“No necesito decirles, señores, que la situación mundial es muy seria (...).

Al considerar lo que se
precisa para la rehabilitación de Europa, la pérdida física de vida, la destrucción visible de
ciudades, factorías, minas y ferrocarriles, fueron correctamente estimadas, pero se ha hecho obvio
en los últimos meses que esta destrucción visible era probablemente menos seria que la
dislocación de toda la fábrica de la economía europea (...) La verdad de la cuestión es que las
necesidades de Europa para los próximos tres o cuatro años en alimentos y otros productos
esenciales procedentes del exterior, principalmente de América, son tan superiores a su presente
capacidad de pago, que tienen que recibir una ayuda adicional sustancial o enfrentarse con un
deterioro económico, social y político de un carácter muy grave.” Discurso de George Marshall,
1947.

El texto corresponde a las palabras del secretario del Estado norteamericano planteando un plan
para la reconstrucción de Europa. De acuerdo al texto y a la realidad política internacional del
momento, la ayuda norteamericana a Europa era necesaria, especialmente para

A. instruir en el sistema económico que Estados Unidos deseaba imponer sobre Europa.
B. trasladar las deficiencias económicas que vivía Estados Unidos al continente europeo.
C. convencer a los europeos occidentales de las bondades del sistema capitalista liberal.
D. evitar la paralización económica de Europa y frenar la expansión del comunismo en la
zona.
E. evitar las repercusiones de la crisis económica europea en los Estados Unidos.

“Así como el destino me hizo ser la esposa de General Perón, vuestro presidente, me hizo también
adquirir la noción paralela de lo significa ser la esposa del Coronel Perón, el luchador social. No se
podía ser la mujer del presidente de los argentinos, dejando de ser la mujer del primer trabajador
argentino. No se podía llegar al encumbrado e inútil sitial de esposa del General Perón, olvidando
el puesto de tesón, y de lucha, de esposa del antiguo Coronel Perón, el defensor de los
"descamisados". Mensaje de Eva Perón a la mujer argentina. 27/01/1947.

El discurso es uno de los instrumentos del sistema populista muy en boga en Latinoamérica en la
década de 1950. El texto corresponde a Eva Perón, la esposa del populista argentino, Juan
Domingo Perón. En las palabras se pueden apreciar elementos propios del discurso populista, tales
como: I. La crítica al nacionalismo y al discurso anti oligárquico. II. La apelación a la personalidad
del líder carismático. III. La identificación del líder con los intereses del pueblo.

A. Solo I
B. Solo III
C. Solo I y II
D. Solo II y III
E. I, II y III
La singularidad de la guerra fría estribaba en que, objetivamente hablando, no había
ningún peligro inminente de guerra mundial. Más aún: pese a la retórica apocalíptica de ambos
bandos, sobre todo del lado norteamericano, los gobiernos de ambas superpotencias aceptaron el
reparto global de fuerzas establecido al final de la segunda guerra mundial, lo que suponía un
equilibrio de poderes muy desigual pero indiscutido. La economía dominaba o ejercía una
influencia a una parte del globo: sin intentar extender más allá su esfera de influencia por la
fuerza de las armas. Los Estados Unidos controlaban y dominaban el resto del mundo capitalista,
además del hemisferio occidental los oc)anos, asumiendo los restos de la vieja hegemonía
imperial delas antiguas potencias coloniales. En contrapartida, no intervenían en la zona
aceptada como de hegemonía soviética*. +
La Historia del Siglo XX

.De la lectura de las palabras del historiador inglés, es posible establecer que. los años que
trascurren tras la Segunda Guerra Mundial
I. se presentan como un escenario de conflictos bélicos directos entre ambas
potencias.
Una Forma de enfrentamiento ue a tra%és de la ideolog&a propugnada por ambos
bandos, peroque $ue mucho m's e$ecti%a por parte de (stados )nidos.I I I . l o s
con$lictos generados durante el per&odo se deben, en gran
m e d i d a , a l a i n t e r % e n c i * n ideol*gica de (stados )nidos en los territorios de
in$luencia so%iética. + !*lo I- !*lo IIC I IID II III( I, II
III/ . 0 a b i p o l a r i d a d e p r e s a d a e n e l c o n t e t o d e l a " u e r r a F
r & a e s t u % o c a r a c t e r i 2 a d a p o r l a competencia entre las
superpotencias en di%ersos 'mbitos. )no de ellos $ue la llamada
Carrera(spacial. (l !putni3 I, el %ia4e de la perra 0ai3a al espacio o el primer
aluni2a4e 51676 , constitu ene4emplos de esta lucha tecnol*gica. No
obstante, la lucha ideol*gica también se e tendi* haciaotras es$eras de
competencia, entre las que se cuenta5n I. la deporti%a, e4empli$icada en los
8uegos 9l&mpicos.II. el espiona4e, con el desarrollo de organismos como la "-
la CI+.III. el ;lan #arshall su plan de recuperaci*n econ*mica mundial. + !*lo I- !*lo
IIC I IID II III( I, II III<. 0a =poca de la Distensi*n signi$ic* importantes
trans$ormaciones para la $utura pol&ticacontempor'nea. +l respecto, los es$uer2os
desarrollados por ambas superpotencias, de acuerdo alcambio estratégico originado
por el debilitamiento econ*mico militar, tendieron a + aunar criterios en torno a
pol&ticas econ*micas comunes.- re$or2ar la ocupaci*n de territorios ri%ales.C
consensuar pol&ticas respecto al reparto europeo.D desarrollar cumbres bilaterales
de paci$icaci*n plena.( acordar un l&mite a la proli$eraci*n de armas estratégicas,
como los acuerdos salt.>. +dem's de un con$licto pol&tico militar, es correcto decir
que la "uerra Fr&a $ue, esencialmente, + la lucha entre un comunismo pac&$ico un
capitalismo %iolento.- un en$rentamiento ideol*gico entre dos sistemas que
se postularon antag*nicos.C el en$rentamiento entre traba4adores capitalistas.D
la lucha entre el pro ecto de la igualdad en la pobre2a el de la rique2a
indi%idualista.( una competencia entre potencias que, en el $ondo, se consideraban
aliadas