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E.A.P. Ciencias histórico, sociales y geográficas.

DENOMINACION: Análisis de la realidad nacional y mundial.


ENSAYO: POLÍTICAS DE ESTADO DE ACUERDO
NACIONAL. 4. Estado eficiente, transparente y
descentralizado. Vigésimo sexta política de estado:
‘’Promoción de la ética y la transparencia y erradicación de la
corrupción, el lavado de dinero, la evasión tributaria y el contrabando en todas
sus formas’’
FECHA: 22/10/18
APELLIDOS Y NOMBRES: Tinoco Pomachagua, Edward.

‘’PROMOCIÓN DE LA ÉTICA Y LA TRANSPARENCIA Y ERRADICACIÓN


DE LA CORRUPCIÓN, EL LAVADO DE DINERO, LA EVASIÓN TRIBUTARIA
Y EL CONTRABANDO EN TODAS SUS FORMAS’’

INTRODUCCION
En el siguiente ensayo se dará a conocer La corrupción, que es una de las
grandes preocupaciones de los ciudadanos en todo el mundo. En América
Latina, y específicamente en el Perú, los casos de corrupción han sido muchos
y han ocurrido en casi todos los Gobiernos. El estado ha adoptado un
compromiso con la sociedad peruana para combatir la corrupción creciente en
las instituciones públicas y privadas, poniendo énfasis en los principios éticos y
los valores sociales, todo con la finalidad de promover niveles crecientes de
paz, transparencia, confianza y efectiva solidaridad.

DESARROLLO
La corrupción (ya sea en forma de tráfico de influencias, coimas, soborno)
constituye una vulneración de los derechos humanos por cuanto,
generalmente, implica una violación del derecho a la igualdad ante la ley, y en
algunos casos, llega a suponer una vulneración de los principios democráticos,
lo que conduce a la sustitución del interés público por el interés privado de
quienes se corrompen. Asimismo, es sabido que las actividades deshonestas y
corruptas –que se presentan sin distingo de lugar ni de magnitud– destruyen
las bases de la democracia y perjudican a todos los peruanos; y a la vez,
conspira contra el crecimiento económico del país, afectando los derechos
fundamentales de las personas y la calidad de vida de los ciudadanos.
Es por esto que el estado peruano se ha debilitado institucionalmente, ante
eso, se ha visto esencial tomar medidas drásticas para poder combatir este
gigantesco problema como: enfatizar los principios éticos que refuercen el
cumplimiento ciudadano de las normas; velar por el desempeño responsable y
transparente de la función pública, promover la vigilancia ciudadana de su
gestión y el fortalecimiento y la independencia del Sistema Nacional de Control;
desterrar la impunidad, el abuso de poder, la corrupción y el atropello de los
derechos; desarrollar una cultura de paz, de valores democráticos y de
transparencia, que acoja los reclamos genuinos y pacíficos de los distintos
sectores de la sociedad; promover una cultura de respeto a la ley, de
solidaridad y de anticorrupción, que elimine las prácticas violatorias del orden
jurídico, incluyendo el tráfico de influencias, el nepotismo, el narcotráfico, el
contrabando, la evasión tributaria y el lavado de dinero; y regular la función
pública para evitar su ejercicio en función de intereses particulares.
En su presentación ante el Congreso, el jefe del Gabinete Ministerial, César
Villanueva, informó que el Gobierno impulsará un conjunto de medidas para
luchar contra la corrupción. Estas son las iniciativas anunciadas:
1) El Presidente de la República, todos los ministros de Estado y altos
funcionarios con capacidad de decisión y manejo de recursos públicos
estarán obligados a presentar su declaración jurada de intereses y
parentesco.
2) Propuesta de ley de gestión de intereses o ley de "lobbies", a fin de que
estas actividades sean parte de un proceso efectivamente regulado y
transparente, y evitar el uso de los cargos de la función pública para
satisfacer intereses personales, económicos o políticos.
3) Un proyecto de ley de ampliación de la muerte civil por narcotráfico,
lavado de activos y financiamiento del terrorismo.
4) Propuesta destinada a reestructurar el modelo de financiamiento de
campañas electorales para la penalización de los aportes no declarados
y la bancarización del financiamiento de la política.
5) Proyecto de ley de extinción de dominio, a fin de recuperar rápidamente
los activos ilícitamente obtenidos por corruptos y lavadores de dinero.
6) Propuesta para sancionar la corrupción en el sector privado.
7) Impulso del intercambio global de información financiera y tributaria, así
como una efectiva aplicación de la Convención Internacional contra el
Soborno Trasnacional de la OCDE.
8) Creación del registro de beneficiarios finales que reunirá información de
personas naturales y jurídicas que efectivamente poseen, controlan o se
benefician económicamente de sociedades mercantiles, fideicomisos y
fundaciones.
9) El currículo escolar incorporará una sólida formación en valores
democráticos y éticos.

CONCLUSION
Después de haber analizado este delicado tema, se cree pertinente plantear
una estrategia con tres grandes ejes: el primero en el nivel educativo, que
busque desde la formación inicial de las personas, cambiar el concepto de
aceptación implícita y explicita de la corrupción por parte de estas con una
campaña de valores. El segundo, el institucional, comprende una reforma
institucional de cuatro entidades públicas cruciales, que funcionando con
eficiencia, transparencia y justicia, permitiría que la corrupción sea reducida en
forma dramática. Se trata de las instituciones del Estado encargadas de las
funciones de control, tributación, inteligencia financiera y Administración de
Justicia: la Contraloría General de la República, la Sunat y Unidad de
Inteligencia Financiera (UIF) de la Superintendencia de Banca y Seguros
(SBS).
El tercer eje es la justicia, que es llevada a cabo por el Poder Judicial, y su
influencia es correctiva y sobre la conciencia ciudadana porque su efecto es
disuasorio y ejemplar: si las sentencias sobre corrupción son débiles y erróneas
aumentará la corrupción debido a que se percibirá falta de justicia e impunidad
frente a los delitos. Por el contrario, si las sentencias son justas, implacables y
duras, la corrupción verá peligrar su accionar, y motivaría a la ciudadanía a
confiar en el sistema judicial, denunciaría actos corruptos, no toleraría la
corrupción, y no cometería actos incorrectos. En consecuencia, para acabar
con la corrupción se requiere una política pública que incluya los tres ejes
indicados: educación en valores éticos, reforma de las instituciones
mencionadas, incidiendo en la necesidad de personal probo y el cumplimiento
cabal de sus funciones; y una justicia efectiva y oportuna.

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