Você está na página 1de 2

ESCUELA PAULISTA

Escuela Paulista Brutalista es el nombre que se le da a


la corriente brutalista con obras realizadas en Brasil
entre los años 50 y 70. A la cabeza de este movimiento
se encontraba el arquitecto João Batista Vilanova
Artigas (1915-1985). Por todos es conocida la
arquitectura y urbanismo de Oscar Niemeyer o Lucio
Costa, a la sombra de esta arquitectura ha quedado un
movimiento que siendo igualmente interesante, no ha
tenido tanta repercusión internacional.

Este movimiento dejó una arquitectura marcada por el


énfasis en la técnica constructiva, por la adoración del
hormigón visto y por la valoración de la estructura.
Artigas destaca dentro de la Escuela Paulista no solo
por sus obras, también por su posición política que
inluyó en su producción práctica, didáctica y teórica.
Este arquitecto proyectó multitud de edificios
encuadrados dentro del movimiento como la casa
Mário Taques Bitencourt, el instituto de Itanhaém,
instituto de Guarulhos, el club de tenis Anhembi, y el edificio de la Facultad de Arquitectura y
Urbanismo de la Universidad de Sao Paulo que podemos ver en la portada de esta entrada.

Las líneas maestras de esta escuela se definen por


la introversión hacia el entorno y la continuidad
espacial fruto de la adopción de rampas y
iluminación cenital, y por el uso de grandes vanos,
generando grandes planos horizontales de
hormigón visto. Estas características exigían el uso
de técnicas constructivas elaboradas como el
hormigón pretensado. Más que una búsqueda
puramente estética o técnica estas características
surgen de un proyecto político para el país, que
apostaba por la industrialización para superar el subdesarrollo.

Asimismo algunos estudiosos han afirmado que la Escuela Paulista no se restringe apenas a su
tendencia brutalista, incluye no sólo la obra del arquitecto Artigas sino también toda la surgida
a partir de su influencia en la Facultad de Arquitectura de Sao Paulo. Fue él quien propuso un
plan de estudios para esta escuela que fue aprobado en 1962, que priorizaba el taller de
proyectos frente a otras asignaturas como principal espacio de enseñanza y discusión; y que
por otro lado buscaba mediante las enseñanzas en historia, proyectos y técnicas, la formación
de un nuevo profesional "completo" que contribuyese a la construcción de una nueva nación.

El edificio de la Facultad de Arquitectura y Urbanismo busca expresar ese proyecto didáctico,


integrando por medio de rampas y del vacío central todas las actividades allí realizadas. Su
distribución enfatiza los espacios de taller y de biblioteca frente a todos los demás, y la
ausencia de puertas de entrada tiene una clara intención de espacialización democrática.

Você também pode gostar