Você está na página 1de 1

“El único hombre que no se equivoca es el que nunca hace nada”

(Goethe).
Solemos asociar la palabra error a fracaso, debilidad, falta de
capacidad, etc. todas ellas connotaciones negativas. Pero ¿no es
cierto que para llegar a donde queremos necesitamos evaluar si el
camino es transitable o no?. Necesitamos poner a prueba nuestros
conocimientos, y la única manera de hacerlo es a través de la
acción, independientemente de las consecuencias que obtengamos.
Entonces, ¿el error nos perjudica o nos ayuda a avanzar?.
Sin error no se avanza, necesitamos de él para seguir creciendo.
Un ejemplo claro lo encontramos en nuestra infancia, cuando
nuestros padres nos enseñan a montar en bicicleta. Desde que lo
probamos la primera vez, hasta que dominamos el pedaleo, nos
hemos caído unas cuantas veces. Sin ese ensayo – error donde
ponemos a prueba nuestra coordinación, nuestro equilibrio y
nuestro entusiasmo por dominar la técnica, nunca hubiésemos
conseguido aprender como montar en bici y la libertad que nos
aporta ese sentir el viento en la cara.
Si sientes que no toleras los errores, convirtiéndote en tu mayor
crítico, te sientes culpable por no obtener lo que buscas, adquieres
miedo a enfrentarte a situaciones donde no te sientes seguro y
decides no intentarlo, necesitas trabajar sobre el concepto de lo que
significa el error.

Você também pode gostar