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Definición
CLASIFICACIÓN
Existen varias clasificaciones de las quemaduras, en función de diversos criterios: el agente
que las produce, la extensión de la superficie quemada, la profundidad y la localización de
dichas lesiones.
Si la clasificación la establecemos según el agente que las produce, nos encontramos con
los tipos de quemaduras que se detallan en la Tabla 1.
SEGÚN LA ETIOLOGIA:
La etiología de la quemadura tiene importancia especialmente en la primera actuación, en la
urgencia y la emergencia.
Quemaduras térmicas: producidas por la acción del calor.
• Escaldadura: por líquidos calientes. Suelen ser limpias, superficiales, pero extensas.
• Llamas: se producen por contacto directo con las llamas del fuego. Son quemaduras más
sucias.
• Contacto: el mecanismo son los sólidos calientes. Suelen ser limitadas y profundas.
• Por fricción: La quemadura se produce por el rozamiento brusco de la piel con otra
superficie.
Quemaduras eléctricas: se producen por la acción directa de la corriente eléctrica o
calor que genera al pasar por los tejidos. La resistencia de cada tejido es inversamente
proporcional a la cantidad de agua que contiene. Pueden ser:
• De bajo voltaje (<1.000 V), produce escasa destrucción de tejidos. Riesgo de parada
cardíaca.
• De alto voltaje (>1.000 V), presenta gran destrucción de tejido en los puntos de contacto y
en las estructuras internas cercanas al recorrido de los huesos largos. Pueden provocar
parada cardíaca, alteración del ritmo, fracturas, rabdiomiolisis y síndrome compartimental.
Se debe realizar monitorización cardíaca y derivar a una unidad de quemados.
Quemaduras por flash eléctrico: por causa de la llamarada que se suele producir en un
cortocircuito. Su tratamiento difiere de la quemadura producida por la corriente eléctrica.
Quemaduras químicas: producidas por sustancias ácidas o básicas y sustancias corrosivas
que alteran el pH de los tejidos. La gravedad de la quemadura dependerá de la naturaleza
de la sustancia, de su concentración y el tiempo de contacto. Deben derivarse todas a un
centro especializado.
Quemaduras radioactivas: producidas por las radiaciones ionizantes (rayos X, rayos
gamma, etc.) y no ionizantes como la radiación solar, ultravioleta, láser, microondas,
radiación infrarroja, etc.
Quemaduras por frío: el efecto del frío extremo en los tejidos produce vasoconstricción y
solidificación del agua del interior de las células, lo que produce necrosis tisular. Las lesiones
afectan sobre todo a zonas acras (dedos, orejas y nariz).
SEGÚN SU PROFUNDIDAD
La profundidad de una herida por quemadura está determinada por los elementos de la piel
que han sido dañados o destruidos. La profundidad de la quemadura es el resultado de la
combinación de la temperatura del agente quemador y la duración del contacto. Las
quemaduras se clasifican en superficial, de espesor parcial o de todo el espesor cutáneo.
Las características de las quemaduras se describen a continuación, se resumen en la tabla
17-2.
Quemaduras superficiales
Una quemadura superficial afecta únicamente a la capa epidérmica de la piel. Este tipo de
quemaduras son, con mayor frecuencia, el resultado de daños por quemaduras solares, luz
ultravioleta, un fogonazo leve (de una ignición súbita o explosión) o una quemadura por
radiación leve asociada a tratamiento de radioterapia oncológica. Dado que la piel permanece
intacta, este grado de quemadura no es tenido en cuenta en los cálculos de estimación de
lesión por quemadura. El color de la piel varía de rosa a rojo brillante y puede haber un ligero
edema sobre la zona quemada.
Las quemaduras superficiales que afectan a una superficie corporal grande pueden presentar
distermia, cefalea, náusea y vómitos. La lesión suele curar en 3 a 6 días, apareciendo
sequedad y descamación de la capa externa de la piel. No se forma cicatriz. Las quemaduras
superficiales se tratan con analgésicos suaves y con la aplicación de lociones hidrosolubles.
Las quemaduras superficiales extensas, especialmente en ancianos, pueden requerir
fluidoterapia intravenosa.
Quemadura de espesor parcial
Las quemaduras de espesor parcial pueden ser subdivididas en quemaduras de espesor
parcial superficial y de espesor parcial profundas. La clasificación depende de la profundidad
de la quemadura. Una quemadura de espesor parcial superficial afecta a toda la dermis y a
sus papilas. Las causas pueden incluir una exposición breve a una llamarada, a un agente
químico disuelto o el contacto con una superficie caliente. Esta quemadura se presenta
frecuentemente de color rojo vivo, con una apariencia húmeda y brillante y con formación de
ampolla. El área quemada blanquea con la presión y la sensibilidad al tacto y al dolor
permanece intactas. El dolor como consecuencia de la temperatura y el aire suele ser
importante. Estas lesiones curan en 21 días, con cicatrización mínima o sin ella, pero con
cambios frecuentes en la pigmentación. Se administran analgésicos y, si el área ampollosa
se rompe, se pueden utilizar sustitutos cutáneos.
Una quemadura de espesor parcial profunda también afecta a toda la dermis, pero se
extiende más profundamente que una quemadura parcial superficial. Los folículos pilosos,
las glándulas sebáceas y las glándulas sudoríparas superficiales permanecen intactas
(Porth, 2005). Líquidos o sólidos calientes, llamaradas, llama directa, energía radiante
intensa o agentes químicos pueden causar este nivel de herida por quemadura. La superficie
de la quemadura aparece pálida y de aspecto céreo, y puede estar seca o húmeda. Pueden
aparecer ampollas grandes y de fácil rotura o ampollas planas, secas, con aspecto de papel.
El relleno capilar está disminuido y la sensibilidad a la presión profunda se mantiene. La
lesión es menos dolorosa que en una quemadura de espesor parcial superficial, pero puede
haber áreas de dolor y de disminución de la sensibilidad. Las quemaduras de espesor parcial
profundas con frecuencia precisan más de 21 días para curar y, si la necrosis se extiende a
regiones más profundas, pueden convertirse en una lesión de todo el espesor cutáneo. Es
posible la aparición de contracturas, cicatrices hipertróficas y disfuncionalidad Puede ser
necesaria una resección con injerto, con el fin del disminuir la cicatrización y la pérdida de
funcionalidad.
Quemadura de espesor completo
Una quemadura de espesor completo afecta a todas las capas de la piel, incluidas la
epidermis, la dermis y los apéndices epidérmicos. La lesión se puede extender al tejido
adiposo subcutáneo, al tejido conjuntivo, músculo y hueso.
Las causas de las quemaduras de espesor completo son contactos prolongados con llamas,
vapor, agentes químicos o corriente eléctrica de alto voltaje. Dependiendo de la causa de la
lesión, la herida puede aparecer pálida, cérea, amarilla, marrón, veteada, carbonizada o de
un rojo que no blanquea.
La superficie de la lesión está seca, con aspecto de cuero y firme al tacto. Por debajo pueden
visualizarse vasos sanguíneos trombosados. No hay sensación de dolor ni sensibilidad táctil
superficial, ya que los receptores nociceptivos y táctiles han sido destruidos. Las quemaduras
de espesor completo requieren injertos cutáneos para curar.
Clasificando las quemaduras en función de la profundidad que abarca la lesión,
tradicionalmente se establecían grados (1º, 2º, 3º y 4º). Hoy en día, se considera más
correcta su clasificación según las capas de piel afectadas. En la Tabla 2, se exponen las
características de cada una de ellas.
Tipo y grado
La profundidad de la lesión se refiere a los distintos estratos de la piel y demás tejidos
subcutáneos afectados, indica el grado de una quemadura. El grado por sí solo no es
sinónimo de gravedad.
Es importante resaltar que la evaluación inicial de la profundidad de las quemaduras es con
frecuencia un ejercicio difícil debido al carácter dinámico que presentan durante las primeras
48-72 horas, por lo que se debe valorar de nuevo a los 2 o 3 días.
Quemaduras epidérmicas o de primer grado
La lesión afecta parcialmente la epidermis.
Son las más superficiales y dolorosas, afectando únicamente a la epidermis.
Exteriormente se distinguen por ser lesiones eritematosas, levemente inflamatorias, donde
se conserva la integridad de la piel. Los ejemplos más clásicos son los de origen solar o por
escaldadura de agua.
Quemaduras dérmicas superficiales o de segundo grado superficial
La lesión afecta a todos los estratos epidérmicos, llegando hasta la dermis papilar. No afecta
a la dermis reticular ni a la raíz de los folículos pilosebáceos. Quedan islotes de células
epiteliales en las crestas epidérmicas y en el interior de las glándulas y folículos para facilitar
la reepitelización.
Dañan el estrato dérmico de forma parcial, afectando sólo dermis papilar. Con frecuencia
aparecen flictenas o ampollas intactas como resultado del edema subyacente. Son también
dolorosas y de aspecto rosáceo y si se retiran las flictenas la imagen es clásicamente descrita
como un “rocío hemorrágico” (exudativas e hiperémicas).
Un reconocido sistema para describir una lesión por quemadura, desarrollado por la
American Burn Association, utiliza la extensión y la profundidad de la quemadura para
clasificarlas como menores, moderadas o mayores (tabla 17-3).