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INTRODUCCION
OBJETIVOS
ANALISIS Y RESULTADOS
CONCLUSIONES Y RECOMENDACIONES
BIBLIOGRAFIA
ROCAS IGNEAS
Inicialmente sabemos que las rocas ígneas se forman por la cristalización del
magma, haciéndose útil aclarar que un magma es una mezcla natural fundida
de materiales petrogeneticos en solución mutua(principalmente silicatos) y
algunos volátiles(a menudo vapor de agua) que se mantiene en solución por
la acción de la presión; en otras palabras roca ígnea es aquella que ha
solidificado a partir de sustancias calientes fundidas, las que con mayor
seguridad pueden llamarse rocas ígneas aquellas que han solidificado como
lavas superficiales en tiempos históricos, por ejemplo, las coladas de lava
del vesubio.
Según el modo de presentarse las rocas ígneas o magmáticas en la superficie
y en la corteza terrestre se distingues dos grandes tipos:
Las rocas extrusivas, efusivas o
volcánicas: originadas por el rápido enfriamiento de los magmas que
llegan a la superficie terrestre en los procesos volcánicos; se distinguen:
Lavas: masas magmáticas parcialmente desgasificadas, que
dan lugar a las coladas, domos, pitones, lavas almohadilladas.
Piroclásticos: fragmentos que caen en estado sólido en las
zonas próximas a los volcanes y que incluyen cenizas, lapillo y bombas
volcánicas.
Las rocas intrusivas: originadas a partir del magma
que se ha enfriado y solidificado en el interior de la corteza, llegan a la
superficie terrestre mediante procesos orogénicos
(deformaciones tectonicas) o mediante proceso externos de erosión o
denudación. Se distinguen dos tipos:
Rocas plutonicas: cuya forma de afloramiento característico es el
plutón, cuerpo intrusito de grandes dimensiones, de geometría muy
diversa y que ocupa los núcleos de los orogenos; entre otras, incluye las
rocas graníticas.
Rocas hipoabisales, subvolcanicas o filonianas: Que se presentan en
forma de filones o diques (roca ígnea intrusiva discordante en forma
tabular), rellenando grietas. Son mucho menos abundante que
las plutonicas y se encuentra casi siempre, asociadas a ellas en los
grandes plutones; incluye las pegmatitas, las aplitas,
los porfidos y lamprofidos.
Granito: son sin duda, las rocas plutonicas más abundantes y los
componentes fundamentales de la corteza continental. En general son
rocas acidas, con mas de un 70% de SiO2, de textura granuda y con cada
uno de sus componentes minerales bien perceptibles a simple vista. Los
minerales mayoritarios, todos ellos silicatos, son el cuarzo, los
feldespatos (en forma de ortosa o de plagioclasa) y las micas, como la
biotita o mica negra y la moscovita.
Usos: se utiliza para adoquines, bordillos y mojones y tambien para grava
(triturado, anguloso). Los granitos coloreados, son buscados para
revestimiento de fachadas, embaldosados de suelos o para esculturas.
PROCEDIMIENTO
Muestra Nº 1
Composición
- Componentes esenciales
- Claros: plagioclasa
Cuarzo
- Oscuros: Anfíbol y piroxeno
- Textura: Piroclastica
Muestra Nº 2
Composición
- Componentes esenciales
- Claros: plagioclasa
Muestra Nº 3
Composición
- Componentes esenciales
- Claros: plagioclasa
- Textura: afanitica
- Nombre: Andesita
Muestra Nº 4
Composición
- Componentes esenciales
- Claros: ortoclasa
Plagioclasa
Cuarzo
- Nombre: Granito
Muestra Nº 5
Composición
- Componentes esenciales:
- Claros: plagioclasa
Cuarzo
- Textura: faneritica
- Nombre: Granodiorita
Muestra Nº 6
Composición
- Componentes esenciales:
- Claros: Cuarzo
Plagioclasa
- Textura: faneritica
- Nombre: Cuarzodiorita
Muestra Nº 7
Composición
- Componentes esenciales:
- Claros: plagioclasa
- Textura: porfiritica
- Nombre: Basalto
CONCLUSIONES Y RECOMENDACIONES
Procesos sedimentarios
Enciclopedia Britannica
Texturas
Aunque las características texturales de las rocas sedimentarias son distintas
lógicamente de las de las rocas ígneas y metamórficas (en particular las referidas
a procesos genéticos), algunos términos descriptivos se utilizan indistintamente,
tales como texturas granudas, microcristalinas, criptocristalinas, etc. A
continuación se describen brevemente.
De los cinco tipos texturales básicos, las rocas sedimentarias presentan, según su
origen, los tipos clástico (rocas detríticas en sentido amplio) y secuencial (rocas
organógenas y de precipitación química), o una combinación de ambos.
Rocas detríticas
Todas las rocas detríticas presentan textura clástica, esto es, formadas
por clastos embutidos en una matriz de grano más fino, y pueden estar
cementadas o no por material ortoquímico y/o diagenético (formado con
posterioridad al depósito del sedimento). El cemento suele estar formado por
material carbonatado, silíceo o ferruginoso como casos más generales.
Las características que definen la textura de las rocas sedimentarias detríticas se
tratan brevemente a continuación.
Madurez
Existen dos tipos de madurez.
Madurez mineralógica, referida al grado de estabilidad de los componentes
minerales encontrados en el sedimento. Un sedimento mineralógicamente maduro
es aquel que contiene una proporción elevada de minerales o fragmentos de rocas
estables químicamente en las condiciones sedimentarias (e.g. arcillas) y/o
físicamente resistentes a la alteración (e.g. cuarzo, circón, turmalina, apatito...);
un ejemplo sería areniscas cuarcíticas. Un sedimento inmaduro
mineralógicamente es aquel que contiene proporciones elevadas de minerales o
fragmentos de rocas inestables en las condiciones de sedimentación (e.g.
feldespatos); un ejemplo sería areniscas feldespáticas o arcosas.
Madurez textural, referida al contenido en material fino, al grado de redondez de
los clastos y dispersión de los tamaños de grano del sedimento.
Sedimentos inmaduros texturalmente son aquellos que tienen más del 5% de
matriz fina, los cantos están poco redondeados y la dispersión de los tamaños de
grano es elevada (coeficiente alto). Sedimentos supermaduros son aquellos que
no presentan fracción fina, los cantos están bien redondeados y la dispersión de
los tamaños de grano es baja (coeficiente bajo). Entre ambos existen términos
intermedios denominados submaduros y maduros.
Matriz y cemento
Todas las rocas sedimentarias detríticas presentan, además de clastos (fragmentos de
minerales y/o rocas erosionadas), una matriz de grano más fino y un cemento que
dan cohesión al sedimento. Así, es normal que las ruditas presenten una matriz de
tamaño grava y/o fango, y las areniscas una matriz de tamaño fango. La
composición de los granos de la matriz suele ser similar a la de los clastos que
sustenta, ya que su formación es contemporánea con la sedimentación de los
clastos, excepto cuando el tamaño es de tipo fango, en cuyo caso está compuesta
por minerales de la arcilla y oxhidróxidos de Fe. La abundancia de matriz, no
obstante, es muy variable, pudiendo en algunos casos ser prácticamente
inexistente. Esto implica que las propiedades físicas y mecánicas de las rocas
puedan variar bastante para un mismo tipo de roca.
El cemento es un material formado con posterioridad al depósito de los clastos y la
matriz, resultante de procesos de precipitación a partir de soluciones acuosas
iónicas o coloidales que circulan e interaccionan con las rocas. Los cementos
pueden tener un tamaño de grano variable, mayor o menor que el de los clastos
y/o matriz, según sea su naturaleza y el proceso genético que los formó. Su
existencia en las rocas detríticas es uno de los factores que producen una
reducción en su porosidad y, en general, un mayor grado de resistencia mecánica
y de cohesión entre sus componentes clásticos y matriz siempre que la naturaleza
del cemento se adecuada. Por lo tanto, los cementos ejercen una función
de consolidante natural.
Los cementos más abundantes son carbonáticos, silíceos o ferruginosos:
Los cementos silíceos están constituidos por cuarzo microcristalino,
sílice microcristalina o criptocristalina (chert), o material amorfo
opalino. Las rocas cementadas por las variedades de sílice suelen
presentar características mecánicas que le imprimen alta resistencia
a la deformación (son rocas muy duras y resistentes a los procesos
de alteración), siempre que todos los poros estén rellenos y no exista
una matriz fina de carácter arcilloso.
Los cementos carbonáticos suelen estar compuestos por calcita
(ver cementos en el apartados de rocas carbonatadas).
Los cementos ferruginosos están compuestos por óxidos y
oxhidróxidos de Fe (y algo de Mn). Las variedades mineralógicas
mayoritarias presentes son una combinación de hematites (Fe2O3),
goetita (HFeO2), lepidocrocita (FeO(OH)) y limonita (Fe(OH) 3). La
cementación con materiales ferruginosos suele ser incompleta.
Aunque la fracción arcillosa de las rocas detríticas es considerada generalmente
como matriz, en algunos casos puede considerarse cemento cuando su origen no
es detrítico (en general, diagenético).
Morfológicamente, los cementos se pueden clasificar en:
Cementos de contacto: Una pequeña película de material mineral
que envuelve y une los granos entre ellos en los puntos de contacto.
La porosidad de las rocas sedimentarias con este tipo de cementos
es alta, a menos que el empaquetamiento sea completo o suturado.
Cementos de poros: El cemento rellena los poros entre los granos
y matriz, independientemente de que exista un cemento de contacto
previo entre los granos.
Cementos basales: El cemento de poros se puede denominar basal
si ocupa grandes volúmenes de la roca con empaquetamientos
flotantes de los granos. En estos casos, lo normal es que la roca haya
sufrido un proceso de cementación postdeposicional que ha afectado
a toda o parte de la matriz (como es común en algunas rocas
carbonatadas).
Porosidad y empaquetamiento
Características importantes de las rocas detríticas son la porosidad y el
empaquetamiento de los clastos.
La porosidad es el volumen total de la roca ocupado por espacios vacíos (rellenos
de aire), y se expresa en porcentajes en volumen:
Porosidad: (Volumen de poros)/(Volumen total) * 100
Desde un punto de vista práctico, la porosidad que se mide es la porosidad abierta,
esto es, aquella fracción de la porosidad total definida por poros intercomunicados
entre sí. Esta porosidad da una idea de la permeabilidad del material a soluciones
fluidas (líquidas y gaseosas).
El empaquetamiento de los clastos se define como la proporción de espacios vacíos
o rellenos por cemento o fracción arcillosa fina existentes entre los granos o
clastos. Esta característica controla (en parte) la porosidad de la roca y la
distribución del tamaño de poro, aspectos que son esenciales al evaluar el
transporte de agua por el interior del sistema poroso de las rocas de construcción
y ornamentación. El empaquetamiento se mide por la densidad de
empaquetamiento, definida en relación con una línea hipotética trazada en la
roca (generalmente en lámina delgada) como la longitud de la línea que está ocupa
por clastos partido por la longitud total de la línea. Los tipos de empaquetamientos
son flotantes (clastos suspendidos), puntual (clastos parcialmente suspendidos
y parcialmente con contactos puntuales), tangente (clastos en contactos
puntuales y lineales pero con espacios entre ellos), completo (clastos totalmente
en contacto) y suturado (clastos totalmente en contacto e interpenetrados,
desarrollado por procesos diagenéticos).
Rocas intermedias
Existen rocas sedimentarias intermedias entre las detríticas y las de precipitación bio-
geo-química. Entre ellas, las más abundantes son las margas, en sentido general.
Estas rocas están compuestas por carbonatos y material detrítico arcilloso en
proporciones variables, pero en general en torno al 50 % respectivamente. Son
rocas generalmente poco compactas, formadas en ambientes sedimentarios
variados pero en general más profundos que los correspondientes a las rocas
carbonatadas.
Procesos sedimentarios
Básicamente, corresponden a erosión (mecánica, química y biológica) en áreas
fuente continentales, transporte por corrientes de agua (ríos), hielo (glaciares),
o atmósfera (viento), depósito en cuencas deprimidas (lagos, deltas, estuarios,
plataformas marinas relativamente someras, fosas y cuencas abisales), y
compactación y diagénesis durante la formación en estas cuencas de pilas
sedimentarias estratificadas que pueden llegar a tener miles de metros de
espesor.
Enciclopedia Britannica
Texturas
Aunque las características texturales de las rocas sedimentarias son distintas
lógicamente de las de las rocas ígneas y metamórficas (en particular las referidas
a procesos genéticos), algunos términos descriptivos se utilizan indistintamente,
tales como texturas granudas, microcristalinas, criptocristalinas, etc. A
continuación se describen brevemente.
De los cinco tipos texturales básicos, las rocas sedimentarias presentan, según su
origen, los tipos clástico (rocas detríticas en sentido amplio) y secuencial (rocas
organógenas y de precipitación química), o una combinación de ambos.
Rocas detríticas
Todas las rocas detríticas presentan textura clástica, esto es, formadas
por clastos embutidos en una matriz de grano más fino, y pueden estar
cementadas o no por material ortoquímico y/o diagenético (formado con
posterioridad al depósito del sedimento). El cemento suele estar formado por
material carbonatado, silíceo o ferruginoso como casos más generales.
Las características que definen la textura de las rocas sedimentarias detríticas se
tratan brevemente a continuación.
Madurez
Existen dos tipos de madurez.
Madurez mineralógica, referida al grado de estabilidad de los componentes
minerales encontrados en el sedimento. Un sedimento mineralógicamente maduro
es aquel que contiene una proporción elevada de minerales o fragmentos de rocas
estables químicamente en las condiciones sedimentarias (e.g. arcillas) y/o
físicamente resistentes a la alteración (e.g. cuarzo, circón, turmalina, apatito...);
un ejemplo sería areniscas cuarcíticas. Un sedimento inmaduro
mineralógicamente es aquel que contiene proporciones elevadas de minerales o
fragmentos de rocas inestables en las condiciones de sedimentación (e.g.
feldespatos); un ejemplo sería areniscas feldespáticas o arcosas.
Madurez textural, referida al contenido en material fino, al grado de redondez de
los clastos y dispersión de los tamaños de grano del sedimento.
Sedimentos inmaduros texturalmente son aquellos que tienen más del 5% de
matriz fina, los cantos están poco redondeados y la dispersión de los tamaños de
grano es elevada (coeficiente alto). Sedimentos supermaduros son aquellos que
no presentan fracción fina, los cantos están bien redondeados y la dispersión de
los tamaños de grano es baja (coeficiente bajo). Entre ambos existen términos
intermedios denominados submaduros y maduros.
Matriz y cemento
Todas las rocas sedimentarias detríticas presentan, además de clastos (fragmentos de
minerales y/o rocas erosionadas), una matriz de grano más fino y un cemento que
dan cohesión al sedimento. Así, es normal que las ruditas presenten una matriz de
tamaño grava y/o fango, y las areniscas una matriz de tamaño fango. La
composición de los granos de la matriz suele ser similar a la de los clastos que
sustenta, ya que su formación es contemporánea con la sedimentación de los
clastos, excepto cuando el tamaño es de tipo fango, en cuyo caso está compuesta
por minerales de la arcilla y oxhidróxidos de Fe. La abundancia de matriz, no
obstante, es muy variable, pudiendo en algunos casos ser prácticamente
inexistente. Esto implica que las propiedades físicas y mecánicas de las rocas
puedan variar bastante para un mismo tipo de roca.
El cemento es un material formado con posterioridad al depósito de los clastos y la
matriz, resultante de procesos de precipitación a partir de soluciones acuosas
iónicas o coloidales que circulan e interaccionan con las rocas. Los cementos
pueden tener un tamaño de grano variable, mayor o menor que el de los clastos
y/o matriz, según sea su naturaleza y el proceso genético que los formó. Su
existencia en las rocas detríticas es uno de los factores que producen una
reducción en su porosidad y, en general, un mayor grado de resistencia mecánica
y de cohesión entre sus componentes clásticos y matriz siempre que la naturaleza
del cemento se adecuada. Por lo tanto, los cementos ejercen una función
de consolidante natural.
Los cementos más abundantes son carbonáticos, silíceos o ferruginosos:
Los cementos silíceos están constituidos por cuarzo microcristalino,
sílice microcristalina o criptocristalina (chert), o material amorfo
opalino. Las rocas cementadas por las variedades de sílice suelen
presentar características mecánicas que le imprimen alta resistencia
a la deformación (son rocas muy duras y resistentes a los procesos
de alteración), siempre que todos los poros estén rellenos y no exista
una matriz fina de carácter arcilloso.
Los cementos carbonáticos suelen estar compuestos por calcita
(ver cementos en el apartados de rocas carbonatadas).
Los cementos ferruginosos están compuestos por óxidos y
oxhidróxidos de Fe (y algo de Mn). Las variedades mineralógicas
mayoritarias presentes son una combinación de hematites (Fe2O3),
goetita (HFeO2), lepidocrocita (FeO(OH)) y limonita (Fe(OH) 3). La
cementación con materiales ferruginosos suele ser incompleta.
Aunque la fracción arcillosa de las rocas detríticas es considerada generalmente
como matriz, en algunos casos puede considerarse cemento cuando su origen no
es detrítico (en general, diagenético).
Morfológicamente, los cementos se pueden clasificar en:
Cementos de contacto: Una pequeña película de material mineral
que envuelve y une los granos entre ellos en los puntos de contacto.
La porosidad de las rocas sedimentarias con este tipo de cementos
es alta, a menos que el empaquetamiento sea completo o suturado.
Cementos de poros: El cemento rellena los poros entre los granos
y matriz, independientemente de que exista un cemento de contacto
previo entre los granos.
Cementos basales: El cemento de poros se puede denominar basal
si ocupa grandes volúmenes de la roca con empaquetamientos
flotantes de los granos. En estos casos, lo normal es que la roca haya
sufrido un proceso de cementación postdeposicional que ha afectado
a toda o parte de la matriz (como es común en algunas rocas
carbonatadas).
Porosidad y empaquetamiento
Características importantes de las rocas detríticas son la porosidad y el
empaquetamiento de los clastos.
La porosidad es el volumen total de la roca ocupado por espacios vacíos (rellenos
de aire), y se expresa en porcentajes en volumen:
Porosidad: (Volumen de poros)/(Volumen total) * 100
Desde un punto de vista práctico, la porosidad que se mide es la porosidad abierta,
esto es, aquella fracción de la porosidad total definida por poros intercomunicados
entre sí. Esta porosidad da una idea de la permeabilidad del material a soluciones
fluidas (líquidas y gaseosas).
El empaquetamiento de los clastos se define como la proporción de espacios vacíos
o rellenos por cemento o fracción arcillosa fina existentes entre los granos o
clastos. Esta característica controla (en parte) la porosidad de la roca y la
distribución del tamaño de poro, aspectos que son esenciales al evaluar el
transporte de agua por el interior del sistema poroso de las rocas de construcción
y ornamentación. El empaquetamiento se mide por la densidad de
empaquetamiento, definida en relación con una línea hipotética trazada en la
roca (generalmente en lámina delgada) como la longitud de la línea que está ocupa
por clastos partido por la longitud total de la línea. Los tipos de empaquetamientos
son flotantes (clastos suspendidos), puntual (clastos parcialmente suspendidos
y parcialmente con contactos puntuales), tangente (clastos en contactos
puntuales y lineales pero con espacios entre ellos), completo (clastos totalmente
en contacto) y suturado (clastos totalmente en contacto e interpenetrados,
desarrollado por procesos diagenéticos).
Rocas intermedias
Existen rocas sedimentarias intermedias entre las detríticas y las de precipitación bio-
geo-química. Entre ellas, las más abundantes son las margas, en sentido general.
Estas rocas están compuestas por carbonatos y material detrítico arcilloso en
proporciones variables, pero en general en torno al 50 % respectivamente. Son
rocas generalmente poco compactas, formadas en ambientes sedimentarios
variados pero en general más profundos que los correspondientes a las rocas
carbonatadas.
Roca metamórfica
Cuarcita, una forma de roca metamórfica, de la colección del museo de la Universidad de Tartu.
Las rocas metamórficas son las que se forman a partir de otras rocas mediante un
proceso llamado metamorfismo. rocas ígneas, rocas sedimentarias u otras rocas
metamórficas, cuando éstas queda alrededor de 1.500 bar), altas temperaturas (entre 150
y 200 °C) o a un fluido activo que provoca cambios en la composición de la roca,
aportando nuevas sustancias a ésta. Al precursor de una roca metamórfica se le
llama protolito.1
Las rocas metamórficas se clasifican según sus propiedades físico-químicas. Los factores
que definen las rocas metamórficas son dos: los minerales que las forman y las texturas
que presentan dichas rocas. Las texturas son de dos tipos, foliadas y no foliada.
Textura foliada: Algunas de ellas son la pizarra (al romperse se obtienen láminas),
el esquisto (se rompe con facilidad) y el gneis (formado por minerales claros y
oscuros).
Textura no foliada: Algunas de ellas son el mármol (aspecto cristalino y se forman
por metamorfismo de calizas y dolomías), la cuarcita (es blanca pero puede cambiar
por las impurezas), la serpentinita (que al transformarse origina el asbesto) y
la cancagua.
Índice
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Los principales tipos de metamorfismo dependen del carácter de la energía aportada para
su puesta en marcha, que puede ser en forma de calor o en forma de presión:
Otros minerales, tales como olivino, piroxeno, anfíbol, cuarzo, feldespato y mica, pueden
ser identificados en rocas metamórficas, pero no son necesariamente resultado del
metamorfismo, ya que también se forman durante la cristalización de rocas ígneas. Estos
minerales tiene un punto de fusión muy elevado, por tanto son estables a altas
temperaturas y presiones. Durante estos procesos metamórficos, estas rocas pueden ver
alterada su composición química. No obstante, todos los minerales son estables a altas
temperaturas hasta ciertos límites. La presencia de según que tipo de minerales en las
rocas indica la temperatura y presión a la que fue formada.
Rocas metamórficas
Antracit Es un tipo
Hulla, lignito Carbono
a de carbón
Muy dura,
capaz de
Cornea Caliza, arenisca, p
resistir
na izarra
la erosión glaci
al
Se forma
por recristalizac
Cuarcit
Arenisca Cuarzo ión a altas
a
temperaturas y
presión.
Rocas metamórficas
Resultado de
un
Eclogita Basalto, gabro Granate, piroxeno metamorfismo
intenso del
basalto o gabro
Se forma en
las dorsales
Espilita Basalto Albita, clorita, calcita
centro-
oceánicas
Existen muchos
tipos de
Esquist >50 % minerales planos
Pizarra, filita esquisto según
o y alargados
los minerales
que lo forman
Su color azul se
Esquist debe a la
Basalto Glaucofana
o azul presencia de
glaucofana
Metamorfismo
Moscovita, cuarzo, clorit intermedio
Filita Lutita, pizarra
a entre las pizarra
y el esquisto
Presenta
bandas, con
Rocas
capas alternas
Gneis ígneas osediment Cuarzo, feldespato, mica
de minerales
arias
claros y
oscuros
común
en dorsales
oceánicas
Importante roca
ornamental;
el Taj
Mármol Caliza Calcita
Mahal está
hecho de
mármol.
Presenta vetas
sinuosas, fruto
Migmati
de su alto grado
ta
de
metamorfismo