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SENTENCIA
RESOLUCIÓN VEINTE
Lima, veintiséis de abril
Del dos mil diecinueve.
VISTOS:
I. ASUNTO
Resulta de autos que el demandante, ZEBELIO KAYAP JEMPEKIT (Apu de la
Organización de Comunidades Fronterizas de Cenepa y Comunero Awajún),
interpuso proceso de amparo contra el INSTITUTO GEOLÓGICO MINERO
METALÚRGICO – INGEMMET y el MINISTERIO DE ENERGÍA Y MINAS -
MINEM, a fin de que se declare la nulidad de las concesiones mineras otorgadas a
favor de diferentes concesiones mineras en territorio indígena Awajún y la nulidad
de las resoluciones aprobatorias del Estudio de Impacto Ambiental (EIA) y de la
Declaración de Impacto Ambiental (DIA) de algunas de dichas concesiones
mineras, por haberse omitido la debida consulta y participación de las
comunidades indígenas afectadas, esto es, su derecho fundamental a la consulta
previa, afectando sus derechos de propiedad comunal sobre sus territorios y
recursos naturales, a su libre determinación, a su identidad cultural y religiosa, a
su salud, y a vivir en un ambiente sano e equilibrado.
II. ANTECEDENTES
Manifiesta que, los Awajún y Wampis del Cenepa han desarrollado su vida
colectiva como pueblos, sobre un territorio ancestral que abarca la Cordillera
del Cóndor y sus áreas aledañas, zona que es extremadamente biodiversa y
ecológicamente vulnerable. Según instituciones internacionales, es el Hostopt1
de los andes tropicales- dentro de los cuales se ubica la zona de la Cordillera
del Cóndor en la cual se asienta tradicionalmente el pueblo Awajún, Shuar,
Achuar, Wampís en armónica interrelación, siendo la región más rica y más
diversa de la tierra, pero además de rica en biodiversidad, la zona es
extremadamente vulnerable en términos ecológicos y humanos por lo cual la
1
Punto de acceso
1
incompatibilidad entre actividades mineras y la misma existencia de los
pueblos indígenas Awajún y Wampís se encuentra razonablemente fuera de
toda duda, por lo que declarar la intangibilidad de las partes altas de la
Cordillera es indispensable y fue admitido por el INRENA, porque sus
montañas son cabeceras de los principales ríos de la cuenca del Marañón.
Indica que, con la finalidad de no dejar ningún área territorial desprotegida, las
organizaciones indígenas ODECOFROC y ODECOAC acordaron durante
dicho proceso que sólo aceptarían un Parque Nacional cuyos límites
correspondieran a los límites de las comunidades ya tituladas, a los límites de
las áreas solicitadas en ampliación y a los límites de las nuevas comunidades
por titularse. Como resultado de aquel amplio proceso de consulta que duró
aproximadamente 30 meses dirigido por el propio INRENA, en el año 2004,
éste propuso categorizar parcialmente la Zona Reservada como “Parque
Nacional Ichigkat Muja-Cordillera del Cóndor” con un área de 152,873.76; sin
embargo, producto de opiniones desfavorables del Ministro de Energía y
Minas, Defensa y Relaciones Exteriores, y sin estar obligado a ello, el propio
INRENA presentó una segunda propuesta que violó el acuerdo alcanzado con
las comunidades consultadas, y redujo el área del Parque Nacional a
88,477.00; sin argumento previo o nuevo, que justificase la modificación de su
primera propuesta, dejando una extensa área del territorio Awajún y Wampís
sin protección jurídica. Dicho recorte del parque se oficializó mediante Decreto
Supremo N°023-2007-AG de fecha 09 de agosto del 2007, mediante el cual se
creó el mencionado Parque Nacional mutilado y sobre el área de la Cordillera
del Cóndor dejada libre por el dicho Decreto Supremo el Ministerio de Energía
y Minas aprobó numerosas concesiones mineras sin consulta previa.
Agrega que actualmente los Awajún y Wampís del Cenepa atestiguan como su
territorio ancestral es concesionado a favor de empresas extractivas de oro y
cobre y como son aprobadas Declaraciones de Impacto Ambiental (DIAs) y
Estudios de Impacto Ambiental (EIAs) sin que ellos sean consultados, siendo
que a la fecha, el INGEMMET registra por lo menos 111 concesiones y
petitorios mineros, ninguno de los cuales habría cumplido ni proyecta cumplir
ningún proceso de consulta previa, a fin de obtener el consentimiento libre,
previo e informado de las comunidades indígenas. Además, señala que la
Dirección General de Asuntos Ambientales Mineros (DGAAM) ha emitido ya
dos resoluciones de aprobación de instrumentos ambientales sin ninguna
participación indígena, ni consulta previa: la Resolución Directoral N°402-
2009-MEM/AAM de fecha 09 de diciembre del 2009, que aprueba la
Declaración de Impacto Ambiental del proyecto de exploración minera
“Afrodita” correspondiente a la Concesión Minera Comaina 1; y la Resolución
2
Directoral N°119-2011-MEM-AAM de fecha 15 de abril de 2011, que aprueba
el Estudio de Impacto Ambiental Semi-Detallado del proyecto de exploración
minera “Adriana” correspondiente a la Concesión Minera Lahaina.
3
empresa minera pone en peligro la vida y salud de las comunidades indígenas
en los aspectos de agua, flora y fauna, así como aspectos socio – culturales.
4
interpuesta, confiriéndose a la parte demandada un plazo de 05 días para su
contestación.
5
obtención, almacenamiento, registro, procesamiento, administración y
difusión eficiente de la información geocientifica y aquella relacionada a la
geología básica, los recursos del subsuelo, los riesgos geológicos y el
geoambiente; asimismo, añade que tiene como objetivo conducir el
Procedimiento Ordinario Minero conforme a lo dispuesto por la Ley General
de Minería y sus reglamentos, incluyendo la recepción de petitorios, el
otorgamiento de concesiones mineras y su extinción según las causales
fijadas por la ley, ordenando y sistematizando la información
georeferenciada mediante el Catastro Minero Nacional, así como la
administración y distribución del derecho de vigencia y penalidad.
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3.3. Mediante escrito de fecha 05 de julio del 2018, Enrique Edmundo Sánchez
MC Clinton, contesta la Demanda, negándola y contradiciéndola en todos sus
extremos, solicitando que sea declarada infundada y/o improcedente, teniendo
como principales argumentos los siguientes:
Precisa que, las concesiones mineras de las que alguna vez ha sido titular
han sido transferidas a terceros o han sido declaradas extintas. Siendo
todas las concesiones mineras han sido transferidas entre el año 2003 y
2011, conforme el Artículo 164° del TUO de la Ley General de Minería,
aprobada por Decreto Supremo 014-92-EM, todas debidamente registradas
en Registros Públicos.
CONSIDERANDO:
7
SEGUNDO: Que en el proceso de amparo no se declaran ni constituyen derechos
constitucionales a favor de ninguna de las partes ni se discuten cuestiones
atinentes a la titularidad de los mismos, lo que si sucede en los proceso ordinarios,
sino que más bien el proceso de amparo tiene por finalidad restablecer el ejercicio
de un derecho constitucional (finalidad restitutoria), si acaso resultó lesionado y
siempre y cuando la lesión no se haya convertido en irreparable.
8
consulta previa, toda vez que las concesiones mencionadas se superponen
sobre los territorios ancestrales de las comunidades y afectan sus derechos
colectivos.
Con ello, los pueblos indígenas -término utilizado en el Derecho Internacional- han
sido proveídos con herramientas legales que buscan proteger su existencia y su
cosmovisión (Weltanschauung), conforme lo ha señalado el Tribunal
Constitucional3 .
9
Tratándose de un reclamo de afectación de derechos colectivos reconocidos en el
ámbito de la normatividad convencional supranacional, estableceremos como base
la normatividad pertinente aplicable al presente caso, desde la normatividad
convencional internacional a la que está sujeta el Estado peruano, la legislación
interna desde la Constitución Política, normas del bloque de constitucionalidad, y
legislación infra constitucional.
Artículo 5.-
Al aplicar las disposiciones del presente Convenio:
a) Deberán reconocerse y protegerse los valores y prácticas sociales,
culturales, religiosos y espirituales propios de dichos pueblos y deberá tomarse
debidamente en consideración la índole de los problemas que se les plantean
tanto colectiva como individualmente;
b) deberá respetarse la integridad de los valores, prácticas e instituciones de esos
pueblos;
c) deberán adoptarse, con la participación y cooperación de los pueblos interesados,
medidas encaminadas a allanar las dificultades que experimenten dichos pueblos al
afrontar nuevas condiciones de vida y de trabajo.
Artículo 6.-
1. Al aplicar las disposiciones del presente Convenio, los gobiernos deberán:
4
EXP. N.° 06316- EXP. N.° 06316-2008-PA/TC LORETO ASOCIACIÓN INTERÉTNICA ASOCIACIÓN INTERÉTNICA DE
DESARROLLO DE DE DESARROLLO DELA SELVA LA SELVA LA SELVA PERUANA (AIDESEP): 19. Sobre la relevancia
jurídica de los tratados y convenios suscritos por el Perú, este Colegiado ha manifestado que “[…] tales tratados
constituyen parámetro de constitucionalidad en materia de derechos y libertades” (STC N.º 0047-2004-AI/TC,
fundamento 22). En esta misma dirección, este Tribunal ha sido enfático en sostener que los “[…] tratados
internacionales sobre derechos humanos no sólo conforman nuestro ordenamiento, sino que, además, ostentan
rango constitucional” (STC N.º 0025-2005-PI/TC, fundamento 33). Por tanto, y conforme ya se ha tenido oportunidad
de establecer (STC N.° 3343-2007-AA/TC, fundamento 31), el Convenio 169 forma parte del sistema constitucional
nacional de protección de los derechos de los pueblos indígenas y, en consecuencia, se convierte en parámetro
normativo y de interpretación para el control de los actos o decisiones de los poderes públicos que interfieran en los
derechos de dichos pueblos.
5
"La consulta previa es un diálogo intercultural entre el Estado y los pueblos indígenas u originarios, cuya finalidad
es llegar a acuerdos sobre medidas (administrativas o legislativas), programas, planes y proyectos que podrían
afectar los derechos colectivos de los pueblos. Los acuerdos a los que se lleguen en el proceso son de cumplimiento
obligatorio para ambas partes. En tal sentido, es una obligación estatal destinada a salvaguardar los derechos
colectivos de los pueblos indígenas u originarios, como aquellos referidos a la tierra y el territorio, al uso de los
recursos naturales que se encuentran en su ámbito geográfico y que utilizan tradicionalmente, a la salud con
enfoque intercultural y a la educación intercultural". ETAPA DE IDENTIFICACIÓN DE PUEBLOS INDÍGENAS U
ORIGINARIOS - GUÍA METODOLÓGICA. Ministerio de Cultura. Primera edición, Lima, junio 2014.pág. 14.
10
a) consultar a los pueblos interesados, mediante procedimientos
apropiados y en particular a través de sus instituciones representativas,
cada vez que se prevean medidas legislativas o administrativas
susceptibles de afectarles directamente;
b) establecer los medios a través de los cuales los pueblos interesados puedan
participar libremente, por lo menos en la misma medida que otros sectores de
la población, y a todos los niveles en la adopción de decisiones en instituciones
electivas y organismos administrativos y de otra índole responsables de
políticas y programas que les conciernan;
c) establecer los medios para el pleno desarrollo de las instituciones e
iniciativas de esos pueblos, y en los casos apropiados proporcionar los
recursos necesarios para este fin.
2. Las consultas llevadas a cabo en aplicación de este Convenio deberán efectuarse
de buena fe y de una manera apropiada a las circunstancias, con la finalidad de llegar
a un acuerdo o lograr el consentimiento acerca de las medidas propuestas.
Artículo 13.-
1. Al aplicar las disposiciones de esta parte del Convenio, los gobiernos
deberán respetar la importancia especial que para las culturas y valores
espirituales de los pueblos interesados reviste su relación con las tierras o
territorios, o con ambos, según los casos, que ocupan o utilizan de alguna otra
manera, y en particular los aspectos colectivos de esa relación.
2. La utilización del término tierras en los artículos 15 y 16 deberá incluir el concepto
de territorios, lo que cubre la totalidad del hábitat de las regiones que los pueblos
interesados ocupan o utilizan de alguna otra manera.
Artículo 15
(..)
2. En caso de que pertenezca al Estado la propiedad de los minerales o de los
recursos del subsuelo, o tenga derechos sobre otros recursos existentes en las
tierras, los gobiernos deberán establecer o mantener procedimientos con miras
a consultar a los pueblos interesados, a fin de determinar si los intereses de
esos pueblos serían perjudicados y en qué medida, antes de emprender o
autorizar cualquier programa de prospección o explotación de los recursos
existentes en sus tierras. Los pueblos interesados deberán participar, siempre que
sea posible, en los beneficios que reporten tales actividades, y percibir una
indemnización equitativa por cualquier daño que puedan sufrir como resultado de
esas actividades.
"Artículo 2.-
(...)
11
17. A participar, en forma individual o asociada, en la vida política, económica, social y
cultural de la Nación. Los ciudadanos tienen, conforme a ley, los derechos de elección,
de remoción o revocación de autoridades, de iniciativa legislativa y de referéndum."
"Articulo. 89.-
Las Comunidades Campesinas y las Nativas tienen existencia legal y son personas
jurídicas."
6.2.3. . La Ley N° 29785- Ley del Derecho a la Consulta Previa a los Pueblos
Indígenas u Originarios reconocido en el Convenio 169 de la Organización
Internacional del Trabajo (OIT), publicada el 07 de setiembre de 2011, en la cual
se establece el procedimiento para implementar el derecho a la consulta previa a
los pueblos indígenas u originarios antes de la aprobación de medidas
administrativas o legislativas que puedan afectar sus derechos colectivos,
6
Según el párrafo 62 de la sentencia del Tribunal Constitucional N° 05427-2009-AC, “(…) este Tribunal aprecia que,
entre el derecho a la consulta previa y el derecho a la participación ciudadana, existen notorias diferencias que no
pueden ser soslayadas. Así pues, mientras que el derecho a la consulta garantiza que la opinión de los pueblos
indígenas sea tomada en cuenta antes de adoptarse una decisión que pueda afectarles, el derecho a la participación
ciudadana hace posible la libre intervención de las personas en el ámbito político, económico, social y cultural de la
nación. Es por eso que el propio Convenio 169 regula por separado este último derecho en sus artículos 6º, inciso b) y
7º (…) debe advertirse que ninguna de las normas señaladas [referidas a participación ciudadana] (…) se refiere
específicamente a la problemática de los pueblos indígenas como grupo humano participante en los mencionados
talleres, sino que hacen alusión a la intervención de “cualquier” población afectada. Tal situación, a criterio de este
Tribunal, no se condice con el espíritu del Convenio 169 de la OIT, el que más bien exige la adopción de normas
especiales que tomen en cuenta aquellas particularidades que caracterizan a los pueblos indígenas en tanto grupo
humano diferenciado”.
12
estableciendo los criterios para la identificación de los pueblos indígenas como
sujetos colectivos:
13
Conforme lo anotado, vemos que "la medida administrativa" fue definida
inicialmente en el Decreto Supremo Nº 023-2011-EM-, como:
Acto administrativo que contiene declaraciones destinadas a producir efectos jurídicos
sobre los intereses, obligaciones y/o derechos de los administrados y que sean
susceptibles de afectar directamente a los pueblos indígenas dentro de una situación
concreta.
14
artículo 3 del mismo reglamento, por cuanto dichas definiciones se
complementan, además que la Ley y el Convenio refieren no solo medidas
legislativas y administrativas, sino también planes, programas entre otros,
siendo el aspecto relevante que éstos sean susceptibles de afectar
directamente los derechos colectivos de pueblos indígenas.
Articulo. 67.-
El Estado determina la política nacional del ambiente. Promueve el uso sostenible de
sus recursos naturales.
Articulo. 68.-
El Estado está obligado a promover la conservación de la diversidad biológica y de
las áreas naturales protegidas.
Articulo. 69.-
El Estado promueve el desarrollo sostenible de la Amazonía con una legislación
adecuada.7
7
Exp. N°0048-2004-PIITC. f.j. 36. Por "sostenibilidad" debe entenderse "(. .. ) a la relación que existe entre los
sistemas dinámicos de la economía humana, y los sistemas ecológicos, asimismo dinámicos pero que normalmente
cambian a un ritmo más lento, y donde a) la vida humana puede i continuar indefinidamente; b) los individuos
humanos pueden prosperar; c) las culturas humanas pueden desarrollarse; pero en la que d) los efectos de la
actividad humana se mantienen de unos límites, de forma que no se destruya la diversidad, la complejidad y el
15
7.2. El Código del Medio Ambiente y los Recursos Naturales, Decreto
Legislativo 613, publicado el 8 setiembre 19908, esta norma estuvo vigente
hasta octubre del año 2005 (derogada por la Ley N° 28611), introdujo un conjunto
de derechos, políticas e instrumentos de gestión, que siguen siendo centrales para
la política ambiental actual.
7.3. La Ley General del Ambiente, Ley N° 28611, del mes de octubre del año
2005, refiere:
funcionamiento del sistema ecológico que sirve de sostenimiento a la vida'o". Esto pone de manifiesto que no se
trata ya solamente de las posibles restricciones con una finalidad solidaria o para cumplir con determinadas
prestaciones propias del Estado Social y Democrático de Derecho, sino incluso, como una necesidad de mantener y
preservar nuestra propia especie. Como ha precisado Costanza", "( ... ) en un sentido importante, sostenibilidad es
mera justicia con relación a las generaciones futuras. En donde hay que incluir también a las futuras generaciones de
otras especies, aun cuando nuestro interés principal se centre en nuestra propia especie".
8
Derogado por la Cuarta Disposición Transitoria, Complementaria y Final de la Ley N° 28611, publicada el 15
Octubre 2005, fecha hasta la cual estuvo vigente.
16
Artículo II.- Del derecho de acceso a la información
Toda persona tiene el derecho a acceder adecuada y oportunamente a la información
pública sobre las políticas, normas, medidas, obras y actividades que pudieran afectar,
directa o indirectamente, el ambiente, sin necesidad de invocar justificación o interés
que motive tal requerimiento.
17
recursos naturales, y del desarrollo de los principios de prevención y precaución,
necesarios para el cumplimiento de estos fines9.
167. (...)En esta línea, el Estado debe asegurar que los derechos de los pueblos
indígenas no sean obviados en cualquier otra actividad o acuerdos que haga con
terceros privados o en el marco de decisiones del poder público que afectarían sus
derechos e intereses. Por ello, en su caso, corresponde también al Estado llevar a cabo
tareas de fiscalización y de control en su aplicación y desplegar, cuando sea pertinente,
9
Declaración de Río sobre el Medio Ambiente y el Desarrollo 1992. Principio 15.
18
formas de tutela efectiva de ese derecho por medio de los órganos judiciales
correspondientes.
(...)
a) La consulta debe ser realizada con carácter previo.
180. En lo que se refiere al momento en que debe efectuarse la consulta, el artículo 15.2
del Convenio Nº 169 de la OIT señala que “los gobiernos deberán establecer o mantener
procedimientos con miras a consultar a los pueblos interesados, a fin de determinar si los
intereses de esos pueblos serían perjudicados, y en qué medida, antes de emprender o
autorizar cualquier programa de prospección o explotación de los recursos
existentes en sus tierras”. Sobre el particular, este Tribunal ha observado que se debe
consultar, de conformidad con las propias tradiciones del pueblo indígena, en las
primeras etapas del plan de desarrollo o inversión y no únicamente cuando surja la
necesidad de obtener la aprobación de la comunidad (resaltado nuestro), si éste
fuera el caso, pues el aviso temprano permite un tiempo adecuado para la discusión
interna dentro de las comunidades y para brindar una adecuada respuesta al
Estado.
(...)
C) la consulta adecuada y accesible
201. (...) Las consultas a pueblos indígenas deben realizarse a través de procedimientos
culturalmente adecuados, es decir, de conformidad con sus propias tradiciones. Si
bien no hay un único modelo de procedimientos culturalmente adecuados, es decir, en
conformidad con sus propias tradiciones. Si bien no hay un único modelo de
procedimiento apropiado, este debería tener en cuenta las circunstancias nacionales y
de los pueblos indígenas, así como contextualmente la naturaleza de las medidas
consultadas.
19
a) La obligación de los Estados de realizar procesos de consulta especiales y
diferenciados a través de procedimientos culturalmente adecuados, es decir,
de conformidad con sus propias tradiciones cuando se vayan a afectar
determinados intereses de las comunidades y pueblos indígenas,
20
8.2.3. De igual modo, en la STC 00025-2009-PI/TC, del 17 de marzo de 2011,
caso Gonzalo Tuanama Tuanama y ocho mil noventa y nueve ciudadanos, el
Tribunal Constitucional en su fundamento 25 establece:
12. “Al respecto el Tribunal recuerda que el Convenio 169 de la OIT forma parte de
nuestro ordenamiento jurídico, siendo obligatoria su aplicación por todas las
entidades estatales (STC 3343-2007-PA/TC y STC 00022-2009-PI/TC). No sólo forma
parte de nuestro ordenamiento interno, sino que además ostenta el máximo rango,
pues como hemos precisado, los “tratados internacionales sobre derechos
humanos (…) detentan rango constitucional” (STC N.º 00025-2005-PI/TC y 0026-
2005-PI/TC, F.J. 26). En ese sentido, en aplicación del artículo V del Título Preliminar
del Código Procesal Constitucional, los tratados sobre derechos humanos en
general, y el Convenio 169 de la OIT en particular, tienen la función de
complementar-normativa e interpretativamente- las disposiciones constitucionales
sobre pueblos indígenas y, en particular, las referidas a sus derechos
fundamentales y las garantías institucionales con las que tengan relación.
10
En esta sentencia el Tribunal Constitucional ha mencionado ilustrativamente la existencia de
importantes instrumentos internacionales (algunos vinculantes y otros ilustrativos),:
Declaración de las Naciones Unidas sobre los derechos de los pueblos indígenas, aprobada por la Asamblea General
el 13 de septiembre de 2007 (artículo 38º ); Pacto Internacional de Derecho Civiles y Políticos (PIDCP), adoptado el
16 de diciembre de 1966, ratificado por el Estado peruano el 28 de abril de 1978 (artículo 2, inciso 2); Pacto
21
demanda de cumplimiento interpuesta por la Asociación Interétnica de Desarrollo
de la Selva (AIDESEP), al haberse acreditado el incumplimiento parcial del
Ministerio de Energía y Minas de su deber de reglamentar el derecho a la consulta
de los pueblos indígenas reconocido en el Convenio Nº 169 de la OIT; teniendo
como algunos fundamentos de la sentencia lo siguiente:
“26. Ahora, si bien no existe una ley que haya desarrollado el procedimiento de
consulta y, por ende, parecería que no existe, por tanto, el deber del Ministerio de
Energía y Minas de emitir la reglamentación correspondiente, dicha argumentación se
debe desvirtuar en razón a que el Convenio Nº 169 vincula a todos los poderes
públicos y no sólo al legislador y, ante la ausencia de regulación legal, parece
adecuado asignar responsabilidad al Ministerio demandado por la regulación
normativa que dé eficacia a lo dispuesto en el Convenio, máxime si es en este
sector donde se producen la mayor cantidad de medidas que pueden afectar
directamente a los pueblos indígenas (como las actividades relacionadas a
explotación minera e hidrocarburífera) y que, por lo mismo, según el Convenio Nº
169, deben ser consultadas.
27. Este argumento debe ser reforzado teniendo en cuenta que el propio Ministerio ha
reconocido en su Informe N.º 008-2007-MEM/VMM/DGGS, su fecha 14 de mayo de
2007, obrante a fojas 43, lo siguiente:
“el Ministerio de Energía y Minas, en el desarrollo de las actividades mineras y de
hidrocarburos, se encuentra obligado a adoptar las medidas necesarias para la
protección del derecho de propiedad y de posesión sobre las tierras que ocupan y
para la plena implementación del derecho de los pueblos indígenas y tribales a ser
consultados en forma previa, libre e informada, a fin de determinar si los intereses
de dichos pueblos serían perjudicados y en qué medida, antes de autorizar
actividades de exploración o explotación de recursos existentes en sus suelos”
(énfasis agregado).
(...)
55. El derecho a la consulta previa e informada, a partir de lo establecido en el Convenio
Nº 169 de la OIT y en la jurisprudencia de la Corte Interamericana de Derechos
Humanos
55. El derecho a la consulta previa e informada de los pueblos indígenas, se encuentra
regulado genéricamente en el artículo 6º, incisos 1 y 2, del Convenio 169 de la OIT, los
cuales señalan de forma expresa lo siguiente: (...)
56. De otro lado, el artículo 15º del citado Convenio, para los fines de la responsabilidad
del Ministerio de Energía y Minas que aquí interesa, regula, en su inciso 2, una
aplicación específica del derecho a la consulta tratándose de proyectos de prospección y
explotación de recursos naturales que pudieran perjudicar a los pueblos indígenas. Dicho
artículo se expresa en los siguientes términos:
“Artículo 15.- (...) 2. En caso de que pertenezca al Estado la propiedad de los
minerales o de los recursos del subsuelo, o tenga derechos sobre otros recursos
22
existentes en las tierras, los gobiernos deberán establecer o mantener procedimientos
con miras a consultar a los pueblos interesados, a fin de determinar si los intereses
de esos pueblos serían perjudicados, y en qué medida, antes de emprender o
autorizar cualquier programa de prospección o explotación de los recursos
existentes en sus tierras. Los pueblos interesados deberán participar siempre que sea
posible en los beneficios que reporten tales actividades, y percibir una indemnización
equitativa por cualquier daño que puedan sufrir como resultado de esas actividades”.
"57. Como se puede apreciar, el derecho a la consulta previa e informada, tal cual
se encuentra regulado en el Convenio 169, permite que a través del diálogo
intercultural los pueblos indígenas sean tomados en cuenta al momento de la
adopción de medidas que puedan afectar sus derechos o intereses. Dicha
interacción tiene como finalidad incluir a un grupo humano históricamente postergado en
el proceso de toma de decisiones públicas, y simultáneamente, busca otorgarle al Estado
(o, eventualmente, al particular) aquella legitimidad que sus decisiones requieren para
gozar de sostenibilidad en el tiempo. De esta forma, se garantiza que el desarrollo
económico impulsado legítimamente desde el Estado, no se contraponga, sino antes
bien, se armonice con el derecho de los pueblos indígenas a su bienestar y desarrollo.”
9.2. Siendo obligación del Estado informar a las personas sobre sus derechos,
implicará como deber del Estado que la consulta se efectúe con
23
procedimientos apropiados de manera libre e informada, de buena fe, con la
finalidad de llegar a un acuerdo o lograr el consentimiento acerca de las
medidas o proyectos propuestos.
"Articulo. 89.-
Son autónomas en su organización, en el trabajo comunal y en el uso y la libre
disposición de sus tierras, así como en lo económico y administrativo, dentro del marco
que la ley establece. La propiedad de sus tierras es imprescriptible, salvo en el caso de
abandono previsto en el artículo anterior.// El Estado respeta la identidad cultural de las
Comunidades Campesinas y Nativas; Art. 149, Art. 191, etc."
11
El pueblo Awajún, también conocido con el nombre de aguaruna, es el segundo pueblo más numeroso
de la Amazonía peruana. Su lengua es la más hablada entre las cuatro que pertenecen a la familia
lingüística Jíbaro. Viven principalmente el departamento de Amazonas, aunque también se encuentran
comunidades de este pueblo en el norte de los departamentos de Loreto, Cajamarca y San Martín.
(http://www.congreso.gob.pe/Docs/comisiones2016/PueblosAndinosEcologia/files/salud_indigena_awa
jun-dpi.pdf)
24
De esta disposición podemos establecer la siguiente norma de derecho
fundamental:
12
http://www.consulta-previa.org.pe/nbasica/DerechosColectivos.pdf.; Derecho a la Consulta Previa. Derechos
Colectivos de los Pueblos Indígenas u originarios. Ministerio de Cultura. Primera edición. Lima, junio 2016.
25
intervenciones de índole política o económica por parte de terceros, y la
facultad de aplicar su derecho consuetudinario a fin de resolver los conflictos
sociales surgidos al interior de la comunidad, siempre que en el ejercicio de tal
función no se vulneren derechos fundamentales de terceros, de los cuales el
Estado es garante, por ser guardián del interés general y, en particular, de los
derechos fundamentales", precisando que tal autodeterminación no supone
amparar pretensiones autárquicas, separatistas o antisistémicas, puesto que
deben considerarse juntamente con el principio de unidad de gobierno e
integridad territorial del Estado.
El reconocimiento de este derecho de libre determinación implicará en su
contenido:
a) el reconocimiento a su existencia legal y personería jurídica, autonomía
organizativa, económica y administrativa, y el uso y libre disposición de sus
tierras (art. 89 de la Constitución),
b) se les reconozca y proteja valores y prácticas sociales, culturales, religiosos
y espirituales propias, y que toda medida que pueda afectarles sea
debidamente consultada (artículos 5° y 6°, respectivamente, del Convenio
169 de la OIT) .
Conforme al art. 13 y art. 14 del Convenio 169 de la OIT 14, los Estados
deberán reconocer su vinculación especial con sus tierras o territorios, y los
derechos de propiedad y posesión de los pueblos indígenas sobre las tierras
que tradicionalmente hayan ocupado, incluso si no están exclusivamente
ocupados por ellos sino los usan para actividades rituales y de subsistencia. La
posibilidad de transmitir tierras comunales a terceros debe ser consulta con la
propia población (art. 17.2). Además, deben preverse sanciones sobre las
intrusiones no autorizadas de terceros en la tierra de las comunidades (art. 18
del Convenio). Por ende, que se reconozca la propiedad comunal sobre sus
tierras (artículo 88 de la Constitución).
Derecho a la El reconocimiento de este derecho implicará la conservación y protección de
tierra y el sus tierras y territorios con los que guardan estrecha relación de índole
territorio13 espiritual, cultural y económica, que comprende la totalidad del hábitat qué
estos pueblos ocupan o utilizan de alguna manera, y que supone el
reconocimiento y protección de los derechos de propiedad y posesión sobre
las tierras que tradicionalmente usan para sus actividades de subsistencia,
incluida la protección de tierras desocupadas que tradicionalmente son
utilizadas en actividades tradicionales, temporales y de subsistencia.
13
Caso del Pueblo Saramaka vs. Surinam, de la Corte Interamericana de Derechos Humanos: "96. Aplicando el
criterio mencionado en el presente caso, la Corte, por lo tanto, concluye que los miembros del pueblo Saramaka
conforman una comunidad tribal protegida por el derecho internacional de los derechos humanos que garantiza el
derecho al territorio comunal que han usado y ocupado tradicionalmente, derivado del uso y ocupación, de larga
data, de la tierra y de los recursos necesarios para su subsistencia física y cultural y, asimismo, que el Estado tiene la
obligación de adoptar medidas especiales para reconocer, respetar, proteger y garantizar a los integrantes del
pueblo Saramaka el derecho de propiedad comunal respecto de dicho territorio. (...)
14
Artículo 14.-
1. Deberá reconocerse a los pueblos interesados el derecho de propiedad y de posesión sobre las tierras que
tradicionalmente ocupan. Además, en los casos apropiados, deberán tomarse medidas para salvaguardar el derecho
de los pueblos interesados a utilizar tierras que no estén exclusivamente ocupadas por ellos, pero a las que hayan
tenido tradicionalmente acceso para sus actividades tradicionales y de subsistencia. A este respecto, deberá
prestarse particular atención a la situación de los pueblos nómadas y de los agricultores itinerantes.
2. Los gobiernos deberán tomar las medidas que sean necesarias para determinar las tierras que los pueblos
interesados ocupan tradicionalmente y garantizar la protección efectiva de sus derechos de propiedad y posesión.
3. Deberán instituirse procedimientos adecuados en el marco del sistema jurídico nacional para solucionar las
reivindicaciones de tierras formuladas por los pueblos interesados.
26
El art. 15.1 del Convenio 169 de la OIT15 dispone una protección especial a los
derechos a la utilización, administración y conservación de sus recursos
naturales16. Asimismo, el Estado debe otorgarles protección frente a terceros
que exploten dichos recursos (pesqueros, forestales, hídricos, combustibles)
sin su consentimiento. Por ello, se debe otorgar a las poblaciones derecho de
consulta sobre la realización de dichas actividades económicas. Conforme al
art. 15.2 del Convenio 169 de la OIT, el Estado está obligado en su calidad de
tal a recurrir a la consulta, en tanto la soberanía del Estado sobre los recursos
naturales debe coordinarse con los derechos especiales al territorio y a la
identidad cultural de las poblaciones nativas, sobre todo considerando que
Derecho al para las segundas, la explotación de ciertos recursos renovables (pesca, flora
uso de y fauna silvestre) resulta fundamental para la subsistencia y que los proyectos
recursos de inversión sobre recursos como energía, petróleo y minería pueden tener un
naturales que gran impacto sobre la forma de vida de estos grupos.
se encuentran Por tanto, este derecho comprenderá el uso, administración y conservación de
los recursos naturales que se encuentren en su ámbito geográfico y que
en su tradicionalmente utilizan para su subsistencia, así como participar siempre que
territorio sea posible, de los beneficios de su explotación, en el marco de la legislación
vigente, siendo que en el caso de los recursos del subsuelo que pertenezcan al
Estado, conforme lo establece la Constitución, el Estado deberá establecer o
mantener procedimientos con miras a consultar a los pueblos interesados, a fin
de que sus intereses no se vean perjudicados, y en que medida, antes de
emprender o autorizar cualquier programa de prospección o explotación de los
recursos existentes en sus territorios.
Reconocido en el artículo 5° del Convenio 169 OIT, y arts. 2.19 y 89 de la
Constitución del Perú.
La identidad cultural está considerada como el conjunto de prácticas,
tradiciones y creencias que definen las características de un grupo humano.
Está íntimamente ligada a la conservación del territorio que este grupo habita y
de los sitios que resultan relevantes para éste, tanto por motivos prácticos
(obtención de recursos) como simbólicos (significación espiritual).
Respecto a este derecho, el Convenio 169 de la OIT señala que los Estados
deberán asumir medidas que promuevan la efectividad de sus derechos,
respetando su identidad cultural (art. 6.2.b). El derecho a la identidad cultural
Derecho a la ya se encuentra, en todo caso reconocido como derecho fundamental en la
identidad Constitución (art. 2.19), el mismo que debe ser respetado siempre que su
cultural y ejercicio no implique una vulneración de los derechos fundamentales.
libertad De tal forma implicará manifestar, practicar, desarrollar y enseñar sus
religiosa tradiciones, costumbres y ceremonias espirituales y religiosas: a mantener y
proteger sus lugares religiosos y culturales y a acceder a ellos privadamente,
transmitir a las generaciones futuras sus historias, idiomas, tradiciones orales,
filosofías (artículos 12 y 13 de la Declaración de Naciones Unidas sobre los
derechos de los pueblos indígenas), reconocer la especial vinculación que
15
Artículo 15.-
1. Los derechos de los pueblos interesados a los recursos naturales existentes en sus tierras deberán protegerse
especialmente. Estos derechos comprenden el derecho de esos pueblos a participar en la utilización, administración
y conservación de dichos recursos.(...)
16
Caso del Pueblo Saramaka vs. Surinam, de la Corte Interamericana de Derechos Humanos: 121. De acuerdo con la
jurisprudencia de la Corte según lo establecido en los casos Yakye Axa y Sawhoyamaxa, los integrantes de los
pueblos indígenas y tribales tienen el derecho de ser titulares de los recursos naturales que han usado
tradicionalmente dentro de su territorio por las mismas razones por las cuales tienen el derecho de ser titulares de la
tierra que han usado y ocupado tradicionalmente durante siglos. Sin ellos, la supervivencia económica, social y
cultural de dichos pueblos está en riesgo. De allí la necesidad de proteger las tierras y los recursos que han usado
tradicionalmente: para prevenir su extinción como pueblo. Es decir, el objetivo y el fin de las medidas requeridas en
nombre de los miembros de los pueblos indígenas y tribales es garantizar que podrán continuar viviendo su modo
de vida tradicional y que su identidad cultural, estructura social, sistema económico, costumbres, creencias y
tradiciones distintivas serán respetadas, garantizadas y protegidas por los Estados.
27
existe entre la tierra y los territorios de estos pueblos y sus tradiciones y
prácticas culturales (Caso Comunidad Indígena Yakye Axa vs. Paraguay,
párrafo 154).
Contemplado en el art. 25 del Convenio 169 de la OIT (desarrollando el
derecho a la salud reconocido en el art. 7 de la Constitución), el cual dispone,
Derecho a la como deberes del Estado, el velar por brindar servicios de salud adecuados a
las poblaciones indígenas, o facilitar que las mismas lleguen a prestar los
salud mismos (art. 25.1); organizar dichos servicios, en la medida de lo posible, a
intercultural nivel comunitario, cooperando con la comunidad y teniendo en cuenta sus
prácticas culturales (art. 25.2); dar prioridad a la formación y empleo de
personal sanitario local (art. 25.3); y coordinar la prestación de servicios
sanitarios con las políticas sociales nacionales (art. 25.4).
Este derecho implica en que los servicios de salud en sus territorios, deben
organizarse a nivel comunitario tomando en consideración los métodos de
prevención, practicas curativas y medicamentos tradicionales, reconociendo el
valor de a medicina tradicional y la necesidad de preservarla, aprendiendo de
ella y enriquecerla.
Derecho a Reconocido en el Art. 2 inciso 22 de la Constitución. Este derecho comporta la
vivir en un facultad de las personas de poder disfrutar de un medio ambiente en el que
ambiente sus elementos se desarrollan e interrelacionan de manera natural y armónica;
y, en el caso que el hombre intervenga, no debe suponer una alteración
equilibrado y sustantiva de la interrelación que existe entre los elementos del medio
adecuado ambiente. Se concretiza en el derecho a que el medio ambiente se preserve;
para la vida entraña obligaciones ineludibles, para los poderes públicos, de mantener los
bienes ambientales en condiciones adecuadas para su disfrute17.
EN EL CASO CONCRETO
11.1.1. Que forma parte de la comunidad nativa de los pueblos indígenas Awajún
del Distrito del Cenepa, asentados en la Provincia de Condorcanqui,
Departamento de Amazonas, pertenecientes a la familia etnolingüística de
los Jíbaros, siendo una de las familias más numerosas de la Amazonía
junto con los Wampís, desarrollando su vida colectiva como pueblo sobre
un territorio que abarca la Cordillera del Cóndor y áreas aledañas, donde se
asientan los pueblos Awajún, Shuar, Achur y Wampís; que conforme al
17
Stc. 0048-2004-AI/TC, f.17.
28
Convenio 169 de la OIT, tienen el derecho fundamental a que el Gobierno
realice consulta previa antes de toda medida que los afecte, como la
explotación de recursos, pues dicha norma forma parte del Derecho
Internacional de los Derechos Humanos y está vigente en el Perú desde
1995.
11.1.3. Alegan además que la exploración de sus tierras, sin escuchar la voz de las
comunidades propietarias, constituye grave y permanente afectación a los
derechos de la consulta previa y el consentimiento de dichos actos,
asimismo a los derechos de territorio, la salud, la identidad cultural e
integridad física, social y cultural, como al disfrute de un medio ambiente
equilibrado y adecuado.
29
Ambiental, no puede iniciar un proceso de amparo mientras no exista el
permiso de inicio de operaciones que hagan parecer la existencia de alguna
amenaza.
“Resuelve:
30
Artículo Primero.- Otorgar el titulo de la concesión minera metálica APU,
código N°01-022116-95 a favor de Metales y Finanzas S.A.-METALFIN S.A.-,
comprendiendo 8.75 hectáreas de extensión hasta los límites fronterizos que
corresponden a nuestro país y cuyas coordenadas UTM correspondientes a la
zona17, son las siguientes: (…)”.
12.1. En el escrito de demanda de fecha 13 de mayo del 2013, el actor adjunta una
lista de Actos Administrativos de Otorgamiento de Concesión Minera (a fojas
197 a 203 de la demanda), emitidos por el INGEMMET, en la que se indican 100
concesiones mineras, contemplando algunas de las siguientes Resoluciones (a
fojas 102-141,144-155 y 161-192 de autos):
31
12.2. La Resolución Directoral N°402-2009-MEM/AAM de fecha 09 de diciembre
del 2009, mediante la cual se resuelve:
Por lo tanto, no habría motivo válido para que la falta de regulación nacional
sirviera de sustento para la omisión en el cumplimiento de lo establecido en dicho
instrumento internacional, y con mayor razón a partir del año 2011, que entró en
vigencia la Ley Nº 29785-Ley de la Consulta Previa.
32
DECIMO TERCERO: DEL TITULO DE CONCESIÓN MINERA.
CAPITULO V
CANCELACION
Artículo 64.- Se cancelarán los petitorios o concesiones, cuando se superpongan a
derechos prioritarios, o cuando el derecho resulte inubicable. 18
18
Stc. N° 0048-2004-PI/TC104 De acuerdo a lo expuesto en los fundamentos precedentes, el Estado no
sólo conserva los poderes de vigilancia y control, que implican no sólo velar por el fiel cumplimiento de
las obligaciones asumidas por los titulares de las concesiones mineras, enuncia as en el Capítulo 1, Título
VI del D.S. No 014-92-EM, Texto Único Ordenado de la Le General de Minería, sino también establecer las
condiciones de la utilización de los recursos naturales. Por ello, el particular se encuentra subordinado al
desarrollo legislativo y reglamentario que realice la Administración a la luz de la Constitución y
atendiendo a razones superiores de interés general. En este sentido es que el artículo 64° del D.S. N.o
014-92-EM. ha previsto la cancelación como un supuesto de extinción de la concesión, en los
siguientes términos: "Se cancelarán los petitorios o concesiones, cuando se superpongan a derechos
prioritarios, o cuando el derecho resulte inubicable" (negrita agregada).
33
13.2. El Decreto Legislativo Nº 708- Ley de Promoción de Inversiones en el
Sector Minero, promulgado el 6 de Noviembre de 1991 y publicado en el Diario
Oficial "El Peruano" el 14-11-91.
"Artículo 20.- Las concesiones se otorgan para el ejercicio de las actividades calificadas
como mineras, a saber: a) La concesión minera otorga a su titular el derecho a la
exploración y explotación de los recursos minerales concedidos que se encuentran
dentro de un sólido de profundidad indefinida, limitado por planos verticales
correspondientes a los lados de un cuadrado, rectángulo, o poligonal cerrada, cuyos
vértices estarán referidos a coordenadas Universal Transversal Mercator (UTM). La
concesión minera de un inmueble distinto y separado del predio donde se encuentre
ubicada."
Siendo así, se advierte que la parte demandada INGEMMET, mediante una serie
de resoluciones administrativas, otorgó Títulos de Concesiones Mineras sin
ejecutar consulta previa alguna, la misma que en éstos casos sí se debió realizar,
por cuanto la norma es clara al señalar que:
y que:
Es decir, los pueblos indígenas deben ser consultados desde un inicio al tratarse el
título de concesión minera de una medida administrativa que otorga derechos de
explotación y exploración que potencialmente puede ser susceptible de impactar
positiva o negativamente, dado que otorgado el derecho solo es necesario
algunos requisitos para ejercerlo, tal como es de verse en las Resoluciones
Directorales N°402-2009-MEM/AAM de fecha 09 de diciembre del 2009 y N°119-
2011-MEM-AAM de fecha 15 de abril del 2011.
19
Norma vigente y aplicables a la fechas de expedición de las resoluciones materia de controversia conforme el
punto 12.1.
34
Cabe señalar que la propia norma del Convenio N° 169 OIT establece que debe
realizarse la consulta previa antes de emprender o autorizar cualquier programa de
prospección o exploración (Art. 15.2), puntualiza "cualquier programa", no del inicio
de actividad. Además, siendo que la prospección se encuentra antes del
otorgamiento del título de concesión minera, y que el inicio de actividad es
posterior al título de concesión minera, queda claro así que la consulta previa
debe realizarse antes del otorgamiento del título de concesión minera, en éste
caso debió efectuarse antes del otorgamiento de los 100 títulos de concesión
minera materia de controversia.
En tal sentido, se tiene que los pueblos indígenas u originarios tienen derecho a
ser consultados de forma previa (antes de emprender o autorizar cualquier
programa de prospección o explotación), sobre las medidas legislativas o
administrativas que afecten directamente sus derechos. Por tanto, se concluye que
INGEMMET antes de otorgar los títulos de concesión minera debió previamente
realizar la consulta previa a los pueblos interesados si éstos eran susceptibles de
ser afectados directamente.20
20
En el mismo sentido, el Tribunal Constitucional en la Stc. 0048-2004-AI/TC, ha señalado: 102. En una economía
social de mercado, la concesión es una técnica reconocida en el Derecho Administrativo, mediante la cual se
atribuyen derechos a privados para el ejercicio de una actividad económica, por ejemplo, sobre los recursos
naturales renovables y no renovables, como potestad soberana del Estado para regular su aprovechamiento. Es, en
sí misma, un título que “(...) hace nacer en la esfera jurídica de su destinatario privado derechos, facultades, poderes
nuevos hasta entonces inexistentes (. .. ); es decir, se trata de un acto administrativo de carácter favorable o
ampliatorio para la esfera jurídica del destinatario, e implica la entrega, sólo en aprovechamiento temporal, de los
bienes de dominio público, estableciéndose una relación jurídica pública subordinada al interés público, y no de
carácter sinalagmático. Por ello, es la declaración o autonomía de la voluntad estatal la que establece la concesión
para un particular. Por lo expuesto, “(... ) la concesión es siempre un acto constitutivo de derechos, por el que se da
al sujeto un poder jurídico sobre una manifestación de la Administración. Es decir, el particular, antes de que se
celebre el acto de concesión, carecía absolutamente de dicha capacidad o derecho, que surge ex novo. 103. La
concesión administrativa tiene su origen en una facultad discrecional de la administración, que se exterioriza
mediante un acto de autoridad, por el cual se decide transferir unilateralmente a los particulares que cumplan las
condiciones legales y /reglamentarias de la concesión determinadas por el Estado, el desarrollo de determinada
actividad económica que tiene un carácter predominantemente público. La contraprestación por este acto
administrativo es el denominado pago del derecho de vigencia del título que contiene el derecho otorgado en virtud
de la concesión, previsto en el artículo 20° de la Ley No 26821, Ley Orgánica para el Aprovechamiento Sostenible de
los Recursos Naturales. Empero, si la Administración decide dar en concesión la explotación de recursos naturales no
renovables a un número limitado de administrados para que la indicada actividad se cumpla a través del título de
concesión, no supone que queda anulada su injerencia ni que renuncie a sus competencias propias y exclusivas de
carácter indelegable. Por el contrario, deberá obrar por vía de limitación o de imposición de deberes o cargas para
que dicha actividad pueda desenvolverse en el sentido que al interés público convenga, como es la protección del
medio ambiente. Es decir, la acción estatal no se agota en el acto mismo de concesión, sino que se desenvuelve con
35
DÉCIMO CUARTO: DEL PROYECTO PARQUE ICHIGKAT MUJA -
CORDILLERA DEL CÓNDOR, ESPACIO GEOGRAFICO QUE SE VERIA
AFECTADO CON LA CONCESION MINERA.
especiales formas a lo largo de todo el período fijado para el desarrollo de la actividad. El Estado no cede su ius
imperium, sino que a través de la Administración realizará una intervención legítima sobre los derechos de quienes
se muestran dispuestos y aptos para la explotación efectiva del recurso, con la finalidad precisamente de asegurarla.
36
14.2. Con referencia a este D.S. 023-2007-AG, señalado también por el
demandante, y por el que refiere se creó el Parque Nacional "mutilado", y sobre el
cual señala que el Ministerio de Energía y Minas aprobó numerosas concesiones
mineras sin consulta previa, cabe precisar que: la Corte Suprema de la República
del Perú, en la Acción Popular N° 3520-2011 LIMA, interpuesta por la Asociación
Interétnica de Desarrollo de la Selva Peruana – AIDESEP, mediante Sentencia de
fecha veintiséis de abril del dos mil doce, declaró nulo por inconstitucional e ilegal
el artículo 6.2 del Decreto Supremo Nº 023-2007-AG, sobre "Parque Nacional
Ichigkat Muja Cordillera del Cóndor" y "Reserva Comunal Tuntanain" , mediante el
cual se estableció la categorización parcial de la Zona Reservada Santiago -
Comaina como “Parque Nacional Ichigkat Muja - Cordillera del Cóndor” y “Reserva
Comunal Tuntanain” al considerar lo siguiente:
“VISTOS Y CONSIDERANDO
Segundo.- (…) AIDISEP pretende se deje sin efecto, por inconstitucional e ilegal, el Decreto
Supremo N° 023-2007-AG, (...) para lo cual señala en su demanda: ...c) el Parque Nacional
Ichigkat Muja – Cordillera del Cóndor fue aprobado con una extensión de ochenta y ocho mil
cuatrocientos setenta y siete hectáreas (88.477 Has) cuando la propuesta inicial fue de ciento
cincuenta y tres mil hectáreas (153,000 Has), lo que se ha hecho en razón a que primaron
intereses de la minería y de la tala ilegal, reduciéndose hábitats claves para especies endémicas
y en peligro de extinción, así como formaciones únicas como las formaciones tipo tepui,
obviándose la consulta previa a los pueblos Awajun y Wampis, d) Que el establecimiento de lotes
de hidrocarburos en un espacio predeterminado para la conservación de la biodiversidad es
ilegal e inconstitucional, además de ser un acto arbitrario, resultando material y jurídicamente
imposible realizar actividades de hidrocarburos en la Reserva Comunal o el Parque Nacional,
puesto que no se cuenta con un plan maestro ni zonificación aprobada, más aún si el
aprovechamiento de recursos solo será autorizado de ser compatible con la categoría,
zonificación y plan maestro conforme al artículo 27 de la Ley de Áreas Naturales, Ley Nº 26834;
(...)
Cuarto.- Dicha zona reservada, a partir del Decreto Supremo Nº 023-2007-AG, ha pasado a ser
categorizada en una extensión de ochenta y ocho mil cuatrocientos setenta y siete hectáreas
(88,477 Has), como Parque Nacional Ichigkat Muja y en una extensión de noventa y cuatro mil
novecientos sesenta y siete punto sesenta y ocho hectáreas (94,967.68 Has) como Reserva
Comunal Tuntanain, aparte de lo cual se ha excluido una extensión de un millón sesenta mil
seiscientos setenta y dos punto ochenta y ocho hectáreas (1’060,672.88 Has) para quedar
finalmente como zona reservada una extensión de trescientos noventa y ocho mil cuatrocientos
cuarenta y nueve punto cuarenta y cuatro hectáreas (398,449.44 Has).
Octavo.- [] no puede dejar de advertirse que, conforme a los mapas obrantes a fojas trescientos
cincuenta y siete a trescientos sesenta, el lote 116 a que se refiere el artículo 6 numeral 6.2. del
Decreto Supremo N° 023-2007-AG, se superpone y afecta áreas pertenecientes y contiguas
a la Reserva Comunal Tuntanain, que es un área natural que como tal goza de una especial
protección a ser garantizada y promovida por el Estado, por ser su obligación, la que en ningún
modo se cumple o respeta si es que mediante el Decreto Supremo materia de demanda se
subordina al respeto de los " (...) derechos adquiridos y obligaciones contenidas en el contrato de
licencia para la exploración y explotación de hidrocarburos en el lote 116" menos aún si se dice
que " (...) el contrato de administración, la zonificación, el plan maestro y la zona de
amortiguamiento de la Reserva Comunal Tuntanain permitirán la ejecución del mencionado
contrato de licencia al ser que esta área de uso directo (...)" cuando, contrario a ello, cualquier
uso del área natural y de sus recursos sólo puede efectuarse bajo la condición que sea
compatible con los objeticos del área natural protegida, porque resulta claro que lo dispuesto por
el artículo 6 numeral 6.2. del Decreto Supremo N° 023-2007-AG transgrede los artículos 27 y 28
de la Ley de Áreas Naturales Protegidas (Ley Nº 26834) así como el derecho a un ambiente
equilibrado al que tienen derecho los pobladores pertenecientes al área en que se ubica la
Reserva Comunal y las generaciones futuras, además de inobservarse la obligación del Estado
de promover la conservación de las áreas naturales contemplada en el artículo 68 de la
Constitución Política del Estado, lo que determina que dicha norma deviene inconstitucional e
ilegal, sin que pueda efectuarse una interpretación válida que genere la protección que merece el
establecimiento de la Reserva Comunal Tuntanain.
37
14.3. El Instituto Nacional de Recursos Naturales mediante su Informe N° 487-
2006-INRENA-IANP-DOANP de fecha 04 de agosto del 2006, a fojas 62 a 65 de
autos, señala:
III.- ASPECTO TÉCNICO, 3.1 Los petitorios mineros metálicos mencionados en el siguiente
cuadro se encuentran ubicados en el distrito de El Cenepa, Provincia de Condorcanqui,
departamento de Amazonas, superpuestos totalmente a la Zona Reservada Santiago Comaina
sector Cordillera del Cóndor. (…).
IV. CONCLUSIONES:
4.1 Por lo expuesto el suscrito emite OPINIÓN TÉCNICA DESFAVORABLE respecto a la
continuación del trámite de los dieciséis petitorios mineros metálicos relacionados en el cuadro
anterior, ubicados en el Distrito de Cenepa, Provincia de Condorcanqui, en el Departamento de
Amazonas por considerar que los impactos que se pudieran generar como producto de la
actividad de explotación y, exploración minera afectarían directamente los objetivos de
conservación de la zona reservada Santiago Comaina. (mayúscula y negrita agregada).
38
De ello se observa que:
b) El área del “Parque Nacional Ichigkat Muja - Cordillera del Cóndor”, fue
reducida respecto de la propuesta inicial. Originalmente se consideró una
extensión mucho mayor, a causa de la privilegiada y cuantiosa
biodiversidad, y elementos de la naturaleza presentes en el aludido
territorio, y a saber que estos persisten a la actualidad; desconociéndose
los motivos de la reducción de la zona protegida y el cambio de opinión
respecto a los petitorios de concesión minera, por cuanto el hecho que se
haya reducido en la norma, no implica que en dicha zona ya no exista toda
la biodiversidad, conforme señalaron los informes emitidos por el INRENA,
así como las afectaciones que podría sufrir.
Que en la cordillera del Cóndor existen lugares de gran belleza, atractivo natural y
significado cultural y espiritual con potencial para el ecoturismo, como los bosques de
neblina, las numerosas cuevas de los tays, la exuberante vegetación existente en el
bosque montano y otras transformaciones naturales como cataratas, pongos y
quebradas;
Que, la Cordillera del Cóndor alberga a los miembros de la familia Jíbaro, que
incluye a los grupos Shuar y Ashuar/Ashual que han habitado principalmente en las
cuencas de los ríos Zamora, Nangaritza y Pastaza; y los Awajún (Aguarunas) y
Wampis (Huambisas), en las cuencas de los ríos Cenepa y Santiago, siendo importante
rescatar el modo de vida de estas poblaciones indígenas que refleja una estrecha
relación biótica con su entorno, resaltando las prácticas cotidianas relacionadas con su
expresión oral y cultural, sus prácticas tradicionales, costumbres alimenticias y relaciones
sociales;
39
Que, en la zona se han identificado 51 especies nuevas para la ciencia entre especies
de flora y fauna, siendo destacable que la mayor parte de éstos corresponden a la
formación tipo tepui;
Que, dicha zona alberga áreas de importancia cultural y religiosa para los habitantes de
las comunidades nativas colindantes y les proporciona los recursos necesarios para su
subsistencia, los que han venido siendo aprovechados de manera sostenible;
Del texto transcrito se infiere que la propia norma señala de manera firme que, la
explotación minera, indiscutiblemente, causaría impactos en los ecosistemas de la
región fronteriza a la Cordillera del Cóndor, es decir, afectaría tanto a los pueblos
Awajún y Wampis; así como, a pueblos ubicados en zonas aledañas, tal como la
Ley señala.
40
Dichos impactos, conforme la norma, serían negativos, contaminando destruyendo
y modificando elementos integrantes del ecosistema, lo que desencadenaría una
evidente alteración de la forma de vida, subsistencia, y otros aspectos de vida de
las comunidades albergadas, siendo que la biodiversidad del territorio que ocupan
se encuentra directamente relacionadas a los factores naturales de la Cordillera
del Cóndor, las cuales se verían afectadas. En ese sentido, no sería necesario que
el pueblo indígena se desarrolle dentro de la circunscripción concesionada,
bastaría con que estas se encuentren en zonas aledañas, o sean susceptibles de
ser afectadas negativamente por el deterioro de las cuencas, flora, fauna, entre
otros componentes del ecosistema y medio ambiente, presentes en la Cordillera
del Cóndor.
Para los pueblos amazónicos sus territorios no sólo son bosques y ríos donde se
proveen de su subsistencia, la alimentación, materiales de construcción y remedios
vegetales, sino son lugares de encuentro personal con otros tipos de seres. Las mujeres
awajún llaman a sus cultivos «hijas», y los hombres consideran a los animales que cazan
como «cuñados». Son también lugares donde adquieren fuerza y protección de los seres
21
EXP. N.° 01848-2011-PA/TC : F 9. “Un Estado social y democrático de Derecho no solo debe garantizar la
existencia de la persona o cualquiera de los demás derechos que en su condición de ser humano y su dignidad le son
reconocidos (artículo 1º de la Constitución), sino también debe protegerla de los ataques al medio ambiente y a su
salud en el que esa existencia se desenvuelve, a fin de permitir que su vida se desarrolle en condiciones
ambientales aceptables, pues, como se afirma en el artículo 13º de la Declaración Americana sobre los Derechos
de los Pueblos Indígenas, el “derecho a un medio ambiente seguro, sano, [es] condición necesaria para el goce del
derecho a la vida y el bienestar colectivo”. F 13. “En su primera manifestación, esto es, el derecho a gozar de un
medio ambiente equilibrado y adecuado, éste comporta la facultad de las personas de poder disfrutar de un
medio ambiente en el que sus elementos se desarrollan e interrelacionan de manera natural y armónica; y, en el
caso de que el hombre intervenga, no debe suponer una alteración sustantiva de la interrelación que existe entre
los elementos del medio ambiente. Esto supone, por tanto, el disfrute no de cualquier entorno, sino únicamente del
adecuado para el desarrollo de la persona y de su dignidad (artículo 1° de la Constitución). De lo contrario, su goce
se vería frustrado y el derecho quedaría, así, carente de contenido”.
41
sobrenaturales. La tradición oral de este pueblo orienta hacia un uso sustentable de los
recursos. Las deidades femeninas llamadas Nugkui enseñaron a las mujeres awajún y
wampís a cultivar las plantas y les dieron las pautas para una relación productiva con la
tierra y una advertencia contra el mal uso de este recurso.
Cosmovisión:
Para los pueblos amazónicos sus territorios no sólo son bosques y ríos donde se
proveen de su subsistencia, la alimentación, materiales de construcción y remedios
vegetales, sino son lugares de encuentro personal con otros tipos de seres. Las mujeres
awajún llaman a sus cultivos «hijas», y los hombres consideran a los animales que cazan
como «cuñados». Son también lugares donde adquieren fuerza y protección de los seres
sobrenaturales. La tradición oral de este pueblo orienta hacia un uso sustentable de los
recursos. Las deidades femeninas llamadas Nugkui enseñaron a las mujeres awajún y
wampís a cultivar las plantas y les dieron las pautas para una relación productiva con la
tierra y una advertencia contra el mal uso de este recurso.22”
Asimismo:
"(...) para los pueblos indígenas Wampis y Awajún es fundamental conservar sus
territorios, porque, aparte de aprovechar equilibradamente los recursos naturales,
continúan manteniendo y ejerciendo sus costumbres tradicionales. En base a estas
costumbres, los territorios les sirven para mantenerse en contacto con los seres de la
naturaleza. Siguiendo esta idea, SERNANP (2012) sostiene que la tradición de los
pueblos Wampis y Awajún se basa en una relación vital con los espíritus de la
naturaleza. Por su parte, Regan (2010) señala que, para estos pueblos indígenas, sus
territorios no solo son los bosques, los ríos y las lagunas de donde se proveen para su
subsistencia, la alimentación, herramientas de construcción y plantas medicinales, sino
que son lugares de encuentro personal con otros tipos de seres.
(...)El estudio realizado por el Ministerio de Cultura (2015, p. 49), sostiene “que los
jóvenes, como parte de un rito de iniciación, se colocan detrás de la cascada sagrada
para recibir un espíritu protector que les proporcionaría valentía y protección. En una
visión, el espíritu protector se presentaba en la forma de un animal feroz, que el joven
debía tener la valentía de tocar”.
Al espíritu protector de la naturaleza, que todas las personas del pueblo Wampis y
Awajún aspiran a contactar por medio de sus visiones, se le denomina Arutam en
Wampis, y Ajutam en Awajún. Para estar en contacto con este espíritu, los indígenas se
van lejos y buscan un lugar adecuado como la catarata, las orillas de los ríos y
losbosques menos transitados. Para estos pueblos, cuanto más alejados estén, hay más
facilidad de contactarse con el Arutam/Ajutam. Para Fuller (2009), las cataratas son los
lugares reservados para las visiones de los hombres, mientras que los huertos eran los
de las mujeres. Las visiones de los hombres ponen el acento en la lucha y la caza; en
cambio, las visiones de las mujeres, en el cultivo y en la fertilidad de las chacras. Al
hombre que ha tenido visión, es decir, encuentro con el Arutam/Ajutam se le llama
Waimaku, quien es conocido por su valentía, sabiduría y liderazgo en la comunidad en
donde vive. A una mujer también se denomina de igual modo, pero, en cambio, la mujer
es conocida por la habilidad que posee en el cultivo y en la fertilidad de las chacras.
Por otro lado, el Registro Nacional de Identidad y Estado Civil (RENIEC) (2012) señala
que los mitos y relatos de los pueblos Wampis y Awajún son las principales fuentes de
conocimiento sobre el origen de su mundo y de todo lo que habita en él. Estos mitos y
relatos explican cómo los antepasados de estos pueblos se relacionaron con sus héroes:
Etsa (sol), Tsúnki (el espíritu del río, fuente de poderes chamánicos) y Nunkui (espíritu
de la tierra). Estos héroes les proporcionaron conocimientos, fuerza y valentía. Además,
como sostiene Brown (1984), los Awajún, a través de la relación con estas deidades o
22
http://sisbib.unmsm.edu.pe/bibvirtualdata/publicaciones/inv_sociales/N24_2010/pdf/a02.pdf;
42
héroes aprendieron y comprendieron el mundo y sus contradicciones, del mismo modo
ocurrió con el pueblo Wampis.
En la actualidad, las personas de los pueblos Wampis y Awajún, tanto hombres como
mujeres, aspiran a tener contacto con el Arutam/Ajutam, tal como señalamos en los
párrafos anteriores, y también siguen creyendo en algunas de sus deidades. Por
ejemplo, en el caso de las mujeres Wampis y Awajún toman en cuenta a las deidades
femeninas llamadas Nunkuis, madre de la tierra, quienes enseñaron a las mujeres a
cultivar las plantas y les otorgaron las pautas para una relación productiva con la tierra y
una advertencia contra el mal uso de este recurso (Regan, 2010). Entonces, en la
actualidad, las mujeres Wampis y Awajún cuando siembran sus plantas en las chacras
invocan al Nunkui a través de anen, cantos sagrados, para que las plantas den buenos
frutos.
Luego de haber estudiado el contexto social de los pueblos indígenas Wampis y Awajún
es aceptable afirmar que, para estos pueblos, el uso equilibrado de sus territorios, con
abundancia de recursos naturales, es imprescindible para solventar las necesidades
básicas y su continuidad histórica en el nuevo contexto social que experimentan.
Además, los pueblos Wampis y Awajún creen que, a través del contacto con los seres de
la naturaleza, obtienen sabiduría, valentía y liderazgo en la sociedad. De ahí que la
conservación y el cuidado de sus territorios sean necesarios para el encuentro con los
espíritus de la naturaleza. Esta manera de percibir sus territorios mantiene
comprometidos a los pueblos Wampis y Awajún a exigir un buen uso de los recursos
naturales.23
23
Flores, E. (2017). Lineamientos para las políticas de comunicación en la promulgación de leyes que afectan al
medio ambiente y a los pueblos originarios de la Amazonía peruana: propuesta a partir de la Ley N° 30230 y la
percepción de las comunidades Wampis y Awajún (Tesis de licenciatura en Comunicación). Universidad de Piura.
Facultad de Comunicación. Piura, Perú.
24
Verificándose en los mapas adjuntados por la parte demandante, específicamente el de fojas 08 a
12, en los cuales se advierte los elementos acuáticos, terrestres, histórico cultural, flora y fauna (sitios
de colpa, zona de cacería de animales, zona de tambo, zona de peces, zona de fuente de arcilla, zona de
recolección para subsistencia, zona de plantas medicinales, zona de fuente de sal, zona de chacras,
trocha para cazar) ubicados en el departamento de Amazonas, incluso en las zonas en las que se otorgó
los títulos de concesión minera.
25
Caso Comunidad Indígena Sawhoyamaxa vs. Paraguay. “Párrafo 118. Haciendo uso de los criterios señalados, este
tribunal ha considerado la estrecha vinculación de los integrantes de los pueblos indígenas con sus tierras
tradicionales y los recursos naturales ligados a su cultura que ahí se encuentren, así como los elementos
incorporales que se desprenden de ellos, deben ser salvaguardados por el artículo 21 de la Convención
Americana. La cultura de los miembros de las comunidades indígenas corresponde a una forma de vida particular de
ser, ver y efectuar en el mundo, constituido a partir de su estrecha relación con sus tierras tradicionales y recursos
naturales, no sólo por ser estos su principal medio de subsistencia, sino además porque constituyen un elemento
integrante de su cosmovisión, religiosidad, y por ende, su identidad cultural.
Párrafo 119 lo anterior guarda relación con lo expresado en el artículo 13 de la convención No. 169 de la OIT, en el
sentido de que los estados deberán respetar “la importancia especial que para las culturas y valores espirituales de
los pueblos interesados reviste su relación con las tierras o territorios, o con ambos, según los casos, que ocupan o
utilizan de alguna.
43
DECIMO SETIMO: Teniendo en cuenta los agravios expuestos por el demandante,
lo señalado por la parte demandada, y lo analizado en los considerandos que
anteceden, se advierte que:
17.2. Este retardo no puede ser oponible en perjuicio de los pueblos indígenas, no
se puede justificar el incumplimiento del reconocimiento a un derecho en base a
su propia omisión, menos el Estado. En el mismo sentido, las empresas y/o
personas concesionarias tampoco pueden generarse un derecho, en razón que el
mencionado Convenio resultaba vinculante para todos desde el año 1995, siendo
26
En esta sentencia el Tribunal Constitucional ha mencionado ilustrativamente la existencia de
importantes instrumentos internacionales (algunos vinculantes y otros ilustrativos),:
Declaración de las Naciones Unidas sobre los derechos de los pueblos indígenas, aprobada por la Asamblea General
el 13 de septiembre de 2007 (artículo 38º ); Pacto Internacional de Derecho Civiles y Políticos (PIDCP), adoptado el
16 de diciembre de 1966, ratificado por el Estado peruano el 28 de abril de 1978 (artículo 2, inciso 2); Pacto
Internacional de Derechos Económicos, Sociales y Culturales (PIDESC), adoptado el 16 de diciembre de 1966,
ratificado por el Estado peruano el 28 de abril de 1978 (artículo 2, inciso 1); Observación General N.º 03 del Comité
DESC, sobre la índole de las obligaciones de los Estados Partes (párrafo 1 del artículo 2 del Pacto), adoptada por
dicho órgano en su Quinto Período de Sesiones (1990;- Observación General N.º 09 del Comité DESC, sobre la
aplicación interna del Pacto, adoptada por dicho órgano en su Décimo Noveno Período de Sesiones (1998).- En esta
Observación, el Comité interpreta que los Estados Partes tienen el deber de dar efectividad a los derechos
reconocidos en el PIDESC (considerando Nº 5) ;Convención Americana sobre Derechos Humanos (CADH), adoptada el
22 de noviembre de 1969, ratificada por el Estado Peruano el 12 de julio de 1978 ( artículo 2º); Protocolo Adicional a
la Convención Americana sobre Derechos Humanos en Materia de Derechos Económicos, Sociales y Culturales,
“Protocolo de San Salvador” (PSS), adoptado el 17 de noviembre de 1988, ratificado por el Estado Peruano el 17 de
mayo de 1995 (artículo 2).
27
STC N° 05427-2009-PC/TC, que exhortó al Congreso de la República con la promulgación de la Ley del derecho a la
Consulta Previa a los Pueblos Indígenas u Originarios reconocido en el Convenio Nº 169 de la Organización
Internacional del Trabajo", y ordenó su reglamentación.
44
que la falta de una norma interna específica no podía ser barrera para su
cumplimiento.
17.3. Es de remarcar que todas las Concesiones hoy cuestionadas, si bien fueron
otorgadas antes de la dación de la Ley N° 29785, empezaron a expedirse con
fecha posterior a la entrada en vigor del Convenio 169 de la OIT, año 1995, fecha
desde la cual forma parte de nuestro sistema jurídico.
28
Convenio 169 OIT (Artículo 14. 1.)
29
STC 00022-2009-AI: 11. De otro lado, se ha argumentado también que el Convenio N.° 169 no ha sido
reglamentado, por lo que no podría ser aplicado. El planteamiento subyacente a este argumento esgrime que el
referido Convenio sería una norma programática, no pudiendo ser aplicada sin que previamente exista una
regulación domestica que la desarrolle. Al respecto, este planteamiento puede ser cuestionado desde dos
diferentes perspectivas. En primer lugar, asumiendo como lo alega el Ejecutivo que se trata de una norma
programática, debe tenerse presente que el Convenio fue suscrito por el Estado peruano en 1994, entrando en
vigencia el 1995. Es decir, a la fecha han transcurrido más de 15 años de su entrada en vigencia, tiempo suficiente
para su regulación, lo que no ocurrió por exclusiva responsabilidad del Estado. Esta argumentación no hace sino
poner en evidencia una omisión por parte del Estado, debiendo por ello ser desestimada. En todo caso, este Tribunal
no soslaya que con fecha 19 de mayo de 2010 el Congreso ha aprobado la Ley sobre el Derecho a la Consulta
Previa a los Pueblos Indígenas u Originarios reconocidos en el Convenio N.° 169 de la OIT, lo que importa un
avance importante en la tutela del derecho de consulta. 12. En segundo lugar, no es un argumento
constitucionalmente válido excusar la aplicación de derechos fundamentales debido a una ausencia de regulación
45
DECIMO OCTAVO: En cuanto a la nulidad de los títulos de concesiones mineras
(listado a fojas 197 a 203 de la demanda y parte de dichas resoluciones a fojas
102-141,144-155 y 161-192 de autos) y de las Resoluciones Directorales N°402-
2009-MEM/AAM de fecha 09 de diciembre del 2009 y N°119-2011-MEM-AAM de
fecha 15 de abril del 2011). Tenemos que la Ley N° 27444- Ley de Procedimiento
Administrativo General LPGA (vigente a la fecha de dicho actos administrativos)
en su artículo 10 establece:
De tal forma que, todo acto administrativo que no cumpla con los requisitos de
validez carece de eficacia legal, tanto es así que, incluso, en el caso de
otorgamiento de concesiones mineras, el Estado se reserva el poder de declarar
unilateralmente la caducidad de la concesión cuando colisiona con derechos
prioritarios (D.S. N° 014-92-EM, donde se prevé en el artículo 64° la posibilidad de
cancelar los petitorios o concesiones, cuando se superponen a derechos
prioritarios, o cuando el derecho resulte inubicable).
Por tanto, la propia administración estatal, perfectamente podía realizar todos los
actos administrativos necesarios para el cumplimiento del marco constitucional,
dado que, el hecho de otorgar una concesión, siendo un acto administrativo y no
un contrato, por ende un acto jurídico de Derecho Público, el particular se
legal o infra legal. Ello sería dejar en manos de la discrecionalidad estatal el cumplimiento de los derechos
fundamentales, posición que riñe con el Estado Constitucional del Derecho en la que la Constitución vincula a toda la
sociedad, incluyendo a los órganos constitucionales o a los llamados Poderes de Estado. Desde esta perspectiva, la
naturaleza programática o aplicativa no tiene mayor incidencia puesto que lo concreto es que debido a una omisión
normativa se deniega el ejercicio de una serie de derecho fundamental a un sector de la sociedad. Más aun, en el
caso de compromisos internacionales, deben tenerse presente los artículos 26 y 27 de la Convención de Viena sobre
el Derecho de los Tratados. El primero de ellos establece que: “Todo tratado en vigor obliga a las partes y debe ser
cumplido por ellas de buena fe.” Mientras que el segundo indica que; “Una parte no podrá invocar las disposiciones
de su derecho interno como justificación del incumplimiento de un tratado.” Si bien en este caso no se está
justificando el incumplimiento del Convenio N.° 169 en base a una disposición de derecho interno, se pretende
justificarlo en base a una omisión, situación que bien puede interpretarse subsumida en el mandato del artículo 27
de la convención mencionada. 13. En tal sentido, la omisión en la regulación de algún mandato ius fundamental
contenido en un tratado internacional tampoco habilita al Estado a incumplir con las obligaciones emanadas de él.
En todo caso, frente al vacío o deficiencia de la ley los entes jurisdiccionales no pueden dejar de administrar justicia
(art. 139, inciso 8 de la Constitución). Desde luego, ello coloca al juez que debe aplicar dicha norma en una situación
delicada y compleja, por cuanto, tendrán que configurar los elementos y requisitos del derecho sobre la base de
situaciones concretas”.
30
Stc. 0048-2004-AI/TC, ha señalado: 102
31
Por ende acto jurídico de Derecho Público.
46
encontraba subordinado al desarrollo legislativo y reglamentario que se realice a la
luz de la Constitución32 y el mencionado Convenio 169 OIT.
c). Luego ya, desde la normatividad desarrollada a partir del año 2011, con
ejecutar el derecho a la consulta de los pueblos indígenas, alegando, por lo
contrario, que no corresponde realizarla en el caso, por considerar que
éstos solo son títulos de concesión minera que no confieren autorización
para el inicio de actividad exploración y explotación.
32
STC. 006-2006-PI/TC, f.105. (...) Si bien es cierto que la libertad contractual deriva de la ley, no puede
discutirse la facultad administrativa de regularla por razones del orden público; ello, empero, no es óbice
para discutir la legitimidad de la Ley cuestionada respecto a la posible vulneración de otros bienes
jurídicos constitucionales.
33
Recuérdese los sucesos de Bagua conocido como el Baguazo que dio lugar a la dación de la Ley N°
29785, el Proyecto Minero Conga y recientemente las Bambas en la región de Apurímac).
47
zonas mencionadas, debe realizarse antes del otorgamiento de las
concesiones mineras, puesto que al otorgar dichos títulos se otorgan
derechos para la exploración y/o explotación, debiendo observar algunos
requisitos para ejercerlo, tal como se verifica de la aprobación del Estudio
de Impacto Ambiental (EIA) Semidetallado y de la Declaración de Impacto
Ambiental (DIA), donde señalan plazo para el inicio de la actividad, por lo
que alegado por la demandada carece de sustento.
34
Stc. 0006-2006-PC/TC, f.14.
48
normatividad infra constitucional, como es el D.S. 014-92-EM, prevé en su
artículo 64° la posibilidad de cancelar los petitorios o concesiones, cuando
se superponen a "derechos prioritarios", o cuando el derecho resulte
inubicable.
DECISIÓN:
35
Art. 118.1 de la Constitución del Perú.
49
Por los fundamentos expuestos, de conformidad a lo dispuesto en los artículos 1°,
2° y 37° del Código Procesal Constitucional, el señor Juez del Décimo Juzgado
Constitucional, decide:
50