Dos botones de muestra de una nueva Ley de Propiedad Industrial

Promover el reemplazo de la actual Ley N° 19.039 de Propiedad Industrial, por una normativa moderna y
eficiente que permita hacer trámites de marcas, patentes y diseños industriales de forma más simple,
rápida y a un menor costo es lo queremos lograr en el Instituto Nacional de Propiedad Industrial, INAPI.
Nuestro Proyecto de Ley busca incentivar la innovación, transferir el conocimiento y permitir a los
consumidores distinguir de mejor manera productos y servicios en el mercado. Quiero dar dos ejemplos
de ello, uno relativo a las marcas y otro a los diseños industriales. Con el fin de asegurar la indisolubilidad
entre marca, objeto a distinguir y uso en el mercado, se ha contemplado en el Proyecto de Ley la
caducidad de las marcas por falta de su uso real y efectivo en el territorio nacional por parte del titular
registral o de un tercero con su consentimiento.
Con ello, INAPI busca impedir el bloqueo del sistema de protección marcaria debido a la saturación registral
de meros derechos formales, evitando de esta manera las posibles barreras de entrada que se generan a raíz
del registro de marcas carentes de uso. El Proyecto de Ley impone al titular registral la carga de hacer uso de
su signo, con el objeto de garantizar que todo registro cuente con un producto o servicio efectivamente
transado en el mercado, sin perjuicio de que existan causas válidas que justifiquen el no uso de la misma.

De esta forma, se incurrirá en una causal de caducidad si transcurridos cinco años a partir de la fecha de
concesión del registro, la marca no hubiese sido objeto de un uso real y efectivo dentro del territorio
nacional, para distinguir los productos o servicios para los cuales haya sido concedida, por el titular o por un
tercero con su consentimiento; o, si dicho uso se hubiese suspendido de forma ininterrumpida por el mismo
periodo.

El requisito de uso es una exigencia que prácticamente todos los países contemplan en su legislación
marcaria, estando Chile rezagado en este tema y tiene como finalidad evitar que marcas registradas y sin uso
por un tiempo prudente impidan el ingreso al mercado de personas o compañías que quieran utilizar
denominaciones, ya sea idénticas o similares, creando una barrera a la competencia. Es decir, el registro de
marcas debe reflejar efectivamente la realidad del mercado ya que esto favorece la libre competencia y la
creación de nuevos negocios.

En el caso de los diseños industriales, la legislación actual no favorece a los inventores y diseñadores
nacionales. Los diseños industriales protegen la apariencia de objetos funcionales, sea por su forma,
configuración geométrica, ornamentación o una combinación de éstas. Actualmente, el procedimiento
para la tramitación de estos diseños se realiza conforme a las reglas aplicables a las patentes de
invención, es decir, con plazos y formalidades que no se condicen con su naturaleza. Esto implica altos
costos y largos tiempos de tramitación, que en muchos casos superan los dos años, lo que los convierte
en una herramienta inútil para el fomento de estas creaciones en nuestro país. El diseño industrial
corresponde a un bien intangible de vida útil breve y de fácil copia, por lo que un procedimiento de
concesión como el actual no se aviene a su naturaleza.
Por esto, la propuesta legal establece un procedimiento nuevo destinado a favorecer la eficacia en la
tramitación y, de esta forma, ajustar el procedimiento a las necesidades de los inventores y diseñadores
nacionales. Contar con un sistema expedito para estos derechos es especialmente importante si se
pretende que los emprendedores e innovadores nacionales protejan sus creaciones e innovaciones, por
lo que las modificaciones que introduce nuestro Proyecto de Ley son esenciales para beneficiar a los
solicitantes.
 Maximiliano Santa Cruz Scantlebury
Director Nacional
Instituto Nacional de Propiedad Industrial -INAPI