ART NOUVEAU

Fue un movimiento de transición inscripto en el cambio de siglo (XIX –XX) el cual como el nombre lo
indica, tenía en su génesis la intención de corromper los estilos históricos y el academicismo, creando
con esta liberación del pasado “un arte nuevo”. La particularidad que le dio gran popularidad en
países como Inglaterra, parís, Bélgica, Austria, España, etc. Fue la de un movimiento integral y
abarcativo que podía prosperar mediante la colaboración entre las distintas artes, dada por la misma
entre los artistas y artesanos.

El problema está en que, dada la tensión del cambio de siglo, y con ello una época en donde todo
tenía que ser “nuevo” (por más que tuvo la capacidad de impregnar todos los ámbitos y costumbres
de la época) no tuvo la capacidad de ir cambiando con los avances que se iban dando como la
producción en serie propiciada por la máquina luego de la revolución industrial, tampoco en lo que
intentaba ser respecto de una sociedad en masa (termino por ser accesible y exclusivo solo a la clase
alta. “De artistas” para grupos seleccionados).

En Inglaterra declino rápidamente principalmente por el movimiento “Artes y Oficios” el cual tenía
preferencias de un lenguaje más sobrio, con directrices constructivas tradicionales y simples
principios constructivos.

En Francia y Bélgica tuvo buena recepción, hasta que los artistas promovedores del Art Nouveau
fallecían o abandonaban ellos mismos sus intenciones, para posteriormente volver a instaurarse en la
comunidad el sentido de la tradición, especialmente el estilo Luis XVI (también observable en
Alemania)

La comunidad Austriaca abandono con tanta prontitud el estilo, dado por el traspaso de interés hacia
un nuevo arte fundado por una nueva generación a partir de la experiencia y observación de los
logros y fracasos de las anteriores; un lenguaje orgánico, de formas simbólicas dada por la “Línea
látigo” fue sustituido por uno de figuras geométricas e ideales estilísticos totalmente diferentes que
concordaban más con las nuevas corrientes que destacaban la armonía entre forma y material y
avecinaba al Movimiento Moderno.

Los artistas del Art Nouveau crearon nuevos estilos, con nuevos materiales fundiéndolos en un todo
decorativo, nuevas técnicas artesanales muy ricas y refinadas, un trasfondo de relación más íntima
con lo que le rodeaba impregnando e integrando cada punto de vista que atendía, que termino por
cansar de “disfraces y embellecimientos” y ser desaprobada por los jóvenes arquitectos e ingenieros,
como (paradójicamente) ellos quisieron terminar agobiados por la ornamentación de los estilos
clásicos.

En cuanto a la arquitectura, aportes inmensamente significativos fueron: la integración de una

decoración bien planteada en los espacios, todo el desarrollo de una gama de colores nuevos y
refinados de luz y armonía que supero a las tinieblas; la importancia de los valores plásticos y
estilísticos quedo marcada y reflejada posteriormente en la arquitectura moderna, tomando todos
los niveles del diseño, así como la ambientación y continuidad espacial dada por el concepto de
planta libre y el énfasis dado en el aporte estructural.

Quizás el momento en que se dio este movimiento tan inmensamente rico en cuanto a trabajo,
dedicación e integración de muchos aspectos en el arte y la arquitectura, no fue el indicado para dar
pie y continuidad a todo el amplio y vastísimo desarrollo que pudo haber tenido, sin contar el alcance
mundial que se esperaba. Quizás si se podían adaptar o llegar a un acuerdo con la producción en
fábricas de por lo menos un porcentaje de los elementos que componían las obras, podía haberse
dado de otra forma. El tema está también en que fue un trabajo de artistas, y como tales, valores
únicos y especiales en cada pieza, lo cual nos hace preguntarnos si ¿se mantendría la esencia al
replicar en serie estos componentes tan peculiares? Lo que si sabemos, es que en esta época bisagra
tan importante y necesaria, se pusieron en evidencia las producciones tan ricas y finas que el hombre
era capaz de hacer, y también un giro de rosca más al pensar en la conjunción e integración de una
obra, paso necesario que sin el cual hoy, la arquitectura no sería lo que es.