Universidad Nacional de Colombia

Facultad de Artes
Introducción a la Teoría del Arte
Samantha Yaya Morales

Reseña: La alegoría de Artemisia: El arte en transición

“The modern system of art is not an essence or a fate but something we have made. Art as we have
generally understood it is a European invention barely two hundred years old.” (Shiner 2003, p. 3)

En 2001, Larry Shiner, profesor de filosofía, historia y artes visuales de la Universidad de Illinois, tras
una década de trabajo, publica La invención del arte: Una historia cultural, apuntando a dar cuenta de
cómo el imaginario actual de las Bellas Artes en la cultura occidental se ha consolidado poco a poco
desde una serie de transformaciones sociales que han tenido lugar desde el siglo XVIII. Esta corta
reseña se centra específicamente en el capítulo cuarto de la primera parte de su obra (p. 95-117), que
precisamente explora este periodo de transición hacia el moderno sistema del arte que constituyó el
siglo XVII.

La comparación inicial entre el autorretrato de Artemisia y Las Meninas de Velázquez ejemplifica este
estado transicional, en el que la imagen de artesano/artista y la misma categoría de arte empiezan a
cambiar, mostrando como empieza a surgir una aspiración a la elevación de la condición social del
artista, y una intención de destacarse entre, aunque no necesariamente de, los artesanos. En los
campos de la poesía, la música, y la literatura se dieron grandes pasos, como lo fueron el énfasis en
los elementos representativos y expresivos de la creación, el reconocimiento de un mayor estatus
dentro de los circulos de las monarquías y la apertura hacia la critica publica. Lo anterior, sumado a la
paulatina institucionalización de la pintura y la escultura por medio de la creación de academias,
contribuyó al lento quebrantamiento de los cánones imperantes del antiguo sistema del arte.

En torno al concepto de gusto, si bien rondaba una idea clacisista de perseguir modelos e ideales que
permeó hasta esta época, de a poco fue emergiendo “la sensación” como un territorio a explorar que
ampliaba el espectro de lo racional, teniendo a Pascal que hizo la conocida afirmación de que “el
corazón tiene razones que la razón no comprende”, para dar a entender que existía una reacción
natural y espontánea en nosotros, siendo que hasta los no conocedores de las reglas del arte podían
dar respuestas correctas al teatro y la pintura por medio de sus sensaciones, pues existia un “no sé
qué” que resultaba o atractivo o incomodo al apreciar un cuadro o un poema, por ejemplo; palabras
más, palabras menos, se empezaba a asomar timidamente la actual idea de lo estético.

A manera personal, considero que en este fragmento de su obra el autor, valiendose de datos
obtenidos desde el análisis histórico de diversas disciplinas, señala de manera muy inteligente
aquellos cambios y acontecimientos más trascendentales que tuvieron lugar en el siglo XVII y
principios del XVIII, y que progresivamente labraron el camino hacia la concepción de Bellas Artes que
predomina en el mundo contemporáneo; reune y desmenuza algunos de los detalles mas jugosos para
entender las múltiples transformaciones y los diferentes contextos de la expresión humana en este
siglo, y deja entrever la evolución de esta hasta configurar la actual idea de Arte, por lo que estoy en
acuerdo con Marc Spiegler cuando afirma en Perspectives on Art del 2011 que es un libro infaltable
para cualquiera que este activo en las artes.