y que cree que se lo esta dando? -
¿Y que a pesar de cualquier deseo lograra la victoria por medio del poder de Cristo, Porque su Palabra lo dice? ¿Esta,
dispuesta realmente a creer lo que Dios dice?

Entonces nos arrodillamos y Mary oró. Esa noche, más de ocho años atrás, Dios le dió la victoria total sobre el hábito
de fumar, y se trataba de dos a tres atados por día. Es cierto que le sugerí algunos métodos: como hacer inspiraciones
profundas, caminar y beber mucha agua para ayudarle a vencer el habito. Pero al invocar las promesas de la Palabra
de Dios encontró verdadera liberación en Cristo.

"Dios no ha prometido bendecir nuestros argumentos, sino su Palabra" (El Arte del testimonio personal p. 24). Podría
haber discutido con Mary sobre las necesidad de que dejara de fumar. Podría haber insistido en que fumar es malo.
Pero me di cuenta de que ella ya se sentía culpable por su vicio, y que su gran necesidad era aceptar las promesas
llenas de esperanzas de la Palabra de Dios.

Cuando los seres humanos se ponen en contacto con la Palabra de Dios, experimentan un cambio. La verdad que es
posible leer la Biblia con la mente cerrada y recibir poco beneficio. Pero cuando alguien trata de conocer la verdad de
Dios, aunque al principio sea bastante escéptico, finalmente se transformará.

C. S. Lewis comenzó a leer los evangelios con escepticismo, pero quedó encantando con el Cristo que encontró en sus
paginas. Reveló su cambio de actitud en su libro, Surprised by Joy (Sorprendido por la alegría). Es una descripción de
cómo el Cristo viviente lo transformó el leer las Escrituras.

Robert Morrison concentro su actitud escéptica hacia la Biblia en un esfuerzo por desacreditar la resurrección de
Cristo Pero cuando comparó la evidencia histórica con el relato bíblico escribió ese maravilloso libro titulado. Who
Moved the Stone (¿Quien movió la piedra?) en el que proclama la resurrección como un evento divino. Morrison
experimentó una transformación al leer el relato Bíblico.

O tome por ejemplo el caso de William Ramsey. Hace más de cien años este jóven erudito ingles Se fue al Asia Menor
con expreso propósito de probar que no era exacta la historia relatada por Lucas en su evangelio y en los Hechos. Sus
profesores habían afirmado con aplomo que Lucas no podía tener razón. Ramsey comenzó a excavar en las antiguas
ruinas de Grecia y Asia Menor para buscar antiguas expresiones, límites y otros asuntos que desenmascararían a Lucas
si hubiera inventado la historia posteriormente, como se aseguraba. Ramsey comparó sus descubrimientos
arqueológicos e históricos con el relato del nuevo testamento, y quedó tan convencido de que las escrituras son
exactas hasta en los más mínimos detalles, que llego a ser cristiano y un gran especialista en el Nuevo Testamento. Al
ponerse en contacto con la Palabra viviente. y al comparar con mente abierta las evidencias históricas, Ramsey
también fue transformado.

El ganador de almas de éxito debe alimentarse de las promesas de la palabra de Dios. Al atesorar en la memoria esas
promesas y principios, se capacitará para tratar con ésta ciencia a los demás. El Dr. C. L. Goodale lo resume así: " Nada
puede tener un mensaje lo suficientemente grande para las almas necesitadas, si no se ha alimentado de la Palabra
de Dios hasta que ésta aparezca en cada gota de su sangre y en cada exhalación, cuando proclama el mensaje que
Dios le ha dado" (Motives and Methods of Modem Evangelism, [Motivos y métodos relativos a la evangelización
moderna] p. 46).
Y Elena de White lo enfatiza al decir: "Ellos (los ministros) no crecen en eficiencia en la obra, porque su conocimiento
de las Escrituras de verdad no aumenta" (Review and Herald. 8 de abril de 1890).

Sin duda usted esta leyendo esta libro porque quiere tener más éxito al ganar almas para Cristo. Llene su mente de las
preciosas promesas de la Palabra de Dios. Memorice los versículos relativos a la salvación, la segunda venida, el
sábado, el estado de los muertos, el santuario, el espíritu de profecía, la verdadera iglesia y las fundamentos de la fe
adventista.

Descubra los pasajes destinados específicamente a ayudar a la gente a acudir a Jesús (Mat. 11: 28; Juan 6: 37, 38), a
mostrar el gozo del perdón (Isa. 1:18); 1 Juan l: 9), a saber que existe poder en Cristo para cambiar sus corazones (2
Cor. 5:17; Heb. 10: 8-10). a saber que Jesús tiene poder para ayudarlos a enfrentar la tentación y el pecado (Heb. 7 :
25; Fil. 4:13), a creer que Cristo suplirá todas sus necesidades (Fil. 4: 17, 18; Mat. 6: 26, 33).

Estos pasajes son como semillas. Cuando se los planta en el terreno de la mente, brotan y llevan fruto para la gloria de
Dios, porque tienen vida. Tienen poder para dar vida, para transformarla y modificarla. Siembre la semilla en el
terreno de la mente y tendrá una abundante cosecha de amas durante su ministerio. La Biblia, la autoridad de su
palabra y el poder de su mensaje conducen a la decisión.

Capítulo 3

Como funciona la mente

Una madre llevo a sus hijos a la heladería y preguntó:

-¿Chocolate o vainilla?

-¿ No tiene otros sabores ? - le pregunto la madre - estoy cansada de estos dos.

- Señora - suspiró el heladero -, si Ud. supiera cuanto demoran los clientes en decidirse entre chocolate y vainilla,
nunca le añadiría otro sabor.

Algunas decisiones carecen de importancia, como elegir entre un helado de chocolate y otro de vainilla, por ejemplo.
Sin embargo, la capacidad de elegir es una facultad dada por Dios. Es fundamental que el ganador de almas entienda
cuál es el lugar que ocupa la voluntad en, la toma de decisiones, la voluntad es la clave de ello.

El transatlántico Queen Elizabeth pesa alrededor de 85.000 toneladas. Pero está dirigido por un timón de solo 65
toneladas. El timón, pequeño si se lo compara con el resto del barco, controla su dirección. La voluntad es el timón de
la vida del hombre. No es prerrogativa del ganador de almas manipular la voluntad. Su responsabilidad no es forzarla
Pero no tendrá éxito en ganar almas si no entiende cómo se relaciona el Espíritu Santo con la voluntad.

"Lo que necesitas comprender es: la verdadera fuerza de la voluntad. Este es el poder que gobierna en la naturaleza
del hombre: el poder de decidir o de elegir, Todas las cosas dependen de la correcta acción de la voluntad" (El Camino
a Cristo, p. 47) "Mediante el debido uso de la voluntad, cambiará enteramente la conducta. AL someterse nuestra
voluntad a Cristo, nos aliamos con el poder divino. Recibimos fuerza de lo alto para mantenemos firmes. Una vida
pura y noble, de victoria sobre nuestros apetitos y pasiones, es posible para todo el que une su débil y vacilante
voluntad a la omnipotente e invariable voluntad de Dios" (El ministerio de curación, pp. 131,132).
Toda decisión que se tome, ya sea para comprar una aspiradora, o aceptar la verdad bíblica y, llegar a ser adventista,
abarca cuatro niveles básicos.

El primero es la información. En éste nivel la persona comienza a acumular, información con respecto a la decisión que
desea tomar. Si se trata de comprar un auto nuevo, por ejemplo, recorre los negocios para reunir información
Considera las ventajas o desventajas de los diferentes modelos que se ofrecen, para comparar el rendimiento, cuantos
kilómetros hace por litro de combustible, su comodidad y sus posibilidades financieras. En este nivel se reúne la
información necesaria para poder hacer una decisión inteligente. No se harán decisiones correctas en la vida a menos
que la persona tenga la información correcta.

Invitar a la gente a hacer decisiones antes de que tenga la información adecuada crea barreras en la mente, y en esas
circunstancias la voluntad toma una decisión negativa y no positiva. Por eso, para guiar a los seres humanos a la
decisión, es necesario hacerse las siguientes preguntas: ¿Tiene esta persona información suficiente como para tomar
esta decisión? ¿Esta inteligentemente informada con respecto a la decisión que le estoy sugiriendo?

El segundo paso en el proceso de tomar una decisión es la convicción. Después de reunir información, la persona
comienza a darse cuenta de cual debería ser la decisión correcta con respecto a una determinada situación: lo que
realmente debe hacer. Cuando se trata de une decisión en favor de Cristo, la conciencia le sugiere "Creo que esto es lo
Dios quiere que yo haga. Esta es la voluntad de Dios. Si no tomo la decisión correcta, estaré fuera del ámbito de su
voluntad".

Cuando alguien esta bajo la influencia de la convicción, aparece desde el punto de vista positivo una profunda
sensación de que se hace lo correcto al tomar la decisión adecuada, y desde el negativo un hondo sentimiento de
culpa por no tomar esa decisión. Pero las decisiones no se toman por lo común sólo porque alguien está convencido
de que tiene que hacer algo. Algunos son tan sensibles que si se sienten impulsados por la sensación de que deben
hacer lo correcto, y están atormentados por el sentimiento de culpa por no hacerlo, harán la decisión adecuada.

Pero el tercer nivel es realmente el decisivo.

El tercer nivel es el deseo. En este paso la persona analiza sus sentimientos. y destaca no solamente lo que debe hacer
sino lo que quiere hacer. "Alguien puede llevar a un caballo hasta el abrevadero, y no puede obligarlo a beber". Pero la
sal si lo puede hacer.

Ponga un terrón de sal junto al agua, deje que el caballo lo lama, y pronto tendrá tanta sed que querrá beber. La sal
despertó el deseo.

Como ganadores de almas. somos la sal de la tierra. Es necesario presentar el evangelio de tal manera que las
personas no solo dispongan de la información adecuada y estén convencidas que deben hacer algo, sino que querían
hacerlo.
Cuando se presentan los beneficios que produce hacer lo correcto, las consecuencias nefastas de hacer lo incorrecto y
la influencia que ejercen nuestras acciones sobre los demás, el deseo aumenta. Dios mismo nos presenta en la Biblia
el gozo del cielo, los terrores del infierno y su propio amor como un poderoso incentivo para incrementar nuestro
deseo.

El cuarto paso, por supuesto, es la acción. Cuando la convicción y el deseo aumentan, la persona actúa. La clave para
la acción final es pasar de la información a la convicción y de así al deseo. J. L. Shuler lo dice de este modo: "Las
decisiones surgen de la acción reciproca del conocimiento, la convicción y el deseo en la mente de una persona.
Cuando el conocimiento, la convicción y el deseo de alguien con respecto a cierto asunto llegan a un determinado
grado de intensidad, la mente humana avanza hacia la decisión y la acción con respecto a ello. como el conocimiento,
la convicción y el deseo conducen a la decisión, los sermones, los estudios bíblicos y las charlas personales deberían
entrelazarse deliberadamente con el tema que se esta presentando. Esto es necesario para que se produzca el
conveniente entrelazamiento del conocimiento, la convicción y el deseo que conducen a la aceptación, la decisión y la
acción. Al analizar ciertos versículos descubrimos que algunos están especialmente destinadas a ofrecer
conocimiento, otros a brindar convicción y otros más para despertar al deseo. Y muchas veces el mismo versículo
contiene los tres elementos. Necesitamos concentramos en los textos que implantan la convicción y que al mismo
tiempo despiertan el deseo de aceptar y de seguir los grandes principios que presentamos a los que reciben nuestros
estudios bíblicos" (J. L. Shuler, Securing Decissions [Cómo conseguir decisiones]. 2a. parte. P. 1).

Tradicionalmente los obreros adventistas han sido fuertes para dar información, un poco débiles para infundir
convicción y más débiles aun para despertar el deseo. Esta es una razón por la cual decenas de personas, por ejemplo
creen que el sábado es el verdadero día de reposo, aceptan que sus cuerpos son el templo del Espíritu Santo y creen
que se deben bautizar, pero hacen muy poco al respecto. Muchos de estos "creyentes silenciosos" nunca salieron del
nivel de la información. Y los que pasaron al nivel de la convicción tienen muy pocos deseos de poner en practica sus
convicciones.

Elena de White lo dice muy bien en el tomo 9 de "Testimonios para la iglesia", p. 221. cuando dice:

"Existen grandes leyes que gobiernan el mundo natural, y a las cosas espirituales las controlan principios igualmente
valederos. Deben emplearse los medios adecuados para lograr un fin, si han de alcanzarse los resultados deseados".

Si no tomamos en cuenta los cuatro niveles básicos de la toma de decisiones, sólo cometeremos equivocaciones
andaremos a tientas en medio de la oscuridad, a la espera de alcanzar resultados. En cambio, si trabamos en forma
inteligente, de acuerdo con las leyes que gobiernan la mente humana, podemos esperar lógicamente que por la gracia
de Dios lograremos resultados. Debemos aprender especialmente a cooperar mejor con el Espíritu Santo en los
niveles dos tres. Dejaremos el tercer nivel, el que se refiere a despertar el deseo, para un Capítulo posterior. Ahora le
daremos una mirada al segundo nivel.

Como implantar la convicción

Se llega a la convicción, básicamente, cuando alguien tiene la información adecuada. Pero el hecho de que usted haya
dado información no significa que su oyente la recibió. Si ésta es clara y está libre de obstáculos y aparentes
contradicciones, Dios, por medio del Espíritu Santo, produce la convicción. Pero la información no llevará a nadie a la
convicción a menos que sea clara Al pasar de la fase de la información a la de la convicción, es bueno recordar que
conviene empezar cada aspecto o sector del estudio con esta pregunta: "¿Le resulta claro?".

Por ejemplo, al dar un estudio bíblico acerca de la segunda venida de Cristo, yo quiero implantar la convicción de que
el Señor viene pronto. En viste de ello podría repasar el estudio en dos a tres minutos diciendo : "Juan ¿te resulta
claro que cuando Cristo venga descenderá en les nubes de los cielos con todo los ángeles a fin de que todo ojo lo vea?
¿Crees de corazón que estamos viviendo en los días finales?" Si la respuesta es negativa ,debe retroceder a brindar
mas información antes de pasar a la convicción. Pero si la respuesta es positiva puedo continuar diciendo.

Juan y María. ¿escuchan Uds. la voz de Cristo que los invita a dejar todo lo que les separa de é1? En 1 Juan 3: 2,3 dice:
"Amados, ahora somos hijos de Dios y aun no se ha manifestado lo que hemos de ser, seremos semejantes a él, por
que le veremos tal como él es, todo aquel que tiene esta esperanza en él, se purificará a sí mismo, así como él es
puro"

¿Sienten la convicción de que Dios lo esta llamando para entregarse totalmente a él y prepararse para su venida?
¿Quisieran arrodillarse en este momento y tomar ésta decisión?.

En este estudio acerca del Sábado yo podría usar expresiones como estas: "Pedro, ¿le queda claro que el verdadero
día de reposo es el Sábado, el séptimo y último día de la semana, y que Dios descanso ese día?. ¿Acepta que Dios nos
pide que guardemos hoy el Sábado? ¿Cree Ud. que él Sábado forma parte de los diez mandamientos de la ley de
Dios?".

Si la respuesta es positiva, puede continuar con el Apocalipsis 22:14: "Bienaventurados los que lavan sus ropas, (en
otras versión dice: "Que guardan sus mandamientos"), para tener derecho al árbol de la vida y para entrar en las
puertas en la ciudad". "¿Oye Ud. la voz de Dios que le invita a guardar sus mandamientos de modo que pueda entrar
en esa ciudad? ¿Cree Ud. que eso es lo que debe hacer? ¿Quisiera arrodillarse y pedir a Dios que le de las fuerzas para
hacerlo?".

De esta manera surge la convicción, no solo porque alguien escucho algunos versículos, sino porque respondió
activamente a ciertas preguntas relacionadas con la obediencia a la palabra de Dios. Debemos recalcar aquí, que las
preguntas no deben ser amenazadoras. La idea no es intimidar, sino descubrir si la persona ha entendido el tema
presentado, y que opina acerca de el.

También deberemos evitar preguntas emotivas, que requieran respuestas vagas, como: "¿No es cierto que la verdad
del Sábado es maravillosa?". Estas preguntas producirán respuestas defensivas o un asentimiento pasivo.

Las preguntas definidas le permitirán descubrir las objeciones que se levantan en la mente de las personas. Puesto
que cualquier objeción es un obstáculo para la convicción, es de suma importancia que formulemos estas preguntas.
Sin ellas, la convicción será indefinida, tanto en la mente de la persona con la que esta trabajando usted, como en su
propia comprensión de sus opiniones y sentimientos. Por eso en cada tema debemos formular preguntas como estas:
"¿Es claro para Ud. que el sábado es el verdadero día de reposo? ¿Cree Ud. que su cuerpo es el templo del Espíritu
Santo? ¿Había comprendido Ud. antes de nuestras presentaciones que el bautismo es por inmersión?".

Cada pregunta, entonces, tiene como propósito manifestar tanto la comprensión por parte de la persona del tema
presentado, como su opinión al respecto. Las respuestas deben ser específicas, y muchas veces se pueden contestar
con un "si" o un "no". Una vez que estas preguntas han sido contestadas positivamente, se leen los versículos de
convicción que revelan la acción que Dios pide, y lo grave que es ignorar esas orientaciones. A continuación
presentamos unos pocos ejemplos.

Versículos de convicción y llamados

l.- Salvación personal. "Juan, la Biblia dice: "Por cuanto todos pecaron y están destituidos de la gloria de Dios" (Rom. 3:
23) En Hechos 4: 12 dice: "Porque no hay otro nombre bajo el cielo dado a los hombres, en que podamos ser salvos".
¿Cree Ud. que Cristo es el único camino que lleva a la salvación?. Sabiendo que sin él los seres humanos están
eternamente perdidos, ¿no le gustaría abrirle esta noche su corazón a Cristo?".

2. La segunda venida. "La Biblia enseña que cuando Jesús regrese, Ud. y yo lo veremos. Apocalipsis l: 7 nos dice que
todo ojo le vera". Si Ud. y yo lo vamos a recibir con corazones alegres y tranquilos, debemos hacer ahora todo lo que
sabemos que es correcto. ¿Comprende Ud. que el único camino para encontrarse en paz con Jesús es permitirle que
por medio de su Espíritu

Santo saque de su vida todo hábito que podría separarlo de él?.

En Juan 3: 1-3 se nos dice que los que encuentran a Jesús han tenido un cambio en sus corazones y vidas: han nacido
de nuevo.

¿No quisiera pedirle a Dios que elimine de su vida todo hábito que le impida encontrarse en paz con é1?"

3. El sábado. "Mientras estudiábamos juntos el tema del sábado, ¿no comenzó Ud. a sentir una profunda convicción
acerca de lo que Dios quiere que haga al respecto? ¿Entiende con más claridad lo que Dios espera de Ud.? ¿Se da
cuenta de que el sábado forma parte de los Diez Mandamientos de la ley de Dios? ¿Escucha el llamado que Dios le
hace para que guarde el sábado? ¿Acepta que hoy se requiere la observancia del sábado por parte de los cristianos
que aman a Jesucristo, que la verdadera obediencia es una necesidad si realmente somos cristianos?. La Biblia dice en
1Jn. 2:4, que si afirmamos que somos seguidores de Cristo y no le obedecemos en realidad somos mentirosos y la
verdad no está en nosotros. La obediencia es la prueba de que somos cristianos. ¿Quisiera Ud. manifestar su
obediencia a Cristo por medio a la observancia del Sábado?".

4. La vida sana. "La Biblia nos enseña que nuestros cuerpos templos de Dios. Pero también que Dios desea que
conservemos puros y santos estos cuerpos. En 1 Corintios 3:16,17 dice: "¿No sabéis que sois templo de Dios, y que el
espíritu de Dios mora en vosotros?. Si alguno destruye el templo de Dios, Dios destruirá a él; porque el templo de Dios
el cuál sois vosotros, santo es" "¿no quisiera Ud. demostrar su amor por Jesucristo manteniendo puro su cuerpo?".

5 . El Bautismo. La Biblia nos dice en Jn. 3:5: "El que no naciere de agua y del espíritu, no puede entrar en el reino de
Dios". En Marcos 16:16 dice: "El que creyere y fuere bautizado, será salvo, le gustaría manifestar su fe en Cristo por
inmersión".

Comprender como funciona la mente humana y cooperan con el Espíritu Santo mientras obra en esa mente, equivale
a tener éxito en conseguir decisiones en favor de Cristo. Robert Oliver dijo: "El que quiera ejercer influencia en la
opinión de los hombres debe conocer en primer lugar, por encima de todo y por fin, las reconditeces de esas mentes"
(La Psicología del discurso convincente. p. 6). Elena de White resume todo éste tema de la siguiente manera: "A fin de
conducir a las almas a Cristo debe conocerse la naturaleza humana y estudiarse la mente humana" (Joyas de los
testimonios, Tomo 1, p. 454). Todo obrero evangélico necesita entender con toda claridad como funciona la mente
humana al tomar una decisión. Ud. puede ser un eficaz ganador de almas. Con su Biblia abierta ofrezca a los seres
humanos información clara y exacta. Ayúdeles completando las respuestas a sus preguntas. Lea textos que produzcan
convicciones profundas. No dude en mostrarles lo que Dios desea que hagan, y dígales que es la voluntad de Dios que
lo hagan. Muéstreles los beneficios de obrar bien, las consecuencias de obrar mal e invítelos a tomar decisiones. La
combinación de información, convicción y deseo los llevara a la acción.

En nuestro próximo Capítulo estudiaremos como avivar la llama del deseo.


Capítulo 4

Cómo avivar la llama del deseo


Juanita había asistido fielmente durante dos años a la iglesia adventista .Había completado una serie de estudios
bíblicos había asistido a un seminario de Daniel, y había pasado por dos series completas de conferencias acerca de
las profecías. Pero por alguna razón nunca se había decidido ser adventista. Es obvio que Juanita no carecía de
información. Tampoco carecía de convicción. Se trataba de información. Tampoco carecí de convicción. Se trataba de
que el deseo no había llegado al punto de la decisión. En este Capítulo presentamos los factores básicos para
incrementar el deseo. La aplicación de estos principios, como lo veremos en la siguiente conversación con Juanita,
aumentara enormemente la cantidad de decisiones positivas. El pastor y yo llamamos a la puerta de Juanita cierta
soleada tarde, y ella nos recibió con una sonrisa en su salita. Me senté y le dije con confianza: - Juanita, estamos, muy
contentos porque durante los últimos dos años Ud. ha podido asistir a la iglesia adventista y ha disfrutado su
comunión. En el curso de este tiempo se han presentado muchas verdades bíblicas, algunas de las cuales, sin duda,
han sido nuevas para Ud. ¿Tiene alguna pregunta acerca de los temas que ha estado estudiando?

- No, realmente no tengo ninguna - respondió.

- Juanita, ¿le queda claro que Jesucristo regresaría pronto a este mundo con poder y gran gloria?

- Claro que sí. El regreso de Cristo es realmente la única esperanza del mundo.

Hasta donde le es posible saberlo, ha aceptado Ud. a Jesucristo como su Señor y Salvador?

- Oh, si! Lo he aceptado. en efecto, incluso antes de asistir la iglesia adventista yo había asumido el compromiso de ser
cristiana.

- Ud. ha aprendido bastante acerca del sábado, el estado de los muertos y la vida sana. ¿tiene alguna pregunta en
cuanto a las doctrinas distintivas de la iglesia adventista?.

En realidad no tengo ninguna. Creo que todas esas doctrinas son verdaderas.

Ahora yo sabía con seguridad Que su problema no era falta de información. Al percibir que Juanita tenía una relación
muy estrecha con su familia, y que para ella tomar la decisión de ser adventista significaba separarse del amor y el
apoyo de ellos, puse énfasis en uno de los beneficios del bautismo: llegar a formar parte de la familia de Dios. Una vez
más usé un texto bíblico.

Juanita, hay gente que cuando piensa en el bautismo se asusta realmente, Temen por lo que van a perder. La Biblia
dice en 2 Corintios 6: 17: "Y yo os recibiré, y seré para vosotros por Padre, y vosotros me seréis hijos e hijas, dice el
Señor Todopoderoso".

Al mirar a Juanita me di cuenta de que el versículo había calado profundamente en su corazón, de modo que continué
con un comentario similar a éste:

- Juanita, tal vez Ud. está pensando en la posibilidad de una separación de su padre o su madre si toma esta decisión.
Puede estar pensando en que perderá a sus amigos. Pero me gustaría que imaginara a Jesús con los brazos abiertos,
diciéndole que el será su hermano. Su amor es más profundo que cualquier lazo terrenal. Ud. formará parte del linaje
real de la familia del cielo. En la tierra formará parte de una iglesia que es una comunidad de hermanos y hermanas
que la aman. Y Juanita, la invito a formar parte de esta compañía cálida y amante.
Cuando ella dejó de ver lo que estaba perdiendo, y empezó a considerar las beneficios que estaba ganando, tomó la
decisión de formar parte de la familia de Dios y de unirse a su iglesia.

Las decisiones no se hacen simplemente cuando los seres humanos se convencen de lo que deben hacer, sino cuando

desarrollan el deseo de actuar de acuerdo con sus convicciones La presentación de informaciones profundiza la
convicción, el deseo se aviva cuando los seres humanos ven los beneficios que acarrea tomar la decisión correcta, en
contraste con las consecuencias de tomar una decisión equivocada. Aunque nuestro motivo para servir a Dios no es
recibir beneficios, hay recompensas definidas cuando se lo sirve, como asimismo consecuencias terribles cuando no
se lo hace. La Biblia esta llena de esos beneficios, que son realmente llamados de Jesús para ofrecemos una vida más
abundante.

1.- El beneficio de la paz interior opuesta a la intranquilidad interna. Jesús dice en Juan 14:27: "La paz os dejo, mi paz
os doy, no como el mundo la da yo os la doy. No se turbe vuestro corazón, ni tenga miedo". En Salmos 119:165 se
agrega: "Mucha paz tienen los que le aman tu ley, y no hay para ellos tropiezo".

Estos versículos no significan que las vidas de los que sirven a Dios están libres de problemas. Es deshonesto
asegurarle eso a la gente. Pero les puedo asegurar que si están convencidos de que hay que hacer lo que es correcto,
e ignoran la dirección de Dios, no gozarán de genuina paz interior. Pero si están convencidos de lo que Dios quiere que
hagan y actúan de acuerdo con esas convicciones, recibirán una clase de paz interior en su relación con Jesucristo que
no podrán conseguir de otra manera.

Ahora apliquemos esto.

Supongamos que alguien está de acuerdo con que el sábado es el verdadero día de reposo, pero está luchando
porque tiene un problema de trabajo. Está preocupado porque tiene que sostener a su familia. Le preocupa lo que
pensarán sus amigos si toma esta decisión. Le preocupa cómo reaccionará su esposa. En mi llamado a esta persona yo
podría decir algo así:

--Juan, ciertamente Ud. tiene mucho de que preocuparse con respecto a la decisión que tiene que enfrentar. Esta
convencido de que el sábado es el verdadero día de reposo, ¿no es cierto?.

--Si, es verdad.

--También hemos hablado en cuanto a que el sábado será la prueba final de lealtad y consagración en la última crisis.
Se que Ud. quiere estar del lado de Dios, ¿no es cierto?

Juan asiente serenamente. Sé que el problema no es ni de información ni de convicción. Avanzo hacia el deseo.

--Entonces, Juan, ya hemos analizado los tres principales problemas que está enfrentando. El problema de la
desaprobación de su familia, la preocupación por lo que sus amigos pueden llegar a pensar y la posibilidad de perder
su trabajo: todas estas cosas le están produciendo algún conflicto, ¿no es cierto?.

--Claro que sí.

Entonces le leería Juan 16:33 y Salmos 119:65, y lo abordaría de esta manera:

--Juan, Dios le esta ofreciendo algo le ofrece paz interior. Por mi parte preferiría hacer lo correcto y tener paz interior y

conflicto externo, antes que paz externa y conflicto interno Ud. puede apartarse de la verdad bíblica acerca del
sábado. Resolvería el problema de trabajo en sábado y algunos conflictos en el hogar. Hasta podría resolver algunas
de las tensiones que tiene ahora con sus amigos. Pero como Ud. sabe que es lo correcto, no resolvería este único
problema: tendría un terrible conflicto interno y habría rechazado la paz que Dios le quiere dar. Juan ¿Por que no nos
arrodillamos y le decimos a Cristo que Ud. quiere que su paz more en su corazón, porque para Ud. es más importante
que cualquier otra cosa en este mundo?

2. El beneficio de la recepción del Espíritu Santo. En Hechos 5: 32 Pedro nos comunica la promesa de Dios: "Y nosotros
somos testigos suyos de estas cosas, y también el Espíritu Santo, el cual ha dado Dios a los que le obedecen". ¿A quien
se da el Espíritu Santo? A los que le obedecen.

En Juan 14: 15 y 16 Jesús amplía este pensamiento: "Si me amáis, guardad mis mandamientos, y yo rogare al Padre, y
os dará otro consolador, para que este con vosotros para siempre las Escrituras relacionan directamente la recepción
del Espíritu Santo con la obediencia a los mandamientos de Dios. Esta conclusión se aplica especialmente a los
cristianos pentecostales. Si yo estuviera trabajando con una pareja de pentecostales, por ejemplo mi llamado con
respecto a la salud sería más o menos así: "Juan y María, ahora Uds. están en condiciones de ver que los principios del
sano vivir son algunos de los mandamientos básicos que Cristo nos ha dado en las Escrituras. Al tomar la decisión de
dejar el cerdo, porque no esta en armonía con la Voluntad de Dios, este compromiso los capacitará para ser un canal
más amplio para la obra del Espíritu Santo, y él los colmara como nunca antes".

Al hacerse un llamado a un carismático sobre el tema del sábado, puedo decir, por ejemplo: "Ud. desea ser un
cristiano lleno del Espíritu, ¿no es cierto? La Biblia dice: "Si me amáis, guardad mis mandamientos, y yo oraré al Padre,
y el os dará otro consolador, para que esté con vosotros para siempre. El espíritu no colma a algunos en mayor grado
que a otros por una parcialidad de su parte. Lo que pasa es que la capacidad de algunos es de un cuarto de litro, la de
otros es de un litro y la de otros de cuatro litros. ¡Pero algunos llegan con piletas de natación! Mientras mayor sea su
consagración y más cabal su obediencia, más podrá llenarlo el Santo Espíritu. Ahora bien, Juan y María, Uds. desean
estar totalmente llenos del Espíritu Santo ¿verdad? Si Uds. desean estar totalmente llenos del Espíritu Santo ¿verdad?
Si Uds. guardan el sábado porque aman a Jesucristo, el Espíritu tendrá más espacio que llenar.

3.- El beneficio de la verdadera felicidad. Juan 13:17 dice: "Si sabéis estas cosas, bienaventurados seréis si las
hiciereis". En Juan 10:10 Jesús agrega: "Yo he venido para que tengan vida y para que la tengan en abundancia". Si
estuviera hablando con una pareja jóven que ama la vida y quiere vivirla en plenitud los contemplaría por un
momento y les diría algo así:

"Pedro y Sandy, al considerar el futuro con sus pequeñines de tres y cinco años, estoy seguro de que lo que Uds.
realmente desean es la felicidad. Ciertamente Dios quiere que Uds. sean felices. La razón por la cual en su mensaje les
pide que se abstengan del alcohol, el tabaco y los alimentos malsanos, por ejemplo, no es porque sea un juez
riguroso, sino porque los ama. No quiere que sus amados hijos se enfermen de cáncer de pulmón. Quiere que sean
felices. Les dió el sábado porque no quiere que caigan en una depresión nerviosa; por eso pueden descansar un día
por semana, a fin de tener comunión con él y para pasar las tardes con la familia en medio de la naturaleza. Les ha
dado el mensaje sobre el estado de los muertos porque no quiere que se atormenten pensando en qué le sucede a la
gente cuando muere. Quiere que sean felices. La Biblia es el manual de la felicidad".

4.- El beneficio del hogar celestial. A cierto tipo de personas a menudo les describo el cielo estableciendo un contraste
con los vulgares placeres de este mundo. En Hebreos 11: 24 al 26 la Biblia dice: " Por la fe, Moisés, hecho ya grande,
rehusó llamarse hijo de la hija de Faraón, escogiendo antes ser maltratado pueblo de Dios, que gozar de los deleites
temporales del pecado, teniendo por mayores riquezas el vituperio de Cristo que los tesoros de los egipcios; porque
tenia puesta la mirada en el galardón."
A través de toda la Biblia los hombres de fe esperaban la eternidad. Abrahán esperaba una ciudad cuyo artífice y
hacedor es Dios. Uno de los mayores beneficios que se reciben cuando uno se decide por Jesucristo para vivir en
armonía con su verdad, es la esperanza del cielo. Piense en el impacto que eso podría tener en la vida de una mujer
de 28 años a quien le espera una excelente carrera si trabaja el sábado. Un llamado impresionante para la decisión
podría ser como éste:

" Hablemos de mil, diez mil o un millón de años más, en el futuro. ¿Qué le gustaría hacer dentro de un millón de
años?" Ella sonreiría y tragaría saliva. Pero el llamado continúa.

" Imagine esta escena: campos de trigo ondulante, verdes colinas, las flores que salpican el paisaje de rojo, amarillo y
azul. Fuentes cristalinas, un cielo profundamente azul. Frutas de todos los tamaños y formas. Todo lo que pude
deleitar el ojo y tentar el gusto. Una tierra sin enfermedad, ni tristeza, ni muerte, donde cada habitante esta lleno de
vida y gozo, donde el amor emana de cada ser. Una tierra donde Ud. puede construir su propia casa, habitarla y comer
el fruto de su huerto. Un lugar donde esta todo talento se desarrolla, toda capacidad se enfría. Un lugar donde Ud.
puede viajar de un mundo a otro, de una estrella a otra."

"María, ¿Existe algo en esta tierra que valga tanto como para perder ese mundo?. Piense en lo que será encontrarse
con Jesús, con el mismo, mientras extiende las manos por las cicatrices de los clavos y le dice: Todo esto es para ti;
morí para que fuera posible". Si Ud. contrasta esto con lo que ahora debe abandonar para servirlo, ¿Puede haber
alguna comparación?. Yo sé que Dios le va ha ayudar a tomar hoy la decisión a fin de prepararse para el bautismo, a la
luz de las bellezas del cielo".

En este caso nuestro llamado trata de lograr que la persona aparte sus ojos de los problemas que está enfrentando en
la tierra, para concentrarlos en las realidades celestiales; trata de conseguir claramente el contraste que existe entre
aquello a que esta aferrado, y todo lo que el cielo le ofrece.

5.- El beneficio del perdón de los pecados, y la liberación del sentimiento de culpa. Este llamado es un buen estímulo
para el bautismo. Puede basarse en Hechos 2:37-39: "Al oír esto, se compungieron de corazón, y dijeron a Pedro y los
demás apóstoles: Varones hermanos, ¿Que haremos?, Pedro les dijo: Arrepentíos, y bautícese cada uno de vosotros
en el nombre de Jesucristo para perdón de los pecados; y recibiréis el Espíritu Santo. Por que para vosotros es la
promesa y para vuestros hijos, y para todos los que están lejos; para cuantos el Señor nuestro Dios llame."

En Hechos 22:16 se pregunta: "Ahora, pues, ¿por que te detienes? Levántate y bautízate y lava tus pecados,
invocando su nombre". El bautismo simboliza la purificación del pecado. Un poderoso incentivo para el bautismo, es:
El sentimiento de liberación de culpa.

Hace pocos meses vino una pareja a mis reuniones de evangelización. Sus vidas habían sido sumamente maltratadas
por el pecado. El marido se había abandonado a la bebida, y ambos estaban en su segundo matrimonio. Las culpas
pasadas los perseguían como un horrible monstruo. Cuando comprendieron que el bautismo es un símbolo de
purificación de la culpa del pasado, se dieron cuenta que podían comparase delante de Dios como si nunca hubieran
pecado. Vieron el beneficio de la liberación de la culpa, y anhelaron el bautismo. Se pasaron dos semanas
preguntándome: "Pastor, ¿Podemos bautizamos el próximo sábado?".

En su libro "Los que cambian la mente" Griffith describe mediante el término "minimax" los principales beneficios que
obtiene la gente de los cambios. Los estudios de la conducta humana han llegado a la conclusión de que este minimax
es el principal factor motivador de la conducta humana, afirma que la gente actúa en determinadas circunstancias si
los beneficios son máximos y los riesgos mínimos, es decir "minimax". Si "matizamos" los eternos beneficios de obrar
bien, obtendremos mejores resultados, que si enfocamos las consecuencias negativas de esa manera de obrar.
Se descubrió que un equipo de estibadores del puerto de San Francisco descargaba el doble de los demás en la mitad
del tiempo y con menos accidentes. Los investigadores estaban ansiosos de encontrar la explicación de este
fenómeno. Al investigar descubrieron que cada grupo tenía pequeñas plataformas con ruedas a su disposición, pero
sólo los más eficientes las usaban. Hasta la palabra inglesa para esas plataformas movibles ("dolly" en ingles, que
también significa "muñeca") les resultaba repulsiva a esos rudos estibadores. La mayor parte de los capataces trataba
de motivar a sus hombres con expresiones tales como: "Los reglamentos dicen que tienen que usar las plataformas,
¡úsenlas o serán despedidos!". Pero el capataz que motivaba a su equipo con mayor éxito les presentaba los
beneficios de usarlas. A menudo les gritaba: "¡Cuida tu espalda, estúpido, usa la plataforma!". Sus hombres
interpretaban su mensaje como si él les dijera: "Los tipos inteligentes tienen sana la espalda porque utilizan la
plataforma". Este mismo principio de poner énfasis en los beneficios se aplica también en las cosas espirituales.

Ay momentos cuando es necesario leerle a la gente éste versículo: "Si alguno quiere venir en pos de mi, tome su cruz
diariamente y sígame". Pero no hay que leerlo en cada llamado. En el comienzo de mi ministerio fue justamente aquí
donde cometí un grave error. Sin darme cuenta de que no hay dos personas iguales, mi mayor argumento motivador
era: "Cristo lo invita a Ud. a negarse a sí mismo". Al comprender mejor las cosas he logrado descubrir que en toda la
Biblia aparecen beneficios, y que Dios me ayudará a aplicar el beneficio correcto a la persona adecuada. Pídale al
Espíritu Santo que le ayude a saber quien necesita que beneficio, y observe como aumenta el número de decisiones.
Capítulo 5

Una decisión trascendental


Cuando la congregación de Jonathan Edward oyó su notable sermón titulado "Los pecadores en las manos de un Dios
Airado", podían sentir las llamas del infierno, y a medida que la ira de Dios se derramaba cada vez más ardiente desde
el púlpito, era rara el alma que no entregara todo para servir a Dios. Al considerar este ejemplo exagerado de temor
como motivación para el servicio cristiano, casi no podríamos llegar a la conclusión de que esta emoción negativa no
tiene parte alguna en el plan de atraer a la gente a Cristo. ¿Existe un uso válido del temor como motivación para el
cambio de carácter?.

El temor puede distorsionar.

En realidad Edward presentaba una imagen distorsionada del carácter de Dios, y abusaba del temor. Todos estamos de
acuerdo en que si el temor es el principal motivador de las decisiones de los seres humanos, entonces algo anda
sumamente mal.

Por otra parte, la Palabra de Dios describe claramente los destinos opuestos del cielo o el infierno como galardones
eternos para los que aceptan o rechazan a Cristo. El cielo proporciona motivos para la salvación, y el infierno es un
disuasor que nos impulsa a evitar la perdición. El temor al infierno puede impedir que los seres humanos hagan cosas
que de otro modo las harían y por eso ofrece directamente un aliciente que conduce a las almas al Salvador. El temor
entonces, puede ejercer una influencia positiva sobre la vida de alguien, con la condición de que no sea tan
abrumador que llegue a bloquear y distorsionar el equilibrio del evangelio.

El temor puede motivar

Hasta en la vida normal de cada día, el temor sirve de amortiguador y elemento protector en la vida de todos los seres
humanos. Impide que el niño se queme la mano en la estufa. Impide que corra a la calle tras una pelota. Me impulsa a
verificar si tengo mi licencia de conductor cuando estoy por subir al auto para que no me arresten. El miedo es
entonces un motivo válido. Pero no es todo el cuadro. Puede servir como catalizador para un llamado transitorio a la
acción, pero nunca se lo debería emplear aisladamente para que produzca una convicción sólida y profunda

.En la Biblia Cristo mismo usa el temor para lograr que los seres humanos lo sirvan. En la parábola del trigo y la cizaña
enfoca las dos clases de gente que existirán al fin del tiempo. Las parábolas de las ovejas y los cabritos, y la de la red y
el descarte de peces, ilustran las dos formas de vida: la que lleva a la vida eterna y a la que conduce a la destrucción
final. En uno de sus llamados más conmovedores Jesús culmina su sermón en Mateo 16:26 cuando dice: "Porque,
¿Que aprovechará al hombre, si ganare todo el mundo, y pierde su alma? ¿O que recompensa dará el hombre por su
alma?". En Matero 25:46 señala de nuevo el destino de toda la humanidad: "E irán éstos al castigo eterno, y los justos
a la vida eterna".

Las decisiones espirituales son tan importantes porque la eternidad no tiene fin. Si estoy luchando con algunas almas
para que se decidan por Cristo, podría decirles algo así:

"Juan y María: la eternidad no tiene fin, y Dios nos ha dado la facultad de elegir donde la pasaremos. Nos dice: "He
aquí ahora el tiempo aceptable; he aquí ahora el día de salvación" (2Cor. 6:2). Josué dice en el capítulo 24:15
"Escogeos hoy a quién sirváis... pero yo y mi casa serviremos a Jehová". Cristo los invita esta noche a seguirlo a lo
largo de todo el camino. Nunca los abandonará. Los llevará a la eternidad. Mientras piensan en el cielo y en el
infierno, recuerden que su decisión es definitiva, Dios no los obliga . Dice: "Hijo mío, están los dos: el gozo del cielo y
la agonía del infierno". Piensen en lo que será perderse separados de Dios, de sus amigos, de su esposo, de su esposa,
de sus hijos. Piensen lo que será estar en tinieblas, donde la Biblia dice que habrá lloro y crujir de dientes. Juan y
María, con la eternidad en el cielo delante de Uds., con el infierno detrás motivados por Cristo a quien aman, ¿por
qué no lo dicen esta noche de rodillas: `Querido Señor: quiero pasar la eternidad contigo, y quiero sellar mi
aceptación de ti y de tu verdad mediante mi bautismo este próximo sábado?".

Nos atemoriza lo que podemos perder ahora

Un ferviente llamado puede basarse en las consecuencias eternas del pecado. También es eficaz señalar las
consecuencias negativas que se producirán en la vida presente como resultado dela persistencia en la iniquidad. Hace
tiempo estaba aconsejando a un hombre muy bebedor. Mientras le hablaba del amor y la misericordia de Cristo, me
di cuenta de que todo lo que le decía carecía de poder para alcanzarlos. Al convencerme de que no progresaría a
menos que este hombre enfrentara directamente las consecuencias de su actual estilo de vida, cambie mi llamado.

Enfrentándolo honestamente le dije: "¿Se da cuenta de que esta a punto de perder todo su dinero, su estima propia y
su estabilidad en la vida? Si sigue bebiendo, llegará a la ruina financiera y se hundirá en las deudas. Su matrimonio ya
está en graves problemas. ¿Cuánta presión más podrá soportar? ¿Como se sentirá cuando se quede sin dinero, sin su
esposa sin siquiera un techo sobre la cabeza? Y después de eso, ¿que?. Cuando la vida termine, también se quedará
sin cielo?". Esa revelación tan clara de los hechos sacudió a este hombre de tal manera que allí mismo comenzó en él
el proceso de cambio.

Consecuencias definidas de la iniquidad.

Las consecuencias de la iniquidad desfilan ante nosotros en la Biblia. Si memorizamos unos pocos de esos versículos
nos será de mucho provecho porque nos capacitará para demostrar los beneficios que produce el obrar bien, y las
consecuencias que acarrea el obrar mal.

El no aceptar la verdad y dejar de hacer lo que en el corazón se sabe que es lo correcto, produce las siguientes
consecuencias:

1. No recibimos más luz. En Juan 12:35 se nos dice: "Andad entre tanto que tenéis luz, para que no os sorprendan
las tinieblas; porque el que anda en tinieblas, no sabe a dónde va".

Se aceptan falsedades .En 2 Tes. 2:8-12 la Biblia dice con claridad que a los que no reciben el amor de la verdad para
salvarse, se les enviarán poderosas falsedades, de modo que creerán a la mentira.

El rechazo del Espíritu Santo. Sólo el Espíritu nos puede guiar a toda verdad. (Juan 16: 13;14: 15,16).

Al tener presente estas consecuencias, es posible sugerir la decisión de esta manera: "Pedro y Juanita: Uds. han
experimentado la poderosa convicción de Dios, al ver claramente la verdad revelada en su Palabra. La Biblia dice:
‘Andad entre tanto tenéis luz, para que no os sorprendan las tinieblas’. Es peligroso no aceptar la verdad. Dios dice
que una vez que la verdad ha sido revelada, los que finalmente no aceptan creerán a la mentira. Y la Biblia nos dice
que muchos de los que decidieron no recibir el amor de la verdad, rechazarán a su vez al Espíritu Santo. Uds. no
desean ni las tinieblas ni las mentiras de Satanás, ni quieren rechazar al Santo Espíritu, ¿no es cierto? ¿No sería bueno
entonces que esta noche le dijéramos a Jesús: ‘Señor, ya que estamos convencidos de que estas cosas son verdaderas,
queremos que nos des fuerzas y poder para andar en ellas’?".

Elena de White lo expresó resumidamente cuando dijo: "Son pocos los que creen de corazón y con el alma que
tenemos un infierno que evitar y un cielo que ganar", El ganador de almas es perfectamente consciente de que le está
presentando dos caminos a sus oyentes: el de la vida eterna y de la muerte eterna. !Los seres humanos se salvan o se
pierden¡ Se trata de salvación o condenación.

La Biblia dice que el infierno es un lugar de separación eterna, un lugar sin esperanza alguna. (Mat. 8:12; Luc. 13:28;
Mat. 25:46; Heb. 6:2). Si bien es cierto que los adventistas rechazamos categóricamente el concepto antibíblico de un
infierno que arde para siempre, ¡reconocemos sin ambages que la eternidad es eterna!. Y el temor a una pérdida
eterna es un motivo perfectamente legítimo para avivar el deseo.

Cuando era alumno del quinto grado en una escuela parroquial, una monja usó una ilustración que ha influido en mi
pensamiento desde entonces. Un alumno le preguntó: "Hermana, cuánto dura la eternidad?".

La monja respondió: "Niños, imaginen el océano". Yo había sido criado en la costa de Nueva Inglaterra, y mi mente
infantil fácilmente imaginó la amplia expansión infinita del océano, con las blancas crestas de las olas que rompían en
la playa.

Prosiguió: "Imagínense una gaviota que viene cada mil años a sacar una sola gota del océano. Cuando lo haya secado,
ese será apenas el primer segundo de la eternidad".

¡Mi pequeña mente de alumno del quinto grado comenzó a comprender que la eternidad es un tiempo largo, largo,
muy largo!

Y así es. Y los seres humanos que se enfrentan con los requerimientos de la cruz deben comprender que la muerte de
Cristo los capacita para vivir para siempre con él en el cielo, por toda la eternidad. Pero el rechazo de esa muerte
significa que estarán perdidos para siempre. Muéstreles a sus oyentes los dos caminos y vea cómo aumentan sus
resultados.

Las reuniones o visitas evangélicas acolchadas en una actitud de laissez-faire, o de tómelo o déjelo, producirán muy
pocas convicciones y provocarán muy pocos deseos. Use en sus sermones y visitas versículos que ilustren los
beneficios del bien hacer pero que aclaren también las consecuencias del pecado, y serán herramientas poderosas
para impulsar a la gente a tomar decisiones firmes en favor de lo correcto.

Una de las cosas que hemos descubierto en nuestras reuniones de evangelización es que éstas producen convicción,
pero es responsabilidad del que visita profundizar esa convicción para que se despierte el deseo de que se produzca
un cambio en la vida. Los versículos que aclaran las consecuencias del mal proceder pueden ser poderosas
herramientas para impulsar a alguien a comprometerse totalmente con lo que es correcto.
Capítulo 6

Nadie vive para sí


Tomas vivía en un lujoso barrio de los suburbios y ocupaba un elevado cargo administrativo en una corporación
nacional de mucho prestigio. Todo lo que se relacionaba con él reflejaba el éxito: se vestía con pulcritud, su hogar era
hermoso, sus hijos eran brillantes y atractivos. Y Tomás dirigía todo eso con un aire que imponía respeto. Su capacidad
para organizar y administrar se equilibraba con un carácter modesto y un temperamento amable y comunicativo. Su
esposa y sus hijos lo admiraban profundamente.

Años antes había sido alumno de una escuela adventista. Ahora estaba asistiendo a nuestras reuniones y estaba
convencido de la verdad, pero temía que la religión le impusiera exigencias no realistas a su estilo de vida actual. Por
semanas Tomás tuvo serias dificultades para decidirse por el bautismo. Mientras yo oraba y buscaba la manera de
ayudarlo, comencé a darme cuenta de que el enfoque tradicional de las "riquezas prometidas" no tenía atractivo para
este hombre que se sentía tan seguro en su actual situación. Ciertamente los "beneficios" y las "consecuencias"
tendrían poco poder sobre Tomás. Me quedé con la palabra "expectativa". Mientras pensaba en ello, se me ocurrió
que las expectativas de los demás sería algo que podría impulsar a la acción a Tomás. Era un Hombre respetado,
admirado, seguido. Y su influencia sobre los demás era algo que él no tomaba livianamente.

Cuando nos sentamos en su lujoso rincón, mi llamado fue algo así: "Tomás, al asistir a las reuniones, ¿te ha surgido
alguna pregunta en relación con las doctrinas que escuchaste allí?

Yo ya sabía que la mayoría de los temas eran claros para él, pero le hice esa pregunta por dos razones: Primero, para
despejar cualquier obstáculo que pudiera existir; pero, más importante todavía, para darle la oportunidad de expresar
su confianza ya que yo estaba seguro de que estaba de acuerdo con todo lo que habíamos presentado. Una vez que
Tomás mismo hubiera establecido el hecho de su aceptación de nuestras enseñanzas estaría en mejores condiciones
para considerar seriamente el llamado que iba a seguir.

-- Ya hace algún tiempo que creo en las doctrinas adventistas - asintió.

-- Tomás - le dije - , mientras pensaba en tí el otro día, pensé también en lo influyente que eres, y en el tremendo
impacto que produce tu vida sobre los demás. He visto cuánto te admira tu esposa. Observé en sus ojos la mirada de
placer que te dirigió mientras hojeabas tu Biblia. He notado cómo te miran tus hijitos. Sé que la decisión que estás
considerando es de suma importancia, pues eres un hombre que medita seriamente en sus acciones y decisiones
antes de hacerlas. Pero sé, Tomás, que si decides a bautizarte, eso va a llenar de emoción a tu esposa, y conducirá a
tus hijos hacia una vida cristiana llena de significado y alegría.

"Hay más de un hombre que llega a esta decisión y que retrocede por temor a que el costo sea demasiado elevado.
Algunos tienen valor para actuar de acuerdo a sus convicciones en asuntos tales como la observancia del sábado, el
diezmo o la abstinencia de alcohol. Pero años más tarde los resultados de silenciar esa suave vocecita son evidentes.
No hay normas morales en el hogar. Los hijos hacen cualquier cosa con tal de ser populares y arruinan sus vidas con
drogas, amistades inconvenientes y decisiones equivocadas. Y todo porque no hay una orientación a seguir, ni hay un
modelo de rectitud delante de ellos. Y ni que hablar de los sentimientos de culpa que atormentan al padre que
conocía las normas, pero que no tuvo el valor de tomar el estandarte y mantenerlo en alto.

"Tomás, mientras consideras esta decisión por Cristo, recuerda las palabras de Rom. 14:7: "Ninguno de nosotros vive
para sí" y " ninguno muere para sí". Tus hijos son lo suficientemente jóvenes como para observar los efectos de tu
influencia, para seguirte en tu compromiso con Cristo. Hay un sendero que ellos pueden seguir, que los puede
conducir desde tu bautisterio, a lo largo de todo el camino, hasta la eternidad. Si te conviertes en el líder espiritual de
tu familia, serás el modelo que seguirán. Si los diriges en el culto familiar, en el estudio de la lección de la escuela
sabática, en levantarte para ir a la escuela sabática, estos niños, yo lo sé, te seguirán, y lo mismo hará tu esposa.
Tomás, tienes una tremenda responsabilidad en tu trabajo, pero tienes una responsabilidad mucho mayor como líder
espiritual de tu hogar. Por el bien de tu esposa y de tus hijos, porque realmente deseas conducirlos, ¿no quisieras
decirle ahora mismo a Jesús que vas a hacer planes para bautizarte el próximo sábado?".

Al terminar este llamado nos arrodillamos, y Tomás selló su decisión de entregar totalmente su vida a Cristo por
medio del bautismo. La mayor necesidad de Tomás era entender que la influencia de su decisión trascendía los límites
de su propia existencia, y alcanzaba y afectaba en gran medida las vidas de su esposa y de sus hijos. No subestime el
valor que tiene - particularmente para los de carácter fuerte y gran influencia - . el hacerles llamados referidos a las
otras vidas que podrían ser afectadas. Dios ha puesto en el corazón de cada padre el deseo de ver que sus hijos logren
vivir vidas significativas y plenas. Esto puede ser una fuerza poderosa que induzca a los seres humanos a
comprometerse con Cristo.

Mientras hacían girar la rueda de la fortuna, los pregoneros de los antiguos carnavales solían decir: "Gira y gira, y
nadie sabe dónde parará". En cierto sentido esto también se aplica al testimonio cristiano, porque nunca sabemos
donde terminarán los efectos de una decisión por Cristo. La decisión de un padre, como ya lo hemos visto, puede
afectar a sus hijos, la decisión de una esposa puede afectar a su esposo. Muchas veces, si alguien posterga su decisión
por Cristo hasta que los miembros de la familia o los amigos se hayan decidido, les está impidiendo que lo hagan.

Mi padre se decidió a seguir a Cristo y la verdad del mensaje adventista muchos años antes que mi madre. Esa
decisión y su ejemplo positivo finalmente influyeron para que toda la familia conocerá los requisitos salvadores de
Cristo y la verdad del mensaje adventista.

Hace algunos años una jóven habló conmigo acerca de que su esposo no era cristiano. Mi respuesta fue que su gran
responsabilidad no era ni presionarlo ni forzarlo, sino vivir como Cristo. Sin embargo, ella no debería esperar su
decisión. La de ella podría ejercer una poderosa influencia sobre él.

Finalmente, gracias a la influencia de esta dama, su esposo aceptó a Cristo, y también sus hijos, su hermana, el novio
de la hermana, el hermano de su esposo, su esposa y toda la familia como resultado de la influencia de esta mujer,
más de diez personas aceptaron a Jesús, el mensaje adventista, y fueron bautizados. Y la rueda de la influencia sigue
girando y girando.

Uno de los ejemplos más sorprendentes del efecto multiplicador de la fe lo presenta James H. Sample en un artículo
publicado en Christianity Today (La cristiandad hoy) en 1967, titulado "Passing the Torch of Evangelism" (Pasemos la
antorcha de evangelización). Nos cuenta que cuando Moody tenía 17 años fue a Boston para trabajar con su tío en
una zapatería. Este animó a asistir a la iglesia, y Edward Kimball llegó a ser maestro de escuela dominical.

Cierto día Kimball visitó al jóven Moody en la zapatería, y en medio de los clientes, mientras el jóven guardaba
zapatos una habitación allá en el fondo, Kimball lo convenció para que entregara su vida a Cristo.

Años más tarde, mientras predicaba en Inglaterra, Moody contó la historia de Kimball en la iglesia de F. B. Meyer el
ministerio de Meyer sufrió una revolución. Lo mismo le sucedió a otro jóven pastor que le oyó hablar a Meyer acerca
de la escuela de Moody en Northfield, Massachusett. Meyer predicó un poderoso sermón acerca de la disposición a
entregarle todo a Cristo. Un jóven que estaba sentado en la fila de atrás se transformo. Su nombre era J. Wilber
Chapman.
Chapman llegó a ser él mismo un poderoso evangelista, y uno de los clérigos más renombrados de su tiempo. Ejerció
una gran influencia sobre un beisbolista profesional y secretario de la Y.M.C.A. (Young Men Christian Association =
Asociación Cristiana de Jóvenes) llamado Billy Sunday. Este llegó a ser conocido en todos los Estados Unidos como un
gran evangelista.

Gracias a la predicación de Sunday en Charlotte, Carolina del Norte, se fundó un grupo de laicos para dar testimonio
en su comunidad en favor de Cristo, y en 1932 organizaron una cruzada e invitaron a predicar a Mordecai Hamm, La
predicación de Hamm perturbó a un jovencito estudiante de secundaria de los años que asistía noche tras noche. El y
un amigo pensaron que podrían estimularse mejor si se sentaban detrás del predicador en el coro. Pero eso no
sucedió. Finalmente el jóven Billy Graham y su amigo, Grady Wilson, aceptaron a Cristo.

La antorcha de la influencia pasó de Kimball a Moody, de Moody a Meyer, de Meyer a Chapman, de Chapman a
Sunday de Sunday a Hamm, y de Hamm a Graham y Grady. Suceso intranscendentes, pero de grandes consecuencias.
Ud. puede motivar a los seres humanos a decidirse por Cristo cuando vean la influencia que ejercen sus decisiones
sobre los demás. Ayúdeles a comprender que las decisiones de ellos son como un piedra lanzada en una laguna, cuyas
ondas van de la orilla de la tierra hasta las playas de la eternidad.

La declaración de Elena de White que encontramos en Joyas de los testimonios, tomo 1, p. 205, se refiere
directamente a este punto:

"Cada acto de nuestra vida afecta a otros para bien o para mal. Nuestra influencia tiende hacia arriba o hacia abajo;
los demás la sienten, obran de acuerdo con ellas, y la reproducen en mayor o menor grado. Si por nuestro ejemplo
ayudamos a otros a adquirir buenos principios, les impartimos poder de obrar el bien. A su vez, ellos ejercen la misma
influencia benéfica sobre otros, y así ejercemos sobre centenares y millares de personas nuestra influencia
inconsciente".

Hemos visto hasta ahora que el hecho de someter la voluntad de Cristo es consecuencia de una cantidad de factores.
El nivel inicial, la información, ofrece una base de la cual surge la convicción. Pero sólo cuando la persona ha
desarrollado un fuere deseo personal para seguir sus convicciones, aparece la acción positiva. Tradicionalmente, la
formación adventista ha puesto énfasis en la importancia de llevar a la gente a la convicción. En cambio, se ha
descuidado el arte de motivar el deseo.

Hemos dedicado tres capítulos a analizar la formas de despertar el deseo. Se puede lograr cuando se presentan los
beneficios que devenga el obrar bien, las consecuencias negativas de las decisiones equivocadas, o las expectativas de
los demás, como ser la familia y los amigos. Falta el último principio que será el protoplasma de nuestro modelo de
evangelización, que conserva en su lugar y le da vida a todos los otros principios que hemos presentado: "La
importancia de mi prójimo".
Capítulo 7

El más importante de mis prójimos


En su libro. Soul Winning Made Easier (Cómo facilitar las ganancias de almas). Kembleton Wiggins analiza lo que él
llama consistencia cognoscitiva. Este principio afirma que cuando a alguien se le presenta una nueva idea, tratará de
descubrir alguna inconsistencia entre las creencias que ya tiene antes de incorporar nuevas ideas a su vida. Por eso
mucha gente tiende a resistir los cambios, porque producen fricción o tensión de ideas. Pero cuando se despiertan
nuevos deseos, la tensión puede ser mayor si uno se resiste a realizar un cambio que sabe debe hacer. En este punto:
cuando los seres humanos se dan cuenta de que la actitud de no hacer nada los pondrá en conflicto con su
conciencia, el deseo se convierte en acción.

El cristianismo y la consistencia cognoscitiva

Por ejemplo, cuando alguien escucha el mensaje del sábado, podría experimentar alguna tensión si considera un
cambio de estilo de vida. Pero si ha entregado plenamente su vida a Jesús, y percibe la fuerte relación que existe entre
la observancia del sábado y la expresión de amor al Maestro, experimentará una tensión mayor si se resiste a aceptar
el mensaje del sábado. Por eso, si reduce al mínimo la tensión entre el y Jesús, le resultará más fácil aceptar; el sábado
que rechazarlo.

Por lo tanto, la consistencia cognoscitiva implica tres pasos:

(1) desarrolle profundo amor por Jesús en los corazones de sus estudiantes, (2) presente cada verdad distintiva como
algo de mucha importancia para Jesús, y ponga énfasis en el hecho de Cristo espera que la acepten y obren de
acuerdo a ella, y (3) demuéstreles que cuando resisten la verdad no están resistiendo una doctrina, sino realmente a
Jesús, el Autor de esa doctrina. Una cosa es que alguien rechace el sábado como doctrina y otra es que rechace a
Jesús como Creador. Una cosa es que alguien resista la vida sana como doctrina, y otra totalmente diferente es resistir
a Jesús como quien desea moraren un cuerpo limpio por medio del Espíritu Santo.

Supongamos que alguien no quiere dejar los alimentos malsanos y yo voy a visitarlo. Puedo leerle todos los versículos
que se refieren al deseo que tiene Dios de que las deje, pero tal vez él ya esté convencido de ello: por eso esta
luchando. La aceptación de un mandato bíblico exige un cambio radical de un patrón ya establecido por años de
sentarse a la mesa. Así se produce la fricción. Mi tarea al visitarlo consiste en ayudarle a liberarse de esa tensión.
Entonces podría extenderle un llamado parecido a éste:

- Juan, supongamos que Jesús estuviera aquí esta noche y le dijera: "¿Me amas?" Yo se que Ud. le diría: "Oh, Señor, te
amo de todo corazón". Entonces supongamos que .Jesús le dice: "¿Me amas lo suficiente como para dejar por mi las
alimentos impuros?" Si Jesucristo mismo estuviera aquí y le preguntara esto, ¿que le respondería?

- No habría ningún problema - sería la inmediata respuesta de Juan--. Le diría que si, que estaría dispuesto a dejar
todo lo que el me pidiere.

- Escúchelo entonces cuando le habla en 1 Corintios 3:17 - proseguiría yo - : "Si alguno destruyere el templo de Dios,
Dios le destruirá a el". Escúchelo mientras lo llama en 1Corintios 10: 31 para que se entregue totalmente a el: "Si,
pues, coméis o bebéis, o hacéis otra cosa; hacedlo todo para la gloria de Dios Escuche su mensaje personal en 1
Corintios 6:19 y 20: "¿O ignoráis que vuestro cuerpo es templo del Espíritu Santo, el cual esta en vosotros, el cual
tenéis de Dios, y que no sois vuestros Porque habéis sido comprados por precio; glorificad, pues, a Dios en vuestro
cuerpo y en vuestro espíritu, Los cuales son de Dios"
- En estos versículos el mismo Jesús le habla. Usa la Biblia para comunicarle un importante mensaje del cielo. ¿No
quisiera dejar los alimentos impuros; ya que tú personalmente me invitas a dejar los alimentos impuros, y porque te
amo, quiero hacerlo?"

El apóstol Pablo aclara este principio mediante su propia experiencia. En efecto, nos dice: "Pero todo esto, que antes
valía mucho para mi, ahora, a causa de Cristo, lo tengo por algo sin valor Aún más, a nada le concedo valor si lo
comparo con el bien supremo de conocer a Cristo Jesús, mi Señor. Por causa de Cristo lo he perdido todo, y todo lo
considero basura a cambio de ganarlo a él" (Fil. 3: 7, 8; Dios habla hoy).

La mayor motivación para que los seres humanos hagan decisiones es el hecho de que Jesucristo dejó el cielo, moró
entre nosotros con naturaleza humana, vivió una vida perfecta y fué clavado en la cruz en un acto supremo de amor.
Es el Cristo de la cruz al que atrae. El rompe las ataduras del pecado. Jesús mismo dijo: "Y yo, si fuere levantado de la
tierra , a todos atraeré a mi mismo" (Juan 12: 32). Elena de White agrega: "Lo primordial y lo más importante es
ablandar y subyugar almas mediante la presentación de nuestro Señor Jesucristo como el salvador que perdona los
pecados" (Testimonios para la Iglesia, Tomo 6, p. 53, 54). Y a continuación añade: "el maravilloso amor de Cristo
enternecerá, subyugará los corazones cuando la simple exposición de las doctrinas no lograría" (El Deseado de todas
las Gentes, p. 767).

El Dr. S. D. Gordon cuenta el caso de una cristiana a quién la edad comenzó a afectar la memoria. En el pasado se
había aprendido gran parte de la Biblia de memoria. Ahora solo recordaba una sola porción: "Yo sé en quien he
creído, estoy persuadido de que es capaz de guardar mi depósito para aquel día". Poco a poco eso también se le
olvidó, al punto que sólo podía repetir: "El es capaz de guardar mi depósito".

Finalmente, mientras se encontraba en los límites de este mundo y el eterno, sus amados notaron que sus labios se
movían. Se inclinaron para ver si necesitaba algo. Estaba repitiendo una y otra vez la única palabra que recordaba: "El,
él, él", se había olvidado de toda la Biblia pero una sola palabra había captado su atención. Esa sola palabra le
inspiraba esperanza y en esa sola palabra comprendió la verdad más importante de la Biblia, que Cristo es todo en
todo.

Jesús es el Prójimo más importante

El llamado ha considerar a Jesús como el más importante de nuestro prójimos, le añade una poderosa motivación de
toda doctrina que se presenta. Uno se puede sentir presionado porque el vecino quiere que haya algo, su jefe quiere
otra cosa y su cosa todavía otra. Pero Jesús es el más importante. Sus suplicas separan todas las demás. Y cuando
alguien vacila entre los requerimientos de los demás a seguir la verdad de las escrituras, la fricción sólo se aliviara
cuando vea a Jesús como la persona más importante de su vida. Al hacer un llamado sobre esta base, yo podría
preguntar: "María, ¿quien es la persona más importante en su vida? ¿Es su padre o su madre? ¿Su hermana o su
hermano? ¿Su esposo o una amiga? ¿Quien significa más para Ud. que cualquier otra casa en el mundo?" Antes que
María pueda responder, añado: ¿Cómo considera el consejo de ellos en comparación con el de Cristo?" . Casi siempre
la persona responde rápidamente: "Oh, la persona más importante en mi vida es Jesucristo".

Entonces el llamado puede continuar así: "Si realmente lo es, ¿lo va a seguir cuando el la invita a guardar el sábado? El
dice: "Si me amáis, guardad mis mandamientos. No le van a manifestar su entrega total? Jesús, la persona más
importante en su vida, le invita a manifestarlo dando el paso del bautismo".

En este llamado, Jesucristo, el Prójimo mas importante, recibe la exaltación suprema en toda las decisiones que se
toma. Este énfasis es especialmente eficaz con gente que se ha convertido al cristianismo hace ya varios años: gente
que ha caminado con Cristo, que ha escuchado su voz, que ha estudiado la Biblia para decidir cual es su voluntad. Un
llamado para hacer lo que Jesús pide no puede ser pasado por alto por los que lo consideran a el él Prójimo mas
importante en sus vidas.

La tarea del ganador de almas se parece al de la recepcionista en la sala de espera del médico. Su objetivo no es
operar a los enfermos. Es más bien llevarlos a la presencia del doctor que tiene el conocimiento, los talentos y la
capacidad para llevar a cabo la cirugía. Su tarea consiste en presentarlos a é1. Por eso en toda tarea tendiente a ganar
almas, nuestro propósito debe ser conducir a la gente a Jesús, mostrarles lo que él quiere que hagan y no lo que
nosotros queremos. Consiste en ayudarlos para que la voluntad de Cristo sea suprema en sus vidas, de manera que
elijan su voluntad y no la propia. Consiste en ayudarles para que Cristo sea la Persona más importante en sus vidas, de
manera que su autoridad y su influencia sean superiores a cualquier otra influencia sobre la tierra.
Capítulo 8

Claro y Definido
Era evidente que Edy estaba molesto. Yo había dicho en un sermón algo que contradecía su comprensión de las
escrituras. No ponía en tela de juicio doctrinas fundamentales como la forma del regreso de Cristo, el sábado, el
estado de los muertos, el mensaje de salud. Estaba molesto por una breve declaración que yo había hecho en relación
con Judas. Mientras predicaba acerca de la divinidad de Cristo y la escena de la crucifixión, mencioné de paso que
Judas, después de traicionar a Jesús, se había ahorcado, la cuerda se había roto, y su cuerpo muerto había caído sobre
las rocas de abajo.

Después de la reunión Edy se fue al frente del auditorio, con un montón de preguntas. "¿Donde dice en la Biblia que
Judas cayó? ¿Cómo puede Ud. hacer una declaración tan enfática sin tener una evidencia bíblica?". Antes de la
siguiente reunión estuvimos unos quince minutos analizando su pregunta . Sólo cuando leí Hechos 1:18 la expresión
de Edy comenzó a cambiar. Escuche con evidente sorpresa estas palabras: "Este, pues, con el salar de su iniquidad
adquirió un campo, y cayendo de cabeza, se reventó por la mitad, y todas sus entrañas se derramaron". Una historia
sangrienta, es verdad, pero la confianza de Edy en la sólida base bíblica de nuestras reuniones se confirmó.

Más tarde esa noche, al hacer un llamado para que los presentes se entregaran completamente a Cristo, me
emocione cuando vi que Edy era uno de los primeros en ponerse de pie. Había aprendido un principio básico acerca
de cómo tomar decisiones los seres humanos. La mente humana está constituida de tal modo que cuando un punto,
por insignificante que sea, no se puede ensamblar con las ideas preexistentes, desaparece la confianza en el que
presenta la información . El punto que perturbó la mente de Edy , era insignificante, pero si no se hubiera aclarado su
confianza en mi se habría destruido. Esto significa que quien presenta una serie de doctrinas bíblicas, y espera
"aclararlo todo" a fin de llegar a un "gran final", debe prepararse para perder a lo largo del camino a una cantidad de
interesados. Porque si comienzan a acumularse en la mente preguntas sin respuesta, es muy probable que la persona
pierda interés en el estudio de la Biblia o en la serie de reuniones de evangelización, y se cierre a la influencia de una
persona que presenta ideas tan conflictivas. Por eso es de importancia vital que se despeje cada objeción en cuanto
surge, aunque aparentemente sea insignificante.

El desarrollo de la verdad es progresivo

EL principio implícito en la expresión "claro y definido" enseña que a medida que se aclaran y· se confirman en las
mentes de los oyentes las nuevas verdades que se presentan, recién podrán recibirse y aceptarse las futuras verdades.
En cada nuevo paso el orador debe verificar si el oyente acepta o rechaza el mensaje, y si lo acepta, cómo piensa
incorporar esos nuevos conceptos a su actual estructura de valores. Si no se lo hace, la resistencia continuara
creciendo hasta llegar al rechazo. EL desarrollo de la verdad es progresivo.

En Proverbios se formula esta máxima así: "Mas la senda de los justos es como la luz de., la aurora, que va en
aumento hasta que el día es perfecto" (Prov. 4: 18). Este principio es eterno: Dios permite que la lúz brille más y más a
lo largo del sendero de alguien, a medida que recibe y acepta la verdad. Toda verdad que parezca confusa o
inconsistente es un obstáculo para futuros progresos; pero las verdades claramente comprendidas se transforman en
peldaños para una mayor comprensión de la Palabra de Dios.

En sus escritos Elena de White subraya el proceso de "aclarar y definir" que se halla implícito en la decisión
progresiva. Dice:
"Descansa sobre el ministro la sagrada responsabilidad de cuidar a las almas como alguien que tiene que dar cuenta.
Debe interesarse en las almas por las cuales trabaja, para descubrir todo lo que las confunde y las perturba,
impidiéndoles caminar a la luz de la verdad" (Review and Herald, 30 de agosto de 1892).

Si usted no sabe, por ejemplo, qué le impide a alguien guardar el sábado, puede visitarlo diez veces sin llegar a
ninguna parte. Sus esfuerzos por ganarlo serán como golpear el aire a menos que usted despeje las objeciones que la
persona enfrente con respecto a este tema, no podrá llevarla a una decisión. Los temas futuros serán cada vez más
nebulosos y difíciles, y otras ideas que bombardean su mente y que entran en conflicto con sus creencias previas lo
llevarán finalmente al rechazo total. Mientras más habilidad tenga el obrero para descubrir que impide que esa
persona se decida, y para aclararle lo que ya le ha presentado, más éxito tendrá como ganador de almas.

En Obreros evangélicos Elena de White se concentra en el principio de "Claro y definido", y lo hace de esta manera:

"Más de un obrero fracasa en su obra porque no se acerca a aquellos que más necesitan su ayuda. Con la Biblia en la
mano, debe tratar, de una manera cortés, de aprender las objeciones que existen en la mente de aquellos que
empiezan a preguntar: ‘¿Que cosa es verdad?’ Con cuidado y ternura debe guiarlos y educarlos, como alumnos en una
escuela" (p. 98)

Jesús alcanzaba a las almas porque estaba al tanto de sus problemas. Sus enseñanzas se adaptaban a su situación.
Comprendía las objeciones que surgían en sus mentes.

E. de White declara más adelante:

"El ministro debe conocer la naturaleza de las dificultades que hay en las mentes de la gente, para poder saber cómo
darle a cada cual su porción en el momento oportuno" (Manuscrito IV, 1893).

Preguntas de diagnóstico

El arte de formular preguntas de diagnóstico es absolutamente esencial para descubrir las objeciones que pueden
surgir, y para saber cómo tratarlas. Al visitar a una persona que acaba de escuchar una presentación bíblica sobre la
segunda venida de Cristo, puedo tratar de descubrir cualquier duda u objeción mediante una conversación como esta:

"Juan, María: estamos muy contentos de que hayan podido asistir a estas conferencias bíblicas durante las ultimas
semanas. ¿Como se enteraron de nuestro seminario?"

Al conseguir así algo de información en cuanto a la pareja puedo preguntar después, discretamente: "Les gustan las
reuniones?" Esto me ayuda a descubrir su actitud básica hacia lo que están escuchando. A continuación: puedo
preguntarles si han podido asistir a todas las reuniones realizadas hasta ese momento. Aunque en general conozca la
pauta de asistencia, hago esa pregunta para descubrir cual podría ser definidamente la causa de esas inasistencias. Si
alguien dice: "No puedo venir los miércoles de noche porque a asa hora tengo una clase bíblica", o "no puedo venir
los viernes de noche porque trabajo", he conseguido un poco más de información que puede ser útil mas adelante.

A continuación introduzco una transición en la conversación que los lleva directamente a una declaración afirmativa
de su parte. "¿Han notado Uds. que en nuestro seminario todo lo que presentamos se basa directamente en la Biblia?
¿Lea parece que sea así?"

Una vez que han dado una respuesta afirmativa a estas preguntas, mi conversación se vuelve más definida para
descubrir si Juan y María tienen alguna objeción. "La otra noche hablamos acerca de cómo regresará Jesús. ¿Han
entendido siempre Uds. lo que enseña la Biblia con respecto a la segunda venida de Cristo?" En este punto la
aclaración es importante. Si Juan y María tienen preguntas sobre el tema de la tribulación y el "arrebatamiento" (la
traslación de los justos), por ejemplo, ese es el momento de repasar los versículos con ellos en su hogar.

Si en éste punto no existe objeción, es bueno concluir con un llamado al compromiso. Puedo comenzar diciendo: "Es
emocionante saber que Cristo viene, y que vendrá pronto. Se muy bien que quiero estar preparado. Espero el
momento cuando seré alzado en el aire para encontrarme con Jesús junto con el grupo que dice: ‘He aquí, este es
nuestro Dios, lo hemos esperado y nos salvará’. Juan y María: ¿les gustaría esta noche arrodillarse conmigo mientras
oro para que Dios nos de fuerza a fin de Caminar en la verdad delineada en su Palabra, de manera que por su gracia
estemos listos para encontramos con él cuando venga?"

Al dejar esa casa, sé que logrado dos cosas con respecto a la segunda venida. Primero, he descubierto si Juan y María
aceptaron o no esta verdad. Y, segundo, los he invitado para que se comprometan a seguirla. "Claro y definido".

Al tratar el asunto del sábado, no espero un compromiso semejante después de mi presentación implícita cambios
importantes en el trabajo y en el estilo de vida, doy más tiempo para que obre el Espíritu Santo, y dejo mi llamado
para una segunda presentación.

En esa visita posteriormente hago tres preguntas definidas. Es importante notar, en este momento, que no son un
fárrago de preguntas memorizadas, lanzadas en cuanto uno entra en el hogar. Las preguntas que siguen son eficaces
sólo cuando se formulan en medio de la seguridad de una cálida relación que ya se ha establecido por medio de una
comunicación abierta y sensible. Esto vale ya sea que uno esté trabajando en una serie de reuniones de
evangelización o esté dando un estudio bíblico en el hogar.

1. Conocimiento previo: "Amigos: ¿habían escuchado algo antes acerca del sábado, o este tema es nuevo para Uds.?"
La gente suele responder en forma insólita. "Claro - dirá alguno -, hace años en la escuela dominical me preguntaba
siempre por qué guardábamos el primer día, cuando el mandamiento dice que el séptimo día es el sábado". Algún
otro podría decir: "Tengo un libro titulado Estudios bíblicos para el hogar, que se refiere al sábado". O "Mi abuelo era
adventista y creía en el sábado". Es igualmente importante cuando alguien responde: "No, nunca oí nada antes acerca
del sábado".

2. Comprensión: "¿Tiene Ud. alguna pregunta acerca del sábado, o el tema le resulta claro?" A menudo alguien
presentará honestamente su preocupación con respecto a su trabajo, o su familia o sus amigos. Tal vez se esté
preguntando en que condición se encuentran sus amados que guardaron el domingo durante cincuenta años o más
antes de morir. Esta es la ocasión de emplear tiempo extra en el hogar, para trabajar con amabilidad y eficacia cada
asunto a medida que vayan surgiendo.

3. Compromiso: "¿Han comenzado a pensar en guardar el sábado?" Si la respuesta es positiva, los animo a empezar a
guardarlo inmediatamente. Si no lo es, cierro diciendo: "Yo sé que si Jesús estuviera aquí hoy y les pidiera que
guarden el sábado, Uds. estarían dispuestos a hacerlo porque quieren hacer su voluntad, ¿no es cierto?
Arrodillémonos y pidámosle que nos muestre por medio de su Palabra lo que el quiere que haga Juan, María: yo se
que estas cosas son nuevas para Uds., pero la Palabra de Dios las, dice y Jesús las enseña, yo se que Uds. quieren
seguirlas. Oremos entonces y digámoselo a Jesús. ¿Les gustaría hacerlo?" .

Después de la oración, les doy la mano y les manifiesto mi gratitud porque están dispuestos s seguir la verdad, y los
animo a seguir asistiendo a las reuniones. Antes de salir les entregamos material de lectura sobre el tema. De esta
manera, mediante el empleo eficaz de tres preguntas de diagnóstico. he descubierto su conocimiento previo acerca
del sábado. He despejado las objeciones existentes, y he comenzado a "aclararles" el tema a Juan y Marías antes de
presentar uno nuevo. Básicamente este es el proceso de la decisión progresiva.
Las siete principales decisiones

El dialogo y las preguntas que acabamos de presentar deberían desarrollarse mientras usted trabaja con alguien a
medida que surgen cada una de las siete decisiones que se deben tomar para llegar, finalmente, a ser adventista. El
"aclarar los puntos" implica la aceptación de cada uno de ellos y comprometerse a esto:

1. La inspiración de la Biblia y su revelación de Jesucristo como el divino Salvador del mundo.

El mensaje especial de Cristo para preparar a un pueblo a fin de que se encuentre con é1 en su segunda venida.

El llamado de Cristo para obedecer plenamente su ley incluso el sábado.

La demanda de Dios para que respetemos nuestros cuerpos como templo de Dios, y consecuentemente dejemos el
alcohol tabaco y los alimentos malsanos.

La enseñanza bíblica relativa al estado de los muertos; en contraposición con el creciente enfoque espiritista que está
surgiendo en el mundo.

La Biblia y el don de profecía como marcas identificatorias de la iglesia remanente, y el deseo de vivir a la altura de las
normas que presentan ambos.

El bautismo como señal y el sello de la aceptación de Cristo, y de llegar a formar parte de su iglesia en esta tierra.

A medida que el Espíritu Santo guía a los seres humanos para que acepten cada una de las doctrinas fundamentales,
se desarrollan cada día más "hasta (llegar a) la medida de la estatura de la plenitud de Cristo". El proceso de conducir
a los seres humanos a los pies de Jesús, no consiste, entonces, en entregar al fin de una serie un gran paquete titulado
"El mensaje en su totalidad". Ese paquete sería demasiado pesado, complejo, y difícil de aceptar de una sola vez. Por
el contrario, la eficacia del proceso de ganar almas consiste en ofrecerles paquetes a medida que los estudios
progresan, y que los estudiantes comprendan y acepten cada tema antes de pasar al siguiente. Es decir. " claro y
definido."
Capítulo 8

Claro y Definido
Era evidente que Edy estaba molesto. Yo había dicho en un sermón algo que contradecía su comprensión de las
escrituras. No ponía en tela de juicio doctrinas fundamentales como la forma del regreso de Cristo, el sábado, el
estado de los muertos, el mensaje de salud. Estaba molesto por una breve declaración que yo había hecho en relación
con Judas. Mientras predicaba acerca de la divinidad de Cristo y la escena de la crucifixión, mencioné de paso que
Judas, después de traicionar a Jesús, se había ahorcado, la cuerda se había roto, y su cuerpo muerto había caído sobre
las rocas de abajo.

Después de la reunión Edy se fue al frente del auditorio, con un montón de preguntas. "¿Donde dice en la Biblia que
Judas cayó? ¿Cómo puede Ud. hacer una declaración tan enfática sin tener una evidencia bíblica?". Antes de la
siguiente reunión estuvimos unos quince minutos analizando su pregunta. Sólo cuando leí Hechos 1:18 la expresión
de Edy comenzó a cambiar. Escuche con evidente sorpresa estas palabras: "Este, pues, con el salar de su iniquidad
adquirió un campo, y cayendo de cabeza, se reventó por la mitad, y todas sus entrañas se derramaron". Una historia
sangrienta, es verdad, pero la confianza de Edy en la sólida base bíblica de nuestras reuniones se confirmó.

Más tarde esa noche, al hacer un llamado para que los presentes se entregaran completamente a Cristo, me
emocione cuando vi que Edy era uno de los primeros en ponerse de pie. Había aprendido un principio básico acerca
de cómo tomar decisiones los seres humanos. La mente humana está constituida de tal modo que cuando un punto,
por insignificante que sea, no se puede ensamblar con las ideas preexistentes, desaparece la confianza en el que
presenta la información . El punto que perturbó la mente de Edy , era insignificante, pero si no se hubiera aclarado su
confianza en mi se habría destruido. Esto significa que quien presenta una serie de doctrinas bíblicas, y espera
"aclararlo todo" a fin de llegar a un "gran final", debe prepararse para perder a lo largo del camino a una cantidad de
interesados. Porque si comienzan a acumularse en la mente preguntas sin respuesta, es muy probable que la persona
pierda interés en el estudio de la Biblia o en la serie de reuniones de evangelización, y se cierre a la influencia de una
persona que presenta ideas tan conflictivas. Por eso es de importancia vital que se despeje cada objeción en cuanto
surge, aunque aparentemente sea insignificante.

El desarrollo de la verdad es progresivo

EL principio implícito en la expresión "claro y definido" enseña que a medida que se aclaran y· se confirman en las
mentes de los oyentes las nuevas verdades que se presentan, recién podrán recibirse y aceptarse las futuras verdades.
En cada nuevo paso el orador debe verificar si el oyente acepta o rechaza el mensaje, y si lo acepta, cómo piensa
incorporar esos nuevos conceptos a su actual estructura de valores. Si no se lo hace, la resistencia continuara
creciendo hasta llegar al rechazo. EL desarrollo de la verdad es progresivo.

En Proverbios se formula esta máxima así: "Mas la senda de los justos es como la luz de., la aurora, que va en
aumento hasta que el día es perfecto" (Prov. 4: 18). Este principio es eterno: Dios permite que la lúz brille más y más a
lo largo del sendero de alguien, a medida que recibe y acepta la verdad. Toda verdad que parezca confusa o
inconsistente es un obstáculo para futuros progresos; pero las verdades claramente comprendidas se transforman en
peldaños para una mayor comprensión de la Palabra de Dios.

En sus escritos Elena de White subraya el proceso de "aclarar y definir" que se halla implícito en la decisión
progresiva. Dice:
"Descansa sobre el ministro la sagrada responsabilidad de cuidar a las almas como alguien que tiene que dar cuenta.
Debe interesarse en las almas por las cuales trabaja, para descubrir todo lo que las confunde y las perturba,
impidiéndoles caminar a la luz de la verdad" (Review and Herald, 30 de agosto de 1892).

Si usted no sabe, por ejemplo, qué le impide a alguien guardar el sábado, puede visitarlo diez veces sin llegar a
ninguna parte. Sus esfuerzos por ganarlo serán como golpear el aire a menos que usted despeje las objeciones que la
persona enfrente con respecto a este tema, no podrá llevarla a una decisión. Los temas futuros serán cada vez más
nebulosos y difíciles, y otras ideas que bombardean su mente y que entran en conflicto con sus creencias previas lo
llevarán finalmente al rechazo total. Mientras más habilidad tenga el obrero para descubrir que impide que esa
persona se decida, y para aclararle lo que ya le ha presentado, más éxito tendrá como ganador de almas.

En Obreros evangélicos Elena de White se concentra en el principio de "Claro y definido", y lo hace de esta manera:

"Más de un obrero fracasa en su obra porque no se acerca a aquellos que más necesitan su ayuda. Con la Biblia en la
mano, debe tratar, de una manera cortés, de aprender las objeciones que existen en la mente de aquellos que
empiezan a preguntar: ‘¿Que cosa es verdad?’ Con cuidado y ternura debe guiarlos y educarlos, como alumnos en una
escuela" (p. 98)

Jesús alcanzaba a las almas porque estaba al tanto de sus problemas. Sus enseñanzas se adaptaban a su situación.
Comprendía las objeciones que surgían en sus mentes.

E. de White declara más adelante:

"El ministro debe conocer la naturaleza de las dificultades que hay en las mentes de la gente, para poder saber cómo
darle a cada cual su porción en el momento oportuno" (Manuscrito IV, 1893).

Preguntas de diagnóstico

El arte de formular preguntas de diagnóstico es absolutamente esencial para descubrir las objeciones que pueden
surgir, y para saber cómo tratarlas. Al visitar a una persona que acaba de escuchar una presentación bíblica sobre la
segunda venida de Cristo, puedo tratar de descubrir cualquier duda u objeción mediante una conversación como esta:

"Juan, María: estamos muy contentos de que hayan podido asistir a estas conferencias bíblicas durante las ultimas
semanas. ¿Como se enteraron de nuestro seminario?"

Al conseguir así algo de información en cuanto a la pareja puedo preguntar después, discretamente: "Les gustan las
reuniones?" Esto me ayuda a descubrir su actitud básica hacia lo que están escuchando. A continuación: puedo
preguntarles si han podido asistir a todas las reuniones realizadas hasta ese momento. Aunque en general conozca la
pauta de asistencia, hago esa pregunta para descubrir cual podría ser definidamente la causa de esas inasistencias. Si
alguien dice: "No puedo venir los miércoles de noche porque a asa hora tengo una clase bíblica", o "no puedo venir
los viernes de noche porque trabajo", he conseguido un poco más de información que puede ser útil mas adelante.

A continuación introduzco una transición en la conversación que los lleva directamente a una declaración afirmativa
de su parte. "¿Han notado Uds. que en nuestro seminario todo lo que presentamos se basa directamente en la Biblia?
¿Lea parece que sea así?"

Una vez que han dado una respuesta afirmativa a estas preguntas, mi conversación se vuelve más definida para
descubrir si Juan y María tienen alguna objeción. "La otra noche hablamos acerca de cómo regresará Jesús. ¿Han
entendido siempre Uds. lo que enseña la Biblia con respecto a la segunda venida de Cristo?" En este punto la
aclaración es importante. Si Juan y María tienen preguntas sobre el tema de la tribulación y el "arrebatamiento" (la
traslación de los justos), por ejemplo, ese es el momento de repasar los versículos con ellos en su hogar.

Si en éste punto no existe objeción, es bueno concluir con un llamado al compromiso. Puedo comenzar diciendo: "Es
emocionante saber que Cristo viene, y que vendrá pronto. Se muy bien que quiero estar preparado. Espero el
momento cuando seré alzado en el aire para encontrarme con Jesús junto con el grupo que dice: ‘He aquí, este es
nuestro Dios, lo hemos esperado y nos salvará’. Juan y María: ¿les gustaría esta noche arrodillarse conmigo mientras
oro para que Dios nos de fuerza a fin de Caminar en la verdad delineada en su Palabra, de manera que por su gracia
estemos listos para encontramos con él cuando venga?"

Al dejar esa casa, sé que logrado dos cosas con respecto a la segunda venida. Primero, he descubierto si Juan y María
aceptaron o no esta verdad. Y, segundo, los he invitado para que se comprometan a seguirla. "Claro y definido".

Al tratar el asunto del sábado, no espero un compromiso semejante después de mi presentación implícita cambios
importantes en el trabajo y en el estilo de vida, doy más tiempo para que obre el Espíritu Santo, y dejo mi llamado
para una segunda presentación.

En esa visita posteriormente hago tres preguntas definidas. Es importante notar, en este momento, que no son un
fárrago de preguntas memorizadas, lanzadas en cuanto uno entra en el hogar. Las preguntas que siguen son eficaces
sólo cuando se formulan en medio de la seguridad de una cálida relación que ya se ha establecido por medio de una
comunicación abierta y sensible. Esto vale ya sea que uno esté trabajando en una serie de reuniones de
evangelización o esté dando un estudio bíblico en el hogar.

1. Conocimiento previo: "Amigos: ¿habían escuchado algo antes acerca del sábado, o este tema es nuevo para Uds.?"
La gente suele responder en forma insólita. "Claro - dirá alguno -, hace años en la escuela dominical me preguntaba
siempre por qué guardábamos el primer día, cuando el mandamiento dice que el séptimo día es el sábado". Algún
otro podría decir: "Tengo un libro titulado Estudios bíblicos para el hogar, que se refiere al sábado". O "Mi abuelo era
adventista y creía en el sábado". Es igualmente importante cuando alguien responde: "No, nunca oí nada antes acerca
del sábado".

2. Comprensión: "¿Tiene Ud. alguna pregunta acerca del sábado, o el tema le resulta claro?" A menudo alguien
presentará honestamente su preocupación con respecto a su trabajo, o su familia o sus amigos. Tal vez se esté
preguntando en que condición se encuentran sus amados que guardaron el domingo durante cincuenta años o más
antes de morir. Esta es la ocasión de emplear tiempo extra en el hogar, para trabajar con amabilidad y eficacia cada
asunto a medida que vayan surgiendo.

3. Compromiso: "¿Han comenzado a pensar en guardar el sábado?" Si la respuesta es positiva, los animo a empezar a
guardarlo inmediatamente. Si no lo es, cierro diciendo: "Yo sé que si Jesús estuviera aquí hoy y les pidiera que
guarden el sábado, Uds. estarían dispuestos a hacerlo porque quieren hacer su voluntad, ¿no es cierto?
Arrodillémonos y pidámosle que nos muestre por medio de su Palabra lo que el quiere que haga Juan, María: yo se
que estas cosas son nuevas para Uds., pero la Palabra de Dios las, dice y Jesús las enseña, yo se que Uds. quieren
seguirlas. Oremos entonces y digámoselo a Jesús. ¿Les gustaría hacerlo?" .

Después de la oración, les doy la mano y les manifiesto mi gratitud porque están dispuestos s seguir la verdad, y los
animo a seguir asistiendo a las reuniones. Antes de salir les entregamos material de lectura sobre el tema. De esta
manera, mediante el empleo eficaz de tres preguntas de diagnóstico. he descubierto su conocimiento previo acerca
del sábado. He despejado las objeciones existentes, y he comenzado a "aclararles" el tema a Juan y Marías antes de
presentar uno nuevo. Básicamente este es el proceso de la decisión progresiva.
Las siete principales decisiones

El dialogo y las preguntas que acabamos de presentar deberían desarrollarse mientras usted trabaja con alguien a
medida que surgen cada una de las siete decisiones que se deben tomar para llegar, finalmente, a ser adventista. El
"aclarar los puntos" implica la aceptación de cada uno de ellos y comprometerse a esto:

La inspiración de la Biblia y su revelación de Jesucristo como el divino Salvador del mundo.

El mensaje especial de Cristo para preparar a un pueblo a fin de que se encuentre con é1 en su segunda venida.

El llamado de Cristo para obedecer plenamente su ley incluso el sábado.

La demanda de Dios para que respetemos nuestros cuerpos como templo de Dios, y consecuentemente dejemos el
alcohol tabaco y los alimentos malsanos.

La enseñanza bíblica relativa al estado de los muertos; en contraposición con el creciente enfoque espiritista que está
surgiendo en el mundo.

La Biblia y el don de profecía como marcas identificatorias de la iglesia remanente, y el deseo de vivir a la altura de las
normas que presentan ambos.

El bautismo como señal y el sello de la aceptación de Cristo, y de llegar a formar parte de su iglesia en esta tierra.

A medida que el Espíritu Santo guía a los seres humanos para que acepten cada una de las doctrinas fundamentales,
se desarrollan cada día más "hasta (llegar a) la medida de la estatura de la plenitud de Cristo". El proceso de conducir
a los seres humanos a los pies de Jesús, no consiste, entonces, en entregar al fin de una serie un gran paquete titulado
"El mensaje en su totalidad". Ese paquete sería demasiado pesado, complejo, y difícil de aceptar de una sola vez. Por
el contrario, la eficacia del proceso de ganar almas consiste en ofrecerles paquetes a medida que los estudios
progresan, y que los estudiantes comprendan y acepten cada tema antes de pasar al siguiente. Es decir. " claro y
definido."
Capítulo 9

El idioma de los llamados


Los ganadores de almas de éxito son sensibles al uso idioma. Los aprendices de ganadores de almas se apoyan en
frases religiosas imprecisas y en lugares comunes. sin tomar en cuenta las diferentes personalidades con las que están
trabajando Recuerde que cada oyente dispone de un sistema propio de percepciones. Úselo para ganarlo. Si no lo
toma en cuenta, lo puede perder.

Tres sistemas de percepción

Los estudiosos de la Conducta humana clasifican a los seres humanos en una de estas tres clases: visuales, auditivos y
sensoriales. Los visuales (predomina el sentido de la vista) resuelven los problemas cuando "ven" su solución en
forma de imágenes mentales. Puesto que el proceso analítico de sus mentes es visual, reaccionan bien frente a las
diapositivas, los cuadros los diagramas. Son ese tipo de personas que cuando piensan en las vacaciones se "ven"
relajadas sobre la playa, y "ven" el sol, la arena y el agua. Sus mentes siempre están imaginando cuadros como una
película que no para nunca.

Los auditivos (predomina el sentido del oído), por su parte estructuran su esquema mental en torno de los sonidos. EL
esposo escucha a su esposa que le habla, el jefe que le grita y voces en los sitios mientras juegan. No se ve sentado a
la sombra o en una reposera junto a la playa cuando piensa en las vacaciones, sino que "escucha" la suave música de
la radio y el sonido de las olas que golpean sobre las rocas.

Los patrones mentales del sensorial (predomine el sentido del tacto) se concentran mayormente en el modo de sentir,
Se sienten bien con una palmada en la espalda, un abrazo, un firme apretón de manos. AL pensar en sus vacaciones,
"sienten" el calor del sol que inunda su cuerpo y la alegría de sumergirse en el agua fresca del océano.

Por supuesto, la gente no se ajusta estrictamente a cada una de estas categorías (¡Somos una mezcal de las tres!). Sin
embargo, cada uno de nosotros tiene una fuerte tendencia a reaccionar de acuerdo con las impresiones que
proporcionan cada uno de estos tres sentidos. Las implicaciones de esto para los ganadores de almas son obvias. Al
tratar con una persona que ve las cosas en la mente, mi enfoque más eficaz no será enchufar una grabadora, sino
instalar un proyector.

Jesús alcanzaba a estas tres clases de personas.

Perfectamente sintonizado con las personalidades de los que lo rodeaban, Jesús demostraba su habilidad de alcanzar
a las diferentes clases de personas recurriendo a medios distintos.

Al conversar con los visuales, el Señor pintaba cuadros con ricos matices para ilustrar su mensaje. Hablaba del pastor
que salía para buscar su oveja, del hombre que buscaba el tesoro escondido en el campo, del padre del hijo pródigo
que corría hacia su hijo mientras las lágrimas se deslizaban por sus mejillas. ‘Al escucharlo, la gente "Veía" el mensaje
del evangelio en escenas panorámicas, y sentía vibrar la cuerda de la respuesta favorable dentro de sí.

Al hablar con Nicodemo, Jesús usó un llamado auditivo. Puesto que sabía que era fariseo, y que estaba acostumbrado
a escuchar la lectura de las ley, Jesús le dijo: "El viento sopla de donde quiere, pero no lo puedes ver. Sólo oyes su
sonido". Jesús sabía que tan ciertamente como Nicodemo podía "oír" el sonido de las hojas que se movían
violentamente antes de la tormenta, y "escuchar" el silbido del viento alrededor de las esquinas de su casa, él podía
escuchar el llamado del Espíritu Santo a su corazón.
La mujer con quien habló Jesús junto al pozo, a pesar de haber tenido seis maridos aún no había "sentido" el Toque
del amor. Jesús sabía exactamente cómo llegar a las profundidades de su ser. Al abordarla por la vía de sus
sensaciones, simplemente le dijo: "Dame de beber". Esta mujer, que había caminado por los polvorientos senderos de
una tierra desértica, y que más de una vez había introducido su cántaro de barro en la insinuante frescura del oscuro
pozo, conocía muy bien la "sensación" de la sed. Por eso Jesús usó con ella sus sensaciones para ofrecerle la fuerza y
la vitalidad del evangelio. "tu tienes sed ahora; Si bebes el agua que yo te daré, nunca mas tendrás sed".

De la misma manera podemos amoldar nuestra presentación del evangelio, al compartir la Palabra de Dios con la
gente del siglo veinte. Cuando le hablamos al público debemos usar estos tres enfoques, porque con seguridad estos
tres tipos de personas se encuentran en el auditorio. Cuando hablamos con una sola persona, lo sabio es comenzar
apelando a estos tres sentidos para después concentraron en el que parece ser el que predomina en la persona.

Cómo llamar a los visuales

Cuando hablo con gente del tipo "visual", pongo énfasis en mi mensaje en escenas pictóricas: "Imaginen a Jesús
mientras muere por Uds. en la cruz, con los clavos que atraviesan sus manos y la sangre que corre por sus mejillas. Al
mirar sus ojos, ¿existe algo para Uds. más importante que entregarle la vida?" "Imagine la sonrisa de Jesús cuando Ud.
se bautice el próximo sábado. Vea a los ángeles que se reúnen junto al trono del Padre para presenciar su bautismo".
"Piense en lo que será entrar por los portales celestiales y caminar por las calles de oro. Piense en el esplendor del
cielo: el colorido de las flores, las fuentes cristalinas, las puertas de perlas".

Cómo llamar a los auditivos

Para el "auditivo", vinculo el mensaje con el sentido del oído "¿No escucha, acaso, cómo Cristo lo llama hoy?" "Piense
en ese glorioso coro angelical y en la fuerte fanfarria de la trompeta! Que gozo le brindarán esos sonidos a su
corazón". "Escuche la voz de Jesús cuando dice: "Bien hecho, buen siervo fiel".

Cómo llamar a los sensoriales

Al hablar con una persona del tipo "sensorial" mi conversación podría ser algo así: "Al entregar su vida a Jesús Ud.
recibirá esa paz sanadora, ese íntimo contentamiento que toda la humanidad ansia. Ese sentimiento de paz que Ud.
anheló por tanto tiempo, será suyo al fin". "La decisión que Ud. está por tomar lo llevará por un sendero con
Jesucristo, donde podrá sentir su mano en la suya y sentir como lo guía paso a paso".

"Cuando el agua lo cubra en el momento del bautismo, Ud. experimentará la maravillosa sensación de que sus
pecados han sido cubiertos; tendrá una sensación de limpieza, de remoción de la culpa. Es probable que no tenga la
sensación de que un haz de energía eléctrica desciende por su columna vertebral, pero podrá percibir los brazos de
Cristo que lo rodean. Podrá sentir la calidez de su abraso".

"Jesús hizo a cada individuo diferente. Cada uno creció en un ambiente propio. Esta diversidad de ambiente implica
una variedad de enfoques. Una de las razones por las que existen tan pocos destacados ganadores de almas , es
porque la mayoría hace llamados teniendo como punto de referencia su propio estimulo de percepción. Todo el que
se encierra en si mismo se envuelve en un paquetito para entrar en las necesidades y los anhelos de los demás; es
decir, debe identificarse con su estilo de percibir las cosas. Permita que Dios lo ponga en armonía con las percepciones
d ellos demás, y vea como se multiplican los resultados.
Capítulo 10

El poder de la oración intercesora


Mike estaba perturbado. Mas o menos a la mitad de una serie de conferencias, tres jovencitas que habían, asistido
regularmente, se acercaron y le dijeron: "Hemos estado observando la iglesia adventista, pero justo ayer hablamos
con nuestro pastor. Queremos informarle que no volveremos. Aquí esta las revistas y los libros que nos dio".

Esa noche, mientras Mike se dirigía a su hogar, sus pensamientos eran un verdadero torbellino. ¿Que podía hacer?
¿Debería visitar a las chicas? ¿Debería llamarlas? La decisión de ellas parecía definitiva. Profundamente preocupado,
se dirigió a la iglesia. Eran las 22:30. Abrió la puerta y se sentó en la oscuridad del santuario. AL caer de rodillas sintió
el peso de su gran preocupación por esas niñas. Finalmente, mientras oraba rogando fervorosamente a Dios por sus
almas, sintió que una paz inundaba. No sabia con seguridad como obraría Dios, pero sabia que su oración había sido
respondida favorablemente Había pasado la medianoche cuando subió a su auto y regreso a su hogar.

Dos días más tarde, un sábado, mientras Mike saludaba las visitas en la puerta de la iglesia, notó que las tres chicas
subían tímidamente los peldaños. Completamente sorprendido las saludó y las dijo: "¡Chicas! ¿Que están haciendo
aquí?. - Queríamos visitar su iglesia - respondieron apresuradamente - ¿Podemos?

Durante las siguientes semanas Mike observó como impresionaba Dios a las chicas a fin de que regresaran a las
reuniones de evangelización. Pronto estuvieron listas para recibir estudios bíblicos. Más tarde, mientras estaban en el
bautisterio de la iglesia adventista de New Haven, Connecticut, comprendió una vez más que recibimos poder para
ganar almas cuando nos postramos de rodillas a fin de suplicar a Dios por la salvación de las almas.

Existen dos ingredientes esenciales para la ganancia de almas, 1Jn. 5: 14 -16 nos presenta: "Y esta es la confianza que
tenemos ante él, que si pedimos alguna cosa conforme a su voluntad, él nos oye. Y si sabemos que él nos oye en
cualquiera cosa que pedimos, sabemos que tenemos las peticiones que le hayamos hecho. Si alguno viere a su
hermano cometer pecado que no sea de muerte, pedirá, y Dios le dará vida, ésto es para los que no cometen pecado
que sea de muerte. Hay pecado de muerte, por el cuál yo no digo que se pida".

Nuestro texto menciona dos cosas en cuanto al éxito de ganancia de almas: la necesidad de la oración intercesora, y la
necesidad de la fe sin vacilaciones. "La oración y la fe harán lo que ningún poder en la tierra podrá hacer". (El
ministerio de curación , p. 407). "Forma parte del plan de Dios concedernos en respuesta a la oración hecha por fe, lo
que no nos daría sino se lo pedimos así" (El Conflicto de los Siglos, p. 80).

Ganar un alma no es como arreglar un automóvil o hacer una torta, para lo que ya existe cierta formula, y cualquiera
que la aplique puede tener éxito. No, cada persona es diferente, y aunque para la ganancia de almas existen ciertos
principios básicos que se aplican a toda situación, necesitamos la sabiduría de Dios para aplicarlos. De otra manera las
mentes no se impresionarán, ni las vidas se transformarán.

La Oración le daba poder a Cristo

Las escrituras revelan claramente que el poder de Cristo provenía del lugar privado donde se dedicaba a la oración.
Oró en el desierto de la tentación cuando el adversario luchaba por su alma. Oró la noche anterior a la elección de sus
discípulos oró durante toda la noche anterior al día cuando liberó del demonio al hijo de un noble. Oro en el
Getsemaní antes de la Cruz.
A veces parece que los ganadores de almas creen que están demasiado ocupados para orar. Jesús no opinaba así.
"Cuando llegó la noche, luego que el sol se puso, lo trajeron todos las que tenían enfermedades, y a los
endemoniados: y toda la ciudad se agolpo a la puerta. Y sano a muchos que estaban enfermos de diversas
enfermedades. y echó fuera muchos demonios; y no dejaba hablar a los demonios, porque le conocían.

Levantándose muy de mañana, siendo aun oscuro, salió y se fue a un lugar desierto, y allí oraba" (Mar. 1: 32-35).
Cuando se puso el sol vino toda la ciudad suplicándole que prestara atención. ¿Que evangelista ha estado jamas tan
ocupado?. Pero las noches ocupadas no debían interferir con las mañanas dedicadas a la oración. Había poder en la
noche porque había oración en la mañana.

La oración hace cuatro cosas

¿Por que es necesario orar por las almas? ¿Acaso Dios no quiere ganarlas? ¿No hace él todo lo que puede sin nuestras
oraciones?. Hay mucho en la ciencia de la oración que la mente humana no puede comprender. Esto no debería
desanimarnos. EL hecho de que no entendamos todo lo que se refiere a la electricidad no impide que disfrutemos de
los beneficios de la luz, calor y la energía eléctrica. A fines del sigla pasado no se sabía casi nada acerca de la vitamina
B, pero si alguien comía pan integral recibía el mismo beneficio de la vitamina B como nosotros ahora. Lo que
queremos destacar es simplemente que no es necesario conocer todo acerca de algo para beneficiarse con ello.
Aunque nunca comprenderemos plenamente la ciencia de la oración, hay cuatro razones por las cuales deberíamos
orar por las almas:

1. La oración le permite a Dios hablarnos de los pecados que existen en nuestras vidas, que impiden que tengamos
éxito en la ganancia de almas. Los israelitas acababan de ser vencidos por los habitantes de una pequeña ciudad
llamada Hai. Josué oró fervorosamente por esa situación, y Dios le dijo: "Levántate; ¿Porqué te postras así sobre tu
rostro? Israel ha pecado...Por eso los hijos de Israel no podrán hacer frente a sus enemigos" (Josué 7:10-12). Se le
había puesto límites al poder de Dios porque había pecado en el pueblo. El señor aprovechó la oración de Josué para
hablarle de ese pecado.

Muchas veces cuando usted y yo oramos por los demás, Jesús presiona nuestros corazones con la necesidad de una
comunión más intima con él. En la atmósfera de la oración, la ganancia de almas llega a ser el instrumento por medio
del cual Cristo escudriña nuestra vidas. Decimos: "Oh, Señor, nunca me vi antes así. ¿Realmente soy así? Si mi
amargura, mis celos y mi orgullo están entre tu y yo, elimínalos par que puedas dar testimonio eficazmente por medio
de mí y pueda así ganar esta alma". Mediante la oración Jesús nos revela las actitudes que le impiden obrar por medio
de nosotros.

2. La oración profundiza nuestro interés en las cosas por las cuales estamos orando. Una de las razones por las cuales
Jesús no interviene inmediatamente en una vida cuando oramos, es para capacitarnos a fin de que estemos en tan
intima armonía con él, que trabajemos con más fervor junto a él por la salvación de esa alma. Mientras más oremos
por la salvación de alguien, más la desearemos. Mientras más la deseemos, más trataremos de buscar oportunidades
originales par alcanzar a esas persona.

3.- La oración nos pone en contacto con la sabiduría divina. El único que es realmente lo suficientemente sabio como
para ganar almas es Dios. "Si alguno de vosotros tiene falta de sabiduría, pídala a Dios" (Sant. 1:5).En Isaías 50:4,
donde se habla proféticamente de Jesús, se dice: "Jehová el Señor me dio lengua de sabios, para saber hablar
palabras al cansado". Sólo Jesús nos da lengua de sabios. Nos revela cuáles son las palabras adecuadas que podemos
dirigir a los seres humanos. Sin su sabiduría podemos tener muchas llaves, pero no sabremos a qué cerraduras
corresponde. La sabiduría de Jesús elige la llave adecuada para alcanzar cada corazón y abrirlo a fin de recibir los
tesoros del evangelio.
4. La oración le permite a Dios obrar mas poderosamente de lo que podría si no oráramos. Daniel 10 nos cuenta que
las oraciones del profeta ascendieron al cielo durante tres semanas sin aparentes resultados. Pero al fin de este
periodo Gabriel le explico a Daniel que se había estado librando una gran batalla en la mente de Ciro. Los ángeles
buenos trataban de expulsar a los malos para que al rey pudiera hacer la decisión correcta. Por su parte, los ángeles
malos trataron de destruir a los buenos para envolver en tinieblas al monarca. Mientras Daniel oraba, la batalla estaba
en su apogeo. Finalmente Jesús descendió, venció y expulso a los ángeles malos, y le dio a Ciro la oportunidad de
tomar una decisión clara e inteligente. Se le permitió a Israel salir en libertad. La oración intercesora de Daniel fue
eficaz.

¿No está haciendo Dios todo lo posible para salvar a alguien antes de que nosotros oremos? Sí. Pero cuando oramos
como lo hizo Daniel, el Señor puede hacer mucho más de lo que podría haber hecho antes. EL Altísimo
voluntariamente ha decidido limitarse a si mismo en el gran conflicto entre el bien y el mal Decidió no violar la
voluntad humana. Cuando una mente ora por otra, eso le permite obrar en las mentes más espectacularmente de lo
que lo haría de otro modo.

Ore en forma definida

La oración por las almas es una obra individual. No se trata sólo de orar rápidamente por los cien nombres que
aparecen en una lista de oración, para que después suceda algo por arte de magia. Hay ciertos animales para las
cuales los nacimientos múltiples son comunes. La zarigüeya, por ejemplo, da a luz una camada de una docena o más.
Pero no sucede lo mismo con los seres humanos. A veces tienen gemelos, pero muy rara vez trillizos o cuatrillizos, la
mayor parte de los humanos nacen uno a la vez. Y lo mismo sucede con la ganancia de almas. Si quiere ganar almas,
comience por una.

Observe el consejo que nos da Job en cuanto a orar por las almas: "Oh, si alguien pudiera rogarle por un hombre a
Dios como cuando se la ruega algo a un vecino" (paráfrasis de Job 16: 21). Esta es nuestra obra, rogarle a Dios por las
necesidades personales de Juan o José, de María o Alicia. 1 Samuel l2: 23 añade: "Así que, lejos sea de mi que peque
yo contra Jehová cesando de rogar por vosotros". ¿Tiene usted una lista de oración? ¿Hay allí seres humanos que
usted está presentando a Dios en Oración? La ganancia de lamas es obra de Dios, no de hombre. La oración abre
nuestros corazones y mentes para que el Espíritu Santo los use como canales de bendición.

Ore en grupos

Además de la oración privada en favor de las almas, observe la instrucción que da Jesús en Mateo 18: 19, 20:

"Otra vez os digo, que si dos de vosotros se pusieren de acuerdo en la tierra acerca de cualquiera cosa que pidieren,
les será hecho por mi Padre que está en los cielos. Porque donde están dos o tres congregados en mi nombre, allí
estoy yo en medio de ellos".

Y Elena de White añade:

"¿Por qué no se reúnen dos o tres para interceder con Dios por la salvación de alguna persona en especial, y luego por
otra aún?" (Joya de los testimonios, tomo 3, p. 34).

Esos pequeños grupos de oración constituyen la base de la evangelización de éxito. La obra de la conversión no es
natural, es sobrenatural. Un vendedor puede persuadir a alguien para que compre un auto nuevo. Las empresas de
publicidad pueden tentar a alguien para que compre un traje nuevo. Un corredor de propiedades puede interesar a
otro en una casa nueva y atractiva. Estos vendedores pueden conseguir ciertos resultados al aplicar determinadas
técnicas. Pueden vender sus productos e incluso es posible que un pastor convenza a alguien para que se una a la
iglesia. Pero sólo Dios puede producir la genuina conversión del alma. La evangelización de éxito debe incluir el
ministerio de la oración.
Capítulo 11

Como ayudar a la gente a vencer los hábitos malsanos


María y Juan estaban sentados delante de mi ron una expresión de angustia en el rostro. Juan habló primero: "¿Que
significa nacer de nuevo, pastor? ¿Como se puede entender esto que dice la Biblia? ¿Que es el nuevo nacimiento?".
Con la misma celeridad con que formulaban sus preguntas encendían sus cigarrillos y llenaban de humo la habitación.
No me habrían parecido tan fuera de lugar estas preguntas si María y Juan no hubieran asistido a una serie completa
de conferencias ni hubiesen recibido una serie completa de estudios bíblicos, sin contar las horas y horas de discusión
acerca, del nuevo nacimiento Juan insistió: "Hemos llegado al punto en que estamos por dejar todo este asunto de
cristianismo. No podemos comprender cómo nos podemos convertir y que significa nacer de nuevo. Hemos estado
leyendo, y mientras más leemos más confundidos estamos". Al decir eso, encendió otro cigarrillo.

Mientras hablábamos, yo quedé cada vez mas convencido que el principal problema no era que no entendieran
intelectualmente la Biblia, sino que Juan y María habían conocido la verdad de Dios por más de un año, pero no
habían podido dejar el hábito de fumar Por eso les pregunté: "¿Quisieran por favor compartir conmigo los principales
problemas espirituales que están enfrentando en su vida en este momento? ¿Cuál les parece que es el problema
numero uno que les esta impidiendo tener una experiencia plena con Dios? ¿Tienen algún hábito en sus vidas que
podría estar impidiendo esta relación?". Casi sin vacilar Juan tomó el atado de cigarrillos que tenía detrás de é1. "Se
trata de nuestro hábito de fumar - dijo -. Queremos dejarlo. Hemos tratado de dejarlo". Con toda calma, María
afirmó: "No lo podemos dejar".

Su frustración era visible. Juan y María no estaban luchando por lograr un conocimiento intelectual del nuevo
nacimiento sino por la victoria sobre un hábito sumamente arraigado.

Obrar de acuerdo con la palabra de Cristo es alcanzar la sanidad.

Mientras conversábamos, compartí con ellos estos pensamientos: "Juan y María: el problema de Uds. es muy serio.
Pero al estudiar el Nuevo Testamento resulta obvio que había gente en aquel tiempo que tenía problemas más graves
aún que el de Uds., problemas que ellos tampoco fueron capaces de solucionar por sí mismos. En Juan 5 la Biblia nos
cuenta la historia del hombre del estanque de Betesda. Había sufrido de parálisis durante 38 años. Estaba desanimado
y sin esperanzas. Entonces vino Jesús y le dijo: ¿Quieres ser sano?’ ‘¿Quieres realmente recuperar la salud?".

"Yo creo que él les haría a Uds. una pregunta similar: ‘¿Quieren realmente dejar de fumar? ¿Deciden en realidad dejar
de fumar? En el versículo 7 leemos: ‘Señor, no tengo quien me meta en el estanque... y entre tanto que yo voy, otro
desciende antes que yo’. En otras palabras: ‘Quiero, pero no puedo’.

"Jesús le respondió en el versículo 8: ‘Levántate, toma tu lecho, y anda’ No le dijo: ‘Has sanado de tu enfermedad,
toma tu camilla, y anda’. Era necesario que él ejerciera fe en el poder milagroso de Jesús antes de que el milagro se
consumara. No se trataba de fe en que el se podría sanar a sí mismo, ni que si su fe era los suficientemente fuerte su
enfermedad lo abandonaría, sino fe en que era verdad lo que Cristo había dicho.

"El paralítico creyó que podía caminar porque Jesús lo había dicho. La Biblia dice en el versículo 9: ‘Y al instante aquel
hombre fue sanado, y tomó su lecho y anduvo’. Creyó que lo que Cristo había dicho era verdad, y obró en
consecuencia, aunque todas las evidencias indicaban que todavía estaba enfermo. Cuando obró de acuerdo con la
palabra de Cristo, entonces sanó".

Toda orden de Cristo implica el poder de llevarla a cabo.


Seguí: "María y Juan: aquí está la clave vital para dejar de fumar. La Biblia dice: ‘Por la fe entendemos haber sido
constituido el universo por la palabra de Dios, de modo que lo que se ve fue hecho de lo que no se veía’ (Heb. 11:3).
Las cosa que se ven fueron hechas por la palabra hablada de Dios. El Señor dijo: ‘Sea la luz’, y los dorados rayos se
filtraron a través del cielo. Dijo: ‘Descúbrase lo seco’, y surgió la tierra oscura y rica. Dijo ‘Que las aves vuelen’, y
apareció el picaflor que vuela hacia adelante y hacia atrás. Dijo: ‘Que aparezcan los animales sobre la tierra’, y los
Caballos comenzaron a galopar y los leones a rugir ‘Porque é1 dijo, y fue hecho; é1 mandó y existió’ (Sal. 33: 9). La
palabra hablada de Dios contenía tanta energía, que la palabra audible se convirtió en materia tangible.

"Ahora bien, la Biblia es la Palabra escrita de Dios. Los mandamientos y las promesas del Señor que se encuentran en
la Palabra escrita, contienen ciertamente tanto poder como la palabra que habló en ocasión de la Creación. Lo que su
palabra hablada dijo entonces, contenía el poder de llevarlo a cabo. Lo que su palabra escrita dice ahora, sigue
teniendo ese mismo poder. Cada orden de Cristo implica poder para cumplirla. "¿Cuál es la orden de Cristo a los
fumadores? ‘Así que, hermanos, os ruego por las misericordias de Dios, que presentéis vuestros cuerpos en sacrificio
vivo, santo, agradable a Dios, que es vuestro culto racional’ (Rom. 12:1). ¿Que les promete Cristo a loa fumadores?
Que puedan decir: ‘Todo lo puedo en Cristo que me fortalece’ (Fil. 4: 13). Cada mandamiento de Cristo implica su
promesa de darnos poder para obedecerlo. "Entonces, ¿en que ponen Uds. su confianza? ¿Está en el "Yo puedo
hacerlo todo", o en la frase: ‘Por medio de Cristo que me fortalece’ En 1 Juan 5: 14 se nos dice: ‘Y esta es la confianza
que tenemos en él, que si pedimos alguna cosa conforme a su voluntad, él nos oye’. Noten que no dice: "Cualquier
cosa menos dejar de fumar". Entonces la fe es confianza en que lo que Dios dice en su Palabra está acompañado del
poder necesario para llevarlo a cabo. Y ya que Dios ha dicho que Uds. lo pueden hacer todo por medio del que les
fortalece, pueden confiar en que si le piden algo con fe, de acuerdo con su voluntad, inclusive dejar de fumar, pueden
lograrlo. Reciben poder cuando reciben a Jesús.

Recibirlo implica no sólo el perdón de los pecados, sino poder para, el presente y el futuro. "Juan y María: se pueden
arrodillar aquí mismo para orar ‘Señor, danos fuerza, danos poder para vencer’; y sepan que el poder es de Uds.
Ciertamente todavía tendrán deseos y apetitos. A algunos les pasa esto; a otros no. Puede ser el resultado de la
nicotina que se he depositado en las células del organismo.

El hábito de fumar es físico, social y neuromuscular. Es posible que por semanas y meses tengan deseos y hasta ansias
de fumar. La nicotina saldrá del organismo en un tiempo relativamente corto, pero puede quedar un deseo psicológico
porque este hábito no ha estado asociado con casi cada actividad y momento del día. Se convirtió para Uds. en un
tranquilizante, en un proveedor de placer y en algo que les calmaba los nervios. Han encendido más cigarrillos que
cualquier otra cosa que hayan hecho en la vida incluso comer. De modo que pueden esperar algunos apremios. La
promesa de Dios no siempre es eliminar el deseo, sino poner siempre a disposición de Uds. la victoria sobre ese
hábito."

Tal como el pobre paralítico del estanque creyó y se sanó, reclamemos la victoria de Jesús antes de experimentarla.
Sobre la base de lo que Dios dice, ¿quisieran Uds., María y Juan arrodillarse aquí mismo y abrir sus corazones a Dios,
entregándole su hábito, y pedirle poder para vencer, y creer con fe, antes de levantarse, que él ya les ha dado ese
poder?".

Nos arrodillamos y yo elevé esta sencilla oración: "Querido Señor, gracias por el poder de Jesús; gracias por su fuerza;
gracias por la victoria que le das hoy a María y a Juan. Gracias porque nunca más necesitarán fumar otro cigarrillo.
Puede ser que tengan deseos todavía; puede ser que tengan ansias. Pero Dios, yo sé que tu palabra y por medio de
Jesucristo la victoria es de ellos hoy. Por la fe te alabamos por esta victoria. En el nombre de Cristo. Amén".

Después de una conversación como ésta, yo suelo ofrecer el siguiente consejo:


Siete secretos para no fumar.

1. Lea las promesas de Dios y continúe reclamando su victoria. Considere las siguientes promesas cuando se sienta
tentado a fumar: Filipenses 4: 13 , 19; 1 Cor. 10: 13; Apo. 3: 20; 1 Jn. 5:4. La Biblia dice en Santiago 4: 7: "Someteos,
pues, a Dios; resistid al diablo, y huirá de vosotros". Ustedes se han sometido a Dios. Pero es necesario que resistan al
diablo, ya que siempre disponen de su libre albedrío. Como primera cosa concentren su mente en Jesús, en su amor
por ustedes y en su voluntad para sus vidas.

El segundo secreto consiste en destruir todo el tabaco que tenga. Ahora ustedes no son más fumadores, y si tienen
tabaco a mano, les va a resultar mas fácil ceder a la tentación de fumar Por lo tanto, junten todo el tabaco que tengan:
bajo la cama, en la cartera, en el ropero o en el auto. Líbrense de él si realmente quieren dejarlo. Esto también es
resistir al diablo.

Beban cada día diez vasos de agua o de jugo de fruta sin fermentar. Pongan tanto liquido en sus cuerpos como les sea
posible. Compren mucho de su jugo de fruta favorito: manzana, naranja, pomelo, etc. ¡Sus riñones van a creer que la
Navidad y el Año Nuevo han caído en el mismo día! La idea es eliminar el veneno del organismo. Durante las primeras
24 horas eliminen las comidas suculentas, y redúzcanse principalmente a frutas y cereales integrales, sin olvidar beber
mucho jugo de fruta. Estamos resistiendo al diablo.

Si el deseo es irresistible, salgan a caminar. Respiren profundamente, con la cabeza erguida y los hombros derechos. El
oxígeno les ayudará a calmar los nervios y vencer el hábito. Necesitan bañarse con liquido por dentro y con aire por
fuera.

Si el deseo de fumar es abrumador, métanse en la ducha ¡Es terriblemente difícil fumar bajo la ducha! Tomen primero
una ducha caliente, seguida por otra fía. Les calmará los nervios.

7. Acuéstense temprano. Se van a sentir tensos. Necesitarán más horas de sueño para conservar la calma.

Eviten la bebidas cafeinadas y las bebidas con cola. Puesto que la cafeína y la nicotina son alcaloides, la cafeína
estimulan su deseo de fumar.

Dejen de suplicar comiencen a alabar

La Biblia dice en 1 Corintios 15: 57: "Más gracias sean dadas a Dios, que nos da la victoria por medio de nuestro Señor
Jesucristo". Dios les ha dado la victoria. Agradézcanselo.

Cuando oren, no digan: ‘Oh Dios, por favor, dame la victoria". Hay quienes elevan estas oraciones por semanas, meses
y años, y siguen fumando. Lo mismo ocurre con todo lo malo en nuestras vidas. Nunca deben concentrarse en el
problema, sino en la solución.

Oren así: "Querido Jesús: yo sé que tu poder está en mi vida Te alabo por la victoria que ya me has dado. Te alabo
porque capacitas para ganar la victoria, por tu intermedio, en el futuro

Creo que lo que dices es verdad, lo acepto así, y te alabo por haberlo hecho así en mi vida". No supliquen más.
Comiencen a alabar.

Los principios que hemos ilustrado en este capítulo por medio de mi conversación con María y Juan se aplican no sólo
al tabaco, sino a todo mal hábito. El secreto de la victoria sobre los hábitos pecaminosos se puede resumir en estos
cuatro pasos: (1) La convicción de que el hábito es pecaminoso, (2) el abandono del mal hábito por medio de la
sumisión a la voluntad a Cristo. (3) Fe en que el llamado de Dios a entregarnos está acompañado del poder para
alcanzar la victoria y (4) reclamar esa victoria en la vida, y alabar a Dios por ello.

Mucha gente lucha en medio de la derrota, entrega sus hábitos pero nunca reclama la victoria ya provista. Recuerden
esto: Cristo ya venció; ya es victorioso. Por lo tanto, la victoria llega cuando yo deposito mis pecados a sus pies,
reclamo la victoria que él ya logro sobre Satanás, y voy en busca del limpio registro que él presenta en mi lugar
delante del trono de Dios. Recibo la victoria por la fe en el poder del Cristo resucitado que me fortalece. Mi mente no
se concentra en mi debilidad sino en el poder de Cristo. Esta es la clave de la victoria.
Capítulo 12

Como conservar lo que se ha ganado


EL bautismo no es una panacea que resuelve todos los problemas espirituales. A menudo después del bautismo el
nuevo creyente enfrenta algunos de sus más difíciles desafíos. El desafío de enfrentar a los parientes no adventistas;
de anudar nuevas amistades y de vivir una vida que armonice con las elevadas normas de la Biblia.

La iglesia debe enfrentar este crítico problema. Es muy posible que muchos se desanimen poco después del bautismo.
Si no hay mucha tolerancia por sus errores, si manifestamos poca simpatía por las pruebas a que están sometidos, y si
el filoso cuchillo de la crítica destruye las bendiciones de su nueva fe, las apostasías se elevaran. No se puede esperar
que los nuevos miembros sobrevivan si se los deja solos. Son bebés espirituales. Todo bebé que no reciba atención
adecuada morirá. El bautismo es un símbolo del nuevo nacimiento. No es una indicación de que el nuevo converso ya
está maduro. Por lo tanto, es responsabilidad de la iglesia tomar cuidadosas medidas para ayudar a cada nuevo
miembro a desarrollar una relación más profunda con Cristo.

Tengo un hijo de cuatro años. Después que nació, mi esposa y yo asumimos la gran responsabilidad de cuidarlo.
Regularmente nos levantábamos dos o tres veces cada noche para atender sus necesidades. Cambiarle los pañales
ocupaba una buena parte de nuestro tiempo. Durante su infancia nuestro hijo era incapaz de hacer algo por si mismo.
Pero no creíamos que era un fracaso por que necesitaba tanta atención. Se espera que los bebés sean así de la misma
manera, no deberíamos creer que los nuevos miembros son fracasos si, aun después del bautismo, necesitan más
cuidado y atención. Se espera que los bebés en la fe sean así. A veces tropiezan y caen. La transición de su estilo de
vida es difícil. Es posible que muchos de sus amigos y familiares los hayan abandonado. Necesitan desesperadamente
de la amistad. Sólo la amabilidad, el cuidado y la preocupación les proporcionarán el ambiente que les permitirá
seguir creciendo. Hace un tiempo la revista Reader’ s Digest (Selecciones, en ingles) publicó un artículo titulado "El
tremendo poder del amor humano". Era un estudio acerca de dos orfanatos. En uno de ellos los niños no
desarrollaban habilidades motoras adecuadas. Ni gateaban ni caminaban en el momento debido. Su vocabulario era
limitado y estaban atrasados en sus aprendizaje. Cuando los investigadores estudiaron esa situación, descubrieron
que los encargados de este orfanato trataban a las niños en forma áspera. No les gustaba su trabajo. Hacían solo lo
que les obligaba. Los niños muchas veces quedaban solos y se los dejaba llorar por horas.

En otro orfanato que no quedaba muy lejos de allí, los niños se desarrollaban de lo lindo. Los investigadores
descubrieron que su personal era delicado y estaba comprometido con tarea. Las enfermeras cuidaban con amor a los
niños. Estos desarrollaron habilidades motoras adecuadas. Caminaron y gatearon en el momento oportuno. Pero por
sobre todo, desarrollaron una disposición amorosa y alegre. El amor era la causa de esta diferencia.

Hay quienes aseguran que hasta las plantas reaccionan mejor en un hogar donde prevalece una atmósfera cariñosa.
Dicen que hay impulsos eléctricos en el aire a los cuales son sensibles. Ciertamente hay una atmósfera en una iglesia
amante, que estimula en movimiento. Elena de White lo dice de esta forma:

"Hay que tratar con ternura y paciencia a los recién llegados a la fe, y los miembros más antiguos de la iglesia tienen el
deber de encontrar la forma de proporcionar ayuda, simpatía e instrucción para los que han salido de otras iglesias
por amor a la verdad, y que en esta forma se han separado de la obra pastoral a la que habían estado
acostumbrados". (El evangelismo., p. 258).

Continua con esta instrucción práctica.:


"Después que las personan se han convertido a la verdad, es necesario cuidarlas... muchos recién convertidos
necesitan cuidados, atención vigilante, ayuda y estímulo. No se los debe dejar solos, a merced de las más poderosas
tentaciones de Satanás; necesitan ser educados con respecto a sus deberes; hay que tratarlos bondadosamente,
conducirlos, visitarlos y orar con ellos. Estas almas necesitan el alimento asignado a cada uno a su debido tiempo"
(ibíd., p. 258).

Después de evaluar cuidadosamente a los nuevos conversos de la iglesia Adventista, hemos descubierto que a
menudo hay cuatro grandes crisis en sus vidas. Generalmente se producen durante los primeros dos años. Así Como
las primeras etapas la vida de un bebé son críticas, así lo son los primeros dos de la vida de un converso. Establecen
un patrón de crecimiento y desarrollo espiritual para el resto de la vida.

1. La crisis del desanimo

Esta crisis se produce cuando alguien no logra vivir a la altura de las normas que abrazó inmediatamente antes de su
bautismo. En esa ocasión asumió un compromiso publico con esas normas, pero después descubrió que algunas
tendencias de su vida antigua todavía estaban presentes. Puede perder el control de su carácter, puede transgredir el
sábado o aun "hacerse una escapada" y proferir una grosería. Cuando estos viejos hábitos, cualesquiera que sean, lo
asaltan de nuevo, puede haber un periodo de gran desanimo. Lo inunda un sentimiento de derrota. Desanimado, con
una estima propia en un bajo nivel, se puede creer hipócrita. Su reacción natural es apartarse de esa iglesia delante de
la cual asumió todos esos compromisos. La culpa llevó a Adán y Eva a huir de la presencia de Dios. Sucede lo mismo
hoy.

Síntomas. Los principales síntomas de la crisis del desanimo son el ausentismo o cualquier otro cambio importante en
el estado de asistencia a los eventos sociales o a las reuniones de oración puede descubrir también por una notable
perdida de alegría cristiana de vivir. Se puede manifestar asimismo por la perdida del deseo de permanecer por
mucho tiempo en la iglesia. Un rápido apretón de manos, un rostro desanimado o una disposición bien fría pueden
ser indicios de una crisis de desanimo.

Soluciones. Se le puede ayudar a la persona que pasa esta crisis si se le detecta rápidamente. Un llamado telefónico,
una palabra tranquilizadora, una oración, una breve nota, una visita pastoral, todo esto puede ser como rayos de
esperanza en medio de la oscuridad. Lo que ciertamente no necesita es condenación. Muchas veces todo lo que
necesita es que comprendan su desanimo, que escuchen cuáles son sus problemas, y le ofrezcan un estímulo sincero
y genuino.

2. La Crisis de integración

Esta crisis ocurre cuando alguien no consigue reemplazar los antiguos amigos por otros nuevos. Sucede cuando
acepta las doctrinas de la iglesia, pero no se integra a su estructura social, como los seres humanos somos seres
sociales, además de tener una naturaleza física, mental y espiritual, la crisis de integración ocurre cuando alguien no
llega a formar parte del tejido social de la iglesia. Se siente solo, posiblemente aislado de su propia familia por causa
de su nueva religión.

Síntomas. Este nuevo miembro comienza a llegar tarde a la iglesia, o sale inmediatamente después del himno final.
Puede sentarse solo. Rara vez participa de las actividades sociales. Si asiste se queda solo. Para el la religión consiste
simplemente asistir a las reuniones el sábado de mañana, porque cree en las doctrinas. Esta persona generalmente no
viene a la escuela sabática. Se relaciona muy poco con los miembros de iglesia y no tiene amigos íntimos entre ellos.
Puede continuar de esa manera por semanas y meses, pero tarde o temprano, a menos que consiga amigos dentro de
la iglesia, se irá.
Soluciones. Necesita atención inmediata y personal. Trate de hacer esfuerzos activos para ayudarle a conseguir
nuevos amigos dentro de la iglesia. Deben hacerse esfuerzos especiales para invitarlo a participar de las actividades
sociales. Una llamada telefónica en este caso será más eficaz que una carta o un anuncio público. La comunión
amante, y relaciones personales profundas son un factor importante en la prevención de la apostasía. Una de las
mayores medicinas preventivas consiste en invitarlo a almorzar el sábado, a una visita a una institución adventista
como ser uno de nuestros hospitales, alguna escuela o colegio, o el SEHS.

Durante los primeros seis meses la mayor parte de la gente deja la iglesia por causa de las crisis de desanimo o
integración que por cualquier otro motivo. Pero la marea de la apostasía se puede detener aquí. La comunión amante
y las amistades personales profundas son un factor importante en la prevención de la apostasía.

3. La crisis del estilo de vida

Esta crisis generalmente ocurre de un año a un año y medio después del bautismo. Se produce cuando alguien no
consigue integrar a su estilo de vida personal el sistema de valores de la Biblia y la Iglesia Adventista. Es típico que no
haya incorporado en su horario el culto familiar. Da las gracias por los alimentos, sólo de vez en cuando. Guarda el
sábado en forma descuidada. Continua asistiendo a sus antiguos lugares de diversión. Aunque este presente en la
iglesia los sábados de mañana, la atracción de su antigua vida es muy fuerte. Su experiencia personal todavía es
superficial. Las semillas del evangelio han echado raíces, pero a poca profundidad. No tiene una vida devocional
personal: dedica muy poco tiempo a la oración y al estudio de la Biblia. En resumen, realmente no conoce a Jesús.

Síntomas. Este nuevo miembro a menudo no asiste a la escuela sabática; casi con seguridad tampoco viene a los
cultos de oración. Su experiencia cristiana generalmente es superficial. No ha cultivado el hábito de la obra misionera.
No lee las revistas denominacionales y no asiste a las reuniones especiales de la iglesia como ser los congresos. Habla
en general de ella, pero no participa mucho y en apariencia no crece espiritualmente.

Soluciones. La gran necesidad de alguien que esta pasando por esta crisis es un periodo más o menos largo dedicado
a la devoción. Asegúrese de que tenga en casa material de lectura adventista adecuado a sus necesidades e intereses.
Un estimulo especial para promover el desarrollo espiritual de este adventista ya laodicense es lograr que participe de
pequeños grupos de estudio de la Biblia donde se ore, se estudie la Biblia y se de testimonio. En el ambiente de un
grupito de seis a ocho personas, hay más probabilidades de que se produzca el desarrollo espiritual deseado.

4. La crisis de liderazgo

Esta crisis generalmente ocurra después que alguien ha manifestado fidelidad a Cristo y a su iglesia. Supongamos que
esta es relativamente pequeña. Se lo comienza a integrar entre los dirigentes. Tal vez se lo elija miembro de la
comisión de nombramientos. Allí empieza a ver las actividades internas de la iglesia. Entonces el "halo de santidad" se
empaña. Se da cuenta de que no todos los miembros de la iglesia son "santos" Durante las reuniones de la comisión
de nombramientos se hace una evaluación franca de los miembros que se eligen para determinados cargos. Las
imperfectas decisiones y funciones de las comisiones y juntas lo dejan perplejo. Lo desanima el impacto que le
produce pertenecer a una iglesia compuesta por seres humanos reales y que se equivocan.

Síntomas. Esta crisis puede manifestarse mediante la crítica, los chismes, la revelación extemporánea de los acuerdos
de una comisión, o un sentimiento generalizado de desanimo. A veces la persona que esta pasando por ella, después
de asistir a las reuniones de la comisión de nombramientos, termina rechazando todo cargo. Puede haber críticas por
un lado, y por el otro, un profundo sentimiento de ansiedad.

Soluciones. En general, una o dos sesiones de aconsejamiento que se concentren en el origen divino de la iglesia y en
las debilidades y falencias de liderazgo humano, bastan para ayudar a esta persona. Las crisis de liderazgo
generalmente ocurre porque la persona no tiene la madurez espiritual suficiente como para reconocer la parte
"humana" de los miembros de la iglesia. Es útil que los pastores le expliquen a cada nuevo miembro elegido para
desempeñar un cargo, lo frágil que es la naturaleza humana y la urgente necesidad que tenemos de cooperar. Cuando
la verdad no este en juego, las juntas y comisiones de la iglesia deben recordar por el bien de los nuevos miembros, si
no existiera otra razón, que la unidad es más importante que las opiniones personales.

En todas las crisis que hemos analizado: la del desánimo, de integración y la de liderazgo, se necesita un ingrediente
sumamente importante para evitar la apostasía, es a saber, un amor que se preocupe por los demás. Un amor que
diga continuamente "me intereso y me preocupo por Ud.". Un amor que se manifieste en una llamada telefónica, una
breve nota, una sonrisa, un cálido apretón de manos y una invitación a comer, puede ser más elocuente que un
sermón. Haríamos bien en recordar las palabras del negrito Harlem que oyó a un predicador callejero que hablaba
acerca del amor de Dios. Se paró, se afirmó en el suelo y le gritó "¡Señor, me gustaría el amor revestido de piel!".

La ganancia de almas es la obra más maravillosa del mundo. En ella Dios el ganador de almas trabajan juntos. La
alegría más grande y más profunda en esta vida es trabajar con Dios. La combinación de tranquilas meditaciones con
momentos a solas con Dios en oración y con una labor activa, esa es la vida que el Señor ha planificado para cada uno
de sus seguidores. A esta vida de éxito en la ganancia de almas los invito yo hoy.
Capítulo 13

Lo menos que se puede pedir


Este libro ha considerado los ingredientes esenciales y necesarios para inducir a los seres humanos a tomar decisiones
trascendentales en favor de Cristo y el mensaje de los tres ángeles. Pero la técnica, sin una entrega personal a Cristo,
es como los huesos secos de la parábola de Ezequiel. Cuando el Espíritu viviente de Dios mora en el corazón del
ganador de almas, lo capacita para llegar a ser un obrero eficiente en la viña del Señor. Esta pasión por las almas
desarrollada por la presencia del Espíritu ha caracterizado a todos los verdaderos ganadores de almas. Para ellos
ganar almas no era una de las muchas opciones de la vida: era su propósito central.

George Whitfield, el famoso evangelista inglés, decía: "Oh, Señor, dame almas o toma la mía". El misionero Henry
Martin, de pie en los bancos de coral de la India, clamaba: "Aquí arderé para Dios" Dwight L. Moody, de Chicago,
decía: "Mi Salvador, úsame para cualquier propósito y en cualquier forma según lo necesites".

Cuando John Mackenzie era un joven candidato a misionero, oró arrodillado a la orilla del río Lottie: "Oh, Señor,
envíame al lugar más oscuro de la tierra". La Sra. Comstock, misionera en la India, al enviar a sus hijos de vuelta a casa
oró: "Señor Jesús, lo hago por tí". John Hunt, un misionero a las islas Fidji, oró mientras moría: "Señor, salva a Fidji:
salva a este pueblo; Oh Señor, ten misericordia de Fidji".

David Brainard, uno de nuestros más célebres misioneros mientras trabajaba entre los pobres y entenebrecidos indios
de Delaware, dijo: "No me importa dónde vivo ni por qué dificultades tengo que pasar, con tal de ganar almas para
Cristo. Mientras duermo, sueño con esto. En cuanto despierto, lo primero en que pienso es en esta gran obra".

Elena de White, al escribir en The Youth´s Instructor (Instructor de la Juventud) del 4 de mayo de 1893, se hizo eco de
este modo de sentimientos similares:

"La obra que está por encima de cada obra: el negocio que está por encima de todo otro negocio, y que debe
comprometer todas las energías del alma, es la obra de salvar a las almas por las cuales Cristo murió. Haced de esto la
obra principal y la más importante de vuestra vida. Que sea vuestra obra especial".

Una pasión por las almas no es algo que brota espontáneamente dentro de nosotros. Es más bien algo que se nos
envía desde lo alto. Una preocupación por las almas no nos llega por meditar en nuestro éxito personal: la inspira la
contemplación del Calvario.

Cuando nos enfrentamos al hecho de que cuando Cristo venga los seres humanos se salvarán o se perderán, que irán
al cielo o al infierno; cuando nos percatamos de que nuestra influencia cuenta, que la podemos ejercer sobre la vida
de los demás, que por medio de nuestras acciones el Espíritu Santo puede obrar poderosamente para salvar a los
demás, nos sentimos motivados a participar con Cristo en la obra más gloriosa del mundo.

Amigo mío: después de leer las páginas de este libro, es el profundo deseo de mi corazón que lo que hemos dicho sea
más que mera técnica, sino que usted incorpore a su vida estos principios vitales y llegue a ser un más eficiente
ganador de almas para Cristo. No sólo para que su nombre aparezca en las páginas de las revistas de la iglesia como
un poderoso ganador de almas, sino para que tenga el gozo de cooperar más eficazmente con Cristo en la tarea de
ayudar a los demás.

Al darse cuenta de que Dios lo quiere usar como su portavoz para alcanzar a los perdidos, ¿no quisiera arrodillarse
ahora mismo en una consagración más profunda, a fin de invitar al Espíritu a que tome posesión total de usted? ¿No
quisiera pedirle que le abra los ojos para que vea a los perdidos que están a su alrededor? ¿No quisiera suplicarle que
por medio de su Espíritu le ponga en el corazón una preocupación más profunda por las almas? ¿No quisiera
arrodillarse ahora mismo, allí donde se encuentra leyendo este libro, para elevar esta sencilla oración?.

"Querido Señor; concédeme pasión por las almas. Ayúdame a ver a los seres humanos como Cristo los vio: candidatos
potenciales al reino de los cielos. Dame, a la luz de la cruz, el deseo de cooperar con él. Que el Espíritu Santo me
posea totalmente, de manera que nada en la vida me impida trabajar eficazmente en favor de los demás.

Y, Padre, trabajemos lado a lado. Soy débil, a veces tengo miedo de fracasar. Pero con fe y absoluta confianza me
dedico a ti, sabiendo que me usarás. Te lo agradezco en el nombre de Cristo. Amén".
Capítulo 14

La bendición del trabajo misionero y La importancia de los cursos de


capacitación
(Capítulo añadido por los transcriptores del artículo del mismo nombre de la Revista Adventista del mes de mayo de
1.998).

Cuando una persona entrega su vida a Cristo, deja de hacer muchas cosas que no están de acuerdo con el plan que
Dios tiene para el cristiano. Sin embargo, como fuimos creados para estar en actividad, no es sano permanecer
inactivos.

Dios nos dejó una gran misión que necesitamos cumplir antes de que el Señor vuelva: el servicio misionero. Elena de
White dice lo siguiente:

"Es el plan del cielo que los que han recibido la luz, la impartan a los que todavía están en tinieblas" (Servicio cristiano,
p. 12).

Cuando una persona se bautiza nace en el reino de Dios y, consecuentemente, llega a ser un seguidor de Cristo, un
discípulo. En el mismo libro la sierva del Señor continúa diciendo:

"Cada verdadero discípulo nace en el reino de Dios como un misionero" [Ibíd. p.14).

La bendición del trabajo misionero

Esto nos indica que cuando preparamos una persona para ayudarla a entregar su vida a Cristo, a medida que vaya
captando el plan de salvación, también debemos inspirarla para que sea misionera y comparta con otros la fe y la
esperanza que está desarrollando. Es fundamental integrar al nuevo creyente al trabajo misionero antes que se
bautice. Si lo hace después que pase el primer amor, le costará cada vez más.

Es un gran error dejar a un recién bautizado sin asignarle alguna actividad relacionada con el servicio misionero. Lo
antes posible necesitamos ocuparlos en los programas que la iglesia tiene para extender el reino. Este hábito
saludable y vitalizador llenará el vacío que deja en la vida de una persona el abandono de las prácticas que son
propias de la vida mundana. Una forma positiva de evitarle al creyente el sentimiento de soledad, tristeza y desánimo
es proveerle actividades que ocupen su tiempo y que le proporcione satisfacción y alegría.

Preparar a las personas nuevas en la fe para el trabajo misionero es introducirlas en una actividad para toda la vida.

"El acto de salvar debe ser la obra de la vida de todos los que profesan a Cristo" [Ibíd., p. 14).

Es importante enseñar al creyente para que realice su obra en forma individual, ya que cada uno tiene un circulo en el
cual existe el desafío de testificar en favor de su Salvador. "Cristo encomienda a sus discípulos una obra individual,
tarea que no puede delegar a un poderhabiente" [Ibíd., p. I5) Al principio debemos enseñar a realizar tareas sencillas
que las puedan cumplir sin mayores dificultades. Esto lo hará sentirse útil a Cristo y a la iglesia de la cual ahora forma
parte. Es importante también que la actividad misionera se realice en equipo El trabajo en grupo evita o reduce el
temor y la ansiedad y facilita el aprendizaje

Tenemos hermanos que no participan del trabajo misionero, e incluso, muchas veces los criticamos por no integrarse
a esta actividad. Si investigáramos la causa quizá descubriríamos que en el pasado cuando eran nuevos en la fe, se los
envió a algún trabajo misionero solos y sin una preparación adecuada. A1 no conseguir resultados positivos, los
creyentes deciden dejar de participar. EL Señor enseñó el trabajo en pareja como el mejor método para la actividad
misionera de todos los tiempos.

"Ninguno fue enviado solo, sino que el hermano iba asociado a1 hermano, el amigo con el amigo. Así podían ayudarse
y animarse mutuamente... En nuestro propio tiempo la obra de evangelización tendría mucho más éxito si se siguiera
fielmente este ejemplo" [Ibíd., p.160).

La importancia de los cursos de capacitación

Por lo menos una vez por mes la dirección misionera de la iglesia debe ofrecer un programa de capacitación para que
las personas puedan aprender diferentes métodos de compartir la fe. Las clases para enseñar técnicas de
evangelización no tienen que ser complicadas y de larga duración. Una hora de teoría seguida de la práctica en
terreno es más útil que los cursos complicados "Muchos trabajarían con gusto si se les enseñara cómo empezar.
Necesitan ser instruidos y alentados. Cada iglesia debe ser una escuela práctica para obreros cristianos" (Ibíd., p. 75).

Los cursos deberían abarcar un amplio espectro para que cada uno pueda elegir un trabajo misionero que se adapte a
sus fines y preferencias. El consejo inspirado dice:

"... que nadie lleve una vida sin propósito, sino que todos realicen lo que pueden hacer con su propia capacidad..."
(Ibid., p. 79).

Los cursos que al principio son más necesarios tienen que ver con la obra entre familiares, amigos y compañeros de
trabajo. Como los nuevos feligreses están muy presionados por su ambiente social, la iglesia tiene la responsabilidad
de darles las herramientas para que pueda testificar en su propio medio.

Compartimos el siguiente orden para alcanzar a los demás: El orden correcto de presentar las cosas es: 1º Testimonio,
2º Conocer a Cristo, 3º Doctrina.

Testimonio. Muestra los beneficios que Cristo trae a la vida. En el que lo escucha hace nacer el deseo de disfrutar la
misma experiencia.

Conocer a Cristo. Hace que la persona se enamore de Jesús y decida entregar su vida para que Jesucristo sea su
Salvador.

Doctrina. Orienta la forma de pensar y actuar del creyente. La doctrina no salva, salva Jesús. Pero practicarla es sólo
para los que siguen a Cristo; para los otros es una carga.

Una terapia efectiva

Enviar por correo electrónico

Escribe un blog

Compartir con Twitter

Compartir con Facebook

Entrada más reciente Entrada antigua Página principal

0 comentarios:
Publicar un comentario en la entrada

Suscribirse a: Enviar comentarios (Atom)

SOCIAL PROFILES

TwitterFacebookGoogle PlusLinkedInRSS FeedEmail

Search

Popular

Etiquetas

Archivos

El hacha que flotó (2 Reyes 6:1-6)

Lecciones y principios "Los hijos de los profetas..." El primer versículo nos detalla que esta vez , el grupo, era de
hijos ...

El Apocalípsis de Elías

El Apocalípsis de Elías, fue el nombre de la segunda semana de énfasis espiritual direccionado a la mayordomía
cristiana. Del 10 al 16 ...

Acerca de mi

Gerson Vega Falcón Casado con: Milagro Arenas Huamán. Lic. Religión y Salud Publica (Universidad Peruana Unión)
Pastor de la Iglesi...

SEGUIR EN FACEBOOK

SUCRIBCIÓN YOUTUBE

SEGUIR EN TWITTER
VISITANTES

FORMULARIO DE CONTACTO

Nombre

Correo electrónico *

Mensaje *

Enviar

Copyright © 2016 Evangelismo para HOY | Powered by Blogger

Design by NewWPThemes | Blogger Theme by Lasantha - Premium Blogger Themes | NewBloggerThemes.com

Você também pode gostar