RESPONSABILIDAD DE LA CLÍNICA - MODELO DE ESCRITO DE CONTESTACIÓN

DE DEMANDA

I. OBJETO

En tiempo y forma vengo a evacuar el traslado de la demanda impetrada por la Sra.

____________ en contra de mi mandante, solicitando su rechazo con ejemplar imposición de
costas a méritos de las razones de hecho y de derecho que a continuación paso a exponer.

(…)

II. ANTECEDENTES. NEGATIVA Y RELATO DE LO SUCEDIDO

En virtud de lo dispuesto por mandato procesal, niego todos y cada uno de los hechos y
afirmaciones efectuados por la parte actora en la demanda que no sean objeto de especial
reconocimiento por esta -parte.

Comentario: es de buena práctica realizar una negativa detallada y específica, como así ir
incluyendo algunos reconocimientos dentro de la negativa.

Lo real y cierto fue que con fecha _________ la Sra. ___________ asistió al sanatorio de mi
representado sito en calle _______________ de esta ciudad de Córdoba, con el fin de que se le
extraiga una verruga en su mejilla, pero es completamente falso que de tal intervención
deviniera quemadura alguna es su cuello.

Repárese que si así hubieran ocurrido los hechos, de manera inmediata se hubiera asistido a
la accionante y nada de ello ocurrió.

Conforme puede advertirse de las constancias de la Historia Clínica, la cual acompaño al

presente responde, la actora fue tratada para lo que tenía acordado, es decir, se le quitó
correctamente la verruga sin mayores complicaciones al ser una cuestión simple y se retiró a
su domicilio y jamás volvió al sanatorio.

Por lo que bajo ningún punto de vista puede responsabilizarse a mi mandante por tamaña
incoherencia la que no ha tenido lugar en la realidad.

III. PRESUPUESTOS DE RESPONSABILIDAD

Contrariamente a lo que refiere la accionante, la obligación de fines que asume el hospital, el

crédito a la seguridad, en sí mismo, está referida a una obligación de medios, consistente en la
prestación corriente y genérica del médico en su ejercicio profesional.

Por lo tanto, si no existe responsabilidad de los médicos y/o enfermeros, tampoco puede
existir responsabilidad a cargo del establecimiento asistencial en el que se cumpliera tal
prestación.

Lo contrario significaría admitir una responsabilidad objetiva de los hospitales, pues siempre
que se produjera un resultado no deseado el hospital sería responsable. Por el contrario, la
doctrina expresa de modo coincidente en que en estos casos el actor debe probar la culpa
médica no para que se muestre la responsabilidad refleja del hospital sino para que patentizar
la transgresión a la obligación de seguridad del ente asistencial. Entonces, si no existe culpa de
los médicos y/o profesionales que intervinieron en la atención de la actora, la consecuencia
ineludible es que no puede haber responsabilidad del hospital.

Así lo tienen dicho doctrina y jurisprudencia:

Recientemente, con fecha 14/3/2014, el Juzgado de 1° instancia y 37° Nom. de esta ciudad
de Córdoba (sentencia nro. 130) en autos “Simondi, Marta Nélida c. Sanatorio Allende S.A.
Ordinario. Daños y perjuicios. Mala Praxis” estableció expresamente, al rechazar la demanda
incoada en contra de nuestro mandante: “En suma, tratándose de responsabilidad por el
actuar profesional de personas bajo subordinación de la demandada, es menester que
concurra alguna omisión o error inexcusable en la atención del paciente. No puede sostenerse
entonces de que haya o no culpa del médico actuante, el establecimiento hospitalario,
nosocomio o Clínica privada en que aquél se encuentra internado siempre debe responder
frente al paciente en virtud de la figura de la estipulación por otro normada en el art. 504 del
Cód.Civil. Por el contrario, la obligación de garantía del nosocomio o clínica privada, toda vez
que reviste por vía de principio, la condición de accesoria o subordinada, está supeditada a la
culpa personal del médico actuante, o sea que, acreditada esta última, aquélla funcionará dada
su carácter de obligación accesoria, pero no probada la negligencia del profesional en los
términos del art. 512 del C.C., o no demostrada, de manera fehaciente, la relación de
causalidad entre el daño sufrido y la conducta seguida por los facultativos en el diagnóstico y
tratamiento de la dolencia, tampoco podrá funcionar la responsabilidad subsidiaria o de
‘garantía del establecimiento, que depende de la primera’ (Conf.:Fallos publicados en JA 1995-
III-400 de la Cám.Civil y Comercial de Mercedes sala 1° del 8/4/994 in re ‘Faraone Miguel’;
Suprema Corte de la Pcia. De Buenos Aires en A. y S.” 1987-V- 379; JA 1995-III-387, Sup.Corte
de Buenos Aires del 15/11/994; JA 1995-III-389 de la Cám. Civil y Comercial de Junín del
15/12/994; Lorenzetti y Mosset Iturraspe, ‘Contratos médicos’ p.162; Bustamante Alsina,
‘Responsabilidad de las Clínicas por mala praxis de su cuerpo médico’ en ED 150-115 y sgts.; JA
1996-II-470 de la Cám.Civil y Comercial de Morón del 10/9/994; JA 1998-III-Síntesis de la
CNCiv., sala A, del 12/11/997; JA 2000-IV-Síntesis de la Cám. Apel.Concepción del Uruguay sala
civil y comercial del 28/2/996)”.

“En cuanto al factor de atribución, si bien el apelante sostiene que se trata de un factor
objetivo de atribución en razón del riesgo de la actividad desarrollada por el nosocomio y la
aplicación de la LDC, entendemos que no asiste razón en la queja, ya que debe efectuarse una
diferencia cuando los establecimientos asistenciales asumen deberes de medio o de resultado”
(CApel. Civ., Comercial, Minas, de Paz y Tributaria de Mendoza, sala 4° en autos “Z. J. D. y ots.
c. Hospital Humberto Notti s/daños y perjuicios” de fecha 10/6/2010 Cita: MJ-JU-M-56558-AR
| MJJ56558 | MJJ56558).

Hemos de hacer una distinción en relación a la responsabilidad de los establecimientos

médicos, Como bien se ha señalado “dentro del contrato de prestación de asistencia médica
celebrado entre la clínica y paciente, existen dos tipos de servicios: 1) un servicio ligado al
desempeño médico que se materializa con la labor del facultativo, consistente en una
prestación de diligencia apropiada para la curación. 2) otros servicios extraños a la conducta o
acto médico, o que el galeno no puede controlar o garantizar. En este segundo segmento de
servicios, el ente asume una serie de deberes, como por ejemplo: mantener la asepsia del
lugar, proveer el instrumental adecuado para la práctica médica comprometida, que las cosas
de que se vale para el cumplimiento de la prestación no causen daños al paciente, incluyendo
en estos supuestos tanto a los instrumentos que se utilizan en el acto médico mismo (v.gr.
bisturí eléctrico), como así también las cosas de que se sirve la clínica para la correcta la
ejecución del contrato (v.gr. alimentos que se proporcionan al paciente durante la
internación, la correcta utilización de camas ortopédicas, etc.)”.

Sin embargo, cuando la responsabilidad del Hospital está ligada al desempeño del acto
médico, el establecimiento asistencial habrá de responder por la “culpa” en que incurren sus
sustitutos, auxiliares o copartícipes, en razón de la irrelevancia jurídica de tal sustitución, ya
que al acreedor no le interesa que el cumplimiento sea efectivizado por el propio deudor, o
por un tercero del cual éste se valga para sus fines; y de la equivalencia de comportamientos
del obligado y de sus sustitutos y asociados, se determina que el hecho de cualquiera de ellos
se considera como si proviniese del propio deudor. (Quirós, Pablo O., Algunas precisiones en
torno a la responsabilidad civil del ente asistencial (LLGran Cuyo 2009 (diciembre), 1046).

Por tanto, sin culpa del facultativo, no hay responsabilidad del establecimiento médico.

En definitiva, no existió ninguna conducta culpable por la cual deba responder la Institución,
quien cumplió con la diligencia debida. En este sentido, contrató personal profesionalizado, se
aseguró de que se establecieran y se cumplieran protocolos de trabajo adecuado. No pudo
haber hecho más esfuerzos para evitar el resultado dañoso. Aún así, ante la evidencia concreta
de un daño sufrido por el paciente, la responsabilidad de nuestro mandante también queda
diluida, en virtud de la inexistencia de culpa o negligencia alguna de ninguno de los
profesionales que intervinieron en la atención médica de _____

Si no hubo mala praxis en la atención y tratamiento del paciente, tal como nosotros
sostenemos, tampoco puede haber responsabilidad a cargo del establecimiento asistencial en
donde se cumpliera tal prestación. Lo contrario, llevaría a la admisión de una responsabilidad
objetiva de los sanatorios y hospitales, al modo de los establecimientos educativos (Art. 1767
Código Civil), pues siempre que se produjera un daño dentro del hospital, éste sería
responsable, aún cuando la víctima hubiere sido atendida por médicos o profesionales que no
hubiesen incurrido en un obrar antijurídico; es decir, que hubiesen obrado conforme la “lex
artis”.

(…)

IV. DAÑOS

(…)

V. MANIFESTACIONES Y RESERVAS

(…)

VI. PETITORIO
(…)