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Revista Venezolana de Ciencias Sociales

ISSN: 1316-4090
rvcsunermb@gmail.com
Universidad Nacional Experimental Rafael
María Baralt
Venezuela

Aparicio A., Héctor


Medios de comunicación y opinión pública en la sociedad democrática
Revista Venezolana de Ciencias Sociales, vol. 8, núm. 2, julio-diciembre, 2004, pp. 322-333
Universidad Nacional Experimental Rafael María Baralt
Cabimas, Venezuela

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Revista Venezolana de Ciencias Sociales
UNERMB, Vol. 8 No. 2, 2004, 322 - 333
ISSN: 1316-4090

Medios de comunicación y opinión pública en la


sociedad democrática

Héctor Aparicio A.*

RESUMEN ______________________________________________________

La opinión pública se presenta como el conjunto de ideas que pueden expresarse


en la esfera de lo público a través de los Medios de Comunicación Social (MCS), sin
miedo al aislamiento o a la coacción, dado que para ejercerla es necesario detentar al-
gún tipo de poder (económico, político, religioso, civil u otro); de allí, que se considere
un fenómeno social al amparo de la comunicación política. Un enfoque dialéctico de la
opinión pública se presenta, cuando por un lado, una tesis sostiene que los sectores
mayoritarios de la población disponen cada vez de mayores espacios de participación
en los (MCS), frente a otra que postula todo lo contrario y los reduce a una participa-
ción minoritaria manipulada e inducida, dado el carácter neoliberal con el que son ge-
renciados los MCS, reproduciendo un sistema ideológico que lucha por preservar su
“status quo” y, para ello, recurre a la manipulación de masas.

Palabras Clave: Opinión Pública, Medios de Comunicación Social, Libertad


Participativa, Interacción Pública, Industria Mediática.

__________________________________________________Recibido: 08-10-04 / Aceptado: 20-11-04

* Profesor ordinario de la Universidad Nacional Experimental Rafael María Baralt


(UNERMB). Candidato a magíster Scientiarium en Docencia para Educación Superior,
Programa de Postgrado (UNERMB). Correo electrónico: gledysarevalo@yahoo.com

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Communicational Media and Public Opinion in


Democratic Societies

ABSTRACT______________________________________________________

Public opinion is presented as a set of ideas which are expressed in the public
sphere through social communications media (SCM), without fear of isolation or coer-
cive action, due to the need to confront some type of power (economic, political, reli-
gious, civic, or others), and therefore is considered a social phenomenon protected
within the political communication field. A dialectical focus of public opinion is presen-
ted, when on the one hand the thesis sustains that the larger sectors of the population
have increasingly greater participation in SCM, in relation to other sectors that affirm
the contrary, and the minority space is reduced, induced and manipulated due to the
neoliberal character with which SCMs are managed, producing an ideological system
that fights to preserve its “status quo”, by manipulating the masses.

Key words: Public opinion, social communication media, participatory free-


dom, public interaction, the media industry.

Introducción comunicación de masas, régimen políti-


co y opinión pública? -¿Qué función es-
Los medios de comunicación se tán llamados a cumplir los medios de
han convertido en ámbitos privilegiados comunicación en una sociedad demo-
de espacio público, información, propa- crática? y por último ¿Cuál sería la rela-
ganda, publicidad y consenso. Su formi- ción ideal entre medios de comunica-
dable capacidad de difusión les confiere ción y opinión pública?
inevitable omnipresencia y es justamen-
te allí donde radica su debilidad más no- 1. Fundamentación Teórica
toria; esto se debe a que están destina-
dos a servir a la sociedad, de la cual 1.1. La dialéctica de la
toman su razón de ser, pero no necesa- comunicación
riamente la expresan, es decir, no la co- Comencemos diciendo que escri-
munican. bir sobre un tema tan polémico como
Las reflexiones siguientes tienen es todo lo relacionado con la opinión
como propósito describir las caracterís- pública, remite de forma inmediata a un
ticas actuales y reales de los medios a ni- enfoque de corte ideológico, razón por
vel global y bajo ese contexto analizar la cual se puede afirmar que este tema
las siguientes interrogantes: ¿Qué tipo gira en torno a dos vertientes con ca-
de relación existe entre los medios de racterísticas dalécticas bien definidas: la

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primera, centrada de manera irónica, los medios de comunicación constitu-


en las opiniones de sectores mayorita- yen cualquier objeto que hace las veces
rios que cuentan cada vez más con de vía para conducir la información, en
mayores espacios disponibles en los este caso opinión, de un sujeto a otro.
medios de comunicación social, para La relación de la opinión pública
hacer valer sus opiniones. De manera con los medios de comunicación de ma-
simultánea se le contrapone una segun- sas y con la esfera política es bastante
da vertiente que obedece a corrientes clara. Respecto a lo primero, es eviden-
erráticamente llamadas “minoritarias”, te que los medios son el primer y princi-
debido a que abarca un número alta- pal instrumento, no sólo de interacción
mente significativo de la población, a la de opiniones individuales, sino vehículo
cual mal podemos llamar mayoritarias, de difusión de opiniones asumibles por
en el sentido de participación dentro de individuos carentes de una postura so-
los medios de comunicación (sean estos bre muchas cuestiones de la realidad
de carácter masivo o alternativo), mani- circundante.
puladas e inducidas en su criterio de A partir del siglo XIX y todo el XX,
opinión. la opinión pública desempeñó un papel
En este sentido, el carácter neoli- legitimador del sistema político, porque
beral con el que se gerencia en la actua- se trató de un sistema soberano en tan-
lidad los medios de comunicación so- to representa la opinión mayoritaria y a
cial, reproduce el sistema ideológico la vez es principio de toda estructura
con el que se han de manipular las ma- constitucional.
sas, haciéndoles creer que participan en Sin embargo, la realidad es otra
términos de opinión así como en la solu- porque el miedo ha dado origen a una
ción de problemas de sus comunidades, esclavitud participativa debido a la in-
cuando realmente se le está dando al consistencia de la información, funda-
Estado un carácter megalómano para la mentada en el “rumor”, en la “verdad
solución de dichos problemas, redu- relativa” de la acción social, planteada
ciendo el carácter real de la participa- por Habermas, reconocida por
ción en la conformación de opinión pú- Chomsky y de la cual no escapa Latinoa-
blica, a través de simples mensajes de mérica. De esta manera es posible
carácter exclusivamente declarativos. constatar que quienes consideran mani-
pulada su opinión pública en función de
Este análisis permite deducir que la
los intereses del “coloso del norte” y
opinión pública es el conjunto de ideas
representados por los sectores neoli-
que pueden expresarse en la esfera de
berales de la región, son quienes con-
lo público sin miedo al aislamiento o a la
trolan la articulación de la opinión a tra-
coacción dado que para ejercerla, es
vés de los medios, pues, son ellos quie-
necesario detentar algún tipo de poder.
nes la editorializan en las llamadas so-
Se entiende de esta manera, que la for-
ciedades democráticas.
mación de la opinión pública es un fenó-
meno social que se genera al amparo de Respecto a la relación entre opi-
la comunicación política, mientras que nión pública y régimen político (demo-

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cracia, gobierno, partidos, elecciones, El pensamiento común ignora que


etc.) los conceptos señalados tienen en el mundo social es un producto humano
común el hecho de considerar la opi- –no natural- dado previamente a la con-
nión pública como factor determinante ciencia de los individuos– un mundo
de la acción política. Hay toda una línea construido, con lo cual se plantea la po-
de pensamiento, que dirige su atención sibilidad de su transformación: sólo por
a los cambios profundos que se dan en parte de quienes tienen el poder ya que
las sociedades democráticas, subrayan- están en condiciones de manipular la
do la dinámica conflictiva del proceso realidad a su conveniencia e intereses...
de igualdad. La opinión pública creada por los
Esta visión crítica de las masas y de medios aborda los siguientes conteni-
los medios de comunicación indica que dos: la tematización (¿qué hay que pen-
hay muy pocas personas que expresen sar?), la categorización (¿cómo pensar-
más opiniones que las que reciben así; lo?) y la jerarquización (¿qué valor con-
las opiniones sólo generan acciones que cederle?). Este esquema supone la
están controladas por los grupos de po- creación de una imagen –modelo, me-
der, por cuanto las masas no tienen au- táfora– del mundo que incluye toda una
tonomía organizativa respecto a las ins- «opinión» sobre necesidades, valores,
tituciones. El Estado, como democracia experiencias, creencias y expectativas.
de masas, exige la creación de una opi- En este momento es conveniente
nión pública con el objeto de que pueda señalar que Chomsky (1991), establece
hacerse efectivo un proceso permanen- que los medios están al servicio del po-
te de formación de criterios y de volun- der estatal y empresarial, dada su de-
tad como correctivo –y garantía de li- pendencia económica (publicidad) y su
bertad– del ejercicio del poder y del do- capacidad de difusión, de modo que li-
minio (Habermas, 1987) mitan los términos del debate que pue-
En consonancia con los plantea- den originar los hechos, haciendo una
mientos del autor de Teoría de la acción información que acaba por apoyar al
comunicativa, podemos decir que la ima- poder establecido.
gen del mundo que se estructura a partir De lo anteriormente expuesto po-
de los mensajes de los medios de comu- demos columbrar que queda entendi-
nicación es una construcción social de la do que el poder establecido es común
realidad, determinada no sólo por la a los partidos alternantes en el poder,
ideología y los intereses de los indivi- lo que permite comprender que el do-
duos, sino también de los propios me- minio económico-político, es el resul-
dios; o, más concretamente, los medios tado del consenso de las élites podero-
de masas son determinantes en la per- sas y de la relación empresa-Estado.
cepción que tenemos de los hechos, Los medios son, entonces, «fabrican-
normas y valores de la sociedad en el tes de consentimientos », porque es-
momento en que hacen una selección de tán comprometidos con el orden social
temas y adoptan un punto de vista que del que son beneficiarios, y fomentan
subraya unos aspectos y oculta otros. la indiferencia y la apatía política impi-

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diendo el pensamiento y la acción inde- vo; de allí que existan intereses diversos
pendientes de las masas. Su función es la entre ellos y el Estado, a veces entre los
de divertir, entretener e informar, así mismos empresarios de los medios y en
como inculcar a los individuos los valo- ocasiones, entre aquéllos y la sociedad
res, creencias y códigos de comporta- organizada. Todo ello, gracias a que la
miento que les harán integrarse con las democracia es el resultado de procesos
estructuras institucionales de la socie- deliberativos y toda deliberación supo-
dad. En un mundo en el que la riqueza ne la modificación endógena de las pre-
está concentrada en poquísimas manos ferencias a través de la comunicación.
y en el que existen grandes conflictos de En los regímenes autoritarios, el
intereses de clase, el cumplimiento de tratamiento que se da a la información y
tal papel requiere una propaganda con- a los propios medios es sistemática-
solidada y sistemática. mente de control y de una rigurosa su-
No obstante, esto no significa que pervisión que marca las tendencias, o lí-
no haya disidencia en los medios res- neas del contenido y programación de
pecto a políticas concretas o censuras a los medios. En dichos regímenes, el po-
dirigentes. Muchas veces, adoptan po- der económico se encuentra concen-
ses de antigubernamentalismo como trado en una minoría vinculada con las
vía para ganar credibilidad ante la au- fuerzas políticas estatales, y en conse-
diencia, situación que sólo se presenta cuencia, los medios, al pactar con el po-
cuando los medios se sienten amenaza- der público y el poder económico, mo-
dos por un Estado que antepone los in- nopolizan el espacio público de interco-
tereses de las mayorías a los intereses municación e intercambio, mediatizan-
particulares o elitescos; este es el mo- do la opinión pública, (Carbonel, 2000).
mento en el cual dichos medios ven Sin embargo, en las democracias
afectados sus intereses hegemónicos de actuales, la tendencia es que el poder
poder, control y beneficio socio-econó- económico está representado en los
mico, cuestión que les impide mantener medios, lo que los convierte en un espa-
su status quo. cio privado, permitiendo el intercambio
En otro orden de ideas, la demo- con la sociedad y el Estado, dependien-
cracia como sistema perfectible, de do de la condición de rentabilidad que
acuerdo con la definición ya clásica, se ello implique.
entiende como un proceso histórico En este sentido, podemos argu-
con fases de transición, consolidación y mentar que a principios del siglo XX,
persistencia analíticamente distintas, Dahi (1992) consideró dos elementos
aún si empíricamente son superpuestas básicos de un sistema democrático: Li-
según lo plantean O’Donell y Schmitter, bertad de expresión, que se traduce en
citados por Lynn Karl (1991). Por lo tan- que los ciudadanos tienen el derecho a
to, la relación entre medios y democra- expresarse, sin correr peligro de sufrir
cia, consiste en que la información es la castigos severos, en cuestiones políticas
base de todo proceso democrático, por definidas con amplitud, incluida la críti-
cuanto éste es un proceso comunicati- ca a los funcionarios públicos, el gobier-

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no, el régimen, el sistema socioeconó- Cuando se habla de interés público, en


mico y la ideología prevaleciente. Esta términos de opinión, se identifica al sis-
visión puede conceptualizarse como tema de medios como una alternativa
ampliamente participativa en la confor- clave en la que los ciudadanos deberían
mación de la opinión pública, pues, en la apoyarse, informarse y tener la posibili-
variedad y diversificación de las fuentes dad de deliberación. De esta forma, la
de información, los ciudadanos tienen evaluación y análisis que puede hacerse
derecho a procurarse distintos orígenes de los medios, a la luz de la democracia,
de información, que existan sino que es- definitivamente deben pasar por la
tén amparadas por la ley. Estas institu- prensa, radio, televisión, cine, Internet,
ciones fueron la base de los medios de libros u otro, es decir, por todos los
comunicación y formación de opinión productos mediáticos.
pública, en las democracias modernas, a En realidad, esto no se cumple a ca-
pesar de que hoy el campo del ejercicio balidad, ya que el interés público tiene
de las instituciones democráticas se am- menor atención en los medios que las
plía cada vez más. ganancias económicas generadas por el
En concreto, se asume que los me- sensacionalismo, las historias triviales y
dios de comunicación en una sociedad el amarillismo, aspectos estos que sir-
democrática cumplen con las siguientes ven de catalizadores en la mediatización
funciones: a) producir información, cul- y parcialización de la información ante la
tura, educación y entretenimiento que opinión pública. A principios del siglo
contribuya a la formación de una cultura XXI, el equilibrio entre el interés públi-
cívica; b) supervisar y vigilar la gestión y co y las ganancias económicas de las in-
organización del poder público; c) ser- dustrias es lo que dibuja el dilema de los
vir al interés público de los ciudadanos; medios en una democracia; pero estos
d) difundir dicha información y conver- dos aspectos no lo son todo, debido a
tirla en atractiva para la audiencia. Por que la cultura cívica de las sociedades
estas razones, el Estado, debe ser ga- conserva su propias paradojas y contra-
rante del cumplimiento ético de estos dicciones, que fortalecen con ello la in-
principios democráticos, que en pocas dustria comercial mediática de la opi-
palabras, regulan la formación equili- nión pública.
brada de una opinión pública, en bús- Estas afirmaciones permiten co-
queda del fortalecimiento del estado de rroborar que en la relación que se esta-
derecho, sea para impedir los abusos o blece entre medios de comunicación y
para anular actos contrarios a las nor- sociedades democráticas, surge un ele-
mas establecidas. mento que se considera determinante
1.2. El poder de los medios en los órdenes jurídicos democráticos:
Los medios en la democracia se el reconocimiento de las verdaderas
fundamentan en el modelo de espacio fuerzas de interés, que se traducen en
público (Habermas, 1980) donde se ca- opinión pública. No obstante, si las ins-
naliza la opinión y se pondera el interés, tituciones democráticas son universales
el cual ha tenido muchas acepciones. (ciegas a la identidad de los participan-

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tes), quienes dispongan de mayores re- grado que, más que programas, los can-
cursos tendrán más posibilidades de im- didatos y partidos suelen presentar fra-
poner su factum en los conflictos dirimi- ses sueltas, capaces de ajustarse a los
dos por la vía democrática. formatos e intervalos a través de los
Es evidente entonces, que la inte- cuales los medios dan noticia de los
racción en un sistema de carácter de- acontecimientos políticos.
mocrático, funciona por medio de la Eso explica que actualmente, se ha
promoción de intereses y éstos se disi- extendido la preocupación ante el pre-
pan generalmente en los medios de co- dominio de los medios en la conforma-
municación como vimos con anteriori- ción y en la definición de la opinión pú-
dad. De hecho, las fuerzas capacitadas blica. Se puede inferir de lo dicho, que si
actúan de manera colectiva y funcionan los medios fuesen verdaderos espacios
activamente cuando se trata de la ins- abiertos a la pluralidad de las sociedades
trumentación y codificación de sus inte- y a la deliberación que requieren los
reses, y si tomamos en cuenta que el asuntos públicos, esa inquietud sería
poder económico puede convertirse en menor. Sin embargo, lejos de formar
poder político, podemos colegir que las parte de las tendencias democratizado-
consecuencias de no vislumbrar las ver- ras que de una u otra manera se han
daderas fuerzas de control sobre la in- propagado por los sistemas políticos de
formación, que alimenta o segrega a la casi todo el planeta, los medios de co-
democracia, impactan a la sociedad y al municación tienden a incrementar su
sistema de forma determinante aunque enorme influencia mediatizadora.
muchas veces de manera parcializada. Esta situación se alimenta de dos
En el mundo contemporáneo, no tendencias inherentes a los medios con-
existe mecanismo de mayor influencia temporáneos. Por un lado, las alianzas
sobre las sociedades que los medios de empresariales colocan progresivamente
comunicación de masas. Hoy en día la en pocas manos el control de los medios
política depende, indudablemente, de de comunicación. Al mismo tiempo, las
la propagación que pueda encontrar en innovaciones tecnológicas permiten la
los medios. Partidos y candidatos y jun- propagación más amplia en cobertura de
to con ellos cualquier institución o per- los mismos mensajes mediáticos.
sonaje que busque relevancia pública, Resulta poco útil “quedarse cruza-
tienen que ganar espacios y a menudo do de brazos” a lamentar la ausencia de
también aceptaciones en los medios de pluralidad y la hegemonía de un pensa-
comunicación, pues, es a través de miento único que puede significar la
ellos que se canaliza el grado de in- concentración de muchos medios en
fluencia sobre la opinión pública. Éstos unas cuantas corporaciones. A esa reali-
no sólo determinan la cantidad, sino dad, se le puede atenuar con medios de
también la calidad de los mensajes en- carácter público y con un empleo crea-
tre emisor y receptor. tivo de las nuevas tecnologías. Es posi-
El discurso político actual, suele ble circunscribir los medios de carácter
ajustarse a las exigencias mediáticas a tal mercantil en legislaciones que les asig-

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nen responsabilidades y que reconoz- efectos en la formación ciudadana y


can los derechos que los ciudadanos tie- moral de las personas; especialmente,
nen delante de ellos. causan preocupación las implicaciones
1.3. La necesidad de una nueva que puedan tener en los espectadores
legislación más jóvenes, los contenidos de carácter
Los nuevos recursos comunicati- violento o apropiado para adultos.
vos como la Internet, la telefonía ina- También suele ser motivo de deba-
lámbrica, la comunicación satelital, en- te la distorsión de los asuntos públicos
tre otros, no anulan el carácter ni las cuando pasan por el filtro de los medios
prácticas autoritarias de los medios ma- de comunicación. Con frecuencia pue-
sivos convencionales pero constituyen den advertirse decisiones políticas (que
contrapesos, a veces significativos, de- pueden estar influenciadas desde el go-
lante de ellos. La otra gran fuente de bierno u otros poderes de carácter
exigencias delante de la televisión, la ra- económico, religioso o partidista) para
dio y la prensa (la cual en comparación soslayar o censurar contenidos incó-
con los medios electrónicos tiene au- modos o polémicos. En otros casos, los
diencias numéricamente modestas, mismos medios distorsionan los asun-
pero cualitativamente importantes) es tos públicos al manejar su difusión con
el afán de los núcleos sociales más acti- parcialidad o sensacionalismo, especial-
vos para valorar los mensajes de los me- mente cuando sienten que sus intereses
dios e incluso, para replicar delante de económicos están siendo lesionados
ellos. Basta observar el rol activo y pro- con una mayor regulación por parte del
tagónico que comienza a adoptar la so- Estado. En algunos casos es frecuente
ciedad civil organizada o las Organiza- observar la difuminación de la frontera
ciones No Gubernamentales (ONG). entre la vida privada y los deberes insti-
En las sociedades políticamente tucionales de los personajes públicos, lo
más desarrolladas el escrutinio ciudada- que evidencia el poder mediatizador de
no de los medios se ha convertido en los medios de comunicación.
práctica asidua y fructuosa para suavizar Aunque no existe un esquema que
el autoritarismo de los medios y su pa- pueda considerarse universalmente
pel mediatizador en la conformación de aceptado, ni eficaz, para resolver las
la opinión pública, independientemente permanentes dificultades de la comple-
del sector político y económico con el ja relación entre medios de comunica-
que se parcialicen. Al asumir a los me- ción, sociedad y Estado, cada vez más
dios como parte del espacio público y en las naciones desarrolladas tiende a
no como acaparadores o sustitutos de establecerse marcos regulatorios que
él, sus contribuciones y debilidades se se sustentan en el reconocimiento de
reconocen de manera abierta. que la libertad de información y comu-
Los medios generalmente son nicación necesita ser estatuida en leyes
tema de discusión, especialmente en y normas capaces de garantizarla. Las
dos grandes áreas. Por un lado, es fre- leyes para los medios deben regular el
cuente la controversia acerca de sus derecho de los particulares a poseer li-

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cencias para establecer estaciones dios, son parámetros capaces de propi-


transmisoras de televisión y radio. ciar una diversidad de emisores y una
Cada vez más, circunstancias na- cultura crítica delante de la comunica-
cionales, establecen límites a la propie- ción que no suelen existir en los países
dad masiva de varios medios (especie en donde la regulación de los medios es
de monopolio) por parte de una perso- débil, o se aplica escasamente. La exis-
na o un grupo de inversionistas. Tam- tencia de normas y mecanismos capa-
bién, en esos marcos regulatorios son ces de reivindicar el interés de la socie-
frecuentes las garantías para que los ciu- dad tiende a hacer que los medios sean,
dadanos puedan manifestar su incon- en el sentido más ambicioso del térmi-
formidad ante la divulgación de conteni- no, auténticos espacios de comunica-
dos que los difamen o transgredan su ción –es decir, con interacción de ida y
vida privada, con miras a que los ciuda- vuelta– y no solamente de información
danos organizados como sociedad civil y propaganda. Esto traduce la existen-
puedan generar opinión en el espacio cia de un espacio de común acción en el
público. que la retroalimentación pueda generar
La existencia de reglas para la co- “autentica accesibilidad” de la sociedad
municación no significa limitaciones civil organizada dentro de un clima de
para la libertad de expresión. Al contra- opinión específico.
rio, el derecho de la información tiende El atraso en las leyes para ese sec-
a reconocer que, sin normas, esa liber- tor, la inusitada concentración de las
tad queda solamente en manos de quie- empresas de ese ámbito en pocas ma-
nes tienen recursos o prerrogativas nos, la casi completa inexistencia de
para poseer o manejar a su antojo me- medios públicos y la ausencia de recur-
dios de comunicación. sos jurídicos y mediáticos para que la
Una vertiente cada vez más explo- sociedad pueda replicar y participar de
rada en muchas naciones, más allá de las la comunicación, han mantenido un pa-
leyes pero sin contradicción con ellas, norama de supeditación de todos los
es el establecimiento de parámetros actores de la vida pública a la hegemo-
éticos con los cuales las empresas de nía de los medios y con ellos de las élites
medios, o las comunidades de periodis- económicas y políticas de las naciones,
tas, se comprometen a autorregularse. en detrimento de la autentica participa-
En ningún sitio los códigos de ética susti- ción social en la configuración de su
tuyen a las leyes. En muchos, en cambio propio destino.
constituyen un recurso que con fre- El retardo de las disposiciones ju-
cuencia permite que los litigios dentro rídicas para los medios resulta espe-
de los medios y especialmente entre cialmente patético en contraste con el
ellos y los ciudadanos, puedan resolver- desarrollo político que ha experimen-
se en instancias previas a los tribunales. tado el resto de la sociedad y las insti-
El acceso a nuevas tecnologías de tuciones venezolanas. El carácter au-
manera creativa y reglamentación de toritario, discrecional, unilateral y ar-
los derechos de la sociedad ante los me- caico del régimen legal para la comu-

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nicación en nuestro país es reconocido mada a “exigir” con propuestas claras


por casi todos los actores de la vida pú- este derecho, luchando por una auten-
blica. Sin embargo las empresas de co- tica democratización que equilibre la
municación e incluso algunos de los co- participación de propietarios, sector
municadores que trabajan en ellas, sue- económico, sectores políticos, sector
len preferir la ambigüedad o la obsoles- religioso y sociedad civil organizada, en-
cencia de las leyes, antes que su revisión tre otros. Es justamente allí donde sí se-
y actualización. ría asertivo recurrir a un referéndum
Hay quienes creen que la revisión consultivo y definitorio de lineamientos
de las leyes para los medios podría tra- legales en materia de medios.
ducirse en oportunidades, que ahora no Los concesionarios de la televisión
existen, para la libertad de expresión. y la radio y algunos influyentes dueños
Otros, especialmente algunos de los de periódicos, suelen encontrar inten-
empresarios más poderosos en ese te- ciones restrictivas en cualquier pro-
rreno, prefieren la ambigüedad de las puesta para renovar las leyes aplicables
leyes actuales y el régimen de entendi- a los medios. Algunos periodistas y tra-
mientos oficiosos al que han llegado con bajadores de la comunicación, en parte
los gobiernos de turno, antes que la llevados por su natural desconfianza a
existencia de nuevos ordenamientos prácticamente todo lo que provenga
que podrían afectar los privilegios que del poder político, llegan a compartir
ahora tienen. esas aprensiones.
Las leyes para la comunicación, son Los partidos políticos, en la historia
un tema que ha sido reiteradamente re- democrática venezolana, han tenido
dimido por algunos legisladores y traba- una posición titubeante delante de ese
jadores de los medios, lo mismo que in- asunto. Prácticamente todos ellos sue-
variablemente cancelado por las élites len reconocer la necesidad de reformar
políticas y por los dueños de las empre- las leyes para los medios. Sin embargo
sas de información más poderosas. En cuando establecen las prioridades en
varias ocasiones en más de un cuarto de sus agendas legislativas acostumbran
siglo, se ha repetido la misma rutina encontrar motivos para postergar esa
para preservar el estancamiento legal reforma. Le tienen miedo a la hostilidad
acerca de los medios: cuando el gobier- que una decisión de esa índole podría
no o algunos legisladores proponen ac- suscitar en algunos de los medios más
tualizar ese marco jurídico, se sobrevie- importantes, así como al posible costo
ne una andanada de censuras contra las político-electoral que no están dispues-
que, según se dice, es una tentativa para tos a pagar, muy especialmente cuando
amordazar a los medios. están en la acera de la oposición; hoy se
Quienes quedan amordazados, en- evidencia una continua postergación,
tonces, son aquellos que se han pro- desconociéndose las razones ocultas
puesto impulsar una reglamentación por las cuales no se procede con rapi-
moderna para la comunicación, dado dez a su discusión con una autentica in-
que la sociedad civil organizada es la lla- tención objetiva y ética.

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La reforma de los medios de comu- pecífico de los públicos de cada medio


nicación tendría que haber sido parte de por ciudades o regiones. Esas agrupa-
la reforma del Estado, a la par que la ac- ciones, como expresión directa de la
tualización de la legislación electoral. sociedad, podrían tener derecho a ser
De hecho, este asunto amerita una atendidas por los responsables del me-
atención tan destacada como la que han dio en cuestión e incluso, a contar con
recibido las reglas para que “los votos espacios para opinar acerca de los con-
cuenten y se cuenten”. Podría preten- tenidos que reciben.
derse que los medios, medien y no me- Al mismo tiempo, podría estimu-
diaticen, creando un autentico clima larse la educación para leer a los medios,
participativo y generador de opinión pues de ellos se obtiene mejor prove-
pública equilibrada. cho en la medida en que se conoce
cómo funcionan, qué géneros emplean,
Conclusión cuáles pueden ser sus efectos e incluso,
en donde termina la recreación de la
La necesidad de actualizar la legisla- realidad y en dónde comienza la ficción.
ción para los medios a fin de terminar Agrupaciones de ciudadanos inte-
con la discrecionalidad en decisiones resados en los medios y educación para
como las relativas a las concesiones, se la recepción crítica, son dos recursos
debe afianzar. Las agrupaciones socia- que involucran a la sociedad con las em-
les, deben trascender a la discusión y presas e instituciones de comunicación
delinear los términos de una nueva le- y que han sido desarrollados con expe-
gislación en esa materia. riencias de gran interés en otros sitios
El único derecho que tienen los pú- de América Latina. Con tales medidas
blicos de los medios, como tales, es la se busca fortalecer las capacidades de la
prerrogativa de apagar el televisor o el sociedad activa para interactuar con los
radio. Carecemos de una legislación medios y no ser solamente pasiva, es-
que reconozca el derecho de los desti- pectadora de ellos.
natarios de la comunicación de masas Los medios de comunicación, en su
para aclarar y rectificar pero también, gran mayoría, son negocios lucrativos
para opinar, proponer, matizar y dis- antes que otra cosa. Es ingenuo preten-
crepar acerca del contenido de los me- der que el interés mercantil quede des-
dios, es decir, verdaderos espacios de plazado de los propósitos de sus pro-
opinión pública. pietarios y operadores. Pero además, la
La sociedad podría tener un papel sociedad tiene derecho a que, sin dejar
menos pasivo delante de los medios, de de tener como meta la rentabilidad
dos maneras que pueden ser comple- económica, los medios sean instrumen-
mentarias. Por un lado, la legislación po- tos de servicio y de educación cívica.
dría reconocerles personalidad jurídica No puede esperarse que los me-
para propiciar a las asociaciones de ra- dios, solamente con cambios legales, al-
dioescuchas, lectores o televidentes teren una conducta que hasta ahora ha
que se organizaran según el interés es- sido habitual y, de la noche a la mañana,

Revista Venezolana de Ciencias Sociales, UNERMB, Vol. 8 No. 2, 2004


Medios de comunicación y opinión pública en la sociedad democrática 333

se conviertan en líderes y promotores de la información y eventualmente de


de los valores democráticos. Pero tam- los contenidos de otra índole y repre-
poco parece posible que, sin reformas sentan el criterio de los editores y/o los
legales, los medios abandonen las iner- trabajadores de la empresa que se com-
cias que durante varias décadas los han promete con esos valores.
convertido –salvo excepciones– en re- Es un error suponer que los códi-
ductos de maniqueísmos, simplificacio- gos de ética pueden surgir de una obli-
nes e intolerancias. gación jurídica; la ética no sustituye a las
La democracia no se instituye por leyes, pero tampoco depende de ellas,
decreto. Pero una de las consecuencias como a veces se piensa. En cambio, la
al mismo tiempo que uno de los moto- promoción de tales códigos y de la no-
res para avivar y profundizar la demo- ción misma de esa forma de compromi-
cracia, radica en las reformas legales. so de los medios con sus públicos, pue-
Ahora bien, más allá de los ordenamien- den ser respaldadas por los ciudadanos
tos legales, los medios de comunicación y los partidos interesados en que tenga-
pueden pertrecharse y a la vez crear mos una comunicación comprometida
puentes de compromiso e identifica- con la sociedad, romper el paradigma
ción con la sociedad a través del esta- mediatizador de la seudo democracia y
blecimiento de códigos de ética. Tales aperturar verdaderos espacios públicos
códigos señalan criterios para el manejo y de opinión pública equilibrada, demo-
crática y participativa.

Referencias bibliográficas
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xico. Porrúa.
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