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LEY 29 DE 1982

(febrero 24)
Diario Oficial No. 35.961 de 9 de marzo de 1982
Por la cual se otorga la igualdad de derechos herenciales a los hijos legítimos,
extramatrimoniales y adoptivos y se hacen los correspondientes ajustes a los
diversos órdenes hereditarios.
Resumen de Notas de Vigencia

EL CONGRESO DE COLOMBIA,
DECRETA:
ARTICULO 1o. Adiciónase el artículo 250 del Código Civil con el siguiente inciso:
Los hijos son legítimos, extramatrimoniales y adoptivos y tendrán iguales derechos
y obligaciones.
Jurisprudencia Vigencia

Jurisprudencia Concordante

ARTICULO 2o. El artículo 1040 del Código Civil quedará así:


Son llamados a sucesión intestada: Los descendientes; los hijos adoptivos; los
ascendientes; los padres adoptantes; los hermanos; los hijos de éstos;
el cónyuge supérstite; el Instituto Colombiano de Bienestar Familiar.
Jurisprudencia Vigencia

Concordancias

ARTICULO 3o. El artículo 1043 del Código Civil quedará así:


Hay siempre lugar a la representación en la descendencia del difunto y en la
descendencia de sus hermanos.
Notas de Vigencia

Jurisprudencia Vigencia

Doctrina Concordante

ARTICULO 4o. El artículo 1045 del Código Civil quedará así:


Los hijos legítimos, adoptivos y extramatrimoniales, excluyen a todos los otros
herederos y recibirán entre ellos iguales cuotas, sin perjuicio de la porción conyugal.
Jurisprudencia Vigencia

Concordancias

ARTICULO 5o. El artículo 1046 del Código Civil quedará así:


Si el difunto no deja posteridad, le sucederán sus ascendientes de grado más
próximo, sus padres adoptantes y su cónyuge. La herencia se repartirá entre ellos
por cabezas.
Jurisprudencia Vigencia

No obstante, en la sucesión del hijo adoptivo en forma plena, los adoptantes


excluyen a los ascendientes de sangre; en la del adoptivo en forma simple, los
adoptantes y los padres de sangre recibirán igual cuota.
Notas del Editor

Jurisprudencia Vigencia
Concordancias

ARTICULO 6o. El artículo 1047 del Código Civil quedará así:


Si el difunto no deja descendientes ni ascendientes, ni hijos adoptivos, ni padres
adoptantes, le sucederán sus hermanos y su cónyuge. La herencia se divide la
mitad para éste y la otra mitad para aquéllos por partes iguales.
A falta de cónyuge, llevarán la herencia los hermanos, y a falta de éstos aquél.
Los hermanos carnales recibirán doble porción que los que sean simplemente
paternos o maternos.
Jurisprudencia Vigencia

Concordancias

Doctrina Concordante

ARTICULO 7o. El artículo 1050 del Código Civil quedará así:


La sucesión del hijo extramatrimonial se rige por las mismas reglas que la del
causante legítimo.

ARTICULO 8o. El artículo 1051 del Código Civil quedará así:


A falta de descendientes, ascendientes, hijos adoptivos, padres adoptantes,
hermanos y cónyuges, suceden al difunto los hijos de sus hermanos.
Jurisprudencia Vigencia

A falta de éstos, el Instituto Colombiano de Bienestar Familiar.


Jurisprudencia Vigencia

ARTICULO 9o. El artículo 1240 del Código Civil quedará así:


Son legitimarios:
1o. Los hijos legítimos, adoptivos y extramatrimoniales personalmente, o
representados por su descendencia legítima o extramatrimonial.
2o. Los ascendientes.
3o. Los padres adoptantes.
Jurisprudencia Vigencia

4o. Los padres de sangre del hijo adoptivo de forma simple.


Concordancias

ARTICULO 10. Quedan derogados del artículo 1048 del Código Civil, la Ley 60 de
1935, artículo único y las demás disposiciones que fueren contrarias a la presente
Ley.

ARTICULO 11. Está Ley rige desde su promulgación.


Jurisprudencia Vigencia

Dada en Bogotá, D. E., a los ... días del mes de ...


de mil novecientos ochenta y dos (1982).
El Presidente del honorable Senado de la República,
GUSTAVO DAJER CHADID.
El Presidente de la honorable Cámara de Representantes,
J. AURELIO IRAGORRI HORMAZA.
El Secretario General del honorable Senado de la República,
CRISPIN VILLAZON DE ARMAS.
El Secretario General de la honorable Cámara de Representantes,
ERNESTO TARAZONA SOLANO.
República de Colombia. - Gobierno Nacional.
Bogotá, D. E., 24 de febrero de 1982.
Publíquese y ejecútese.
JULIO CESAR TURBAY AYALA.
El Ministro de Justicia,
FELIO ANDRADE MANRIQUE.
El Ministro de Salud,
ALFONSO JARAMILLO SALAZAR.
QUIÉNES TIENEN DERECHO A HEREDAR
Llega a esta columna del suplemento especializado FINCA RAIZ, una consulta
formulada por el señor Samuel Cuéllar quien expone lo siguiente: El mes pasado
falleció en Medellín un primo, por el lado de mi padre, y, yo soy el familiar más
cercano que le quedaba . Tan pronto conocí la noticia, viajé a esa ciudad y le ayudé
en los trámites y en los gastos funerarios a la señora que convivía con mi primo
desde hace unos seis o siete años aproximadamente. Les debo aclarar que ellos no
estaban casados y tampoco tuvieron hijos
Por: Julio Fernando Rivera

08 de noviembre 1997 , 12:00 a.m.


A la información anterior, agrega el corresponsal: Según tengo entendido, al no
estar casados, a la compañera de mi primo no le corresponde nada dentro de la
sucesión de aquel y, en cambio, al ser el suscrito el único familiar que deja, soy yo
quien debe heredar lo que mi primo haya dejado .
Con base en los apartes aquí transcritos, el señor Cuéllar solicita que en esta
sección se le confirme o rectifique su creencia: RESPUESTA: Si el único objetivo
de la columna de hoy fuera el de contestar a la inquietud del consultante, bastaría
decir que según nuestra legislación, la lista de parientes con derecho a heredar llega
hasta los sobrinos de la persona que muere; por lo tanto, el primo no puede aspirar
a incluirse entre los herederos, por cuanto la ley no le da tal prerrogativa.
Ahora, en lo relativo a la compañera del recientemente fallecido primo del
corresponsal, conviene aclarar que, si aquel nunca estuvo casado con persona
diferente o, por lo menos al momento de morir no tenía sociedad conyugal vigente,
resulta perfectamente viable que, cumpliéndose con los requisitos establecidos en
la Ley 54 de 1990 que reconoció la existencia de las denominadas Uniones
Maritales de Hecho, se pueda demostrar por aquella, la existencia de una sociedad
patrimonial entre no casados, similar, en muchos aspectos, a la sociedad conyugal.
Debe recordarse que para reconocer la existencia de la Unión Marital de Hecho,
deben concurrir los siguientes requisitos: 1- Ser entre un hombre una mujer.
2- Ser singular, o sea, únicamente con determinado hombre o con determinada
mujer.
3- Debe presentarse bien entre personas solteras, o entre casados pero que tengan
la sociedad conyugal disuelta y liquidada.
4- Que la convivencia haya sido permanente y su duración mínima haya llegado a
los dos años.
Si la compañera del primo del señor Cuéllar, cumple con dichos requisitos una vez
reconocida la existencia de la Unión Marital de Hecho, esta tendrá todo el derecho
de reclamar lo que le corresponda dentro de la Sociedad Patrimonial entre no
casados, Hasta allí se estaría respondiendo a la consulta en comento. Sin embargo,
como quiera que, a raíz del artículo publicado en la edición anterior, han llegado
gran número de cartas preguntando sobre distintas situaciones relativas a la
sucesión intestada, o sea, aquella en la que no se dejó testamento, se considera
importante brindar una orientación general a quienes inquieren acerca del tema, y,
por ello, de manera breve se resume a continuación, cuáles son los órdenes
sucesorales: 1- Sin duda, en la escala de prelación, el primer lugar lo ocupan los
descendientes, vale decir, los hijos del difunto ya sean legítimos, adoptivos o
extramatrimoniales reconocidos legalmente.
Los hijos excluyen a todos los demás herederos y, reciben entre ellos la misma
proporción.
Frente a los hijos, el cónyuge sobreviviente no tiene derechos hereditarios
propiamente dichos, pudiendo escoger, únicamente, entre los gananciales y la
porción coyugal, según se explicó en una nota anterior.
2- El segundo lugar es ocupado por los padres, quienes en caso de no existir
descendientes del difunto concurren con el cónyuge. Obviamente de no existir los
padres, pero sí los abuelos, estos ocuparán su lugar compartiendo la herencia con
el viudo o la viuda, según sea el caso. Si quien fallece es un hijo adoptivo, serán los
padres adoptantes y no los biológicos, los llamados a heredar.
3- El tercer puesto, en el cuento de no dejar el causante ni hijos ni padres, lo
ocuparán los hermanos, quienes concurrirán con el cónyuge.
4- Ahora, si el difunto no deja descendientes, ni padres, ni hermanos el cuarto lugar
lo ocuparán los hijos de sus hermanos, o sea, los sobrinos, con quienes, igualmente
concurrirá el viudo o la viuda.
5- Finalmente y, a falta de hijos, padres, hermanos y sobrinos, el llamado a heredar
es el Instituto de Bienestar Familiar.
Para mayor ilustración de los consultantes y de todos los lectores, en la próxima
edición se hará referencia a la proporción en que heredan los distintos sucesores y
se colocarán ejemplos prácticos.

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