BALANCE

“En el reino del amor unos Aman y otros son Amados, la felicidad completa es
poder Ser las dos cosas”, Oddun de IFA Iroso-Di.

“El más peligroso de nuestros consejeros, es el Amor propio”, Napoleón

Bonaparte (1769-1821) Emperador Francés.

Uno de los requisitos primordiales que nos es exigido en casi todos los
desempeños humanos es el CREER que somos capaces de desenvolvernos en
el Oficio o Profesión que hayamos elegido para nuestras vidas, y tal pareciera
que siempre también, es ESTE el más grande motivo de NO poder desempeñar
a cabalidad aquello que manifestamos eventualmente,- el querer SER-; si
dentro de los márgenes normales de desempeño humano es difícil encontrar
la medida exacta que nos lleve al control propio cuando nos enfrentamos a
una capacidad de aprender haciendo para saber HACER, ya no digamos en
tránsitos tan escabrosos como estos que nos propone un cambio interno
primero antes de entender o dominar cualquier manifestación de la naturaleza
y que en interacción directa con ella nos lleve a procurar -ya sea para nosotros-
o nosotros como interfaz de esta, la sanación para un tercero; difícil de hecho
sin duda. Sin embargo cuando nos entregamos a la formación INTEGRAL que
nos es propuesta por el Camino de Osha-Ifa encontramos no solo el requisito
de aprender dentro de los límites que llevan a un positivo dominio técnico de
“algo”, sino que lo más importante es al dominio en sí de la energía vital que
nos convierte en ALGUIEN, que nos identifica como sujetos únicos en razón del
criterio, de la perspectiva, de la capacidad de recepción y de interpretación
que cada sujeto humano es capaz de aportar desde su propia visión
apegándose SIEMPRE al método eso sí, y uno de los grandes y también más
comunes errores de los practicantes de Osha-Ifa - al menos en la Diáspora que
es la referencia que me compete en opinión y por razón de ejercicio religioso,
es el pensar y propagar el dicho y el hecho Mítico totalmente de que “Así me
enseñaron a mí, y por lo tanto NO hay más verdad que esta”, palabras más o
menos, viene formar el MITO GENIAL propagado por quienes se limitan así
mismos y por replica también limitan en su avance a aquellos que reciben
como “primera impresión” o exposición a las prácticas de nuestra Fe de una
fuente “dañada” y no necesariamente por razones del Dolo, también es justo
aclararlo; ya que en muchas ocasiones el sacerdote o sacerdotisa de Osha e
IFA, no logran aportar a su crecimiento personal el acervo de comprensión
ILIMITADO que nos ofrece este camino de transformación integral humana,
por NO saber cómo llenar los espacios en blanco, esos espacios en blanco que
necesariamente definen QUIEN ES la persona detrás y al frente de la
consagración sacerdotal, pero también es cierto que es necesario desmitificar
el acceso al conocimiento, ya que nosotros los mayores en la práctica
cometemos los errores primordiales al dejar al adepto en formación a la
merced tan solo de lo que pueda entender de la mano de Osha-Ifa, y aunque
pueda parecer que le esté tirando “patadas al pesebre” -nada más alejado de
eso en este razonamiento-; ya que la obligación de entender no solo los
términos manifestados como parte del acervo de historias y parábolas –
patakíes-, que esconden entre líneas toda la raíz del conocimiento que se
pretendió desde un principio fuera el legado troncal de nuestra práctica, su
motivo primordial y fundamento metodológico. Pero no todos los que
accedemos a las consagraciones mayores en nuestro camino filosófico y
religioso contamos con una formación cultural o académica que impida la
creación de nuevos MITOS GENIALES que lo único que vienen a aportar a
nuestro legado de la práctica, son adeptos iniciados y/o sacerdotes con
dificultades para entender la naturaleza de la COMPRENSION en Osha-Ifa
siendo esto como lo es, la base UNICA que valida la INTELIGENCIA de la
Interacción entre el Humano consagrado a la Obra y las fuerzas de la
naturaleza que nos gobiernan y que nosotros identificamos como Orishas -
CONCIENCIAS PLENAS-; y que ya de por si en el mismo nombre nos carga con
tremenda responsabilidad, aquella responsabilidad que en ningún momento
puede enmascarar la falta de conocimiento con la creación de OTRO mito
genial que disimule nuestra ignorancia. Más de una vez me ha asaltado
en lo personal la sensación de abandono que me provoca el hecho de estar
ante esta abrumadora posición de responsabilidad, no solo la que me obliga a
entender sino aquella que me recuerda que el aprender no necesariamente
significa COMPRENDER, y por eso se de lo que hablo y lo comparto como una
catarsis que he vivido en primera persona con todo el miedo y el dolor que
esto implica, miedo de pensar si acaso soy lo “suficientemente digno”, para
que las potestades obren a través de mi el prodigio que se espera llegue en
determinados momentos a las vidas de quien viene a tocar a nuestra puerta
en busca de alivio o solución para sus vidas; y créanme, este miedo solo es
comparable a ese que dicen sentir los artistas incluso los de mayor experiencia
en su oficio cada que se enfrentan a su público para manifestar el DOMINIO
de sus respectivas artes, cada intervención ante Orisha o IFA parece plantear
un nuevo comienzo del conocimiento verdadero, ese que nos acerca en cada
paso de la práctica a la verdadera naturaleza del ser humano que somos, cada
planteamiento hecho ante Orisha-Ifa no solo debe reafirmar la interacción
prodigiosa entre nosotros manifestación micro de lo que a macro corresponde
en el universo, si no que aún mas importante debe servir para vincular en cada
“episodio” la CREENCIA real que nos sostiene en este plano de ejercicio
religioso y científico, no separemos jamás esta realidad; de nuestras
conciencias, Osha-Ifa es tan solo otra de las formas que tiene la CIENCIA
UNIVERSAL para manifestar su voluntad a través de nuestra comprensión y
actos; y cuando nosotros como operadores de vinculación logramos acceder
al abandono que nos otorga la seguridad de entrar a NIVEL de manera
CONCIENTE entre lo que creemos y lo que podemos hacer, es AHÍ cuando el
AMOR por nuestra vida -la que elegimos-, nos otorga el BALANCE perfecto
entre nuestra naturaleza humana, la percepción religiosa, las fuerzas de la
naturaleza que nos rigen y el MILAGRO al que aspiramos acceder.
Iboru Iboya Ibocheche.