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JESÚS de NAZARET.
Buenas tardes amigas y amigos todos, miembros de la Corporación, Usuarios del Centro
de Participación Activa , señora Directora, señora Presidenta, Hermandad de Nuestro
Padre Jesús de Nazareno, señor Alcalde y a todos los que de una manera u otra están
colaborando con nosotros en este acto, bienvenidos todos.
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Para dolor de una madre
No existe pena más grande
Perder la vida de un hijo
Ver derramada su sangre
Cada rosa tienes sus espinas y en Loja tenemos una flor rodeada de espinas, pero
también de pétalos y aromas como tiene La banda Flor Entre Entre Espinas.
ADELANTE muchachos con nuestro agradecimiento
En este mundo con hambre de justicia, paz, ternura y sinceridad, tu amor puede ser
el pan para saciar muchas vidas
Os hablo rememorando unas fechas lejanas en el tiempo, años cincuenta. El viernes
santo era muy distinto por la situación en aquellos años y a la vez poco ha cambiado
quizás solo que la situación no era la misma que hoy. Recuerdo cuando yo tenia ocho
años, mi madre se afanaba desde bien temprano para poder arreglar un poco
decentemente a mis tres hermanos y a mi, era tradición que nos trajeran a Loja el viernes
santo y desde Riofrío creo que unos diez kilómetros cuando el medio de trasporte eran
las alpargatas que dejamos escondidas en la Alcantarilla Moreno, allí nos poníamos los
zapatos, que debían durar de un año para otro, ya se compraban con un par de tallas
más y se arreglaban con algodones en la punta.
Para la hora de salir Jesús ya habíamos tomado posesión en primera fila, íbamos
detrás hasta que subía Jesús por la Cuesta de la Posadilla, desde allí nos íbamos a la
Calle Megias donde vivía mi tío Julián.
Nos quedábamos a veces a ver la salida del entierro y otras veces no, de todas
maneras había que cambiarse y ponerse las alpargatas de nuevo y marcha hasta Riofrío,
con el mismo medio de trasporte, a la vuelta siempre coincidíamos con los vecinos más
cercanos para hacer el camino en amor y compañía.
Como os decía que lejano en algunas cosas y que cercano en otras, cuantas personas
enlutadas, cuantas heridas recientes en aquella época, cuantas promesas, la gente a
situaciones desesperadas echaba mano de lo que tenía y lo que le quedaba, solo su fe en
Jesús, se le pedía por todo y por todos, había motivos más que sobrados, enfermedades,
la pobreza, las injusticias, en eso seguimos en las mismas, el paño de lagrimas era
Jesús, ese Jesús es el mismo aunque las situaciones cambian.
Había personas que venían andando descalzas desde Riofrío y otros lugares. Yo
personalmente no creo que a Jesús le agradase, un Jesús generoso no puede de
ninguna manera aceptar un sacrificio inútil que nada de bien puede aportar, quizás
debiéramos
pensar que en vez de andar descalzos comprásemos unos zapatos a quien no los tiene y
en vez de ayunar dar de comer a quien no tiene pan, en vez de flagelarse luchar para que
no se flagele a nadie, luchar para que se terminen los calvarios, las crucifixiones y no
tenga que decir Jesús, padre porqué me has desamparado.
Bueno sigamos calle Real, en otros tiempos la calle Real era alegre, era el paso
obligado de la gente que entraba del campo, tenía más vida que hoy, como siempre digo
las circunstancias cambia las ciudades. 8
Pero sigamos adelante nos espera la Tribuna, reciente innovación, pero bueno
bienvenida sea, aunque sigo pensando que la Semana Santa de Loja pocos cambios
admite, mas bien ninguno, más bien recuperar cosas, mantener otras, en una palabra la
semana santa en Loja, señores ya está inventada.
Quisiera poder plasmar en mis palabras la historia de Jesús a través de los tiemp cada
uno lleva por dentro sus propia vivencias, es difícil para las personas que ya llevamos
unos años en el mundo y por tanto recuerdos de un ayer bastante lejano y también el
presente, aquello que de niños nos inculcaron los mayores perdura.
Es también difícil porque son ya dos generaciones posteriores a mi juventud las que
están actualmente. En el caso que nos ocupa es difícil conectar con esta juventud y a la
vez también es fácil por la sencilla razón de que esto se trasmite de padres a hijos y
nietos lo que supone que tenemos una relación directa entre generaciones. Cuando se
ven tres generaciones de la misma familia vestidos de penitentes se aclara bastante
porqué la Hermandad de Jesús se mantiene en el tiempo con los mismos valores, la
misma tradición y llámese como cada cual quiera, fe, ¿pudiera ser?.
La llama encendida ayuda mucho a mantenerla esa banda de tambores Puches, ellos se
encargan cada viernes santo de poner la nota indiscutible que da ese encanto que tiene
el sentir desde bien temprano ese soniquete que no es ajeno para nadie. Ellos son los
primeros en enfilar la calle Real hacia el mesón de Arroyo haciendo sonar sus tambores,
Puches, tendré que preguntar a que viene ese nombre y a quién mejor que a uno de sus
fundadores, Carlos Martines de Tejada.
Los tambores puches fueron creados por Carlos Martínez de Tejada en colaboración
con Jacinto Pavón y estos primeros tambores fueron adquiridos en Baena Córdoba y si
mal no recuerdo sufragados por ellos mismos. Escuchemos esos tambores que sin duda
nos van a poner en situación. ADELANTE
GRANDEZA
Hoy comprendo tu grandeza
Ese sacrificio humano
Cuando alguien da su vida
En defensa de un hermano
El calvario y las espinas
Hoy se encuentran muy presentes
Hay un Jesús cada día
Te lo encuentras por la calle
O vergonzante en su casa
Se condena como antes 9
A veces al inocente
Hay una pasión diaria
Unos clavos y una cruz
Una madre que lo sufre
Por un hijo condenado
O la enfermedad maldita
Siempre hay desheredados
Como hace dos mil año. Este mundo no ha cambiado. AUTOR: Andrés Ortiz
Las nuevas generaciones como en todo en la vida van tomando el relevo y estos relevos
para que sean efectivos deben ser tomando escuela y ejemplo, no es difícil ver vestidos
de penitentes padres, hijos y abuelos. Las modas pasan, son novedades pasajeras, se
pierden con el tiempo, referente a Jesús, a nuestro Jesús lo avalan cuatrocientos años,
ya es decir y sobre todo lo avala en pueblo de Loja, y ese sentir popular que nos pone el
bello de punta cuando sentimos una marcha, una música de semana santa y un pueblo
que se tira a la calle, que sigue en este caso a Jesús, a nuestro Jesús, para grandes,
chicos y todo aquel creyente o no creyente, como ese gran amigo mio que siempre tengo
presente.
Él me decía Andrés tu sabes que yo soy poco de iglesia pero cuando pasa Jesús hay
que quitarse el sombrero y era comunista convencido, quiero decir con esto que algo
tendrá el agua cuando la bendicen, algo tendrá Jesús, nuestro Jesús que hay que
quitarse el sombrero a su paso, y darse con el pañuelo en los ojos porque hay mijillas en
el aire que se nos meten sin querer y nos hace llorar.
Una vez más nos acompaña Flor Entre Espinas, una vez más más debo agradecerles
su colaboración y escuchar su marcha y sentir que algo se mueve dentro de nosotros que
cada año volvemos a las andadas de emocionarnos, sentir que algo nos recorre la
espalda sin saber a ciencia cierta lo que es. Adelante muchachos ahorquillá ahí.
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Una señal en el cielo
Va anunciando este calvario
Que el hijo de Dios sufrió
Aquel que su vida dio
Muriendo por los demás
Esa señal desde arriba
Un viernes santo surgió
Anunciando desde el cielo
La condena que sufrió
Perdonaron al ladrón
Y a Cristo se condenó. AUTOR: Andrés Ortiz 2019
Bueno aquí estamos ya en tribuna es una reciente innovación, bienvenida sea si así es
la voluntad de la mayoría y ahí tenemos a Jesús un año más haciendo su estación de
penitencia. El año pasado no fue posible por las inclemencias del tiempo, pero ya lo
tenemos de nuevo subiendo la empinada cuesta camino de la Calle el Pilar, pronto
estaremos en las Cuatros Esquinas, el lugar del “escarrio”, si digo escarrio, es el
momento de tomar algo, reponer fuerzas, era el momento en que en tiempos pasados las
esposas y las madres acudían con el huevo batido con vino, el caldo caliente, todo ello
formaba parte del entramado semanasantero de los años cincuenta, siento llevar tantos
años acuestas también es bueno para poder revivir aquellos recuerdos.
Se puede pensar que se abandona la procesión, ni mucho menos las Cuatro Esquinas
guardan la esencia de lo más puro de la semana santa, allí se reponen fuerzas, se
descansa un rato antes de tomar nuevo impulso para bajar la Cuesta el Arca. A mi me
pasa una cosa que mi mente no cambia los nombres a las calles, porque los recuerdos
permanecen. 11
Creo que había cuatro bares, Rafael Mancilla uno de ellos, de mi familia
Mariano y Raya con sus tazas pidiendo desde el amanecer hasta que su cuerpo podía,
Sereno el de las Cuevas de Colás, al lado de Jesús todo el día, ahora le sigue en la zaga
su nieto Juanmi, tanto como lleva hecho la semana santa y tanto que nos une.
Estoy pensando Antonio que este momento de respiro, algo relajados sería el momento
de que le cantes a Jesús, creo que lo estamos esperando y es el mejor momento de que
Jesús te oiga sin mayores interferencias. Adelante Antonio, somos todo oídos.
sinceras y arrepentidas,
-y no te lamentes luego-,
de multiplicar perdones.
(Manuel B. Carrasco)
. Los Incensarios en Loja es punto y aparte sus mas de doscientos cincuenta años de
existencia avalan una tradición única casi podría asegurarse que en el mundo a través de
los tiempos. Puede que el traje haya sufrido algún cambio pero relativamente, siguen
siendo los Incensarios y así seguirán siendo. Por su olor los identificareis,
Bueno amigos y amigas con tanto hablar ya me estoy retrasando haber si no llego al
encuentro, pero no lo digáis a nadie ahora me bajo por los escalones del Quintana y me
pongo el primero, pero debo llegar a tiempo si quiero seguir la crónica.
Como lo pensé ya está todo preparado, ya estoy viendo a Jesús que viene por la
baranda, los Incensarios preparados para dar lo mejor de de ellos. Los Incensarios son
únicos, como el rosco de Loja tienen marchamo, registro de propiedad, que nadie intente
imitarlos perderán el tiempo, pertenecen al patrimonio, a nuestro patrimonio. ¿Quien se
imagina una semana santa sin incensarios?, yo francamente no, nuestros Incensarios
tienen una historia de mas de doscientos cincuenta años, ahí es algo.
Pero bueno vayamos a lo de hoy, ya está Jesús frente a frente a su madre, la virgen de
las Angustias, no cabe un alfiler, si queréis coger un asiento a una cerveza en el Quintana
o el Castizo buscaros recomendación, en el Casino ni pensarlo.
Magistrales los incensarios como siempre, oigo la voz de de un saetero, desde aquí no
le veo, no reconozco su voz, pero suena bien, mi amigo y gran semanasantero Carlos
Martines de Tejada que tanto sabe de estas cosas me está ilustrando y claro ya veo
desaparecer el manto de la Virgen de las Angustias por la Cuesta Campos y la llegada a
la Placeta yo no me la pierdo por nada del mundo, máxime si os la quiero contar. 14
Yo andaría mil calvarios para arreglar este mundo, pero veo que no puedo, son muchas
puertas cerradas y son muchos los silencios. AUTOR Andrés Ortiz
Es que cuando estás hablando con un erudito de la semana santa como es Carlos el
tiempo se para y otra vez haré una pequeña trampa, me bajo por la calle Sin Casas y
llego apunto de contaros la llegada a la Placeta. Se perdona la trampilla verdad.
Ya he tomado posesión de un lugar privilegiado, donde antiguamente fue mi lugar de
trabajo y de mi familia y no puedo evitar recordar a tantos y tantas que ya no están.
Pepe Cuesta, Rosa Mancilla, don Fernando, Polo, Manolo Rosas, Antonio Pérez,
Encarnilla, y reciente Juanillo, aquí lo voy a dejar no acabaríamos.
Ya tenemos a Jesús en la Placeta como no iba a estar, a la vida hay que sumar nunca
restar como le vamos a quitar a Jesús estar aquí y a los vecinos y vecinas recibirlo. Como
luce la figura de Jesús, no me cabe duda que estará aprovechando su cercanía al rio para
mandar al mundo su mensaje de paz y por el rio llegará al mar y el mar cubre al mundo.
Otra vez dándole al pico y ya veo el manto de la Virgen enfilando la calle Sin Casas,
sigue mi mente con los viejos nombres. A pesar de ser ella la Virgen la que manda, la que
ordena en esta procesión, la veo que va sola y parece triste y en esta calle suele haber
poco personal, ahí su nombre calle Sin Casas y algunas estan vacias.
Adrián porqué no le hacemos una bonita marcha de esas que vosotros bordáis, quizás
le ayudemos en esta estación de penitencia y paliemos algo su dolor y la soledad de esa
madre, que eso es ni más ni menos, una madre que sufre por un hijo condenado.
Adelante Adrián, tu dirás venga a pedir, pero ya que estamos no.
Que bonita entrada con esta maravillosa música en la Plaza Abajo, otra vez los
recuerdos, menos mal que no me afecta este odioso mal del olvido, quien no recuerda a
María de la Paloma, ella la vi más de una vez asomada a la baranda para ver a Jesús con
su delantal blanco inmaculado, ella no tenia días de fiesta como Antonio su marido y
Anastasio, que decir de él entrañable y generoso, todos se fueron. 15
Una Institución en Loja, bar Anastacio, veo esa casa cerrada y me duele, son los
tiempos que llevan y traen las cosas y algunas nunca debieron de irse.
Pepe el de las Barbas centenario trabajando, medalla que fue a eso, al trabajo. La plaza
Abajo fue el ombligo de Loja. Pero mirad aquí estamos como hace cientos de años con
Jesús este si que no cambia ya hace cuatrocientos años, que bien se sabe el camino.
Por fin estamos en la Plaza Arriba, habrán cambiado los nombres de las calles, pero yo
con mis siete décadas y media y algo mas como voy a cambiar, ni falta que hace verdad,
las buenas costumbres, los buenos recuerdos, la historia de Loja y de los que vivimos
aquel tiempo tampoco debiera perderse. Quien en aquellos tiempos no se tomó una
cerveza en el Guerola con el tambor colgado, o en la Lechería que no cerraba de noche
ni de día, o un poco más adelante en el Paralelo familia Flores. Pero bueno dejemos los
recuerdos que Jesús ya se me adelantó ya pasó del Callejón de los Laureles, cuantas
bodas celebradas allí. Ya vamos camino del encierro, tendré que darme prisa si quiero
hacer una crónica adecuada y para ello hay que estar cerca.
Bueno amigos y amigas ya estamos dando vista a la ermita de Jesús, no hay más gente
porque no cabe. Este año he tenido un sitio privilegiado, estamos en 2019 porque en
2018 no hubo, ya en esa fecha y antes rondaba por mi cabeza el proyecto de hacer este
homenaje a una de las hermandades con más solera de Loja, sin desmerecimientos para
con las demás, de hecho la mayoría las he tenido en cuenta mientras maduraba este acto
de hoy porque mirad que nadie se moleste, hablar de Jesús son palabras mayores.
Quería plasmar el recorrido integro de Jesús desde su salida a su entrada y de nuevo
ya está cerca de su casa. He sido testigo de ese caminar y ahora quiero plasmar esta
llegada, sentir que el corazón latirá un poco más de prisa con el acontecimiento que se
aproxima, siempre hay expectación, temor a que pase algo, pero nunca no pasa nada.
La Verónica empieza la carrerilla, Jesús desde la baranda como un espectador más de
los cientos que llenan los aledaños de la ermita quizás esté vigilante.
Cada año parece que la gente deja menos espacio, casi quieren tocar las imágenes con
la mano. Cada año nos preguntamos ¿pasará algo? Nunca pasa nada, paro hay el peligro
de que alguien se cruce, que un niño se escape de la mano, que un anciano algo mal del
oído se despiste y mira que suenan los tambores, pero no pasa, nunca pasa nada.
Estamos pendientes de la carrerilla de Jesús, el trono es más pesado, los horquilleros
están cansados, poco espacio para dar la vuelta en la puerta, pero como si todo estuviese
pasando como una película a gran velocidad Jesús está de nuevo mirando hacia la gente,
lo que es un secreto es lo que esa gente está pensando, que cruz llevará cada uno por
dentro, ni lo que le pedirá en ese momento.
Veo una señora que llora sin recato, otras lagrimas asoman sin atreverse a caer al
suelo, una señora pasa el pañuelo por el trono y limpia la cara de su nieto con el, por la
edad es su nieto, porqué habrá hecho ese gesto ¿Quien lo sabe?
Los incensarios han hecho su labor antes de llegar al pilar de Mesón de Arroyo. La
carrerilla ha sido una vez más impecable, los horquilleros descansan el peso en las
horquillas, mientras Jesús se mueve de vez en cuando como una pluma en el aire.
La Virgen de las Angustias permanece a la espera, quizás vigilante también, su hijo la
esperará desde el interior, mientras tanto miles de ojos se posan, entre todos ellos estoy
viendo unos que no quitan ojo, algo me dicen Antonio que esos ojos son los tuyos y están
deseando cantarle la última saeta por este año.
Pues sabes lo que te digo no te quedes con las ganas, canta como tu bien sabes hacer.
Un rayo de sol ilumina el rostro de Jesús en estos momentos y te está pidiendo que le
cantes, quizás calmará su calvario, será la voz del maestro el Calero. ADELANTE . 16
Con que maestría preparan los horquilleros la entrada en su casa, las voces precisas de
su postor harán una vez más, un año más que como si se tratase de una pluma en el aire
traspase esa puerta y nos dirá adiós hasta el año que viene. Una vez más Pepe tulla es la
palabra, la voz y la serenidad para dejar a Jesús en su lugar. ADELANTE, silencio.
Pero también una vez más le haremos la despedida con las notas del Miserere, esa
música símbolo de nuestra semana santa. Adrián como siempre con todo nuestro
agradecimiento adelante con ese miserere.
Que importa que sea redonda, que importa que sea cuadrada, es la vergüenza del
mundo, la cruz sobre tus espaldas. Autor: Andrés Ortiz 2019
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Querida y admirada Charo, tú serás quien cierre este
acto con este poema que yo un día escribí pensando en Jesus y en que tú le dieras
forma. ADELANTE
“EL CALVARIO”
Hoy termina aquí el Calvario
Es un viernes santo mas
El que hemos recordado
Jesús ha vuelto a la calle
A lo largo de la historia
Solo guerras y mal trato
Cada año nos recuerda
Con su lanzada al costado
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LOJA 2019