cual el cuidador principal de la infancia adquiere la calidad de un objeto de amor"
Conducta que reduce la distancia de las
personas u objetos que suministrarían protección" (Bowly, 1985; 1998) Desarrollo del Apego según bowlby
El primero en desarrollar una teoría del
apego, con el objeto de describir y explicar por qué los niños se convierten en personas. En los inicios de la teoría John Bowlby junto a su colaboradora Mary Ainsworth, postularon que la conducta de la madre en los primeros meses de la vida del niño es un buen predictor del tipo de relación entre ambos. Teoria En 1964, Ainsworth y colaboradores diseñaron la llamada "situación extraña“.
Un procedimiento de laboratorio para
estudiar la relación madre-hijo en el primer año de vida. Este procedimiento recrea situaciones de separación entre el niño y su cuidador. Teoría y tipos de apego
Según los resultados obtenidos, se
establecieron cuatro categorías de apego: -apego seguro -apego ansioso evitativo -apego ansioso ambivalente- resistente -desorganizado / desorientado Teoría y tipos de apego Apego seguro Apego seguro En el caso de los niños con apego seguro se observa ansiedad de separación. El pequeño se angustia, llora, pero cuando la madre vuelve, la saluda y se tranquiliza. Esta respuesta se caracteriza por la confianza en la persona que lo cuida Apego seguro Conducta del niño: bebé se muestra tranquilo y afectivo en el contacto con la madre. Se contacta a través de miradas, vocalizaciones y con un contacto físico apropiado. Conducta de la madre: presenta una afectividad generalmente positiva (alegre, calmada y comprometida) y es capaz de contener y calmar al bebé. Apego seguro y relaciones futuras • Las personas con estilo seguro se definen como amistosos, afables y capaces, y de los otros como bien intencionados y confiables, no les cuesta relacionarse con otros se sienten cómodos dependiendo de otros y que otros dependan de ellos, y no se preocupan acerca de ser abandonados o de que otros se encuentren muy próximos emocionalmente. Apego evasivo Apego evasivo o evitativo En los casos de apego evitativo, el niño suele mostrar poca ansiedad durante la separación y un claro desinterés en el posterior reencuentro con la madre, lo que se da en las relaciones donde la mamá es más bien desapegada. Esta conducta tiende a aumentar la distancia de personas y objetos supuestamente amenazadores resultan convenientes los términos "retracción" "huida" y "evitación". Apego evasivo
Conducta del niño: evita el
contacto con la madre realizando un escaso contacto afectivo y pocas miradas. Conducta de la madre: generalmente fría o indiferente (apatía, angustia y temor). Apego evasivo y relaciones futuras
Los con estilo evasivo, desarrollan
modelos de sí mismos como suspicaces, escépticos y retraídos, y de los otros como desconfiables, se sienten incómodos intimando con otros y encuentran difícil confiar y depender de ellos. Apego ansioso ambivalente Apego ansioso ambivalente el niño muestra ansiedad de separación, pero no se tranquiliza cuando su madre vuelve. Está siempre un poco enrabiado porque la mamá se fue y al no saber cómo predecir su comportamiento, cuando se reúnen el pequeño muestra su rabia, aunque quiera estar con ella. También podemos encontrar dentro de los tipos de apego, el ansioso y el desorganizado. Apego ansioso ambivalente Conducta del bebé: se muestra aferrado y/o enojado con la madre. El bebé busca el contacto con la madre a través de miradas y un contacto afecto muy ansioso y exagerado. Conducta de la madre: presenta una afectividad generalmente intrusiva (ansiosa, tensa y exagerada). Contiene al bebé de una manera sobre-estimuladora. Apego ambivalente y relaciones futuras
Las personas con estilos de apego
ambivalente tienden a desarrollar modelos de sí mismos como poco inteligentes, inseguros, y de los otros como desconfiables y reacios a comprometerse en relaciones íntimas, frecuentemente se preocupan de que sus parejas no los quieran y sienten temor al abandono. Apego desorganizado
Apego desorganizado El niño
carece de estrategias para enfrentar la situación; en la separación se comporta de forma confusa, se paraliza, realiza movimientos raros y no siente temor. Tampoco se apega a la madre cuando ésta vuelve El miedo a extraños y el manejo de la separación Por otra parte, el apego también se expresa en cuanto al miedo a extraños, este posee la siguiente secuencia: Tendencia a retirarse y/o evitar a la persona extraña. Reducción de conductas de interacción social positiva. Orientación de la mirada, atención y manipulación hacia otros elementos. Manifestación de temblores. Expresión de llanto y/o quejas intensas. Manifestación de desagrado o malestar. Activación de conductas de apego. El miedo a extraños y el manejo de la separación
Bowlby señala que en las separaciones
prolongadas los niños atraviesan tres fases: Protesta y trata de recuperar a la madre por todos los medios posibles Desespera la posibilidad de recuperarla pero, sigue preocupado y vigila su retorno Desapego emocional Teoría de bowlby Transmisión generacional del apego: Se ha encontrado que la capacidad predictiva que las representaciones maternas tienen sobre el tipo de apego que establecen sus hijos es de alrededor del 80%. Estos datos ponen el acento en la transmisión intergeneracional del tipo de apego entre padres e hijos. Transmisión generacional del apego Pero esto no quiere decir que no es tan determinante el tipo de apego que se tuvo con los padres propios sino la reelaboración consciente e inconsciente que luego, durante la vida y el cumplimiento del rol de padres se haga de aquella experiencia. Apego múltiple Aunque Bowlby admitió que el niño puede llegar a establecer vínculos afectivos con distintas personas, pensaba que los niños estaban predispuestos a vincularse especialmente con una figura principal, y que el apego con esta figura sería especial y distinto cualitativamente del establecido con otras figuras secundarias. Apego múltiple El apego no sólo se produce con relación a las figuras parentales. En conclusión, los niños son capaces de establecer vínculos de apego con distintas figuras, siempre que éstas se muestren sensibles y cariñosas. No es de antemano negativa la existencia de varias figuras de apego. Por el contrario puede ser muy conveniente, pues facilita elaboración de los celos, el aprendizaje por imitación y la estimulación variada. Incluso es una garantía para una mejor adaptación en caso de una inevitable separación de los padres en caso de accidente, enfermedad o muerte